Intervención psi-pedagogía en TEA y Teoría de la mente

Resumen

Bucear en la "Teoría de la Mente" nos permite
conocer a cerca de quien es el "otro", así como
también, todo lo que necesitaremos para compensar aquello
que el niño con autismo no logra construir . La
inclusión, parecería ser que es una de las grandes
posibilidades, ya que el niño con diagnostico de autismo
podrá contar con el "otro" de su misma edad y valorar los
modelos sociales necesarios para imitar en una primera instancia,
y luego internalizar. El Trastorno de Espectro Autista (TEA) nos
da un arco iris de posibilidades para pensar que ese "otro" pueda
estar en el mundo de los mentalistas.

Introducción

La inclusión social, adscripta a la escuela, al
barrio, al club , el centro cultura o la sociedad de fomento
provee desde estas agencias y sus agentes un aporte a la
construcción mentalista, siendo una de las posibilidades
para reparar algo del orden de la ceguera mental.

Un argentino, el Dr. Daniel
Valdez[1]incursiono en el estudio de los
niños/as, adolescentes y adultos con TEA en la incapacidad
de detectar, descifrar las intenciones deseos, pensamientos y
sentimientos de quienes los rodean.

Esta capacidad de otórgale significado a todo lo
que nos rodea desde nuestros 3 años de edad, es
exactamente inverso a los que le sucede a la personas que tiene
un diagnostico de autismo. Permanentemente cada uno de nosotros
vivimos leyendo la mente de aquellos, que están presentes
o ausentes. Desarrollando ejercicios automatizados de
empatía, sintiendo sensaciones frente a situaciones que no
nos pertenecen. Por ello frente a una película, un partido
de futbol o una noticia televisiva: lloramos ,nos enojamos,
tomamos partido por uno u otro bando, latiendo nuestro
corazón con más intensidad o bien sintiendo
escalofrió.

Somos capaces de darle explicación a lo
inexplicable y generar certidumbre para bajar nuestras
ansiedades.

Los espacios intersubjetivos impactan en la
construcción de nuestra subjetividad, lo intrasubjetivo
permite que nos mudemos en lectores mentales, pero cuando esto
falla, nos encontramos frente a serias dificultades.

Desde ya, algunos nacen expertos en leer e interpretar
las miradas, los gestos, y situaciones casi imperceptibles y
otros que no son tan hábiles para ello.

Daniel Valdez, asi como la línea de
pensamiento del Dr. Barón Cohen[2]considera
que hay un espectro en el cual en un extremo se encuentran
aquellas personas que son exageradamente mentalistas y aquellos
que padecen ceguera mental. Estos últimos son aquellos que
se encuentran por dentro del espectro autista y allí todas
las gamas de la ceguera mental. En un punto, por dentro de este
espectro se observa una miopía mental, se encuentra menos
exacerbada en un extremo, mientras que en el otro extremo
está la ceguera.

El cerebro humano en niños con
diagnostico de TEA es como una cámara
fotográfica que capta, enfoca y transmite la información.

Dicha información es literal y llega
trastocada a través de todos sus sentidos
para crear una imagen de las cosas que nos rodean.
La imagen proyecta fotogra-fías. Motivo por
el cual se los denomina, sujetos visuales. Las personas con TEA
recurren para comprender al interlocutor a esas imágenes
intentando encontrar sentido a diferentes situaciones o conductas
de los otros. La cantidad de fotos sobre ese objeto pueden ser
muchas o pocas, motivo por el cual el procesamiento de la
información es más lenta por el esfuerzo que
realiza para su búsqueda. Muchas veces las personas con
TEA, manifiestan el esfuerzo que ello significa, incluso revelan
tener dolor de cabeza frente a la exigencia, de evocar
recuerdos.

