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La estafa: Bernard Madoff y la crisis de EEUU en 2008 (página 3)




Enviado por Roberto Yrago



Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6

Había ingresado un joven inexperto en las reglas de las grandes empresas y ésta era una empresa nacional de capital inglés muy importante en aquel momento. Con el tiempo el nuevo empleado quería ascender a un trabajo de mayor jerarquía haciendo auditoría de proveedores, y su aspiración era integrarse a la sección Auditoría, que auditaba la integralidad de la empresa. Se presentó personalmente al gerente de auditoría, un inglés parco pero muy agradable, a quien le explicó sus funciones y aspiraciones para ingresar a su departamento. Tomó nota, y presumo que luego de averiguar sus antecedentes en el departamento de personal, fue a entrevistarse con el jefe de sección al que pertenecía el aspirante. Ya estaba en la gloria y se veía como el nuevo auditor. Se fue el inglés y lo llamó el jefe. Le dijo que el inglés había venido a pedirlo para su departamento. Contestó que se alegraba a lo que respondió que mejor no lo hiciera porque él se había negado al pase. ¿Cómo, porqué? Entonces el jefe le preguntó si conocía la ley del gallinero. Muy ingenuo por su juventud y por real desconocimiento, le contestó que no. Es muy fácil, le dijo: – El que está arriba caga al que está abajo. Y ahí se acabaron las pretensiones de ascenso. Pocos meses después se fue de la empresa, con una experiencia para toda su vida laboral futura.

  • Está conforme con su papel como subordinado. Pero cuidado, las muestras de excesiva lealtad pueden provocar desconfianza.

  • Proyecta la imagen del jefe que él desea.

  • Se comporta en forma debidamente previsible.

Otros informes advierten sobre algunos de los torturantes conflictos que derivan del hecho de comportarse como un buen subordinado con los riesgos de ultradependencia emocional provocada por el esfuerzo para lograr y conservar la aprobación de los poderosos.

El subordinado debe satisfacer a dos autoridades. Una es la ¨Empresa-Madre¨y la otra es la de ¨Jefe-Padre¨, que no siempre esperan lo mismo de él. El jefe tiene ciertas necesidades del subordinado, con frecuencia disociados de los de la organización. Con frecuencia desea subordinados laboriosos, impetuosos, personalmente leales, quizá incluso sumisos, que llenarán ciertos requisitos que él considera importantes para su propia carrera. Estos requisitos deben ser satisfechos si el subordinado desea triunfar. En realidad no puede, por definición, triunfar nunca porque siempre estará truncado por las necesidades del jefe y la negación de éste por dejarlo volar solo, y quizá, hasta pueda demostrar que es intelectual y socialmente superior a él, riesgo que nunca estará dispuesto a correr.

La conclusión es que, por la misma naturaleza del medio, el ejecutivo de la empresa promedio de nuestros días solo puede madurar si aprende a depender de las otras figuras dentro del triángulo empresario en forma muy parecida a como el niño aprende a depender de otros miembros dentro del triángulo familiar. Sabemos que si el niño se acostumbra a someterse o rebelarse frente a estas poderosas figuras, no es capaz de tratar con ellas en términos que favorezcan sus propios intereses o necesidades.

Para finalizar agrega: El subordinado se emancipa de este triángulo si sirve con éxito a ambas figuras de poder, conquista su buena voluntad y eventualmente encuentra el modo de servirlas según los métodos que él mismo elegirá, dominándolas por este medio en grado suficiente para extender sobre ellas su poder y autoridad.

Tercera regla: Sea adaptable:

En tanto que la lealtad sugiere dedicación, la adaptabilidad sugiere ajuste. Lo que las empresas y sus directores desean son ¨tigres¨, pero tigres dóciles, que se adapten rápidamente y que se entiendan bien con otros tigres. Desean tigres ¨que encajen¨. De ahí parte la necesidad de que los rasgos ejecutivos contemplen la existencia de conformistas creadores, lo cual es un absurdo en si mismo. El ejecutivo rebelde aunque sea promisorio, debe encajar si quiere quedarse en la empresa. O sea la adaptabilidad es sinónimo de sumisión a las pautas preestablecidas.

Nation´s Business publicó una serie sobre ¨Claves para el éxito ejecutivo¨ Se afirmaba que el hombre que progresa ¨debe adaptarse prontamente a las necesidades y exigencias de la organización y también debe convertir las características esenciales de la misma en parte integrante de su propia personalidad¨.

Cuarta regla: Sea sencillamente respetuoso:

El jefe, si lo desea puede dejar que sus pensamientos vaguen y se dilaten. El papel del subordinado consiste en limitar sus preguntas, afirmaciones y comentarios a las coyunturas que se le ofrecen. El superior goza de mayor libertad para desahogar sus preocupaciones; el subordinado solo puede expresar aquellos sentimientos que están claramente aceptados por la conducta inmediata del superior. La actitud del subordinado hacia las ideas del superior es de debido respeto y preferentemente acrítica. [43]

En la mayoría de las compañías es imposible que un hombre se eleve sobre la base de su aptitud para el trabajo. Es necesario, además, que sea valorado y seleccionado por alguien que ocupe un puesto más alto, o el máximo en la jerarquía del poder.

Para ganar tal selección la persona debe complementar su evidente talento con maniobras personales y con su participación en el juego del poder.

Estas manifestaciones son tema tabú en las empresas y prácticamente nadie quiere expresar taxativamente que esa es la realidad, sino que por el contrario se esfuerzan por negar tal situación y que las maniobras para llegar al poder es una práctica indecente y no admitida en las compañías. Se niega, en definitiva, lo evidente.

Los bandos rivales en los departamentos ejecutivos son uno de los hechos de la vida empresaria. El presidente es Papá y Papá elige a los sucesores. En casi todas las organizaciones hay una rivalidad constante para congraciarse con la cima. La segmentación, las rivalidades, las difamaciones, la falta de colaboración, las banderías, las camarillas y la formación de imperios son fenómenos típicos de las mayores organizaciones empresarias. Esto no es sorprendente porque cualquier organización constituye una organización política y los subordinados son elegidos a imagen y semejanza del superior que los elige. Lo que en un momento fue informal en un ambiente de colaboración y camaradería se transforma en formal, con pase de información acotada y enfrentamiento entre empleados competidores en trepar la pirámide.

Al ser promovido, el jefe tiende a llevar consigo a sus subordinados más útiles y leales como autodefensa, aún cuando estos subordinados no sean tan competentes como otros que deja en el camino porque los advierte como eventuales competidores, o desleales. A esto se lo llama tener un padrino de donde prenderse, y éste subordinado clave aumenta la eficiencia de su jefe y sensación de bienestar porque tiene su confianza, además de descartar que pueda usurpar su autoridad.

El consejo a dar a los ejecutivos jóvenes que inician la carrera sería: Una vez que aprendan a realizar su trabajo en la mejor forma posible pidan mayor responsabilidad en la empresa o un cargo distinto. Si no lo consiguen salgan a escape y búsquense otro lugar. Y cabría agregar que debe ser antes de haber reunido tantas ventajas económicas a largo plazo como para sentirse frenados por esos incentivos, tales como beneficios de retiro o las opciones de compra de acciones. Más aún en empresas riesgosas, donde el futuro no está asegurado – prácticamente no hay ninguna- , porque justamente los empresarios no pueden asegurarse del funcionamiento de las variables exógenas que ellos no manejan.

Presumiblemente esto proviene de la mentalidad materialista, productiva y estadística inherente a la dirección empresaria y a su pasión por demostrar que la dirección de empresas es una ciencia.

La asociación de organización empresarial con el propósito de asociarlo a la idea de orden, exactitud y control tiende a cambiar ante los nuevos paradigmas de los sistemas complejos, sujetos a curiosas dosis de desorden y caos.

La certeza ha desaparecido y la previsibilidad del futuro pretendiendo que será semejante a lo que antes había funcionado ya no tiene lugar. El futuro no depende del presente y estará sujeto a un desenvolvimiento autónomo que lo hace prácticamente imprevisible.

El sistema newtoniano determinista, donde todo es predecible ignorándose el caos fue un vano intento de doblegar la incertidumbre sencillamente desconociéndola.[44] Hoy se puede ver que las cosas ya no son buenas o malas, sino que tienen algo de lo uno y de lo otro, que la realidad puede estar matizada y que el camino a transitar exige ajustes constantes según asoman nuevas y cambiantes realidades del supuesto inicial.

Los ribetes de desorden que surgen en el mundo empresarial, y que operan como detonantes, visualizados desde la óptica del razonamiento tradicional son interpretados como disfuncionales. Ahora, observados desde la óptica de la complejidad se debe pensar en otras opciones. Es perfectamente posible que perturbaciones endógenas o exógenas alteren el funcionamiento y obliguen a cambios sobre los supuestos originales, provocando conductas que podrían ser consideradas como ¨anormales¨ cuando son ajustes a una nueva realidad.[45]

Pero la racionalidad sigue siendo hoy considerada como la suprema virtud en la gran empresa. Se cuenta con que los directivos humanos serán en todo momento absolutamente lógicos y nunca humanamente emotivos.

Se supone que toda su capacidad está concentrada en la tarea que tienen entre sus manos y se finge que los sentimientos relativos a la ejecución de esa tarea no existen o tienen vedada la intromisión.

El último e inquietante problema consiste en saber si las empresas no están engendrando una raza de conductores peligrosamente aislados de las realidades de nuestro mundo cambiante.

Este aislamiento se refleja en su visión muchas veces egocéntrica de la sociedad en que se mueven.

Muchos triunfadores se hacen grandes ilusiones acerca del porqué de sus éxitos. Algunos no comprenden que sólo fue una cuestión de suerte

Si el mercado está en alza uno puede cometer muchos errores, porque igual el mercado los cubre. Pero si la tendencia es bajista, cada paso en falso duplica su importancia.

Un psicólogo de Yale cita varios estudios que demuestran que una infancia definidamente desgraciada – provocada por sentimientos tales como el de ser dominado o rechazado por los padres o el de ser desplazados por los hermanos- es una característica común entre la gente con aspiraciones elevadas e impulsos de progreso que entre quienes no experimentan estas inquietudes. Es presumible que el ansia de ascender sea generada por un fuerte deseo de escapar de la influencia familiar. ¿Será el caso de Madoff?

Todo directivo necesita en la empresa buenos ejecutivos independientes, pero para ciertos y muchos cargos necesitan gente dependiente. En el caso de empresas que comenten ilícitos, la dependencia es reforzada por la necesidad del ocultamiento de las actividades y la conciencia de los castigos que puedan provenir de la complicidad en actos ilícitos. Están amoralmente comprometidos.

William Wood Prince, presidente de Armour & Co. dijo cuando ejercía ese cargo: ¨los negocios no significan carne, latón o coca cola, significan dólares. Las pautas de los negocios son las mismas, ya se trate de petróleo, acero o carne.[46]

El ejecutivo (o director) hábil en el manejo de la gente también tiene probabilidades de captar las necesidades psicológicas de sus subordinados, colaboradores y superiores, y de satisfacer o seguir la corriente de estas necesidades –quizás por medio de la manipulación personal- para acomodarlas a sus propios intereses.

Mantiene desorientados a los rivales, inseguros a los subordinados y desprevenidos a los superiores /competidores, que aspira a desplazar. Es demasiado inteligente para permitir que su conducta sea influida por sentimientos de rechazo a la autoridad.

Este manipulador tampoco siente remordimientos cuando se trata de eliminar a un compañero de equipo/competidor.

La pauta era ¨ Sean despiadados si es necesario ¨.

Se intenta minimizar la emoción en la toma de decisiones.

La emoción, esa experiencia de sensaciones como el miedo, la sorpresa, la alegría influye y activa a la conducta.

Las emociones son la manera mediante la cual los estados motivacionales forman el sistema de respuestas apropiadas para preservar el estado actual.

Son las emociones las que alertan a los sistemas de respuestas corporales y mentales, siendo el cuerpo el que encuentra el camino, los medios, para gratificar el motivo y facilitar la adaptación del individuo en su contexto. Afectan los procesos cognoscitivos y las reacciones del comportamiento.

El individuo intenta atenuar el estado desagradable de tensión y recobrar un estado de equilibrio.

La estimulación es desatada por pulsiones diversas. La pulsión que encarna al poder es generada por la necesidad de obtener reconocimiento, influir o controlar. La pulsión de afiliación responde al instinto gregario del hombre y se define por el espíritu de cuerpo, la sensación de formar parte de un grupo empático.

Las necesidades condicionan al comportamiento humano, desatando conductas que pretenden disminuir la tensión en busca de volver a obtener el equilibrio, reducir el stress, librarse de la incomodidad.

Esas necesidades pueden ser fisiológicas, de seguridad, sociales, de estima de autorrealización, porque el individuo necesita amor, comprensión, afecto, participación para adaptarse a la sociedad.

La estima estará ligada con la autoevaluación y autoestima de los individuos, que le produzcan sentimientos de confianza en sí mismos, reputación, reconocimiento, prestigio, status y su ausencia provoca sentimiento de inferioridad, frustración, debilidad y desamparo.

Todos estos elementos, unidos a las condiciones externas de la cultura social, dan lugar a comportamientos, que se vuelcan en la empresa.[47]

En un cuestionario para ejecutivos, una consultora incluía una pregunta de si estarían dispuestos a dejar cesante a un amigo si su trabajo no era satisfactorio. A la par, un hombre de negocios sugería que la principal diferencia entre un buen hombre de primera y un buen hombre de segunda, reside en el ¨pulso para amputar¨

Despedir a ese hombre viejo, simpático y bondadoso, con una esposa que todos aprecian y niños pequeños en la escuela es despedido severamente, sin rodeos, para luego ir a su casa y dormir como un lirón sin volver a pensar en el tema, es la despersonalización que se espera del ejecutivo/empresario exitoso.

La consiga es no enredarse emocionalmente con las personas colocadas en su área de influencia y tratar de reducir al mínimo las amistades sinceras del trabajo.

Una vieja anécdota del consultor de ventas James Mills, presidente de Home Facts, con sede en Connecticut consiste en su fórmula para despegarse de los conflictos de los equipos de trabajo: ¨ Algunos de mis amigos piensan esto y otros amigos piensan lo contrario. Yo estoy a favor de mis amigos ¨. Posición hipócrita si las hay pero dignas de un ejecutivo exitoso.

Hay una opinión de que las empresas que emplean a egresados de las universidades ponen excesivo énfasis en los elevados cocientes de inteligencia y en los altos promedios. En realidad, para ocupar la mayoría de los cargos directivos una persona debe ser razonablemente inteligente.

Algunas investigaciones demuestran que una capacidad mental excesiva puede perjudicar la carrera del ejecutivo exitoso o la conducción eficaz de la empresa. Si no la controla puede llegar a tener dificultades para comunicarse a través del abismo intelectual que lo separa de sus colaboradores, subordinados y accionistas.

También conviene que el directivo tenga una mente ordenada para ser capaz de crear el orden a partir del cuasi caos y de organizar situaciones no estructuradas. Se necesita paciencia para poner en su lugar los cabos sueltos.

El empresario ambicioso también se verá favorecido si posee la habilidad del director de orquesta para lograr una integralidad armoniosa, conjugando distintas aptitudes y funciones. Su función es análoga al director técnico de fútbol, que debe amalgamar un equipo de egos, utilizándolos de acuerdo a sus fortalezas, teniendo en cuenta constantemente la integridad del equipo.

Hace falta contar con discernimiento, o sea la aplicación de varias de las aptitudes mentales tales como análisis, valoración e integración para decidir sobre un curso de acción correcto.

El empresario debe tratar de reducir sus decisiones discutibles a un mínimo razonable y de tener más aciertos que errores, lo cual debe estar apoyado en su capacidad para tomar criterio sobre una base de datos insuficientes.

Trata de aprovechar la tensión de la incertidumbre, porque lo que a otro le trae tensión para él es un estímulo.

Las empresas son también organizaciones, dando a entender que tiene determinadas variables comunes a todas ellas: el orden y el control y equipadas con un feedback que les permite la corrección de los desvíos que pueden ocurrir. Esa teoría clásica de la organización toma su origen en Isaac Newton, quien reconoció a la naturaleza como un sistema mecánico determinista. Estos principios fueron el fundamento de la idea del progreso indefinido, que dio lugar a la Edad Moderna, con un avance espectacular de las ciencias, dejando atrás el oscurantismo de la Edad Feudal. A ello se le agregan los principios del Discurso del Método de Descartes y de esa gran conjunción de nuevas ideas, basadas en el raciocinio se instigó al desarrollo.

El avance de las ciencias provocó el nacimiento de nuevos paradigmas, basados en una mentalidad dialógica, donde conviven en forma simultánea el orden y el desorden. La lógica empresaria siguió esos parámetros y de esa forma concibió al mundo y la sociedad que lo puebla.

Reconociendo la incapacidad de abordar todos los aspectos que interactúan y, a la vez se realimentan, impidiendo determinar la influencia puntual de cada uno aisladamente, sólo demandarán atención los que se consideren muy influyentes. No hay manera de neutralizar el avance de esta nueva manera de concepción del mundo y al lado de esa flaqueza se suma el avance inexorable de nuevas tecnologías que van arrasando los cimientos sólidos que sostenían a la humanidad. La familia, la iglesia, el sistema educativo, los partidos políticos, la justicia hoy no tienen el mismo significado que antaño las connotaba debido, parcialmente, a que la globalización de la economía ha venido en forma lenta pero sin pausas a homogeneizar la cultura, violentando las raíces de la identidad.[48]

La planeación del futuro está siendo menoscabada con argumentos sólidos y las empresas deberán ajustarse a este nuevo paradigma.

Las técnicas de previsión siguen dos procesos intelectuales posibles: la preferencia y la prospectiva. En un enfoque de preferencia se da por sentado que el futuro es la continuación del presente, que a su vez es prolongación del pasado, entendiéndose los acontecimientos como una cadena continua.

La prospectiva del futuro no es necesariamente la prolongación del pasado y le concede sentido al devenir aceptando la existencia de discontinuidades.

No se pretende sostener que se prescinda totalmente de la planeación, pero debe concebirse desde una perspectiva distinta a la sabiduría clásica. Será imposible hablar del futuro con la certeza que antes se presuponía, porque lo que está por venir probablemente no funcione del mismo modo. La incorporación del concepto de inestabilidad da nuevas formas y la planeación mecánica basada en experiencias pierde su sentido. El futuro tendrá un desenvolvimiento autónomo, excluidos las visiones del presente y del pasado, que por definición lo hacen imprevisible.

Las personas psicológicamente duras pueden sentirse tensas y ansiosas cuando corre riesgos o están sometidas a tensión, pero esta tensión aumenta su actividad. Si las tendencias belicosas y destructivas se convierten en una parte importante de la respuesta a la tensión, entonces la tensión es del tipo malsano.

Las palabras se convierten en herramientas de primordial importancia y su léxico debe ser vasto y preciso. En ello trasciende la necesidad de convencer a través de una oratoria brillante que logre convencer al interlocutor y así lograr una nueva víctima.

En cambio, la creatividad no es una característica común. Tal es así que en el caso Madoff, éste acudió al sistema piramidal, harto conocido desde muchos años atrás.

La imaginación no es creadora sino suspicaz, orientada al convencimiento por la oratoria y por el halo de seguridad y éxito que se ha logrado elaborar para si y trasmitido a los demandantes, potenciales clientes y futuras víctimas.

Es necesario que tengan una dosis de objetividad importante, desprendiéndose de sus sentimientos personales durante la crisis, con algo de esa impasibilidad emotiva de los cirujanos. En el caso de los estafadores se dejarán influir en mínima proporción por sus preferencias o antipatías personales y en mayor grado por lo que les conviene a ellos mismos y a la satisfacción de sus egos.

La capacidad para conquistar confianza la obtiene cuando trasmite que parece saber hacia donde se dirige y puede lograr que otros quieran acompañarlo, desconociendo que su objetivo es egoísta.

Debe estar dispuesto a cerrar fábricas, bancos, sociedades de Bolsa, adoptar medidas que perjudiquen a mucha gente y sancionar a sus relaciones personales incluyendo a sus –supuestos- amigos íntimos. Debe estar convencido de que sus acciones están orientadas a su salvación personal, que cree merecer, en desmedro de sus semejantes. A Hitler, ejemplo de genocida por antonomasia fue un líder a quien no le preocupaba la muerte de sus soldados aún conociendo la derrota inexorable que se acercaba. Por el contrario, en sus últimos días despreció a su pueblo del mismo modo que lo hizo con sus enemigos reales o imaginarios.

En esencia, el arte de conducir consiste en lograr que otros quieran hacer algo que uno está convencido que debe ser hecho. Los tres aspectos de relevancia son: El conductor debe experimentar un entusiasmo contagioso por el proyecto; debe tener la integridad necesaria para ser una fuente de fortaleza en las peores circunstancias futuras y debe tener una visión del futuro digna de confianza.

El tipo puro de hombre de negocios actualmente en el poder esta predispuesto a dominar. Sus sentimientos naturales de autoridad hacen que les resulte fácil pedir a la gente que se someta a sus deseos, y jamás se le ocurre que sus órdenes y las órdenes disfrazadas de sugestiones no serán obedecidas acríticamente.

En su estudio sobre la ¨mentalidad ejecutiva¨ [49]el Instituto llegó a la conclusión de que el ejecutivo nato se ve a sí mismo en primer término como el ¨padre-caudillo¨ que representa los intereses de su ¨familia¨. Su propia fuerza es lo que más cuenta además de exigir una lealtad absoluta y el derecho a tener la última palabra.

Les atraen los símbolos empresarios (desde la limousine hasta el despacho donde cumple sus funciones), que proclaman al mundo lo que ellos son, o sienten que son. Y estos empresarios desean y esperan los símbolos aunque lo nieguen o den excusas exculpatorias pueriles.

Es egocéntrico y considera sagrado cualquier proyecto que encare. Titubea en apartarse de su postura de certidumbre, incluso respecto a pequeños detalles, porque esto podría hacer peligrar el concepto que tiene de si mismo como padre omnisciente.

¨Mientras luchan por llegar arriba parecen casi siempre tipos simpáticos y razonables. Pero apenas llegan a la meta comienzan a pontificar.

El Dr. Francis Bradshaw, psicólogo dedujo la regla empírica de que cuanto más mullida es la alfombra, menor es la humildad¨.

Cuanto más ascienden en el mundo de los negocios más protegidos están contra cualquier influencia que pueda turbar su egocentrismo.

Se aíslan de todo contacto brusco con el exterior. Estos hombres que están en la cima o próximos a ella pasan la mayor parte de sus horas de actividad ya sea en la oficina, donde están fuertemente protegidos por secretarias y ayudantes o en sus clubes muy selectos, en presencia de personas que

comparten su visión del mundo, o que por definición les deben respeto, o que podrían arruinar sus propias carreras en desarrollo, si se opusieran al jefe máximo o discutieran con él.

Esta situación mental los impulsa a suponer que las otras personas deben aceptar y compartir sus ideas y convicciones en cualquier terreno.

Tienden a ser por lo menos ligeramente enemigos de lo intelectual y la creatividad, -aunque se consideran a sí mismos creadores-, porque en su mente presupone prejuiciosamente que la gente con objetivos intelectuales tiende a ser enemiga de los negocios.

La pregunta sería porqué habiendo oportunidades suficientes, hay hombres adultos que se someten voluntariamente a las humillaciones, riesgos y sacrificios que son las experiencias comunes en las pirámides.

Hay varias explicaciones. Para algunos de los trepadores el sólo júbilo de llegar a la cúspide es incentivo suficiente para la ascensión.

Otros buscan el placer que produce empuñar las riendas y el tener la sensación de autoridad y el poder para imponer esa autoridad sobre otros.

Y algunos otros trepan porque tratan de huir del hostigamiento y las humillaciones que se sufren en los peldaños inferiores de la pirámide.

Pero para la mayoría de los aspirantes ninguna de estas motivaciones es tan poderosa como la posibilidad de obtener ventajas económicas.[50]

Para un ejecutivo con sangre en las venas, la frase de ¨un salto a la cúspide¨ significa en primer término una oportunidad de cobrar el cheque más suculento de la empresa. El dinero es la medida del éxito.

En la mayoría de las empresas la mayor remuneración corresponde al presidente ejecutivo. El más interesante de los incentivos es un cheque de ,como mínimo siete cifras y para los grandes jugadores el umbral parte de las ocho cifras.

Los símbolos de prestigio son variables, pero a los competidores afortunados les caben las oficinas exteriores con media docena de ventanas, sillones giratorios, con soporte para la cabeza, obviamente de cuero, cuadros originales de firma y piezas de escritorio con su nombre grabado en oro.

Los pisos con alfombras de pared a pared, la toilette privada con detalles chic en los artefactos de baño donde el mármol en paredes pisos y lavamanos es usual, con toallas bordadas.

El hospedaje en sus viajes es en exclusivos hoteles cinco estrellas y en las mejores suites. Cuando se ha alcanzado la cúspide, el medio de transporte es en aviones privados y si es en aviones de línea los espera la first class.

Los beneficios adicionales se traducen en el uso de country clubs, clubs de golf, cabañas exquisitamente decoradas, uso de yates propios o de la empresa y las comidas en restaurantes de cinco tenedores, en especial los que gozan de la moda del momento, donde se pueda mostrar que ¨han llegado¨.

Esta ostentación forma parte de la estrategia de engaño a los eventuales inversores, que asimilan todas esas expresiones de prestigio y les hacen pensar en la seguridad y solvencia que exhala el financista como para confiarle sus activos.

Toda esta muestra de lujo y sofisticación ejerce una seducción irresistible a los funcionarios de la empresa, a los inversores de alto nivel sean éstos fondos de inversión, ejecutivos de banco que redirigen inversiones de pequeños y medianos ahorristas y particulares pertenecientes a la misma élite del supuesto gran empresario.

Muchas veces en las estructuras de estas empresas, en nuestro caso compañías de inversión los dueños son autócratas de alma. Para ellos la empresa es su coto particular, su cargo es una extensión de su magnífica personalidad y sus subordinados son piezas prescindibles, excepto en los casos en que se gestan fraudes y donde se hace necesaria la participación de cómplices, que comparten los mecanismos del fraude y son sus ejecutores. Ninguno de ellos es inocente y todos mienten para poder mantener el status quo.

Muchos otros funcionarios, que no están implicados en el fraude que está desarrollándose tienen sospechas, observan indicios de que algo fuera de lo normal está en funcionamiento, pero cierran los ojos en función de su propio beneficio y en la esperanza de que si en algún momento se destapa la estafa no queden implicados.

Generalmente adormecen sus conciencias cuando reciben incentivos adicionales, que refuerza su decisión de silencio para conservar un puesto privilegiado. La cooperación sin reservas es de los cómplices; ya están metidos y soportan la presión y la angustia constante sabiendo de su delictivo proceder, pero ya están tan metidos en el juego que continúan rogando íntimamente que nunca llegue el día de la caída, porque les quedó dolorosamente claro que no podían sustraerse a las maniobras sin pagar el precio correspondiente.

En cierta oportunidad alguien criticó a un eminente hombre de ciencia británico, el difunto Lord Rutherford porque ganaba menos dinero por año que muchos oscuros directivos de empresa fracasados. Y cuentan que aquel respondió con ingenio: ¨Si, y es justo que sea así; fíjese en el trabajo desagradable que realizan¨. Interesante reflexión.

Un ejecutivo de publicidad, que fue hombre de empresa comentó con satisfacción en Advertising Age: ¨Cuando uno se incorpora a la forma de vida empresaria, se da por sobreentendido que vivirá a la altura de sus ingresos y frecuentará los círculos adecuados a su categoría¨. No es inusual que ese cambio de vida en constante movimiento hacia arriba y con las miras en la empresa dejando en segundo plano el sexo, las mujeres y el hogar. No es raro que comiencen a tener relaciones con prostitutas de lujo con las cuales no hay empatía alguna sino sólo sexo sin amor.

