Situación social y de salud del adulto mayor en comunidades rural andinas, Puno, Perú (página 3)

TABLA.10 – B

DISTRIBUCION DEL ADULTO MAYOR MUJERES SEGÚN INGRESO ECONOMICO MENSUAL POR CANTIDAD EN SOLES

TABLA 11

DISTRIBUCION DEL ADULTO MAYOR SEGÚN

TIPO DE LA PROPIEDAD DE LA VIVIENDA

TABLA 12

DISTRIBUCION DEL ADULTO MAYOR SEGÚN

CONDICION MATERIAL DE LA VIVIENDA

TABLA 13

DISTRIBUCION DEL ADULTO MAYOR SEGÚN

PRESENCIA DE HACINAMIENTO*

* Tres o más personas por dormitorio

TABLA 14

DISTRIBUCION DEL ADULTO MAYOR SEGÚN

PARTICIPACION EN INSTITUCIONES U ORGANIZACIONES

* Las organizaciones en que generalmente participaban los varones eran los Comités

vecinales y las mujeres en Comité vecinales y Clubes de artesanía en Juliaca

TABLA 15

DISTRIBUCION DE ADULTO MAYOR SEGÚN

PARTICIPACION EN ACTIVIDADES CULTURALES Y/O ARTÍSTICAS

* Las organizaciones en que generalmente participaban los varones eran Asociaciones de artesanos y las mujeres en Comités directivos comunales y Clubes de madres

TABLA 16

DISTRIBUCION DE PERCEPCIONES SOBRE EL ADULTO MAYOR

DE FAMILIARES O PERSONAS CON QUIENES VIVE

* Generalmente el maltrato es predominante en uno de los familiares

C. CONDICIONES DE SALUD DE LOS ADULTOS MAYORES

TABLA 17

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES SEGÚN

DISPONIBILIDAD DE ALGÚN TIPO DE SEGURO

* SIS y Essalud

TABLA 18 – A

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES VARONES SEGÚN

ESTADO DE SALUD ACTUAL

Sin dolencias: 58 (32.04%)

Con alguna dolencia: 123 (7.96%)

* Otros: mordedura de perro, vesícula biliar, calambre en los pies, infección urinaria,

presión alta.

** Se aceptaron hasta dos dolencias o enfermedades por adulto mayor.

TABLA 18 – B

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES MUJERES SEGÚN

ESTADO DE SALUD ACTUAL

Sin dolencias: 50 (25.00%)

Con alguna dolencia: 150 (75.00%)

* Otros: cistitis aguda, conjuntivitis, parasitosis, diarrea, gastritis, "cólera",

** Se aceptaron hasta dos dolencias o enfermedades por adulto mayor.

TABLA 19

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES SEGÚN

ENFERMEDAD O DOLENCIA PROLONGADA

TABLA 20 – A

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES VARONES QUE

PADECEN ENFERMEDAD O DOLENCIA PROLONGADA

* Otros: Várices, no tiene fuerzas, hernia umbilical, conjuntivitis, sordera

** Se aceptaron hasta dos dolencias crónicas

TABLA 20 – B

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES MUJERES QUE PADECEN

ENFERMEDAD O DOLENCIA PROLONGADA

* Otros: climaterio prolongado, tumor ingle derecha, cáncer
cuello uterino, parálisis miembro superior

TABLA 21 – A

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES VARONES SEGÚN

FUNCIONES BIOLÓGICAS

* Alteraciones:

Apetito: Bajo

Sed: Poca

Orinas: Polaquiuria, disuria

Heces: Sueltas

Sueño: Insomnio por dolor

TABLA 21 – B

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES MUJERES SEGÚN

FUNCIONES BIOLÓGICAS

* Alteraciones:

Apetito: Disminuido

Sed: Disminuida

Orinas: No orina, 10 veces por día, insuficiencia renal

Heces: Sueltas

Sueño: Disminuida, dolor de cabeza, preocupación, insomnio

TABLA 22 – A

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES

SEGÚN AGUDEZA VISUAL Y AUDICIÓN POR SEXO

TABLA 22 – B

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES

SEGÚN ESTADO NUTRICIONAL POR SEXO

TABLA 23

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES SEGÚN

HÁBITOS NOCIVOS POR SEXO

* Hábitos nocivos (varones): Alcoholismo, mastica coca en exceso

Hábitos nocivos (mujeres): Alcoholismo

TABLA 24

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES SEGÚN

ACTIVIDAD FÍSICA SALUDABLE POR SEXO

* Caminata

TABLA 25

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES SEGÚN

LIMITACIONES Y/O DISFUNCIONES FÍSICAS POR SEXO

* Varones: No puede caminar, no ve bien, dolor abdominal, mareos, dolor de espalda, cabeza, columna, artritis, tumor en glúteo, dolor de próstata, reumatismo.

Mujeres: No puede caminar, no ve bien, dolor abdominal, mareos, dolor de espalda, cabeza, columna, artritis, cáncer cuello uterino, reumatismo

TABLA 26

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES SEGÚN ATENCIÓN EN

ALGÚN SERVICIO DE SALUD LOS ÚLTIMOS TRES MESES POR SEXO

* Servicio de Salud: Puesto de Salud, Centro de Salud, Hospital de Juliaca,

Clínica Americana de Juliaca, Consultorio Particular

TABLA 27 – A

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES VARONES SEGÚN

USO DE MEDICAMENTO POR FUENTE DE INDICACION

Usaron medicamentos: 126 (69.62%)

No usaron medicamentos: 55 (30.38 %)

* Otros: Antidepresivo, Aceite de oliva, desconocido, antialérgicos

** Se aceptaron hasta dos tipos de medicamentos por persona.

TABLA 27 – B

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES MUJERES SEGÚN

USO DE MEDICAMENTO POR FUENTE DE INDICACION

Usaron medicamentos: 131 (65.50%)

No usaron medicamentos: 69 (34.50%)

* Otros: Prednisona para reumatismo, pastillas para policetemia, frotaciones, pastillas para quiste uterino, antihipertensivo, pastillas para el cáncer

** Se aceptaron hasta dos tipos de medicamentos por persona.

D. NECESIDADES Y EXPECTATIVAS DE LOS ADULTOS MAYORES

TABLA 28 – A

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES VARONES SEGÚN

NECESIDADES MÁS SENTIDAS

* Se aceptaron hasta dos respuestas por persona

TABLA 28 – B

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES MUJERES SEGÚN

NECESIDADES MÁS SENTIDAS

* Se aceptaron hasta dos respuestas por persona

TABLA 29 – A

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES VARONES SEGÚN

EXPECTATIVAS HACIA EL FUTURO

* Se aceptaron hasta dos respuestas por persona

TABLA 29 – B

DISTRIBUCION DE ADULTOS MAYORES MUJERES SEGÚN

EXPECTATIVAS HACIA EL FUTURO

* Se aceptaron hasta dos respuestas por persona

Discusión y comentarios

• A. CARACTERÍSTICA SOCIODEMOGRÁFICAS DE LOS ADULTOS MAYORES

La población denominada adulto mayor, considerada desde los 60 años de edad a más, representa el 9.48% de la población total del ámbito estudiado (tabla 1), la cual es superior a la población adulta mayor en el Perú que en el año 2,005 era el 7.8 % de la población total,[7] lo cual es posible que se deba a factores migratorios de las poblaciones más jóvenes.

Para el 2006, según datos publicados por el INEI, la proporción de hogares urbanos donde se presentó migración de alguno de sus miembros es mayor en la zona rural (25,6%), cifra que es casi el doble que la registrada en el área urbana (13,9%).[8]

Según sexo, el porcentaje de la población masculina de 18 a 49 años que emigró permanentemente a otra provincia es mayor (63,6%) al porcentaje de mujeres emigrantes del mismo grupo etáreo (56,3%).

En el Perú, según el censo/estimaciones de 1970, la población adulta mayor del Perú constituía el 5.54% del total nacional; en el censo de 1993, alcanzó el 6.34%; por tanto, en 23 años la población de adultos mayores creció en menos de 1%. El ritmo de crecimiento se viene incrementando desde hace la década de los años 90, y se estima que para el 2025 será el 13.27%.[9]

Además la relación entre varones (47.50%) y mujeres (52.50%) nos muestran la mayor sobrevivencia de las mujeres, y si comparamos los valores relativos de los grupos etareos, a partir de los 80 años son semejantes entre hombres y mujeres.

El lugar de nacimiento de los adultos mayores estudiados son generalmente las provincias cercanas y la misma provincia donde ahora residen (tabla 2), esto se debería a una resistencia a la migración de estas generaciones de adultos mayores.

La adhesión a alguna religión expresa la tradición de la cultura peruana que fue evangelizada por el catolicismo (tabla 3), por ello la mayoría reconoce pertenecer a esta religión (95.54%), observándose también que la segunda religión en importancia son la adventista y las llamadas evangélicas, las cuales progresivamente se han introducido en las comunidades rurales andinas en las últimas década. Lo anterior es semejante a lo que ocurre a nivel nacional.[10]

En la tabla 4 observamos que predominan los casados entre los adultos mayores, pero le siguen en frecuencia los viudos, los cuales mayoritariamente son mujeres (40%) en comparación con los varones (27.07%) que se explicaría porque los varones estarían más expuestos a enfermedades y accidentes que los llevaría a una muerte más temprana. Es posible que el estado civil de casado haya sido estimulado por la religión católica a la cual pertenece la mayoría de la población. Con relación al estado de instrucción (tabla 5) es ampliamente mayoritario el grupo de analfabetos, que es lo observado en las comunidades rurales y andinas. El analfabetismo es mucho mayor en las mujeres (90.50%) en comparación con los varones (50.83%) por ser los primeros en quienes se suele valorar su educación y posterga a la mujer a roles domésticos, que no requerirían tener estudios. Así mismo podemos encontrar que menos del 4% alcanzaron una instrucción mayor al la primaria incompleta. Según la Encuesta Nacional de Hogares del 2001, la tasa de analfabetismo a nivel nacional es de 12.1%. La distribución por edades muestra que son las personas de 60 y más años las que presentan la mayor tasa de analfabetismo, 35.4%; el 29.3% de analfabetos son hombres y el 70.7% son mujeres, encontrándose la mayoría en el ámbito rural (57.9%).

Se encuentra que el idioma quechua es hablado por todos los adultos mayores del ámbito de estudio (tabla 6), pero que el 46.50% de las mujeres sólo habla el quechua mucho mayor al 28.73% de los varones. El español es hablado por el 70.72% y sólo por el 53.50% de las mujeres. Estas condiciones nos indican la homogeneidad cultural de la población estudiada, la cual es típicamente altoandina y quechua, con una cosmovisión que valora el lugar de nacimiento, la familia, con un respeto y equilibrio con la naturaleza y una resistencia a los cambios.

• B. LAS CONDICIONES SOCIALES DE LOS ADULTOS MAYORES

En la tabla 7 – A observamos que la de un total de 181 adultos mayores varones, el 88.48% vivían con algún familiar, generalmente la esposa y los hijos. Es importante destacar que el 11.52% vivían solos, debido a abandono de los hijos del hogar paterno que ha dejado a estas personas en condiciones de desventajas para su sustentación básica. Las personas con quienes viven los adultos mayores son generalmente pastores de ganado y tejedores, lo cual nos sugiere las posibilidades de acceder a ingresos económicos.

La tabla anterior se complementa con la 7 – B, que describe las personas con las cuales viven las mujeres adultos mayores. En este caso encontramos que el 17.75% viven solas y que el 82.25% lo hacían generalmente con los esposos e hijos, quienes tenían comúnmente las ocupaciones de agricultor, pastor de ganado y comerciante, secundariamente algunos también eran tejedores.

Campos Sánchez, F.; Muñoz Cordero, L, encontró que los casados y viudos tienen mayor grado de dependencia que los solteros; sin embargo este factor no influye en los grados de dependencia. Los adultos mayores que viven solos y en su propia casa son mas independientes que los que viven con familiares y en otra casa; por lo tanto la convivencia familiar, influye significativamente en el adulto mayor estableciendo su grado de dependencia.[11]

Con relación a las ocupaciones anteriores que tuvieron los adultos mayores varones estas fueron: agricultor y pastor de diversos ganados (tabla 8 -A), lo que es propio de las actividades económicas de las zonas altoandinas, las que además son a pequeña escala, con escasos ingresos, casi para la sobrevivencia; esto se explicaría por los niveles bajos de instrucción, así como por la resistencia frecuente a la migración a centros urbanos con mayores posibilidades de ingresos económicos. En el caso de las mujeres, las ocupaciones anteriores que tuvieron fueron también el pastoreo de ganado, el tejido y la agricultura. (tabla 8 – B). Es destacable que la gran mayoría de mujeres de estas zonas altoandinas, desarrollan alguna actividad económica, además de las labores domésticas, situación diferente a las zonas urbanas donde predominan las ocupaciones domésticas en las mujeres.

Lo anterior podemos compararlo con los resultados de la tabla 9 – A, donde encontramos que los varones en general mantienen las mismas ocupaciones anteriores pero que en las mujeres se incrementan quienes realizan actividades en su casa (tabla 9 – B) quizá por las limitaciones propias de la edad adulta. Además aparecen los casos de personas que reconocen que actualmente no tienen ocupaciones. En el Perú, si bien el desempleo ha aumentado en todos los grupos etáreos, en la población adulta mayor esto puede deberse a aspectos que se relacionan con la oferta laboral – problemas de salud, falta de calificación- o con la demanda laboral – falta de oportunidades, discriminación por edades. La población desempleada de esta edad probablemente esté buscando empleo con el objetivo de subsistir, sobre todo si no cuenta con una pensión de la seguridad social, activos propios o apoyo familiar.[12]

Los resultados anteriores se complementan con los resultados de la tabla 10 – A donde podemos observar los ingresos económicos efectivos mensuales de los adultos mayores varones, así vemos que estos montos son generalmente menores a S/.50 al mes, lo que nos sugiere que sus sostenimiento material lo obtienen de los productos que directamente cultivan o de los animales domésticos que poseen. En las mujeres ocurre algo semejante, siendo sus ingresos económicos provenientes de la venta de sus tejidos, sus productos de la agricultura y animales que crían (tabla 10 -B).

El 95.54% de los adultos mayores viven en viviendas propias y el 3.94% la comparten con sus familiares más cercanos (tabla 11), esto es coherente con la cultura andina de resistencia a los cambios y la tendencia a vivir con su familia como forma de mantener la seguridad de su sostenimiento material y afectivo.[13] Además sus viviendas son muy rústicas, construidas generalmente con paja y adobe a veces han complementado con calaminas para los techos; este es el paisaje común en las zonas altoandinas. Las condiciones de hacinamiento son menores (10.24%) debido a que los adultos mayores de estas poblaciones pueden fácilmente construir un dormitorio, lo que no ocurre en las zonas urbanas, donde es más frecuente el hacinamiento.

Siendo la actividad social necesaria en todas las personas, se encuentra que los adultos mayores estudiados no lo hacen en organizaciones e instituciones, siendo sólo el 5.51% que lo hace y en comités vecinales y las mujeres en clubes de madres (tabla 12), esto es mucho más extraño en la participación en organizaciones culturales artísticas donde sólo 3 personas (0.79%) reconoció que participan en asociaciones de artesanos. Esta situación puede agravar las posibilidades de apoyo social para esta población de adultos mayores.

Vega Farro, Martha I. encontró que la inactividad es un problema real de salud de los adultos mayores y se asocia a factores biológicos y psicosociales, entre los que resalta la discapacidad y el aislamiento social seguidos por bajo nivel de ingresos.[14]

En la tabla 16 se presentan resultados obtenidos mediante entrevistas a personas con quienes viven los adultos mayores o a vecinos, quienes describieron que los adultos mayores en su mayoría (72.96%) vivían en buenas relaciones con sus familiares y vecinos, con quienes se empiezan a presentar conflictos es con vecinos por disputas de terrenos, además se encuentra en menor porcentaje los casos de adultos mayores que presentan diferentes tipos de conflictos sociales con vecinos y familiares, esto último por el abandono o el maltrato de los hijos, quienes perciben a sus padres como inútiles.

En una investigación realizada por Pérez Saavedra, Francisca, encontró que la actitud positiva hacia el anciano va a ser de dirección positiva hacia el área psicológica, social y hacia el cuidado y es de indiferencia hacia el área biológica; la edad y el parentesco del familiar encuestado está asociado con la dirección e intensidad de las actitudes de la familia hacia el anciano, siendo estos: A menor edad las actitudes positivas son más frecuentes; y cuando más cercana consanguíneamente sea el familiar serán positivas sus actitudes, el estado civil, grado de instrucción y la actividad que desarrolla el familiar del anciano no están asociados con la dirección e intensidad de las actitudes.[15]

• C. CONDICIONES DE SALUD DE LOS ADULTOS MAYORES