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La tertulia de Jesús, Pedro y Judas: El pecado y el perdón



  1. Introducción
  2. Desarrollo de la
    tertulia
  3. Algunas
    definiciones
  4. Conclusiones
  5. Citas
    bíblicas
  6. Bibliografía

Introducción

El presente tema trata de desarrollar qué es el
"Pecado[1](1) y qué es el
"Perdón[2](2), la
"Tertulia[3]realizada entre
Jesucristo, Pedro y Judas Iscariote,
casualmente trata sobre ello, es una conversación que
sostienen ellos, sobre los 2 temas antes citados, a través
de una "Tertulia"; es decir, analizando cada uno de
ellos.

De acuerdo con el Nuevo Testamento, y la
tradición del cristianismo, existe una naturaleza
pecaminosa en el ser humano, heredada de la primera
transgresión de Adán ("pecado
original
"[4]) (3). Esta naturaleza
pecaminosa del Hombre afecta tanto sus actos como sus
pensamientos, y no se puede superar con el solo esfuerzo de
seguir la Ley de Dios, por lo tanto, sólo
mediante la sangre de Jesucristo este pecado
genérico del Hombre, y las culpas individuales, son
expiadas. Esta expiación se hace válida para la
persona mediante la fe en Jesucristo y un
renacer espiritual. Así puede vencerse esta naturaleza, y
por ende, dejar de pecar.

La misericordia de Cristo vence al
"pecado"; en ella, es donde éste manifiesta mejor
su violencia y su multiplicidad: incredulidad, rechazo y burlas
por parte de las autoridades de aquellos entonces y del pueblo,
la crueldad de los soldados, traición de Judas
tan dura a Jesús, negaciones de
Pedro y abandono de los discípulos. Sin embargo,
en la hora misma de las tinieblas y del príncipe de este
mundo (4), el sacrificio de Cristo se convierte
secretamente en la fuente de la que brotará inagotable el
"perdón" de nuestros pecados.

Desarrollo de la
tertulia

PEDRO: Llamado Simón, a quién
Jesús lo llamó con ese nombre y quien
fuera su primer discípulo llamado a seguirle (5),
se encuentra con Judas, llamado "Iscariote"
(6), luego de que los 3 ya habían fallecido, le
expresa lo siguiente: "Judas, porqué hiciste tal
barbaridad, acabar con tu vida de esa manera tan cruel?; si te
hubieras "arrepentido" de lo que hiciste con el Maestro y le
hubieras pedido "perdón" a él, estoy seguro que
él te hubiera perdonado como lo hizo
conmigo
".

JUDAS: Respondiéndole a Pedro, esta vez
arrepentido de lo que había hecho y acongojado por los
hechos ocurridos, le dice: "Pedro a ti te perdonó
porque tu "pecado" fue leve, pues tu sólo lo negaste, como
te lo anunció el maestro, 3 veces antes de que cante el
gallo, en la Celebración de la Santa Cena
(7);
en cambio yo, yo vendí al Maestro por 30 miserables
monedas de plata
(8), tú crees que me
habría perdonado?. Además tú te arrepentiste
de lo que hiciste y pediste
"perdón" por aquello;
es por ello que tu
"pecado" no es tan grave como el
mío; si bien es cierto que cuando vi al Maestro caminar en
medio de las multitudes rumbo al Gólgota, cargando ese
madero pesado, me arrepentí y fui hacia los sacerdotes
quienes me entregaron esas malditas monedas, tirándoles
por sus pies
(11), pero nunca sentí
un
"verdadero arrepentimiento´", me
sentía mal, si!, pero no fue un arrepentimiento que
naciera del fondo de mi corazón; hoy si siento ese
arrepentimiento después de haberlo visto morir en esa
cruz; además de burlado, lo crucificaron en medio de 2
ladrones
(12), como si él hubiese sido un
delincuente
".

PEDRO: Judas, sabemos todos, que el
Maestro te señaló como el que le
entregarías (13), pues esto ya estaba predestinado
por Dios, quien entregaría a su único
hijo, nuestro Maestro, el Mesías, el
Cristo verdadero, y con el derramamiento de su sangre,
al ser crucificado nos salvaría de los pecados que
habíamos cometido y siguiéramos cometiendo; pero
recuerdas Judas que nuestro Maestro nos
enseñó que, aquél que se arrepintiese
verdaderamente de sus pecados se les será perdonados y
tendrá la vida eterna (14).

CRISTO: Pedro y Judas, cuando estaba
entre ustedes y andábamos predicando la palabra de mi
Padre, siempre les manifesté que el "pecado" era
obra de "satanás"; sabían ustedes que este
ángel malo, llamado "lucifer", fue el
ángel más querido por mi Padre?, quien tuvo el
atrevimiento de sublevarse contra Él, pese a las
facultades y poderes que mi Padre le había entregado al
crear el cielo y la tierra. Es por eso que mi Padre, "Dios
Único y Verdadero
" lo arrojó del cielo con los
demás ángeles que le seguían al traidor de
"lucifer", y que ahora está en el
"purgatorio".

Mi Padre, nuestro "Dios Verdadero", me
envió a la tierra a salvar a los Hombres de los pecados
(15); y como quiera que yo soy la vid y el pan, que aboga
por aquellos que demostrando "arrepentimiento
verdadero
", sus pecados se les serán
perdonados.

A ti Pedro, perdoné tus pecados, pues me
demostraste "arrepentimiento sincero", y es así
como te hice la piedra donde se edificará mi Iglesia
(16); sin embargo, tu Judas, nunca te
arrepentiste de verdad, peor aún, nunca pediste
"perdón", acabaste con tu vida, que es otro
"pecado" más grave que el que cometiste;
además que estaba predestinado que tu serías quien
me entregaría para que tuviera que morir en la cruz y
así lavar los pecados de los Hombres de la faz de la
tierra.

Sin embargo, a los dos les digo, que cuando regrese
nuevamente, con la "gloria de mi padre", y han de ser
juzgados de acuerdo a la magnitud de sus pecados, y sólo
llegarán a mi Padre sino es a través mío, ya
que yo abogaré ante Él, por aquellos que demuestren
arrepentimiento y una vida honrosa y limpia de pecados. Por eso
Pedro, os envié a ti y a los demás
apóstoles para divulguen con orgullo "El Evangelio de
mi Padre
", que es la palabra de Dios, y se
arrepientan de todo "pecado".

Algunas
definiciones

  • 1) TERTULIA[5]Una tertulia es
    una reunión informal y periódica de gente
    interesada en un tema o en una rama concreta del arte, la
    ciencia o la filosofía, para debatir e informarse o
    compartir y contrastar ideas y opiniones. Por lo general,
    esta reunión se da por la tarde o la noche en un
    cenáculo, café,
    cafetería o cervecería (menos
    frecuentemente, y por lo general en ámbitos más
    rurales, en una rebotica o casino) y suelen
    participar en ellas personas del ámbito intelectual.
    Es costumbre de origen español, asociada a veces a la
    costumbre hispánica de la charla de sobremesa, y
    se mantuvo arraigada hasta mediados del siglo XX en las
    colonias independizadas del imperio español. A los
    asistentes se los llama "contertulios" o
    "tertulianos".

La voz de origen
incierto "tertulia" empieza a utilizarse en el
siglo XVIII y figura ya en el "Diccionario de
Autoridades 
(1739)[6]", en el sentido de
"Junta voluntaria o congreso de los discretos para discurrir
en alguna materia
" y en el más mundano de "Junta
de amigos y familiares para conversación, juego y otras
diversiones honestas
" que se solía dar tras la
comida, en la llamada sobremesa.

El galicismo "salón[7]no
se incorpora al Diccionario de la Real Academia
Española (DRAE) sino en 1925 en el sentido
de "Reunión habitual en una morada de personas
distinguidas por su condición o por su cultura
", que
suele usarse en la forma del plural salones. En el
siglo XIX se prefiere el uso de este último
término, sobre todo si se refiere al ámbito
aristocrático y habida cuenta de que con él se
designa no solo la reunión, sino también el
monumental marco físico en que se desarrolla;
únicamente un escritor tan castizo como Juan
Valera
, aunque conoce ambos términos, muestra una
abierta preferencia por el de "tertulia" frente al de
"salón".

Puede haber tertulias taurinas, literarias,
teatrales o de cualquier tipo, incluso tertulias de
carácter general, y con frecuencia giran alrededor de un
personaje famoso que asiste regularmente e incluso puede darles
nombre: "La tertulia itinerante de Cansinos", "La
tertulia de Valle-Inclán
". Aunque lo corriente es que
se bautice por el nombre del local que la aloja, lo que puede
resultar algo confuso, pues hubo a veces varias tertulias a horas
distintas o en épocas diferentes en un mismo
café.

Es norma no instituida, pero generalmente asumida, la de
atacar y desacreditar impíamente a la persona que no viene
a la tertulia o durante el tiempo en que se ha demorado en
llegar, lo que sirve para que nadie falte y todos se tomen en
serio su asistencia y pertenencia a ella. Los habituales a la
tertulia son los
denominados "tertulianos" o "contertulios".

Una "tertulia" de buen nivel suele ser un
instrumento educativo de primer orden y lo primero que se aprende
en ellas es tolerancia y sentido crítico. Por
otra parte, una "tertulia" permite a los interesados por
un tema a amistar y estrechar relaciones con los de su gremio y
enriquecer su cultura, y a los neófitos aprender de los
más experimentados y conocer informalmente a las personas
de su esfera. Las hay de dos tipos: estables (en un solo lugar) e
itinerantes (que se mudan de sitio periódicamente). Estas
últimas son mucho más informales y menos
frecuentes.

  • 2) PECADO[8]"Pecado" (latín peccatum),
    "es la transgresión voluntaria de un precepto
    tenido por bueno
    ".

Para los griegos, "pecado" se
decía "hamartia": "fallo de la meta, no
dar en el blanco
". Los escritores griegos solían
utilizar la forma verbal "hamartáno" con respecto
al lancero que erraba su blanco y, por implicación,
aludía al concepto de vivir al margen de un código
moral o intelectual tenido por meta ideal, debido a una actitud
errónea, consciente o inconscientemente.

