¡Cristo!, Amor de Sencillez

Siluetas de
Ángeles

Cantares

Admiro a Cristo en la vastedad
de los poemas,

Admiro su túnica, sus manos tersas y
toscas,

Admiro su silueta disolviéndose en
el mar.

¿Qué es lo que me sucede? Yo
le observo y le hallo tentador.

La vastedad de su sonrisa me enrojece; tan
bello es con su túnica blanca.

Le he observado y he calmado mi
espíritu: el ímpetu de las olas son
vastas.

Yo reclamo amor en soledad, y de este amor,
sólo hay paz.

Busco amar a Cristo en soledad pero hay
tanta gente esperanzadora.

¿Qué es lo que me sucede? Yo
busco con dolor su cruz;

Y su cruz es

Vacío del alma.

Amaré a Cristo
siempre…

He Admirado a Cristo

La solidez de mis costumbres es

Eterna.

¡Cristo!, amadme en la sencillez de
mi corazón.

¡Cristo!, deseadme paz en la
sencillez de mi corazón.

Buscando amores prohibidos he hallado
dulzor

Pero;

Hallando a Cristo

Esporádicamente

No me confundo;

Me jacto de amor.

La solidez es vasta; la siembra
también.

Es continua la vida y la vida es
sagrada.

Yo estoy acostumbrado a vivir pero este
vivir es

De sencillez.

¡Cristo!, amadme en la turbulencia de
una rosa.

¡Cristo!, deseadme felicidad en la
turbulencia del mar.

Yo deseo esparcirme como el polen y
ratificar mi vida en vos.

Principio de Amor

Alegando amor yo conservo la
vida:

Hay abejas que comen sal del Reino de
Dios;

Pero también hay arcángeles
que han dado la vida.

La sutileza de amar es
"pacificaste";

Me considero un poeta enamorado de
Cristo.

Bendecidme entonces.

Yo busco la sutil beatitud del
mar:

Las almas gemelas son enviadas por
Dios;

Y nuestro Padre Celestial nos calma de
esperanza.

¿Qué es lo que nos
sucede?

Alabemos a Cristo entonces:

¡Eres un sol de atardecer en el
Pacífico!

¡Eres el torrente de sangre de mi
vena aorta!

¡Eres el látigo que me castiga
por mendigar amor!

¡Eres la liturgia del campesino que
muere luchando por unos mendrugos de pan!

¡Eres divino!

¡Cristo!,

Yo te encuentro célebre;

Y de aquello,

Vos has engendrado en mí

Un martirio

Que no culmina

Nunca…

Sinceridad de Cristo

La elocuencia es divina en
Cristo:

Su lenguaje es atisbamiento de
abejas,

Su disolución es armonía de
amor.

Yo le conozco y le escribo poemas de
dulzura.

¿Qué es lo que habrá
de padecer?

Por Hijo de Dios ¿habrá de
padecer?

Por cierto.

Busco la eternidad y hallo razones para
amar.

Una mariposa ha entrado en mi
poética;

Es mariposa nocturna;

Le observo y le escribo un
poema:

"Vos serás crucificada".

A Cristo le amo, y a Cristo, le
canto.

Hay voces que continúan su
canto;

Y este canto

Es un canto de mariposa que, de nocturna, a
tibieza de amanecer de convierte.

La mariposa soy yo…

Celestial de Cristo

La vida es tenue, y la
tenuidad, es sagrada:

La vida se contrapone a sí
misma;

Y de este modo: este Dios en carne
viva;

Cristo es Dios hecho realidad.

La virulencia de la maldad no es
Cristo;

Cristo la combate.

Yo canto amor a Cristo

Porque amo a Cristo.

Cantando estamos en
añoranza:

Las olas son hermosísimas y el
cabello de Cristo es aún más bello.

Sonrío y le observo con su toga
lumínica;

Me observa y sonríe:

"Eres un Mensajero; mi
Hermano…"

Yo feliz de la vida canto;

Cantando estoy siempre.

Celestial de Amor

Amar a Cristo y desearle en la
cruz:

Yo le desclavaría pero
huirían los pájaros.

