Monografias.com > Biografías
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Miguel Antonio Caro




Enviado por osram



    1892-1898

    1.- Contexto General (Situación Económica, Social y
    Política. Estabilidad, orden/crisis/anarquía).

            Como contexto
    previo al desarrollo del
    Régimen Político comprendido entre 1892 y 1898, en
    el cual estuvo como Jefe de Estado Miguel
    Antonio Caro, es necesario indicar los siguientes
    acontecimientos:
            
            Existía un
    radicalismo político previo debido a que el Gobierno liberal
    (iniciado en 1863), adoptó una política de lucha
    por una mayor soberanía para los Estados que
    constituían la República. Existe una pugna
    constante entre los dos partidos o grupos
    políticos predominantes (liberales y conservadores),
    muchos de estos conflictos
    llegaron a ser violentos. El origen del conflicto
    radicaba en la determinación de la política de
    gobierno. Los
    asuntos políticos y sociales frecuentemente se complicaban
    debido a fuertes controversias con respecto a las propiedades, la
    situación legal del país y los privilegios de la
    Iglesia
    Católica.

            Durante 1880 los
    conservadores vuelven al poder con
    Rafael Nuñez, comienza el Movimiento de
    la Regeneración, que busca dar frescura y satisfacer los
    intereses de las personas que no militaban en ninguno de los
    partidos predominantes; de este movimiento se
    consolidan las bases para la fundación por parte de Caro y
    Nuñez del Partido Nacional.

            Esto va a
    permitir que en el plano legal se reforme la Constitución,
    inspirada por Rafael Nuñez, y redactada en su totalidad y
    defendida por Miguel Antonio Caro en el Consejo Nacional de
    Delegatarios.

            No fue
    ciertamente un gobierno
    fácil, Caro tuvo que soportar la oposición decidida
    no sólo de los liberales sino, aun más implacable,
    la de los conservadores. Liderados por Carlos Martínez
    Silva en Bogotá y por Marceliano Vélez en
    Medellín, volvían de los fervores nacionalistas a
    las viejas toldas de su partido que, bajo la bandera del
    historicismo político, querían revivir las glorias
    que consideraban en cierta forma traicionadas por las ideas
    sostenidas por Nuñez y Caro en esos años de
    gobierno.
    Prácticamente a partir de 1897, la ruptura del
    conservatismo con Caro fue total. El liberalismo no
    se cita, porque de hecho había sido eliminado: los
    elementos independientes de dicho partido, seguidores de
    Nuñez, muerto éste volvieron a las filas de su
    partido, que como tal poco o nada contaba en ese momento.
            
            De los
    años de gobierno de Caro
    hay que recordar algunos hechos que lo marcaron. La
    agitación política desatada en Bogotá a
    principios de
    1893, cuando el pueblo se levantó y tuvo a la ciudad
    prácticamente en sus manos, en días de violentos
    asaltos y choques con la fuerza
    pública. Sólo el valor y
    prudencia del general Antonio Basilio Cuervo, ministro de
    Gobierno, lograron el retorno a la normalidad aun a costa de su
    vida. Caro, radicado entonces en Ubaque, no se movió de
    allí y puso en manos de Cuervo el problema de orden
    público. La bandera roja y negra de la Comuna se
    paseó entonces por Bogotá, como símbolo de
    inspiración de un movimiento que
    en cierta forma preludiaba brotes de inconformidad que en
    más de una ocasión han trastornado el proceso de la
    vida política y social.

            Episodio candente
    fue la revolución de 1895, a principios de ese
    año, cuando fuerzas liberales se levantaron contra el
    gobierno. Caro llamó entonces al general Rafael Reyes y lo
    puso al frente de los ejércitos legitimistas. Reyes, con
    talento indiscutible de estratega y jefe militar, así no
    lo fuera de profesión, planeó una campaña
    relámpago que inició en La Tribuna, adelante de
    Facatativá, bajó al Magdalena, por él
    siguió hasta la Costa Atlántica y entró por
    allí a Santander, donde estaba el foco de la revuelta,
    acabando con la guerra en
    Enciso y devolviendo la paz al país.

            Otro episodio que
    hay que recordar fue el del llamado gobierno de los Cinco
    Días. Caro se había retirado a la hacienda de
    Casablanca, en Sopó, y había dejado encargado del
    gobierno al general Guillermo Quintero Calderón, como
    designado que era éste a la Presidencia.
            
            Quintero
    Calderón había tomado ya el partido de los
    conservadores históricos, y nombró un gabinete
    encabezado por Abraham Moreno, figura destacada de éstos
    en Antioquía. Al darse cuenta Caro de la
    orientación que se quería dar al gobierno, dando la
    espalda a los nacionalistas reasumió el mando en
    Sopó y puso en manos del general Manuel Casabianca,
    nombrado por él ministro de Gobierno y de Guerra,
    el trabajo de
    restablecer el orden, dentro de los marcos de inspiración
    nacionalista de su gobierno. De nuevo por mano ajena Caro
    restablecía la normalidad. Y hay que recordar que por esos
    días coincidieron en Sopó, Caro y San Ezequiel
    Moreno, quien venía de Casanare camino a Pasto, y quien
    pasó allí con su amigo unos pocos días.

            Ya en 1897
    volvió a inquietar el proceso
    electoral, esta vez para buscar la sucesión de Caro en el
    gobierno. Fueron meses agitados en que se barajaron varias
    fórmulas, una vez descartada la posibilidad de una
    reelección de Caro. La baraja conservadora con los nombres
    de Marceliano Vélez y Guillermo Quintero Calderón,
    la liberal con los de Miguel Samper y Foción Soto, la
    nacionalista con los de Manuel Antonio Sanclemente y José
    Manuel Marroquín. Se impuso esta última, con los
    funestos resultados que se vieron: guerra de los
    Mil Días, golpe del 31 de julio de 1900, cuando
    Marroquín amarró a Sanclemente y se quedó en
    el poder, y la
    pérdida de Panamá. Es importante resaltar que Caro
    nunca resolvió directamente los problemas
    políticos, él siempre envío a alguien a
    resolver los problemas.

            La
    Situación Económica para el momento es la
    siguiente: El país es básicamente agrario, con una
    economía que depende tradicionalmente del cultivo de
    café y banano, rubros en los cuales comienza a
    consolidarse como exportador importante, debido a las
    políticas de apertura internacional, iniciadas por Rafael
    Nuñez; además de los cultivos de subsistencia:
    caña de azúcar, arroz, tabaco y
    algodón.

            En la
    minería comienza la explotación del oro y de
    ñas esmeraldas, lo que llevará a Colombia a
    consolidarse como mayor productor internacional de estos
    rubros.

            En aspectos
    generales, se puede considerar este periodo como una época
    de estabilidad económica, pero con crisis en los
    aspectos sociales y políticos.

    2.- Datos Generales
    del Gobernante (Breve Biografía. Ideas y tendencia
    política).

            El 10 de
    noviembre de 1843 (año en que se sancionó la
    tercera Constitución de la Nueva Granada), nació en
    el número 5-56 de la calle novena de San Alberto, en Santa
    Fe de Bogotá, Miguel Antonio Caro Tobar.
    Fue el primer hijo del matrimonio entre
    el poeta y filósofo José Eusebio Caro Ibañez
    y Blasina Tobar Pinzón. Su padre, hijo a su vez de
    Nicolasa Ibañez, mujer de conocida
    actuación en los albores de la República, hombre legal,
    progresista y de espíritu eminentemente filosófico,
    fue quien junto a Mariano Ospina Rodríguez,
    contribuyó en grado máximo a la definición
    histórica del partido conservador.

    La crianza intelectual de Miguel Antonio tuvo como fundamento una
    educación familiar privada, concluida con una
    formación autodidacta. Sus primeras letras fueron
    aprendidas de su abuelo Miguel Tobar, del cual tomó el
    señorío, la justicia y
    gran parte de su orientación en los estudios,
    especialmente el latín, el derecho y el buen gusto
    literario.

            Continua su
    formación Thomas Jones Stevens, un ayo de origen
    inglés, hasta 1855 cuando ingresa en el colegio de Sixta
    Pontón viuda de Santander, cambiado de plantel en 1857 al
    Colegio Militar de Antonio B. Cuervo y del clérigo Antonio
    José de Sucre, para terminar estudiando definitivamente
    hasta 1861, año de la expulsión de los jesuitas en
    el Colegio de San Bartolomé. Allí inicia su
    amistad con
    Rufino José Cuervo y obtiene altas distinciones en
    gramática y versificación castellana y latina.

            A la edad de 20
    años, cuando ya había traducido fragmentos de las
    Georgias y el Canto II de la Eneida en octavas reales, empieza a
    manifestar los rasgos más predominantes que heredó
    a su padre como el temperamento de periodista y la combatividad
    política, al empezar a escribir en periódicos como
    El Símbolo, La República y La
    Caridad
    .

            En 1865, empieza
    a escribir con Cuervo la Gramática Latina para el uso
    de los que hablan castellano
    , texto que
    modificaría la enseñanza del latín, en el
    año siguiente publica sus primeras poesías y es
    nombrado profesor de filosofía en la Universidad del
    Rosario.

            A partir de 1868
    la labor periodística, filosófica, política,
    filológica y gramatical de Caro empieza a ganar
    proporciones. Asume la dirección de La Fe, escribe
    su Estudio sobre el utilitarismo, aparecen los
    Principios de la moral.
    Refutación del sistema
    egoísta
    , le dirige unas cartas a Ezequiel
    Rojas, es representante a la Cámara por Cundinamarca, como
    suplente de Rafael Arboleda e inicia su periodo de estudios sobre
    el
    lenguaje.

            En 1870, publica
    su Informe sobre los "Elementos de Ideología" de
    Tracy
    y su Tratado del participio, y en 1871
    interviene en la creación de la Academia Colombiana de la
    Lengua junto
    con Vergara y Vergara y Marroquín. El 7 de noviembre del
    mismo año aparece bajo su dirección El
    Tradicionista
    , publicado de noviembre de 1871 a agosto de
    1876, fue sin duda la palestra donde no sólo luchó
    por sus ideas frente al radicalismo entonces imperante, sino
    donde expuso los principios que
    tanto habían de pesar en el proceso
    institucional de 1885-1886. El Tradicionista fue el
    órgano del Partido Católico, una agrupación
    política que a pesar de no contabilizarse electoralmente,
    estaba convencida de que el catolicismo debía hacer acto
    de presencia beligerante y activa en la vida política
    colombiana. A pesar de que no se hizo realidad por la
    desconfianza que en los medios de la
    curia bogotana suscitaba el solo pensamiento de
    que los laicos pudieran tomar la vocería de la Iglesia.

            En 1873 contrae
    matrimonio con
    Ana Narváez, unión duradera hasta la muerte de
    ella y de la cual hubo nueve hijos. En 1876, por segunda vez es
    representante a la Cámara pero ahora por el estado de
    Tolima, integrando la comisión reglamentaria de
    Peticiones. En ese mismo año le es expropiado El
    Tradicionista
    . La razón de la anterior medida fue que
    Caro y su periódico habían tomado una actitud
    perfectamente definida frente a las pretensiones laicizantes y
    arbitrarias del gobierno radical, constituyéndose en los
    voceros de un movimiento de
    resistencia y
    afirmación de los valores
    religiosos propios de una Colombia nacida
    en la matriz
    hispánica.
            
            Por esos
    años, Caro comenzó a sostener con notables
    intelectuales tanto de su país como extranjeros una
    extensa correspondencia que juega un papel muy
    importante dentro de su vida y obra. Tuvo amistad epistolar
    con Cecilio Acosta, Ezequiel Uricoechea, Rafael Nuñez,
    Rufino José Cuervo, Joaquín García
    Icazbalceta, Marcelino Menéndez y Pelayo, Antonio
    Gómez Restrepo y Belisario Peña, entre otros.

            El año de
    1881 fue especialmente rico en la variada actividad de Miguel
    Antonio. Era entonces Director de la Biblioteca
    Nacional de Colombia,
    Consejero del Directorio Conservador y, precisamente entonces,
    había recibido la distinción de miembro honorario
    de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de
    Chile, y
    leyó
    ante la Academia Colombiana en la junta inaugural del 6 de
    agosto, un discurso
    publicado con el titulo Del uso en sus relaciones con el
    lenguaje
    .

            Tres años
    más tarde, en 1884, Caro gana el concurso del Papel
    Periódico Ilustrado
    como el colombiano más
    notable y pasa de la dirección de la Biblioteca
    Nacional a la Rectoría de la Universidad
    Católica. Al año siguiente sobresale por su
    participación en el Consejo Nacional de Delegatarios.

            Nuñez y
    Caro eran dos personalidades contradictorias que se
    complementaron. El primero necesitaba de un artífice para
    materializar todo su proyecto
    político de la Regeneración y lo encontró en
    la figura de Miguel Antonio Caro. Todos sus rasgos se
    manifestaron en los debates en torno a la
    Constitución de 1886: su patriotismo, su religiosidad, su
    carácter de luchador y polemista sectario y autoritario,
    factores que influyeron a través de él en la carta
    política.

    Terminada su labor en el Consejo Nacional de Delegatarios, Miguel
    Antonio continua con sus tareas periodísticas. Por esos
    años escribe sus artículos sobre San Cirilo de
    Alejandría y Galileo, y es nombrado Director de La
    Nación
    , periódico que defendía la
    Regeneración. Entre 1888 y 1892 fue Consejero de Estado y sin
    ser abogado sus conceptos como Magistrado son respetados. Fue
    Presidente de esa corporación judicial antes de encargarse
    de la presidencia de la República.
            
            Miguel Antonio
    llegó al gobierno de Colombia casi por
    obra del destino. Indudablemente lo único que lo
    obligó a aceptar la candidatura a la Vicepresidencia de la
    República era que de ello dependía la suerte de la
    Regeneración y la integridad de la Constitución de
    1886.

            Culminado su
    periodo presidencial en 1898, Caro se retira temporalmente de la
    vida política. Desea regresar al mundo para el cual
    siempre se sintió llamado: las letras, relegadas a
    razón de su participación activa en la
    Regeneración.

            En 1902 regresa a
    la vida pública defendiendo a unos presos políticos
    y volviendo al Senado de la República como suplente por
    Antioquia para el periodo 1903-1904. En esa legislatura participa
    activamente en las discusiones en torno al Canal de
    Panamá y a la regulación del Sistema Monetario
    y la amortización del papel moneda.
    En 1903 había dictado la cátedra de Derecho
    constitucional en la Escuela de
    Derecho.

            A partir de 1905
    Caro se retira definitivamente de la política para
    dedicarse a la vida privada, hasta que la muerte lo
    sorprende el 5 de agosto de 1909, año en que se culmina el
    quinquenio de Reyes.

    Conviene aclarar que las acciones de
    Caro en el campo político son tal vez la parte más
    viva de su biografía. Rodeada siempre de factores
    polémicos, ofrecen con todo la contribución
    más rica a la realidad colombiana.

    Caro fue un hombre
    polifacético, que no admite ser enmarcado en una actividad
    muy específica. Era un humanista en el mejor sentido del
    vocablo, y su obra quedará siempre como referencia forzada
    de lo que logró hacer. Si fuéramos a establecer un
    itinerario de la actividad intelectual de Caro, tal vez
    pudiéramos decir que nació de su interés por
    los problemas del
    lenguaje,
    pasó de allí a la filosofía y de ésta
    a la política, donde encontró campo propicio a su
    acción.

    Pero no se agotó en esto la actividad de Caro. Rica fue su
    producción en el campo de la crítica literaria.
    Autores españoles, colombianos e hispanoamericanos
    ocuparon su atención destacándose entre todos estos
    escritos unas páginas que dedicó al Quijote, dignas
    de ser tenidas en cuenta. Igual cosa puede decirse de sus
    ensayos de
    interés histórico, donde descolló sin duda
    como un maestro de la interpretación filosófica de
    la historia. Un
    ejemplo singular es el prólogo que escribió para la
    edición de la Historia de Lucas
    Fernández de Piedrahita, donde se plantea precisamente el
    tema de la conquista de América, páginas que
    adquieren ahora especial actualidad.

    Le quedó tiempo a Caro
    para interesarse por temas de política internacional, de
    economía, de bibliotecología, y algo más:
    hijo de un poeta, José Eusebio, el más grande de
    nuestros románticos, Miguel Antonio se dejó llevar
    también por su propia inspiración y concibió
    una obra poética de corte clásico, con piezas tan
    notables como su oda "A la estatua del Libertador" y el soneto
    "Patria". Y lo más interesante es que no sólo
    escribió poesía en castellano sino
    también en latín. Quedan además sus
    traducciones a esta lengua de
    poetas que le eran especialmente entrañables. La obra
    escrita de Caro quedó dispersa en periódicos y
    revistas.

    Muerto Caro, el gobierno nacional encargó a su hijo
    Víctor Eduardo la recopilación y publicación
    de las obras de su padre. Fue así como se publicaron ocho
    tomos de Obras completas (Bogotá, Imprenta Nacional,
    1918-1945) y tres de Obras poéticas (1928-1933). En estos
    volúmenes se publicaron, fuera de lo poético, los
    estudios literarios filológicos y gramaticales, discursos y
    documentos
    políticos, labores legislativas y estudios
    jurídicos.

    Posteriormente, fue creado el Instituto Caro y Cuervo, hace ya
    cincuenta años, éste asumió la labor de
    hacer una edición realmente completa de la obra de Caro de
    la cual se han publicado ya catorce tomos, los tres primeros en
    la colección Clásicos Colombianos (1962-1980) y
    otros once en la Biblioteca
    Colombiana (1979-1991), donde se han recogido por el momento
    todos sus escritos de interés filosófico, religioso
    y educativo; la famosa Gramática de la lengua latina:
    sus estudios lingüísticos, gramaticales y
    filológicos; los discursos y
    otras intervenciones en el Senado de la República
    (1903-1904); los escritos sobre Andrés Bello y acerca del
    Libertador; los estudios virgilianos (tres tomos); los
    constitucionales y jurídicos (dos tomos); y los escritos
    políticos (hasta ahora tres tomos).

            Esta en
    términos generales la actividad del señor Caro. Las
    facetas ricas de su personalidad,
    recta y definida, quedan manifiestas en hechos de su vida
    pública pero el mejor testimonio lo dan sus muchos
    escritos que llenan la mayor parte de su vida. Fue además
    un ejemplar humano de virtudes notables, que queda como
    testimonio de lo mejor de Colombia en el
    siglo pasado y principios de
    éste.

            Terminaré
    esta parte biográfica con la mejor descripción que
    se ha hecho de Caro, realizada por Rafael María
    Carrasquilla: Si tuviera que explicarle a un extranjero
    quién fue Miguel Antonio Caro le diría: imagine
    usted un romano, patricio, de la época de Marco Aurelio,
    educados por maestros estoicos con el mayor esmero;
    supóngalo usted convertido al cristianismo
    por largas conferencias con un padre de la Iglesia;
    hágalo usted resucitar hacia mediados del siglo XIX;
    infúndale el habla castellana y el acento de los
    bogotanos, y déjelo usted proceder. Y tendrá usted
    a Caro…

    3.- Modo de Acceso al Poder
    (elecciones, golpe…).