En hebreo la palabra común para " "pecado"
es "jattá' th", que también
significa "errar" en el sentido de no alcanzar una meta, camino,
objetivo o blanco exacto. En el Libro de
Jueces 
(17) se utiliza la forma
verbal
"jatá" en una frase negativa para
referirse a los benjamitas como "personas que podían tirar
piedras con honda a un cabello y no erraban (véase
también el Libro de Job 
(18).
Igualmente se aplica a desviarse de metas morales, como
en el Libro de Proverbios 
(19), que
dice que el que halla sabiduría piadosa halla vida,
pero
"el que no alcanza (En hebreo:
"jatá") la sabiduría le está haciendo
violencia a su
alma", pues la lleva a la muerte. En
Arameo, lengua antigua, la palabra para
"pecado" es
"khata" ".

El concepto religioso aún vigente de pecado como
"delito moral" alude a la trasgresión voluntaria o
involuntaria de normas o preceptos religiosos. Dado que existen
innumerables normas de este tipo, existen innúmeros
pecados, a los cuales se les asigna mayor, menor o
ningún castigo según las
distintas creencias.

En los estados confesionales, que tienen una
"religión oficial", puede estar penado con la
privación de libertad, e incluso de la vida, y en entornos
culturalmente pobres, aun en sociedades modernas, se suelen
achacar los problemas o accidentes físicos a la
comisión de pecados.

La tradición judeocristiana, cuya fuente
fundamental es la Biblia, ha entendido el pecado,
en términos generales, como el alejamiento del hombre de
la voluntad de Dios.

De acuerdo al Antiguo Testamento (llamado
también: "Tanaj" o"), esta voluntad está
representada por la Ley (Torah), preceptos y estatutos
dados por Dios al pueblo de Israel, y registrados
en los libros sagrados.

Aun hoy, para el judaísmo no existe un
pecado genérico a manera de naturaleza subyacente en los
actos de los hombres, sino solo transgresiones objetivas y
concretas (no pensamientos o intenciones del corazón) que
se cometen voluntariamente. En cambio, de acuerdo con
el Nuevo Testamento, y la tradición
del cristianismo, existe una naturaleza pecaminosa en el ser
humano, heredada de la primera transgresión de
Adán. Esta naturaleza pecaminosa del hombre
afecta tanto sus actos como sus pensamientos, y no se puede
superar con el solo esfuerzo de seguir la Ley de Dios,
por lo tanto, sólo mediante la sangre
de Jesucristo este pecado genérico del
Hombre, y las culpas individuales, son expiadas. Esta
expiación se hace válida para la persona mediante
la fe en Jesucristo y un renacer espiritual.
Así puede vencerse esta naturaleza, y por ende, dejar de
pecar.

Las distintas corrientes del cristianismo han elaborado
de distinta forma la doctrina que sustenta esta concepción
del hombre en lucha permanente contra el pecado, como naturaleza
propia, y la victoria sobre él.

La Biblia y la tradición
eclesiástica definen y se refieren a las diferentes clases
de pecados:

El "pecado en general", consiste en una
transgresión libre y deliberada de la Ley de Dios. Por
leve que sea, es pecado cualquier desviación de los
mandatos divinos. La naturaleza esencial del pecado es la
rebelión contra Dios, y es pecaminoso cualquier
acto en el cual la voluntad humana se opone a la voluntad divina
conocida ya sea por un mandamiento revelado o por la conciencia
sembrada por Dios en cada ser humano. El
"pecado", con excepción del pecado original,
se llama pecado actual y se divide en pecado
venial y pecado mortal de acuerdo a la gravedad de
la transgresión y con el grado de voluntad y
deliberación.

Los "pecados en contra de la sociedad", que
según la Biblia "claman justicia al
cielo
", y en ocasiones implican culpas colectivas son, entre
otros: el derramamiento de sangre inocente, oprimir viudas y
huérfanos, el defraudar de su jornal al trabajador, y la
inmoralidad sexual crasa, como en el caso del relato de Sodoma y
Gomorra.

Los "pecados capitales" no
sólo llevan a la muerte física, sino a la
condenación eterna, como el "pecado contra el
Espíritu Santo
", también los hay que han sido
definidos por la Iglesia y son: la soberbia, la avaricia, la
lujuria, la ira, la gula, la envidia y la pereza.

De acuerdo a lo señalado en
el Catecismo católico, el "pecado" es
"una falta contra la razón, la verdad, la conciencia
recta; es faltar al amor verdadero para con Dios y para con el
prójimo, a causa de un apego perverso a ciertos bienes.
Hiere la naturaleza del hombre y atenta contra
la solidaridad humana. Ha sido definido como "una palabra,
un acto o un deseo contrarios a la ley
".

El "pecado" se considera una ofensa a
Dios: "Contra ti, contra ti sólo he pecado,
lo malo a tus ojos cometí
(20). El
"pecado" se levanta contra el amor que Dios nos tiene y aparta de
El nuestros corazones. Como el primer pecado, es una
desobediencia, una rebelión contra Dios por el deseo de
hacerse
"como dioses", pretendiendo conocer y
determinar el bien y el mal
. El pecado es
así "amor de sí hasta el desprecio de Dios". Por
esta exaltación orgullosa de sí, el pecado es
diametralmente opuesto a la obediencia de Jesús que
realiza la salvación 
".

No obstante ello, se asume que en la Pasión, la
misericordia de Cristo vence al pecado. "En ella, es
donde éste manifiesta mejor su violencia y su
multiplicidad: incredulidad, rechazo y burlas por parte de los
jefes y del pueblo, debilidad de Pilato y crueldad de los
soldados, traición de Judas tan dura
a Jesús
(21), negaciones de
Pedro
(22) y abandono de los discípulos.
Sin embargo, en la hora misma de las tinieblas y del
príncipe de este mundo
(23), el sacrificio
de Cristo se convierte secretamente en la fuente de la que
brotará inagotable el perdón de nuestros
pecados
".

Los "siete pecados capitales" son una
clasificación de los vicios mencionados en las
primeras enseñanzas del cristianismo para educar
a sus seguidores acerca de la moral cristiana.

El término "capital"
(de caputcapitis,
"cabeza", en latín) no se refiere a la magnitud
del pecado sino a que da origen a muchos otros pecados. De
acuerdo a Santo Tomás de Aquino.

Un "vicio capital" es aquel que tiene un fin
excesivamente deseable, de manera tal que en su deseo, un hombre
comete muchos pecados, todos los cuales se dice son originados en
aquel vicio como su fuente principal. Los "pecados" o
"vicios capitales" son aquellos a los que la naturaleza
humana está principalmente inclinada.

Según Santo Tomás de Aquino, los
"vicios[9]pueden ser catalogados
según las "virtudes[10]a que se
oponen, o también pueden ser referidos a los "pecados
capitales
" que la experiencia cristiana ha distinguido
siguiendo a San Juan Casiano y a
San Gregorio Magno. Son llamados
"capitales" porque generan otros pecados,
otros vicios. Son la soberbia, la avaricia, la envidia, la
ira, la lujuria, la gula, la pereza.

La identificación y definición de los
pecados capitales a través de su historia ha sido un
proceso fluido y ?como es común con muchos aspectos de
la religión? con el tiempo ha evolucionado la idea de
lo que envuelve cada uno de estos pecados. Ha contribuido a estas
variaciones el hecho de que no se hace referencia a ellos de una
manera coherente o codificada en la Biblia y
por tanto se han consultado otros trabajos tradicionales
(literarios o eclesiásticos) para conseguir
definiciones precisas de los "pecados
capitales
".

Al principio del cristianismo, todos los escritores
religiosos ?Cipriano de Cartago, Juan
Casiano, Columbano
de Lexehuil, Alcuino
de York? enumeraban ocho pecados capitales, que actualmente ya no
se estudia ni se usa.

El número siete fue dado por el
papa Gregorio Magno (540-604) y se mantuvo por
la mayoría de los teólogos de
la Edad Media. En el siglo VI, dicho papa, revisó los
trabajos de Evagrio y Casiano para confeccionar una
lista propia definitiva con distinto orden y reduciendo los
vicios a siete (consideró que la tristeza era una
forma de pereza).

Estos "pecados", son:

  • Lujuria[11]

  • Pereza[12]

  • Gula[13](glotonería).

  • Ira[14]

  • Envidia[15]

  • Avaricia[16]

  • Soberbia[17](vanagloria,
    orgullo).

San Buenaventura de
Fidanza 
(1218-1274) enumeró los
mismos.

Santo Tomás de
Aquino 
(1225-1274) respetó esa misma lista, con
otro orden:

  • Vanagloria (orgullo, soberbia).

  • Avaricia.

  • Glotonería (gula).

  • Lujuria.

  • Pereza.

  • Envidia.

  • Ira.

El poeta Dante Alighieri (1265-1321)
utilizó el mismo orden del papa Gregorio Magno
en El Purgatorio, la segunda parte del
poema La Divina Comedia (1308-1321).
La teología de La Divina Comedia,
casi ha sido la mejor fuente conocida desde
el Renacimiento (siglos XV y XVI).

Muchas interpretaciones y versiones posteriores,
especialmente
derivaciones conservadoras del protestantismo y
del movimiento cristiano pentecostal han postulado
temibles consecuencias para aquellos que cometan estos pecados
como un tormento eterno en el infierno, en vez de
la posible absolución a través de
la penitencia en el purgatorio.

3) EL PERDÓN[18]

1. ¿Qué hacer si hemos
pecado?

Hay que recordar que Dios nos ama
muchísimo y que por eso mismo no desea que caigamos en
tentación y pequemos.  Pero nos ama tanto, tanto, que
no nos deja en el "pecado", sino que nos ofrece su
perdón en seguida que nos arrepentimos y nos
confesamos.

Así que para que Dios esté
contento con nosotros y nosotros estemos en amistad con
Él, debemos pedirle perdón de inmediato, si por
desgracia, hemos "pecado".

2.   ¿Por qué
debemos pedir perdón a Dios al pecar?

Porque Jesucristo nos ha prometido perdonar
nuestros pecados, aunque sean muy, muy graves.  Eso
sí: para ser perdonados por Dios, debemos pedirle
"perdón" y estar verdaderamente arrepentidos de
haberle ofendido.

3. Además de pedir
"perdón" por nuestros
"pecados", ¿qué más hay que
hacer?

Confesarnos en el Sacramento de la
Confesión.

4.    ¿Qué es
la Confesión?

Es el Sacramento, instituido por Jesucristo para
perdonar los pecados que cometamos después del
Bautismo.

5.    ¿Por qué
creen ustedes que existe el Sacramento de la
Confesión?

Primeramente, porque Dios sabía que éramos
débiles y que pecaríamos.  Pero Él
sabía, además, que debíamos estar seguros de
que éramos perdonados.  Sabía que
necesitaríamos sentirnos verdaderamente perdonados por el
mal que hiciéramos.  Y eso sólo es posible
confesándonos y recibiendo la Absolución del
Sacerdote.

Adicionalmente, en la Confesión, además de
quedar nuestra alma sanada y limpia de pecado, se nos levanta el
peso emocional de la culpa de nuestros pecados y nos sentimos
livianos al dejar ese peso en el Confesionario.

Por todas estas razones, el Señor nos dejó
ese Sacramento maravilloso y muchas veces incomprendido que es la
Confesión. 

6.  Pero tal vez ustedes habrán
oído o ustedes mismos habrán dicho en algún
momento cosas como éstas: Yo me confieso con
Dios; ¿Por qué hay que confesarse con un
Sacerdote que es un hombre como cualquiera y también
pecador?.

Algunos hasta se atreven a sugerir que es un invento de
la Iglesia. 

Pero, ¿alguien sabe cuándo
instituyó Jesucristo el Sacramento de la
Confesión? 

Fue la misma tarde de su
Resurrección.  Los Apóstoles
estaban  reunidos, encerrados por miedo a lo que les
podían hacer y Jesús Resucitado se les
presentó en el sitio donde estaban.  Y les
dijo: (24)

" "Así como el Padre me
envió a Mí, así yo los envío a
ustedes".  Dicho esto sopló sobre ellos: 
"Reciban el Espíritu Santo; a quienes perdonen los
pecados, les queden perdonados, y a quienes no se los
perdonen, les quedarán sin
perdonar"
"

Las palabras de Jesús son muy claras ¿no
les parece?  Por eso es que los Apóstoles y sus
sucesores, que son los Obispos y Sacerdotes, tienen el poder dado
por Jesucristo de perdonar los pecados a quienes estén
arrepentidos y vayan y se los confiesen a algún
Sacerdote.

7. Pero hay algo importante en esta escena con
los Apóstoles cuando Jesús les da el poder
de perdonar los pecados.  ¿Qué
será?

El "Perdón", considerado como una
"virtud" por algunos estudiosos de la filosofía
teológica.

Conclusiones

  • Ante un pecado cometido por nosotros, y si existiere
    "indulgencia", esto es, remisión de los
    pecados, estos serán perdonados..

  • Cristo prometió perdonar nuestros
    pecados, aunque sean estos muy graves; sin embargo el pedir
    perdón debe ser sincero, al pedir perdón a
    Dios, nuestro arrepentimiento debe ser verdadero; y
    no volver a cometer más pecados.

  • En definitiva, el "perdón" es una
    "virtud" que posee Cristo y su
    Padre, nuestro Dios.

Citas
bíblicas

  • (1) Gén. 3. (Pecado Original);
    Job 5:24. (Refiérase a la paz para no
    pecar); Prov. 8:35,36. (Refiérase al pecado que
    cometan los Hombres contra Dios); Mt. 1:20-21.
    (Anunciamiento nacimiento de Jesús, quien
    limpiará los pecados de su pueblo); Mt. 9:5,6.
    (Poder de Jesús de perdonar pecados); Mt.
    26:28
    . (Tomando el vaso dijo esta es mi sangre que
    será derramada por ustedes para remisión de los
    pecados); Mr. 1:5. (Confesión de pecados);
    Mt. 21:32. (Venida de Juan el Bautista y no hubo
    arrepentimiento); Mr. 11: 24-25. (Arrepentimiento y
    perdón de los pecados); Mr. 2:17 (Jesús
    dijo, no he venido a llamar a los justos, sino a los
    pecadores); Mr. 3:28-29. (Los pecadores serán
    perdonados; pero el que ofenda al Espíritu Santo, no
    tendrá perdón); Mr. 14:67-72.
    (Negación de Jesús por Pedro); Mr.
    14:43-45
    . (Entrega de Jesús por parte de Judas, en
    el monte del Gethsemaní); Lc. 22:47,48.
    (Entrega de Jesús por parte de Judas Iscariote, en el
    monte del Gethsemaní); Lc. 1:77.
    [Remisión (Perdón) de los pecados]; Lc. 15:10.
    (Gozo de Dios por aquél que se arrepiente de sus
    pecados).

  • (2) Mt. 3:1-3. (Juan Bautista,
    arrepentimiento de sus pecados); Mt. 3:6. (Los
    bautizados por Juan el Bautista confesaban sus pecados);
    Mt. 4:17. (Arrepentimiento – Perdón);
    Mr. 1:5. (Confesión de pecados); Mr. 11:
    24-25
    . (Arrepentimiento y perdón de los pecados);
    Mt. 6: 14,15. (Perdón de las ofensas de los
    Hombres); Mt. 7:7,8. (Pedir perdón); Mt.
    9:2
    . (Perdón de pecados a paralítico);
    Mt. 9: 12,13. (Llamado de Jesús a pecadores en
    arrepentimiento); Mt. 10:33. (Negación de los
    Hombre por Negar a Cristo –Excepción: Caso
    Pedro– pecado y no tendrá perdón); Mt.
    12:31.32
    . (Perdón de los pecados contra
    Jesús, mas no contra el Espíritu Santo
    tendrá perdón); Mt. 20:28. (Jesús
    vino a dar su vida por nosotros, por salvar nuestros
    pecados); Mt. 21:32. (Venida de Juan y no hubo
    arrepentimiento); Mt. 26:69-75. (Negación de
    Jesús por Pedro); Mr. 2:10. (Potestad de
    Jesús de perdonar los pecados); Mt. 27:3-5.
    (Arrepentimiento de Judas Iscariote y devolución de
    las 30 monedas de plata, pero nunca pidió
    perdón por lo que hizo); Mr. 14:10,11. (Entrega
    de Jesús por Judas ante los Sacerdotes, por 30 monedas
    de plata); Mr. 4:12. (Perdón de los pecados);
    Lc. 5:8. (Confesión de Pedro ante Jesús,
    como hombre pecador); Lc. 6:37. (El que perdone
    será Perdonado); Lc. 7:39-43. (Parábola
    sobre el perdón); Lc. 15: 11-24. (La
    profecía del Hijo Pródigo, quien pidió
    perdón a su padre por lo que hizo); Lc. 11:10.
    (Jesús manifestó que aquel que pide algo se le
    dará; entre ellos el que pide perdón se le
    será perdonado); Lc. 17:3-4. (Perdonar a quien
    se arrepiente);

  • (3) Gén. 3. (Pecado
    Original).

  • (4) Jn. 14:30. (Refiérase al
    Príncipe de las tinieblas: Lucifer).

  • (5) Mt. 10:1-2. (Llamado de Simón
    / Pedro como apóstol); Mr. 3:16. (Llamado de
    Simón / Pedro como apóstol); Lc. 6:14.
    (Llamado de Simón / Pedro como apóstol).

  • (6) Mt. 10:4. (Llamado de Judas
    Iscariote como apóstol); Mr. 3:19. (Llamado de
    Judas Iscariote como apóstol); Lc. 6:16.
    (Llamado de Judas Iscariote como apóstol).

  • (7) Mt. 26:33-35. (Jesús anuncia
    que Pedro lo negará antes de que cante el gallo);
    Mr. 14:29,31. (Anunciación de Jesús
    sobre su entrega por Pedro, en la Última Cena); Lc.
    22:33,34
    . (Anunciación de Jesús que Pedro
    lo ha de negar).

  • (8) Mt. 26:20-25,28. (En la
    Última Cena: Manifestación de Jesús que
    Judas Iscariote lo iba a entregar); Mr. 14:18-21.
    (Anunciación de Jesús su entrega por Judas
    Iscariote, en la Última Cena).

  • (9) Gén. 3. (Pecado
    Original).

  • (10) Gen. 3:5. (Desobediencia y
    conocimiento de Adán y Eva sobre el bien y el
    mal).

  • (11) Mt. 27:3-5. (Arrepentimiento de
    Judas Iscariote y devolución de las 30 monedas de
    plata, pero nunca pidió perdón por lo que
    hizo).

  • (12) Lc. 23: 39-43. (Perdón del
    ladrón Crucificado con Cristo).

  • (13) Mt. 26:20-25,28. (En la
    Última Cena: Manifestación de Jesús que
    Judas Iscariote lo iba a entregar); Mr. 14:18-21.
    (Anunciación de Jesús su entrega por Judas
    Iscariote, en la Última Cena).

  • (14) Lc. 11:10. (Jesús
    manifestó que aquel que pide algo se le dará;
    entre ellos el que pide perdón se le será
    perdonado); Lc. 17:3-4. (Perdonar a quien se
    arrepiente).

  • (15) Mt. 20:28. (Jesús vino a dar
    su vida por nosotros, por salvar nuestros pecados; Mt.
    4:17
    . (Arrepentimiento – Perdón); Mr.
    1:5
    . (Confesión de pecados); Mr. 2:10.
    (Potestad de Jesús de perdonar los pecados); Mr.
    11: 24-25
    . (Arrepentimiento y perdón de los
    pecados); Mt. 23:10. (Cristo el único
    Maestro).

  • (16) Mt. 16:18. (Pedro y la
    edificación de la Iglesia).

  • (17) Jue. 20: 16. (el pecado descrito
    por los hebreos).

  • (18) Job 5:24. (Refiérase a
    la paz para no pecar).

  • (19) Prov. 8:35,36. (Refiérase al
    pecado que cometan los Hombres contra Dios).

  • (20) Prov. 8:35,36. (Refiérase al
    pecado que cometan los Hombres contra Dios); Mr. 11:
    24-25
    . (Arrepentimiento y perdón de los pecados);
    Lc. 1:77. [Remisión (Perdón) de los
    pecados]; Lc. 15:10. (Gozo de Dios por aquél que se
    arrepiente de sus pecados).

  • (21) Mr. 14:43-45. (Entrega de
    Jesús por parte de Judas, en el monte del
    Gethsemaní); Lc. 22:47,48. (Entrega de
    Jesús por parte de Judas Iscariote, en el monte del
    Gethsemaní).

  • (22) Mr. 14:67-72. (Negación de
    Jesús por Pedro).

  • (23) Jn. 14:30. (Refiérase al
    Príncipe de las tinieblas: Lucifer).

  • (24) Jn. 20:21-23. (Otorgación de
    facultades y poderes a los apóstoles para que cumplan
    con el Evangelio de Dios).

Bibliografía

  • 1) DICCIONARIO DE LA REAL ACADEMIA
    ESPAÑOLA. 2014. Madrid, España.

  • 2) ESPINA, Antonio: "Las tertulias de
    Madrid
    ". 1995. Madrid, España. Ed. Alianza
    Editorial.

  • 3) GELZ,
    Andreas: "Tertulia: Literatur und Soziabilität
    im Spanien des 18 und 19 Jahrhunderts
    ", (en
    español: "Tertulia: Literatura y sociabilidad en
    la España de los siglos XVIII y XIX
    "). 2006.
    Madrid, España. Ed. Frankfurt: Vervuert.

  • 4) LAUAND, Jean: "La
    Filosofía de Tomás de Aquinoy Nuestro Lenguaje
    Cotidiano
    ". 1999. Porto Alegre, Brasil. Conferencia
    pronunciada en el Gabinete de Filosofía Medieval
    daFaculdade de Letras da Universidade do Porto, 28/05/99.
    Traducido por Hermenegildo Pizzio. Disponible en:
    www.hottopos.com.br/notand4/filotoma.

  • 5) MARISCAL TRUJILLO,
    Antonio: "La tertulia española. Sus
    orígenes y tradición en la provincia de
    Cádiz
    . 1998. Cádiz,
    España.

  • 6) MARTINEZ, Manuel Ángel:
    "Santo Tomas de Aquino y el perdón". 1988.
    Salamanca. España. Facultad de Teología de San
    Esteban.

  • 7) NAVARRETE Obando, Luis Alberto:
    "Las Virtudes". Cajamarca, Perú. Disponible
    en: http://www.monografias.com.

  • 8) LA SANTA BIBLIA. Antigua
    Versión de Casiodoro De Reina (1569) y Revisada por
    Cipriano de Valera (1602); última revisión por
    encargo del Vaticano en 1909.

  • 9) SANTO TOMÁS DE AQUINO:
    "Suma Teológica: Las causas del pecado".
    Disponible en: www.hjg.com.ar/sumatb/c75/html.

  • 10) URREIZTIETA, José Luis:
    "Las tertulias de rebotica en España: siglos XVIII
    a XX
    ". 1985. Madrid, España. Prólogo de
    Enrique Tierno Galván. Ed. Alonso.

  • 11) "EL PERDÓN DE LOS
    PECADOS COMO SACRAMENTO". Disponible en:
    http://www.mercaba.org/TEOLOGIA/OTT/623-652_penitencia_sacramento.httm.

Cajamarca, 26 de Junio del 2014.

__________________________________

* Dr. Luis Alberto Navarrete Obando; Abogado;
Docente Universitario Investigador; Escritor y Poeta; Magister en
Educación Universitaria, con especialidad en
Investigación Universitaria; especialista y con estudios
de post grado en Filosofía y Humanidades.

Nota.- El autor del presente trabajo es Columnista
periodístico: "Derecho y Sociedad", de los Diarios "La
República", http://www.larepublica.com.pe; "El Comercio",
http://www.elcomercio.com.pe; Diario Oficial "El Peruano",
http://www.elperuano.com.pe; Diario Oficial de Cajamarca,
"Panorama Cajamarquino", de circulación Regional
(Cajamarca), http://www.panoramacaj@hotmail.com.

® Derechos reservados de Autor,
registrado en INDECOPI; "Derecho y Sociedad", Código de
marca registrada LANO-CPP-1420-P.

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"Con gran devoción, con la
misericordia de Jesucristo y la bendición de Dios, dedico
este trabajo a la Iglesia Cristiana Apostólica y
Católica del Perú"

 

 

Autor:

Dr. Luis Alberto Navarrete
Obando

ABOGADO – DOCENTE UNIVERSITARIO –
ESCRITOR

Monografias.com

 

[1] Ver definición en Pág.
5.

[2] Ver definición en Pág.
9.

[3] Ver definición en Pág.
4.

[4] Para varias de las religiones del
tronco bíblico —entre ellas
“el judaísmo” y
“el cristianismo”— el “pecado
original” es
el “pecado” cometido por los primeros
padres de la humanidad (Adán y Eva) al desobedecer el
mandato divino de no comer del árbol del
conocimiento del bien y del mal. El pecado es cometido por la
persuasión de una serpiente (que
posteriormente sería identificada con el demonio).
Fue castigado con la expulsión de la humanidad
del jardín del Edén y su
sujeción a la muerte y el sufrimiento eterno. De
acuerdo con algunas interpretaciones cristianas, notablemente
la católica, dañó también de
manera perdurable la naturaleza humana de Adán y Eva,
así como la de todos sus sucesores. La historia, narrada
en el Libro de Génesis (9), es común a las tres
grandes religiones monoteístas; la interpretación
de la naturaleza exacta del pecado cometido y del castigo
impuesto, sin embargo, varía entre las citadas
religiones. En la tradición católica el pecado
original se ha simbolizado con una manzana roja, a pesar de que
la escritura no menciona qué "fruto" daba el
árbol prohibido (10).

[5] “Tertulia”, según el
DRAE, significa: “Reunión de personas que se
juntan habitualmente para conversar o recrearse.

[6] El “Diccionario de
autoridades”, publicado entre 1726 y 1739,
fue el primer diccionario de la lengua
castellana editado por la Real Academia
Española, fundamento de lo que hoy se conoce como
el Diccionario de la lengua española.
El “Diccionario de autoridades” es el
primer diccionario confeccionado por la Real
Academia Española (DRAE), que en 1713 siguió
los ya existentes de las academias de la lengua francesa e
italiana, la Académie Française y
la Accademia della Crusca, respectivamente. En contraste
con ellas, el DRAE tenía como propósito principal
crear un diccionario en muy poco tiempo tras su
fundación. Se construye esta obra pensando que una
lengua necesita contar con una norma culta sustentada en el uso
de los mejores escritores (aquellos que, como se advierte en el
prólogo, a juicio de la Academia “han
tratado la Lengua Española con la mayor propiedad y
elegancia: conociéndose por ellos su buen juicio,
claridad y proporción, con cuyas autoridades
están afianzadas las voces”, si bien se puntualiza
que “no por esta razón se dejan de citar otros
(autores), para comprobar la naturaleza de la voz, porque se
halla en Autor nacional, sin que en estas voces sea su intento
calificar la autoridad por precisión del uso, sino por
afianzar la voz”). Para ello se despojaron de ejemplos
una serie de obras del pasado, literarias y no literarias. De
este modo, sin hallarnos todavía ante un diccionario
histórico (del tipo de los que nacerían en la
centuria siguiente), el “Diccionario de
autoridades” se nos ofrece como el primer repertorio
lexicográfico del español con testimonios de
diferentes etapas de su historia. Este diccionario
conoció una segunda edición, en 1770, reducida a
las dos primeras letras del alfabeto; en un tiempo prudente
pensamos poder proporcionar una versión
electrónica de él. El “Diccionario de
autoridades”, despojado de los ejemplos y sometido a
sucesivas actualizaciones, es la base de las distintas
ediciones del diccionario usual de la Real Academia
Española (DRAE), deudoras, por tanto, del trabajo de
aquellos primeros académicos.

[7] “Salón”, según
la DRAE, significa: “Habitación principal de una
vivienda”. “Lugar donde se realizan
Tertulias”.

[8] Pecado según el DRAE:
“Transgresión voluntaria de preceptos religiosos;
Cosa que se aparta de lo recto y justo, o que falta a lo que es
debido; Exceso o defecto en cualquier línea”.

[9] “Vicios” según el
DRAE, significa: “Mala calidad, defecto o daño
físico en las cosas; Falta de rectitud o defecto moral
en las acciones; Hábito de obrar mal”.

[10] “Virtudes”, según el
DRAE, significa: “Actividad o fuerza de las cosas para
producir o causar sus efectos; Fuerza, vigor o valor; Poder o
potestad de obrar; Integridad de ánimo y bondad de
vida”.

[11] “Lujuria”, según el
DRAE, significa: “Vicio consistente en el uso
ilícito o en el apetito desordenado de los deleites
carnales; Exceso o demasía en algunas cosas”.

[12] “Pereza”, según el
DRAE, significa: “Negligencia, tedio o descuido en las
cosas a que estamos obligados; Flojedad, descuido o tardanza en
las acciones o movimientos”.

[13] “Gula”, según el
DRAE, significa: “Exceso en la comida o bebida, y apetito
desordenado de comer y beber. Sin.:
“glotonería”.

[14] “Ira”, según el DRAE,
significa: “Pasión del alma, que causa
indignación y enojo; Apetito o deseo de venganza;
Repetición de actos de saña, encono o
venganza”.

[15] “Envidia”, según el
DRAE, significa: “Tristeza o pesar del bien ajeno;
Emulación, deseo de algo que no se posee”.

[16] “Avaricia”, según el
DRAE, significa: “Afán desordenado de poseer y
adquirir riquezas para atesorarlas”.

[17] “Soberbia”, según el
DRAE, significa: “Altivez y apetito desordenado de ser
preferido a otros”.

[18] “Perdón”,
según el DRAE, significa: “Acción de
perdonar; Remisión de la pena merecida, de la ofensa
recibida o de alguna deuda u obligación pendiente; Sin.:
‘indulgencia’: remisión de los
pecados”.

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