Me lamento y me sincero: los perros
aúllan la muerte de Cristo.

Sed paciente: habrá de volver y
habrá de juzgarnos.

La vida se impacienta por vivir: un
niño naciendo, las nubes borroneadas, la
lluvia;

Todo se dispersa en la situación
límite

De amar a Jesucristo.

Yo le amo intensamente: ¿por
qué no amarle?

Yo daría todo mi ser por estar en su
crucifixión;

Pero yo tengo cuarenta y cuatro años
y ya Cristo fue martirizado; y dolor me dio
observarle.

Está muerto y resucitado al
fin.

La impaciencia de vivir es sagrada: un
niño nacido en la pobreza:

¡Dos pastorcitos!; o tal vez
más; yo no me incluyo porque aun no
nacía.

¿Qué demencia es la
mía?, ¿qué es lo que me sucede?

Amar a Cristo es defender causas
pías.

Yo le sigo hasta la muerte pero no estuve
allí en su crucifixión.

Habría luchado por él;
habría dado mi sangre; pero de este modo lo quiso
Dios.

Ahora yo canto poemas a Cristo; sólo
canto…

Canto de Amor

Aveces amarle es
terrible:

¿Desearle?, ¿amanecer?,
¿contenernos?

Cristo es terrible. Yo le amo con todo mi
ser;

Pero, las cosas son de modo no
esperanzador.

Hay muerte por doquiere pero Cristo es mi
baluarte.

Yo le amo y le canto desde el
jazz.

¿Qué es lo que deseo para
mí?: humildad.

¿Qué es lo que deseo para
vosotros?: humildad.

Nada hay tan sabio como la cruz.

Yo poseo una cruz de alpaca, que cubre mi
cuerpo;

Mi madre me la obsequió, cuando yo
era un joven adulto.

Ahora estoy en mi propio funeral y millones
de ángeles lloran.

¿Qué es lo que sucede? Hay
tanto niño muerto por las calles.

Hay tan desgracias que yo no comprendo el
porqué.

Hay basura pero también canto de
amor:

Hay belleza; es cierto; pero
"pucha" que cuesta encontrarla.

Yo canto amor y este amor es a Cristo;
¡el Único!;

Su belleza es abismal; todo lo contrae como
un sismo divino.

¿Habrá de acaecer el tiempo
sin disturbios?

Yo me lamento de los niños muertos;
¡son angelitos!

Me lamento de tanta destrucción.
Pero, este es un canto de amor.

Y Cristo es…
¡amor…!

Cuestiones de
Armonía

Yo deseo amar la veracidad del
cosmos:

Cristo es el cosmos y no hay otro
cosmos.

El que se identifique con Cristo
podrá identificarse con el cosmos;

Esta es la única manera.

"Yo soy Cristo, soy un cosmos".

La verdadera realeza radica en
Dios;

Y todos dependemos de Él.

Yo soy Cristo y Cristo me ama porque llevo
su cruz.

¿Le habré de amar
siempre?

Obviamente: que sí.

Yo soy de Cristo; soy su espejo
marino.

Las consecuencias de la vida son
vastas:

Los elementos sucumben a la
esperanza;

Y la esperanza es Cristo es su arena dejada
en la huella.

¿Qué es lo que digo?: Cristo
es el pie.

Me permito adentrarme en el
alma;

Me permito escanciar el vino y beber de su
sangre.

Yo no bebo vivo, tampoco carne;

A Cristo le conozco por el
sufrimiento.

¡Cristo!, no me
abandones…

Abandonado de Amor

Deseo amar y
tolerar pero…

Yo amo a Mauricio; le amo con
intensidad.

Su voz es tan suave; su peregrinar es
tremendo.

Voy cantando pro la vida poemas de
Mauricio.

Soy Cristo y provengo de todo
lugar:

Estoy juzgando a la
humanidad,

Y le juzgo con
entereza;

Algunos al Paraíso; otros al
infierno;

La inmensa mayoría al
purgatorio.

Me desafían las
masas:

Soy el Hijo de Dios; ¡el
Único!; soy en Ungido.