El desplazamiento hacia arriba de la pirámide llevará al empresario, tanto que le guste como que no, a dejar atrás viejas casas, viejos barrios y viejos amigos. Estos desplazamientos refuerzan el desarraigo y les instala la sensación de que sus vidas como miembros de una comunidad carecen de profundidad. En los nuevos lugares donde se agrega pero no se integra y esos clubes, restaurantes, sitios vip y exclusivos no son más que una extensión del territorio de la empresa y cotos de caza.

Dun´s Review informó: ¨Los estudios han demostrado que la ansiedad, la preocupación y la melancolía son mucho más usuales entre los hombres de negocios de alto nivel que entre el público en general¨

El psiquiatra William B. Terhune afirma: ¨Los empresarios están expuestos a los mismos desórdenes psiquiátricos que afectan a las demás personas, pero es un hecho que sufren menos crisis nerviosas de gravedad. Saben que si aflojan están liquidados. Reprimen sus emociones hasta que su vida emocional se convierte en un desierto árido, y la existencia pierde su significado y su valor (…) conservan sus puestos a pesar de su deterioro emocional, hasta que algunos de ellos se desbarrancan en una postración nerviosa que a menudo es catastrófica¨ [51]

La tensión derivada de mantener la fachada ejecutiva o empresaria, esa máscara serena, cordial y flexible cuando la situación se pone turbulenta implica disimular las emociones incluyendo la irritación y parecer imperturbables puede acumularse hasta un alto potencial y al borde del agotamiento emocional, y por consecuencia hallará una vía de escape.

Los trastornos mentales generalmente toman la forma de indecisiones, aprensiones, ansiedad, preocupación crónica que deriva en insomnio, disgusto por la responsabilidad, como mecanismo de evasión obsesión por los detalles y aún más graves como manías y alucinaciones incluyendo una insistencia en la infalibilidad y la negativa de que exista problema alguno. Esto puede desembocar en trastornos de la personalidad y de conducta como rigidez o cambios radicales a su estado habitual.

De todo lo expuesto, creemos poder sacar algunas conclusiones.

Creemos válido deducir que los estafadores forman parte de una cadena, que iniciándose en ellos, con su aberrante psicología egocéntrica y narcisista usan a sus empresas como el medio para lograr su objetivo final: dinero y poder. Le siguen los vehículos, formados por sus propias empresas y adicionan a ella a bancos, financieras, fondos de inversión, sociedades de Bolsa y evaluadores de riesgo, quienes por acción y en otros casos por omisión apoyan su estrategia de desfalco. Cuentan con su prestigio formado capa sobre capa para burlar a los controles estatales, que por ignorancia, ineficiencia, ineptitud o deslumbramiento ante tal muestra de poder dejan de ver lo que de ellos se esperaba. Y por último se encuentran las víctimas, que pueden ser las mismas instituciones financieras vehículo mencionadas precedentemente, que obnubiladas por el rendimiento de sus comisiones cierran los ojos, porque sus directivos y ejecutivos están pendientes de sus bonus anuales y cuanto más cuantiosos mejor, ignorando para su propio beneficio el perjuicio que sobrevendrá a sus propios clientes, en una muestra de deslealtad típica, rasgo de lo que fue etiquetado como capitalismo salvaje.

Por otro lado hemos señalado superficialmente el mecanismo de las mafias, organizaciones que se manejan en la clandestinidad y a través de negocios ilegales, y que persiguen un fin idéntico: ganar dinero.

¿Qué las hace diferentes a estos otros hombres o personas jurídicas, con nombres prestigiosos y que operan en una supuesta e inmaculada legalidad?

Nos preguntamos: ¿Creemos que entre todos estos inescrupulosos mercaderes del dinero pueda existir algún sentimiento de responsabilidad por el daño causado con el error cometido? Me parece que no. Para ellos solo se trata de un negocio que les salió mal, y seguirán adelante buscando recuperar la pérdida con otros que le salgan mejor. Pero dudo que ninguno de estos traficantes haya perdido el sueño por más de una noche.

A pesar de lo lapidario de su juicio y los esfuerzos que uno haga para encontrar una explicación más satisfactoria, debemos resignarnos a aceptar esa razón.

El esquema Ponzi y otras estafas

  • a. El esquema piramidal

Hemos repetido en numerosas oportunidades que Madoff utilizó el esquema Ponzi, también conocido como sistema o timo piramidal, pero nunca aclaramos el significado de esta artimaña.

Este esquema no es más que una operación fraudulenta de inversión, que bajo la promesa de exagerados rendimientos seduce a los inversores.

No es precisamente lo que hizo Madoff, porque así como utilizó el susodicho esquema su promesa de rendimientos era de solo par de puntos – que no es poco pero que tampoco ofrece demasiadas sospechas- sobre lo que podía obtenerse en el mercado financiero, con el agregado fundamental de que aseguraba que tal rendimiento iba a ser constante.

Este procedimiento es tan sencillo como asombroso y consiste en pagar las utilidades de los primeros inversionistas con el dinero que ingresaba por nuevos inversionistas. Los nuevos pagan a los antiguos.

Puede deducirse fácilmente que el sistema se mantiene siempre y cuando sigan ingresando nuevos inversores porque ampliándose la base de aportantes se hacía posible el pago a los más antiguos. Si decae el ingreso de nuevos inversores, o por cualquier circunstancia hay un retiro de fondos mayor a lo usual el esquema se cae como un castillo de naipes.

En todos los casos a relatarse se hace obvia la inacción del Estado hasta que los hechos sucedieron, es decir demasiado tarde.

La falla de los Organismos de Control y la connivencia en muchos casos de los auditores, o al menos sospechados de complicidad debido a que los indicios de anormalidad en los estados contables eran evidentes.

Pudo burlar durante años, más de veinte, a la vigilancia de la Comisión de Valores de Estados Unidos ( SEC por sus siglas en inglés), que se encarga, precisamente, de proteger a los inversionistas y mantener la integridad de los mercados de valores.

Después del escándalo de Enron en 2001, que sacudió al mundo y creó dudas acerca de los principios de contabilidad de las compañías en la Bolsa, el Congreso de los EEUU aprobó la ley Sarbanes-Oxley de 2002.

Esta ley creó nuevas normas a ser tenidas en cuenta por las empresas que operan en Bolsa y las empresas de auditoría, que preveían la confección de informes financieros específicos con una periodicidad determinada.

La ley contemplaba una parte sancionatoria con cargos civiles y penales para los infractores, con la imposición de multas significativas y penas de prisión para las personas involucradas.

Esta ley tenía aplicación sobre las empresas públicas, pero la SEC eliminó el requisito para las compañías privadas, lo que permitió precisamente que Madoff evitara o eludiera el registro de sus operaciones ante el Consejo, con las consecuencias conocidas. Las inspecciones que tuvo fueron laxas y superficiales, lo cual permite sospechar o presumir una eventual connivencia de los auditores.

Luego de desatado el escándalo por el fraude de Madoff, y a partir de enero de 2009 se requirió que las auditorías de compañías privadas estuvieran registradas ante la SEC y que las operaciones fueran registradas en relación con las normas éticas y profesionales fijadas por ellos.

La ley Sabarnes-Oxley fue objeto de críticas y elogios por parte de los analistas, pero queda claro que la misma tiene por objeto proporcionar certidumbre a los mercados financieros y proteger a los inversores, sin desmedro de ajustes con nuevas regulaciones, que perfeccionen su uso y proporcionen mayor confianza.

En el Primer Seminario Internacional de Fraudes Económicos, realizado en 2008, celebrado en La Paz, Bolivia, fue conmemorativo del primer centenario del primer caso ocurrido en EEUU, al cual nos referiremos como el caso William Miller. Los expertos reunidos no fueron capaces de vaticinar el mega-fraude de Madoff pero todos coincidieron en que la estafa piramidal es el ¨virus financiero más pernicioso de la época contemporánea¨.

A la luz de los casos que veremos y nuestra opinión particular, creemos que se equivocan, puesto que, como relataremos más adelante en forma extensa y exhaustiva, la crisis de las hipotecas sub prime y la popularización de los derivados financieros en Wall Street dieron lugar a la estafa más colosal de alcance mundial, que podemos imaginar o recordar.

Es correcto que los vacíos legales, la incultura bancaria y la codicia de los inversores; conclusión a la que arribaron los participantes en el Seminario en La Paz, es parte de la trama, pero no alcanza para explicar tales sucesos.

Otra de las conclusiones, a nuestro criterio erróneas, es el aumento de las penas por estafa, si con ello consideran una herramienta disuasoria, lo cual está harto probado en los delitos penados con la muerte.

Pero los ardides para cometer delitos financieros, obviamente no se agotan en el esquema piramidal, sino que éste es sólo una de las artimañas usadas, con mucho éxito como veremos seguidamente.

Delitos financieros

Las nuevas tecnologías, son una fuente de bienestar en muchas de las tareas de la vida cotidiana, ya que nos permiten resolver situaciones de todo tipo a diario, pero, sin duda alguna, también muchas veces se ha convertido en una herramienta útil para cualquier disciplina, habilidad, trabajo e incluso hasta el fraude, y muchísimo más específicamente, en el área del fraude financiero.

El delito financiero se comete en un entorno profesional o comercial con el objetivo de ganar dinero a través de actividades ilícitas. Estos delitos no son violentos, pero ocasionan pérdidas a compañías, inversores y empleados. Estos delitos incluyen fraude, hurto y otras violaciones de la ley.

Los delitos financieros, incluyendo cheques y depósitos fraudulentos son uno de los más grandes retos que encaran hoy en día las instituciones de negocios y financieras. Los delincuentes financieros profesionales han venido incrementando su habilidad y sofisticación, gracias a los avances en la tecnología disponible, tales como las computadoras personales y otros equipamientos.

