Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Introducción a San Pablo (página 6)



Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7

En el año 1516 la carta a los Romanos se
convirtió en el centro de la predicación de Lutero,
en una exégesis apasionada y un tanto unilateral que ha
olvidado que el contexto global en el que hay que hacer
exégesis de cualquier texto bíblico es el conjunto
del canon bíblico, en el que aparecen textos sobre la fe y
las obras de un talante bien distinto del de la carta a los
Romanos (cf. Stg 2,14-25), y que son textos tan inspirados como
ésta. Lutero no podía ocultar su decepción
cuando se refería a la carta de Santiago como "la carta de
la paja". Daremos un esquema de la carta, para ver la amplitud de
los temas tratados.

I. Exordio (1,1-17)

1. Saludo: 1,1-7

2. Acción de gracias:
1,8-15

3. Tema de la parte doctrinal:
1,16-17:

II. Cuerpo

A. Primera parte: doctrinal
(1,18-11,36)

1. La justificación por la fe
para todos
(1,18-4,24)

a) El tema explicado negativamente: sin el
evangelio, la ira de Dios se manifiesta

a todos los seres humanos
(1,18-3,20)

* La ira de Dios contra los gentiles
(1,18-32)

* El juicio de Dios contra los
judíos (2,1-3,20)

b) El tema expuesto positivamente: la
justicia de Dios se manifiesta

a través de Cristo y es percibida
por la fe (3,21-31)

c) El tema ilustrado: en el AT,
Abrahán fue justificado por la fe (4,1-25)

2. Naturaleza de la
justificación-salvación
(5-8).

Explica en qué consiste aquí
ya hora el don que se ha recibido por la fe: salvados en
esperanza. Ahora tenemos paz con Dios, en el futuro seremos
plenamente salvados

a) El tema anunciado: el cristiano
justificado, reconciliado con Dios, será salvo,

participando con la esperanza en la vida
resucitada de Cristo (5,1-11)

b) El tema explicado: la nueva vida
cristiana trae una triple liberación
(5,12-7,25)

* Libertad respecto al pecado y la muerte
(5,12-21)

* Libertad respecto al yo mediante la
unión con Cristo (6,1-23)

* Libertad respecto a la ley
(7,1-25)

c) El tema desarrollado: la vida cristiana
se vive en el Espíritu y está destinada a
la

gloria (8,1-39)

* La vida cristiana, potenciada por el
Espíritu (8,1-13)

* Mediante el Espíritu, el cristiano
llega a ser hijo de Dios, destinado a la

gloria (8,14-30)

* Himno al amor de Dios manifestado en
Cristo (8,31-39)

3. La justificación y la
incredulidad judía (9-11).

La incredulidad actual del pueblo
judío ¿no contradice la fidelidad de Dios a sus
promesas? ¿Vale la pena esperar, fiándose de Dios?
Pablo ofrece varias pistas sobre esta incredulidad.

a) Lamento de Pablo por sus antiguos
correligionarios (9,1-5)

b) La difícil situación de
Israel no contradice la dirección divina de la historia
(9,6-29)

c) El fracaso de Israel se debe a su propia
negativa (9,30-10,21)

d) El fracaso de Israel es parcial y
temporal (11,1-36)

B. Segunda parte: parenética
(12,1-15,13)

1. La vida cristiana como sacrificio
espiritual: (12,1-13,14)

2. Un caso particular entre cristianos:
fuertes y débiles en la fe (14,1-15,13)

III. Conclusión
(15,14-16,27)

1. Excusas por escribirles
(15,14-24)

2. Recomendaciones, consejos y saludos
(16,1-24)

3. Doxología (16,25-27)

D) La justificación

Arranca Pablo de una situación de pecaminosidad
universal en la humanidad. Esta situación no obedece al
plan original de Dios sobe el hombre. Fue introducida por el
pecado de Adán pero ha llegado a afectar a toda la
humanidad que es incapaz por sí misma de liberarse de esa
condición pecadora (Rm 1,18-3,20).

Pero Dios nunca dejó de amar a esta humanidad
pecadora y resolvió liberarla de esta condición
enviando a su Hijo (Rm 5,6-11), que asumió nuestra
naturaleza humana para realizar esta liberación.
Jesús es el último Adán (Rm 5,14; 1 Cor
15,45), el que da comienzo a una nueva humanidad que vive en la
amistad con Dios. Para ello tuvo que asumir nuestra carne
pecadora para podernos así trasfundir su Espíritu y
su gracia.

Jesús con su vida, muerte y resurrección
instaura el nuevo Reino mesiánico, el tiempo de la
salvación. Su muerte violenta a manos de los pecadores que
hubiese podido significar el fracaso definitivo de su
misión, no consigue frustrar el plan salvífico de
Dios, sino que es el supremo acto de amor que consuma esa nueva
manera de ser hombre en la entrega total de sí
mismo.

Dios resucita a Jesús revalidando su causa. A
través del don del Espíritu, Jesús
resucitado, último Adán, es capaz de dar vida y
justificar a los pecadores que creen en este proyecto de Dios y
desean insertarse en esta nueva humanidad. La muerte y
resurrección de Jesús comunican al hombre la
justicia de Dios, es decir, lo hacen justo. El hombre
vivía en una situación de injusticia al estar
sumido en el pecado que es un atentado contra el orden querido
por Dios en la creación, pero ahora va a ser hecho justo
al recibir en sí la justicia liberadora de
Dios.

Dios mismo va a recrear un orden nuevo instaurando su
justicia liberadora que restaura la bondad de la primera
creación. Así Dios justifica al hombre, lo vuelve a
hacer justo. El acto de justificación no es, como pensaba
Lutero, una simple declaración absolutoria, por la que
Dios decide no tener en cuenta los pecados del hombre, sino que
es una "acción liberadora de la "justicia" de Dios por la
cual se elimina el ámbito de maldad y de
destrucción efecto de la gran "injusticia" del pecado, y
se crea el ámbito del orden salvífico, o de
"justicia" en la cual florece una vida plena"[77].
Los que ingresan a este nuevo ámbito son realmente justos
y justificados.

Todo ello es fruto del amor gratuito de Dios que ha
querido justificar a los hombres por medio de la misión de
su Hijo y de su Espíritu. Esta justificación se le
otorga al hombre gratuitamente, sin que éste pueda hacer
nada para merecerla u obtenerla. Lo único que se le pide
es creer en este amor de Dios que lo quiere hacer justo
incorporándolo a la vida de su Hijo, el Justo, entrando
así en comunión con su vida resucitada. Lo
único que se le pide al hombre para gozar de esta nueva
vida es dejarse amar, creer en el amor de Dios. No son, pues,
nuestras obras las que nos justifican ante Dios. Las obras buenas
no son el prerrequisito de nuestra justificación, sino que
serán solo las consecuencias de la vida del
Espíritu en nosotros.

Pablo pondrá como ejemplo de ello el modo
cómo Abraham fue justificado por Dios (Rm 4,1-25).
"Abraham creyó en Dios y Dios se lo tuvo en cuenta para
hacerlo justo. Cuando alguien ha realizado una obra o trabajo, no
se le entrega el salario como un favor, sino como una deuda.
 Por el contrario, al que no puede presentar obras, pero
cree en Aquel que hace justos a los pecadores, se le toma en
cuenta su fe para "hacerlo justo" (Rm 4,3-5).

Pero la justificación no equivale todavía
a la salvación. La salvación para Pablo es un hecho
futuro ligado a la resurrección de los muertos y a la
segunda venida de Cristo. Por eso hemos sido salvados en
esperanza (Rm 8,24). Esa salvación eterna que el don
definitivo se nos dará en el futuro, pero de momento se
nos ha dado una prenda, unas arras de lo que se nos dará
después. Esta prenda es el Espíritu Santo (Rm
8,23). El Espíritu es la garantía de esa
salvación futura.

Porque la liberación mesiánica no es solo
liberación de nuestra condición de pecadores, sino
que es también liberación de la muerte, que es
consecuencia del pecado. Por eso la muerte es el "último
enemigo" que será definitivamente vencido solo en la
resurrección (1 Cor 15, 24-26).

Sin embargo, aun después de haber sido ya
justificados, tenemos todavía que morir, aunque la vida
nueva que hemos recibido no puede ya destruirse. El cristiano ya
ha muerto con Cristo, por eso la muerte ya no tiene poder sobre
él.

Este misterio de nuestra configuración con Cristo
lo expresa Pablo en el capítulo 6, mediante el signo del
bautismo, que se realizaba por inmersión. En el momento de
bautizarse, el creyente muere, a la vida pecadora, se ahoga en
esas aguas, y comparte así la muerte de Cristo. Pero en el
momento de resurgir del agua se representa la
resurrección. El creyente resucita a una nueva vida ya
inmortal, al configurarse con Cristo resucitado. "¿No
saben ustedes que todos nosotros, al ser bautizados en Cristo
Jesús, hemos sido sumergidos en su muerte? Por este
bautismo en su muerte fuimos sepultados con Cristo, y así
como Cristo fue resucitado de entre los muertos por la Gloria del
Padre, así también nosotros empezamos una vida
nueva. Si la comunión en su muerte nos injertó en
él, también compartiremos su resurrección"
(Rm 6,3-5).

E) La fe

La fe tenía ya una importancia grande en la
tradición sobre Jesús que se recoge en los
evangelios. Ya Jesús postulaba que había que
"creer" en su evangelio (Mc 1,15) y creer en sus milagros como
signos efectivos de la llegada del Reino. Sin embargo esta
llegada del Reino tenía dos etapas. En la etapa presente
todavía no se había manifestado en todo su
esplendor. Aunque los seguidores de Jesús se encontraban
ya en el nuevo ámbito de la gracia, su existencia no se
desarrollaba aún en la visión, sino en la fe y en
la esperanza.

Todo grupo religioso tenía que definirse a
sí mismo como grupo religioso frente a otros grupos
semejantes. Los discípulos de Jesús se van a
autodefinir como "los creyentes"[78]. Esta
autodefinición va a ser una de las grandes creaciones del
cristianismo naciente.

Por eso el cristianismo naciente pasó a convertir
los términos de fe y de creer, en la característica
de su movimiento mesiánico. En Pablo esta fe es
también el acceso a la salvación futura y a la
justificación presente.

F) El pecado en la carta a los Romanos

Pablo se detiene mucho en constatar la situación
universal de maldad que hay en nuestro mundo. El acontecimiento
mesiánico liberador "no llega a un campo neutral, sino a
uno ya tomado por los poderes enemigos de la maldad. Por eso la
liberación implica necesariamente la eliminación de
esas fuerzas enemigas que dominan la situación presente de
la humanidad"[79].

Es verdad que la mirada de San Pablo sobre esa maldad se
hace desde la fe en que no se trata de una situación
desesperada, porque ahora se ha empezado a hacer presente el
Reino mesiánico. Pero el pecad, como contrario a la
justicia de Dios implica "la aparición de un ámbito
de desorden que ejerce su influjo al estilo de un campo
magnético destructor"[80].

Esta fuerza dinámica lo contamino todo en el
individuo y en la sociedad, malogrando todo lo que de bueno y
bello hay en nuestra existencia. Podemos hablar de él como
una fuerza personificada. Por eso aparece en Pablo en singular
que todo lo invade para esclavizarlo y malograrlo.

Para este estudio paulino del tema del pecado,
seguiremos el estudio de J. Ignacio González
Faus[81]Me parece muy lúcido y claro en su
exposición.

El pecado no es consecuencia inevitable de la finitud
del hombre. Los animales son finitos y no son pecadores. El
hombre se diferencia de los animales no solo en que puede ser
razonable y capaz de progreso, sino en que es capaz de odio, de
crueldad y de abyecta maldad. El animal no puede pecar, no es
libre. El animal no puede dejar de realizar el sentido de su
vida, el fin último de su naturaleza.

Solo el hombre pueda fallar el tiro y destruirse a
sí mismo. Lo terrible del pecado es que en muchos casos es
una realidad oculta para el que lo comete. El pecado se esconde
porque es tiniebla. El mayor pecador es aquel que ha dejado de
tener conciencia de su pecado.

El discurso clásico moralista exigía
conciencia plena para que hubiese pecado. Esto supuso un paso
adelante frente a tendencias tabuísticas de la culpa. Pero
en la concepción de Pablo el pecado es aún
más grave cuando reprimimos la conciencia de culpabilidad,
cuando hemos anestesiado nuestra conciencia.

Distingamos en Pablo dos tipos de pecado: uno del
Antiguo Testamento y otro del Nuevo. El pecado de David (AT) y el
pecado del fariseo. (NT). David no fue consciente de su pecado
hasta que Natán se lo reprochó. Con pecados cada
vez más graves trató de ocultar el pecado anterior.
Trató de ocultar el adulterio con el asesinato. Hay ya una
dinámica en el pecado que tiene su lógica y que
avanza implacablemente. Es la lógica del deseo. Si deseo
algo, tengo el derecho a obtenerlo por el medio que
sea.

Los fariseos del ciego de nacimiento ejemplifican el
pecado del Nuevo Testamento. Quieren conservar su propia
honorabilidad. "Porque dicen ustedes que ven, su pecado
permanece". El pecado tiene una dimensión de ceguera. Los
rasgos más pronunciados son la dureza de corazón y
la hipocresía. El farsante comienza por engañar a
los demás y se acaba engañando a sí mismo.
El corazón se vuelve impermeable a la misericordia y a la
humanidad. Este pecado aparece tipificado en los ricos y los
fariseos. Hay en ellos una insinceridad última. Todos
llevamos dentro un rico y un fariseo. La libertad humana puede
llegar a eliminar la conciencia en provecho propio. Pero esta
falta de conciencia no conlleva falta de imputabilidad o de
responsabilidad.

Reconocer el propio mal pecado como mal, aunque sea sin
arrepentimiento, indica que algo de nosotros está
todavía (o está ya) fuera de ese pecado. Indica que
el pecado no se ha posesionado totalmente de nosotros, y que
alguna voz de nuestro yo no ha quedado acallada por la maldad y
está todavía libre para darle ese nombre. Decir
"Pequé", pertenece ya a la salida de la culpa. En cambio
la total identificación con el mal no nos permite ponerle
a ese mal el nombre de pecado. Esa total identificación
con el pecado es la que vuelve al hombre más monstruoso.
Esa ceguera forma parte del pecado del hombre. Satanás es
embustero y padre de la mentira.

La revelación del pecado se hace normalmente en
el contexto de la realidad del perdón. El hombre solo
llega a saberse pecador cuando se sabe perdonado. El hombre no es
capaz por sí solo de cargar con la culpa. Es una carga
demasiado insoportable. Si la revelación de la culpa no se
le hace en el anuncio del perdón, llevaría al
hombre a la desesperación o a la neurosis.

a) Romanos 1 y 2

En la carta a los Romanos Pablo se propone desenmascarar
el pecado. La cólera de Dios se revela contra toda
impiedad e injusticia de los hombres que aprisionan la verdad en
la injusticia. La cólera de Dios va contra todo lo que
destruye al hombre. Lo que provoca esa cólera es la
impiedad y la injusticia.

Pablo va a mostrar en el capítulo primero la
universalidad del pecado tanto entre los paganos como entre los
judíos, y la absoluta impotencia del hombre para librarse
de él por sí solo. Mostrará así
primero la solidaridad de todos en el pecado, para mostrar
después la solidaridad de todos en la salvación
ofrecida por Jesús.

1.- El pecado pagano

Consiste en el falseamiento de la verdad. Consiste no en
una contraposición entre un saber y un obrar, sino entre
un saber y un saber. Hay una mentira, una inadecuación
entre un conocimiento latente y el pensamiento expreso. Funciona
la lógica del yo y sus deseos, la lógica de la
"realidad". El deseo particular se erige en criterio universal de
la verdad. Lo que me conviene a mí y a los míos es
lo absolutamente bueno, como si no existiese nadie más,
como si solo existiésemos yo y los míos. Uno se ha
absolutizado a sí mismo. Su mentira es su falta de
consideración al no tener en cuenta la realidad que le
rodea y negar su existencia y sus necesidades. Solo cuentan mis
necesidades y no las de los demás.

Hablamos del castigo del pecado, pero no se trata de
castigo sino de consecuencias. El castigo del pecado es el
pecado. Del absurdo se sigue ya cualquier cosa: ex absurdo
sequitur quodlibet
. El solipsismo del deseo tiene
conclusiones férreas. Si Urías no existe, cualquier
cosa se puede hacer con él. Robarle la mujer y quitarle la
vida, simplemente porque nos estorba. En el aborto moderno se da
la misma lógica. La pareja que fornica descubre que,
contra su voluntad, se ha producido un embarazo no deseado. Esa
nueva vida humana que hay en el vientre de la mujer es un
estorbo. Viene a entorpecer sus estudios, a producirle deshonra y
vergüenza, a limitarle su libertad de movimientos, a darle
compromisos muy serios. La solución es la misma de David.
Fornica y se deshace del estorbo quitando la vida a
Urías.

"Dios los entregó a sus deseos hasta que lleguen
a degradar sus propias personas" (Rm 1,24). La verdad de Dios
queda sustituida por la mentira. Esta inversión de lo real
se plasma en la inversión sexual para Pablo. En ella se ve
cómo el hombre puede llegar a buscar satisfacción
en la perversión.

Negarse a considerar a Dios es negar la alteridad de lo
real frente al propio yo, que es la mínima forma en la que
Dios es captado o conocido. Con eso se comete una
violación de toda la realidad. Se falsean todas las
relaciones interpersonales. El pagano está convencido que
eso es lo que hay que hacer pero en el fondo sabe que esas
acciones son dignas de castigo.

Sin embargo los paganos no solo cometen esas acciones,
sino que incluso aprueban a los que las hacen, y les tranquilizan
el ánimo, diciéndoles que eso no tiene importancia.
Todo empieza en la primera mentira radical. No reconocer ninguna
dimensión de absoluto. La adoración del propio yo
que relativiza todo lo demás. Es ateísmo
práctico, egolatría práctica. Yo soy el
único que verdaderamente existo. Deseo, luego existo. Se
sustituye el principio de realidad por el principio del
deseo.

El pecador enmascara sus necesidades, como si fuesen un
acto de libertad, el ejercicio de un derecho, la recompensa
merecida. Ahí se ve claro el paso de la egolatría a
la idolatría. Al convertir en dios un deseo, el pagano
queda totalmente dependiente del deseo que ha absolutizado. Es un
drogado del nuevo dios que le tiraniza. Ha perdido la libertad al
hacerse esclavo de su adicción. Cada vez cae más
bajo hasta que pueda llegar a percibir su equivocación, su
dependencia y los excesos a los que ha llegado. Quizás se
despierte en él el deseo de salir de este estado y
emprender un camino de salida. O enfurecerse e insistir
más y más en su obsesión de atrapar ese
deseo fugitivo que nunca llegará a saciarle.

Los paganos, aun sin ley, podrían haber obrado de
otra manera, porque tienen la ley escrita en su corazón.
Son ley para sí mismos. Hay una voz interior que les dice
lo que está bien y lo que está mal, aunque
voluntariamente decidan acallar esa voz. Pagano aquí no es
una denominación étnica, sino una manera de actuar.
No todos los paganos actúan paganamente ni todos los
judíos actúan judaicamente.

2.- El pecado judío

Cuando el judío se frota las manos oyendo a Pablo
condenar a los gentiles, Pablo se vuelve también contra
ellos y les quita autoridad para juzgar. El judío juzga a
los que hacen esas cosas, pero Dios es el único que puede
juzgar. El juicio del judío sobre el pagano queda
desautorizado por el hecho de que los judíos hacen lo
mismo que critican. La raíz del juzgar es un
corazón duro e incapaz de cambiar (Rm 2,5), un
corazón ciego y guía de ciegos (vv. 19-20), que
menosprecia la bondad de Dios (v. 4).

En la actitud judía podemos descubrir un
resentimiento bien expresado en la parábola del hijo
pródigo al describir la actitud del hijo mayor, del hijo
fiel. Aun en el caso de que el judío no robe o no adultere
materialmente, la forma dura, envidiosa y presuntuosa con la que
se abstiene de pecar equivale al pecado de los que roban o
adulteran. Es cierto que el fariseo de la parábola no
adulteraba ni robaba, pero despreció al publicano, como el
hermano mayor despreció a su hermano pródigo.
Obrando así, menospreció la benignidad de su
Padre.

La represión lleva al resentimiento. El
judío ha renunciado al ídolo de sus deseos pero
exige una compensación en el derecho a despreciar al
pagano. Cuando juzga, se pone en el lugar de Dios mismo, utiliza
el poder de Dios para autoafirmarse. Utiliza su miedo o su
frustración para encaramarse a sí mismo hasta el
lugar de Dios, haciéndose juez del bien y del
mal

La ira con la que reaccionamos contra el mal del otro es
muchas veces búsqueda de autoafirmación, y por
tanto pecado. No hay salida de este círculo.
Inconsecuencia (quizás solo secreta), resentimiento,
juicio condenatorio.

Solo el profeta puede trasmitir el verdadero juicio de
Dios. El juicio del profeta está movido solo por el dolor
de las víctimas y su solidaridad con ellas. En cambio el
juicio del judío está regido por el propio
interés del que juzga, su autosuficiencia y el deseo de
autoafirmarse.

Veamos el ejemplo de la desautorización del
terrorista en Camus. El terrorista juzga la realidad capitalista
y su juicio es certero al descubrir sus lacras. Pero cuando desea
sustituir esta realidad con la revolución violenta, acaba
perpetuándola. Para el terrorista, la muerte de inocentes
es un precio justificado para desestabilizar la situación
injusta. Son solo efectos colaterales. El terrorista hace lo
mismo que aquellos a quienes combate. Se cree autorizado a
eliminar a los que estorban. Hay una absolutización del
propio juicio. El pecado del enemigo justifica lo
desproporcionado de mi respuesta.

b) Romanos 7

En el pecado que hemos analizado anteriormente
había verdadera responsabilidad, aunque los mecanismos de
defensa impedían que el hombre fuese consciente de esta
realidad que intentaba reprimir. Ese pecado oculto tenía
que ser desenmascarado para poder ser reconocido.

Sin embargo esta no es toda la experiencia humana, Pablo
contempla otras posibilidades. Importante es el caso del hombre
débil que percibe claramente la malicia de sus actos, es
consciente de su propia división, pero se siente impotente
ante ella. Hablamos en este caso de pecados de
debilidad.

En este caso el hombre condena su propio proceder sin
justificarlo. No es el engaño el que le esclaviza, sino la
debilidad de su voluntad. El hombre no desea cometer ese pecado,
pero no puede evitarlo. Hace lo que no quiere, y no hace lo que
de verdad quiere. El hombre se experimenta a sí mismo como
dividido y débil.

La primera pregunta que se nos ocurre hacerle al texto
es de quién está hablando, cuál es el "yo"
sujeto de todos los verbos del capítulo 7,9-25. Algunos,
como Agustín, piensan que el sujeto es el propio Pablo,
que nos estaría dando una página
autobiográfica, describiendo su propia experiencia de
impotencia antes de su conversión. Nosotros con Lyonnet
pensamos que se trata de la experiencia humana a lo largo de la
historia de la salvación

El hombre dividido. Rm 7, 14-24.

Hay una aparente falta de desarrollo lógico.
Varias frases se repiten al pie de la letra. No hay un avance
lineal del pensamiento, sino circular, al estilo
juánico.

González Faus propone tres grandes
párrafos:

  • Tesis: el hombre es carnal y esclavo del pecado. No
    hace lo que quiere, sino lo que no quiere. Eso muestra que
    quien actúa no es él, sino otro que habita en
    él y que es su dueño: el pecado.

  • Segunda Tesis: no parece añadir nada a la
    anterior. Se limita a parafrasearla. Tiene a mano el querer
    el bien, pero no el realizarlo y en esto muestra nuevamente
    que no es el hombre quien actúa sino ese otro que mora
    en él.

  • Conclusión: Debilidad y división del
    hombre. División entre lo que uno quiere y lo que se
    le impone, entre el interior y los miembros. Hay un
    cortocircuito entre la voluntad y los miembros. Hay dos
    dinamismos contrapuestos. El primero (el de la voluntad) es
    más profundo, pero el de los miembros parece ser
    más fuerte.

La debilidad que experimenta el hombre tiene una
raíz muy profunda en su división. No es tanto una
división entre querer y obrar, cuanto una división
entre dos quereres.

La esclavitud del hombre tiene una historia. Esto
significa que de algún modo el hombre es co-autor de la
magnitud de su servidumbre. Es la tragedia del alcohólico
o del drogadicto. Él es cómplice de ese poder que
lo ha invadido y lo tiene ahora bajo su esclavitud. Él lo
dejó pasar en un proceso histórico,

¿Qué significa el hombre por un lado y los
miembros (carne) por otro? Faus no cree que se trata de lo
material-carnal-biológico en cuanto opuesto a lo
espiritual. Por supuesto que esta división existe
también en el hombre y en parte es causa del pecado (por
cansancio, placer, dolor, comodidad, salud). Pero en la
división moral hay otra división mucho más
trágica, entre dos yos, dos dinamismos, ambos interiores:
el que quiere el bien y el que desea el mal. Los dos perros, el
perro bueno y el malo.

Pero el dinamismo bueno es más profundo,
más auténtico y pertenece a la identidad real de la
persona, aunque el malo parezca ser más fuerte. El hombre
bueno es siempre el autentico, aunque se vea invadido dominado y
esclavizado por una potencia ajena a él. Aun obrando el
mal, sigue siendo bueno.

Por eso no se puede medir y concretar la gravedad del
pecado por obras exteriores. Por eso el precepto
evangélico nos prohíbe juzgar.

c) Romanos 5

1.- El texto de Romanos 5,12

Por un hombre entró el pecado en este
mundo

y por el pecado la muerte,

y la muerte pasó a todos,

y por eso todos pecaron.

Trento impone una determinada lectura de Rm 5,12
basándose en que esa es la interpretación y en que
"la Iglesia difundida por toda la tierra siempre lo ha entendido
así (Dz 1514). No falla el dato teológico, pero
sí falla el dato histórico. No ha sido la lectura
de la Iglesia universal, sino la de Agustín, que se apoya
en principio en una mala traducción latina de la
expresión griega ???"????"en el cual" todos pecaron, es
decir, "en el cual pecado todos pecaron". Puso así como
antecedente al pecado de Adán, lo que equivale a afirmar
que todos pecaron en aquel pecado. Adán nos representaba a
todos y nos comprometía a todos en su pecado. Luego,
comprendió que en griego "pecado" se dice ????????? (en
femenino), por lo cual no podía ser el antecedente del
relativo masculino. Por lo cual pasó a poner como
antecedente a Adán, diciendo "en el cual Adán
pecaron todos".

¿Qué significa "todos pecaron"?, ¿a
qué tipo de pecado se refiere? Toda la exégesis
dice que se refiere a los pecados personales de cada uno, por lo
menos también a ellos. En ningún caso se trata
exclusivamente de un pecado colectivo. Así lo ha entendido
la exégesis universal de la Iglesia.

¿Qué significa "en el cual"? Hay tres
versiones posibles:

1.- El antecedente es Adán: "El pecado
entró en el mundo por un hombre en quien pecaron todos".
Es la traducción de Agustín.

2.- El antecedente es la muerte: Por un hombre
entró el pecado en el mundo y por el pecado la muerte, y a
todos alcanzó la muerte (????????) por causa de la cual
pecaron todos. El pecado de Adán creó una
situación universal de muerte que alcanzó a todos
porque les llevó a pecar a todos. Fue esta
situación de muerte introducida por el pecado de
Adán la que hizo pecadores a todos los hombres.

3.- No hay antecedente. Es una locución de
empalme típicamente grecolatina. La locución
completa debería decir ????????????????????: "por cuanto
que todos pecaron". La muerte producida por el pecado de
Adán pasó a todos. Es la que hemos usado en la
traducción del principio: "Por un hombre entró el
pecado en este mundo y por el pecado la muerte, y la muerte
pasó a todos, dado que todos pecaron".

Todavía en esta hipótesis cabría
preguntarse el matiz que tiene el "dado que".

a) Podría ser causal: porque todos pecaron
pasó la muerte a todos.

b) Podría ser condicional: pasó la muerte
a todos al cumplirse la condición de que todos
pecaran.

c) Podría ser ilativo: la muerte pasó a
todos, de donde se ve que todos pecaron.

De momento no necesitamos escoger ninguno de esos
matices.

Volviendo a las tres primeras hipótesis acerca
del antecedente (1, 2 y 3), diremos lo siguiente:

La primera (el antecedente es Adán) está
prácticamente excluida por los exegetas.

La segunda (el antecedente es la muerte) empalma mejor
con el verso siguiente y lo hace inteligible, porque explica
cómo sabemos que había ya pecado antes de la Ley.
Ya que había muerte antes de la ley, tenía que
haber verdadero pecado. No fue un pecado de trasgresión de
la ley, pero sí fue un pecado de antifraternidad creadora
de muerte.

La tercera (sin antecedente) es la más
común entre los padres griegos y la más difundida
en la Iglesia universal. Lo malo es que fue la
interpretación de Julián de Eclano, uno de los
pelagianos enemigos de San Agustín, y por eso fue vista
con malos ojos por Agustín y sus seguidores.

González Faus no opta entre la posibilidad
segunda o tercera. Solo excluye la primera. La traducción
"Y por eso todos pecaron" es suficiente ambigua como para dejar
abiertas la solución 2 y 3.

2.- El contexto

El texto que comentamos es la conclusión de toda
la primera parte de la carta que ha discurrido de la siguiente
forma:

* Parte negativa: Todas las obras son iguales, todos
pecaron

a) rechazo de las obras de los paganos

b) rechazo de las obras de los judíos

* Parte positiva: hay salvación por la fe al
margen de las obras, y eso vale para todos

a) No hay salvación por las obras, sino por
creerse amado por Dios, tal como Jesús nos lo ha
revelado.

b) Ese creerse amado implica un proyecto de Dios sobre
mí, como sobre Abraham.

En ambas partes el acento recae en el "todos". El camino
de las obras es un camino falso para todos, y el camino de la fe
está abierto para todos.

Este camino de la fe ha sido abierto por Jesucristo, una
única persona. Esta unicidad de Jesucristo que abre el
camino para todos, le lleva a Pablo a buscar otro caso parecido,
el de uno solo (Adán) que cerró el camino para
todos. La unicidad de Adán viene atraída por la
unicidad de Cristo y no al revés. No es esa la unicidad
que interesa a Pablo. El "uno" que abrió el camino del
pecado queda relativizado. No vamos todos metidos en ese uno
(Adán), pero sí vamos todos metidos en el verdadero
uno (Cristo).

Sea cual sea la lectura que hagamos de 5,12, nos
volvemos a encontrar con la idea en el verso 19. "Por la
desobediencia de uno solo todos fueron constituidos pecadores".
Este verso rescata un importante aspecto del pecado. El hombre se
hace pecador no solo por sí mismo (aunque también
lo sea), sino que es hecho pecador por los demás. Es
víctima de los pecados de los hombres con los que le une
una solidaridad intrínseca que constituye al ser humano y
que es rastreable hasta llegar al primer hombre.

Por eso el texto de 5,12 tiene un contenido
teológico capital, como siempre ha afirmado la Iglesia y
Trento. Pero además de hablar de esa maldad
intrínseca del hombre, también vemos cómo el
hombre es a la vez víctima de la situación
generalizada de pecado. El hombre se sabe hermano del otro a
quien percibe como pecador y que quizás no es sino una
víctima suya.

3.- El testimonio de la justificación en Romanos
5

A pesar del panorama tan negro que dibuja Pablo sobre la
situación pecadora de la humanidad, hay una
afirmación optimista: Cristo ofrece al hombre una salida
de esa situación sin que el hombre pueda gloriarse de
sí mismo.

Tras hablarnos del itinerario de Abraham en el
capítulo 4, retoma el hilo de sus reflexiones en 4,25:
"Nuestros pecados entregaron a Cristo a la muerte, y su
resurrección nos entrega la justicia". La
traducción elegida subraya la diferencia entre "entregar a
alguien a", y entregar algo a alguien". El pecado entregó
a Cristo a la muerte. Su Resurrección nos entrega la
justicia. El hombre solo puede hacer justicia entregando al
criminal a la justicia, es decir, eliminándolo. Dios hace
justicia no destruyendo al hombre, sino haciéndolo
justo.

¿Qué significa estar
justificados?

Verso 5,1: Estar en paz con Dios gracias a Jesucristo y
por la fe

Verso 5,2a: Estar implantado en la benevolencia divina
gracias a Jesucristo y por la fe.

Verso 2b: Podemos alegrarnos con la esperanza de la
gloria de Dios.

Versos 3-4: Esa alegría es en esperanza
todavía

Verso 5: Aunque esta alegría es todavía en
la esperanza tenemos una garantía: el amor con que Dios
nos ama ha sido derramado en nuestros corazones.

Verso 6: y esto ocurrió no cuando éramos
justos, sino cuando éramos todavía pecadores y
enemigos de Dios.

Verso 7-8: Inciso admirativo de que alguien muera por
los malvados y no por los buenos, pero esta extrañeza
certifica el amor de Dios por nosotros.

Verso 9. Y esta es nuestra máxima
seguridad.

Resumen de toda la argumentación:

Verso 10: Si siendo enemigos hemos sido reconciliados,
cuánto más estando reconciliados viviremos de su
vida.

Verso 11: De donde se sigue que esta es la única
seguridad con la que cuenta el hombre.

En el resto del capítulo se pierde Pablo tratando
de explicar cómo es posible que todos estemos justificados
por uno solo. No debería extrañarnos porque
también por uno fuimos todos condenados. Pero la
salvación es superior a la condenación.

Donde reinó el pecado produciendo la muerte,
reina ahora la Gracia produciendo Vida eterna. Mediante la
justicia humana y gracias a Jesucristo. El hombre está en
paz con Dios aunque sea pecador.

Esto es así, porque a pesar de ser pecador, Dios
lo ha amado en Jesucristo y le ha dado su Espíritu que
habita en el corazón. Este es el único motivo de
seguridad y de alegría esperanzada.

Esta situación de paz-con-Dios no es meramente
una situación fáctica, sino que es una
situación que puede ser conocida, creída y vivida
por el hombre. Esto sucede cuando el hombre no solo es de hecho
amado por Dios, sino que se sabe amado y por eso siente felicidad
y seguridad. Entonces el hombre está en paz con Dios por
la fe.

Hay tres temas que han sido fuentes de preguntas en esta
exposición paulina:

1.- La iniciativa absoluta de Dios, único motivo
de presunción para el hombre, que nos hace justos cuando
todavía éramos pecadores, tiene lugar sin ninguna
preparación posible del hombre. Lejos de estar preparado,
es precisamente cuando el hombre clava al Hijo de Dios en la
cruz, cuando Dios se convierte en fuente de vida nueva para el
hombre a través de la resurrección de Jesucristo.
(Este es el tema de la preparación o inicio de la
justificación que dio pie a la herejía
semipelagiana).

2.- Lo que reconcilia al hombre con Dios es
únicamente el saberse amado por Dios. Es el tema de la
justificación por la fe y no por las obras. Esto plantea
el valor de las obras humanas morales.

3.- El amor de Dios es creador. Su amor por el hombre no
es algo que esté solo en Dios, sino que se convierte en el
don del Espíritu Santo en el corazón del hombre.
Esto ha motivado la disputa sobre el carácter solo forense
de la justificación o el carácter
intrínseco. Para Lutero Dios declara al hombre justo,
decide no tener en cuenta su pecado. Para la Iglesia
Católica Dios hace al hombre justo en realidad. La
justificación no es solo una declaración
jurídica sino una transformación ontológica
del ser del hombre. Porque nos amó nos hizo gratos a sus
ojos y capaces de amar y de corresponder.

Lo dice maravillosamente San Juan de la Cruz en su
Cántico. Dice la esposa

No quieras despreciarme

pues si color moreno en mí
hallaste

bien puedes ya mirarme

después que me miraste,

pues gracia y hermosura en mí
dejaste.

d) Romanos 6

El capítulo 6 de la carta a los Romanos
continúa desarrollando el tema de la salvación,
pero desde un punto de vista diverso[82]Hasta
ahora nos ha hecho descubrir cómo accede uno a la
salvación (gratuitamente, por la fe). Nos ha hablado del
origen de esta salvación que está en el amor de
Dios por los pecadores cuando todavía eran pecadores, y en
el envío de su Hijo en una carne semejante a la del
pecado. Nos ha explicado el acontecimiento que ha hecho posible
nuestra salvación y nos ha mostrado cómo si el
pecado de Adán se extendió a toda la humanidad, con
mucha mayor razón la gracia de Cristo sobreabunda hoy
hasta alcanzar a todos. La humanidad que fue solidaria en el
pecado del viejo Adán va a ser solidaria también de
la gracia del Nuevo Adán ofrecida a todos los
descendientes del viejo.

A partir de aquí Pablo pasa a hablar del
contenido de la salvación, es decir, de sus elementos
constitutivos. Este contenido tiene un elemento negativo: la
liberación del pecado y de la ley, o sea la muerte al
pecado (Rm 6-7), y otro elemento positivo que es el don del
Espíritu Santo (Rm 8). Así lo había descrito
el profeta Ezequiel cuando dijo "De todas sus inmundicias les voy
a purificar y les daré un corazón nuevo y
derramaré en ustedes un Espíritu nuevo" (Ez
36,25-26).

Estos dos aspectos son interdependientes. El
Espíritu solo puede ser infundido en un corazón
purificado. Dios no pone el vino nuevo de su Espíritu en
el odre viejo del pecado. Pero ambas acciones son
simultáneas porque solo el don del Espíritu es el
que puede librar al hombre de su condición pecadora. El
día de Pentecostés Pedro dice que para recibir el
Espíritu santo deben arrepentirse primero.

Al final del capítulo 5, Pablo terminaba diciendo
que la gracia sobreabundó donde abundó el pecado
(Rm 5,20). Alguno podría concluir: entonces vamos a seguir
pecando para que sobreabunde más la gracia. El pecca
fortiter et crede fortius
(peca fuerte y cree más
fuerte) de Lutero. Pablo contesta que no es posible, porque la
Gracia supone precisamente la exclusión del
pecado.

Vemos dos secciones en este capítulo que
está estructurado en torno a una pregunta repetida dos
veces: "¿Qué diremos entonces?" y
"¿Cómo entonces?" (vv. 1 y 15). Las acompaña
una misma interpelación: ¡Nunca jamás!", y
una segunda pregunta: "¿Ignoráis pues?" y
"¿No sabéis que?" (vv. 2 y 16).

Esta situación se resume en dos frases, una que
encabeza la primera sección y otra que la
clausura:

"Ya no podemos pecar, porque hemos muerto al pecado"
(6,2)

"El pecado no puede dominarles porque no están
bajo la Ley, sino bajo la Gracia" (6,14).

Se da una incompatibilidad entre la fe y el pecado. En
primer lugar, el cristiano está como muerto al pecado. En
segundo lugar está muerto al pecado porque ya no
está bajo la Ley, sino bajo la Gracia. El creyente vive
una situación totalmente nueva.

El cambio de situación lo describe Pablo con
estas palabras:

a) La muerte

Verso 3: La gracia sumerge al hombre en la muerte de
Cristo, simbolizada en el bautismo por
inmersión.

Verso 4: Lo injerta en esa muerte.

Verso 5: Lo sepulta en esa muerte.

Verso 6: Para que muera nuestro yo pecador y no sirvamos
ya al pecado.

b) La resurrección

Verso 5b: La gracia nos injerta también en la
resurrección de Cristo

Verso 4b: Para que vivamos su novedad humana.

Este cambio en la situación del hombre implica un
cambio en su conciencia, en su manera de percibirse a sí
mismo. Abundan los verbos de conocimiento:
???????????????????????????????????

??????????? Uno se tiene que considerar a sí
mismo muerto al pecado y vivo para Dios (versos 9-11)

Y es lógico que el pecado ya no reine en nuestras
personas, sino que nos sintamos como resucitados ante Dios y
miremos nuestras facultades como instrumentos de justicia (versos
12-13)

La argumentación de Pablo nos decepciona porque
suena a idealista. Parece como si ya la lucha hubiese concluido,
mientras que experimentamos que la lucha contra el pecado sigue y
experimentamos continuas derrotas.

Recordemos que la conversión de Pablo
había sido muy radical y él habla todo el tiempo
inspirado por esa experiencia personal suya. No hace una lectura
jurídica como la lectura escolástica que hablaba de
la aplicación de los méritos de Cristo, sino de la
realidad de una inserción en su Muerte y
Resurrección. Esto supone un cambio real en el hombre y en
su situación. Un cambio objetivo que se traduce
inmediatamente en un cambio subjetivo en la manera que tiene de
percibirse a sí mismo. No podemos dar de lado ninguno de
los dos aspectos de este cambio.

El lenguaje sobre la salvación cristiana es un
lenguaje sobre la salvación de la libertad y esta
expresión resulta contradictoria, porque intuimos que solo
la libertad puede salvarse a sí misma. Pero Dios y solo
Dios puede mover la libertad desde dentro de ella misma. Dado que
la libertad es algo social, mundano e histórico, el
movimiento interno de Dios llegará siempre a través
de de la historia y del mundo exterior al hombre: un hecho de
esta historia y perteneciente a esta comunidad humana (como la
muerte de Jesús) es lo que provoca la efusión del
Espíritu en el corazón de los hombres.

La descripción del aspecto objetivo de la
salvación habrá de echar mano de aquellas
experiencias deficientes de salvación de la libertad que
se dan en el campo de la relación humana. Por ejemplo el
hecho de que un cambio de estructuras puede posibilitar al hombre
un cambio en su interior, pero no se lo otorga
automáticamente.

Porque Pablo es consciente de esta interrelación
entre lo exterior y lo personal, añade en su texto un
detalle que hasta el momento no hemos mencionado por razones
pedagógicas, pero que no puede ser dejado en silencio: el
cambio de inserción del hombre en la muerte y
resurrección de Cristo tiene lugar en el bautismo del
hombre. En el bautismo se escenifica la muerte del hombre viejo y
su nacimiento a la vida. Solo el bautismo por inmersión
visualiza esta escena. Al sumergirse el hombre pecador en el
agua, muere y es enterrado en ella, "se ahoga". Al emerger del
agua en un segundo momento ya no es la misma persona que
murió en ella, sino un hombre nuevo. Alguien distinto. La
teología dice que si falleciera en ese momento de salir
del agua iría directamente al cielo, sin tener nada que
purgar, porque el agua del bautismo le ha lavado de todas sus
culpas, de un modo más eficaz que el sacramento de la
reconciliación, tras el cual hay que realizar
todavía una penitencia.

Para Pablo la fe tiene que culminar en el bautismo. Solo
en él se llega a participar plenamente de la
salvación ofrecida. Es un bautismo en la muerte de Cristo
(Rm 6,3), muriendo con Cristo para resucitar con él, para
llevar una vida resucitada. El cuerpo pecador muere, y del agua
bautismal surge un hombre nuevo, vivo para dios en Cristo
Jesús.

Ser bautizado es ser injertado en la muerte de Cristo,
ser sepultado como muerto con él, para reaparecer con
él en la misma vida de Dios. Pablo tiene ante sus ojos
solo el bautismo de adultos, como meta de un proceso de
conversión a la fe como había sido el suyo propio.
La práctica generalizada y casi exclusiva del bautismo de
niños convirtió la meta en punto de partida. El
bautismo de niños ya no realiza la inserción en la
muerte y resurrección actuando, expresando y ejercitando
la conciencia de ella, sino de un modo inconsciente y
automático. Este mecanicismo fue a dar en la
concepción magicista del bautismo que luego ha repercutido
en todos los sacramentos.

Pablo habla del bautismo para el adulto que lo recibe
como adulto y llega a él con una conciencia serena y
rotunda de que la vida que asume para su futuro es una
auténtica muerte a toda una forma de ser hombre que el
ambiente que le rodea propugna. Pero él está cierto
de que tras la muerte existe una posibilidad de vida nueva e
infinitamente más humana.

Ahora podemos entender la respuesta de Pablo a la
objeción: ¿Cómo vais a pecar si
sabéis que estáis trasladados a la atmósfera
de Cristo, cuya vida fue tan contraria al pecado que el mismo
mundo acabó quitándolo de en medio y el mismo Dios
le hizo vivir de su propia vida?

Una fe meramente sociológica o meramente nocional
no podrá comprender la respuesta de Pablo (al menos en sus
niveles de conciencia explícita). Esa fe únicamente
quiere ganarse una salvación futura, pero todavía
no sabe que puede experimentar una salvación presente.
Semejante fe no podrá comprender la afirmación
paulina. Pero la fe que se define como confianza en la
salvación, como apertura al amor que parece ofrecerse,
como fe en el Amor, no tendrá problemas para entender que
la Gracia que recibe en el mismo hecho de creer es la que, en
cierto sentido, hace imposible el pecado.

La Gracia recibida en el acto de creer, al imposibilitar
el pecado, es una redención de la dimensión
ética del hombre.

No reinará en ustedes el pecado, porque ya no
están bajo la Ley sino bajo la Gracia (6,14). No tienen
fuera ningún precepto que se les imponga, sino solo dentro
en el Amor que les llama.

La liberación de la Ley:

Pablo responde a una segunda objeción. Si ya no
estamos bajo la Ley, ¿por qué no seguir
pecando?

Cada uno es esclavo de aquello a lo que
obedece

– o del pecado, y entonces acabará en la
muerte

– o en la docilidad a la voz interior del Amor y
entonces acabará liberado el hombre (6,16).

Igualmente ustedes, eran esclavos del pecado, pero han
abierto su corazón a la doctrina de la
justificación por la fe, y han pasado de esclavos del
pecado a esclavos de la justicia (6,17-18).

La expresión de "esclavos de la justicia" no
resulta muy feliz y Pablo intenta matizarla. "Digo esclavos para
que lo entienda vuestra carne que es la parte más
débil de ustedes". La libertad humana nunca es una
libertad absoluta, siempre se da dentro de una
vinculación, porque elegir es ya ser de uno o de
otro.

Preguntas sobre
Pablo

TEMA 1: Fuentes para el estudio de
Pablo

  • 1. ¿Cuántas y
    cuáles son las cartas de Pablo consideradas
    unánimemente como auténticas?

  • 2. ¿Cómo llamamos a
    las cartas de paternidad dudosa?

  • 3. ¿Cuántas y
    cuáles son las cartas de paternidad dudosa?

  • 4. ¿Cómo valoras el
    hecho de la pseudonimia? ¿Es un fraude?

  • 5. Cita otros casos de libros
    bíblicos pseudónimos.

  • 6. Cabe distinguir grados de
    autenticidad en las cartas deuteropaulinas?

  • 7. Da algún ejemplo de
    cartas actuales que probablemente recogen diversos fragmentos
    de distintas cartas de Pablo.

  • 8. El hecho de algunas
    discrepancias entre datos sobre Pablo en Hechos y en sus
    cartas ¿quita fiabilidad histórica a los Hechos
    como fuente de conocimiento del Pablo
    histórico?

  • 9. Cita alguno de los casos en los
    que Lucas en el evangelio ha modificado datos concretos sobre
    la historia de Jesús.

  • 10. Cita tres discrepancias entre
    los datos históricos paulinos en Hechos y en las
    cartas.

  • 11. Cita tres discrepancias entre
    la figura de Pablo tal como aparece en Hechos y tal como
    aparece en las cartas.

  • 12. Cita tres discrepancias entre
    la teología de Lucas en Hechos y la teología de
    Pablo en sus cartas.

  • 13. ¿Cuáles son los
    principales subrayados que Lucas quiere hacer en su
    presentación de la figura, la historia y el mensaje de
    Pablo?

  • 14. ¿Cuál es el
    verdadero protagonista de la segunda obra lucana?

  • 15. ¿Cuál es el
    desplazamiento que Lucas quiere historiar?
    ¿Quién se desplaza? ¿De dónde a
    dónde?

TEMA 2: Cronología
paulina

  • 16. ¿Qué entendemos
    por cronología relativa y cronología
    absoluta?

  • 17. ¿Qué textos
    paulinos son más útiles a la hora de recomponer
    la cronología relativa de san Pablo?

  • 18. ¿Qué datos de
    Hechos pueden ser útiles para recomponer la
    cronología relativa de san Pablo?

  • 19. ¿Qué datos de
    Hechos son indispensables para recomponer una
    cronología absoluta de Pablo?

  • 20. Según el libro de los
    Hechos ¿es fácil contestar a la pregunta sobre
    si Pablo fue absuelto la llegar a Roma o fue
    ejecutado?

  • 21. ¿Cuáles son los
    argumentos aducidos por los que piensan que en esa
    ocasión Pablo fue absuelto y continuó
    algún tiempo su misión hasta su segunda
    prisión en Roma y su ejecución?

  • 22. ¿Qué sabemos
    sobre la fecha del reemplazo de Félix por Festo como
    gobernador romano?

  • 23. ¿Por qué es
    importante saber la fecha en la que Galión fue
    gobernador en Corinto?

  • 24. ¿Cuál es la
    fecha más probable del encuentro entre Pablo y
    Galión?

  • 25. ¿Cuántos viajes
    hizo Pablo a Jerusalén según Hechos, y
    según las cartas paulinas?

TEMA 3: Años de juventud y
preparación

  • 26. ¿En qué texto de
    Hechos se muestra más claro el bilingüismo de
    Pablo y su doble pertenencia a la cultura judía y a la
    griega?

  • 27. Expón algunos datos
    sobre la ciudad de Tarso y su relevancia en la vida de
    Pablo.

  • 28. ¿Cómo eran las
    religiones mistéricas griegas que Pablo conoció
    en su ciudad?

  • 29. ¿Cómo
    contribuiría su vida en Tarso a su actitud general
    hacia los gentiles?

  • 30. ¿En qué se nota
    que Pablo fue un hombre urbano y no un campesino?

  • 31. ¿Qué actitud
    mostró Pablo hacia Roma y su imperio? ¿En
    qué datos se refleja esta actitud?

  • 32. ¿Qué ventajas el
    ofreció a Pablo el hecho de ejercer su oficio de
    tejedor de tiendas?

  • 33. ¿En qué texto se
    gloría más Pablo de su ascendencia
    judía?

  • 34. ¿Qué tipo de
    educación pudo haber recibido Pablo en
    Tarso?

  • 35. ¿Qué pensar
    sobre la estancia de Pablo en Jerusalén antes de su
    conversión?

  • 36. ¿Cuáles eran las
    dos escuelas rabínicas principales y qué
    representaban?

  • 37. ¿Conoció Pablo a
    Jesús en su vida mortal?

  • 38. ¿Quiénes fueron
    los cristianos objeto de la primera persecución en la
    que muere Esteban?

  • 39. ¿Qué efecto tuvo
    la huida de estos discípulos?

  • 40. ¿Quién fue el
    rabino de la escuela de Hillel que adoctrinó a Pablo
    durante su estancia en Jerusalén?

TEMA 4.- En el camino de
Damasco

  • 41. ¿Por qué duda
    Bornkmann de que la aparición de Jesús tuviese
    lugar en el camino de Damasco, cuando Pablo viajaba
    allí para perseguir a los cristianos?

  • 42. ¿Con qué
    términos designa Pablo el fenómeno de su
    encuentro con Cristo?

  • 43. ¿En qué tres
    ocasiones nos narra Lucas la aparición de Jesús
    a san Pablo? ¿En boca de quién está cada
    uno de estos relatos, y en qué contexto?

  • 44. ¿Cuál es la
    importancia de la intervención de
    Ananías?

  • 45. ¿Cómo
    transcurrió la vida de Pablo en esos tres primeros
    días después del encuentro con
    Jesús?

  • 46. ¿Cuál fue el
    gran descubrimiento que cambió la vida del
    perseguidor?

  • 47. ¿Cómo expresa
    Pablo en su carta a los Filipenses el cambio experimentado en
    él?

  • 48. ¿Cómo expresa
    Pablo esa aparición cuando nos da la lista de las
    apariciones de Jesús en 1 Corintios 15?

  • 49. Cita algunos de los textos en
    los que Pablo expresa su relación con sus
    discípulos en términos de
    paternidad.

  • 50. ¿Cómo expresa
    Pablo su necesidad de evangelizar a partir del encuentro con
    Cristo?

TEMA 5.- Contemplativo en la
acción

  • 51. ¿Dónde hay que
    situar la fuente de toda la sabiduría de
    Pablo?

  • 52. ¿Cómo y
    dónde describe una de sus grandes visiones en la que
    fue arrebatado al tercer cielo?

  • 53. Cita algunos ejemplos de
    cómo Pablo se dejo guiar por el Espíritu en sus
    viajes a través de profecías o
    visiones.

  • 54. Cita alguna de las visiones
    que le alentaron a Pablo en momentos de desaliento y
    depresión. ¿Cuándo tuvieron lugar?
    ¿Qué es lo que escuchó?

  • 55. ¿Cómo valora
    Pablo el don de lenguas?

  • 56. Cita algunas de las cosas que
    Pablo pedía para los suyos en sus
    oraciones.

  • 57. ¿Qué
    oración de Pablo no fue escuchada por Dios y
    cómo reaccionó Pablo ante esta negativa
    divina?

TEMA 6.- El primer viaje
apostólico

  • 58. ¿Cómo
    surgió la iniciativa del primer viaje misionero?
    ¿Dónde? ¿Cuándo?
    ¿Quiénes viajaron? ¿Quién fue el
    líder del grupo?

  • 59. ¿Qué regiones
    fueron visitadas en este primer viaje?

  • 60. ¿Quiénes era los
    "prosélitos"? ¿Quiénes eran los
    "temerosos de Dios"?

  • 61. ¿Cuáles fueron
    las principales penalidades que Pablo tuvo que sufrir en sus
    viajes?

  • 62. ¿Qué sabemos
    sobre la salud de San Pablo y de cómo le afectó
    la enfermedad en su vida apostólica?

  • 63. ¿Qué le dio
    fuerzas a Pablo para soportar todas estas
    penalidades?

  • 64. ¿De qué es
    modelo el relato de la predicación de Pablo en
    Antioquía de Pisidia?

  • 65. ¿Qué
    suponía la sinagoga en las comunidades judías
    de la diáspora?

  • 66. ¿Cuál fue el
    resultado de este sermón?

  • 67. Cuenta tres ejemplos de
    milagros sucedidos en el ministerio de Pablo.

  • 68. ¿Cuál es el
    resumen de las dos características que
    acompañan siempre la vida del apóstol
    según 2 Cor 12,12?

  • 69. ¿Fue la misión
    de san Pablo a los gentiles una misión exclusiva?
    ¿En qué sentido?

  • 70. ¿En qué ciudad
    fue apedreado Pablo y cuál de sus más
    íntimos compañeros era natural de esa
    ciudad?

TEMA 7.- Los judaizantes y la asamblea
de Jerusalén

  • 71. ¿Cuál era la
    tesis de los judeocristianos más radicales acerca de
    la actitud que convenía tomar respecto a los
    gentiles?

  • 72. ¿Cómo
    interpretar la crisis entre los cristianos de habla griega y
    hebrea en Jerusalén y el nombramiento de los
    diáconos en Hch 6,1?

  • 73. ¿Quién era el
    Santiago que intervino en la asamblea de Jerusalén y
    qué representaba?

  • 74. ¿Qué era lo que
    en el fondo estaba en juego en la controversia de
    Jerusalén?

  • 75. ¿Cuál era la
    tesis de Pablo respecto a la correcta actitud hacia la
    conversión de los gentiles?

  • 76. ¿Cuál fue
    según Lucas el contexto que dio pie a la asamblea de
    Jerusalén?

  • 77. Compara los datos de la
    asamblea tal como aparecen en Hch 15, con la versión
    que da Pablo en Ga 2,9-10.

  • 78. ¿Quiénes
    intervinieron en la asamblea y cuál fue la postura de
    cada uno?

  • 79. ¿Cuáles fueron
    las conclusiones de la asamblea?

  • 80. Menciona las cláusulas
    restrictivas y su alcance.

  • 81. Menciona el problema de
    crítica textual que hay en el texto de las
    cláusulas restrictivas, y el significado que puede
    tener cada una de las dos variantes principales.

  • 82. Explica el "incidente de
    Antioquía" entre Pedro y Pablo, y el significado que
    tiene, y expón la distinta valoración que se
    hace de este incidente.

TEMA 8.- La vocación al
apostolado

  • 83. ¿Qué significa
    la palabra "apóstol" en Lucas y qué significa
    en Pablo?

  • 84. ¿Cómo matiza
    Pablo con humildad la gloria de su llamada al
    apostolado?

  • 85. ¿Qué
    relación establece Pablo entre su ministerio y el de
    Pedro?

  • 86. ¿Constituye el
    incidente de Antioquía una razón contra la
    infalibilidad pontificia?

  • 87. Explica la primera credencial
    de Pablo: su ministerio en territorios
    vírgenes.

  • 88. Explica la segunda credencial
    de Pablo: su desinterés.

  • 89. Explica la tercera credencial
    de Pablo: su comportamiento.

  • 90. Explica la cuarta credencial
    de Pablo: sus sufrimientos.

  • 91. Explica la quinta credencial
    de Pablo: la de su judaísmo.

  • 92. Explica la sexta credencial de
    Pablo: sus comunidades.

TEMA 9.- El "segundo" viaje de San
Pablo

  • 93. ¿Por qué en el
    título de esta sección la palabra "viaje" va
    entre comillas?

  • 94. ¿Cuáles fueron
    las consecuencias del distanciamiento entre Pablo y
    Bernabé?

  • 95. ¿Quién se
    agregó al grupo de misioneros en el transcurso del
    viaje?

  • 96. ¿Qué
    motivó el desvío de Pablo para visitar la
    Galacia del norte? ¿Quiénes eran estos
    gálatas?

  • 97. ¿Qué le hizo
    cambiar a Pablo su plan de viaje hacia Éfeso,
    llevándole a visitar antes Macedonia?

  • 98. ¿Qué son los
    pasajes "nosotros" del libro de los Hechos y cuál
    puede ser su origen?

  • 99. ¿Qué sabes de la
    ciudad de Filipos?

  • 100. ¿Quiénes fueron
    las primeras personas creyentes en Filipos?

  • 101. ¿Qué
    ocasionó la prisión de Pablo en Filipos y
    cómo fue liberado de ella?

  • 102. Explica la importancia del
    carácter urbano de las comunidades fundadas por
    Pablo.

  • 103. ¿Qué otras
    comunidades fundó Pablo en Macedonia y cómo
    tuvo que salir de ellas?

  • 104. ¿Qué se sabe
    sobre la comunidad de Tesalónica a partir de la
    primera carta que Pablo les escribió?

  • 105. ¿Cómo era la
    esperanza que Pablo tenía de la segunda
    venida?

  • 106. ¿Qué
    importancia simbólica tiene la estancia de Pablo en
    Atenas?

  • 107. Explica lo más
    significativo del discurso de Pablo en el
    Areópago.

  • 108. ¿Cuál fue el
    resultado de la visita de Pablo a Atenas?

  • 109. ¿Cuál fue el
    estado de ánimo de Pablo en su llegada a Corinto y a
    qué se debió?

  • 110. ¿Qué factores
    influyeron en la recuperación de su
    ánimo?

  • 111. ¿Qué
    importancia tiene la primera visita de Pablo a Corinto a la
    hora de fijar la cronología paulina?

TEMA 10.- Las cartas
paulinas

  • 112. ¿Cuál fue la
    primera de las cartas de Pablo?

  • 113. Señalar alguno de los
    rasgos personales de Pablo que es posible captar en cada una
    de las cartas

  • 114. Señala alguno de los
    contrastes principales que hay en la personalidad de Pablo
    según aparece en sus cartas.

  • 115. ¿Cómo maneja
    Pablo la Sagrada Escritura en sus cartas?

  • 116. Cita algunos de los rasgos
    que caracterizan al Pastor en las cartas de Pablo.

  • 117. ¿A qué nos
    referimos cuando hablamos de la "importancia contextual" en
    las exposiciones teológicas que hace San Pablo en sus
    cartas?

TEMA 11.- El último viaje
misionero de Pablo

  • 118. ¿De dónde surge
    la idea de la colecta a favor de los pobres de
    Jerusalén?

  • 119. ¿En qué se
    parece esa colecta al óbolo del templo dentro del
    judaísmo?

  • 120. ¿Fue aceptada la
    colecta por los dirigentes de la Iglesia de
    Jerusalén?

  • 121. ¿Qué fuentes
    tenemos para la historia de la prisión de Pablo en
    Jerusalén y Cesarea y el subsiguiente viaje a
    Roma?

  • 122. Lucas utiliza para esta parte
    de la pasión de Pablo el recurso del paralelismo.
    ¿En qué consiste el paralelismo en este caso
    concreto? Reseña algunos de los paralelismos
    más notables.

  • 123. ¿Cómo se
    llamaba el tribuno romano que detuvo a Pablo en el
    templo?

  • 124. ¿Por qué el
    tribuno decidió enviar a Pablo a Cesarea para ser
    juzgado allí por el gobernador?

  • 125. Señala alguno de los
    incidentes más importantes del juicio de Pablo en
    Cesarea por parte de los dos prefectos consecutivos que
    atendieron su caso.

  • 126. Comenta alguno de los
    incidentes que tuvieron lugar durante el traslado por barco
    de Pablo a Roma.

  • 127. Describe la condición
    de la prisión de Pablo en Roma durante los dos
    años que duró.

  • 128. ¿Qué nos hace
    pensar que según la narración lucana Pablo ya
    no fue liberado de esta prisión sino que fue ejecutado
    a su término?

TEMA 13.- La carta a los
filipenses

  • 129. ¿Qué sabes
    sobre la ciudad de Filipos, su historia, su
    emplazamiento?

  • 130. ¿Cuál era la
    situación de la comunidad judía en la
    ciudad?

  • 131. ¿Cuándo
    escribió la carta Pablo y en qué
    situación estaba cuando la escribió?

  • 132. ¿Cuáles son las
    motivaciones principales de la carta?

  • 133. Resume los problemas de
    crítica literaria que presenta la carta, y las
    distintas soluciones que se dan a este problema.
    ¿Cuál de ellas prefieres?

  • 134. ¿Cómo
    experimenta Pablo el hecho de estar en la cárcel y
    esperando una sentencia que puede ser de muerte?

  • 135. ¿Cuál es el
    contexto del himno cristológico y en qué medida
    este himno ilumina ese contexto?

  • 136. ¿Toma Pablo este texto
    de alguna tradición o lo escribe él
    personalmente?

  • 137. Señala las dos partes
    del himno.

  • 138. ¿Qué diferencia
    hay entre traducir ????????por "vaciarse" o por
    "derramarse"

  • 139. ¿Cuál es el
    alcance del título de ????????aplicado a Cristo en el
    himno?

  • 140. ¿Qué pretende
    demostrar Pablo en el texto autobiográfico?

  • 141. ¿Por qué dice
    Pablo que los judeocristianos se glorían en sus
    vergüenzas?

  • 142. ¿Qué elemento
    importante de la escatología nos revela Pablo cuando
    nos habla de su actitud ante la muerte?

  • 143. ¿En qué es
    distinta esta escatología de la que aparece en 1 Ts y
    1 Cor?

  • 144. Recuerda algunas de las
    circunstancias e incidentes en la vida de Pablo a los que
    él llama su "muerte".

  • 145. ¿Cuáles son los
    frutos que esta muerte le reporta?

Bibliografía paulina

(Algunos libros principales en la
biblioteca del Seminario San Luis Gonzaga de
Jaén)

1. Repertorios:

AA. VV., Comentario al Nuevo Testamento, 2
vols., La Casa de la Biblia, Madrid 1995.

brown, r. e., j. a. fitmyer y r. e. murphy (eds.),
Nuevo Comentario bíblico San Jerónimo. Nuevo
Testamento
, Verbo Divino, Estella 2004, 272-466; 1097-1109;
1176-1224.

Colección Cuadernos bíblicos, Verbo
Divino, Estella: Las cartas a los Corintios (nº 22
y 66); San Pablo en su tiempo (nº 26); La Carta
a los Filipenses. La carta a Filemón
(nº 33);
La carta a los Gálatas (nº 34); La
primera carta a los Tesalonicenses
(nº 39; La
segunda carta a los Corintios
(nº 51); La carta a
los Romanos
(nº 65); Las cartas pastorales
(nº 72); Las cartas a los Colosenses y a los
Efesios
(nº 82); Vocabulario de las
epístolas paulinas
(nº 88); Pablo el
pastor
(nº 126).

levoratti, j., Comentario bíblico
latinoamericano. Nuevo Testamento
, Verbo Divino, Estella
2003, 777-1046.

pritchard, j. b. (ed.), Atlas de la Biblia, The
Times- Plaza & Janés, Barcelona 1991.

profesores de la compañía de jesús,
La Sagrada Escritura. Nuevo Testamento, vol II, 2ª
ed., BAC [261], Madrid 1962.

profesores de salamanca, Biblia comentada, vol.
VI, "Hechos de los apóstoles y epístolas paulinas",
BAC [243], Madrid 1965.

ravassi, g., Atlas histórico de la
Biblia
, S. Pablo Madrid 2004, 220-228.

2. Estudios generales:

amiot, f., Ideas maestras de San
Pablo
, Sígueme, Salamanca 1966.

barbaglio, g., La teología de
San Pablo,
Secretariado trinitario, Salamanca
2005.

bornkamm, g., Pablo de Tarso,
3ª ed., Sígueme, Salamanca 1987.

debergé, p., Pablo el
pastor
, (Cuadernos bíblicos 126), Verbo Divino,
Estella 2005.

decaux, a., El aborto de Dios, una
biografía de S. Pablo
, Bogotá 2006.

drane, j., Pablo, Verbo Divino,
Estella 1984.

fabris, r., Pablo el apóstol de
las gentes
, Paulinas, El Hatillo (Venezuela)
1999.

fitzmyer, j. a., Los Hechos de los
apóstoles,
2 vols., Sígueme, Salamanca
2003.

fitzmyer, j. a., Teología de San
Pablo
, Ediciones Cristiandad, Madrid 1975.

gnilka, j., Pablo de Tarso,
apóstol y testigo
, 2ª. ed., Herder, Barcelona
2002.

gonzález ruiz, j., El evangelio
de Pablo
, Madrid 1977.

gutiérrez martín, d.,
Pablo, perfil psicológico de un apóstol,
BAC, Madrid 1999.

holzner, j., San Pablo, heraldo de
Cristo
, 10ª ed., Herder, Barcelona 1975.

murphy o"connor, j., Pablo, su
historia
, San Pablo, Madrid 2008.

sánchez bosch, j., Maestro de
los pueblos
. Una teología de Pablo, el
apóstol
, Verbo Divino, Estella 2007.

sánchez bosch, j., Escritos
paulinos
, (Introducción al Estudio de la Biblia vol.
7), Verbo Divino, Estella 2004.

vanni, u., La plenitud en el
Espíritu. Una propuesta de espiritualidad paulina
,
San Pablo, Madrid 2006.

vidal, s., Pablo de Tarso a Roma,
Sal Terrae, Madrid 2007.

vidal, s., Iniciación a
Pablo
, Sal Terrae, Madrid 2008.

vidal, s., El proyecto mesiánico
de Pablo
, Sígueme, Salamanca 2005.

3.- Exégesis de algunas
cartas:

barth, k., Carta a los Romanos,
BAC, Madrid 2002.

bruce, f. f., Un comentario de la
epístola a los Gálatas
, Editorial Clio,
Barcelona 2004.

díaz rodelas, j. m., Primera
carta a los Corintios
, Verbo Divino, Estella
2003.

gil albiol, c. j., Primera y segunda
cartas a los Tesalonicenses
, Verbo Divino, Estella
2004.

kertelge, k., Carta a los Romanos,
Herder, Barcelona 1979.

pastor ramos, f., 1 Corintios,
PPC, Madrid 2006.

pastor ramos, f., Corpus paulino
II
, Desclée de Brouwer, Bilbao 2005.

schlier, h., La carta a los
Efesios
, Sígueme, Salamanca 1991.

schlier, h., La carta a los
Gálatas
, Sígueme, Salamanca 1975.

ramírez fueyo, f.,
Gálatas y Filipenses, Verbo Divino, Estella
2006.

Autor:

Juan Manuel Martín-Moreno
SJseminario mayor san luis gonzaga (jaén)

[1] Así, en un libro reciente j.
murphy o’connor admite como cartas auténticas la
carta a los Colosenses y la segunda a Timoteo y
consiguientemente utiliza los numerosos datos
biográficos contenidos en ellas para recomponer la
biografía del apóstol (Pablo, su historia, San
Pablo, Madrid 2008).

[2] j. j. bartolomé, “La escuela
paulina”, en j. j. bartolomé, Pablo de Tarso. Una
introducción a la vida y a la obra de un apóstol
de Cristo, CCS, Madrid 1997, p. 282.

[3] j. j. bartolomé, “La
herencia de Pablo. el corpus paulino, en j. j.
bartolomé, Pablo de Tarso. Una introducción a la
vida y a la obra de un apóstol de Cristo, CCS , Madrid
1997.

[4] Cf. las Tablas IXa y IXb de mi pagina
Web:
www.upcomillas.es/personal/jmmoreno/cursos/lucas/Tablas/TablaIX.htm

[5] j. gnilka, Pablo de Tarso, apóstol
y testigo, 2ª. ed., Herder, Barcelona 2002, p. 20.

[6] j. a. fitzmyer, Los Hechos de los
apóstoles, vol. I, Sígueme, Salamanca 2003, p.
199-201.

[7] Para este tema cf. j. a. fitzmyer, op.
cit, vol. I, p. 213-218; j. gnilka, op. cit, p. 305-308.

[8] La polémica arranca a partir de un
artículo de Vielhauer que enfrentó al Pablo
auténtico con el Pablo lucano, exagerando sus
diferencias (Cf. ph. vielhauer, “Zum Paulinismus des
Apostelgeschichte”, EvT 10 (1950-51), p.1-15. Fue el
pistoletazo de salida de un intenso debate en el que Vielhauer
proponía cuatro puntos principales de radical desacuerdo
entre el Pablo auténtico de las cartas y el Pablo lucano
de Hechos.

[9] Para este tema de la soteriología
lucana ver el artículo en inglés Atonement.

[10] j. a. fitzmyer, op. cit, vol. I, p.
217.

[11] La presente Tabla está inspirada
en la de j. a. fitzmyer, Los Hechos de los Apóstoles,
vol. I, p. 204-205. Hemos introducido algunas variaciones y
adiciones en algunos puntos.

[12] j. a. fitzmyer, Los Hechos de los
Apóstoles, vol. I, p. 206-208. Siguiendo el
vínculo se puede consultar la tabla tal como la presenta
Fitzmyer sin nuestras modificaciones.

[13] 1 Clemente, 5,5-7.

[14] eusebio de cesarea, Historia
eclesiástica 11,22.

[15] flavio josefo, Antigüedades de los
judíos, 20, 8, 9.

[16] Cf. j. gnilka, op. cit., p. 301-302.

[17] Para la fechación del gobierno de
Galión en Corinto se puede consultar el siguiente
Powerpoint.

[18] j. gnilka, op. cit., p. 66-72.

[19] Frente al dato de Lucas afirmando que
Pablo era natural de Tarso, algunos hacen valer una cita de
Jerónimo, según el cual, Saulo y su familia eran
oriundos de Giscala en Galilea y posteriormente habían
emigrado a Tarso, o habían sido deportados allí
por los romanos (“De viris illustribus”, PL 23,
646. Cf. j. gnilka, op. cit., p. 26). Con Gnilka pensamos que
Pablo nació claramente en Tarso, pero puede ser que su
familia fuera oriunda de Galilea, de donde habría sido
deportada a Tarso quizás al comienzo de la
dominación romana con Pompeyo en 63 a.C.

[20] Algunos no aceptan el dato
exclusivamente lucano de que Pablo fuera ciudadano romano. Pero
solo un ciudadano romano podía exigir que se tramitara
en Roma su causa. Si negamos que Pablo fuera ciudadano
habría que rechazar todo el relato de la prisión
de Pablo en Cesarea y su traslado a Roma para ser juzgado
allí en el tribunal del César. Cf. S. Vidal,
Iniciación a Pablo, p. 44.

[21] Sobre la edad de Pablo no tenemos
más dato que el de Hch 7,58, donde dice que los que
lapidaron a Esteban dejaron sus vestidos a los pies de un
“joven” llamado Saulo. Si aceptamos este dato como
histórico habría que suponer que tendría
menos de 20 años. Esto nos llevaría a suponer que
nació en la primera década del siglo I d.C. y que
murió con cerca de 60 años de edad.

[22] Algunos dudan sobre la
información de Lucas sobre la estancia de Pablo joven en
Jerusalén aprendiendo en la escuela de Gamaliel (cf. S.
Vidal, op. cit., p. 41). Según Vidal, Pablo vivía
en Damasco en el tiempo de su conversión y solo fue a
Jerusalén 3 años después. También
duda sobre la noticia de que Pablo fuera fariseo, a pesar de
que está confirmada por Pablo mismo en Flp 3,5. Para
Vidal sería una glosa posterior. No nos convence.

Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter