- Filtros
percoladores - Lodos o fangos
activados - Lagunas
aireadas - Zanjas de
oxidación - Desinfección
- Evaluación de impactos
ambientales del tratamiento secundario - Conclusiones
- Referencias
bibliográficas - Aplicaciones
- Anexos
Resumen
El estudio desglosa los procesos del
tratamiento secundario de aguas, las soluciones
básicas para controlarlas, y describe esencialmente cada
uno de los procesos antes mencionados, se adjuntan
consideraciones de impacto ambiental, así como los
límites
permisibles de contaminantes en el agua ya
tratada para el consumo
humano.
Tratamiento para el cual el control de olor
ha sido un factor limitante en su diseño
y operación, por lo que encontrar maneras de modificar los
diseños y la operación para mitigar los olores y
cumplir con las exigencias de las comunidades vecinas, se ha
tornado un factor de estímulo para adoptar nueva tecnología en las
plantas de
tratamiento de aguas
Descriptores: Filtros percoladores/ Lodos
activados/ Lagunas de aireación/ Zanjas de
oxidación/ Desinfección física y química/ Evaluación
de impacto ambiental
Los procesos biológicos más utilizados son
los de fangos activados y filtros percoladores. Son muchas las
modificaciones de estos procesos que se utilizan para hacer
frente a los requerimientos específicos de cada
tratamiento. Otros procesos biológicos incluyen a los
estanques de estabilización con o sin aireación
mecánica. El diseño de estos
procesos y las instalaciones requeridas para su ejecución
se discuten detalladamente a continuación.
(1) "El concepto del
filtro percolador nació del uso de los filtros de
contacto, que eran estanques impermeables rellenos con piedra
machacada. En su funcionamiento, el lecho de contacto se
llenaba con el agua
residual desde la parte superior y se dejaba que se pusiese en
contacto con el medio durante un corto período de
tiempo. El
lecho se vaciaba a continuación y se le permitía
que reposase antes de que se repitiese el ciclo. Un ciclo
típico exigía 12 horas de las cuales había
6 horas de reposo. Las limitaciones del filtro de contacto
incluyen una posibilidad relativamente alta de obturaciones, el
prolongado período de tiempo de reposos necesario, y la
carga relativamente baja que podía
utilizarse"
En el filtro percolador el agua residual es roseada
sobre la piedra y se deja que se filtre a través del
lecho, este filtro consiste en un lecho formado por un medio
sumamente permeable al que los microorganismos se adhieren y a
través del cual se filtra el agua residual. El
tamaño de las piedras de que consta el medio filtrante
está entre 2.5 – 10cm de diámetro, la
profundidad de estas varía de acuerdo al diseño
particular, generalmente de 0.9 – 2.4m con un promedio de
profundidad de 1.8m. Ciertos filtros percoladores usan medios
filtrantes plásticos con profundidades de 9 –
12m. Actualmente el lecho del filtro es circular y el residuo
líquido se distribuye por encima del lecho mediante un
distribuidor giratorio, antes el lecho era rectangular y el
agua residual se distribuía mediante boquillas
rociadoras fijas cada uno de los filtros posee un sistema de
desagüe inferior el cual recoge el agua tratada y los
sólidos biológicos que se han separado del medio,
este sistema de desagüe es importante tanto como
instalación de recogida como por su estructura
porosa a través de la que el aire puede
circular.
Página siguiente |