La mayoría de las personas con
TEA tienen alguna dificultad en la lectura mental durante
toda la vida de mayor o menor intensidad. Algunas  no pueden
interpretas el lenguaje, las miradas, los gestos, así como
deseos, pensamientos e intenciones, ni que penar la lectura entre
línea de un chiste, una metáfora, o algunos
absurdos. Este tipo de problemas  no suelen ser
fáciles de trabajar, pero con la apoyatura de
imágenes suelen avanzar. Programas avanzados de relaciones
interpersonales logran modificar dicha lectura  e
incorporarse a la sociedad mejorando la calidad de vida, en tanto
no curse con una patología concomitante como si fuese el
uso de nuevas gafas graduadas en función de las
necesidades.

Pero, cuando una o más partes
del sistema nervioso o neurológico se hayan afectados con
diferentes patologías como retardo mental moderado o
severo, o bien patología del orden psiquiátrico la
tarea será más intensa y los resultados menos
esperanzados, casi podríamos decir que nos
encontraríamos en el extremo que nos brinda menos
expectativas produciendo una
pérdida de visión mental  importante
o total. Es decir, que la construcción de nuevos
lentes seria afanoso. El término impedimento
mental visual es el que utilizan los expertos 
para describir cualquier tipo
de pérdida de la visión
mental, ya sea que se trate
 de  la pérdida total de
la visión mental o de la pérdida
parcial.

Capacidad para
predecir o anticipar en las personas con TEA

El cerebro es, básicamente, una
máquina predictiva encaminada a reducir la incertidumbre
del entorno, ¿Que le sucedería a un niño con
diagnostico de TGD-TEA en el jardín o en la
escuela?.

El origen del concepto de "teoría de
la mente" se encuentra en los trabajos pioneros de Premack y
Woodruf [3]y se refiere a la habilidad para
comprender y predecir la conducta de otras personas, sus
conocimientos, sus intenciones, sus emociones y sus creencias. La
respuesta a esta primera pregunta sería, que los
niño que se incorporan a espacios sociales en cualquier
agencia no contaría con dichas habilidad para comprender
los códigos sociales, y poder anticipar comportamientos de
los otros, así como tampoco, lo que el otro quiere, lo que
siente, y sus creencias. Es decir cuáles son las
intenciones de otros agentes.

Siendo aun más profunda esta
problemática, tampoco el niño reconoce en el mismo,
lo que quiere, lo que siente, y sus creencias

Como hemos mencionado , en un principio el
concepto "Teoría de la Mente" era un término que se
hallaba confinado al estudio de primates ; muchas fueron y son
las investigaciones realizadas, tantas como las
discrepancias.

Sin embargo, en los últimos
años hemos asistido a una gran proliferación de
estudios sobre este complejo concepto y su afectación en
diversas patologías. También profundizaremos en
cómo evaluar cada uno de ellos. Podemos nombrar los
niveles de complejidad que responden a la evaluación de
indicadores que aquí mencionaremos. Ellos son la lectura o
reconocimiento facial de emociones, creencias de primer y segundo
orden, utilización social del lenguaje, comportamiento
social y empatía.

Es importante saber cómo impacta en
cada una de ellas la modulación de las redes neuronales,
el papel del Cortez frontal, procesos cognitivos complejos, como
la inteligencia emocional y social.

Como ya se ha dicho, el cerebro es
básicamente una maquina predictiva que reduce la
incertidumbre del entorno. Para ello las funciones ejecutivas
tienen la capacidad de resolver un problema novedoso, teniendo en
cuenta predicciones de las consecuencias a las que nos puede
llevar cada una de las soluciones imaginadas. ¿Qué
ocurre, cuando las funciones ejecutivas se encuentras
disfuncional izadas? La dificultad presente será la
dificultad de afrontar situación problemáticas
nuevas, ya que no se encuentran presente la capacidad de
predicción asi como tampoco de las consecuencias de
nuestros actos.

Evaluación de
"La Teoría De La Mente" y sus niveles de
complejidad

El concepto "Teoría de la Mente"
refiere a un conjunto de habilidades metacognitivas complejas, es
decir la capacidad de ir y volver sobre un concepto, por lo que
se supone que su evaluación también ha de resultar
compleja y recoger diferentes componentes.

