Historia de la pedagogía: Centro de actividad que reestructuró el pensamiento
El interés de brindar mejores oportunidades
mediante técnicas de estudio que luego se transformaron,
valiéndose de la práctica, influyó desde la
antigüedad a que los distintos sistemas culturales adoptasen
medidas particulares de enseñanza para su debido proceso.
La historia de la pedagogía se centra en esas
peculiaridades, muestra (desde la perspectiva de diferentes
autores) que el descubrimiento y adaptación de distintos
medios de aprendizaje fueron la base de apogeo de muchas
civilizaciones antiguas.
Con base en el siguiente recorrido histórico
general, pretendo demostrar que en el transcurso y
modelación de saberes adquiridos por las culturas
antiguas, no se establece una educación afín con
tratados argumentativos sino, hasta llegar a la noción de
aceptación y reflexión de equívocos que
permitieran al hombre optar por un nuevo saber y superar aquella
base que lo inducía al engaño. Solo se
tendría que profundizar (a modo de generalización),
en aquellas civilizaciones que marcaron un hito fundamental en el
conocimiento para inferir que en tal proceso, estas copiaron,
profundizaron y remodelaron los saberes de culturas más
antiguas con la aplicación y aceptación del
ensayo-error.
El estudio de la historia de la pedagogía ha
hecho posible el entendimiento de las primeras civilizaciones en
sus aspectos de enseñanza hasta el modelo de
educación introducido en el período
contemporáneo en el que, a través de prototipos y
aspectos de aquellos modelos antiguos, se nota un progreso hacia
el modelo educativo impuesto en las instituciones de
educación, donde abunda una reconstrucción de
saber, con referencias y modelos de enseñanza muy
antiguos. Así, por ejemplo, cabe destacarse todo el
recorrido de la historia de la pedagogía y de su
intermediario principal: la educación. Inés
Aguerrondo[1]en Historia del pensamiento
pedagógico occidental lo muestra así: "Cuando las
sociedades se volvieron más complejas, la educación
pasó a ser una actividad dividida en sectores, otorgada a
especialistas. La tarea que antes era difusa y ejercida por todos
se convirtió en una prerrogativa de apenas algunas
personas: los profesores, y en general comenzó a
concentrarse en lugares específicos: las
escuelas".
El territorio, ubicación geo-espacial, orden
socio-político y el despertar filosófico de las
antiguas civilizaciones como Grecia, Egipto, Babilonia, India,
China…fueron aspectos relevantes en su tiempo-para la
organización y orden de sus sistemas sociales- y
necesarios en nuestro tiempo moderno para comprender cómo
la pedagogía ha estado fragmentada de acuerdo a ciertas
normas por las que se regía los saberes. Podría
decirse de estas civilizaciones que la mayoría mantuvo un
orden independiente de educación de sentido
práctico, memorizaciones o de instrucción hacia la
educación física, religiosa y moral. Las formas de
educar iban avanzando hacia formas de aprehensión del
conocimiento por castas o sistema de jerarquización; esto
conllevó a que se dividiera los saberes y que los nuevos
avances y nuevas formas que se proyectaron en cada
civilización, fueran especialmente para las castas
más poderosas, las cuales mantenían, en mayor
grado, el poder político-religioso y el conocimiento como
forma educativa heredada solo para los de su clase. Las antiguas
civilizaciones tuvieron su apogeo alrededor de mares y
océanos que permitían que la mayoría de sus
habitantes optasen por una economía basada en la pesca, el
comercio y la adecuación de sus suelos para luego
convertirlos en tierra fértil. Hoy sabemos que quienes
estaban en el menor rango de las castas optaban por una simple
educación instructiva, transmitida por los saberes de
esclavos o conocimientos de sus padres, que más tarde
sería el punto de apoyo para desempeñasen en esas
actividades.
También se destaca de las antiguas civilizaciones
la preparación de los jóvenes física e
intelectualmente para la guerra; en Esparta vemos un modelo de
educación, basado en los anteriores conceptos, como aquel
que une distintas fuerzas para complementar el espíritu.
Marrou en Historia de la educación en la
Antigüedad lo afirma de la siguiente manera: "Pero la
cultura espartana no era únicamente una cultura
física: aunque poco "letrada", no ignoraba las artes.
También decía que La educación del guerrero
da paso a una educación de escribas: "Si se quisiera
resumir esta compleja evolución en una fórmula
simple, yo diría que la historia de la educación
antigua refleja el tránsito progresivo de una cultura de
nobles guerreros, a otra de escribas". Esta nueva clase, da paso
a una forma nueva de transmitir el conocimiento según
Abbagnano, N., & A.Visalberghi (Historia de la
pedagogía. pág. 18): "Los escribas son
fundamentalmente transmisores de tradiciones en forma
escrita, […]. En estas civilizaciones, la educación
organizada es esencialmente educación del
escriba". Luego, aparece el gramático, que
enseña a leer, escribir y a hacer cuentas y se hace
necesario entonces, una educación donde se pueda
influenciar esos saberes de una forma más general, donde
se incorporen temas diferentes y varios educandos, se forman
entonces, los primeros institutos de enseñanza
primaria.
Grecia es el modelo más importante y más
práctico cuando se quiere hacer un estudio detallado de
las antiguas civilizaciones y su modelo político-
religioso. Fernando Savater en Política para
Amador, define la política en Grecia como un acto
participativo: "Había más tiempo para poderlo
dedicar a la vida política, el pueblo era mucho más
pequeño, con lo que el voto era importante y obligatorio y
tenía gran importancia todos aquellos actos que se
realizaban en público". Si bien en el modelo de
Ciudad-Estado de los griegos dio origen a los inicios de las
primeras formas democráticas, el aspecto fundamental de
las antiguas civilizaciones además de poseer una
educación de carácter práctico y religioso,
fue que eran sociedades de tipo
monárquico-aristocrático.
Hemos visto entonces, que las formas de
instrucción de la enseñanza han estado
influenciadas por caracteres sociales, político-religiosos
y por la clasificación en castas de acuerdo a cada
sociedad y los procesos que estas determinaran para el ascenso a
otra clase (aunque en mayoría el sistema no lo otorgara).
Llegamos así a unas cuestiones fundamentales y no
excluyentes que deben ser tenidas en cuenta al momento de un
estudio detallado de la educación antigua:
¿Cómo se logra la distribución de los nuevos
conocimientos mediante las enseñanzas pedagógicas?
¿Qué aspectos motivan al ser humano para trascender
su pensamiento hacia la enseñanza y nuevos campos de
saber? He aquí cuestiones fundamentales para entender
cuándo la pedagogía se destacó y con base a
ella se reivindicaron nuevos conocimientos.
Con el surgimiento de la filosofía como un saber
reflexivo, la educación se proyectó más
hacia el modelo crítico que diera paso a buscar soluciones
de la realidad cotidiana, que diera lugar a respuestas que nunca
lo habían tenido; como por ejemplo, casos concretos de
fenómenos naturales, enfermedades, posición en
clases sociales, etc. Así nace la filosofía en un
intento de buscar –mediante el análisis y la
reflexión primeramente de la naturaleza-, esa esencia o
"partícula" primigenia de la cual todo estuviera
compuesto. El auge de la filosofía entonces
repercutió sobre la religión, generándole
distanciamientos y fracturas.
Las ideas pedagógicas no hubiesen tenido
validación como modelo para la enseñanza si no se
hubiera optado por ideas y tratados filosóficos que dieran
cabida a situaciones ético-morales para el entendimiento y
la disertación de nuevos procesos educativos. Era
necesario en aquel entonces, formar personas instruidas en el
discurso, que promovieran mediante su raciocinio prácticas
que influenciaran a la gente hacia el amor por el conocimiento:
Sócrates, Platón y Aristóteles demarcaron
este aspecto fundamental al establecer los primeros modelos de
educación reflexiva en contraste con la retórica
(aquel método de enseñanza dirigido por los
sofistas).
Las nuevas enseñanzas hubieran sido imposibles de
difundir si no se hubiera implementado un sistema de
educación en el cual predominaran principios
autónomos a fin de que se obtenga por medio del educador y
los educandos esa noción de libertad de pensamiento, que
sería imposible sin una equitativa noción de
experiencias y métodos de estudio. Si bien el hecho
concreto del conocimiento exige ciertos paradigmas y la
aceptación de nuevos o rechazo a estos, la
pedagogía como fuerza instructora propagó el
conocimiento, haciendo ver en las sociedades esas falencias o
faltas de entendimiento que podrían suprimirse mediante
una buena educación. Winfred Böhm destaca la
educación socrática como aquella en donde mediante
reconocimiento de errores, se llega luego a una profunda
reflexión para dar cuenta de nuevas verdades: "La
educación comienza con la ironía, que
lleva al hombre al conocimiento de la ignorancia, es decir, a la
aporía y a la cuestionabilidad". Vemos entonces
que se induce mediante el conocimiento de la ignorancia otras
formulaciones, respuestas y tratados a los que el individuo se
hace cargo por el hecho mismo de identificar que su conocimiento
era carente de reflexión. Podríamos ver una
característica diferente del proceso de enseñanza
en la que aprendemos de la educación de forma muy distinta
que en la mayéutica de Sócrates y es la
noción de educación de Platón: "La
paideia platónica considera que la
educación se consigue con gran esfuerzo. No obstante, al
conocimiento de las verdades más profundas se llega por la
contemplación" (Espot, María Rosa, 2006,
pág.26). Sin embargo, se entiende que si no hubiese
ignorancia, no se podría trascender en la enseñanza
pedagógica ni evolucionaría el sistema porque todo
estaría destinado a ser verdad universal. La
educación no hubiera tenido sentido sin la importancia
misma de su misión: enseñar sobre lo que no se
tiene conocimiento o refutar lo que se creía que era un
principio universal. En una crítica al socratismo Jacques
Rancière en El maestro ignorante, deduce que un
buen maestro es aquel que se asemeja en conocimientos al igual
que su educando: "Al igual que todo maestro sabio,
Sócrates pregunta para instruir. Ahora bien, quien quiere
emancipar a un hombre debe preguntarle a la manera de los hombres
y no a la de los sabios, para ser instruido y no para instruir. Y
eso sólo lo hará con exactitud aquél que
efectivamente no sepa más que su alumno…el maestro
ignorante".
Descartes en Reglas para la dirección del
espíritu dice que el estudio de las ciencias genera
discusión y distintos puntos de vista en los cuales, solo
alguien tiene la razón porque si bien varios argumentan,
se valen de aquel que convenció con sus opiniones, pero no
condena la forma en la que se ha filosofado porque ha sido
fundamental en aceptación de saberes: "Es mucho mejor
enseñarles esas opiniones…que abandonarlas a sus
propias fuerzas, porque sin guía caerían en el
abismo del error". Muchos grandes pensadores de la
filosofía y personajes historiadores de la
pedagogía antigua buscan esa consideración
fundamental que deslinde el proceso de las causas por las cuales
la pedagogía demarcó un aspecto fundamental para el
auxilio de las ciencias, las cuales entonces, no podrían
distribuirse sólidamente por la falta de un conocimiento
que hiciera poner en razón aquellos otros y que llegara a
la conclusión de que solo hay aproximaciones a la verdad.
Descartes al cuestionarse sobre aquellos conocimientos que el
hombre introduce como verdades inalterables y aquel sistema de
opiniones probables dice: "(…) y después de muchos
esfuerzos, observan demasiado tarde que han aumentado la suma de
sus dudas, sin adquirir ninguna ciencia".
No se puede desprender de aquí que el proceso del
conocimiento es una alteración por parte de los procesos
pedagógicos cambiantes en el tiempo, tampoco se puede
llegar a concluir que los distintos medios de aprendizaje son
meras nociones de engaño, en donde abunda el error, ya que
ninguna ciencia tiene una verdad fundada o ningún proceso
de enseñanza recae en ideas utópicas.
Bibliografía
Abbagnano, & A.Visalberghi. (1992). Historia de
la pedagogía. Madrid: Fondo de Cultura
Económica.
Aguerrondo, I. (2005). Grandes pensadores: historia
del pensamiento pedagógico occidental. Barcelona:
Papers Editores.
Böhm, W. (2010). La historia de la
pedagogía. Córdoba: Eduvin.
Carpy, C. I. (2011). Miradas históricas de la
educación y la pedagogía. Madrid: Ediciones D.
D. S México.
Descartes, L. F. (1977). Discurso del método:
Meditaciones metafísicas; Reglas para la dirección
del espíritu; Principios de la filosofía.
México: Porrua.
Houssaye, J. (2003). Cuestiones pedagógicas:
una enciclopedia histórica. México: Editores
Siglo XXl.
Marrou, H.-I. (2004). Historia de la
educación en la Antigüedad. Madrid: Ediciones
Akal S.A.
Vásquez, S. M. (2012). La filosofía de
la educación: estado de la cuestión y líneas
esenciales. Buenos Aires: CIAFIC.
Autor:
Astrid Eugenia González
[1] Directora del libro Grandes pensadores:
historia del pensamiento pedagógico occidental, el cual
hace una recopilación de varios autores que exponen y
analizan la historia de la pedagogía en la
antigüedad.