Se ha estimado que las pérdidas anuales debido a depósitos y cheques fraudulentos suman miles de millones de dólares. Estos delitos afectan a los clientes bancarios al incrementarse las comisiones que tienen que pagar,  debido a que los bancos deben contratar especialistas sobre riesgos de identificación y adquirir softwares especializados para protegerse de futuras pérdidas.

Muchas falsificaciones se hacen a través  desde el escritorio copiando o duplicando un documento financiero verdadero, así como mediante una alteración química, la cual consiste en quitar parte o toda la información y manipulándola en beneficio del delincuente. Las víctimas incluyen a instituciones financieras, negocios que aceptan y expiden cheques y a los consumidores.

En la mayoría de los casos, estos delitos son perpetrados mediante la sustracción de cheques en blanco durante un robo; buscando cheques cancelados o usados en la basura, sustracción del buzón de correos o en la compañía de correos por empleados deshonestos que manipulan la correspondencia, así como otros métodos de alta y baja complejidad para adquirir información de la cuenta bancaria.

Los siguientes son algunos de los tipos comunes de delitos financieros cometidos típicamente contra los bancos e instituciones financieras por individuos o sociedades delictivas:

  • Kiting: Este tipo de fraude con cheques utiliza una combinación del tiempo entre el depósito de un cheque y su presentación para su pago por el banco contando con la buena voluntad del banco receptor para anticipar los fondos contra la acreditación pendiente. En muchos esquemas de kiting, varias cuentas son manipuladas cuidadosamente en diferentes bancos para hacer parecer que el comportamiento de la cuenta es predecible y de bajo riesgo, por lo que tienta al Banco a anticipar los retiros contra fondos aún no acreditados.

  • Falsificación: Para un negocio, la falsificación típica tiene lugar cuando un dependiente expide un cheque sin la adecuada autorización y falsifica la firma del autorizado. Otro método es el robo de un cheque listo para su entrega a quien corresponda, lo endosan y lo dan en pago en una compra local o cobrándolo en el Banco, exhibiendo una identificación personal falsa. La falsificación puede hacerse a través de la fabricación completa de un cheque utilizando una computadora personal, scanner, software ad hoc y una impresora láser de alta resolución.

  • Alteración: La alteración principalmente se refiere a la utilización de químicos y solventes o modificando la escritura de la información del cheque. Cuando esto se realiza en lugares específicos del cheque tales como el nombre del beneficiario o la cantidad se denomina alteración de lugar; en cambio cuando se intenta borrar la información de la totalidad del cheque, se lo denomina lavado del cheque.

  • Robo de chequesUna manera de atacar la cuenta de cheques de personas, empresas o instituciones es el robo u otra manera de apropiación ilícita, que pueden tener como destino la falsificación. Si no son detectados al momento de su cobro el fraude recién será descubierto cuando el cuenta-habiente lo advierta al revisar su estado de cuenta al cierre del mes.

  • Colgado de Papeles: Este problema principalmente tiene que ver con las personas que intencionalmente emiten cheques contra cuentas que ya están cerradas (propias o de otros).

  • Fraudes con Cuentas Nuevas: Las cuentas de cheques son abiertas de manera relativamente fácil con documentos falsificados. Los requisitos en general son mínimos. Teniendo en cuenta el costo de investigar exhaustivamente los antecedentes por el Banco o la confiabilidad de los cheques por quien los recibe, contribuye a facilitar que se lleven a cabo las fraudes con cuentas nuevas. Una vez que una nueva cuenta es abierta y se establece un bajo perfil de riesgo de esta actividad, el delincuente defraudador puede llevar a cabo una amplia variedad de diferentes esquemas de fraude

 En la historia contemporánea encontramos ejemplos de grupos o personas que actúan bajo el manto de la delincuencia organizada Esos grupos del crimen organizado, que funcionan bajo una estructura jerárquica asociados para obtener beneficios económicos, o de cualquier otra índole, ejecutan actividades ilícitas de alta variedad como el tráfico de drogas, legitimación de capitales, robo, terrorismo, contrabando y tráfico de indocumentados.  Es así como la delincuencia organizada ha pasado a ser un tema de discusión por constituir un problema de carácter global, que afecta la seguridad y estabilidad de los Estados. 

Uno de los delitos más usuales que encontramos en los grupos delincuenciales
es la legitimación de capitales conocida también como lavado de
dinero, lavado de activos o blanqueo de capitales. Este es un proceso mediante
el cual una organización delictiva o un delincuente individual (poco
común), intenta esconder o disimular el origen de los fondos provenientes
de una actividad ilícita, para hacerlos aparentar que provienen de una
fuente lícita.

El dinero que se ha obtenido por actividades ilegales necesita ser incorporado al sistema bancario de manera que pueda ser movilizado eficientemente de un lugar a otro y guardado en forma segura. Una variedad sin fin de esquemas se ha desarrollado con el propósito de "estructurar" y "lavar" dinero en el proceso de convertir los fondos de "sucios" a "limpios" conjuntamente con el uso de sociedades vehículo que son las sociedades off shore formadas en paraísos fiscales para recalar finalmente en países con secreto bancario como Suiza, Lichtenstein u otros.

Consideramos ahora ya no a los individuos o asociación de individuos para cometer delitos, sino a empresas, que tienen una actividad comercial o industrial legítima, pero que quieren realizar evasión impositiva.[52]

La decisión empresaria de desviar excedentes o utilidades y reinvertirlas o atesorarlas en paraísos fiscales tiene íntima relación con el rol del Estado tanto como ente recaudador y administrador del bien público, conforme a las disposiciones constitucionales. El Estado obtiene sus ingresos en parte de la tributación a que está sujeta la sociedad en su conjunto. Esos ingresos públicos serán destinados a cumplir el rol específico del Estado, que es la administración y aplicación de los fondos públicos.

Las sociedades se encarnan como una persona jurídica al reconocerlas por ley como tales y otorgarles tanto derecho como obligaciones.

Convenimos en que la ley de Sociedades argentina prevé la identificación de la sociedad constituida en el extranjero o sociedad off shore. De hecho, éstas se regirán por las leyes del lugar de su constitución, lo que no restringe su participación en actos aislados y a estar en juicio en nuestro territorio nacional.

Dichas sociedades podrán realizar los actos de comercio comprendidos en su objeto social, establecer sucursales, asiento o cualquiera otra especie de representación de forma permanente, simplemente regularizando su situación de la siguiente manera:

-Mediante la sola presentación de la acreditación de su existencia en su país de constitución;

-Fijar un domicilio, publicar e inscribirse conforme es exigido por ley y asignar representante/s.

Se entiende por "jurisdicciones off shore" todas aquellas —entendidas en sentido amplio como Estados independientes o asociados, territorios, dominios, islas o cualesquiera otras unidades o ámbitos territoriales, independientes o no- conforme a cuya legislación todas o determinada clase o tipo de sociedades que allí se constituyan, registren o incorporen, tengan vedado o restringido en el ámbito de aplicación de dicha legislación el desarrollo de todas sus actividades o la principal o principales de ellas en dicho territorio. Asimismo —y a idénticos fines se extiende similar definición a las "sociedades off shore".

El motivo de las reglamentaciones, ateniéndose a la certeza de la existencia de un número significativo de sociedades constituidas en el extranjero que se incorporaban al tráfico mercantil local es por ser meros instrumentos para ocultar o disimular actuaciones, bienes o patrimonios de modo tal de no relacionar a sus verdaderos dueños o beneficiarios con éstas; con objeto de fraude o elusión fiscal o insolventación en casos de concursos preventivos seguidas o no de quiebras, y para evitar eventuales perjuicios de terceros. De modo que si le son vedadas su capacidad y legitimación; éstas quedan restringidas a una actuación mercantil dentro de su objeto social con alcances exclusivamente extraterritoriales.

Hay distintas creaciones acorde con el objeto a considerar:

-Sociedad Holding: Existe una distinción entre aquellas sociedades cuyo objeto es el cobro comercial y el encaminamiento de dividendos y aquellas destinadas a la tenencia de propiedades privadas.

-Sociedad holding comercial: Determinadas jurisdicciones como Dinamarca, Holanda, Reino Unido y Hungría, entre otras, debido a su red de convenios de doble imposición pueden actuar como instrumento para recibir dividendos sin impuesto de retención o con uno muy bajo, y posteriormente distribuirlos en su propia matriz off-shore sin que se apliquen nuevos impuestos de ningún tipo en dicho país.

-Sociedades personales holding: Cualquier individuo puede utilizar una sociedad off-shore para custodiar sus activos, sean éstos acciones,  cuentas bancarias, cartera de inversiones o bienes inmuebles que pueden estar localizados en uno o más países. De esta forma se simplifica la administración de los activos quedando centralizados en una jurisdicción benévola, garantizándose además la confidencialidad y privacidad.

La herencia: La planificación de la herencia de los activos también resulta más eficaz, ya que ahora son las acciones de la sociedad off-shore las que constituyen los activos del patrimonio. Como los activos están agrupados, se evita que se produzcan retrasos en la administración así como el coste de las tasas legales y los derechos de sucesión en los países en los que están localizados los activos. Por el contrario, la testamentaría únicamente debe realizarse en la jurisdicción off-shore en la que se encuentran localizadas las acciones. Incluso esta complicación puede evitarse si las acciones de la sociedad off-shore son propiedad de una sociedad fiduciaria off-shore."

Reconociendo la existencia de los así denominados centros financieros extraterritoriales o centros off-shore es que comenzamos a entrever el enmarañado tejido de las finanzas internacionales y su existencia y proliferación donde los movimientos de flujo de capitales han formado un marco paralelo a las operaciones económicas y en donde no es posible la aplicación de regulación territorial sin considerar las reglamentaciones, sugerencias, recomendaciones, adscripciones a la multiplicidad de posturas del derecho internacional privado respecto de este tema.

El poseedor de fondos es un sujeto en la búsqueda permanente de opciones a fin de no ver disminuidos sus ingresos y obtener seguridad para los mismos. Estos centros financieros extraterritoriales, nacidos, amparados y protegidos bajo el manto de la globalización de los mercados y de la desregulación de los flujos financieros internacionales, constituyen hoy por hoy parte innegable y hasta a veces ineludible del entramado de las finanzas internacionales y forman la repudiable alternativa a la legalidad del desarrollo económico de los Estados; convirtiéndose en detractores de las economías nacionales.

La evolución del desarrollo de estos centros off-shore ha ido acompañando al desarrollo e implementación de las tecnologías de comunicación que favorecen la transmisión de datos en forma simultánea.

Han tenido un auge espectacular gracias a la intervención de los Estados en los mercados de cambio. Debido a esa condición los empresarios están cuasi obligados a intervenir en el mercado financiero a fin de defender su ganancia de las fluctuaciones de la moneda internacional respecto de la suya propia; pero no obstante ello, dando el pie al desarrollo de una especulación exacerbada.

Es necesario destacar que sin lugar a dudas los paraísos fiscales no nacieron de la nada, ni se mantienen por si mismos, claramente podríamos especular con que si realmente son pequeños territorios que asumen un rol determinado, éste rol ha sido fue y seguirá siendo creado, mantenido y avalado por aquellos cuyas capacidades de creación y ostentación de poder político y económico vieron en ellos la posibilidad de resolver el problema coyuntural de sus Estados, aprovechado la ventaja de lo novedoso del sistema y de la falta de regulación al respecto.[53]

Así, es necesario destacar que la repercusión económica global alcanzada es considerable. Los depósitos en paraísos fiscales de entidades legales como corporaciones y fideicomisos exceden de cinco billones de dólares, según estimaciones citadas por un ex ejecutivo del FMI (Vito Tanzi, en Finance and Development, March 2001), ignorándose qué parte de la rentabilidad de esa cuantía ha sido declarada a las autoridades fiscales.

El estado es el recaudador, aquel a cuya voluntad nos sujetamos los particulares, los comerciantes y/o personas jurídicas que tengan su asiento en él. Motivo por el cual se debe atener a la reglamentación de las formas que deben llevarse, de la presentación obligatoria o no de sus registros contables, a fin de que el ente recaudador pueda tener acceso a la información pertinente y necesaria para su control y fiscalización.

La evasión tributaria reprime la utilización de sistemas contables no transparentes, incluidos los documentos y/o balances que resulten un medio de engaño o falsedad que oculte o no revele la real situación económica o patrimonial del sujeto. También la norma mencionada alude al despliegue de cualquier otro ardid o engaño para lograr aquel ocultamiento de la verdadera situación patrimonial del sujeto, en tanto y en cuanto dichos procederes puedan importar un perjuicio patrimonial al fisco. Estas falsedades o anomalías de índole contable marcan el camino para llegar al dolo específico en que quedarían los sujetos que, actuando en el campo tributario, participan en el empleo de tales mecanismos.

Encontramos en la legislación del Código Penal argentino los puntos críticos a considerar como lo representan el artículo 300 inciso 3º, de los Fraudes al Comercio y la Industria, que nos habla de la responsabilidad que les cabe a quienes incurren en los delitos enumerados.

"El fundador, director, administrador, liquidador o síndico de una sociedad anónima o cooperativa o de otra persona colectiva, que a sabiendas publicare, certificare o autorizare un inventario, un balance, una cuenta de ganancias y pérdidas o los correspondientes informes, actas o memorias, falsos o incompletos o informare a la asamblea o reunión de socios, con falsedad o reticencia, sobre hechos importantes para apreciar la situación económica de la empresa, cualquiera que hubiere sido el propósito perseguido al verificarlo".

Este tipo de manipuleo, basado en el conocimiento de la ley y sus circunstancias, dando por sentado una fiscalización pasiva sino cómplice ha dado pie a favorecer la poca o casi nula confiabilidad que nos merecen los estados contables, puesto que el ciudadano común lo considera hecho ex profeso para aparentar legalidad por parte de los responsables.

Por lo tanto, y a la vista de la proliferación de enclaves financieros privilegiados y a la impunidad con que éstos se manejan, vemos disminuir en forma progresiva las bases contributivas de los sistemas fiscales.

A los delitos de evasión tributaria por empresas legítimas se agrega el accionar de organizaciones delictivas armadas ex profeso para encubrir los flujos de dinero obtenidos en sus variados delitos, para lo cual es necesario acudir al lavado de dinero; es decir limpiar el dinero sucio obtenido por el delito a dinero limpio para invertir en actividades legítimas.

La conjunción de sociedades off shore radicadas en paraísos fiscales dan lugar a la sospecha de ser utilizadas en el lavado de dinero.

El lavado de dinero es un delito tipificado por la ley argentina como "Encubrimiento y lavado de activos de origen delictivo¨.

El dinero proveniente de actividades delictivas como el contrabando de armas y estupefacientes, juego clandestino, fondos obtenidos por coimas, peculado o comisiones obtenidas por extorsión, el juego clandestino, vaciamiento de  empresas, todo tipo de  fraude  corporativo,  corrupción  en  la Administración Pública, entre otros orígenes son fondos a lavarse para poder reingresar en el circuito legal. Las tecnologías de información y comunicación a nivel globalizado y el aporte de instituciones financieras ad hoc de los paraísos fiscales permiten este manejo ilícito

La Convención de Viena de 1988 dio el paso inicial para el combate al lavado de dinero, y que total o parcialmente ha sido suscripta por Estados Nacionales.

Paralelamente, otro organismo, vinculado a la OCDE, el GAFI, organismo intergubernamental y multidisciplinario elaboró las cuarenta Recomendaciones, revisadas a 1996, las cuales constituyen el marco básico de lucha contra el blanqueo de capitales y han sido concebidas para una aplicación universal. Abarcan el sistema jurídico penal y policial, el sistema financiero y su reglamentación, y la cooperación internacional. Y tienen como finalidad establecer directrices para reducir la vulnerabilidad del sistema financiero al blanqueo de capitales, con una especial atención a los paraísos fiscales que son denominados "Países o Territorios No Cooperantes" (PTNC).

Enumeraremos algunas de las recomendaciones sobresalientes emitidas, a los solos fines ejemplificativos:

La Recomendación Nro.8: Las Recomendaciones (…) deberían aplicarse no solamente a los bancos, sino también a las instituciones financieras no bancarias. Aun en el caso de las instituciones financieras no bancarias que no están supervisadas en todos los países, por ejemplo, las oficinas de cambio, los gobiernos deberían asegurar que dichas instituciones estén sujetas a las mismas leyes y reglamentos contra el blanqueo de capitales que las demás instituciones financieras y que esas leyes y reglamentos se aplican eficazmente.

Recomendación 10: Las instituciones financieras no deberían mantener cuentas anónimas o con nombres manifiestamente ficticios: deberían estar obligadas (por leyes, reglamentos, acuerdos con las autoridades de supervisión o acuerdos de autorregulación entre las instituciones financieras) a identificar, sobre la base de un documento oficial o de otro documento de identificación fiable, a sus clientes ocasionales o habituales, y a registrar esa identificación cuando entablen relaciones de negocios o efectúen transacciones (en particular, la apertura de cuentas o libretas de ahorro, la realización de transacciones fiduciarias, el alquiler de cajas fuertes o la realización de transacciones de grandes cantidades de dinero en efectivo).

Con el fin de cumplir con los requisitos de identificación relativos a las personas jurídicas, las instituciones financieras, cuando sea necesario, deberían tomar las siguientes medidas (referimos brevemente a algunas de ellas):

a) Comprobar la existencia y estructura jurídicas del cliente, obteniendo del mismo o de un registro público, o de ambos, alguna prueba de su constitución como sociedad, incluida la información relativa al nombre del cliente, su forma jurídica, su dirección, los directores y las disposiciones que regulan los poderes para obligar a la entidad.

b) Comprobar que las personas que pretenden actuar en nombre del cliente están debidamente autorizadas, e identificar a dichas personas.

Recomendación 12: Se refiere a la conservación de archivos e identificación de los clientes por las operaciones realizadas Esos documentos deberían permitir reconstruir las diferentes transacciones con el fin de proporcionar, si fuera necesario, las pruebas en caso de procesos por conductas delictivas.

Recomendación 14: Las instituciones financieras deberían prestar especial atención a todas las operaciones complejas, a las inusualmente grandes, y a todas las modalidades no habituales de transacciones, que no tengan una causa económica o lícita aparente.

En Argentina se ha creado la "Unidad de Información Financiera" (UIF), la que funciona con autarquía funcional en jurisdicción del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, y a la que le debemos el dictado de normativa antilavado. Es notorio el fracaso de su accionar puesto que presuntamente estuvo infiltrada por intereses políticos, que han ocultado, ignorado o desviado denuncias sobre los ¨amigos y/o socios del poder¨ y hoy es objeto de investigación por los fiscales actuantes, por ejemplo en el caso de Fariña, Elaskar, Rossi, Pérez Gadín, todos ellos vinculados directa o indirectamente a Lázaro y Martín Báez, antiguo socio y amigo del ex presidente Kirchner, vínculo que dejó al descubierto la investigación de Periodismo para Todos de Jorge Lanata. Esta magnífica investigación ha sido puesta d disposición de la Justicia, aunque el Juez actuante Dr Casanello, la lleva a paso de tortuga, presumiendo que los motivos son los intereses afectados, que obviamente incluyen a la familia Kirchner y Báez. Cabe agregar que en estos días Lázaro Báez se encuentra procesado y detenido, junto a su contador Pérez Gadín y su abogado Chueco, siguiendo la investigación sin posibilidades de retorno, por lo cual puede esperarse que llegue hasta la familia presidencial de Cristina Fernández de Kirchner y su hijo Máximo.

A tal grado ha llegado el intento de obstrucción al conocimiento de estos hechos que el fiscal Campagnoli fue casi destituido de su cargo por ¨investigar demasiado y demasiado rápido¨ sobre la ruta del dinero K.

La investigación de Periodismo para Todos también es usada por los ¨fondos buitres¨ de EEUU, en su intento de descubrir fondos con origen corrupto y pedir al Juez Griesa interviniente en la causa, que los decomise para ellos poder cobrar parte de sus acreencias.

Es para destacar que el informe periodístico está nominado al premio internacional de periodismo en EEUU.

Siguiendo con la UIF mostramos seguidamente alguna de sus facultades para lo cual nos remitimos al texto de la ley 25.246, artículo 14 que dice que la Unidad de Información Financiera estará facultada para:

1. Solicitar informes, documentos, antecedentes y todo otro elemento que estime útil para el cumplimiento de sus funciones, a cualquier organismo público, nacional, provincial o municipal, y a personas físicas o jurídicas, públicas o privadas, todos los cuales estarán obligados a proporcionarlos dentro del término que se les fije, bajo apercibimiento de ley.

En los casos en que a la UIF le sean opuestas disposiciones que establezcan el secreto de las informaciones solicitadas, podrá requerir en cada caso autorización al juez competente del lugar donde deba ser suministrada la información o del domicilio de la UIF a opción de la misma;

  • b. Informar cualquier hecho u operación sospechosa independientemente del monto de la misma. A los efectos de la presente ley se consideran operaciones sospechosas aquellas transacciones que de acuerdo con los usos y costumbres de la actividad que se trate, como así también de la experiencia e idoneidad de las personas obligadas a informar, resulten inusuales, sin justificación económica o jurídica o de complejidad inusitada o injustificada, sean realizadas en forma aislada o reiterada.[54]

Pero claramente dicha normativa a sido eludida, tanto en el caso argentino que hemos relatado como a nivel internacional. Veremos la maniobra del banco suizo UBS detalladamente más adelante, que fue descubierta gracias a la información de un delator disgustado con la institución. De ello puede deducirse que las normativas fueron violadas y los organismos de control de EEUU, país del primer mundo no pudo advertirlo por los canales institucionales, dependiendo de la información de un soplón.

No es menor que Bernard Madoff fue denunciado por sus propios hijos, y hasta ese momento la SEC, institución de control no lo había detectado.

Podemos inferir que las normas son elocuentes pero la realidad las supera.

Luego de esta introducción sobre delitos financieros vamos ahora a la historia de Ponzi, para ver como inició el ardid, supuesto inventor de este sencillo método de fraude piramidal. La historia lo desmiente porque el esquema piramidal tuvo precursores. Y hablaremos de ellos.

Carlo Pietro Giovanni Guglielmo Tebaldo Ponzi, Carlo para nosotros, era un inmigrante italiano, nacido en el pueblo de Lugo, en la provincia de Rávena, Italia, el 3 de marzo de 1882, que llegó a Estados Unidos alrededor de 1903, de clase baja y con recursos escasos.

Ponzi aprendió a hablar en inglés y después de pasar por varios trabajos eventuales de baja calificación, con una gran imaginación y pocos escrúpulos inició el camino del delito.

Fue empleado bancario en Canadá y terminó preso por ser sorprendido falsificando la firma de una anciana que tenía cuenta en el mismo Banco. Con ese cheque pretendía comprar el pequeño Banco que tenía dificultades financieras. Le costó tres años de cárcel.

Ya en Estados Unidos y en la ciudad de Boston se casó con María Gnecco. Prontamente se vio implicado en un negocio de transporte de inmigrantes italianos ilegales por lo que nuevamente cayó preso, con una condena de dos años.

A su salida parecía enmendado y comienza a trabajar como administrativo, en el sector de correspondencia extranjera de una empresa. Gracias a un correo que le llegó de España, que incluía un cupón de respuesta tomó conciencia que los cupones de respuesta internacional de correos se podrían vender más caros en Estados Unidos que en el extranjero porque la diferencia del tipo de cambio resultaba con un saldo interesante a su favor. Los cupones de respuesta internacional se podían cambiar por sellos postales en los correos para así poder contestar las cartas. Y el cupón que en España se podía comprar con un céntimo, costaba en EEUU seis céntimos, situación debida a la Primera Guerra Mundial que provocó inflación en Europa, por lo que las monedas europeas estaban depreciadas con respecto al dólar americano. O sea que con el arbitraje de monedas entre Europa y EEUU podía obtener una considerable ganancia. Hoy se diría que hizo un carry trade con estampillas.

Le pidió a sus familiares italianos que le prestaran dinero por vía de la compra de cupones postales, que debían ser enviados a su residencia en EEUU. Por la burocracia y demora para realizar esta operación a gran escala, dedujo que reduciría su nivel de utilidades, Pero como ya estaba lanzado se asesoró convenientemente, convenció a amigos para hacer el negocio de los cupones y formó la Securities Exchange Company. Comenzó su negocio prometiendo a sus clientes un beneficio del 50% dentro de un plazo de 45 días o 100% en un plazo de 90 días. Pero ya no era un negocio de cupones, del que se había desengañado sino que un esquema tipo piramidal era más provechoso.

Detrás de bambalinas Ponzi no invertía un solo centavo ni en cupones ni en cosa alguna; pagaba los intereses, exorbitantes por cierto, con el dinero que recolectaba de los nuevos inversores que llegaban a montones atraídos por los beneficios inusuales. Por supuesto que se cuidó de pagar religiosamente los rendimientos prometidos en el período acordado.

Contrató agentes y pagaba interesantes comisiones por cada dólar que el agente aportaba a su compañía.

Los primeros inversores comentaban la inteligencia y seriedad del financista, cuyo nombre empezaba a sonar en el mercado y comenzaba a hacer la consabida y predecible ostentación de dinero; tanto para satisfacción personal como estrategia de marketing, comprando una mansión con aire acondicionado, una piscina climatizada y otros lujos extravagantes para la época. Eso si, era buen hijo: se trajo a la mamma de Italia proveyéndola de un boleto de primera clase.

Pero siempre aparece un aguafiestas y fue el analista financiero Clarence Barron, por encargo del Boston Post, que publicó un informe en que cuestionaba las prácticas de Ponzi.

La empresa fue intervenida por el Estado y una de sus medidas fue impedir la captación de nuevos inversores.

Los inversionistas enfurecidos reclamaban sus dineros y Ponzi, tal cual un gentleman les devolvió el dinero a aquellos que lo solicitaron. Esa nueva y arriesgada treta publicitaria le proporcionó nuevos adherentes y mayor confianza a sus clientes más antiguos. Hay que hacer notar que alrededor de 40.000 personas invirtieron 15 millones de dólares de la época, y tras su caída aproximadamente un tercio recuperaron su dinero. El resto lo perdió.

En agosto de 1920 los medios de comunicación decían que la empresa de Ponzi estaba en bancarrota, y el gobierno federal intervino su empresa, descubriéndose la estafa. Fue enviado a la cárcel pero pagó su fianza y fue liberado, lo que sucedió en dos oportunidades. Una vez afuera pregonaba que su sistema se podía sostener, cosa que no sucedió y terminó en la bancarrota final y los ahorristas perdieron todo su dinero.

El 1º de noviembre de 1920 Carlo Ponzi fue declarado culpable de fraude y se lo condenó a cinco años de prisión.

Salió a los tres años en libertad condicional pero sufrió una nueva condena a otros nueve años. Dándose cuenta que los aires de Boston, Nueva Inglaterra y Nueva Jersey hasta donde había extendido sus negocios ya no le eran propicios huyó al estado de Florida, donde quiso poner en marcha otra estafa, pero la fama que lo precedía se lo impidió.

Sus sueños de crear la ¨Charles Ponzi Company¨ se fueron esfumando y antes de que los aires de Florida también le fueran nocivos volvió a escapar, esta vez a Texas. Se afeitó su emblemático bigote y se afeitó la cabeza, pero la nueva imagen no le sirvió porque fue detenido en Massachussets y enviado a la cárcel donde permaneció hasta 1934.

A su salida lo esperaban los embaucados, no precisamente para festejar su liberación sino para lincharlo, pero la policía lo impidió. Teniendo en cuenta que no era norteamericano fue deportado a Italia.

Terminó trabajando en una línea aérea italiana que operaba en Brasil, y dentro de su operación comercial legítima de transporte incluía el contrabando de material estratégico para obtener un beneficio adicional.

Carlo se radicó en Brasil, viviendo sus últimos días en la miseria, muriendo en un hospital de caridad de Río de Janeiro el 18 de enero de 1949.

Su fama hizo que se bautizara a este tipo de timos como esquema Ponzi, que tiene similitudes con el esquema piramidal. Veamos las diferencias.

En un esquema Ponzi, el estafador es el eje central de la estafa e interactúa con sus víctimas, a quienes les dice, con su gran condición de actor permitido por su egocentrismo, que tiene conexiones con importantes grupos financieros y una fuente de información privilegiada, lo cual es la base del éxito de sus inversiones. Si ha logrado armar el teatro de operaciones de manera convincente, es probable que a través de las propias reinversiones de sus clientes y algunas incorporaciones nuevas, pueda mantener por un largo lapso el fraude. O hasta que los acontecimientos externos lo condicionen, como fue el caso de Madoff, que fue impactado por la crisis financiera de EEUU proveniente en mayor medida de la caída de las hipotecas subprime.

En cambio, el esquema piramidal stricto sensu declara explícitamente que el nuevo dinero será la fuente de pago para las inversiones iniciales, por lo que este sistema tiende a colapsar rápidamente debido a la falta de crecimiento con nuevos inversionistas.

La idea básica del esquema piramidal parte de una miríada de reclutadores, que obtienen dinero de otras personas, que en ese momento están en un nivel más bajo, con la promesa de recibir en el futuro más dinero que el que han ¨invertido¨. La presunción del reclutado es que él, motivado por su ambición, puede ir escalando posiciones en la pirámide haciendo su propio reclutamiento y esos nuevos reclutados, conforme más rápido los consiga, le permitirán alcanzar los ingresos prometidos a breve plazo. O sea que los estafados se van convirtiendo paulatinamente en estafadores.

Carlo Ponzi no tuvo la idea original para armar su esquema sino que lo copió a otro aventurero y estafador, William Miller, apodado el ¨520 por ciento¨ en 1899. Miller abrió su empresa bajo el nombre de ¨Union Franklin¨, en el barrio de Brooklyn en New York.

Con los mismos artilugios que utilizó su sucesor Ponzi estafó un millón de dólares de la época (1899) y cuando fue detenido purgó una condena de 10 años de prisión. A su salida abrió una tienda de abarrotes en Long Island.

Pero no acaba aquí porque España se arroga el dudoso mérito de tener entre sus ciudadanos a Baldomera Larra Wertoret como la primera autora de fraude piramidal del que se tengan noticias.

Había nacido en Madrid en 1833 como hija del escritor Mariano José de Larra; que usaba el seudónimo de Fígaro en sus escritos, y casada con Carlos de Montemayor, médico de la Casa Real.

Cuando el afrancesado marido de Doña Baldomera tuvo que huir de España en 1973, rumbo a Cuba con la llegada de Alfonso XII; dejó a su cónyuge e hijos en una situación harto precaria. Tuvieron que acudir a prestamistas usureros a quienes pagaba altos intereses, pero éstos le dieron la idea de cómo podía orientar su negocio propio de préstamos.

Doña Baldomera, a quienes algunos desalmados bautizaron como La Patillas, por los dos tirabuzones de cabello que lucía pegados a las orejas, también fue reconocida como ¨la madre de los pobres¨. Esa fama la había ganado una vez fundada la Caja de Imposiciones, donde pagaba un 30% a los inversores, quienes hacían largas filas para colocar su dinero. Con sus 70 años a cuesta era la propietaria de la única banca financiera privada de Portugal.

De aspecto humilde, residía en una austera casa y hacía alarde de su moral católica intachable.

Estamos hablando de 1870 aproximadamente. Logró recaudar según estimaciones unos 22 millones de reales.

Su fama trascendió las fronteras y los periódicos Le Figaró de París y L´Independence Belge de Bruselas publicaron artículos sobre Doña Baldomera.

Según sus propias palabras su negocio ¨era tan simple como el huevo de Colón¨ y la garantía en caso de quiebra de la Caja de Imposiciones era una sola: ¨tirarse al viaducto¨- Fue una visionaria, porque muchos adoptaron ese medio para dar término a sus vidas.

Cuando le sobrevino la quiebra en 1876 se hizo humo con todo el dinero que pudo recoger, pero a los dos años posteriores se supo que vivía bajo falsa identidad en la localidad de Auteuil en Francia.

La justicia española dio curso a una orden de detención y pidió la extradición de Francia a España, donde fue enjuiciada.

Su estafa perjudicó a más de 600 personas con un timo de ciento cincuenta millones de dólares de la época.

Su aventura en las finanzas duró hasta unos cuatro años y a los 74 años de edad ingresó a la cárcel por cargos de fraude.

El 26 de mayo de 1879 fue condenada a seis años de prisión y sus colaboradores libres de culpa y cargo.

Pero Doña Baldomera tenía su carisma y merced a una campaña donde se recogieron firmas de aristócratas hasta sencillos ciudadanos con peticiones de clemencia, fue liberada.

Se le dedicaron canciones como Doña Baldomera y El gran camelo, o sea que llegó a ser tan famosa como el polaco Goyeneche al que Cacho Castaña le dedicó la canción ¨Garganta con arena¨.

Luego de su liberación se desconoce su destino final y la fecha de su muerte.

Otro caso español fue el de Placidico, que era el banquero de su pueblo Valdepeñas de Jaén. Otorgaba préstamos a jornaleros a una tasa del 12% mensual, ofreciendo a los inversores la misma tasa del 12%.

El recibo que le daba a los incautos decía literalmente: ¨He recibido de (nombre de la víctima) la cantidad de (equis) pesetas que se las debolberé (sic) tan pronto me requiera para ello dicha cantidad debengará (sic) el 12% y para que coste (sic) le espido (sic) el presente recibo¨. De esto se deduce que era bueno para los números pero pésimo en ortografía.

Cuando falleció en 1984 dejó una ristra de 400 acreedores perjudicados, con una deuda de 140 millones de pesetas, siendo sus activos de 50 millones. O sea que los 90 millones restantes se los gastó antes de irse a la tumba.

También las Baleares contaron con los pícaros de turno.

En Palma de Mallorca, España, fue desbaratado el fraude de las ¨bolas solidarias de la abundancia¨, esquema piramidal puro, similar pero diferente al Esquema Ponzi.

¿En qué consiste ese fraude? Se puede explicar con pelos y señales porque la Policía del lugar logró infiltrarse en las reuniones, tomar nota de la estafa en camino, comprobar fehacientemente el fraude y dar el parte a los superiores para desbaratarla, en base a las denuncias presentadas por la Unión de Comerciantes de Elvissa y Fomentera (UCE), y apoyada por notas periodísticas del Diario de Ibiza.[55] A continuación el Grupo de Delincuencia Urbana elaboró un informe que elevó a la Justicia para iniciar las acciones en contra de esta organización delictiva.

El fraude consistía en el aporte de dinero en cantidad de 1.000, 3000, 10.000 o 15.000 euros, con la promesa de recuperar ocho veces la suma invertida en menos de dos meses en base al mecanismo que seguidamente explicamos.

La primera persona que ingresa, hace el aporte de dinero y debe conseguir dos personas más (compañeros de viaje), que a su vez deberán hacer sus propios aportes y conseguir dos compañeros de viajes adicionales.

En las reuniones armadas por los estafadores explicaron que primero se accede al círculo exterior de color rojo, y ese dinero recaudado pasa a ser regalado a la persona situada en el círculo azul. En este punto la bola se divide para formar otras dos y las personas que estaban en el nivel rojo pasan al nivel amarillo, posteriormente al verde, siempre colaborando en la captación de nuevos aportantes, tanto por otros o como por sí mismos, siempre con el objetivo de hacer la bola más dinámica. Finalmente se arriba al nivel azul, que es cuando se recupera el dinero inicial multiplicado por ocho.[56]

Obviamente, cuando se detiene el ingreso de nuevos aportantes alguien se deberá quedar sin cobrar y pasar a la situación de víctima. No cabe duda que cada inversor en la bola o es muy ingenuo o se convierte en un nuevo estafador, que utilizando el mismo discurso de los iniciadores convence a nuevos ilusos. En las reuniones se utilizaban métodos de convencimiento tipo new age con el discurso de que este método estaba relacionado con ¨el crecimiento personal y la oportunidad que brinda el Universo para que el dinero fluya¨ y que ¨gente pueda ayudarse a sí misma y a los demás¨, haciendo relación a una ONG. Una de ellas se presentó a efectuar una denuncia después de enterarse de que era invocada para seducir a la gente a invertir su dinero en la bola solidaria.

El psicoterapeuta Miguel Perlado de la Asociación de Atención a Sectas y Dependencias Grupales observaba que el primer criterio definitorio de que algo andaba mal era que aconsejaban a los participantes a ocultar lo que estaban haciendo a la familia directa, padres, pareja o cónyuge. Perlado había tomado nota de denuncias de familiares que observaban el cambio de comportamiento del inversor, con irritabilidad, angustia, ansiedad y otros trastornos psicosomáticos. La presión emocional era ejercida por la organización delictiva sobre los participantes, con un lenguaje euforizante, conducente a una pérdida de control, cercano al lavado de cerebro, que es el usualmente utilizado por las sectas. Otra de las facetas esgrimidas consistía en ser contestatarios contra el sistema legal financiero de los Bancos y sus productos como las hipotecas, tarjetas de crédito y otros servicios como una herramienta de explotación de la gente. Probablemente en algunos de esos aspectos coincidiríamos, más aún mcuando analicemos la crisis financiera de EEUU.

Con las actuaciones posteriores se logró desbaratar a esta organización antes de que se fugaran con los dineros mal habidos.

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