En aras de intentar ordenar la
información sobre el tema, planteamos diferentes niveles
de complejidad en la "Teoría de la Mente" y en las pruebas
de evaluación de ésta.

La primera seria el "Reconocimiento facial
de emociones", parece guardar más relación con
estructuras como la amígdala, sobre todo cuando se refiere
a expresiones de emociones básicas como el miedo o el
asco. Pero las pruebas con los años se han ido
complejizando. La tarea que proponen Baron Cohen, Joliffe,
Mortimore y Robertson (1997)[4] en uno de sus
últimos trabajos se llama «Leer la mente en los
ojos» o «Tarea de los ojos».

La tarea implica mirar fotos de la zona de
los ojos y realizar una elección forzada entre dos
palabras, la que mejor describa lo que la persona (de la foto)
está pensando o sintiendo.

La intención será apuntar a
la detección de indicadores sutiles de inferencia mental
en poblaciones con espectro autista leve. En esta línea
los indicadores más recientes fue un estudio, utilizando
la «Tarea de los ojos», contrastaron, entre otras, la
siguiente predicción: a pesar de tener un CI normal o por
encima de la media, presentarían déficit en una
prueba específica de teoría de la mente. Esto fue
confirmado en el estudio. Estos test determinan que mas
allá de CI, el déficit se encuentra en la lectura
mental o ceguera mental.

Cabe aclarar que los sujetos con autismo o
síndrome de Asperger de las muestras tenían
estudios universitarios y aun así puntuaban bajo en la
tarea de los ojos. Podemos decir que la inteligencia general no
tiene relación alguna con los aspecto de la
cognición social. Existen Otras pruebas en las que hay que
realizar inferencias de lo que alguien está pensando a
partir de la dirección de la mirada; así como
también pruebas que apuntan a detectar estados mentales
más complejos (deseo, referencia, intención); o
bien pruebas que implican una gama más amplia de
inferencia de estados mentales en la expresión facial. Se
utilizaron pinturas y dibujos (Velázquez y Hockey), tal
tarea implica capacidad de teoría de la mente en el
sentido que el sujeto tiene que comprender términos de
estados mentales y relacionarlos con caras (con partes de la cara
en este caso). Algunos de los términos de estados mentales
son «básicos» (feliz, triste, enojado,
atemorizado) y otros son más «complejos»
(reflexivo, arrogante, etc.).Las creencias de primer y segundo
orden fruto de las investigaciones de Wimmer ideo su test de
comprensión de creencias falsas (Maxi
Task)[5], ésta ha sido la prueba más
utilizada para determinar "La Teoría de la Mente". En este
Test, la mayoría de los niños de 6 años
realizaba sin dificultad esta tarea, mientras que a los 4
años la hacían al azar. Posteriormente Perner
simplifico la tarea inicial de creencias falsas y, con esta nueva
versión, los niños entre 3,4 y 5 años
lograban realizarla.

