Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Abraham y Job: misioneros de la fe, obediencia y esperamza (página 3)



Partes: 1, 2, 3

Me parece sumamente bello el adverbio repetido cuando se
habla de Dios, porque esta palabra -sólo,
únicamente- representa uno de los momentos decisivos en
los que el hombre bíblico capta al Dios vivo. Encontramos
este adverbio, quizás, en los Salmos, cuando se quiere
proclamar la trascendencia y al mismo tiempo su
comunicación: "Él sólo hizo grandes
maravillas
.", él sólo ha creado los cielos;
"Me acuesto en paz, y enseguida me duermo, / pues tú
sólo, Yahveh, me asientas en seguro
.".
(173)   En la Biblia a la profunda
intuición sobre la unicidad de Dios le acompaña
siempre la afirmación de que en él
únicamente está nuestro descanso, nuestra
salvación, nuestra paz. Podemos ver ahora, en el
capítulo 28, un importante paso adelante: el hombre no se
conoce, no debe pretender conocerse, sino que a Dios, y
sólo a él, confía su justicia, el
conocimiento de sí mismo, la certeza de su verdad, su
propio ser. De una forma discreta se responde a la ansiedad
de Job que quiere poseerse a sí mismo, quiere conocerse,
quiere la seguridad, en el cielo y en la tierra, de ser justo, de
ser un hombre cabal.

La respuesta de Dios.

Ahora podemos pasar a nuestro relato sobre Dios que,
después de haber sido invocado al principio del libro,
llamado a juicio, tratado mal e insultado, siempre ha escuchado
tranquilamente, sin descomponerse; se puede pensar incluso que
haya escuchado con amor, con benevolencia, con bondad, los
disparates de Job y sus amigos. Consideraremos brevemente
los capítulos 38 y 39, (174) dejando para vosotros
la tarea de leerlos y meditarlos por
entero.  

"Y Yahveh respondió a Job desde el seno de la
tempestad
.". (175)

La teofanía recuerda el episodio de Elías,
cuando el profeta alcanzó una parte del inaccesible
misterio. Y respondió haciendo llover sobre Job una
lluvia torrencial de preguntas. Job continúa preguntando a
Dios y Dios contesta a su vez interrogándole a
él.

La serie de preguntas continúa durante todo el
capítulo y en los primeros dos versículos del
capítulo 39. Dios pasa a describir la realidad que el
hombre ve en torno a sí, en el mundo animal, pero de la
que no sabe dar la última razón.

  • Preparación a la
    meditación.

Son muchas las pistas de reflexión para nuestra
meditación: un filón, por ejemplo, podría
considerar la posibilidad o no de la naturaleza de revelar el
misterio de Dios, es decir, la posibilidad de hablar de Dios a
partir de la naturaleza. Hoy día la teología se
ocupa cada vez con mayor frecuencia de este tema, sobre todo en
relación a los grandes temas de la ecología:
¿cómo debemos concebir la presencia de Dios en la
creación?   Sin embargo no seguiré esta
línea, sino que me detendré en algunas reflexiones
sobre el tema de la no aceptación, por parte de Job, de
los límites de su conocimiento: me parece un aspecto
bastante importante de cuanto nos enseña este
Libro.

Primera reflexión: debo aceptar el hecho de no
saber cambiar el universo, de no saber cambiar los planes de Dios
y de la Iglesia, incluso ni siquiera el giro completo de mis
responsabilidades. Puede ser duro, porque nuestra época
precisamente se muestra orgullosa de sus progresos
científicos y las ciencias humanas aspiran, al menos
inconscientemente, a poseer la totalidad del misterio. Sin
embargo me parece sabiduría auténtica el reconocer
que no sabemos y no podemos saberlo todo, que toda ciencia, por
su naturaleza, es sectorial y conoce un solo aspecto de la
realidad.  

Este límite de nuestro conocimiento nos quema,
nos humilla desde el momento que estamos tentados continuamente a
poseer el conjunto de la realidad para poder prever incluso el
futuro. En el fondo, tal tentación se relaciona con la
originaria: Quiero comer el fruto del árbol de la ciencia
del bien y del mal, quiero tener la llave de la totalidad del
ser, de la totalidad del misterioso plan de Dios, del misterio de
la Iglesia, del futuro de nuestra sociedad. Y sin embargo la
sabiduría auténtica nace de la aceptación de
este límite humano.

Segunda reflexión: debo aceptar,
consecuentemente, la imposibilidad de conocerme por completo.
Como dice San Pablo, incluso si no soy consciente de haber hecho
mal a alguien, no por eso estoy justificado; quien me justifica
es el Señor. (176) El depositario de la ciencia
total, también sobre mi vida, es únicamente Dios.
Este es el paso ulterior de la sabiduría, tan
difícil de comprender para Job y para el hombre en
general, pero necesario si queremos alcanzar una cierta paz
interior.

Tercera reflexión: debo confiar en Dios por
cuanto respecta al conocimiento global de mí mismo, del
ser, del horizonte trascendental del todo. A partir de esta
confianza podré alcanzar segmentos útiles de
conocimiento, investigador y deductivo, sobre mí mismo y
sobre los otros.   Siempre, sin embargo, con la reserva
de que el conocimiento de la totalidad del misterio no se nos ha
sido concedido.

  • Aplicaciones prácticas.

Incluso en el ámbito de la meditación,
sugiero tres aplicaciones prácticas para nuestra
vida.

  • El futuro de la Iglesia está en las manos de
    Dios, como también los planes pastorales dependen, en
    sus resultados, de mil acontecimientos imprevistos que se nos
    escapan y cuya totalidad es conocida únicamente por
    Dios.   Se nos ha pedido aplicarnos con humildad a
    estos segmentos de conocimiento que nos resultan posibles, a
    expresar las acciones y ejecuciones que nos parecen
    razonables, aceptando también que los acontecimientos
    nos superan, nos desmienten, nos obligan a ver las cosas de
    nuevo.  

El intento mayor de forzar el conocimiento de la
totalidad de los hechos y de prever el curso histórico es
el de las ideologías totalitarias, que se derrumban
dramáticamente desmentidas por las circunstancias. En
nuestro camino de Iglesia, incluso dejándonos influir
justamente por las cuestiones de mayor racionalidad, es necesario
darnos cuenta que tal racionalidad siempre es relativa y parcial,
que requiere de nosotros honestidad, lealtad, capacidad de
responder a situaciones tal como las conocemos, recordando
siempre la salvedad del Salmo: "Pues tú sólo,
Yahveh, me asientas en seguro
.". (177)

  • Muchas veces invocamos en la pastoral el auxilio de
    las ciencias sociales y, en general, de los datos
    científicos del momento, del ambiente, de la
    situación, de los modos conforme a los que se mueve la
    humanidad. Un filósofo contemporáneo ha escrito
    recientemente que las ciencias sociales son la
    reflexión "sobre las consecuencias inintencionales
    de los proyectos intencionales
    .". Porque el juego de la
    realidad no intencional, de las consecuencias no previstas
    racionalmente, es vastísimo. Y aquel filósofo
    oponía una mentalidad proyectual -que puede
    convertirse en pretensión de programar la totalidad- a
    una mentalidad peregrinante, más abierta, que intenta
    darse cuenta de las cosas tal como son, valorar lo que se
    debe hacer y después vivir con aquella confianza que
    no presume poder conocer todas las cosas, ni siquiera sobre
    nosotros mismos, nuestra justicia, nuestro bien
    hacer.   Cuánto más sea nuestra tarea
    de responsabilidad, tanto menos debemos esperar encontrar en
    torno a nosotros parámetros geométricos que nos
    aseguren la bondad de nuestras acciones. Sólo Dios en
    la eternidad nos lo podrá decir. Lo importante es
    andar hacia adelante con la libertad de quien se sabe juzgado
    únicamente por Dios y que se esfuerza por corregir los
    errores que conoce, aunque no alcance a darse cuenta
    completamente de la medida en que sean verdaderos
    errores.  

Esta es la mentalidad que le cuesta asumir a Job.
Él quiere llegar a la claridad con respecto a sí
mismo, a los otros, a Dios, una claridad que no deje paso a las
sombras. Y Dios le argumenta: "¿Dónde estabas
tú cuando fundaba yo la tierra
?", ¿qué
sabes tú de todo esto?. En su justicia personal, en su
rectitud, Job -y esa es la enseñanza para nosotros- es
conducido a la medida justa, que después aparecerá
en las declaraciones finales.

  • Me atrevo a dar una aplicación de la actitud
    que podríamos llamar de reverencia amorosa hacia el
    misterio, actitud fundamentalmente bíblica, por la que
    confiamos en el aliado: Has puesto tu mano sobre mi espalda
    y, aunque andase por un valle oscuro, no temeré
    ningún mal porque tú estás
    conmigo.  