Uribe es un poeta que me canta y yo le
agradezco su canto;

Fue un pecador;

Pero el Padre le crucificó y es
hombre nuevo; ha nacido desde el vientre divino.

¿Qué es lo que deseo
yo?

Deseo amarle; deseo que, en hombre
puro, siempre esté en el meollo de todo el
existir.

Que sus alabanzas sean múltiples
y su esperanza no culmine.

Me canto y os canto; yo que fui el
cordero…

Infinidad de
Amor

Tolerancia de Amor

La vida es tan disímil,
la vida es sagrada, la vida es atestante, la vida es
inverosímil:

Pero yo canto a Cristo en la
dimensión abismal del amor.

Amar a Cristo es cantar belleza;
¡amarle!

¿Qué es lo que me sucede? Yo
busco amor y hallo a Cristo.

¿Qué es lo que nos sucede?
Buscamos amor pero hallamos tristeza.

Hay esperanza, es cierto; pero
poquísima;

¿Qué es lo que habrá
de acaecer?

¿Un sismo, lluvias torrenciales, el
acabo del mundo?

Yo canto esperanza y amor, no
destrucción.

La belleza de vivir es
espléndida…

Esperando Amor

La solución de la vida
es vivir en esperanza:

La vida es solicitud de amor.

Yo deseo amar siempre en vos.

¡Cristo!, sois eterno amante de los
pobres;

Sois mi guía, mi Maestro que nos
protege en la temeraria invasión de las olas.

Yo deseo amar a Cristo y entregarle mi
corazón:

Yo deseo su desfallecer en todo
ámbito.

Le busco y le hallo. Le amo con
sofisticación.

¿Qué será de
mí?

Hay tanta nobleza en el mundo.

Yo canto amor en vísperas de
"Fiestas de Crucifixión".

Encantamiento de Amor

La belleza es morir en brazos
de las olas;

La belleza es vivir en los brazos de las
rocas:

Cristo es un océano, cósmico;
imbatible; sofisticado.

¿Qué soy yo?

Me alegro de vivir cantando porque, el
cantar, es místico.

Yo deseo amor porque, amor y deseo, son
cosas dispares.

Voy navegando por el mundo y por el mundo
navego.

¿Qué es lo que
deseo?

Desearía amar siempre
pero…

Hay voces tan disolutas, hay
tentaciones.

Yo busco el amor y este amor es
indisoluble.

¡Cristo!, buscadme crucificado como
vos.

¡Cristo!, dadme de comer ya que no
tengo trabajo.

¡Cristo!, dadme pescado ya que hambre
tengo.

¡Cristo!, dadme pan ya que tengo
hijos…

Vulnerable soy y miento ante la
muerte;

No
moriré…

Amor de Amares

Una luciérnaga es
taciturna,

Un elefante muere:

Las criaturas son elegantes en su
hábitat:

¡Amadlas!

Yo soy creyente en Cristo y le
amo.

Yo vivo la vida y le amo con
fervor.

¿Qué es lo que me sucede si
grito "te amo"?

El suceder es bienestar de
todos.

La vida se sucede
inexplicablemente,

La vida se sojuzga en la
misericordia,

La vida es complementaria a la vida
misma,

La vida se sustituye a la variedad de tipos
que engendra Dios.

Yo le amo con intensidad; amo a
Cristo;

Y en este amor

Hay palomas que escriben:

"Viva la libertad".

Soy testimonio de fe.

Alegoría de Cristo

La vastedad de Cristo es la
vastedad de su ausencia:

Los pájaros picotean su
túnica;

Y los pájaros errados en su
vuelo

Hallan sus nidos.

Los eventos proclives al bien son
nefastos:

Hay que vivir en plenitud el amor;
¡siempre!

¿Qué es la vida?
¿Qué dominio es la vida?

Yo me sostengo de pie pero de alma me
congrego de pié también.

La vida es pulcritud de los sentidos: la
vida es sojusgamiento.

Yo vivo rodeado de pájaros que huyen
a sus nidos;

Y esos nidos

Son mi poética.

¿Qué será de
mí?

¿Qué será de mí
amando a Cristo?

Yo le sigo y le prosigo;
siempre.

Devastación de
Cristo

La vida es sojuzgar la
entelequia de vivir:

Hay mariposas que reposan en mi
armario

Pero también hay un Cristo que
reposa alarmado de mí.

¿De qué modo
sufre?

¿Por mis pecados?, ¿por mi
apariencia?

Yo sólo sé que fui pecador y
que evito con toda mi alma el pecar.

Sin embargo: hay aves que imitan el canto
de un profano poeta.

La sustitución de la vida es
analógica:

La devastación de Cristo no es su
cruz;

Son los pájaros que huyen en matanza
por reyes de esta tierra.

¡Cristo nos
vengará!

¡Cristo, el Ungido!

¡Cristo, el
Unigénito!

Yo juzgo la vida y el sojusgamiento es
atroz.

¿Qué tenuidad es la que
poseo?

La tenuidad del amor.

Yo Busco Edén y Edén
está en mis manos…

Amor de Cristo

La sinceridad de Cristo es
tremenda:

Murió por su sinceridad.

Yo le amo y le devoro lentamente en cada
poemario.

¿Qué haces vos por
amarle?

La disonante realidad es vasta y la
vastedad es de Cruz;

Las cosas adquieren la sustancia de Dios y
Dios es Padre.

Yo disimulo el amor que poseo ya que soy su
testigo,

Pero no disimulo en los poemas.

Hay tantas sectas y tan poco amor por
Cristo;

Yo no me adscribo a nada; me adscribo al
amor celestial que conlleva mi corazón.

Seguidme y le hallaréis sentado
yendo este poemario.

Las penurias de la vida son
vastas;

Pero el cristianismo es vasto como el
océano.

Yo he caminado sobre las olas en la
temperad del Pacífico;

Yo soy de Chile; de la convulsión
social;

Y Cristo busca líderes
espirituales

Que conlleven a la
revolución

A un estado de sagrada
efervescencias.

¡Revolucionarios del mundo!, amad a
Cristo.

Sinceridad de Holocausto

La ignorancia de la belleza de
pensar es vasta:

Hay olas que golpean mi pecho; y estas olas
son vastas también.

Yo adoro la soledad del mar pero me aterro
de la soledad;

He sufrido demasiado;

En Cristo estoy contento pero mi cristal de
Cristo es efímero;

No me alimenta pero me
atormenta.

Yo tengo sinceridad pero temor;

Pavor a convivir con las hormigas en una
vasta ciudad tentacular:

¡Santiago de Chile!, ciudad que
destruye.

Cristo -yo murmuro.

Amadme…

Seguiré clamando justicia por el
mundo;

Y por el mundo

Habré de clamar amor a
Cristo.

Yo le sigo hasta el fin del
tiempo;

Y mi enfermedad

Que es devastadora

No habrá de calmarse

Porque yo a Cristo

No le he pedido milagros para
mí.

Sabed que soy cauto,

Y canto por cantar.

Nada recibo a cambio;

Sólo satisfacción de
amar.

Las flores huyen de mi jardín al
tiempo que fenezco…

Sensación de Amor

Yo amo a Cristo y le amo como
camelia.

Le amo como rosal espinoso y
curvilíneo en corona de esponsal.

Yo amo a Cristo en la letanía de los
abismos:

Soy camelia que huele a cactus.

¡Soy!

Me infancia es de infamia pero mi vejez es
de beatitud.

Yo doy toda mi carne por amor a los rosales
y a los látigos y a la vergüenza suplicante de
Israel.

Soy judío pero cristiano;

De este modo la luna emerge.

Estoy temeroso de amar, temeroso de los
ríos, temeroso de los océanos;

Fui un océano y un cosmos; pero un
océano más bien;

Ahora soy creyente nada
más.

Doy testimonio de fe y de
amargura.

Solidez de Amor

Amando a Cristo yo encuentro
esperanza:

Las olas son estallidos que nos socavan y,
en evanescencia,

Son funestas caracolas de amor.

Yo deseo amar en sencillez,

Deseo amaros en humanidad,

Deseo a Cristo con todo mi
corazón,

Deseo paz.

¡Cristo!, venid a mí con toda
la potestad de las nubes.

¡Cristo!, bendecidme con la maravilla
de la lluvia.

¡Cristo!, asemejaos a mi
corazón que rebosa de amor.

Yo amo en dislocación de
corazón,

Yo amo en devastación de mi lengua
voraz,

Yo amo y le amo con toda mi
espiritualidad.

¡Cristo!, sed vos…

Amando a Cristo

Amando, yo
confío,

Amando, yo determino,

Amando, yo me disloco,

Amando, soy feliz.

La sabiduría es la Vida

Y la Vida es Cristo.

Qué sencillez,
¿no?

Amando, yo me figuro el mar,

Amando, yo me deslizo por el
mar,

Amando, yo me alimento del mar,

Amando, yo me someto al mar.

La consecuencia de la vida

Es un cometa

Que no evoluciona;

Es un cometa no crucificado.

La sencillez es tremenda:

Hay peces que nos atosigan;

¡Peces enamorados de Cristo Dios
Vivo!

Yo me enamoro de Cristo y la vida, la vida
doy.

Es el Hijo y yo…

Dios es Cristo

Cristo es Dios y Dios es
Cristo; he allí el misterio.

El único Hijo de Dios vino al
mundo;

Y al mundo dio sus yagas.

Fue resucitado por el Padre y el Padre es
su testigo.

Cristo es tremendo.

Yo le conozco y le hallo
hermoso.

Su túnica, su rostro albo, su lozana
piel.

¿Qué es lo que
deseo?

¿De qué modo me
manifiesto?

Hay situaciones
inverosímiles;

Una de ellas es la muerte;

Pero Cristo es veraz en todo y culmina con
todo.

Absorbo las materias divinas ya que yo soy
testigo.

Admito equivocarme ya que pecador fui y de
continuar pecando continuaré.

No admito nada, que, verídico no sea
de Dios;

Pero Dios es inmarcesible.

Me comprende y yo le comprendo;

Pero Cristo es Dios y al mismo tiempo no lo
es.

¿Entonces?

La respuesta radica en las
Escrituras.

Cristificación

Dios ha vivido en Cristo y
Cristo ha vivido en la multitud.

Dadnos ha vivir la vida de Cristo en la
cristiandad;

La vida es Cristo, no hay otra
alternativa;

La vida es Cristo, lo repito; Cristo, una y
otra vez.

Yo adoro a Cristo porque Cristo es
sabiduría en pleamar.

¿Qué es lo que significa
esto?

La significancia es vasta.

Yo adoro a Cristo y su geometría es
euclidiana;

Yo lo explicito porque fui experto en
geometría.

Pude convertirme en arquitecto pero
preferí la poética.

¿Me desconsuelo?; pues
no…

¡Cristo!, es verificable en mi
corazón.

¡Cristo!, es vivenciable en mi
alma.

¡Cristo!, se sumerge y vive en
mí.

¡Cristo es
sabiduría!;

¡Cristo!, ¡Mi
Cristo…!

Amor de Amanecer

Un día, una flor,
encaneció:

Cristo era la flor.

Un día, un poeta,
encaneció:

Cristo era el poeta.

La fiesta de los sentidos es
totalitaria:

La vida nos propaga en su
infinitud.

La vida es incertidumbre;
pero…

En Cristo,

La plenitud es vida y yacer en
Dios.

Escucho el pleamar y busco
acontecer.

Las distancias son devastadas por
Cristo;

Y de Cristo

Hallo

Ciertas razones,

Ciertas frases,

Ciertas interrogantes…

Yo admito amargura,

Pero no admito desesperanza.

Hay ternura en mi
corazón;

Pero también hay
desolación.

La búsqueda de la verdad es
infinita.

Yo poseo una máscara y un
pentagrama;

En la máscara

Están mis pecados;

Y en mi musicalidad

Hay devoción;

¡Hay Cristo!

¿Qué es lo que me
sucede?

Yo no comprendo la realidad; yo comprendo
el ser.

Démonos a la devoción de un
pleamar en singularidad;

Y de este pleamar;

Habréis de hallar

Encantos y desolación.

Escuchadme y me
hallaréis…

Flor de Situaciones

Un día yo vi la vida
alegremente:

Era Cristo, era la Vid, era la semejanza
entre el otro y el aquel.

Yo le vi amando a los
desposeídos,

Le vi alabando a Dios;

Y en su alabanza,

Había armonía.

Un día yo busque y hallé
esperanza;

Y era Cristo el cometa fugaz.

¡Cristo!, en majestad.

Las situaciones son
inverosímiles;

Ya que Cristo es
inverosímil:

Su túnica, sus maneras de
profetizar.

Cristo es Hijo de Dios y Dios es
Hijo;

No hay otra manera de
explicar…

Yo le he observado caminar por el
prado;

Y en su belleza hay…

Pleamar…

Figuración

Me detengo a observar la
vida;

Y la vida se detiene a
observarme.

Hay un Cristo que desconozco pero que
admiro.

Hay una elocuencia en su
paladar.

Hay una ruta de alquitrán y flores
bellísimas.

Un Cristo hay y en la modalidad del
amor;

También hay vida.

¿Qué es lo que deseo
yo?

¿Qué busco?

Yo encuentro fraternidad en todos
nosotros;

Hallo razones para existir.

No tengo disculpas, tengo expresiones de
amor.

Hay un Cristo por doquier,

Y este Cristo

Está incrustado

En mi corazón…

¡Salvadme de la maldad!

¡Salvadme…!

Hay una noche colmada de
meteoritos;

Y cada meteorito

Es un Cristo…

Salvación del Alma

Daría mi vida, por
amar, siempre.

Siempre estoy amando:

A mis hijos, que son cristos.

Yo no renuncio a mi Evangelio;

Pero mi Evangelio es la rutina de cantar a
Cristo.

Admiro la vida y la vida no me
admira;

La vida me asimila.

Yo voy buscando siempre
años

Y este amor es sabiduría.

¿Qué ofrecéis
vos?

¿Calumnias?,
¿orfandad?

Cristo es veraz; y de su
veracidad,

Hay retoños como hijos
nuestros.

Yo le amo intensamente; y de a su
amor,

Sólo hay pureza.

Amémosle…

Demostración de
Amor

La vida es una herencia y de
esta vida hay progreso.

¿Qué es lo que nos
sucede?

¿De qué modo nos
verificamos?

Hay abundancia de amor.

También hay abundancia de
vida.

Yo no culmino la mía, yo
continúo.

La pereza es inexistente: Cristo es mi
Pastor;

Yo le debo todo: mi hambre, mis penas, mis
perjuicios, mis condenas;

Todo lo he dado por Él.

¿Qué es lo que
sucede?

¿De qué modo nos adentramos
en el abismo?

Nos sumergimos en el todo; y
acontecemos.

Yo doy testimonio de fe; doy amor a
Cristo.

Seguidme…

Lucha de Amor

Me invade la vida y la vida es
Cristo.

Me atormentan los clavos y los clavos son
la vida.

De soslayo observo la luna y en la luna hay
un Cristo.

Me figuro amando,

Me figuro perseguido,

Me figuro crucificado,

Me figuro agónico.

¡Matadme y
resucitaré…!

Cristo es mi cónyuge; estoy casado
con Él.

Verificad mis yagas; somos en Cristo uno
solo.

Yo observo la luna y estoy en
paz…

Admiro a Cristo

Desear la vida, desear amor,
desear esperanza, desear paz.

Yo le adoro, le santifico, le
admiro.

¿Qué deseo yo para
mí?

¡Nada!

Soy fuerte pero estoy, tremendamente,
enfermo.

Mi enfermedad es de cruz.

Me santifico,

Me glorifico,

Me consagro,

Me congrego,

Me satisfago,

Me inutilizo,

Me fracciono,

Me humillo,

Me encono con Satanás.

¡Huye de mí, desgraciado!, que
os culminaré…

Mi vida se santifica a cada
instante;

Y de las praderas rebosantes,

Hay paz.

El verdugo ha venido a
mí.

"Paz", es lo que admite;

Pero yo no soy un incauto;

Le conozco.

Cristo es mi guía y mi
Redentor.

A nadie más acepto;

Esto lo digo de manera
totalitaria:

Ya que Cristo y nuestro Padre
son…

¡Cristo!, salvadme…

¡Cristo!, amadme…

¡Cristo!,
bendecidme…

¡Cristo!, acabemos con la
maldad…

Hay un muro de contención en mi
alma:

¿Vos darás mi vida por
vos?

Cristo santificadme y concluid mi
vida.

Yo provengo del infierno; y del infierno
fui.

Pero te acepto con cada contorno, con cada
esperanza.

No permitas que, Satanás, se mofe;
le detesto; sé que sus días están por
acabar;

Pero la maldad aún está
acumulada en él.

Viene a buscarme a mi propia casa y
conversamos.

Yo no dialogo pero me ofende e intenta
destruirme.

Entonces yo clamo mientras leyendo estoy la
Biblia.

Me agrada San Juan.

¡Cristo!, eres nuestro
bienhechor.

¡Cristo eres la
bendición!

¡Cristo!, eres
sofisticación.

¡Cristo!, eres
bienaventuranza.

¡Cristo!, ¿me amas?

Hay un humus denso en mi
mente:

El paralítico de Betesda es mi
hermano.

Amor de Cristo

Yo amo la eternidad de Cristo
en su verisimilitud,

Amo las cosas que suceden de manera
totalitaria,

Amo amar a Cristo y bendecirle;
¡amarle!

Yo amo a Cristo y me considero su
seguidor,

Le amo con la devastación de un hijo
que amas intensamente.

Yo le persigo y continúo la vida en
peregrinar.

Amando estoy…

Seguidme a Él y peregrinar por el
hastío del mundo.

Yo amo a Cristo y mi voz es voz del
desierto clamando;

Comiendo moscardones y tejiendo
arañas por doquier.

Amando a Cristo se nos apacientan las voces
de Dios.

Yo le habré de amar
siempre…

Amor a Jesucristo en Vía
Crucis

Los trabajadores cantan
Avemaría,

Los trabajadores celebran mayo,
primero.

Y Cristo

Es vencido en Jerusalén.

Peor su vencer es
resurrección.

Y cumple con su palabra:

"He de resucitar".

Los trabajadores son devastados en
América.

Y en cada trabajador

Hay un Cristo que resucita este primero de
mayo.

Cantando estamos pro el por
venir.

Yo te suplico Padre mío, amarme,
para cumplir con mi

Prodigio.

Yo te suplico Padre, comprensión con
el obrero, que es mi hermano;

Te suplico comprensión, con el
picapedrero y con el camionero;

Te suplico compasión con todos
nosotros.

Pronto será primero de mayo; y
enfermo, enfermo estoy;

Y cantando…

Sublime Amor

Suplico amar a Dios en
Cristo.

Suplico lluvia en el valle central de
Chile.

Estamos en Abril y es
otoño.

Para el resto del mundo es
primavera.

¡Cristo!, yo te sigo fielmente como
un abracadabra.

¡Cristo!, la vorágine de la
vida me suplica piedad.

¡Cristo!, los vencidos se encamina a
Jerusalén.

Yo pido paz mundial. Pido clemencia de
Dios.

Los vaticinios son perfectos: no habremos
de morir;

Habremos de sobrevivir.

Pero hay que cambiar, hay que ser
perfectos.

Cristo se sumerge en un arrozal y vierte
sangre.

Yo la bebo y soy longevo.

Cantaré siempre por los cuatro
costados de mi cuerpo,

Cantaré una canción que no
culmine;

Y que su estribillo nos proponga amor
universal.

¡Cristo!, eres tú el
amador.

¡Cristo!, seguid el camino a
Gólgota;

Allí estoy yo esperándote
para desclavarte.

Cristo es mi Vida

De la vorágine del polvo de
Jerusalén

Un hombre,

Un santo,

Un profeta,

Una Hijo,

Nació;

Padeció

Y resucitó.

De la vorágine hay dos mil
años.

Y aún hay gentes que le
odian.

Por la vía crucis de su
cuerpo está la salvación.

Por la vía crucis de su
cangre están los pecados salvos.

¿Qué es lo que sucede con las
personas?

El infierno es
pringoso.

¿Os queréis
pringar?

Pues bien: seguid cómo
estáis.

La vida tiene una
connotación;

Y esta vida

Es sagrada.

¡No al
degeneramiento!,

¡No al aborto!,

¡No al asesinato!

¡La homosexualidad es
pecaminosa!

Que los homosexuales se confiesen y no
yerren el camino;

También hay Cristo para
ellos;

Podrán ascender si se
arrepiente:

De lo contrario, el
infierno.

Apostasía de Dios

Cristo fue mutilado por su
pueblo,

Y su pueblo le traicionó.

Dios rompió el pacto y el pacto
ahora es libre putrefacción.

Los judíos deben de cristianizarse
para que el pacto converja.

La unión de Dios con los
judíos es eterna.

Pero son cabezas duras.

He hallado consuelo en Pedro;
judío de estirpe cristiana.

Consuelo de
Dios

Verificación de
Cristo

El amor es solidez de las
aves, el amor es similitud de Cristo.

¿Qué es amor?
¿Qué significa amor?

La intolerancia de vivir es
pleitesía del no amar:

Yo amo de manera denodada; Y Cristo me
ama.

Yo busco la tolerancia de Dios; Y nuestro
Padre Celestial es lluvia.

¿Qué es lo que
sucede?

Amarnos es vivir, vivir es amarnos, la
intolerancia es beatífica,

Pero; ¡oh!, ¡Dios!, vivir es
morir.

Yo vivo rodeado de púas; Y la
sangre, es de cordero:

Las púas me destrozan el alma; Y mi
alma es eterna.

¿De qué manera
viviré? ¡Vivir es amar!

Obrando el Bien

Deseo amar a Cristo, en
desnudez de su alma.

Deseo verificar a Cristo, en desnudez de su
corazón.

Yo le hallo en todos los cometas errantes
de las galaxias infinitas;

Pero, yo tengo entendido, que el mundo es
finito.

El espíritu es infinito; los
científicos se equivocan.

A ritualidad de vivir es tremenda pero,
hemos hallado ¿Edén?;

Pues bien: no lo hemos hallado.

Yo tengo un corazón tremendo:
segrega sangre.

El corazón de Cristo segrega
galaxias.

Me personifico y vivo hambruna;

Me persigno y vivo
celestialmente.

¿Quién soy?
¿Qué soy?

Las preguntas son siempre las
mismas;

No hay respuestas: sólo
"mensajero".

Yo busco al coterráneo y busco a
Cristo.

¿Qué es lo que buscas
vos?

¿El amor?, ¿el
poder?

Deberíais buscar a
Dios…

Celestial
Encarnación

Doy mi vida en
Cristo,

Doy mi satisfacción en
amarle,

Doy mis ganas de servirle,

Doy mi fe en amarle;

Doy mi vida…

Cristo es pasto de ovejas,

Cristo es sembradío de
hortensias,

Cristo es hortaliza, es
desiderata.

Yo amo a Cristo y le encuentro tan
tierno.

Le he observado con claridad:

Ojos miel color, túnica
blanquísima,

Límpida piel; le he observado; y no
estoy loco por hablar.

¡Ven a mí!, que te sigo hasta
el fin.

¡Ven a mí!, que me has de
cegar y no habré de vivir.

Muerte, frustración, a veces, de
cuando en cuando, es lo que siento; porque mi corazón es
débil;

¿Qué bien habrá entre
ambos?

Yo te sigo; Y, al Padre, hasta la muerte yo
le sigo.

Bienestar para ambos…

Celestial Amor

Divino es el canto a
Cristo;

Y Cristo

Es divino.

¿Qué es lo que me
sucede?

Yo le admiro pero me advierto a mí
mismo:

Cristo es supremo

Pero fue hombre

Y padeció de la cruz.

Yo he padecido yo
también;

Y crucificado fui

Pero no he resucitado, tampoco he
muerto.

Cristo padeció muerte

¿Qué es lo que nos
sucede?

¿De qué material están
hechas las palabras?

Yo me pregunto: porque Dios es
irresistible.