Simon Baron-Cohen Miembro de
la British Academy ,reconocido por su trabajo sobre
el autismo, incluye su primera teoría que dice que el
autismo implica grados de «ceguera mental» (o
retrasos en el desarrollo de la teoría de la mente); y su
teoría posterior donde expone que el autismo es una forma
extrema del «cerebro masculino», que implicó
una re conceptualización de las típicas diferencias
psicológicas de los sexos en términos de la
teoría de la empatía- sistematización. Simon
Baron-Cohen  con su equipo de investigación crearon
una nueva tarea de comprensión de creencias falsas (tarea
de Sally y Ana). En este test, el niño ve a Sally (una
muñeca) que esconde una canica en su cesta y se va; a
continuación, Ana cambia la canica a su propia cesta. Al
niño se le hacen preguntas de control de la memoria y la
pregunta clave del test, que es "¿Dónde
buscará Sally la canica?". Los investigadores encontraron
que el 80% de su muestra de niños con autismo
contestó incorrectamente: que Sally miraría en la
caja donde está realmente la canica. Por el contrario, la
mayor parte de los niños normales de 4 años,
así como el 86% de un grupo de niños con
síndrome de Down, contestaron correctamente que Sally
miraría en la cesta al creer, de modo equivocado, que la
canica estaría allí. Se consideró que este
descubrimiento era la evidencia de un déficit
específico del autismo, el pensar sobre pensamientos del
otro, es decir "mentalizar". Con esta tarea, Baron-Cohen lograron
"rebajar" sensiblemente la edad de ejecución de forma que
la mayoría de los niños de 4 años lograba
resolver sin dificultad la tarea, así como los
niños con retraso mental leve y los niños con
síndrome de Down. Sin embargo, los niños con
autismo fracasaban en su ejecución, incluso los que
presentaban un cociente intelectual normal. Posteriormente,
numerosos estudios han confirmado y extendido estos resultados
[32,33]. En un trabajo de metaanálisis llevado a cabo por
Wellman sobre el desarrollo de la "Teoría de la Mente",
que incluía 77 artículos de investigación
compuestos por 177 estudios diferentes, se ha encontrado que en
esos trabajos se utilizan 591 condiciones de creencias falsas.
Consideran los autores que la investigación de la
"Teoría de la Mente" no se reduce a la ejecución de
tareas de creencias falsas, aunque reconocen que estas tareas
ocupan un lugar central en la investigación.

Otros destacados en la investigación
de la "Teoría de la Mente" fue Angel Rivière
(2000)[6] formuló un modelo de desarrollo
de Teoría de la Mente en los niños denominado
Modelo de Suspensión que define los siguientes cuatro
niveles.

El Primer nivel de suspensión,
aparece a los 9 o 10 meses de edad. Los niños, antes de
usar el lenguaje para comunicarse, son capaces de utilizar
gestos, Es decir, los niños dejan en suspenso la misma
acción, lo que la convierte en una
señal.

En este nivel alcanzan las intenciones
protodeclarativas, demostrando que, no sólo desean
alcanzar los objetos, sino compartir "referencias" con el adulto.
Este logro se puede considerar un precursor de la Teoría
de la Mente (Gómez y cols., 1995).

El Segundo nivel de suspensión, se
desarrolla entre los 11 y los 18 meses. Los niños usan los
símbolos en activos. Por ejemplo, cuando el niño
queriendo jugar a apagar el mechero, sopla estando ya apagado,
demuestra que es capaz de suspender la propia acción
instrumental para referirse a ella.

El Tercer nivel de suspensión, surge entre los 18
meses y los 4 años. Los niños utiliza los objetos
habituales pero creando situaciones de juego de
ficción

El Cuarto nivel de suspensión, aparece a partir
de los 4 años. Corresponde a la edad de adquisición
de la Teoría de la Mente. El niño adquiere la
capacidad metarrepresentacional lo que le permite adquirir la
siguiente convicción: "los demás actúan
guiados por sus creencias".

En este período también alcanza a usar la
metáfora como forma de simbolización. Ese es el
camino que han tomado nuestras investigaciones, iniciadas bajo la
dirección de Ángel Riviére, nos sirven de
estímulo permanente para continuar con la tarea
emprendida.

¿Qué
relación existe entre la Teoría de la Mente y el
juego de ficción?

Los niños juegan desde los primeros
meses, ensayando movimientos de forma repetida, manipulando
objetos o imitando acciones que ven. Pero a partir del año
y medio comienzan a realizar una serie de actividades que se
denominan juego de ficción. Este representa un caso
particular de suspensión, característico del tercer
nivel según Rivière (2000), ya que posibilita la
generación de significados nuevos mediante la
suspensión de la aplicación de estructuras
preexistentes (ej. cuando usa una "escoba" como si fuera un
"caballo"). Esta actividad es una manifestación más
de la Teoría de la Mente.

El juego de ficción, según
Leslie (1987)[7], pone de manifiesto que los
niños ya son capaces de realizar un "desacoplamiento", es
decir, de manejar simultáneamente dos representaciones. De
ese modo, por ejemplo, pueden usar un "plátano" como si
fuera un "teléfono", simular que habla a través de
él, y después comérselo para merendar, como
si nada.

La Teoría de la Mente es, por tanto,
una capacidad innata o modular, que se desarrolla a partir de una
edad determinada, y que se construye a través de un
proceso de modularización progresiva. Gracias a esta
capacidad aprenden a anticipar y a explicar la conducta de los
otros, y a influir intencionalmente sobre ella, manejando deseos,
pensamientos, preferencias, propósitos, etc.

Esta capacidad de establecer predicciones y de evaluar,
tanto las emociones de los demás como las propias, se ve
modulada por la sociedad, que los niños van conociendo de
forma explícita a través del lenguaje.

Para los casos de Trastornos de Espectro Autista (TEA)
diversos son los postulados, aunque hay coincidencia
científica que la hipótesis de que las personas que
padecen este trastorno presentan una alteración
específica del mecanismo cognitivo, el cual es esencial
para representarse estados mentales. Simon Baron-Cohen considera
que "La Teoría de la Mente" proporciona las bases para
comprender el mecanismo social, si esto se ve alterado o carente,
como en el caso del TEA, no puede comprender el mundo social, por
lo tanto le parecerá caótico, confuso y hasta puede
llegar a provocarle miedo, en casos más extremos, el
autista puede llegar a apartarse completamente del mundo social
que lo rodea y en menores casos puede llegar a comunicarse, pero
estos intentos de comunicación son escasos, tratando a las
personas con las que intenta interactuar como si no tuvieran
"mente.

Según Rivière y Castellano
(2003)[8] "numerosos clínicos y
observadores coinciden en que para el niño autista el
medio social es impredecible e incomprensible, siendo muy
habitual que traten de igual manera a objetos y personas. Parece
también admitido que los déficit sociales de los
autistas no pueden ser atribuidos exclusivamente al retraso
mental (hay autistas con CI normales, y deficientes mentales
socialmente competentes)"

En cuanto a la comunicación humana, que se
caracteriza por ser flexible, fluida y dinámica, presenta
un gran problema para aquellas personas que carecen de
teoría de la mente. Estos individuos se verán de
algunas maneras invadidos por este conjunto de sonidos y gestos,
al cual en tratamiento podrá darle sentido y
significación. Los niños TEA presentan una seria
incapacidad para comunicarse con los demás, como otros que
son verborrajicos y con ausencia de semántica,
alteraciones en los usos pragmáticos del lenguaje, por
ejemplo. Esa incapacidad de niños TEA hablantes para
modular la voz dependiendo de la distancia a la que está
el receptor pudiendo ser su voz muy baja o muy alta, y
alteraciones en el juego simbólico y juego de roles. El
déficit cognitivo específico (en teoría de
la mente) supone interpretar y explicar una gran parte de las
alteraciones que se dan en los TEA, incluso en los más
inteligentes.

Algunas persona que padezca este tipo de trastorno
estará incapacitado o no para actuar en el ámbito
de la adaptación interpersonal, viéndose algunos
afectados, en las pautas de cooperación y de competencia
al momento de relacionarse con otras personas. Por lo tanto, los
mismos autores afirman que el trastorno del autismo es grave, no
sólo porque las personas que lo padecen no entiendan a los
demás y lo que éstos hacen, sino porque
habitualmente no son entendidos. La familia, la escuela, cumplen
un rol fundamental ya que en tratamiento, aunque la
construcción suele ser lenta se logra la
comunicación. También existen herramientas que
aportan a la comunicación. La familia suele construir
códigos de comunicación que no suelen aportar a los
códigos sociales por ello se les indica que se utilicen
códigos convencionales

Mucho tiempo ha pasado para dar una idea acertada acerca
de lo que falla en una persona que padece autismo, y eso no ha
sido fácil. Sin embargo, luego de varias investigaciones
se concluyó que el déficit estaba en esta
importante herramienta de adaptación social, de
carácter complejo, denominada "teoría de la
mente"

Con el fin de llegar a conclusiones que permitan
dilucidar la complejidad de la teoría de la mente, se han
aplicado estudios empíricos a niños autistas, con y
a niños normales, tareas de falsa creencia de segundo
orden (ej. el heladero) que intenta medir la atribución a
segundos de creencias de un tercero.

El otro tipo de tarea es la llamada falsa creencia de
segundo orden, en donde se aplica la historia del heladero. Esta
sitúa a dos personajes, Juan y María, en un
día caluroso de verano. Ambos están sentados en un
parque, cuando aparece un furgón de helados. Ninguno de
ellos porta dinero, por lo que maría decide ir a su casa
en busca de éste, acordando previamente con el heladero
que la esperara en el mismo sitio. Al cabo de unos minutos el
heladero se marcha, por lo que Juan le pregunta hacia donde se
dirigirá. El heladero responde que irá hacia la
iglesia. María al salir de su hogar ve pasar al heladero y
también le pregunta hacia donde se dirige. Juan decide ir
en busca de María, sin saber que ella había hablado
con el heladero, al llegar a la casa de ella se entera que no se
encuentra ahí y el marido de maría le informa a
Juan que ella salió a comprar un helado.

Por consiguiente se pregunta:
¿dónde piensa Juan que maría habrá
ido a buscar al heladero? Estas pruebas han permitido desarrollar
hipótesis explicativas que consiguen aunar los variados
síntomas de los trastornos generalizados del
desarrollo

Conclusión  
    

Al ver los avances que hay en la actualidad sobre el
trastorno autista se puede pensar que ya no hay dificultades en
reconocer esta patología y que puede tener un
diagnóstico temprano. A pesar de ello en la Argentina son
pocos los profesionales que están capacitados para
realizar este tipo de diagnostico.

Muchas veces se confunde este diagnostico con Trastorno
Especifico del Lenguaje , Trastornos de Conducta, Retardo Mental
y Déficit de Atención con Hiperactividad. El 50 por
ciento de los casos evaluados por presunto TGD – TEA en el centro
CIASI suelen tener otros diagnostico.

Como hemos visto, el autismo es un trastorno
generalizado del desarrollo, que va más allá de
simples síntomas y signos, se habla de un trastorno
infantil que marca de manera significativa la vida de un
niño y la familia, ya que se manifiesta de manera temprana
y tiene serias repercusiones en cuanto a su vida social y
comunicativa, puesto que la mayoría de los niños
autistas presentan dificultades en el lenguaje hablado. Pero los
tratamientos psico-educativos, cognitivos conductuales, suele
obtener en el espectro autista de alto rendimiento muy buenos
resultados. El lenguaje fluye y el registro del otro se logra ya
que una de las cualidades que tiene el fenómeno de
sociabilización es el hecho de aprender de los
demás, formas de comportamiento, para así
satisfacer necesidades, las más importante y responder de
manera efectiva a las exigencias del mundo. La
comunicación se considera esencial para el fenómeno
de sociabilización, debido a que ayuda a entablar
relaciones e intercambiar conocimientos dentro de uno mismo
grupo.

Bibliografía

• Baron-Cohen, S., Leslie, A. y Frith, U
  (1985). Does the autistic child have a theory of mind
  Cognition?, 21, 37-46

• Frith, H. (1989). Autismo. Madrid:
  Alianza

• Karmiloff-Smith, A. (1994). Más
  allá de la modularidad. Madrid: Alianza

• Riviére, A. (2001) Lenguaje y
  Autismo. En Valdez,D.(2001):Autismo: enfoques actuales para
  padres y profesionales de la salud y la
  educación.

• Riviére, A. y Nuñez, M
  (2001).La mirada mental.3ª edición. Aique. Buenos
  Aires – Argentina

• Riviére, A. (2002) Obras
  Escogidas. Volumen I. Diálogos sobre psicología
  De los cómputos mentales a los significados de la
  conciencia. Madrid. Ed. Medica Panamericana

• Ángel Riviere; Juan Martos
  El Niño pequeño con autismo, Autor-Editor,
  2000

• Valdez, Daniel. Necesidades Educativas
  Especiales, en trastornos del Desarrollo. Edit. AIQUE,
  Argentina.

• Valdez, D (2004) Construir
  comprensiones compartidas en contextos escolares: El
  desafío de la diversidad. En Elichiry,N. (Comp.)
  Aprendizajes escolares: Desarrollo en psicología
  Educacional. Buenos Aires. Ed. Manantial

Autor:

Lic. Patricia Alejandra Schuchinsky

Profesora del nivel inicial

Psicopedagoga. Universidad NACIONAL DE Lomas de Zamora
Bs As. Argentina (UNLZ)

Prof. en Ciencias de la Educación
(UNLZ)

Lic. en Psicopedagogía (UNLZ)

Lic. en Ciencias de la Educación
(UNLZ)

Especialista en Trastornos del Desarrollo- TEA (FLACSO
– ARGENTINA)

Presidente Fundadora Directora ONG-CIASI –Centro
especializado en autismo – ARGENTINA

Aspirante doctoral ICCP -CUBA

[1] Valdez, Daniel. Necesidades Educativas
Especiales, en trastornos del Desarrollo. Edit. AIQUE,
Argentina.

[2] Baron-Cohen, S.: Autism: The
Empathizing-Systemizing (ES) Theory. Annals of the New
York Academy of Sciences 2009; 1156(1):68–80

[3] David Premack (born October 26, 1925
in Aberdeen, South Dakota) is Emeritus
Professor of Psychology at the University of
Pennsylvania, USA. He was educated at the University
of Minnesotawhen logical positivism was in full
bloom. The departments of Psychology and Philosophy were
closely allied. Herbert Feigl, Wilfred Sellars,
and Paul Meehl led the philosophy seminars, while
Group Dynamics was led by Leon
Festinger and Stanley Schacter.

[4] Baron-Cohen S 1 , Jolliffe
T , Mortimore C , M Robertson . Otra
prueba avanzada de la teoría de la mente: las pruebas de
funcionamiento muy elevadas adultos con autismo o
síndrome de Asperger. J Child Psychol
Psiquiatría. 1997 Oct. 38 (7):813-22. Estudios
previos han encontrado un subgrupo de personas con autismo o
síndrome de Asperger que pasan las pruebas de segundo
orden de la teoría de la mente. Sin embargo, estas
pruebas tienen un techo en términos de desarrollo que
corresponden a una edad mental de 6 años. Por tanto, es
imposible decir si esas personas están intactas o con
problemas en su teoría de las habilidades
mentales. Se presenta el comportamiento de los adultos muy
altos de funcionamiento con autismo o síndrome de
Asperger en una prueba de adultos de la teoría de la
capacidad de la mente. La tarea involucró inferir
el estado mental de una persona sólo de la
información en las fotografías de los ojos de una
persona. En relación con la misma edad los
controles normales y un grupo de control clínico
(adultos con Síndrome de Tourette), el grupo con autismo
y síndrome de Asperger se deterioraron
significativamente en esta tarea. El autismo y el
síndrome de Asperger muestra también estaba
alterada en extrañas tareas historias de Happé.
Por el contrario, se les intacta en dos tareas de control: el
reconocimiento de género de la región de los ojos
de la cara, y el reconocimiento de las emociones básicas
de toda la cara. Esto proporciona evidencia de déficits
mindreading sutiles en individuos muy alto funcionamiento en el
continuo autista.

[5] Jornades de Foment de la Noelia
Rodríguez De Guzmán. Eva Mª GARCÍA.
Ana Belén Gorriz. Raquel Regal. ¿Cómo se
estudia el desarrollo de la mente? Edit. Universitat
Jaume.I

[6] Angel Riviere; Juan Martos El
Niño pequeño con autismo, Autor-Editor,
2000

[7] Leslie M. Lecron Autohipnotismo Edit.
Diana Mexicano (1987)

[8] Ángel Riviere: Obras Escogidas (3
Vols.) VV.AA., PANAMERICANA, 2003