Este comportamiento nos puede ayudar ante discusiones
angustiosas que hoy se plantean en el ámbito de las
ciencias y de los juicios morales. Porque vivimos en una
situación ciertamente muy compleja, y en la
búsqueda de las grandes decisiones morales (respecto a la
paz, al desarrollo, a la economía, etc.) no resulta
siempre fácil distinguir lo justo de lo injusto. No hablo
evidentemente de casos particulares, inmediatos, sino de
problemas de mayor alcance. Hoy no es posible exponer, por
ejemplo, una teoría del desarrollo que verdaderamente
satisfaga a todos en todos los elementos del problema mundial, y
no deje atrás ningún bloque de miseria o
sufrimiento. Y esto es motivo de ansiedad, de sufrimiento, de
búsqueda, pero no de desesperación, porque el
misterio de Dios guía nuestro universo confuso y lleno de
absurdos, permitiéndonos encontrar poco a poco nuestra
pequeña tarea, con la esperanza de que, si cometemos
algún error, él nos lo perdonará
conduciéndonos a una mayor unión entre nosotros y
haciendo crecer nuestro amor. Sólo así será
posible afrontar las grandes decisiones morales sobre situaciones
ante las que no acertamos a comprender completamente su
importancia.   A este propósito vemos que Job
libera de las preocupaciones de encontrar una respuesta
totalmente racional a nivel teológico y pone en crisis el
intento de encontrar respuestas que delimiten los problemas de la
humanidad en una racionalidad perceptible a una síntesis
mundana. Esta es para mí una gran liberación,
porque estaba habituado, debido a la teodicea comúnmente
enseñada, a esforzarme por encontrar soluciones
convincentes para mí mismo y para los otros. Donde, por el
contrario, soy libre y tengo el deber de buscar soluciones
racionales, es en el estudio de las causas históricas. Si
no buscamos únicamente la solución racional
abstracta, conseguiremos comprometernos con la realidad
histórica y seremos capaces de ver lo que podemos hacer
aquí y ahora.

Mientras intentamos responder a los interrogantes que
nos plantea nuestro siglo, Job nos ayuda a distinguir un doble
recorrido de pensamientos: quienes buscando la solución
perfecta, general, al fin se ahogan en una serie de preguntas
dentro de un círculo cerrado, que producen frigidez,
vacío y aridez, y quienes, simplemente, intentan actuar
con mayor amor.   A este pasaje le corresponde una
visión teológica que se introduce totalmente en el
misterio trinitario, abandonando los lugares de reposo que
contemplan y consideran al Dios uno, al Dios de la
filosofía, préstamo de la tradición griega.
Se trata más bien de la entrega al Dios de la alianza que
nos compromete aquí y ahora por amor a la gente, y
ésta es la única solución racional de quien
tiene la tarea de vivir en este mundo
actual.  

Quisiera añadir que yo personalmente leo
así el enigma del hombre de hoy; me interesa menos, a este
nivel, el hecho de ser sacerdote u obispo, que el ser hombre; es
decir, de la obligación de dar cuentas de mis años
de humanidad en una situación tan dramática y
absurda. Precisamente nos dejamos sobrecoger por un suceso u otro
que tomamos como símbolo (con toda seguridad Auschwitz,
por ejemplo, sería un símbolo) de tantos males;
pero si pensamos en lo que ha sucedido en Cambodgia, en Armenia,
en cuanto está sucediendo en el Líbano, la India o
América Latina, nos daremos cuenta de que no se trata
tanto de resolver una situación determinada, sino de estar
dentro con una moralidad más seria, con la capacidad de
expresar nuestras energías con valentía y no
lamentándonos con filosofías y teologías. La
teología de la liberación ha entendido bien este
problema.  

Job llega a comprenderlo a través de la prueba; y
por la gracia de Dios cada uno de nosotros logrará
comprender la importancia de crecer sobre todo en el abandono del
misterio, con humildad y con espíritu de escucha, en el
amor recíproco, paciente y perseverante; entonces
encontraremos algunas soluciones, que quizás no sean
completamente justas y acertadas, pero al menos serán
menos injustas y mejores que las
actuales.    

Roguemos humildemente en la oración, que se nos
conceda también a nosotros esta actitud, no de
sumisión, que nos permita pasar a través de los
acontecimientos de la vida a las situaciones y a las cosas con
señorío y alegría.

  • La obediencia de la fe.

Escribe San Pablo: "Por quien "-Jesucristo nuestro
Señor resucitado de entre los muertos-" recibimos la
gracia y el apostolado, para predicar la obediencia de la fe a
gloria de su nombre entre todos los gentiles
.".
(178)  

La obediencia a la fe es, pues, la finalidad del
apostolado de Pablo, la finalidad de la muerte de Jesús y
del envío del Espíritu a los apóstoles,
precisamente para capacitarlos en su obtención. Es la
finalidad de la Iglesia, de la misión cristiana: obtener
la obediencia de la fe de toda criatura racional al misterio de
Dios, al kerygma[39]al anuncio de la
Salvación. El tema es central en todo el Nuevo Testamento.
No es casual que la Carta a los Romanos, en la doxología
final, vuelva a repetir: "A Aquel que puede consolidaros conforme
al Evangelio mío y la predicación de Jesucristo:
revelación de un Misterio mantenido en secreto durante
siglos eternos, pero manifestado al presente, por las Escrituras
que lo predicen, por disposición del Dios eterno, dado a
conocer a todos los gentiles para obediencia de la fe, a Dios, el
único sabio, por Jesucristo, ¡a él la gloria
por los siglos de los siglos Amén!".
(179)

El concepto se ha expresado también en la Carta a
los Hebreos, donde se dice que el Hijo de Dios "llegado a la
perfección, se convirtió en causa de
salvación eterna para todos los que le obedecen
.".
(180) Jesús es para nosotros el salvador mediante
el acto fundamental que llamamos obediencia de la fe.  
Pero también los antiguos padres se salvaron a
través de la obediencia y de la escucha: "Por la fe,
Abraham, al ser llamado por Dios, obedeció y salió
para el lugar que había de recibir en herencia, y
salió sin saber adónde iba
.". (181)
Podemos imaginar a Abraham caminando hacia la primera etapa de su
peregrinación, ignorando la meta. ¿Qué
cúmulo de preguntas se desencadenarían en su mente?
Ciertamente no le resultaría fácil responder a
cuestiones de este tipo: ¿Quién me obliga?,
¿Acaso es justo?, ¿Por qué no me
quedé donde estaba?.

La "obediencia" a la "fe" no se agota
en un acto único, indivisible; más bien es el
inicio de una lucha contra todas las tentaciones mundanas de
desobediencia, de autosuficiencia, de presunción,
pensamientos propios del hombre carnal, psíquico que,
según las palabras de Pablo, tiene siempre mil razones
para oponer a la "fe".

La "obediencia" a la fe supone la victoria
sobre todo lo que constituye el desorden de la mente: fantasmas
enemigos, que molestan, que se oponen en el camino de la fe, que
desvían y desorientan, que la cuestionan y
desearían cambiar. Son -como dicen los espíritus
inmundos en el episodio de los endemoniados de Gerasa-
(184) una legión, una zarabanda. Bien se da
cuenta quien de verdad desea iniciar el camino de la fe. Cada
hombre está sujeto a esta multitud de ideas molestas y
transversales que, como si fueran parásitos, langostas o
mosquitos, zumban alrededor, impidiendo la dedicación al
deber fundamental. Quienes no han seguido una vida espiritual no
se dan cuentan y viven de impresiones, de lecturas, de diarios,
de escuchar a hombres, ruidos y televisiones, pasando de una cosa
a otra en un continuo vértigo de imaginación, de
fantasía, de deseos, y apagando una visión con la
visión sucesiva, como quien mira programa tras programa
ante el televisor y queda siempre bajo el influjo de una
excitación.  

Job nos ha enseñado también el peligro de
la no aceptación, de no saber quiénes somos y si
somos justos o no, el peligro del absoluto interés por
autodefinirnos, por comprender nuestras raíces. Hay una
forma de investigación psicológica o
psicoanalítica que pretende precisamente esto: quiero
poseerme en absoluto y por eso intento una búsqueda
infinita de sueños, de fantasías, de tics
nerviosos, de gestos inconscientes, para conseguir descubrir
mí último secreto, tan difícil de
poseer.

De estos pensamientos se pasa, por supuesto, a los de la
más directa desobediencia: la no aceptación de
Dios. Y, en el fondo, la gran tentación que aparece en
todo el Libro de Job. Él lo acepta, y es su gran acto de
fe, sin embargo su mente siempre está tentada al rechazo,
incluso a la tentación de desesperación y, en
sentido negativo, de resignación: Ya no creo en nada, no
acepto nada, ya no tengo ganas de nada.