            Miguel Antonio
    Caro accede al Poder en las
    elecciones realizadas durante el lapso comprendido entre 1891 y
    1892; en las cuales es postulado junto a Rafael Nuñez (el
    Regenerador), éste como Presidente y Caro como
    Vicepresidente; ambos representando al Partido Nacional (creado
    por ellos). Caro llega al poder el 7 de
    agosto del año 1892, asumiendo el cargo de Vicepresidente
    encargado del Poder
    Ejecutivo.

    4.- Lapso(s) de Gobierno (formal y efectivo).

            El lapso de
    Gobierno efectivo de Miguel Antonio Caro estuvo comprendido entre
    el 7 de agosto de 1892 y el 7 de agosto de 1898.

            Lapso formal:
    Caro ejerció la Vicepresidencia del 7 de agosto de 1892 al
    16 de enero de 1893; del 17 de enero de 1893 al 12 de marzo de
    1896; y del 17 de marzo de 1896 al 7 de agosto de 1898. Antonio
    B. Cuervo la ejerció el 16 y 17 de enero de 1893, y del 12
    al 17 de marzo de 1896, el General Guillermo Quintero
    Calderón. Curioso caso: uno de los gobiernos más
    extensos que se registran en la historia de ese país
    (seis años) fue ejercido por quien nunca utilizó el
    titulo de presidente, sino simplemente el de vicepresidente
    encargado del poder
    ejecutivo. El respeto que Caro
    sintió siempre por la obra de Nuñez no le
    permitió asumir un titulo que, en su integridad,
    consideraba no le pertenecía.

    5.- Relaciones (Iglesia,
    Militares, Civiles, Mundo Exterior). Apoyos y Oposición.
    Criterios de Legitimidad.

            Iglesia:
    Excelentes Relaciones, puesto que la obra de Miguel Antonio Caro,
    vigorosa aunque relativa en el campo de la filosofía,
    definida y amplia en el de la política, tiene su
    explicación última, su razón de ser en esa
    convicción espiritual de un creyente que, ante todo,
    quiere servir a Dios y a su Iglesia como
    escritor, como Gobernante y como Hombre. Caro
    antes que cualquier otra cosa, era religioso y antes que
    religioso era cristiano y antes que cristiano, era
    católico. Lo que lleva a muchas personas de su
    época a denominar a Caro como 'adalid de Cristo y de su
    Iglesia'.

    La Iglesia era el pilar fundamental de la ideología de
    Caro, este llevó sus ideas religiosas a todos los
    ámbitos de su vida, incluso el político, todas las
    decisiones durante el régimen fueron siempre llevadas a
    cabo teniendo la religión Católica como
    guía. La Iglesia retomó el papel perdido
    durante la época de 1863 a 1886, esto debido a que Caro
    permitió que esta regentara de nuevo la educación
    de los ciudadanos. En la Constitución de 1886 se
    declaró que la enseñanza pública
    sería conforme a la doctrina católica bajo la
    inspección de la Iglesia misma, en todo lo concerniente a
    la fe y a la moral.

    "…el uno consiste en darle a la política un
    carácter moral y
    religioso, en aconsejar a los gobiernos que acepten los principios
    católicos como base fundamental en legislación, y
    la moral
    católica como regla capital de
    administración, y esta es nuestra política
    religiosa; y el otro modo es pretender que la religión
    sirva a ciertas opiniones políticas discutibles, que el
    clero apoye proyectos y miras
    que no son estrictamente católicos, y esta es una
    religión política que nosotros no profesamos, antes
    la creemos inconveniente y no justa".

            Militares:
    Excelentes relaciones, debido a que este sector fue dotado con
    buenas armas y
    uniformes, con un presupuesto
    asignado cada dos años de 2500000 pesos. Aparte de eso,
    "el contingente pasó de 6158 hombres en el periodo
    1888-1894, a 10000 hombres (el máximo aprobado por
    vía constitucional) en 1896".

    Civiles: Poco apoyo debido a:

    • Que durante dos años se gobernó
      bajo estado de
      sitio.
    • Caro, no consideraba, ni permitía la
      oposición.

    No había libertad de
    imprenta.
    Destierro de la mayoría de los líderes
    opositores.
            Aunque a su favor
    tiene que logro cierto apoyo de sectores civiles que les agradaba
    la idea de que Caro, decretó que la Iglesia retomara la
    posición educadora que había tenido en el
    pasado.

    Mundo Exterior:

    • Nicaragua: Se firma Laudo Arbitral por
      el Archipiélago de San Andrés
      (1896)
    • Venezuela: Tratado Suárez-Unda.
      (1894). Esto trajo consigo dificultades políticas, que
      obligan a Caro a retirarlo del Congreso, por oposición
      de las dos Cámaras.
    • USA-España: Se mantiene neutral
      en este conflicto.
    • Santa Sede: Excelentes
      Relaciones.

    Apoyos: de pocos Jefes Políticos: San
    Clemente, Marroquín, Rodríguez Piñeres,
    Carlos Torres, apoyo incondicional de Rafael Nuñez,
    Guillermo Camacho, de Rafael María Carrasquilla, de Rafael
    Reyes (primeros años de Gobierno), de la Iglesia, de los
    Militares, de los terratenientes conservadores.

    Oposición: del Congreso (ambas Cámaras), de los
    liberales, a través de los periódicos y luego con
    levantamientos civiles. De Santiago Pérez, Modesto
    Garcés, de Rafael Reyes (1896 en adelante), Marceliano
    Vélez, el General Santos Acosta, el General Quintero
    Calderón, de los comerciantes liberales, de Miguel Samper,
    de Carlos Martínez Silva; esta fue la tesis
    políticas de los pensadores liberales: "Contra el Estado
    clerical modelado por la Constitución de 1886, se expone
    la conveniencia de instituciones
    civiles neutras que legislen a favor de todos los ciudadanos, por
    encima de sus diferencias religiosas y doctrinarias. Contra la
    educación confesional, se opone la necesidad de ilustrar a
    la juventud en
    las tesis
    científicas de la filosofía positiva y en los
    principios políticos del liberalismo
    .


    6.– Conformación Político-Institucional (A
    nivel central, a nivel local.
    Centralización/Descentralización del poder.
    Criterios administrativos).

            La
    conformación política del régimen
    está caracterizada por un Centralismo
    total, el cual está consagrado en la Constitución
    Nacional de 1886. Aunque existían dos polos de poder: uno
    en la figura de Caro, y el otro en la persona de
    Nuñez, uno de los polos era totalmente inoperante por
    decisión propia.

            La
    República de Colombia, se divide en 8 Departamentos de
    Intendencia, a saber: Antioquia, Bolívar, Boyacá,
    Cauca, Cundinamarca, Magdalena, Santander y Tolima; luego
    Municipios, y por último Parroquias. Los Jefes de
    Departamento eran escogidos directamente por el Presidente en
    funciones,
    así como los Ministros o Consejeros del soberano.

            El Congreso
    estaba dividido en 2 Cámaras: la de Representantes y el
    Senado, teniendo en total, 99 puestos. En el caso del Poder Judicial,
    los cargos eran vitalicios; los Magistrados eran nombrados por la
    Corte en pleno, esto le da cierta independencia
    y autonomía.

    7.- Relación con la Legalidad (estructuración
    del poder en la Constitución/Leyes/Poder de
    Estado:
    Facultades y Límites). Criterios de Justicia y
    Legalidad
    .

    La segunda mitad del siglo XIX representa para Colombia el
    rompimiento definitivo con la estructura
    socioeconómica colonial. Con la imposición de las
    ideas liberales, el país entró de lleno en el
    sistema
    capitalista imperante en occidente. La Constitución de
    Ríonegro (1863-1886) representa el triunfo de los
    intereses librecambistas y la imposición de las libertades
    individuales absolutas.

    La práctica de estos principios condujeron al finalizar el
    siglo a un replanteamiento de las bases ideológicas del
    Estado. Se
    instauró entonces un sistema
    proteccionista, regido por la Constitución de 1886 que
    perduró en Colombia por más de 100 años y se
    caracterizó por un rígido centralismo y por
    las amplias facultades que otorgó al poder
    ejecutivo. La Constitución estableció el
    sufragio para todos los varones. Es decir, de carácter
    centralista, presidencialista, autoritario y confesional.
            
    "La Constitución del 86 puede considerarse como
    resurrección de la del 43, con algunas modificaciones y
    temperamentos aconsejados por una experiencia más dilatada
    o por las necesidades de los tiempos. Obra, no de una
    revolución embrionaria, ni de una revolución
    triunfante, ni de un solo partido político: obra elaborada
    en la conciencia
    nacional, antes que apareciera escrita, pedida ya y sancionada
    luego por una sociedad fatigada
    de la inseguridad y
    el desorden; obra, en fin, a cuya sombra ha disfrutado el
    país de un período de paz más largo que la
    primera vez que rigieron instituciones
    semejantes, interrumpido sólo por una revolución
    prontamente sofocada en 1895".

            Las disposiciones
    legales más importantes durante el Gobierno de Caro
    fueron, (aclarando que por vía constitucional, fue posible
    legislar en cualquier materia
    mediante el uso de los decretos-ley).

    • Decreto-Ley que permite
      la toma de posesión del Presidente de la
      República en otro lugar que no sea la Capital:
      esto lo hizo para que Rafael Nuñez, pudiera tomar
      posesión del cargo en su Hacienda de 'El Cabrero';
      incluso logró que se instalara una Comisión del
      Congreso, en el lugar de residencia de
      Nuñez.
    • Derogación del art. 201 de la
      Constitución Nacional: "El departamento de Panamá
      está sometido a la autoridad
      directa del Gobierno y será administrado de acuerdo a
      Leyes
      especiales"
    • Distintas leyes que
      formulan y protegen la posición del Estado como
      Monopolista en las siguientes materias: venta de
      elementos de guerra; el
      servicio
      telegráfico, el fósforo, tabaco, etc.
      Todo justificado como Recursos
      Fiscales, motivos de seguridad,
      etc. "Son disposiciones del Poder
      Ejecutivo a favor de la Sociedad".
    • Art. 48 de la Constitución Nacional:
      "Derecho exclusivo del Estado a introducir, fabricar y poseer
      elementos de guerra",
      este artículo lo pone de nuevo en vigencia, ya que de
      esta manera evitaba que los enemigos tuvieran acceso a las
      armas. Incluso
      hubo un decreto que complementa esta ley, el cual
      obliga a todas las personas que tengan armas, a portar
      un permiso expedido por el Jefe Civil de cada parroquia, a fin
      de evitar el porte ilícito de armas.
    • Art. 31 de la Constitución Nacional:
      "Cuando la aplicación de una ley expedida
      por motivo de utilidad
      pública resultaren e conflicto
      los derechos de
      los particulares con la necesidad reconocida por la ley, el
      interés privado deberá ceder al interés
      público. Pero las expropiaciones que sea preciso hacer
      requieren plena indemnización". Art. 32: "La
      indemnización plena, debe ser previa": así
      quedó reconocido el Derecho Social, y conciliado el
      Derecho Individual.
    • Derogación parcial de la Ley 85: la cual
      establece restricciones por parte del Estado a la
      exportación del Tabaco.
    • Distintas leyes que
      regulaban las siguientes materias: Circulación
      Monetaria; Crédito, Deuda Pública y Papel
      Moneda; Regulación del Sistema
      Monetario; la Deprecación de la Plata; y el
      Régimen y amortización del Papel
      Moneda.
    • Ley referente a la celebración de
      Contratos
      Administrativos, es una explicación pormenorizada de su
      aprobación y de la participación del Gobierno y
      del Ejecutivo en el Proceso
      así como de las disposiciones del Código Fiscal al
      respecto. "El principio constitucional en materia de
      contratos
      administrativos, como queda expuesto, consiste en procurar la
      concurrencia del poder
      legislativo y ejecutivo, subordinando la acción del
      segundo a reglas generales preestablecidas por el primero; por
      manera que si de una parte las autorizaciones detalladas y
      minuciosas anulan la acción ejecutiva dentro de su
      esfera propia, y ocasionan a las veces insuperables
      obstáculos en la práctica, las de carácter
      incondicional y absoluto pecan por el extremo opuesto,
      destruyendo la ponderación de los poderes
      públicos. Las leyes que
      autorizan la celebración de contratos deben
      establecerse reglas generales, dejando al gobierno cierta
      prudente libertad
      para proceder, consultando el interés
      público".
    • Art. 54 de la Constitución Nacional: en
      relación con el Derecho común y con el Derecho
      eclesiástico. A los curas les están vedados los
      empleos u oficios tanto civiles como políticos por no
      compadecerse con los deberes y funciones
      propias de su profesión exceptuando las dignidades de
      Senador o de Consejero del Soberano, porque ellos emiten votos
      consultivos y no decisivos, agregando que dichas
      incompatibilidades las crea la Iglesia en razón de la
      dignidad sacerdotal. Y el Estado,
      sin contrariar la doctrina de la Iglesia, las crea desde el
      punto de vista del buen servicio
      público.

    8.- Ejercicio Efectivo del Poder (Uso de la Fuerza).

            "La misión
    de caro consistía en desarrollar y estabilizar
    completamente las reformas económicas y políticas
    iniciadas por Nuñez y respaldar a la Iglesia desde el
    Gobierno. Y desde el mismo día de su posesión
    dirigió una administración tormentosa. Bajo la
    divisa azul implantó su mano dura porque concebía
    el gobierno como una actividad exclusiva de quienes profesaran
    determinadas ideas políticas; todos los que militasen en
    filas opuestas para él eran anarquistas y reaccionarios,
    elementos irreductibles a la autoridad del
    gobierno y que por tanto debían excluirse de las funciones
    públicas". Como dijo Martínez Silva en una
    ocasión: "Con el señor Caro había gobernante
    pero no gobierno".

            Un temperamento
    autoritario y una convicción inmodificable de sus
    creencias políticas y religiosas hacen que Caro se oponga
    al ejercicio del poder de manera flexible. "El arte de gobernar
    es una especie de violencia que
    la razón hace a la naturaleza… El
    que no está conmigo, está contra mí".

            Para Caro
    sólo existen hombres de dos clases sobre la Tierra: los
    que piensan como él y los otros. Estos otros constituyen
    el enemigo. No hay términos medios, no hay
    transiciones, no hay lugares de conciliación. Bajo la capa
    de cada individuo de ideas ambiguas adivina Caro al adversario,
    al adversario velado que usa arteras industrias y
    prohibidas armas.

            La
    implementación del Estado de Sitio fue una de sus primeras
    medidas al declarar turbado el orden público en 1893; lo
    mismo que las restricciones a la Prensa. Para
    él, los gamonales de la pluma eran más fieros que
    los gamonales de garrote, siendo innecesario que la
    constitución dictara al legislador el deber de reprimir
    los abusos de prensa porque "es
    de derecho
    natural reprimir todo abuso".
            Bajo el suave
    dominio de la
    Constitución de 1886 y sus desarrollos legislativos,
    gestados en pleno acatamiento a la guía espiritual de la
    Iglesia Católica, los colombianos podían contar con
    la seguridad de que
    iban a reinar la paz y el progreso. Pero, los grupos que
    persistan en el error liberal a pesar de las incontrovertibles
    pruebas en su
    contra y las innegables bondades del sistema cristiano, deben
    someterse a las sanciones discursivas (prohibición,
    censura, excomunión) y políticas (prisión,
    destierro, ejecución) emanadas del régimen
    clerical. Monseñor Carrasquilla dice que puede
    establecerse como regla general que "el que es liberal, no es
    buen católico".

            "En realidad, la
    discusión nunca se ha desenvuelto con estricta
    reciprocidad. Moldeada por siglos de Educación religiosa,
    la mentalidad de los colombianos espontáneamente a favor
    de las ideas tradicionalistas de forma que todo aquél que
    aparezca cuestionándolas de algún modo, debe asumir
    la carga de la prueba".

    9.- Problemas
    Presentes (Económicos, Sociales,
    Políticos).

    Económicos: Moneda, Papel Moneda: la ley 39 de 1880
    autorizó al gobierno para fundar en la capital del
    país el Banco Nacional,
    que promovería el crédito público y
    sería el agente gubernamental en la ejecución de
    las operaciones
    fiscales. El público recibió con recelo sus
    billetes u el gobierno, abrumado por los gastos de la
    guerra y la falta angustiosa de moneda metálica en
    circulación, decretó que a partir del 1º de
    mayo de 1886 la unidad monetaria sería el billete de un
    peso del Banco Nacional.
    En abril de 1887 se les retiró a los bancos privados
    la facultad de emitir billetes, ordenándoles recoger los
    que tuvieran en circulación. En otra forma, entró
    ya el país oficialmente en el régimen de papel
    moneda de curso forzoso.

            Pronto las
    emisiones de billetes del Banco Nacional
    rebasaron los límites prescritos por el Congreso , hasta
    cuando finalmente, a mediados de 1894, estalló el
    escándalo, denunciado por la prensa radical.
    El Senado designó una comisión que dictaminó
    que, efectivamente se habían violado en numerosas
    oportunidades los reglamentos y los estatutos del banco en operaciones no
    autorizadas y aun ilegales, provenientes de imposiciones del
    gobierno que absorbió el capital del
    establecimiento para satisfacer las necesidades del erario. Se
    concluyó que de los 26 millones de pesos de la masa
    monetaria en circulación en 1894, el 42% provenía
    de emisiones ilegales de billetes. El Congreso ordenó la
    liquidación definitiva del banco. No
    obstante, la guerra civil de 1895 impidió que la orden se
    llevara a efecto.

            Aparte de esto
    hubo una seria oposición tanto de los comerciantes
    nacionales como de los exportadores con respecto al uso del Papel
    Moneda; estos se oponían debido a que tenían miedo
    de perder sus capitales al emplear el papel como forma de pago.
    Después, durante el años posteriores se dieron
    cuenta de que era la mejor manera de comerciar,
    devolviéndole a Caro el apoyo que le habían quitado
    debido a este problema.

    Sociales: Revuelta armada 1893; . La agitación
    política desatada en Bogotá a principios de 1893,
    cuando el pueblo se levantó y tuvo a la ciudad
    prácticamente en sus manos, en días de violentos
    asaltos y choques con la fuerza
    pública. Sólo el valor y
    prudencia del general Antonio Basilio Cuervo, ministro de
    Gobierno, lograron el retorno a la normalidad aun a costa de su
    vida. Caro, radicado entonces en Ubaque, no se movió de
    allí y puso en manos de Cuervo el problema de orden
    público. La bandera roja y negra de la Comuna se
    paseó entonces por Bogotá, como símbolo de
    inspiración de un movimiento que
    en cierta forma preludiaba brotes de inconformidad que en
    más de una ocasión han trastornado el proceso de la
    vida política y social.

            Episodio candente
    fue la revolución de 1895, a principios de ese año,
    cuando fuerzas liberales se levantaron contra el gobierno.
    Primero en Facatativá, luego Tolima, Cundinamarca,
    Santander y Boyacá (se declaró turbado el orden
    público), luego se extendió al territorio nacional.
    Caro llamó entonces al general Rafael Reyes y lo puso al
    frente de los ejércitos legitimistas. Reyes, con talento
    indiscutible de estratega y jefe militar, así no lo fuera
    de profesión, planeó una campaña
    relámpago que inició en La Tribuna, adelante de
    Facatativá, bajó al Magdalena, por él
    siguió hasta la Costa Atlántica y entró por
    allí a Santander, donde estaba el foco de la revuelta,
    acabando con la guerra en Enciso y devolviendo la paz al
    país.

    Intento de Secuestro: el 22
    de enero de 1895, hubo una reunión secreta para secuestrar
    a Caro, aquí estaban involucrados algunos lideres
    liberales. El plan fue
    descubierto.

    Edo de sitio 1893-1895: la implantación del Estado de
    Sitio fue una de sus primeras medidas al declarar turbado el
    orden público en 1893. (Revuelta de la Comuna). Luego en
    1895 declara Estado de Sitio en el mes de enero, el cual fue
    levantado posteriormente el 9 de noviembre del mismo año.
    Quedando restablecida la normalidad legal, pero no la
    política.

    Gobierno de los 5 días. Otro episodio que hay que recordar
    fue el del llamado gobierno de los Cinco Días. Caro se
    había retirado a la hacienda de Casablanca, en
    Sopó, y había dejado encargado del gobierno al
    general Guillermo Quintero Calderón, como designado que
    era éste a la Presidencia.
            
            Quintero
    Calderón había tomado ya el partido de los
    conservadores históricos, y nombró un gabinete
    encabezado por Abraham Moreno, figura destacada de éstos
    en Antioquía. Al darse cuenta Caro de la
    orientación que se quería dar al gobierno, dando la
    espalda a los nacionalistas reasumió el mando en
    Sopó y puso en manos del general Manuel Casabianca,
    nombrado por él ministro de Gobierno y de Guerra, el trabajo de
    restablecer el orden, dentro de los marcos de inspiración
    nacionalista de su gobierno. De nuevo por mano ajena Caro
    restablecía la normalidad. Y hay que recordar que por esos
    días coincidieron en Sopó, Caro y San Ezequiel
    Moreno, quien venía de Casanare camino a Pasto, y quien
    pasó allí con su amigo unos pocos días.

    Periódicos Imprenta: el 4 de agosto de 1893, fueron
    clausurados los periódicos El Contemporáneo,
    El 93 y El Relator de Santiago Pérez, jefe
    del radicalismo liberal (fracción que había
    expropiado el periódico El Tradicionista), y por
    decreto 1227 de 1893, del 14 de agosto, mediante el cual se
    castiga una conspiración, fueron expulsados del
    país: Santiago Pérez y Modesto Garcés;
    confinados en Ibagué: Emilio Santofimio y, en San
    Andrés y Providencia, Juan de Dios Uribe, Abraham Acevedo,
    Javier Vergara Esguerra y Deudoro Aponte. A la vez se
    prohibió la libertad de
    Imprenta para los escritos políticos; (esta era una de las
    pocas formas de oponerse sin ser descubierto) incluso el gobierno
    lo tenía vedado.

    10.- Logros (Económicos, Sociales,
    Políticos).

    Constitucionalidad: uno de los logros más importantes del
    Gobierno de Caro fue el uso constante de las leyes para crear la
    base de la constitucionalidad colombiana (recordando que
    él fue el artífice de la Constitución de
    1886). Caro supo usar la legalidad a su favor, conocía
    bien la Constitución, es por eso que a mi juicio este es
    uno de los logros más importante, ya que logró
    afianzar el status legal del país.

    Papel Moneda, Banco Nacional: con respecto a esto Caro
    logró que finalmente se le diera la estabilidad al uso de
    Papel Moneda como forma de pago; a pesar de los problemas que
    enfrento, se llegó a establecer una economía de
    mercado dentro de
    un país todavía naciente. Le dio un Piso Financiero
    a Colombia.

    Ejército. Durante este periodo se logró que el
    ejército comenzará a profesionalizarse, se crea la
    Academia de Formación en 1895, se eleva el presupuesto
    asignado a los militares, el contingente llega a su máxima
    expresión: 10000 hombres (el máximo autorizado por
    vía constitucional).

    Desarrollo
    incipiente de la industrialización: Colombia comienza a
    consolidarse como un exportador de Café, Tabaco, Minerales
    Preciosos; y a la vez comienza a sentar las bases de la posterior
    industrialización.

    Monopolios: Minería, tabaco, armas,
    fósforos, aguardiente: al tener el Gobierno el monopolio de
    todos estos rubros, el Estado
    empieza a perfilarse como una Empresa, es
    decir, comienza a adoptar medidas proteccionistas, típicas
    del Welfare State, en la cual el Estado es
    un empresario más del país.

    Iglesia: Caro logró colocar a la Iglesia colombiana en
    él puesto que se merecía estar, al mando de las
    instituciones
    educativas, y con un amplio poder de influencia en las
    políticas gubernamentales.

    11.- Abandono del Poder (Elecciones, Golpe,
    Referéndum).

            Durante
    septiembre de 1896, es lanzada la candidatura presidencial del
    General Rafael Reyes; paralelamente se proclama la
    reelección de Caro. A mediados de 1897 Miguel Antonio
    resuelve no aceptar su candidatura presidencial para el periodo
    1898-1904. Caro llega a inclinarse hasta por un posible acuerdo
    con el liberalismo,
    por resentimiento en contra de los conservadores y su jefe
    Marceliano Vélez. Lanza la candidatura de Antonio
    Roldán (Nacionalista) para presidente y el General Sergio
    Camargo (liberal) para vicepresidente, el proyecto fracasa
    por el rechazo del directorio liberal. Caro busca entonces una
    nueva fórmula: Pedro Antonio Molina y Olegario Rivera y la
    propone a los electores. Pero la desecha el propio caro, debido a
    los coqueteos de Molina con los conservadores. Caro, previendo
    una derrota, postula las candidaturas de Manuel Antonio
    Sanclemente y José Manuel Marroquín para la
    presidencia y vicepresidencia de la República,
    respectivamente (buscando una fórmula que pueda lograr la
    aceptación de sus rivales mayoritarios).

            La baraja
    conservadora fue con los nombres de Marceliano Vélez y
    Guillermo Quintero Calderón, la liberal con los de Miguel
    Samper y Foción Soto, la nacionalista con los de Manuel
    Antonio Sanclemente y José Manuel Marroquín. Se
    impuso esta última, el día 4 de julio de 1898, el
    Gran Consejo Electoral verifica el escrutinio de los votos
    emitidos por las asambleas electorales. El doctor Sanclemente
    obtiene la presidencia con 1606 votos y Marroquín obtiene
    la vicepresidencia con 1693 votos; durante este gobierno hubieron
    funestos: Guerra de los Mil Días, golpe del 31 de julio de
    1900, cuando Marroquín amarró a Sanclemente y se
    quedó en el poder, y la pérdida de
    Panamá.

    12.- Tendencia General del Régimen (Democracia/Autoritarismo, Rasgos, Diferencia con
    el Régimen anterior).

            Como Tendencia
    general del Régimen, se puede decir que fue un
    Régimen Autoritario, debido a que Caro durante todo su
    mandato no hizo más que exterminar a todos sus disidentes
    y oponentes. Lo cual a mi parecer fue bastante necesario, para
    lograr darle estabilidad a un país en crisis, para
    lograr mantener a toda costa la Regeneración, la cual creo
    que fue un elemento primordial en la consolidación de la
    actual Colombia, sobre todo a nivel jurídico, ya que el
    producto
    más grande de este movimiento, La Constitución de
    1886, logró permanecer por espacio de 105 años,
    algo bastante importante desde el punto de vista de los estudios
    constitucionales comparados. Considero también que este
    Régimen es continuidad del Régimen anterior, en el
    cual gobernaba Rafael Nuñez, el cual era co-fundador de la
    Regeneración.

            Para presentar
    una síntesis de las ideas políticas en Colombia,
    para este régimen, quizás sean convenientes unas
    palabras características:

    1. Creencia de que existe un designio divino que
      rige la sociedad y la
      conciencia
      humana, forjando una cadena de derechos y deberes que
      liga a grandes y humildes, a los vivos y a los muertos. Por
      esta razón los problemas políticos son en el
      fondo problemas religiosos y morales.
    2. Cierta creencia en la variedad de la vida
      humana, frente a los limitativos designios de uniformidad,
      utilitarismo e igualitarismo de la mayor parte de los sistemas
      radicales como el liberalismo
      y el socialismo.
    3. Convicción de que la sociedad
      requiere órdenes y clases, es decir, jerarquías.
      La única igualdad
      entre los hombres es la
      moral.
    4. Creencia en que la propiedad y
      la libertad
      están indispensablemente unidas. La propiedad es
      una garantía de la libertad y
      la nivelación no implica progreso
      económico.
    5. Fe en las normas
      consuetudinarias, en la tradición como única
      manera de derrotar las tendencias anárquicas del
      hombre.
    6. Reconocimiento de que Cambio y
      Reforma no son cosas idénticas y que las innovaciones
      son con mucha frecuencia devoradores incendios,
      más que muestra de
      progreso. La sociedad debe
      cambiar, pero su conservación exige cambios lentos. La
      piedra de toque de un estadista es su capacidad de descubrir el
      sentido providencial de la sociedad.

    Caro tenía la convicción, y así lo
    expresó reiteradamente , que el poder soberano tiene
    origen divino y que la política sin bases morales y
    religiosas carece de fundamentos sólidos. Afirmó
    también que la cohesión de una sociedad tiene su
    mayor soporte en la tradición política y cultural
    española. La independencia
    de España fue justificada, pero esto no obligaba a una
    absoluta ruptura con el pasado, con un pasado en que
    España había edificado para estos países una
    civilización y unas instituciones
    excelsas: lengua,
    valores
    morales y religiosos, derecho, civilización material,
    etc.

            De haber actuado
    con estricta lógica, su convicción de que todo
    poder viene de Dios y su reverencia hacia la tradición
    habrían llevado a Caro a una posición
    monárquica. Como tal postura era imposible para un
    patriota, ya que la independencia
    se había hecho contra una monarquía y en Colombia,
    como en general América, no existía ni una nobleza,
    ni una aristocracia con milenaria tradición de fueros y
    derechos, ni
    siquiera existía la riqueza que el boato y los rituales
    que una monarquía requiere, la única alternativa
    que quedaba era la organización del Estado sobre las bases
    del modelo
    republicano, liberal y democrático.

            También
    considero que Miguel Antonio Caro fue el único pensador
    conservador de Colombia en el siglo XIX.

    BIBLIOGRAFÍA
    Academia Colombiana de la Historia. 1986. Historia Extensa de
    Colombia
    . Volúmenes: I, III, IV, VI, VII, VIII, IX, X,
    XI, XII, XV, XVI, XVII. Bogotá. Editorial Lerner.
    Bergquist, Charles. 1979. Café y Conflicto en
    Colombia. 1886-1910
    . New York. New York University.
    Caro, Miguel Antonio. 1986. Estudios Constitucionales y
    Jurídicos
    . Bogotá. Instituto Caro y Cuervo.
    –.– . 1982. Escritos Políticos.
    Bogotá. Instituto Caro y Cuervo.
    –.– . 1956. Escritos sobre Cuestiones
    Económicas
    . Bogotá. Publicaciones del Banco de
    la República.
    Casas, Ulises. 1981. Lucha de Clases en Colombia.
    Bogotá. Publicaciones del Banco de la
    República.
    Hernández, Isabel. 1975. Miguel Antonio Caro:
    Vida y Obra
    . Bogotá. Instituto Caro y Cuervo.
    Torres, Guillermo. 1956. Miguel Antonio Caro, su
    personalidad
    política
    . Bogotá. Instituto Caro y Cuervo.
    Valderrama Andrade, Carlos. 1992. Revista Credencial
    Historia
    , Tomo III, enero-diciembre, Nos. 25-36.
    Bogotá.
    Valencia Villa, Alejandro. 1992. El Pensamiento
    Constitucional de Miguel A. Caro
    . Bogotá. Instituto
    Caro y Cuervo.
    Villegas, Jorge y Yunis, José
    .1979. La Guerra de
    los mil días
    . Bogotá. Carlos Valencia
    Editores.
    http://www.presidencia.gov.co
    http://www.bachue.banrep.gov.co.
    http://www.cuanbog.uanarino.edu.co/

            

    Palabras Clave: Miguel Antonio
    Caro, Colombia, Formas Políticas, Ciencia
    Política.

    Trabajo realizado
    por:
    Oswaldo Ramírez
    Colina
    Osram[arroba]telcel.net.ve

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter