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Filosofía teológica (página 2)



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Entonces, la relación correcta entre fe y razón, entre revelación divina y ciencia humana, entre conocimiento científico, filosófico y conocimiento teológico o religioso es como la vieja guerra colombiana donde nunca termina de hacer las paces por el carácter temporal del descubrimiento de las partes. Recientemente Donald Bloesh "resucitó este debate con un resultado bastante pobre. No le ha ayudado para nada el estilo aforístico que usa en toda su obra". Al respecto nos dice:

"Mantengo que cada filosofía representa la racionalización de una falsa teología, y que la verdadera teología necesariamente excluye la filosofía. No sus problemas, ni tampoco su lenguaje, sino su concepción del cosmos, sus afirmaciones metafísicas. En contraposición a "Tillich", creo que la teología y la filosofía no son simplemente dos caminos paralelos de entender la realidad, sino que cada una se refiere a dos realidades fundamentalmente distintas, la relación entre teología y filosofía no es de correlación, sino de conflicto y contradicción. Nada más lejos de la verdad".[15]

Teología y Filosofía: ¿Son dos mundos inmersos?

Mientras exista en el reflexionar del hombre un vestigio, una huella; que ilumine el origen y el fundamento que lo constituyen a él, como un ser pensante; filosofía y teología serán dos mundos inmersos en una misma interrogante esencial: ¿qué somos?.

Entonces aquella sentencia de Kant: "Yo infiero y concluyo que puedo tener conciencia de mi existencia fuera de la experiencia", alcanza una connotación trascendental en los textos compartidos por los filósofos y teólogos[16]

Les invito analizar algunos fragmentos que nos permiten seguir en los dos caminos paralelos sobre la realidad; lo que yo conozco está integrado por dos elementos: lo dado y lo que pongo yo. Lo dado es un caos de sensaciones; pero, el caos es justamente lo contrario del saber. Yo hago algo con ese caos de sensaciones. ¿Qué hago? Lo ordeno, en primer lugar, en el espacio y en el tiempo; luego según las categorías. Entonces, con el caos de sensaciones, yo he hecho cosas; no son cosas en sí, sino fenómenos, sujetos al espacio y al tiempo.

Ahora bien, el espacio y el tiempo ¿son ellos cosas en si?. No, no son cosas. ¿Qué son pues?. Kant dice que son intuiciones puras; son las formas a priori de la sensibilidad. La sensibilidad no es solo algo receptivo, sino que es activa. Imprime su huella en todo lo que aprehende; tiene sus formas a priori.

Estas formas que la sensibilidad da a las cosas que le vienen de fuera son el espacio y el tiempo. Son las condiciones necesarias para que yo perciba, y estas las pongo yo. Son algo a priori, que no conozco por la experiencia, sino al contrario: son las condiciones indispensables para que yo tenga experiencia. Son las formas donde alojo mi percepción; son pues, algo anterior a las cosas, perteneciente a la subjetividad.

Las cosas en si son inaccesibles, no puedo conocerlas, porque en cuanto las conozco ya están en mí, afectada por mi subjetividad; las cosas en si -no menos- no son espaciales ni temporales, y a mí no se me puede dar nada fuera del espacio y del tiempo. Las cosas tal como a mí se me manifiestan, como me aparecen, son los fenómenos.[17]

Kant distingue dos elementos en el conocer: lo dado y lo puesto.[18] Hay algo que se me da (un caos de sensaciones) y algo que yo pongo (La espacio-temporalidad), y de la unión de estos dos elementos surge la cosa conocida. El pensamiento, pues, al ordenar el caos de sensaciones, hace las cosas. Puesto decía Kant que no era el pensamiento el que se adaptaba a las cosas, sino al revés. Pero, no es el pensamiento solo el que hace las cosas, sino que las hace con el material dado. La cosa pues, distinta de la cosa en si incognoscible, surge en el acto del conocimiento trascendental.

Ahora bien, yo tengo la percepción de un Dios, de éste tengo esa percepción como un conjunto de sensaciones en las cuales estoy viviendo, que están en mí. La vivencia es, pues, inmanente a mí, está dentro de mí. Es una modificación de mí mismo, de mi conciencia; pero, esa vivencia señala hacia Dios que existe independientemente de mí en el mundo real. Ese Dios señalado por mi vivencia, contenida intencionalmente en mi vivencia, pero hacia la cual mi vivencia señala, ese Dios, es trascendente.

De modo que en toda vivencia hay vivencia misma que es inmanente al yo, y hay el objeto de la vivencia que es trascendente al yo. Pues bien, si tenemos este sentido de la palabra trascendente, vamos a comprender el sentido que le da Kant a esta palabra, para Kant el objeto del conocimiento no es un objeto cuya realidad sea en sí y por si, sino que tiene una realidad, distinta de mi vivencia, ciertamente, pero no en sí y por si, sino que tiene una realidad objetiva, cuya objetividad no es lo que es, sino en relación con el sujeto. Es decir, que el objeto es para el sujeto y el sujeto es en tanto en cuanto conoce al objeto. Son correlativos objeto y sujeto.

Esta correlación, en la pareja sujeto y objeto, es la que Kant acentúa. Por consiguiente, el objeto del conocimiento no tiene para Kant una realidad metafísica en sí y por si, sino que tiene realidad en cuanto es objeto de conocimiento, nada más. Como hemos visto filosofía y teología serán dos mundos inmerso en el objeto de conocimiento: Dios, como veremos más adelante filosofía y teología son dos ciencias hermanas, no puede existir la una sin la otra.

Teología y Filosofía ¿Por qué deben relacionarse?

La Teología debe relacionarse con la filosofía; porque, la Teología tiene dos principios metodológicos: "auditus fidei" ("escucha de la fe") e "intellectus fidei" ("la fe que busca entenderse o comprenderse con la razón"). La Filosofía aporta al "auditus fidei". El "intellectus fidei", tiene una inteligibilidad propia que lo hace un saber auténtico. Las ramas de la Teología se ayudan con el saber filosófico. Como sucede con la Teología Conservadora Fundamentalista,[19] que justifica y explica las relaciones entre fe y razón. La Teología Moralista (o de Santidad) se apoya en una base filosófica correcta de la naturaleza humana y de la sociedad.

La relación entre Teología y Filosofía es dialéctica, porque ambas buscan dar respuestas a las inquietudes del género humano. Por ello, los Teólogos y Filósofos deben tener en cuenta, que donde hay fe, razón independiente de la revelación, hay que ayudar para que la gracia divina perfeccione al ser.

Las culturas enraizadas en lo humano, llevan el testimonio de la apertura a la trascendencia; los Teólogos aportan a las culturas de la Verdad, una parte del pensamiento de Dios; los Filósofos en cambio, aportan la razón de estas culturas. Ellos lo hacen sin perder su Misión e identidad. Por lo anterior, tanto Teólogos y Filósofos deben dejarse guiar por la única autoridad de la verdad que es la Palabra de Dios.

Ahora pasamos a los teólogos de la historia cristiana, aunque algunos protestantes como Lutero y Karl Barth se han opuesto enfáticamente al uso de la filosofía en la Teología, casi todos los teólogos católicos reconocen la importancia de la dimensión filosófica de la teología, que algunos han bautizado como filosofía teológica o teología filosófica. Esta parte del estudio el autor de esta tesis doctoral se propone examinar la relación de éstas, nos fijaremos en cuatro teólogos modernos: Karl Rahner, Paul Tillich, Rudolf, Bultmann y John Macquarrie.

Podemos resumir la posición de Rahner diciendo que la filosofía y la teología son disciplinas distintas pero necesariamente relacionadas. En primer lugar, están relacionadas porque las dos tienen que ver con el ser humano y las dos tienen que ver con Dios.[20] Aun podemos sintetizar mas esta relación afirmando que la filosofía es la condición que hace posible el quehacer teológico de un teólogo. En efecto, la teología es una reflexión sobre la fe, y la fe consiste en proclamar que Dios ha hablado, pero si él habla, es de suponer que se dirige a un interlocutor en el diálogo, que existe alguien a quien se destina la comunicación de Dios.

Rahner, desarrolla una antropología filosófica para demostrar que el ser humano como tal está abierto para recibir una posible revelación de Dios. La filosofía alcanza su culminación cuando demuestra que la persona humana ha de estar a la escucha de una posible Palabra de Dios. La filosofía no sabe si Dios hablará, pero se mantiene alerta a esta posibilidad.[21] Rahner afirma que la reacción existente entre filosofía y teología es análoga a la que se da entre naturaleza y gracia. Dios crea el ser humano dotado de una cierta estructura autónoma que podría existir íntegramente sin que Dios le hiciera don de sí mismo. Pero lo cierto es que esa naturaleza pura nunca ha existido como tal, ya que Dios siempre ha querido comunicarse. De ahí que el hombre o la mujer natural que nunca ha escuchado el mensaje de salvación estén sin embargo influido por la gracia de la que lo creó.[22]

Análogamente, a propósito de la "filosofía y la teología" también cabe afirmar que no puede existir una filosofía autónoma. Ciertamente, la filosofía tiene su propia metodología diferente de la que aplica la teología. A pesar de ello, concretamente en la historia del género humano, la presencia del cristianismo es un hecho que ha influido en el pensamiento humano y en nuestra percepción de la realidad, muchas veces inconscientes.

Así, tanto la presencia de la gracia en el mundo como hecho histórico del cristianismo han influido y seguirán influyendo en la sociedad de los filósofos. Un Heidegger o un Baruk de Spinoza, por ejemplo son impensables sin el influjo indirecto de la fe cristiana. Resumiendo, la posición de Rahner, la filosofía es una disciplina autónoma pero mantiene una relación de hermandad con la teología.[23]

Nuestro segundo teólogo es Paul Tillich, al principio de su Teología sistemática reflexiona sobre la relación existente entre filosofía y teología.[24] La postura del filósofo es objetiva. Aborda el tema con cierto distanciamiento. El teólogo, por su parte, aporta a la investigación su compromiso de fe. Como lo señala Tillich, Dios es su compromiso definitivo. Por otra parte, el filósofo y el teólogo adoptan enfoques diferentes. El filósofo lanza una mirada llena de asombro sobre toda la gama de lo real, mientras que el teólogo se siente arrastrado hacia la experiencia de Dios en una revelación determinada. La perspectiva del filósofo es más cosmológica. Quiere saber cómo está formado el mundo. La perspectiva del teólogo, en cambio, es más existencial. Se preocupa por la victoria del Ser sobre el no ser.

Finalmente, Tillich reconoce que con mucha frecuencia la misma persona es a la vez filósofo y teólogo. En la medida en que es teólogo aporta a su investigación el compromiso apasionado de la fe. Por ejemplo, cree que Jesús es el camino de su salvación. Pero, en el momento en que trata de formular como Cristo es la verdad y de qué modo está relacionado con la realidad total, aporta a su investigación la objetividad desapasionada del filósofo. Nuestro tercer teólogo es Rudolf Bultmann, también aboga a favor de una distinción y a la vez una relación íntima entre filosofía y teología. El nexo que las une es la existencia humana. Los existencialistas utilizan el término de existencia en el sentido especifico de ex-sistere (Etimológicamente proviene de los vocablos latinos Ex-Sistere, Existentia, que significan "lo que está ahí", "lo que es". También Ex-Sistit, que es "lo que está afuera"; así, la existencia es equiparable a la realidad, lo que está "Ex" de la cosa que es), situarse fuera de uno mismo.[25]

En este contexto, el ser humano está a la vez arrojado en el mundo y abierto a infinitas posibilidades. Está determinado por el mundo, por el espacio y por el tiempo en que vive, pero es a la vez y por igual libre para crear su futuro. De ahí que la existencia se viva entre la facticidad y la trascendencia. Como trascendencia, la existencia humana es siempre un ser volcado al futuro. Pero, en cuanto se trata de un ser finito, la trascendencia humana tiene en todo momento conciencia de que su futuro último es la muerte.

El ser humano es precisamente ese ser que tiene la posibilidad de no ser. Ese reconocimiento de la propia finitud pone a la persona humana en una situación de angustia existencial que la hace consciente de que en el núcleo mismo de su ser esta la nada.

Es decir, es un ser para la muerte, y debido a esta angustia, el ser humano huye muchas veces de sí mismo. Le resulta excesivo hacer frente a la nada de su ser y por eso abandona su más radical posibilidad y se deja perder en el mundo estúpido del trabajo, los negocios, los vicios, la cháchara insulsa y los medios de comunicación como son la internet, la televisión y el cine. Heidegger califica de inauténtica una existencia de esta clase. Bultmann sigue básicamente la "antropología filosófica" de Heidegger. Afirma que Heidegger nos ha trazado una descripción exacta de las estructuras de la existencia humana.

Estas estructuras son válidas tanto para el filósofo como para el teólogo. La diferencia entre la filosofía y la teología radica en el hecho de que el mensaje de Dios nos muestra cómo dar el salto de la existencia inauténtica a la auténtica.

El mensaje de Jesucristo libera a la persona de aferrarse a su pasado, de perderse en el mundo, pues el Espíritu Santo hace que la persona se abra al Dios que está mas allá de la finitud humana. A partir de este futuro de Cristo que se acerca por segunda vez, hombres y mujeres son capaces de abrirse a sus más genuinas posibilidades y hacerse responsables cada cual de su vida.[26] Siguiendo la línea general del pensamiento bultmanniano, Macquarrie sugiere que la filosofía es esencial a la teología cristiana, porque plantea la cuestión de la existencia humana. Dicho de otro modo, la filosofía se pregunta cuál puede ser su sentido. La singularidad de un individuo consiste en que es el único ser que se hace esa pregunta. La filosofía trata de elucidar el interrogante que es de por si el ser humano.

Pero, la filosofía tiene importancia crítica para la teología por otro motivo. La filosofía, en efecto, se preocupa también de unos conceptos en los que se expresa la fe cristiana. Ya hemos visto con anterioridad que la fe ofrece una respuesta al interrogante acerca del sentido de la existencia humana. Pero a fin de que esa respuesta sea inteligible, ha de ser formulada mediante un conjunto de conceptos.

En este punto "ha de recurrir forzosamente a la teología a la filosofía", ya que ésta aporta los conceptos de que nos servimos para interpretar la realidad. Vemos ahí al mismo tiempo la razón de que toda teología haya de estar por fuerza culturalmente condicionada. En efecto, cuando la teología trata de expresar el sentido de la existencia humana, inevitablemente tomará prestado de la cultura en cuyo seno vive ciertos presupuestos acerca de la realidad.

Este último punto sugiere no solo la existencia de una interrelación entre la filosofía y la teología sino a la vez una relación dialéctica. La teología acude a la filosofía en demanda de los conceptos que necesita para expresar la fe.

Al mismo tiempo, la fe, sobre la base de la automanifestación de Dios, tiene capacidad para modificar nuestra concepción de la realidad y por ello mismo, para depurar nuestros conceptos. Esta relación dialéctica sugiere que nunca se establecerá una síntesis perfecta entre la filosofía y la teología, sino que continuamente se estarán modificando la una a la otra. Ningún sistema estará completo ni en filosofía ni en teología mientras transcurra el tiempo.

Como lo afirma Cantero en el último capítulo de su disertación doctoral que es "irracional oponer y enfrentar Filosofía y Teología, creando falsas antítesis que para nada son necesarias. Es un error común de muchos autores (cristianos y no cristianos) hablar de contradicción allí donde se muestran incapaces de ofrecer una solución viable que integre la certeza de ambas partes en una unidad más elevada."[27]

La filosofía como toda disciplina pretende comprender y dar sentido a la realidad, la teología, también, es una manera de comprender esa realidad y de vivir en el mundo. El mundo natural en que vivimos es un mundo cristocéntrico o llamado por Paul Tillich el nuevo ser[28]

La fe que parte del contenido divino, está obligada a desarrollar una reflexión integrada, donde los distintos saberes se correlacionen por la base que los une: Dios como principio y fundamento de lo que hay y de cuanto pueda haber. En este sentido la teología filosófica es la filosofía de la revelación. Es decir, la exposición razonada y crítica de las doctrinas de la fe cristiana, de su contenido e implicaciones.

Entonces, la filosofía – hermana de la teología – es un ejercicio de claridad respecto a la realidad que nos rodea, la revelación es ejercicio de claridad respecto a la realidad que nos rodea, la revelación es claridad manifestada, desvelada, respecto al origen y fundamento de toda actividad humana: su radicalidad en Dios.[29] Es decir, en Dios tenemos nuestro ser y meta; y a Él se elevan nuestras plegarias y aspiraciones. "Dios se revela en el pensamiento y se manifiesta a la inteligencia.

Salvando esta lucha entre filósofo y teólogo, la teología como la filosofía, se nos aparece como una hermenéutica que quiere comprender y dar sentido a la realidad, de manera racional. Estamos de acuerdo con Emilio Monti que sostiene que la teología nace de la experiencia religiosa en general y de la experiencia de Jesucristo, en cuanto teología cristiana en particular. Sin embargo, no puede agotarse en ella. La experiencia tiene que ser comprendida y comunicada, para ello necesita de la argumentación filosófica y de otras disciplinas.[30]

La teología, como ciencia analógica y racional, trasciende la realidad inmediata, por lo cual debemos distinguir entre la experiencia y la explicación de la misma. Esta teología, para ser tenida como una disciplina universal debe estar abierta al dialogo con otras ciencias del conocimiento.

La filosofía, en cambio como todo sistema que pretende comprender y dar sentido a la realidad, es por su propio carácter un sistema totalizante, necesariamente cerrado. Y demás está decir que en su propósito de esclarecer los problemas de la realidad, tienden a hacer de su conocimiento un sistema cerrado. Es allí donde surge tal confrontación con la teología; también, la teología se comporta de la misma manera, que se cierra a todo dialogo, por eso tanto teólogo como filósofo deben ser abierto al dialogo entre las dos disciplinas, deben relacionarse dialécticamente.

La filosofía cristiana es un esfuerzo por lograr aquello que toda filosofía, tanto religiosa como secular, quiere lograr: "la única razón que tiene el ser humano para filosofar es la de querer alcanzar la felicidad".[31] La filosofía, en último extremo, es la búsqueda de la beatitud por el ser humano, y comprende no solo su fe y su expansión en la plenitud de su conocimiento, sino también su voluntad y su amor.[32]

En síntesis podemos argumentar que el cristianismo no quiere desestimar el valor de la razón, al contrario, desea más bien su exaltación. Al respecto Armando Carlini nos dice: "…y cree que su exaltación debe realizarse en la integridad del acto, en el cual la fe y la razón se subliman recíprocamente, porque en él, la fe casi se anticipa a la razón, y la razón tiene a la fe despierta con sus interrogantes."[33]

Minucio Félix, el Cicerón cristiano del siglo II, después de haber señalado algunas anticipaciones cristianas en el pensamiento helénico, concluye con una frase que recuerda a Platón ("La República"): "O bien los cristianos son ahora filósofos, o los filósofos habían sido ya cristianos[34]Los reformadores de línea humanística, como Zwinglio, Bucer, y Calvino también, consideraban que había muchos destellos de verdad cristiana en la filosofía helénica. Los pensadores cristianos de todos los siglos de la era cristiana, siempre han sido consciente de la diferencia, como de la importancia que tiene la una sobre la otra; la filosofía y la teología son dos mundos paralelos para entender la realidad.

Filosofía y teología sagrada

La Filosofía tiene fronteras con una ciencia superior: "La Teología Sagrada" o de la "fe"; y también tiene fronteras con ciencias inferiores, que en sentido amplio llamaremos Ciencias Experimentales.

La "Teología filosófica" es la parte más noble y elevada de la Metafísica, es un saber estrictamente filosófico. La Teología puede ser llamada "teología Sagrada", su más importante principio y criterio de conocimiento es la revelación divina admitida por la fe religiosa.

"Aunque la fe produzca o determine sentimientos, no es formalmente un sentimiento más, es por eso que se contrapone, o se llega a enfrentar con la filosofía"[35]

Revelación divina: es el conjunto de verdades que Dios ha querido comunicar al hombre. Abarca dos tipos de verdades diferentes Verdades naturales: que los hombres podrían conocer por la razón Verdades propiamente sobrenaturales, los llamados "misterios".

La fe humana es muy importante, ya que por ella conocemos y nos relacionamos con nuestros semejantes. A diario vivimos confiando en el prójimo.

La fe religiosa es una virtud infusa sobrenatural, un don que Dios concede al hombre.

La "Teología Sagrada" o de la fe, es una ciencia mixta, divina y humana; divina porque es el propio saber de Dios y humana porque es cultivada por el hombre.

La "Teología Sagrada" "es la Ciencia Superior por su objeto: Dios conocido por la fe[36]Los principios de la Filosofía son independientes de la Teología Sagrada, ya que son las verdades que se imponen naturalmente. La filosofía no tiene necesidad de la Teología para la defensa de sus principios, ya que son complementos el uno del otro.

Ambas coinciden en tener un lugar en el entendimiento. Pero difieren precisamente en la manera como tienen su lugar.

A modo de conclusión

El desarrollo de una "Filosofía Teológica" a partir de la búsqueda de un camino común de análisis debe ser considerada como una reflexión crítica, sin duda abierta y rigurosa, para la discusión, sentido en el cual es necesario mantener su estructura en forma puramente no confesional en relación a los temas relacionados propiamente con la Religión y por tanto es menester comprometer el uso de la razón como búsqueda de respuesta que le den coherencia y significado a la discusión.

Por otra parte se puede señalar que los pensadores de este campo reducen el discurso religioso al ámbito de un discurso moral, pues resulta muy difícil que los hombres religiosos renuncien a la pretensión de la verdad de sus enunciados.

Todas las religiones con mayor o menor racionalidad, intentan ofrecer una explicación sobre el mundo del mismo modo que otras explicaciones no religiosas; cada religión posee su particular código de racionalidad.

Finalmente se puede señalar que el estudio de las religiones tiene por un lado el propósito para los pensadores de entender que los hombres buscan salvarse y que sólo en Cristo es posible su salvación, mientras que para quienes han crecido en la de Fuente del pensamiento humano al estilo de Feuerbach, el hombre ha realizado su camino: primero creó a Dios y más tarde entendió que ello solo era un peldaño en el conocimiento humano, al considerar a Dios como una creación humana y por lo tanto como Feuerbach niegan su existencia así como la de cualquier otro dios.

La Teología como ciencia analógica.

En un congreso nacional de investigadores académicos, auspiciado por la Universidad Remington, donde participaron diferentes profesionales, entre ellos filósofos docentes, ingenieros, teólogos, entre otros. La Magister Jacqueline Hurtado de Barrera, nos hizo reflexionar acerca de nuestra profesión, cada grupo de especialidad les preguntó, el autor de este libro quiere compartirlas con ustedes: ¿la teología es una ciencia? ¿Cuál es su objeto? ¿Si es ciencia, a que grupo pertenece?.

Conviene aclarar ante todo, que en el conjunto de las ciencias, la Teología es considerada como ciencia sólo de una manera analógica, ya que aunque utiliza métodos rigurosos para el tratamiento de sus datos, su objeto último es la realidad de Dios.

Desde la perspectiva de Dios podemos mirar la realidad toda, tanto el mundo material como el humano, pero la realidad misma de Dios escapa a los sentidos, lo que hace que el objeto de la Teología sea la inteligibilidad de la fe que busca entender aquello que cree. "La Teología no es la misma fe; procede de la fe, la interpreta, se esfuerza por comprenderla a través de una reflexión sistemática".

La "teología" es un conjunto que abarca: conceptos, fundamentos, palabra, descubrimiento del sentido propio, reflexión a base del esfuerzo racional e histórico, a través de símbolos, de cultura de vida. La "Teología", denominada "ciencia de la fe" se relaciona como tal con la ciencia y con la fe.

El punto de partida de la "teología" en cuanto saber, "es el acto de fe", el cual empuja al teólogo a investigar los vínculos históricos y antropológicos de la revelación, es decir, las manifestaciones del actuar de Dios en nuestro mundo y en la historia. A ordenar, a someter a un trabajo de dilucidación sus afirmaciones.

El teólogo realiza este trabajo por medio de métodos rigurosos, que pueden considerarse científicos, en cuanto disciplinas que ordenan conocimientos, inducen o deducen leyes, hacen aplicaciones. El método de la Teología es el camino para alcanzar el conocimiento teológico, trátese de la teología dogmática, fundamental, latinoamericana, feminista, espiritual, pastoral…

El teólogo utiliza el método científico al realizar procesos que por su naturaleza misma conducen a la construcción del saber teológico. Por analogía con el trabajo de las ciencias, a este trabajo le llamamos trabajo científico. Pero la utilización de estos procedimientos debe ser antecedida por una especie de sapientia, (fruto de la fe), que posibilite pensar teológicamente.

"El acto de la ciencia es inseparable del ejercicio del método científico". La "teología" es hija no sólo de la "fe" sino también de la "razón". Está siempre construyéndose con los métodos de su tiempo. Desde que nace como ciencia, con Sto. Tomás de Aquino, nace con los métodos deductivos que el Aquinate (cómo definir el hecho religioso) toma de Aristóteles. Parte de la revelación, como de "primeros principios", ciertos y verdaderos. De éstos, el teólogo deduce conclusiones.

El teólogo parte del hecho de la Revelación como de su fuente. El objeto de su fe, las verdades que cree, (fides quae creditur: "la fe por la que se cree") están en el lugar que tienen los "hechos" de las ciencias empíricas; éste es el punto axial de la reflexión teológica.

Desde este punto de partida, el teólogo investiga los datos históricos y antropológicos de la Revelación, con la ayuda de las ciencias positivas; a este primer momento de la investigación teológica se le llama momento positivo de la teología.

Luego el teólogo trasciende racionalmente estos datos para llegar a un segundo momento, si así podemos llamarlo, que es el momento especulativo, en el que el teólogo busca la inteligibilidad de esos datos en la comunidad de fe en el presente. Por un lado, al teólogo se le exige una fidelidad a los orígenes de su fe; por otro, él establece diferencias. Es necesario que exprese, en las categorías del ser humano contemporáneo, la validez de sus principios.

Esta búsqueda compromete la seriedad de un trabajo a veces interdisciplinario, que se somete a los mismos esfuerzos que la razón emplea para avanzar en los otros saberes, a los que la Teología ofrece un último sentido.

Cabe pues distinguir, en Teología, entre método y métodos. El método teológico escucha la realidad toda, todo lo cognoscible y comprensible por la razón, a la luz de la realidad de Dios quien le da, a todas las cosas y al ser humano mismo, su último sentido.

El estatuto epistemológico de la Teología trasciende el de los otros saberes. Su lugar está más allá de la misma Filosofía, en cuanto ésta es un ejercicio de la razón, que toma de sí misma su capacidad de comprensión de la totalidad, mientras a la Teología le compete la escucha de la Palabra revelada[37]

La Teología está en función de la misión como lo está la Iglesia misma. La misión de la Iglesia en el mundo es la tarea de acercar el mensaje de la revelación, a Cristo mismo, a todos los seres humanos, a todas las culturas en todos sus problemas. Por tanto, la Teología ha de abrirse a todos los saberes con sus propios métodos, todos aquellos que le han de servir como instrumento de aproximación a la realidad de cada ser humano, de cada cultura, en su mundo.

Los métodos de las ciencias humanas le aportan a la Teología diferentes modos de aproximación a la realidad del género humano, del mundo y le ofrecen la posibilidad de una comprensión cada vez más amplia, no sólo de la Palabra de Dios en cuanto palabra revelada por modos humanos, sino de diferentes aproximaciones a la realidad en que el destinatario de la fe vive su vida. Todos los métodos de investigación son pues útiles a la reflexión teológica. De ello da cuenta la teología contemporánea.

Desde la concepción moderna de las ciencias, al interior de nuestra cultura científico-técnica, la Teología se ha abierto a los aportes de la reflexión antropológica y a la importancia que se le concede en nuestro mundo a las ciencias históricas. Su interés por los fenómenos empíricos, la hace inductiva, desde la praxis cristiana.

Una profundización sobre el "acto de fe", toma sus métodos de la fenomenología y de la psicología. Se interesa por la empireia de los hechos, por la experiencia eclesial de Jesús resucitado, por la investigación histórica sobre lo creído.

Recibe pues el nombre de Teología positiva aquella cuyos métodos son sobre todo los histórico – críticos, que no solamente pueden emplearse en el trabajo sobre documentos antiguos, sino aún en la exégesis, en la hermenéutica de los documentos de la Iglesia, tanto de los antiguos como de los contemporáneos.

La Teología siempre ha estado ligada a la cultura y nuestra época está eminentemente centrada en lo científico-técnico. Valga, a modo de ejemplo, el caso de las ciencias biológicas y la tecnología, que han propuesto, en las últimas tres décadas, más preguntas a la Teología que en todos los siglos anteriores.

Es preciso que la Teología aún en sus esfuerzos investigativos a los de la Biotecnología en su reflexión sobre el ser humano y sus producciones. Estos nuevos problemas generan nuevas formas de hacer Teología. La interdisciplinariedad y transdisciplinariedad de la investigación se vuelven casi obligatorias.

Al teólogo le compete conocer a conciencia los fenómenos sobre los que construye su discurso, trátese de la investigación genética, de la clonación, o del diagnóstico de la muerte humana. También el Derecho y las Ciencias Sociales y Políticas, y aún Económicas, tendrán su palabra sobre los grandes problemas de nuestro mundo. De estas reflexiones se nutren la Escatología Teológica[38]la Pastoral, las misiones.

En resumen, es preciso que al hacer tu trabajo de investigación, utilices los datos tanto de las ciencias empíricas, como de las que son fruto de la reflexión teórica. Si tu trabajo se dirige precisamente a la obtención o confrontación de estos datos, has de organizar un proceso lógico para la construcción del saber teológico.

Métodos de Investigación en Teología.

Lo primero que uno puede preguntarse, al comenzar un trabajo de investigación es hacia dónde se dirige. Es muy importante saber lo que uno desea conocer mejor. Tal vez tengamos que devolvernos a la pregunta con la que comenzamos los estudios de Ciencias teológicas ¿Qué nos hizo escoger estos estudios? ¿Qué deseábamos aprender en ellos?

Ciertamente la Teología tiene que ver con Dios y por lo tanto también con el ser humano, con su mundo, con la Historia, con la Comunidad de los creyentes. Hemos confrontado nuestros aprendizajes con el conocimiento de otros mundos y otras culturas que se expresan en otras formas religiosas.

Nos hemos dado cuenta de que las Ciencias teológicas se relacionan con la educación, con la vida y la historia de las sociedades, con la gente común. En verdad, el saber sobre lo teológico está vinculado con muchos otros saberes… Deberíamos poder ubicarlo al interior mismo del pensamiento complejo y lograr nuevos enfoques, al interior de los nuevos paradigmas del pensamiento contemporáneo.

En realidad, podemos investigar en muchos campos: sobre lo que enseñamos o sobre lo que nuestros alumnos aprenden, sobre el contexto socio-religioso en que nos movemos, o sobre las actitudes de los miembros de un grupo frente a determinados valores, sobre la evolución del sentimiento religioso de un determinado individuo o sobre el impacto que un texto religioso tiene en una comunidad.

En el mundo de lo real, de las cosas: puede tratarse de un objeto, un texto, una obra de arte, un monumento, una institución, un personaje, una autor. Pero puede también pertenecer al mundo de las relaciones, de los símbolos: se trata entonces de valores, de sistemas, de ritos, de signos, de estructuras del lenguaje.

El saber teológico se ve con frecuencia afectado por los cambios culturales, y poco a poco, se ha ido ampliando con las posibilidades de utilizar nuevos métodos de investigación, propios de otras ciencias, en la medida en que el interés se vuelca sobre el género humano y su mundo, en cuanto datos nuevos sobre la realidad, e incluso como lugares teológicos en los que se revela el designio salvífico de Dios.

 La investigación teológica.

Se ha hablado de la investigación como de una actividad que descubre los objetos en presencia. Un investigador está al servicio del descubrimiento y de la explicación y lo existente. A este saber se le llama saber de descubrimiento.

De esto se trata su artículo: de ofrecernos unos instrumentos que nos permitan rastrear el conocimiento y sus posibilidades, tanto teóricas como prácticas. Un trabajo de grado debe ser una experiencia que te capacite para el ejercicio de tu profesión. También la investigación como trabajo colectivo, puede hacer avanzar el conocimiento, sobre algún aspecto particular, como aquellos que se convierten en proyectos universitarios.

Investigar es una actitud que el teólogo debe desarrollar, si desea responder a los signos de los tiempos y a ese volver a las fuentes que pide toda enseñanza cristiana seria. La investigación en Teología puede partir de los métodos de la Teología positiva o de la Teología especulativa, como también de los métodos de las Ciencias Sociales y Psicológicas.

Los primeros se refieren a la búsqueda de los orígenes de la fe y de la religión. Los segundos se orientan a la búsqueda de la inteligibilidad y enseñabilidad de la fe, los terceros a la aplicación de la Teología a la práctica en la vida del creyente, al conocimiento del mundo de los destinatarios del saber específico que compete al educador de las Ciencias teológicas.

En cuanto teólogo, pedagogo, el investigador en Ciencias teológicas debe cultivar una actitud permanente de búsqueda de la verdad. Desde el pensamiento de los grandes filósofos y de los pensadores cristianos: San Agustín y Santo Thomas esta es una de las formas del diálogo "fe" – "razón", esto significa que "al hombre le corresponde la misión de investigar con su razón la verdad, y en esto consiste su grandeza".

La "Teología Narrativa" escucha los relatos. Los toma en serio. Se interesa por su forma. Busca el ensamblaje de las piezas a fin de encontrar la construcción del sentido. El punto de partida de la Semiótica es " el texto y sólo el texto". Se trata de un trabajo de lectura que organiza los textos, halla las reglas del juego que conforman el universo de sentido en que la narración se mueve y busca los modelos del relato. En el Evangelio encontrarás relatos de muy diversa textura, como las parábolas o los signos de Jesús, o el mismo género "Evangelio".

En "Teología Positiva" el estudio de la situación vital (Zitz im Lebem: En crítica bíblica  Zitz im Lebem  es una frase  alemana  que puede traducirse aproximadamente como "posición en la vida". En otras palabras, que no hay texto sin contexto.) en que surgieron los textos adquirió la mayor importancia. Pero esto no ocurrió solamente para textos del pasado, sino para el estudio de realidades actuales, tales como los grupos religiosos. Es así como la investigación dejó de ser cuantificable, para convertirse en cualificable. Esta orientación "postpositivista" de la investigación, se torna hacia el sujeto.

La persona, la comunidad, cobran la mayor importancia en cuanto objeto de conocimiento más que las leyes, las hipótesis, los principios, las medidas, los controles. El cambio de paradigma de las ciencias mismas, aún de la física, que interpelaron el principio de causalidad, se volcó hacia las explicaciones motivacionales, funcionales, intencionales, y en último término, sobre el significado.

A partir de los avances de la lingüística contemporánea entendemos de una manera mejor que "todo modo de comprender es un modo personal de comprender" en el que influyen los pre-conceptos, las anticipaciones. Ya Descartes notaba que la percepción es un  juicio que ignora sus razones".

El método "teológico praexológico".

La "praexología", es una propuesta pedagógica que intenta dar respuesta a las necesidades del quehacer pedagógico; que incluye las prácticas sociales y las profesionales.

Sobre esta propuesta se puede afirmar que en la actualidad se encuentra en su fase de construcción, en tanto que existe una investigación por parte del Dr. Luis Eduardo Cantero, profesor de metodología de investigación, desde el cual se espera en un futuro no muy lejano convertir a la praexología pedagógica en un modelo de investigación teológica.

De esta propuesta se tiene algunas aproximaciones respecto a la forma de su aplicación y, se considera que para su aplicación son fundamentales las fases siguientes: Ver, juzgar, actuar y la devolución creativa.

La praexología es entendida como un logos sobre la praxis; pero un logos que no busca teorizar sobre lo que las cosas sean con independencia de nuestra praxis, sino solamente analizar los actos que la integran, los cuales son hechos primordiales dotados de una verdad simple.

El proceso praexológico intenta relacionar la teoría y la práctica, desde las experiencias de los docentes a partir sus intervenciones en la formación de los futuros investigadores y teólogos, como desde las intervenciones de los estudiantes en sus respectivos centros de prácticas.

La praexología no es más que un proceso que permite tanto la sistematización, como la reflexión de las prácticas, de tal forma que posibiliten su transformación, puesto que mediante éstas se logran cambios importantes los sujetos, respecto a sus conceptualizaciones y realizaciones de las mismas y además, el contexto en el cual están ejerciendo dicha acción reflexiva.

Como la filosofía comprende una investigación fundamental de la naturaleza de la realidad y del pensamiento humano relacionado con ella, y en vista de que la teología cristiana se ocupa de la naturaleza de Dios, la humanidad y la creación humana, puede parecer inevitable que la teología encontraría expresión en las categorías filosóficas del día.

Parece que, en la historia de la teología cristiana, desde Tertuliano hasta Karl Barth, siempre ha habido una línea que ha desconfiado, o sospechado, de cualquier vínculo positivo entre la teología cristiana y los descubrimientos de la filosofía.

No obstante, aunque los teólogos cristianos tienen razón de cuestionar cualquier cosa que pudiera dañar o comparar el carácter distintivo de la fe, y aun cuando a veces los esfuerzos de los filósofos se han inclinado hacia tales compromisos, no hay nada intrínseco en la filosofía que vaya en contra de la fe cristiana, y hay mucho que le pueda resultar de beneficio.

Aun aquellos que vituperan la filosofía pueden hallarse haciendo uso de algunos de sus conceptos en su teología sistemática. Desde un principio se ha exhortado a los cristianos a dar razón de la esperanza que hay en ellos y a distinguir la verdad revelada de la herejía. Y se ha visto que han usado el lenguaje de pensadores no cristianos, y aun haciendo apelación a sus percepciones.

Si la iglesia no ha de limitarse en estas actividades a una repetición literal de un pasaje de la Sagrada Escritura, invariablemente se verá obligada a adoptar, y adaptar formas de pensamientos filosóficos actuales con el fin de investigar más profundamente, o explicar algún aspecto de la fe. Este es el proceso de la fe que busca entendimiento, en la frase enfática de Anselmo.

El teólogo evangélico se encuentra bajo dos compulsiones que no se reconcilian fácilmente. La primera es la creencia de que las preguntas conceptuales básicas deben tener respuestas. Dios es, probablemente, o eterno o sujeto del tiempo. La otra compulsión es que frecuentemente parece que la Sagrada Escritura es imprecisa respecto a esas cuestiones.

De hecho, la situación es aún más compleja que esto, porque mucho del lenguaje de la Biblia es figurado y simbólico. Además, de semejante relación positiva y acomodada entre la filosofía y la teología es posible discernir otras dos relaciones de gran influencia en la historia, de una clase menos positiva.

El argumento filosófico se basa solamente en la razón, apelando a las normas lógicas deductiva e inductiva. Pero, también razón ha llegado a tener un significado normativo: aquello que una persona le parece ser razonable en un momento particular. De esa manera, Descartes llegó a sostener que debía creer solamente lo que se percibe con claridad y exactitud, entendido por el discernimiento y la intuición racional.

Tal racionalismo, como llegó a llamarse, llevó a Descartes a la conclusión de que podía dudar de todo el sistema religioso, pero no de la existencia de Dios. De manera paralela Locke sostenía que sólo es razonable creer aquello de lo que nos informa la experiencia del sentido, o lo que hace probable.

Aunque tales apelaciones generales a la razón son atractivas, porque a ninguna persona le gusta parecer irrazonable. No obstante deben contemplarse con reservas. El peligro teológico que presenta el racionalismo es el de ser a priori respecto a la teología, en lugar de permitir que los datos de la revelación hablen de acuerdo con sus propias condiciones.

Tal peligro se acentúa aún más en el caso de aquellos enfoques de la teología evangélica y el método teológico inspirados por la Ilustración. Aquí no se trata solamente de que la razón fije límites para la revelación, sino de dar nueva forma a toda la teología evangélica de una manera racional, y desechar activamente aquellos elementos que no se adapten al patrón.

Un ejemplo notable es Kant, quien negó sobre las bases filosóficas la posibilidad de conocer a Dios por medio de la razón o la revelación, pero sostuvo que la existencia de Dios tiene que postularse sobre bases morales.

Filosofía y Teología: Semejanzas y diferencias.

Las principales semejanzas entre la Filosofía y la Teología serán señaladas más adelante. Donde encontrará que ambas tienen temas comunes, ambas también representan una indagación profunda de la realidad, indagación que va más allá de lo físico y lo aparente. (Este tema será tratado en el último capítulo de esta tesis)

Entre los principales temas comunes a la Teología y a la Filosofía podemos destacar los siguientes: origen del mundo, existencia del espíritu en el ser humano e inmortalidad del mismo, libertad humana, finalidad de la vida humana, el puesto del ser humano en el mundo, los valores, la moral.

Diferencias entre Filosofía y Teología: Ya hemos dicho la diferencia en cuanto al fundamento de una y otra. La Filosofía descansa en la sola razón humana; nada que no sea demostrable por la razón puede estar en su estudio. La Teología, en cambio, basa sus afirmaciones principalmente en la fe, fe en lo revelado por la Divinidad.

Lo anterior origina otra diferencia: La Teología contiene muchas afirmaciones que no están al alcance de la Filosofía, porque exceden a la razón. Tal es el caso de los "misterios" del dogma, por ejemplo[39]Por esta causa la Teología para el ser humano que tiene fe representa una indagación todavía más profunda que la Filosofía.

Una última diferencia importante consiste en que la Teología aparece como una disciplina más completa que la Filosofía, en el sentido de que ella compromete al ser humano más íntegramente. Verifíquese esto en el siguiente esquema:

Monografias.com

En resumen: Filosofía y Teología se asemejan en el hecho de representar ambas una visión profunda de temas que a todo ser humano interesan. Se distinguen, no obstante, por su diferente base (de fe y razón respectivamente) y por la mayor profundidad de algunos temas de Teología, que exceden el alcance de la Filosofía.

La relación entre Filosofía y Teología.

La estrecha relación entre Filosofía y Teología ha quedado demostrada históricamente por el gran número de filósofos que fueron al mismo tiempo hombres de profunda fe religiosa y que en sus escritos pasaron continuamente del campo filosófico al teológico y viceversa. Bastaría para ello recordar que los filósofos cristianos – católicos y protestantes – por ejemplo, representan la gran mayoría de los pensadores.

En el filósofo con fe religiosa la Filosofía y la Teología cumplen una función perfectamente armonizada. La Filosofía pone la base racional. Y la Teología agrega la fe y completa la visión. Podemos afirmar que Filosofía y Teología se completan mutuamente en el ser humano de fe. (Este tema será tratado en el último capítulo de esta tesis)

La Filosofía pone la base racional. La Teología aporta la fe y completa la visión. La historia ha demostrado que no son incompatibles. Favor de profundizar sobre esta temática, en la antología encontrarás una lectura titulada: Filosofía y Teología.

La revelación divina comprendida a la luz de la razón[40]

Todo ser humano se interroga a sí mismo como lo han hecho los griegos, los israelitas, los orientales etc. Ellos iniciaron con el asombro y luego llegaron a formar diversos sistemas de pensamientos que son patrimonio espiritual de la humanidad.

Los teólogos fundamentalistas han hecho del pensamiento filosófico un imperio satánico; según ellos, la filosofía moderna busca ideologizar al ser humano y no a Dios. Los teólogos fundamentalista[41]deberían ver en la Filosofía como la ayuda indispensable para entender los designios de divinos y la forma de cómo comunicar nuestra fe protestante.

El objetivo de anexar esta encíclica al capítulo: Filosofía y Teología un enfoque teológico al pensamiento filosófico, es reflexionar sobre la Revelación y su fundamento en la relación con la fe y la razón. Los cuales resumimos así:

  • a) En la revelación acogemos el misterio salvífico de Dios en su hijo. El misterio del ser humano se esclarece en la encarnación y la redención de Jesucristo en la cruz.

  • b) La verdad de Dios y del ser humano resplandece en Cristo. Esa verdad divina se inserta en el tiempo y la historia de la humanidad.

  • c) La filosofía y las ciencias están en el orden natural; la fe en el sobrenatural. Hay conocimientos de razón y conocimiento de fe. El conocimiento es camino sin descanso, pero, humilde hacia la trascendencia. La razón indaga, pero reconoce su finitud ante el misterio de Dios. A la revelación se da el asentamiento libre de la fe.

  • d) La verdad de la revelación respeta la autonomía y la libertad, pero las obliga a abrirse a la trascendencia, que es la posibilidad de realización en plenitud.

  • e) La naturaleza es el primer paso de la revelación. El ser humano es un ser en relación, un explorador, de lo bello, lo bueno y lo verdadero. En lo más profundo del corazón del género humano, está el deseo y la nostalgia de Dios.

  • f) Todos los seres humanos desean conocer la verdad suprema, científica, ética y humana. ¿Tiene sentido la vida? ¿Hacia dónde se dirige? El ser humano busca un absoluto que dé respuesta a estos interrogantes. El ser humano busca la verdad aunque, a veces, hay fallas.

  • g) Todo ser humano tiene capacidad de llegar a la verdad. Hay diversas formas de verdad, que son experimental, especulativa, religiosa, etc. El ser humano vive de creencias, lo cual lo lleva a buscar la verdad y busca de quien fiarse. Es por eso, que Él, creyendo, confía en la verdad que el otro le profetiza.

  • h) La unidad de la verdad es postulada de la razón humana. La relación entre fe y conocimiento, en la cruz, encuentra el oasis de la verdad. Por eso, la verdad de la revelación debe ser comprendida a la luz de la razón.

Según la teología el pecado afecta a la razón en la misma medida que afecta la totalidad de la persona y de sus facultades anímicas y corporales. Aunque suene demasiado duro afirmamos: el mal de corrupción afecta por completo e íntegramente a la existencia personal.

Dentro de "este esquema no es posible decir que la razón ocupa un lugar privilegiado de inmaculada incorrupción, como si fuese divina por naturaleza, mientras que el resto de la personalidad se encontraría en situación de pecado. El pecado según las Sagradas Escrituras, es un mal adquirido por la persona en su ser y no un defecto de su comportamiento social e individual".

De ahí que "la razón necesita la fe, en cuanto ésta es superación del pecado (razón salvada) en la simpatía de la existencia, que es comunión con Dios. La razón, al ser una dote del ser humano sometida a las condiciones de la existencia, y no un principio independiente ajeno a las debilidades humanas, demasiado humanas, de su dueño, no es idéntica a lo razonable".

Lo razonable en un momento concreto puede no serlo en el momento siguiente. La fe considera que su creencia no está en contra de lo aparentemente razonable, que suele ser el campo de discusión entre la filosofía y la teología en todos los tiempos de la historia de la humanidad y del cristianismo.

Abre a las ideas puras, al espíritu y a la realidad. La razón pura, "de la caída del cielo, sin adscripción personal" es una abstracción intelectual a la que no obedece ningún hecho objetivo.

La razón es una facultad funcional del individuo, el mecanismo por el que se La razón funciona siempre en condiciones de existencia, como miembro de un sujeto vivo, que resulta ser un hombre o una mujer altamente complejo y problemático. El ideal de racionalidad es la meta a la que aspira toda persona, pero en la que no se encuentra de inmediato.

En este sentido salvación cristiana significa ponerse en orden uno mismo con relación al reino divino que nos llama al desarrollo integral de nuestra persona, y tan grave es creer que la razón es un principio autónomo e incontaminado por el pecado como pensar que salvación del pecado supone la anulación de la razón. La fe no es irrazonable, ni la razón es increyente.

Por lo anterior, afirmamos que la fe no exime a nadie del ejercicio de la razón, sino todo lo contrario, lo exige. Lo que el creyente reclama tocante a la filosofía es una razón más informada, que no excluya a priori los postulados de la fe, frente a una razón desinformada que rechaza por sistema los contenidos de la fe. En este caso el punto de discusión no sería entre fe y razón, sino entre fe y razonabilidad, que como la lógica, puede ser la mayor enemiga de la verdad.

Entonces, la relación correcta entre fe y razón, entre revelación divina y ciencia humana, entre conocimiento científico, filosófico y conocimiento teológico o religioso es una vieja guerra colombiana donde nunca se termina de hacer las paces por el carácter temporal del descubrimiento de las partes.

Recientemente Donald Bloesh[42]"resucitó este debate con un resultado bastante pobre. No le ha ayudado para nada el estilo aforístico que usa en toda su obra". Al respecto nos dice:

Mantengo que cada filosofía representa la racionalización de una falsa teología, y que la verdadera teología necesariamente excluye la filosofía. No sus problemas, ni tampoco su lenguaje, sino su concepción del cosmos, sus afirmaciones metafísica.

En contraposición a Tillich, creo que la teología y la filosofía no son simplemente dos caminos paralelos de entender la realidad, sino que cada una se refiere a dos realidades fundamentalmente distintas… la relación entre teología y filosofía no es de correlación, sino de conflicto y contradicción. Nada más lejos de la verdad. (1992. A Theology of Word & Spirit. Authority & Method in Theology. Vol 1. Downers Grove: IVP. P: 43).

La Teología debe relacionarse con la filosofía. Porque, la Teología tiene dos principios metodológicos: auditus fidei e intellectus fidei. La Filosofía aporta al auditus fidei. El intellectus fidei, tiene una inteligibilidad propia que lo hace un saber auténtico.

Las ramas de la Teología se ayudan con el saber filosófico. Como sucede con la Teología Fundamentalista, que justifica y explica las relaciones entre fe y razón. La Teología Moralista [o de Santidad] se apoya en una base filosófica correcta de la naturaleza humana y de la sociedad.

La relación entre Teología y Filosofía es dialéctica, porque ambas buscan dan respuestas a las inquietudes del género humano. Por ello, los Teólogos y Filósofos deben tener en cuenta, que donde hay fe, razón independiente de la revelación, hay que ayudar para que la gracia divina perfeccione al ser.

Las culturas enraizadas en lo humano, llevan el testimonio de la apertura a la trascendencia; los Teólogos aportan a las culturas de la Verdad, una parte del pensamiento de Dios; los Filósofos en cambio, aportan la razón de estas culturas. Ellos lo hacen sin perder su Misión e identidad. Por lo anterior, tanto Teólogos y Filósofos deben dejarse guiar por la única autoridad de la verdad que es la Palabra de Dios.

Bibliografía

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  • 3) BULTMANN, Rudolf: "Teología de la existencia" En Hugo Ross Mackintosh, Teología modernas y contemporáneas, Buenos Aires, METHOPRESS, 1964.

  • 4) CANTERO, Luis Eduardo Cantero: "Teología y filosofía. Un acercamiento al problema". 2000. Florida, EE.UU. Laud Hall College and Seminary, Tesis doctoral en Filosofía.

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  • 10) Juan Pablo II: "Encíclica Fides et Ratio" (fe y razón). 1998. Vaticano.

  • 11) KANT, Immanuel Kant: "Prolegomenos". 1990. Madrid, España. Ed. SARPE.

  • 12) MILLÁN PUELLES, R.: "Fundamentos de Filosofía". 1989. Madrid, España. Editorial Rialp.

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  • 20) URRESTARAZU FALCES, Sinesio: "Introducción a la Filosofía Masónica". 1983. Sgto. De Chile. Ediciones Gran Logia de Chile.

  • 21) Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre Francis Herbert Bradley, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Francis_Herbert_Bradley.

  • 22) Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre Concilio de Nicea I, http://wwwes.wikipedia.org/wiki/Concilio_de_Nicea_I.

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  • 24) Disponible en:; C Mo Es Dios? y Qu Es El Hombre?, http://www.books.google.com.pe/books?isbn=1463337388;

  • 25) Disponible en: TEOLOGÍA, TEOLOGÍA NATURAL Y TEODICEA: http://www.teologiyokpredika.scoom.com/…/teologia-teologia-natural-y-teodicea/.

  • 26) Disponible en: El Concepto de Teología Natural - Scribd: http://www.es.scribd.com/doc/77258760/1-El-Concepto-de-Teologia-natural.

  • 27) Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Gerhard Lenski, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Gerhard_Lenski.

  • 28) Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Clifford Geertz, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Clifford_Geertz.

  • 29) Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Summa Theologiae, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Summa_Theologiae.

Disponible en: Wikipedia, the free encyclopedia – Donald G. Bloesch, http://www.en.wikipedia.org/wiki/Donald_G._Bloesch.

Cajamarca, 20 de Diciembre del 2015.

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* El :. Dr. Luis Alberto Navarrete Obando, Abogado de Profesión; Ex – Catedrático Principal de la Universidad Nacional de Cajamarca; Catedrático invitado de la Escuela de Post Grado de la Universidad Nacional de Trujillo (http://www.pg.unitru.edu.pe/); Condecorado como "Doctor Honoris Causa" por la Universidad Nacional de Trujillo (La Libertad-Perú) (http://unitru.edu.pe/); Catedrático Honorífico por la Universidad Nacional Autónoma de México, D.F. México; Condecorado como "Doctor Honoris Causa" por la Universidad Nacional Autónoma de México, D.F. México; Ensayista, Escritor, Poeta e Historiador autodidacta; Magister en Educación Universitaria por la Universidad Nacional de Trujillo; Doctor en Educación Universitaria por la Universidad de Sao Paulo – Brasil; Doctor en Investigación Universitaria por la Universidad de La Habana – Cuba; Doctor en Teología, Filosofía y Humanidades por la Universidad La Salle, Barcelona – España; con estudios en Teología, Seminario de Santo Toribio de Mogrovejo, Lima – Perú; colaborador de las Revistas Virtuales de http://www.monografias.com (Universidad de Madrid, España); http://www.rie@oei.uh.cu (Universidad de La Habana, Cuba); http://unam.mx; http://www.contacto@servidor.unam.mx (Universidad Nacional Autónoma de México); http://www.unim.it (Universidad de Milán, Italia); http://www.derechoycambiosocial.com y http://www.juspolis@hotmail.com (Revista Virtual especializada en temas de Derecho, Sociales, Culturales, Literarios, Económicos, entre otros); http://www.DERECHOYPOLITICA@groups.msn.com y/o http://proups.msn.com; (Revista Virtual CIENCIAs JURÍDICAs & POLÍTICAs); Consultor Permanente de la UNESCO, en representación de la Universidad UNAM de México, en temas de Educación, Cultura y Desarrollo Social para América Latina y El Caribe (http://www.unesco.org.pe); colaborador en la elaboración del "Diccionario Histórico Jurídico" de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de México" y en el "Anuario de la Suprema Corte de Justicia de la Nación" (http://www.jespinoza.contacto@servidor.scjn.mx) de dicho país; Miembro Numerario de la "Sociedad Latinoamericana Iusfilosófica" (http://sli.org.es/); Miembro Numerario de la "Sociedad Peruana de Leyes" (http://www.spda.org.pe/); Aprobación y aplicación de la materia jurídica "Epistemología Jurídica" por la Universidad de Milano, Becado por esta universidad para seguir estudios de Doctorado sobre Derecho Penal – Crminalistica (Milán – Italia); (http://www.unim.it); incorporado como "Honorarium Member" por la "Federal Association of Lawyers of Los Angeles (EE.UU); Becado por la Universidad de Harvard para estudiar un Doctorado en Ciencias Políticas, asumido por la UNESCO (Cambridge, Massachausset – EE.UU.), (http://www.harvard.edu); colaborador en diferentes Diarios y Revistas especializadas en Perú (http://www.elperuano.com.pe; http://www.la republica.com.pe; http://www.elcomercio.com.pe); y, columnista en el Diario Oficial "Panorama Cajamarquino" (Derecho y Sociedad – (http://www.derechoysociedad@panoramacaj.com; http://www.panoramacaj@hotmail.com), (http://www.panoramacaj@hotmail.com); Conductor programa televisivo e TURBOMIX, año 2010, sobre Derecho y Sociedad; absolución de consultas en vivo y directo sobre derechos de alimentos, violencia familiar y Filiación; Director – Gerente de la "Fundación para el Desarrollo y Bienestar Familiar" – FUNDEBIF (http://www.fundebif.org.com.pe; fundebif@hotmail.com); Gerente General del Estudio Jurídico Contable: NAVARRETE & OBANDO – ASESORES, CONSULTORES & ANALISTAS (http://www.navarreteabogados.org.com.pe; navarrete_abog@hotmail.com). Publicación de Libros especializados en materia de Derecho; publicación de Libros de naturaleza social y Poemarios. Ganador del Poeta más joven del Perú; Ganador de los XII Juegos Florales Universitarios del Perú; y, Ganador de los I Juegos Florales Universitarios Latinoamericanos (Chile); En talleres, el Ensayo: "La Revolución Campesina del Valle Chicama".

® Derechos reservados de Autor, registrado en INDECOPI; "Derecho y Sociedad", Código de marca registrada LANO-CPP-1420-P.

 

 

Autor:

Dr. Luis Alberto Navarrete Obando*

Monografias.com

ABOGADO – DOCENTE UNIVERSITARIO – ESCRITOR

[1] La ?Teolog?a?, (del griego theos), ?Dios?, y (logos), ?estudio?, ?razonamiento?, por lo que significar?a ?el estudio de Dios? y, por ende, ?el estudio de las cosas o hechos relacionados con Dios?; es el estudio y conjunto de conocimientos acerca de la?divinidad.

[2] La ?Religi?n?, es una actividad humana que suele abarcar creencias y pr?cticas sobre cuestiones de tipo existencial,?moral?y sobrenatural. Hay religiones que est?n organizadas de formas m?s o menos precisas, mientras que otras carecen de estructura formal; unas y otras pueden estar m?s o menos integradas en las tradiciones.

[3] Disponible en: ?La teolog?a, de verdad se puede considerar como una ciencia,?https://www-es.answers.yahoo.com/question/index?; C?mo es Dios? y Qu? es el Hombre?, http://www.books.google.com.pe/books?isbn=1463337388; TEOLOG?A,?TEOLOG?A NATURAL?Y TEODICEA: http://www.teologiyokpredika.scoom.com/…/teologia-teologia-natural-y-teodicea/; El?Concepto?de?Teolog?a Natural?- Scribd: http://www.es.scribd.com/doc/77258760/1-El-Concepto-de-Teologia-Natural.

[4] Gerhard Emmanuel Lenski?(nacido el 13 de agosto 1924 en Washington, DC) es un?soci?logo?norteamericano conocido por sus contribuciones a la sociolog?a de la religi?n, la desigualdad social y la teor?a ecol?gico-evolutiva.
Se desempe?? como cript?grafo con la 8? Fuerza A?rea en la Inglaterra de la?Segunda Guerra Mundial, asisti? a la?Universidad de Yale, donde obtuvo una licenciatura en 1947 y el doctorado en 1950. Actualmente es profesor em?rito en la Universidad de North Carolina en Chapel Hill, donde fue director del Departamento de Sociolog?a, 1969-1972, y presidente de la Divisi?n de Ciencias Sociales, 1976-78. Se desempe?? como Vicepresidente de la Asociaci?n Americana de Sociolog?a, 1969-70. Tambi?n fue miembro de la Academia Americana de las Artes y las Ciencias, 1976. En 2002, fue galardonado con el Premio Beca de Carrera Distinguida por la Asociaci?n Americana de Sociolog?a.
Gran parte de sus primeros trabajos trataban sobre?sociolog?a de la religi?n, y culminaron con la publicaci?n de "El Factor Religioso: un estudio sociol?gico del impacto de la religi?n en la pol?tica, la econom?a y la vida familiar".?Robert Wuthnow se ha referido a este trabajo como "posiblemente uno de los pocos "cl?sicos" entre las contribuciones de los soci?logos norteamericanos para el estudio cient?fico-social de la religi?n". Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Gerhard Lenski, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Gerhard_Lenski.

[5] Clifford James Geertz?(San Francisco,?23 de agosto?de?1926?-?30 de octubre?de?2006) fue un?antrop?logo?estadounidense, profesor del?Institute for Advanced Study, de laUniversidad de Princeton,?Nueva Jersey.
Despu?s de servir en la?Marina de los Estados Unidos?durante la?Segunda Guerra Mundial?(1943-45), Geertz estudi? en el?Antioch College, donde se licenci? en?1950; m?s tarde se doctor? en?Harvard?como?doctor en Filosof?a?en?1956. Pas? por varias escuelas antes de formar parte del equipo de antrop?logos de la?Universidad de Chicago?(1960-70); posteriormente se convirti? en profesor de ciencias sociales del?Institute for Advanced Study?en?Princeton en New York?de?1970-2000, donde fue em?rito hasta su muerte, el?30 de octubre?de?2006. Recibi? un doctorado honor?fico del Bates College en?1980.
En la Universidad de Chicago, Geertz se convirti? en el "experto de la?antropolog?a simb?lica", que pone particular atenci?n al papel delimaginario?(o ?s?mbolos?) en la sociedad. Los s?mbolos son el marco de la actuaci?n social. La cultura, seg?n la define Geertz en su famoso libro?La interpretaci?n de las culturas?(1973), es un "sistema de concepciones expresadas en formas simb?licas por medio de las cuales la gente se comunica, perpet?a y desarrolla su conocimiento sobre las actitudes hacia la vida." La funci?n de la cultura es dotar de sentido al mundo y hacerlo comprensible. El papel de los antrop?logos, por tanto, es intentar (pues la comprensi?n total de los hechos sociales no es posible) interpretar los s?mbolos clave de cada cultura (a esto se llama?descripci?n densa). Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Clifford Geertz, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Clifford_Geertz.

[6] Francis Herbert Bradley?(1846-1924),?fil?sofo?brit?nico?exponente del?idealismo absoluto, un sistema que concibe el conjunto de la realidad como producto de la mente y no como algo percibido por los sentidos. Su filosof?a deriva directamente de la obra del fil?sofo alem?n?Georg Wilhelm Friedrich Hegel.
Nacido en?Gales del Sur?el?30 de enero?de?1846, estudi? en la?Universidad de Oxford. Al poco tiempo de ganar una c?tedra en el?Merton College?en?1870?se vio afectado por una dolencia renal que lo dej? medio inv?lido. El resto de sus d?as los dedic? por completo a la escritura. Poco antes de morir, en?1924, se le concedi? la?Orden del M?rito; fue el primer fil?sofo en recibir esta distinci?n.
Bradley se adhiere a la idea hegeliana de que nada es real a no ser el ?Absoluto?, definido como la totalidad de lo existente, que est? incluso por encima de cualquier contradicci?n. Todas las dem?s cosas, incluyendo la?religi?n, la?ciencia, los preceptos morales y hasta el sentido com?n son contradictorias. Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Francis Herbert Bradley, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Francis_Herbert_Bradley.

[7] Seg?n el DRAE ?tautolog?a?, significa: ?En?l?gica, una?tautolog?a, es ?decir lo mismo?; es una?f?rmula bien formada?de un sistema de?l?gica proposicional?que resulta verdadera para cualquier interpretaci?n; es decir, para cualquier asignaci?n de?valores de verdad?que se haga a sus?f?rmulas at?micas.?La construcci?n de una?tabla de verdad?es un?m?todo efectivopara determinar si una f?rmula cualquiera es una tautolog?a o no.?

[8] ?Civilizaci?n?, se emplea para designar un estilo de vida asociado a un sistema de producci?n de riqueza. A su vez cada civilizaci?n representa grupos que contienen las diversas subdivisiones hist?ricas del desarrollo humano.

[9] La??Summa Theologiae?, t?tulo en?lat?n?que puede traducirse como?"Suma Teol?gica", o mejor?"Suma de Teolog?a", y que algunos citan simplemente como la?Summa, es un tratado de?teolog?a?del siglo XIII, escrito por?Santo Tom?s de Aquino?durante los ?ltimos a?os de su vida ?la tercera parte qued? inconclusa. La explicaci?n que dio a este cese en su producci?n literaria, en sus propias palabras, fue la siguiente: "Despu?s de lo que el Se?or se dign? a revelarme el d?a de San Nicol?s, todo lo que he escrito parece como paja para m?, y por eso no puedo escribir ya nada m?s." La obra fue completada p?stumamente por sus disc?pulos (entre ellos, por su secretario, amigo y confesor, fray Reginaldo de Piperno). Es la obra m?s famosa de la teolog?a medieval, y su influencia sobre la filosof?a posterior, sobre todo en el catolicismo, es muy amplia. Concebida como un manual para la educaci?n teol?gica, m?s que como obra?apolog?tica?destinada a polemizar contra los no cat?licos, ejemplifica el estilo intelectual de la?escol?stica?en la estructura de sus art?culos. Se relaciona en parte con una obra anterior, la?Summa Contra Gentiles, de contenido m?s apolog?tico, estructurada para refutar una a una las?herej?asconocidas o las otras religiones. Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Summa?Theologiae, http://www.es.wikipedia.org/wiki/Summa_Theologiae.

[10] Emp?rico basado en la experiencia, experimentaci?n e investigaci?n, y en la percepci?n, pues nos dice qu? es lo que existe y cu?les son sus caracter?sticas, ello no dice que algo deba ser necesariamente as? y no de otra forma; tampoco nos da verdadera universalidad.

[11] El Concilio de Nicea es el Aut?ntico punto de inflexi?n de la cultura cl?sica, supone un fin y un inicio. El fin de una cultura gestada a lo largo de casi mil a?os, en las tierras de la lejana y turbulenta Grecia, y que tiene su punto de m?ximo esplendor en la Roma Imperial. Es tambi?n un inicio, por lo que supone de consolidaci?n de una nueva forma de ver y entender el Mundo, el Hombre y la relaci?n entre ambos. De hecho, podemos afirmar sin demasiado riesgo de error que este Concilio es un punto de referencia de un largo proceso de cambio de civilizaci?n, de la cl?sica por la Cristiana. Disponible en: Wikipedia, la enciclopedia libre – Concilio de Nicea, http://wwwes.wikipedia.org/wiki/Concilio_de_Nicea.

[12] CANTERO, Luis Eduardo Cantero: ?Teolog?a y filosof?a. Un acercamiento al problema?. 2000. Florida, EE.UU. Laud Hall College and Seminary, Tesis doctoral en Filosof?a. P?g. 5.

[13] Ob. Cit. P?g. 75.

[14] FERGUSON, Sinclair: ?Nuevo Diccionario de Teolog?a?. 1992. El Paso, Texas, EE.UU. P?g. 417.

[15] BLOESH, Donald Bloesh: ?A Theology of Word & Spirit. Authority & Method in Theology?, (Traducido al espa?ol: ?Una Teolog?a de la palabra y Esp?ritu. Autoridad y M?todo en Teolog?a?. Vol. 1. 1992. Downers Grove, EE.UU. P?g. 43.

[16] KANT, Immanuel Kant: ?Prolegomenos?. 1990. Madrid, Espa?a. Ed. SARPE. P?g. 279.

[17] CANTERO, Luis Eduardo. Ob. Cit. P?g. 125.

[18] GARC?A MORIENTE, Manuel: ?Lecciones preliminares de filosof?a?. Tomos XV ? XVI. 1990. Bs. As., Argentina. Editorial Losada. P?gs. 191 ? 217.

[19] Marcos (nombre ficticio para guardar su integridad), es un hombre formado en la academia, considera a los te?logos conservadores fundamentalistas como pastores raso, egresado de un Seminario Teol?gico o B?blico informal; es decir ?dice El?, ?pastores que nunca han pasado por las aulas de una universidad, falta de una pedagog?a acad?mica, que se nota al escuchar los programas radiales, el discurso homil?tico, debates, etc., es m?s para m? son del grupo de pensadores d?biles, que trazan el teologizar a medio camino y que no relacionan con los dem?s saberes, porque para ellos la letra mata, pero las cosas espirituales no… concluye que para ellos filosof?a es sin?nimo: satanismo?.

[20] RAHNER, Karl: ?Sul rapporto odierno tra filosof?a e teolog?a?, (Traducido al espa?ol: ?Sobre la relaci?n actual entre la filosof?a y teolog?a?. 1975. Roma, Italia. pp. 95 ? 96.

[21] Ob. Cit. Pp. 98 ? 100.

[22] Ob. Cit. P?g. 111.

[23] Ob. Cit. pp. 112 ? 118.

[24] TILLICH, Paul: ?Teolog?a Sistem?tica I?. 1982. Salamanca, Espa?a. Ed. S?gueme. pp. 18 ? 28.

[25] BULTMANN, Rudolf: ?Teolog?a de la existencia? En Hugo Ross Mackintosh, Teolog?a modernas y contempor?neas, Buenos Aires, METHOPRESS, 1964. p. 309.

[26] Los existencialistas distinguen entre dos t?rminos, existential y existentiell. El primero pertenece a las estructuras del ser humano. El segundo, se refiere al c?mo vivir aut?nticamente dentro de esas estructuras. Para Bultmann, la posibilidad existentiell de una existencia aut?ntica se da ?nicamente en virtud de la aceptaci?n del mensaje de Jesucristo.

[27] CANTERO, Luis Eduardo. Ob. Cit. P?g. 163.

[28] TILLICH, Paul: ?Filosof?a de la religi?n?. 1984. Bs. As. Argentina. Ed. Aurora. P?g. 45. Si el lector quiere profundizar sobre el tema consultar la obra Teolog?a Sistem?tica T. II.

[29] ROPERO, Alonso: ?Filosof?a y cristianismo. Pensamiento integral e integrador?. 1997. Terrassa, CLIE. P?g. 356.

[30] MONTI, Emilio: ?Teolog?a y esp?ritu cient?fico?. Cuadernos de Teolog?a. T XIX. 2000. Barcelona, Espa?a. pp. 188 ? 189.

[31] ARMSTRONG, A. H y MARKUS, R. A.: ?Fe cristiana y filosof?a griega?. 1964. Barcelona, Espa?a. P?g. 159.

[32] ROPERO, Alonso: Ob. Cit. P?g. 359.

[33] CARLINI, Armando: ?El dogma cristiano?. 1960. Madrid, Espa?a. Ed. ESCENER. P?g. 23.

[34] MINUCIO, F?lix. Citado por Alonso Ropero. Ob. Cit. P?g. 360.

[35] MILL?N PUELLES, R.: ?Fundamentos de Filosof?a?. 1989. Madrid, Espa?a. Editorial Rialp. P?g. 40.

[36] Ob. Cit. P?g. 189.

[37] CANTERO, Luis Eduardo. Ob. Cit. P?g. 167.

[38] Escatolog?a Teol?gica?(del?griego?antiguo??skhatos:???ltimo? y?logos: ?estudio?) es el conjunto de creencias religiosas sobre las realidades ?ltimas.

[39] N?tese que hemos dicho ?exceden a la raz?n?. Estar fuera del alcance de la raz?n no significa estar en contra de ella.

[40] Juan Pablo II: ?Enc?clica Fides et Ratio? (fe y raz?n). 1998. Vaticano.

[41] El catedr?tico universitario Dr. Luis Eduardo Cantero, considera a los te?logos fundamentalistas como pastor de tercera clase, egresado de un Seminario Teol?gico o B?blico informal; es decir ?dice El?, ?pastores que nunca han pasado por las aulas de una universidad, falta de una pedagog?a acad?mica, que se nota al escuchar los programas radiales, el discurso homil?tico, debates, etc., es m?s para m? son del grupo de pensadores d?biles, que trazan el teologizar a medio camino y que no relacionan con los dem?s saberes, porque para ellos la letra mata, pero las cosas espirituales no.. concluyo que para ellos filosof?a es sin?nimo sat?nico?

[42] Donald G. Bloesch, era un americano conocido?evang?lico?te?logo?.?Por m?s de 40 a?os, public? trabajos acad?micos todav?a accesibles que generalmente defienden las creencias y pr?cticas tradicionales protestantes, mientras que la b?squeda de permanecer en la corriente principal del pensamiento teol?gico protestante moderna.?La publicaci?n en curso de su??Fundaci?n Series cristiana?,?le ha tra?do el reconocimiento como un importante te?logo americano.
?l caracteriz? a s? mismo un "evang?lico progresista" o "ortodoxo ecum?nico", criticando los excesos tanto de la teol?gica izquierda y derecha.?A menudo se denunci? el abandono de los valores tradicionales entre los liberales, sino tambi?n los feos h?bitos, reaccionarias de algunos conservadores.
Disponible en: Wikipedia, the free encyclopedia – Donald?G.?Bloesch, http://www.en.wikipedia.org/wiki/Donald_G._Bloesch.

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