He aquí el giro del pensamiento: se presentan en
general como inocuos, ocupan las primeras horas de la
mañana, al despertarnos, nos asaltan en los momentos en
que estamos más ocupados y de repente invaden nuestra
mente, de modo que, cuando volvemos a tomar nuestra
ocupación, nos sentimos tristes, cansados y débiles
sin saber el motivo. En realidad, no les hemos disciplinado
atentamente, no les hemos parado a tiempo; y así formas de
exaltación o de resentimientos, de engreimiento, de
depresión o de rabia contra nosotros mismos o contra los
otros, han entrado inconscientemente en nosotros y sin darnos
cuenta las hemos desarrollado.

Podría mencionar también las
fantasías de la sensualidad, los deseos, todas aquellas
imágenes fantásticas que, quizás
subrepticiamente, se insinúan en nosotros
dejándonos, en un cierto momento, vacíos, poco
deseosos de rezar, poco integrados en la Misa, en la lectura del
breviario: no comprendemos el motivo; es simplemente que nos
hemos dejado entretener un poco, sin darnos cuenta, por una serie
de pensamientos indisciplinados, que han acabado por
desalentarnos.   El descubrimiento de este mundo
interior difícil es parte del camino espiritual y nos
conduce a emprender una lucha continua y agotadora.

  • Significación
    teológica.

Se consideraba a Israel como "la simiente de
Abraham
", y la acción de Yahvéh de hacer
descender muchos pueblos de un solo hombre se consideraba como un
significativo cumplimiento de su palabra. (185) "El
Dios de Abraham
" designa a Yahvéh en toda la
Escritura, y es el nombre con el que Dios mismo se reveló
a Moisés. (186) El monoteísmo que Abraham en
medio de la idolatría, la manera en que Dios se le
apareció, lo eligió, lo redimió y lo
bendijo, como también su fe, fueron tema constante de
exhortación y consideración; considerándolo
así como el "Padre de la Fe".

Como gran profeta y receptor del pacto divino, Abraham
representa un papel único en la tradición
judía (187) y la musulmana.

Abraham y Job:
misioneros de la fe, de la obediencia y de la
esperanza

Hay un tema muy fundamental que nos concierne a todos
nosotros los cristianos, y ese tema es la "fe", la
"obediencia" y la "esperanza". Y a diferencia
de la fe que vimos en el relato anterior, la fe cristiana no es
una fe ciega, sino que está respaldada por Dios, y puesta
en objetivos sensatos, que son colocados en nuestros corazones
por Él mismo. Sabemos que la Palabra de Dios nos muestra a
través de todos sus libros que la fe cristiana, no es una
fe ciega, ya que está depositada en Nuestro Señor
Todopoderoso, el cual también es omnisciente, quiere lo
mejor para sus hijos, y siempre cumple sus promesas. Algo que
debemos tener muy claro es que la fe no proviene de nosotros,
sino que es un don del Espíritu Santo, por lo tanto,
sólo es otorgado a los elegidos, nosotros los hijos de
Dios; como a Abraham y a Job.

  • 2. La fe de Abraham.

Uno de los más claros ejemplos de fe que
encontramos en las Sagradas Escrituras, es la de Abraham.
Así que analicemos la fe de este hombre.

a) Dios ordena a Abraham que se aleje de su tierra. En
Génesis 12:1-3 (187), vemos como Dios ordena a
Abraham que parta de su tierra y se aleje de su parentela; orden
que verdaderamente es muy difícil para cualquiera,
alejarse de su tierra natal y de las personas con que
creció rodeado. Pero también podemos observar los
grandes beneficios que traería consigo acatar tal orden.
Dios promete a Abraham una gran nación y grandes
bendiciones. Una gran recompensa, que prácticamente
ningún hombre despreciaría.

b) La obediencia de Abraham. Ahora busquemos cual fue la
respuesta inmediata de Abraham ante el mandato de Dios, en
Génesis 12:4-9 (188). Aquí en este pasaje
observamos como Abraham ante este llamado salió
inmediatamente de su tierra, sin pensarlo dos veces, ni dudando
de la Palabra de Dios, tomando consigo a su esposa Sarai, a su
sobrino Lot y a todas sus pertenencias. Imagínese, que
usted tenga que salir repentinamente de su casa y de su ciudad
llevando su familia y sus pertenencias, y que aún no sepa
exactamente qué es lo que le espera, una situación
muy complicada, ¿cierto?. Pero Abraham, por su fe sin duda
alguna en su corazón, obedeció al
instante.

c) La fortaleza ante las dificultades. Para Abraham
obedecer tal llamado no fue nada fácil. Abraham
pasó por grandes dificultades, y diversas situaciones de
peligro. Sin embargo, por la grandeza de la fe que había
sido depositada en él por Dios, todos estos
obstáculos no representaron par él en ningún
momento un cambió en su caminar. Además, Dios
siempre estuvo fortaleciendo la fe de Abraham a través de
todas las bendiciones que éste vio hechas realidad a lo
largo de su vida; un gran ejemplo, es el nacimiento de Isaac,
siendo Sara estéril y Abraham de avanzada edad.
(189)

d) La fe de Abraham es probada. También otro acto
que demuestra la fe de Abraham está plasmado en
Génesis 22:10-14 (190). Jehová por medio de
una prueba desea mostrarle a Abraham cuan fuerte es su fe,
mandándole que le ofrezca a su hijo Isaac en holocausto. Y
éste presto a la orden de Dios procede a obedecer. En el
momento en que toma el cuchillo y va a alistarse para degollar a
su hijo, el ángel de Jehová lo detiene, ya que este
acto era suficiente para probar su fe.

  • 3. Fe es Obedecer no
    Entender.

Hablar de "fe" y relacionarlo
con "Obediencia" tiende a hacer difícil
relacionarlo para nuestra mente, pero todos estos días he
estado meditando en ello.

Normalmente nosotros obedecemos en base a lo que
entendemos, pero en el ámbito espiritual es totalmente
contrario, nosotros debemos obedecer aun cuando no
comprendamos lo que Dios nos está diciendo que
hagamos.

Y es que todo lo espiritual es muy diferente a
lo terrenal, en lo terrenal nosotros podemos
llevar a cabo un mandato siempre y cuando se nos haya explicado
claramente lo que tenemos que hacer y que nosotros lo hayamos
comprendido muy bien.

Pero en lo espiritual es totalmente lo contrario, yo
obedezco a Dios aun cuando muchas veces no comprenda a cabalidad
lo que me está impulsando a hacer, y es que a Dios no hay
que entenderlo para obedecerle, sino obedecerle aun cuando no lo
comprendamos, porque eso es la "fe".

La Biblia habla de "fe" como la certeza de lo
que se espera y la convicción de lo que no se
ve. (191) Tomando en cuenta esto, podemos decir que cuando
Dios nos da un mandato, debemos tener la certeza que
todo saldrá bien y la convicción de que a pesar que
las cosas no pintan muy bien, al final todo ayudara para
bien.

Algunos ejemplos de personas que obedecieron a Dios sin
comprender su mando son:

Abraham, es el ejemplo por perfecto de
"fe", como lo decíamos en parte del texto
era catalogado como el "padre de la fe", ese hombre que
fue nombra por Dios como su amigo, ¡Que privilegio mas
grande!, ¿Quién no quisiera que Dios lo nombra
personalmente su amigo?, pero ¿Qué
tenía Abraham como para poder ser llamado por
Dios mismo como su amigo?, simplemente él tenía
"fe", esa fe que distingue a los grandes hombres y
mujeres de Dios.

La Biblia es clara en mencionar que sin
"fe" es imposible agradar a
Dios. Abraham era un hombre que obedecía al pie
de la letra los mandatos de Dios, lo podemos comprobar
claramente con el mandato de ir y sacrificar a su único
hijo. (192) Humanamente hablando es difícil que un
padre que ame realmente a su hijo sea capaz de tal
cosa, ¡Que pasaje tan
amargo tuvo que pasar el pequeño Isaac al ver que tu padre
que tanto lo amaba lo iba a sacrificar!,
pero a pesar
que Abraham amaba a su hijo como a nadie más,
él tenía que obedecer lo que Dios le
estaba mandando a hacer, estoy seguro que Abraham no
sabía lo que Dios le tenía preparado, creo que
él ni siquiera comprendía el porqué de ese
mandato, pero eso no era impedimento para obedecer a
Dios, y es que por eso digo,
"fe" es "obedecer", "no
entender
", estoy seguro que su "fe" le daba la
certeza y la convicción de que al final todo
estaría bien.

Al Final su "fe" fue honrada y su prueba
superada, Abraham se graduó de la escuela de la
"obediencia en fe" y Dios está cada
día más orgulloso de haberlo nombrado su
amigo.

Por su parte Job, era un hombre íntegro casi
perfecto delante de Dios, que no hizo nada como para merecer tal
situación como la que experimento al perder a sus seres
queridos y las cantidades grandes de bienes que poseía.
Sé que tuvo que haber sido un tiempo terrible para la vida
de Job, pero ese hombre pese a todo lo que estaba experimentando
tenía la "fe" suficiente como
para confesar: "Yo se que mi Redentor vive"
(193), palabras que denotan su "fe" y su
"obediencia" a la voluntad de Dios.

Posiblemente Job no comprendía el porqué
de todo lo que estaba experimentando, pero era un hombre de esos
que no dejaban de confiar en Dios pese a todo el mal
que vino sobre él.

"Fe" es "obedecer" a Dios, no
comprenderlo

No quieras comprender las cosas antes de
hacerlas, hazlas porque Dios quiere "fe" y
"obediencia" de nosotrossi Dios es quien
ha puesto ese sentir en tu corazón o te ha dado un
mandado, ¿Qué estas esperando para cumplirlo o
llevarlo a cabo?

No le des tantas vueltas al asunto, si Dios lo dijo,
entonces obedece, porque gran recompensa
te espera.

"Fe" y "Obediencia" son sinónimos de
bendición.

Aceptar los designios divinos, por dolorosos que
éstos sean, constituye la prueba moral más alta en
la relación del hombre con el Creador. La obediencia es un
tema central de la religiosidad judeocristiana. Sólo los
personajes fundamentales de ambas religiones se han visto
sometidos a esta prueba de valor y de amor incondicional a Dios:
Abraham, en el caso judío y Jesús, en el
cristiano.

El sacrificio de Isaac a manos de su propio padre es uno
de los mitos hebreos más relevantes en la religión
judía. Su radical importancia reside en la fe ciega con
que Abraham acata hasta el último instante la orden
recibida por Yahveh y que tiene además un paralelismo
directo con la Pasión de Jesús, si bien en este
último caso la naturaleza de los actores involucrados en
el drama es distinta, lo mismo que es otro el
desenlace.

El elemento esencial de esta prueba radica en que se
trata de un sacrificio que se plantea para ser aceptado, de
ninguna manera impuesto. El hombre, representado por Abraham o
Jesús, es quien lo acepta, quien pone por delante su
voluntad para llevar a cabo el sacrificio que Dios ha pedido.
Esto sólo es posible con fe, o sea confianza. La confianza
se funda en el amor, no en el temor. De ahí el fuerte
carácter moral de estos dos mitos.

Según la tradición judía, se dice
que Abraham recibe a tres ángeles enviados por
Dios. Así que la enseñanza canónica del
mito, su moraleja a los creyentes de la fe judía es:
obediencia ciega a Dios, pues Dios provee. Obediencia como la de
Abraham, quien no dudó nunca de Yahveh, ni siquiera cuando
le pidió como prueba que sacrificara a su propio hijo. Y
la obediencia de Abraham sólo se sostiene si creyó
hasta el último instante en la sabiduría de Dios a
pesar de que lo que le pidió acatar era
inadmisible.

Según
el "midrashim"[40] –libro
de interpretaciones sobre el texto bíblico–
"Sefer ha-Yashar"[41], hace referencia
que Abraham es tentado por Samael[42]el
ángel caído, en su ascenso al monte. Disfrazado
como un anciano humilde, le dice: "¿cómo puede
provenir de un Dios de misericordia y justicia la orden de matar
al hijo de tu ancianidad? ¡Te han
engañado!"[43], Abraham lo
ahuyenta
". Esta adición al texto bíblico
sólo expone más gráficamente su fe en la
justicia y la bondad de Dios. Pero la obediencia y la fe no
fueron méritos únicos del recién estrenado
patriarca, pues Isaac ya era un niño capaz de razonar y de
elegir, un ser consciente que se encuentra en la misma
situación que su padre frente a Dios.

Se abrió la puerta lentamente, entró mi
padre: yo tenía nueve años. Y se mantuvo erguido,
tan alto sobre mí, brillando sus ojos azules y era muy
fría su voz. Dijo "he tenido una visión y sabes que
soy fuerte y devoto, debo hacer como se me ha pedido". Así
que escalamos la montaña; yo corría, él
caminaba, y su hacha era de oro. Los árboles se hicieron
más pequeños, como espejo de una doncella el lago,
cuando nos detuvimos a beber algo de vino. Entonces arrojó
la botella, la escuché romperse un minuto después,
y puso su mano en la mía. Me pareció ver un
águila aunque pudo ser un buitre, nunca lo supe con
certeza. Entonces mi padre construyó un altar, miró
una vez por encima de su hombro, sabía que yo no me iba a
esconder.[44]

 Ya sea por fe en el amor de Dios o bien por temor
a un castigo divino aún peor que el ya de por sí
difícil de matar uno mismo a su hijo –suponemos la
condenación–, en este holocausto se encuentra
presente una característica que no encontramos en Job:
voluntad y obediencia. A diferencia de Job, Abraham es el
ejecutor de su propia desdicha. Su situación moral es
distinta por esto, y también porque en el caso de Job el
infortunio había ocurrido. Abraham pudo confiar en que
algo lo salvaría antes de que tuviera lugar el terrible
acontecimiento.

 Niko Kazantzakis, creyente, encuentra
sentido a este drama en la humanidad de Jesús. "Todo
cuanto Cristo tenía de profundamente humano, nos ayuda a
comprenderlo, a amarlo y a seguir su Pasión como si se
tratara de nuestra propia pasión (…) lo vemos
luchar como nosotros y cobramos valor. Vemos que no estamos solos
en el mundo y que él lucha a nuestro
lado
."[45]

Es por ello que en su extraordinaria novela La
última tentación
, Kazantzakis narra con todo
detalle qué habría pasado si Jesús no
hubiese aceptado el sacrificio: casarse con la prostituta
María Magdalena, criar hijos con ella, trabajar la tierra
y llegar a una plácida vejez: deseo legítimo de
felicidad que Jesús, en su condición humana, pudo
experimentar mientras languidecía en la cruz, pero al que
fue capaz de renunciar gracias a su divinidad. Por ello, para
Kazantzakis, Jesús es un extraordinario ejemplo de
renuncia al cuerpo en aras del espíritu.

En sentido opuesto y al igual que en Dylan, la
interpretación más aceptada del mito no termina por
convencer las muchas dudas de José Saramago,
expuestas en "El Evangelio según
Jesucristo
" (1991). En esta novela, el personaje
de Jesús se horroriza ante los medios de su padre, al
serle revelado su papel de mártir "lo mejor que hay para
difundir una creencia y enfervorizar una
fe".[46]

El Dios de Saramago es un dios pequeño pero con
grandes ambiciones. Desea pasar de dios de un pueblo en ese
entonces insignificante, comparado con las civilizaciones que le
eran contemporáneas, para convertirse en el dios de todos
los hombres. Y su estrategia es el sacrificio de su Hijo
encarnado. El Jesús de Saramago, dolido y angustiado por
el sufrimiento que requerirá a los hombres la
fundación de la nueva fe (comenzando por los niños
masacrados por Herodes a raíz de su venida al mundo, para
continuar con las guerras religiosas y las torturas a futuros y
futuras mártires y santos) se resiste: "Padre, aparta
de mi ese cáliz, El que tú lo bebas es
condición de mi poder y de tu gloria, No quiero esa
gloria, Pero yo quiero ese
poder
.".[47]

Jesús acata pero con la condición de que
le sean revelados los nombres y la forma de morir de todos
aquellos que se sacrificarán por su causa. Luego, en el
instante final de su vida, clavado en la cruz y cuando el cielo
se abre sobre su cabeza, se sabe engañado:

 Entonces comprendió Jesús que vino
traído al engaño como se lleva al cordero al
sacrificio, que su vida fue trazada desde el principio de los
principios para morir así, y, trayéndole la memoria
el río de sangre y de sufrimiento que de su lado
nacerá e inundará toda la tierra, clamó al
cielo abierto donde Dios sonreía, Hombre, perdonadle,
porque él no sabe lo que
hizo.[48]

 Los mitos son relatos imposibles de verificar
históricamente. Pero esto no les resta ninguna
importancia, pues su función en la cultura humana ha sido
exponer un dilema, hacernos pensar cómo se relaciona con
nuestra propia vida y así, proporcionar una guía,
un ejemplo a seguir. La fuerza de estos dos mitos hebreos (uno
judío y otro cristiano) radica en la forma en que abordan
un aspecto fundamental de la vida humana: nuestra relación
con Dios de cara al mal y al sufrimiento.

A pesar de los cuestionamientos y las dudas que respecto
a ambos relatos puedan tenerse, ambos comparten algo esencial:
tal obediencia no es posible sin fe. Como Jesús mismo dijo
a Pedro al momento de entregarse: "La copa que me ha dado el
Padre ¿no la voy a beber?". (194)

  • 4. Conclusión.

Así, que los invito, a que sigamos el gran
ejemplo que nos muestra nuestro Padre Celestial a través
de estos hombres llamados Abraham y Job. Como cristianos debemos
estar día a día, creciendo en nuestra
"fe". De tal modo, aumentará nuestra
comunión con el Dios que adoramos. Además, debemos
entender y conocer que vamos avanzando en el camino de la
santidad, cada vez que dependemos más de Él. Y esta
dependencia se ve reflejada en gran manera en donde tengamos
puesta nuestra mirada y nuestro corazón. Ya que entre
más alejada está nuestra de la promesa de nuestro
Salvador de la vida que nos espera después de la muerte,
menos fe tenemos de la seguridad de su promesa, o sea, de la
veracidad de su Palabra. Entonces, en este momento, cierren sus
ojos, háganse las siguientes preguntas, y reflexionen en
sus respuestas: ¿Dónde tengo puesto mi
corazón?. ¿En lo terrenal o en la vida eterna que
me espera después de la muerte junto a Dios?.

Citas
bíblicas

(1) Jos. 1:8, 9; (2) Ro. 6:23; (3)
Jud. 1:3; (4) 1Ti. 4:6; (5) Fil. 1:25; (6)
Ga. 1:23; (7) 2 Ti. 3:15; (8) Ef. 2:8, 9; (9)
 
Ro. 10:13, 14; (10) Ro. 10:13; (11) Lc.
24:46, 47; (12) Mc. 1:15; (13) 1Co. 1:18;
(14) Ga. 5:22, 23; Ef. 2:8, 9; (15) Lc.
7:48-50; Lc. 18:42; (16) Ro. 3:21-28; Fi. 3:8-9;
(17) Ro. 1:11, 12; 1 Ts. 3:7); (18) 2 Co. 5:7;
(19) Ga. 2:20; (20); 1Ts. 5:8; (21) 2Ts.
1:11, 12; Stg. 2:17: (22) 1Pe. 5:8, 9; (23)
He. 11:1, 6; (24) 1Jn. 5:4; (25) 1Pe. 1:3-9;
(26) He. 11:1-6; (27) Ro. 8:24; (28) He.
3:6; (29) 1 Pe. 1:22; (30) Mt. 13:15; (31) 1
Stg. 15:19; (32) Mt. 7:24; (33) 1 Stg. 15:22;
(34) 1 Stg. 15:23; (35) Dt. 30:15-16; (36)
Dt. 10:12, 13; (37) Ro. 5:20; (38) Éx.
15:26; (39) Jos. 1:8; (40) Mt. 5:19; (41)
Jn. 14:15, 23; (42) He. 5:32; (43) He. 5:8, 9;
(44) Ro. 13:1, 2; (45) He. 5:29; (46) Ef.
6:1-3; (47) Jn. 5:14; 8:11; (48) 1 S. 15:22;
(49) Ro. 10:17; (50) Sal. 119:11; (51) Ro.
16:26; (52) Sal. 119:18; (53) Jn. 14:26;
(54) Jn. 6:38; (55) Jn. 5:30; (56) Ro. 5:19;
(57) Fi. 2:8; (58) Ap. 2:10; (59) 1 Co.
10:13; (60) Hch. 6:7; (61) 1 Pe. 1:13, 14;
(62) Stg. 2:17; (63) Mt. 6:10; (64) Ef. 6:6;
(65) 1 Pe. 1:22; (66) 2 Ts. 1:7, 8; (67) Mt.
7:21; (68) He. 5:9; (69) He. 10:36; (70) 1
Jn 2:17; (71) He. 5:29; (72) Dt. 12:28; (73)
1 S. 15:22, 23; (74) Stg. 3:17; (75) Mt. 5:4;
(76) Mt. 11:28; (77) Jn. 14:27; (78) S.
42:5, 11; 43:5; (79) Ex. 14:13; (80) Ex. 14:14;
(81) Sal. 23:4; (82) Sal. 23:6; (83) Sal.
30:5; (84) Sal. 34:19; (85) Sal. 46:1; (86)
Sal. 103:13; (87) Sal. 147:3; (88) Is. 26:3;
(89) Nah. 1:7; (90) Mt. 7:7; (91) Mt. 19:26;
(92) Jn. 16:33; (93) Ro. 8:25; (94) Ro.
8:35; (95) Ro. 15:4; (96) 2 Co. 1:3; (97) 2
Co. 4:9; (98) Fil. 4:13; (99) Col. 1:28;
(100) Ro. 12:2; (101) He. 11:1; (102) Ro.
10:1; (103) Jn. 5:39; (104) Gn. 11:26; (105)
1 Co. 1:27; Neh. 9:7; (106) Gn. 17:5; (107) Gn.
11:26-32; (108) Gn. 15:17-21; (109) Gn. 22.1-14;
(110) Gn. 25:1-10; (111) Gn. 25:124; 17:1; 18:25;
(112) Gn.18:33; 24:40; 48:15; (113) Gn. 22:11-15;
(114) Hch. 7.2-4; (115) He. 11:19; (116) Gn.
12:11-13; 20:2-11; 20:12; 11:29; (117) Is. 51:2; He.
11:11; 1 P: 3-6; (118) He. 11.17-19; (119) Is.
14:24; (120) Is. 48:11; (121) He. 11; (122)
Stg. 2:17-23; (123) Job 1:17; (124) Ez. 14:14; Stg.
5:11; (125) Job 42; (126) Job 1:8; (127) Ez.
14:14; (128) Job 1:6; (129) Job 1:13-17;
(130) Job 2:1-8; (131) Job 2: 7, 8; (132)
Lc. 14:26; (133) Job 29:11; (134) Job 19:9;
(135) Job 19:25; (136) Job 1:6-7; 1 Jn. 5:19; Ap.
12:9; (137) Job 1:8; (138) Job 1:9-22; (139)
Job 2:1-7; (140) Mt. 22:37, 38; (141) Job 2:8;
(142) Job 7:21; (143) Job 17:1; (144) Job
30:20; (145) Job 7:20; (146) Job 13:15;
(147) Job 19:25; (148) Job 22:5; (149) Sal.
1; Ga. 6:7; (150) Job 42:7-8; (151) Job 13:18;
(152) Job 38:2; (153) Job 40:2; (154) Job
38:3; 40:7; (155) Job 38:22; 39:19; (156) Job 40:4;
(157) Ro. 8:28; (158) Job 42:2; (159) Job
40:8; (160) Job 42:6; (161) Job 42:3; (162)
Jn. 1:7; (163) Gn. 22:1-12; (164) 2 Co. 12:7-10;
He. 12:4-12; Stg. 1:2-4; 1 Pe. 4:12-19; (165) Job 42:10;
(166) Job 9; (167) Job 28; (168) 38; 39;
(169) Job 8:20-22; (170) Job 9:1, 2; (171)
Job 9:4; (172) Job 28; (173) Sal. 135:4; 4:9;
(174) Job 38; 39; (175) Job 38:1; (176) 1
Co. 4:3, 4; (177) Sal. 4:9; (178) Ro. 1:5;
(179) Ro.16:25-27; (180) He. 5:9; (181) He.
11:8; (182) Hech. 2:22-25; (183) Hech. 2:36;
(184) Mr. 5:1; (185) Is. 51:2; Ez. 33:24;
(186) Ex. 3:15; (187) Ec. 44:19-21; (188)
Ec. 44:19-21; (189) Gn. 21:1, 2; (190) Gn.
22:10-14; (191) He. 11:1; (192) Gn. 22:1-4;
(193) Job 19:25; (194) Jn. 18:11.

Bibliografía

  • 1) LA SANTA BIBLIA – Versión:
    Reina–Valera – 1995.

  • 2) DICCIONARIO DE LA REAL ACADEMIA
    ESPAÑOLA. 2013. Madrid, España.  Larousse
    Editorial, S.L.

  • 3) ALONSO FERNÁNDEZ, F.: "El hombre
    libre y sus sombras
    ". 2006. Guadalajara,
    México.

  • 4) BOA, Kenneth: "Faith Has Its Reasons:
    Integrative Approaches to Defending the Christian
    Faith
    ", (traducido al español: "La fe tiene
    sus razones: Enfoques integrales a la defensa de la fe
    Cristiana
    ."). 2006. Cambridge, EE.UU.

  • 5) BOGHOSSIAN, Peter: "A Manual for
    Creating Atheists
    ", (traducido al español: "Un
    Manual para la creación de los ateos"). 2013.
    Colorado, EE.UU.

  • 6) CANTERLA, C.: "La cara oculta de la
    razón: locura, creencia y utopía
    ". 2001.
    Cádiz, España. Universidad de
    Cádiz.

  • 7) CRUZ, M.: "Tolerancia o barbarie".
    1998. Barcelona, España. Ed. Gedisa.

  • 8) JAVOLOY MAZÓN, F.:
    "Psicología del fanatismo".
    Disponible en ub.edu. 1983. Massachusetts, EE.UU. Tesis
    Doctoral.

  • 9) KAZANTZAKIS, Niko: "Prefacio, en La
    última tentación
    ". 1999. Bs. As.,
    Argentina

  • 10) MENÉNDEZ, A.: "Fanatismo y
    Misticismo
    ". 2007. D.F., México. Editorial Doble
    J.

  • 11) MIZRACHI, Yosef. "Who God Is",
    (traducido al español: "Quién es
    Dios
    "). 2013. Massachusetts, EE.UU.

  • 12) MORÁN, L.:
    (2005) "Religión y cultura: crisol de
    transformaciones
    ". 2005. D.F., México. Centro de
    investigaciones y estudios superiores en antropología
    social.

  • 13) NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: "La
    Tertulia de Jesús, Pedro y Judas
    ". 2014.
    Cajamarca – Perú.

  • 14) NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: "Las
    Virtudes
    ". 2014. Cajamarca, Perú.

  • 15) PLANTINGA, Alvin: "Warranted
    Christian Belief
    ", (traducido al español:
    "Creencia justificada en el Cristiano"). 2000. Oxford,
    EE.UU.

  • 16) SARAMAGO, José: "El
    evangelio según Jesucristo
    ". 1998. D.F.,
    México

  • 17) SOMA Thera: "Kalama Sutta, the Buddha's
    Charter of Free Inquiry
    ", (traducido al español:
    "Kalama Sutta, carta de Buda de Consulta gratuita").
    2009. Londres Inglaterra.

  • 18) VOLTAIRE, J.: "Tratado de la
    tolerancia
    ". 1992. Barcelona, España. Ed.
    Crítica.

  • 19) Disponible en: Convicción 
    — Valor Personal |
    Plenitud Psicológica,
    www.kathegiraldo.com/conviccion/.

  • 20) Disponible en: La  ética 
    de la tolerancia: entre el  fanatismo  y la
    indiferencia,
    www.pensamientocritico.info/…/la-etica-de-la-tolerancia-entre-el-fanatismo.

Disponible en: Temas
de Psicología. El fanatismo.
Los fanáticos
,
www.proyectopv.org/2-verdad/fanatismospsic.htm.

Disponible en: Fanatismo religioso,
html://www.rincondelconocimiento.com/fanatismo-religioso.html.

  • 21) Wikipedia, la enciclopedia libre –
    Kalama Sutra. Disponible en:
    http://www.es.wikipedia.org/wiki/Kalama_Sutra.

  • 22) Disponible en: Max Weber,
    http://www.alcoberro.info/V1/weber.htm.

  • 23) Disponible en: Compendio del Catecismo
    de la Iglesia Católica,
    www.vatican.va/archive/…ccc/…/archive_2005_compendium-ccc_sp.ht…

  • 24) Video de Youtube: "Abraham e
    Isaac
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/ehZCcl60D-I.

  • 25) Video de Youtube: "Abraham el Padre de
    fe
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/2OnEbp7hLJQ.

  • 26) Video de Youtube: "Abraham, el
    sacrificio de Isaac
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/nrG805MC08g.

  • 27) Video de Youtube: "El sacrificio de la
    fe, Abraham e Isaac
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/fiI239v8zpc.

  • 28) Video de Youtube: "Luz que ilumina: La
    fe
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/W5mTIsvWEJ0.

  • 29) Video de Youtube: "La vida de
    Job
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/Skova7CBYIs.

  • 30) Video de Youtube: "Job película
    cristiana completa
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/tX5PFuEHtac?list=PLvRZOPRp3EA5mUMRFGwHahlq0wqYAW2kd.

  • 31) Video de Youtube: "El sermón del
    Diablo y la apuesta cruel de Job
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/u_zJeejknAM.

  • 32) Video de Youtube: "Una versión
    actualizada de la vida de Job
    ". Disponible en URL:
    http://youtu.be/aQgOT8cd288.

  • 33) Video de Youtube: "Fue Satanás
    quien afligió a Job
    ?". Disponible en URL:
    http://youtu.be/ralB7lBzDac.

__________________________________

* Dr. Luis Alberto Navarrete Obando; Abogado;
Docente Universitario Investigador; Ensayista, Escritor y Poeta;
Magister en Educación Universitaria, con especialidad en
Investigación Universitaria; especialista y con estudios
de post grado en Filosofía y Humanidades. Colaborador de
la Revistas Virtuales de las Universidades de La Habana –
Cuba, http://www.rie@oei.uh.cu;Universidad Nacional
Autónoma de México – UNAM – D.F.
México, http://www.unam.mx; Universidad de Madrid –
España, http://www.monografias.com; consultor permanente
de la UNESCO, en Temas de Educación, Cultura y Desarrollo
Social para América Latina y El Caribe,
http://www.es.unesco.org?.

Nota.- El autor del presente trabajo es Columnista
periodístico: "Derecho y Sociedad", de los Diarios "La
República", http://www.larepublica.com.pe; "El Comercio",
http://www.elcomercio.com.pe; Diario Oficial "El Peruano",
http://www.elperuano.com.pe; Diario Oficial de Cajamarca,
"Panorama Cajamarquino", de circulación Regional
(Cajamarca), http://www.panoramacaj@hotmail.com.

® Derechos reservados de Autor, registrado en
INDECOPI; "Derecho y Sociedad", Código de marca
registrada LANO-CPP-1420-P.de marca registrada
LANO-CPP-1420-P.

Monografias.com

"A mi esposa Mary Fca. Araujo de Navarrete y a mi
hijo Luis Ernesto Navarrete Araujo, con la mayor expresión
de amor para ellos; que Dios los bendiga siempre y sigamos siendo
la familia más feliz, con el amor y bendición de
Dios"

 

 

Autor:

Dr. Luis Alberto Navarrete
Obando
*

ABOGADO -DOCENTE UNIVERSITARIO –
ESCRITOR

Monografias.com

Cajamarca, 18 de Agosto del 2014.

[1] DICCIONARIO DE LA REAL ACADEMIA
ESPAÑOLA. 2013. Madrid, España.  Larousse
Editorial, S.L.: Fe: “Conjunto de creencias de una
religión”. En la religión católica,
primera de las tres virtudes teologales, asentimiento a la
revelación de Dios, propuesta por la Iglesia.

[2] Ob. Cit.: Fanatismo:
“Actitud propia de la persona fanática: el fanatismo conduce a extremos peligrosos”.

[3] Ob. Cit.: Anatema:
“Exclusión de un fiel de la Iglesia católica, dictada por la autoridad eclesiástica,
por la
queda apartado de la comunidad y del
derecho a recibir los sacramentos: en las cruzadas había amenaza de
-que Anatema
para quienes desertaran en la lucha contra los infieles.
Excomunión”.

[4] Ob. Cit.: Indocto: “Falta de
Instrucción”.

[5] Ob. Cit.: Obediencia:
“Acción de obedecer.
Cumplimiento de la voluntad de la persona que manda,
de lo que establece una norma o de lo que ordena la
ley”.

[6] Ob. Cit.: Esperanza:
“Confianza en que ocurra o en lograr algo que se desea”.

[7] Ob. Cit.: Doctos:
“ Se aplica a la persona que posee muchos conocimientos adquiridos a fuerza de estudio”

[8] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: “La
Tertulia de Jesús, Pedro y Judas”. 2014. Cajamarca
– Perú. pp. 5, 6, 9.

[9] DICCIONARIO DE LA REAL ACADEMIA
ESPAÑOLA. 2013. Madrid, España.  Ob.
Cit.

[10] Disponible en:
Convicción — Valor Personal |
Plenitud Psicológica,
www.kathegiraldo.com/conviccion/.

[11] PLANTINGA, Alvin: “Warranted
Christian Belief”, (traducido al español:
“Creencia justificada en el Cristiano”). 2000.
Oxford, EE.UU. pp. 169–199.

[12] BOA, Kenneth: “Faith Has Its
Reasons: Integrative Approaches to Defending the Christian
Faith”, (traducido al español: “La Fe tiene
sus razones: Enfoques integrales a la defensa de la Fe
Cristiana.”). 2006. Cambridge, EE.UU.
pp. 251–255

[13] MIZRACHI, Yosef. “Who God
Is”, (traducido al español: “Quién es
Dios”). 2013. Massachusetts, EE.UU. Pág.
110.

[14] Gautama Buda, Sakiamuni, o
simplemente el “Buda”, fue un sabio en
cuyas enseñanzas se fundó
el Budismo. Nació en la ya
desaparecida república Sakia en las
estribaciones del Himalaya, enseñó
principalmente en el noroeste de la India. Debido a
ciertas interpretaciones erróneas muy comunes, debe
enfatizarse que el Buda Gautama no es un dios. Esto no
sólo fue asegurado por el mismo Sidarta Gautama, sino
que también la cosmología budista hace
esta distinción al afirmar que únicamente los
humanos -pero no se limita a esta humanidad en particular-
pueden lograr el estado de buda, pues en estos reside el mayor
potencial para la iluminación. Sidarta
Gautama enseñó el camino
medio entre la complacencia sensual y
el ascetismo estricto -practicado en el movimiento
Sramana- común a esta región de la India.
Más adelante enseñaría a lo largo de las
regiones del este de esta nación, tales
como Magadja y Kosala. El Sakiamuni es
la figura central del budismo y sus relatos, discursos y
reglas monásticas son creencias budistas que,
luego de su muerte, fueron resumidas y memorizadas por sus
seguidores. Existen diversas colecciones de dichas
enseñanzas que le fueron atribuidas y transmitidas
por tradición oral, hasta ser escritas
aproximadamente 400 años después de su
fallecimiento. Por Soma Thera: "Kalama Sutta, the Buddha's
Charter of Free Inquiry", (traducido al español: "Kalama
Sutta, carta de Buda de consulta gratuita”) 2009. Londres
Inglaterra. pp. 109-207.

[15] Theravada es una de las 19
escuelas nikaya que formaron
el budismo original. Se desarrollaron en
la India durante los siglos subsecuentes a la muerte
de Buda (420-368 a. C.). El
nombre theravada significa ‘la palabra
(doctrina) de los antiguos’. Es la escuela más
antigua del budismo, es relativamente conservadora y la
más cercana al budismo temprano, por lo cual se
podría considerar dentro de la ortodoxia. Basan su
tradición en el llamado Canon Pali, compendio donde
se transcribieron los discursos que el Buda dio a lo largo
de su vida después de la iluminación. Disponible
en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Theravada:
http://www-es.wikipedia.org/wiki/Theravada.

[16] Mahayana (Sánscrito:
significa “Gran vehículo”) es una de
las tres principales ramas del budismo. Algunas de las
áreas en las que se practica son China,
Tíbet, Japón, Corea, Vietnam,
y Taiwán. Del Mahayana se desarrolló
el Vajrayana esotérico que afirma
combinar todas las escuelas previas. Los estudiosos creen que
el mahayana, como un movimiento separado, comenzó
alrededor del siglo I d.C. en el sur de la India
El desarrollo del Mahayana fue un proceso lento y gradual. El
Mahayana no era una escuela rival, y por lo tanto no
fue la consecuencia de un cisma (sanghabheda). Monjes
Mahayana podían vivir sin discordia en el mismo
monasterio con monjes de otras escuelas, siempre que
sostuvieran el mismo código, a pesar de que se cree que
monjes no Mahayana pudieron haberse tomado con algo de burla
las creencias y prácticas privadas de sus hermanos
Mahayana. La idea de un cisma o ruptura radical, con cambios
religiosos dramáticos, simplemente no concuerda con lo
que sabemos ahora del desarrollo religioso budista, no en
textos sino en la práctica real. Disponible en:
Wikipedia, la enciclopedia libre – Mahayana:
http://www.es.wikipedia.org/wiki/Mahayana.

[17] Significa, la fe, la confianza. Un
budista se dice que tiene fe, si "cree en el perfecto, una
Ilustración del Buda", o en el Tres Joyas mediante
la adopción de su refugio en ellas. Su fe, sin
embargo, debe ser "razonada y enraizada en la
comprensión", y se le pide que investigar y probar el
objeto de su fe. La fe de un budista no está en
conflicto con el espíritu de investigación, y "la
duda acerca de las cosas dubitable", es admitido y la
investigación en ellos se anima. La “facultad
de la fe” debe ser equilibrada con la de la
sabiduría. Se dice: "Un monje que tiene
entendimiento, establece su fe de acuerdo con esa
comprensión". A través de la
sabiduría y de inteligencia, la fe se convierte en una
certeza interna y firme convicción sobre la base de la
propia experiencia. Disponible en: Palikanon – Saddha:
http://www.www.palikanon.com/english/wtb/s_t/saddhaa.htm.

[18] El Kalama
Sutra (Sánscrito: Kalama Sutra) es
un Sutra budista en el Anguttara
Nikaya del conjunto de textos del Tripitaka. Se cita
en las corrientes budistas Mahayana yTheravada y
es muy conocido por tener una
actitud antiautoritaria que recomienda el
cuestionamiento de la autoridad y dogmas religiosos, confiando
en el juicio personal. En este Sutra, Gautama Buda pasa por el
pueblo de Kesaputta y sus habitantes, los kalamas le piden
consejo: ¡Muchos gurús pasan por el pueblo
exponiendo sus enseñanzas y criticando las de los
demás! ¿Cuál de ellas deberíamos
seguir? En respuesta, obtienen este Sutra que sirve de
introducción a las creencias budistas para aquellos a
quienes no convenzan las experiencias de los demás. Buda
recomienda a los kalamas no creer en enseñanzas
religiosas porque varias fuentes digan que son verdad o porque
se apoyen en varios métodos, prácticas o pruebas.
Él les recomienda que encuentren la sabiduría a
partir de la experiencia propia y personal. Les dice que sus
propias enseñanzas no las deberían aceptar a ojos
cerrados, sino que deberían ser tomadas en cuenta,
únicamente tras decidir sobre el peso del valor de la
enseñanza. Se trata de No creer lo que ha sido adquirido
por haber sido escuchado por sucesivas repeticiones, ni por el
simple hecho de que la tradición lo diga, ni por
rumores, ni porque lo digan las escrituras, ni creer en los
axiomas, ni por un razonamiento sospechoso, ni porque la
persona que enseña tenga una habilidad especial para
contarlo, ni porque "el monje es nuestro maestro", ni siquiera
por prejuicios o favorecimientos hacia algo sobre lo que se ha
venido reflexionando durante tiempo. Disponible en: Wikipedia,
la enciclopedia libre – Kalama Sutra:
http://www.es.wikipedia.org/wiki/Kalama_Sutra.

[19]
Torá o Toráh (aceptado por la Real
Academia Española como Tora), es una
palabra hebrea que significa "acometer", "dar un
tiro" y que en el Toráh significa "dirigir el tiro", de
ahí que el significado de Torá es
la guía para dar en el blanco y de ahí,
se ha entendido
como enseñanza, instrucción, o
como ley en el mundo occidental. A decir verdad, se
dice Torá por un mandamiento, o en su sentido más
amplio, para designar a la totalidad de
la revelación y enseñanza divina
al pueblo de Israel. Sin embargo en un sentido intermedio,
se refiere únicamente al texto de los cinco
primeros libros de la Biblia o Biblia Hebrea (que
para los cristianos se llama Pentateuco). En la
bibliografía cristiana también se suele
denominar ley mosaica, ley de
Moisés o ley escrita de
Moisés. (Los judíos lo llaman
simplemente la ley.) Estos libros son:
Génesis (Bereshit: lit. "En el comienzo"),
Éxodo (Shemot: lit. "Nombres"),
Levítico (Vayikrá: lit. "Y llamó"),
Números (Bemidbar: lit. "En el Desierto")
Deuteronomio (Devarim: lit. "Palabras", "Cosas",
"Leyes"…). El conjunto de estos cinco libros se conoce
como Pentateuco (del griego pe?ta, penta:
‘cinco’, ‘funda para libros’, haciendo
referencia a las fundas en las que se conservaban
los rollos de pergamino) o,
en hebreo, Jamisháh Jumshéy
Toráh, ‘los cinco quintos de la Torá’
o simplemente Jumash, ‘quinto’ como
abreviatura. Los judíos también utilizan la
palabra Toráh para referirse a la Ley
Oral, desarrollada a lo largo de los siglos y compilada en el
siglo II. Disponible en: Wikipedia, Enciclopedia Libre –
Torá: http://www.es.wikipedia.org/wiki/Torá.

[20] Disponible en: Wikipedia, la
enciclopedia libre – Richard Dawkins:
http://www.es.wikipedia.org/wiki/Richard_Dawkins.

[21] BOGHOSSIAN, Peter: “A Manual for
Creating Atheists”, (traducido al español:
“Un Manual para la creación de los ateos”).
2013. Portland, EE.UU. Pág. 207.

[22] DICCIONARIO DE LA REAL ACADEMIA
ESPAÑOLA. 2013. Madrid, España.  Ob.
Cit.

[23] Disponible en: “El
príncipe de Homburg”, por
Heinrich von Kleist – Alternativa Teatral,
www.alternativateatral.com/obra14812-el-principe-de-homburg.

[24] Disponible en: Max Weber,
http://www.alcoberro.info/V1/weber.htm.

[25] Disponible en: Compendio del 
Catecismo de la Iglesia Católica,
www.vatican.va/archive/…ccc/…/archive_2005_compendium-ccc_sp.html.

[26] Disponible en: Wikipedia, la
enciclopedia libre – Obediencia:
http://www.es.wikipedia.org/wiki/Obediencia_Concilio Vaticano
II.

[27] Según el DICCIONARIO DE LA REAL
ACADEMIA ESPAÑOLA. 2013. Madrid, España., Ob.
Cit.: terafín, significa:
“Terafín (en hebreo: teraph,
plural: teraphim) es una palabra hebrea de la Biblia,
que sólo se encuentra en plural y es
de etimología incierta. A pesar de ser
plural, terafín tiene, en ocasiones, el
significado de un singular, usando el hebreo plural de
excelencia. La palabra terafín es explicada en
la literatura rabínica clásica con un
sentido de “cosas vergonzosas” o “alusiones
despectivas” (aunque rechazada por los
etimólogos actuales). En muchas traducciones de la
Biblia en italiano se traduce
como “ídolos”, o “dioses
domésticos”, aunque se desconoce con
precisión su significado exacto. En el Antiguo
Testamento se hace referencia al panteón de
los dioses semíticos que datan del nomadismo
de los hebreos, como así lo atestiguan las
versiones griegas y su utilización en las
Sagradas Escrituras.

[28] Ob. Cit., definición de
“Esperanza”.

[29] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto:
“Las Virtudes”. 2014. Cajamarca, Perú. pp.
4-6.

[30] DICCIONARIO DE LA REAL ACADEMIA
ESPAÑOLA. 2013. Madrid, España.  Ob.
Cit.

[31] Disponible en:
Convicción — Valor Personal |
Plenitud Psicológica,
www.kathegiraldo.com/conviccion/.

[32] Ob. Cit.
www.kathegiraldo.com/conviccion/.

[33] Disponible en: Temas de 
Psicología. El  fanatismo. Los
 fanáticos,
www.proyectopv.org/2-verdad/fanatismospsic.htm.

[34] JAVOLOY MAZÓN, F.:
“Psicología del fanatismo”.
Disponible en ub.edu. 1983. Massachusetts, EE.UU. Tesis
Doctoral.

[35] Disponible en: La 
ética  de la tolerancia: entre el 
fanatismo  y la indiferencia,
www.pensamientocritico.info/…/la-etica-de-la-tolerancia-entre-el-fanatismo.

[36] Disponible en: Fanatismo religioso,
html://www.rincondelconocimiento.com/fanatismo-religioso.html.

[37] Según el DRAE, “tratados
paritarios” significa: “Que está basado en
un criterio de paridad o igualdad.
Se aplica a la organización o asamblea que está constituida por varias partes que tienen el mismo número de -representantes.”.

[38] Entre las civilizaciones desaparecidas,
la más desconocida hasta ahora era la de los hititas,
que ha dejado pocos vestigios de su existencia, a pesar de
haber llegado a ser en el segundo milenio de nuestra Era, como
hace poco se ha demostrado, la tercera gran potencia en el
Oriente Medio, al lado de Egipto y de los Imperios de Babilonia
y Asiria. Hoy los heteos constituyen un capitulo nuevo dentro
de la Historia antigua, ya que la seguridad de su existencia es
una conquista de la ciencia de nuestros días. Hace
ciento cincuenta años se sospechaba apenas que hubiera
existido, y sólo hace unos noventa han surgido
definitivamente de la nada, al empezarse a descifrar su
historia en sus propios anales y al tenerse, por sus esculturas
rupestres, idea de las creencias que sustentaron, como lo son
los matrimonios hurritas entre hermano y hermana. Disponible
en: hurritas | Historias Legendarias,
http://www.dinastias.wordpress.com/tag/hurritas.

[39] Según el DRAE
“Kerygma”, significa: “El
término kerygma proviene
del griego kerigma ('anuncio',
'proclamación') y significa 'proclamar como un
emisario'. Se trata de un género
literario bíblico de sesgo oratorio que
actualmente podría estar representado en cierta manera
por la propaganda. Esta palabra se aplica a la
proclamación de los cristianos que se inicia poco
después de la muerte de Jesús de Nazaret,
hacia el año 30. Según el libro
de Hechos de los Apóstoles, cita:
‘Israelitas, oíd estas palabras:
A Jesús el Nazareno, hombre acreditado
por Dios ante vosotros por los milagros, signos y
prodigios que realizó Dios a través de Él
entre vosotros (como bien sabéis), lo matasteis
clavándolo por manos impías, entregado conforme
al designio previsto y aprobado por Dios. Pero Dios lo
resucitó rompiendo las ataduras de la
muerte…’. (182) Por lo tanto, todo Israel
esté en lo cierto de que al mismo Jesús, a quien
vosotros crucificasteis, Dios lo ha
constituido Señor y Mesías. (183)
Estas manifestaciones con el aspecto de acusación
están insertas, sin embargo, en el estilo y la
tradición del profetismo judío que
podemos ver a lo largo del Antiguo Testamento. Los que se
han dedicado a la búsqueda del Jesús
histórico consideran kerigma toda la doctrina que
aparece después de la muerte de Jesús de Nazaret.
Inicialmente se intentó eliminar todo lo correspondiente
al kerigma para acceder a la figura del Jesús
histórico. Tras comprobar que no es posible, se
inició un acercamiento al Jesús de la historia
precisamente a partir de ese kerygma.

[40] “Midrashim” plural de
“Midrash”, que significa: "explicación", es
un término hebreo que designa un método
de exégesis de un texto bíblico,
dirigido al estudio o investigación que facilite la
comprensión de la Torá. El
término midrashim también puede
referirse a una compilación de enseñanzas
midráshicas en forma de comentarios legales,
exegéticos u homiléticos del Tanaj (Biblia
hebrea). Toma elementos actuales para ejemplificar de modo
comprensible textos antes del verbo
hebreo “darâs”, que significa
“buscar, investigar, estudiar”. Como segunda
acepción, desaconsejada por algunos autores, en los
últimos años se viene hablando de estilo
midráshico para denominar al utilizado en algunos
pasajes del Nuevo Testamento, por el cual se hace referencia a
textos del Antiguo Testamento, que mezclados con hechos
actuales para el autor, intentan hacer comprensibles los
relatos neotestamentarios. Disponible en: Wikipedia, la
enciclopedia libre – Midrashim,
http://www.es.wikipedia.org/wiki/Midrash.

[41] El “Sefer
haYashar” (primera edición 1552), es
un hebreo midrash, también conocido como
“el Toledot Adam” y “Dibre ha-Yamim
ser-'Aruk”. El título hebreo puede
traducirse Sefer haYashar - "Libro del Hombre de Pie"
– pero se sabe en la traducción Inglés sobre todo
como “El Libro de Jaser”, siguiendo la
tradición Inglés. El Libro toma su nombre del
libro de Jaser, mencionado en los Libros de Josué y 2
Samuel. Disponible en: Wikipedia, the free encyclopedia – Sefer
haYashar (midrash),
http://www.en.wikipedia.org/wiki/Sefer_haYashar_(midrash).

[42] En la tradición
judía, Samael es el Ángel de la
Fuerza, el jefe del Quinto Cielo (Machon) y
uno de los siete regentes del mundo, servido por millones de
ángeles. Reside en el Séptimo
Cielo (Araboth, Geburah). Disponible en: Wikipedia, la
enciclopedia libre – Samael,
http://www.es.wikipedia.org/wiki/Samael.

[43] GRAVES Robert y PATAI, Raphael:
“Los mitos hebreos”. 2000. Madrid, España.
Ed. Alianza. Pág. 204.

[44] Ob. Cit. pp. 214-216.

[45] KAZANTZAKIS, Niko: “Prefacio,
en La última tentación”. 1999. Bs.
As., Argentina. Pág. 9.

[46] SARAMAGO, José: “El
evangelio según Jesucristo”. 1998. D.F.,
México. Pág. 424.

[47] Ob. Cit. Pág. 449.

[48] Ob. Cit. Pág. 513.

Partes: 1, 2, 3
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter