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El Mercado de Capitales como alternativa de financiamiento para la Pyme en Venezuela (página 2)




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Partes: 1, 2

 

Según Gitman (1997):

El mercado de
capitales es la interacción entre la oferta y la
demanda de
títulos valores
realizadas por determinadas personas ya sean naturales o
jurídica, y la cual constituye un medio básico
para la transferencia de recursos
financieros, a largo y mediano plazo, de manos de ahorristas
hacia entes que conforman las actividades productivas, tanto
del sector
público como del sector privado.(p. 143).

Clasificación: El mercado de
capitales forma parte del mercado
financiero, el cual se divide en:

  • Mercado Monetario (corto plazo)
  • Mercado de Capitales (mediano y largo
    plazo)

El papel central
que juega el mercado de capitales es facilitar y abaratar el
financiamiento; así como mejorar la
eficiencia en
la distribución de los recursos
productivos.

En el mercado de
capitales se transan títulos valores. Estos
se clasifican en: Títulos de renta fija (bonos, papeles
comerciales y obligaciones)
y títulos de renta variable (acciones).

Según Weston (1997), estos
títulos de acuerdo a su negociación se subdividen en "Mercado
Primario o de Emisión: Transacciones iniciales de valores
recién emitidos, es decir, cuando los títulos son
colocados entre los inversionistas por primera vez, y Mercado
Secundario: Intercambio de valores ya emitidos y en
circulación". (p. 561).

La importancia de un mercado de capitales desarrollado
reside no sólo en su incidencia sobre el nivel de ahorro
agregado, sino en la racionalización y el abaratamiento
del proceso de
inversión al canalizar recursos hacia
agentes económicos que promueven iniciativas rentables y
que, en otras condiciones, no tendrían acceso al financiamiento
requerido para movilizar los recursos en la dirección deseada.

Por otra parte, el desarrollo del
mercado de capitales en valores de renta fija y sobre todo de
renta variable incide, en principio, en una mayor rentabilidad
de la inversión como consecuencia de un mayor
control por parte
del público.

Por la naturaleza de las
operaciones
del mercado de capitales son las empresas de mayor
tamaño relativo las que más disfrutan de sus
beneficios de manera directa, tanto en lo que se refiere a la
disponibilidad como al costo de los
fondos financieros, sin embargo, en la medida en que la
inversión mejora su rendimiento y esto afecta
positivamente el crecimiento
económico global, los beneficios se extienden a toda
economía.

Además, al disminuir la presión
sobre los mercados
crediticios bancarios mejoran las disponibilidades para la
pequeña y mediana empresa.
Adicionalmente, el desarrollo del
mercado de capitales mejora el rendimiento del ahorro al
permitir diversificar la cartera y, por tanto, atenuar los
niveles de riesgo.

En opinión de los autores de la investigación, generalmente se sostiene que
los mercados de
capitales son unos de los factores básicos del crecimiento
económico. En cada país las instituciones
correspondientes desempeñan el papel de
intermediador entre ahorradores e inversionistas y movilizan una
proporción importante del ahorro interno.

El papel central que juega el mercado de capitales es
facilitar y abaratar el financiamiento; así como mejorar
la eficiencia en la
distribución de los recursos productivos.
Habida cuenta que la mayor parte de la inversión es
financiada por entes nacionales, se puede sostener que el
crecimiento económico de los distintos países
depende en gran medida de la capacidad y eficiencia de los
respectivos mercados de capitales. La importancia de un mercado
de capitales desarrollado reside no sólo en su incidencia
sobre el nivel de ahorro agregado, sino en la
racionalización y el abaratamiento del proceso de
inversión al canalizar recursos hacia agentes
económicos que promueven iniciativas rentables y que, en
otras condiciones, no tendrían acceso al financiamiento
requerido para movilizar los recursos en la dirección deseada.

2.3.1 Régimen legal del Mercado de Capitales
Venezolano

El Régimen legal del Mercado de Capitales
Venezolano es el siguiente: Las disposiciones legales más
importantes que regulan la actividad del mercado de capitales
están contenidas en la Ley de Mercado de
Capitales, Decreto No. 36.565 (Extraordinario) del 22 Octubre de
1998 y sus correspondientes Reglamentos Parciales, así
como en las Normas dictadas
por la Comisión Nacional de Valores.

La Ley de Mercado de
Capitales tiene como objetivo
regular la emisión y colocación de títulos
valores en el mercado primario efectuado mediante el mecanismo de
la oferta
pública; controlar, vigilar y fiscalizar los sujetos que
intervienen directa o indirectamente en la oferta pública
de títulos valores, incluyendo dentro de tal concepto a los
corredores públicos de títulos valores, asesores de
inversión, emisores, las bolsas de valores y todas
aquellas sociedades que
hayan adoptado alguna de las figuras corporativas previstas en la
Ley de Mercado de Capitales como por ejemplo, los fondos mutuales
de inversión, las sociedades
anónimas de capital
autorizado (S.A.C.A.) y las sociedades
anónimas inscritas de capital
abierto (S.A.I.C.A.).

Una de las características fundamentales de la Ley de
Mercado de Capitales es la amplia facultad normativa conferida a
la Comisión Nacional de Valores, lo cual en el fondo, ha
representado una ventaja para el mercado, pues "ha permitido ir
progresivamente actualizando sus regulaciones sin tener que
acudir al Congreso donde cualquier reforma requiere de mucho
tiempo para
llevarse a cabo". (García, 1999, p. 81).

El organismo de control del
Mercado de Capitales es la Comisión Nacional de Valores el
cual consiste en "un organismo adscrito al antiguo Ministerio de
Hacienda, hoy Ministerio de Finanzas,
creado con el objeto de regular, vigilar y fiscalizar el mercado
de capitales". ( Baptista, 1995, p. 181).

La Comisión Nacional de Valores no posee personalidad
jurídica, autonomía presupuestaria, ni patrimonio
propio. Posee una capacidad de autodeterminación bastante
amplia ya que tiene facultades normativas, autorizatorias y
sancionatorias.

Según la Ley de Mercado de Capitales (1998) La
Comisión Nacional de Valores está compuesta por un
Presidente, cuatro (4) Directores con sus respectivos suplentes y
un (1) Secretario Ejecutivo quienes integran el Directorio, y las
diferentes Direcciones Técnicas,
entre las cuales conviene destacar: El Registro Nacional
de Valores, al cual está asignada la función de
llevar un asiento de todos los documentos y
actos que según la Ley de Mercado de Capitales
estén sujetos a inscripción, tales como:

Los actos relativos a emisiones de títulos
valores.

Los actos relativos a la constitución y funcionamiento de ciertas
sociedades

Los corredores públicos de títulos valores
y los contadores públicos en el ejercicio de la
profesión.

Los asesores para la adquisición de
títulos valores.

Las personas naturales y jurídicas que lo
soliciten y cumplan con los requisitos establecidos en la
ley.

Los entes sometidos al control de la Comisión
Nacional de Valores son los siguientes:

Las Sociedades
Anónimas Inscritas de Capital Abierto
(S.A.I.C.A.).

Las Sociedades Anónimas de Capital Autorizado
(S.A.C.A.).

Los Fondos Mutuales de Inversión y sus Sociedades
Administradoras.

Los Fondos de Inversión y sus Sociedades
Administradoras.

Los Corredores Públicos de Títulos
Valores, asesores.

Otros intermediarios y Las Casas de Corretaje de
Títulos Valores.

Las Sociedades Calificadoras de Riesgo.

Las Bolsas de Valores.

Los Agentes de Traspasos.

Las personas naturales o jurídicas que
intervengan en la oferta pública de títulos
valores, en los términos de la Ley de Mercado de
Capitales.

En tal sentido, el mercado de capitales en Venezuela
representa una extraordinaria alternativa para la
canalización del ahorro, tanto interno como externo, para
el financiamiento de la actividad económica, a costos menores
que en el sistema
financiero, de manera más flexible y a más
largo plazo.

 

Sin embargo, en el caso venezolano en opinión de
Francés (1999):

El mercado de capitales, salvo períodos
aislados, ha jugado un papel secundario ante el sistema
financiero, donde han acudido tradicionalmente las empresas y
el Estado en
la búsqueda del financiamiento requerido para su
operación y expansión, ante los bajos costos y
fácil acceso que caracterizaban sus operaciones
crediticias, situación que se reviene absolutamente a
partir de 1990, con la liberación de las tasas de
interés. (p.79).

En opinión de los autores, se trata de un mercado
eminentemente accionario, cuyo desarrollo se ha vinculado de
manera estrecha con las necesidades de capital de las empresas,
en un marco económico y financiero que obliga a la
reestructuración de sus pasivos, fundamentalmente por el
incremento del costo financiero
a niveles insostenibles para ellas. De esta manera, los
períodos de mayor crecimiento del mercado de capitales
pueden identificarse con situaciones de restricción
crediticias, cuando privan medidas económicas generales
que estimulan la inversión y el ahorro.

Es por ello que Francés (1999) menciona que "en
el período de 1986 a 1990 la inversión en el
mercado de capitales presenta los mayores niveles de rentabilidad
entre las distintas opciones abiertas a un inversionista
venezolano". (p. 39). Situación que se comprende toda vez
que se considera el rendimiento de los productos y
servicios del
sistema bancario
(tasas de interés) y
de las operaciones cambiarías (adquisición de
divisas), aún cuando existe el aprovechamiento de los
procesos de
devaluación del bolívar.

La participación del sector público en el
mercado de capitales ha sido reducida, prefiriendo acudir al
endeudamiento internacional, en primer término y,
posteriormente, al sistema
financiero nacional. No obstante, las intervenciones aisladas
y poco coherentes mantenidas, donde destaca la colocación
directa de los Bonos Cero
Cupón en la Bolsa de Valores
de Caracas en 1990 y su efecto explosivo sobre el crecimiento,
demuestran la importancia que el desarrollo de una estrategia de
promoción y apoyo al mercado de capitales
por parte del Estado
podría representar, así como la capacidad de
absorción existente.

Esta reticencia del Estado a
mantener una participación más activa en el mercado
de capitales, juega un rol vital en la percepción
que del mismo mantiene los cuadros políticos y decisorios,
fundamentalmente por un problema de información y cultura
financiera, lo que ha generado una protección y apoyo
excesivo al sistema financiero en detrimento del mercado de
capitales.

Asimismo, el desarrollo del mercado de capitales
venezolano a partir del período en estudio, ha estado
signado por la incertidumbre y variaciones en las medidas
económicas aplicadas, y más importante aún,
"la inestabilidad política,
económica y social que caracterizó al
período gubernamental concluido en 1993, lo que demuestra
la sensibilidad del mercado a factores exógenos".
(Francés, 1999, p. 42).

La inestabilidad e inseguridad
conduce a los inversionistas a seleccionar opciones aparentemente
más seguras, tales como: instrumentos ofrecidos por las
instituciones
financieras con rendimientos elevados o a la adquisición
de divisas como mecanismo de protección ante eventuales
devaluaciones.

En resumen, se puede afirmar que los elementos que han
condicionado el desarrollo del mercado de capitales venezolano
cubren una amplia gama que va desde circunstancias
económicas y políticas
hasta las características mismas del sector
productivo nacional y, por ende, de las empresas
emisoras.

2.4 El Mercado de Capitales dirigido a la
Pequeña y Mediana Empresa en
Estados Unidos
y México.

En los actuales momentos el mercado de capitales
dirigido a la pequeña y mediana empresa en México y
Estados Unidos
debe ser analizado para considerar, por lo menos, una nueva
categoría de casa de bolsa y de banca de
inversión en Venezuela. En
la actualidad, no existe una clase de firma de valores
autorizada, Rojas (1999) refiere que "esta puede ser
independiente o formar parte de un grupo
financiero, y puede especializarse en una o varias de las
funciones de
inversión o financiamiento aprobadas". (p.11). Sin
embargo, puesto que se trata de una firma de cobertura nacional
que puede competir en todos los campos de negocios
autorizados para casas de bolsa venezolanas por la Ley de
Valores, debe regirse de acuerdo con normas sobre el
mínimo del capital.

En tal sentido, cada vez es mayor la necesidad de casas
de bolsa y de la banca de
inversión local y regional que concentren sus actividades
financieras y de inversión en una región
geográfica limitada. Se les podría restringir a
operaciones específicas; los requisitos mínimos de
capital estarían acordes con el tipo de negocio, riesgo y
volumen. En la
mayoría de los casos, los accionistas y directivos de las
casas de bolsas locales y regionales serían residentes de
su región y estarían familiarizados con los
negocios de la
localidad, así como con sus administradores y
propietarios.

Los suscriptores corporativos y market-makers (creadores
de mercado) en valores locales podrían interactuar en
acciones de
emisión limitada y escasa bursatilidad. En la
mayoría de los casos, constituirían la totalidad
del mercado; las transacciones se realizarían a
través de computadoras
personales PC's y, cuando fuera aplicable, por teléfono. Las transacciones consumidas se
reportarían por las computadoras y
medios de
comunicación centrales, quedando integrados en la
red nacional
electrónica de estaciones de trabajo dentro
de los 90 segundos siguientes a su ejecución. a
continuación se detallara brevemente como es la actividad
bursátil dirigidas a las PYME en Estrados
Unidos y México.

2.4.1 El Mercado de Capitales dirigido a la
Pequeña y Mediana Empresa en Estados Unidos

El Nasdaq Stock Market es el mercado de capitales
electrónico, basado en terminales de computadora,
más grande de mundo. Fundado apenas en el año de
1971, el Nasdaq hoy representa más de la mitad de todas
las acciones operadas diariamente en los Estados Unidos de
Norteamérica, y es el segundo mercado de
valores a nivel mundial en términos de monto en
dólares operado. Más empresas, norteamericanas y
extranjeras, cotizan sus acciones en el Nasdaq que en todos los
demás mercados de Estados Unidos juntos. Ha sido, y
continúa siendo, el mercado de
valores de mayor crecimiento en los E.U.A.. Durante los
últimos diez (10) años el volumen
accionario operado en el Nasdaq ha crecido trescientos ochenta
(380) por ciento, mientras que el monto operado en dólares
se ha incrementado en setecientos setenta y tres (773) por
ciento. (De La Guardia, 1996).

El Nasdaq Stock Market, Inc. es una subsidiaria propiedad de
la National Association of Securities Dealers, Inc. (NASD).
Establecida bajo la autoridad
decretada por el 1938 Maloney Act enmendando el Securities
Exchange Act of 1934, la NASD es el organismo "de
autorregulación de la industria de
valores y es responsable de la regulación y vigilancia del
mercado Nasdaq, así como de otros mercados de valores over
the counter (fuera de bolsa) y de los instrumentos que en ellos
se cotizan". (De la Guardia, 1996. p. 24). La NASD, que opera
bajo la supervisión de la Securities and Exchange
Commission (SEC), es el organismo de autorregulación
más grande de los Estados Unidos, contando entre sus
socios a virtualmente cada agente y operador de valores que
atiende al gran público inversionista.

El sello distintivo del mercado Nasdaq es su uso
innovador de la más avanzada tecnología
computacional y de telecomunicaciones, que apoya un sistema de
múltiples market-makers. Los mercados Nasdaq se distinguen
de las bolsas de valores y sus pisos de remates por el uso de
market-makers, operadores independientes que compiten
abiertamente entre sí a través de terminales de
computadora y
sistemas de
telecomunicaciones que unen
electrónicamente a las casas de bolsa.

El Nasdaq permite que sus empresas asociadas ejecuten
operaciones para sus clientes o por
cuenta propia dentro de un ambiente de
confirmaciones en tiempo real y
supervisión operativa automatizada. Cuando
ocurre una transacción, el comprador y vendedor ingresan
su reporte operativo al Nasdaq "a través del sistema
Automated Confirmation Transaction (ACT) dentro de los noventa
(90) segundos después de la operación". (De La
Guardia, 1996, p. 42). El Nasdaq a su vez, disemina esta información a los servicios
informativos internacionales. Simultáneamente, la
operación queda realizada y confirmada, y se reporta
electrónicamente a la empresa
compensadora de valores para su procesamiento y
liquidación.

Según De la Guardia (1996) "existen actualmente
541 empresas registradas como market-makers, unidas entre
sí por una red de casi siete mil
doscientos (7.200) terminales interactivas" (p.43). Los
market-makers aportan su propio capital al mercado al mantener
continuamente cotizaciones tanto de compra como de venta de las
emisoras. La competencia entre
muchos operadores estimula el crecimiento y la eficiencia del
mercado mientras que proporciona una base de bursatilidad a
través de su compromiso de recursos.

El Nasdaq proporciona transparencia operativa al
distribuir las posturas más cerradas de compra y de
venta conocidas
como o posturas intermedias, así como los datos sobre la
última operación realizada de todas las emisoras
cotizadas, a las casas de bolsa y otras entidades interesadas a
través de las redes informativas que en
conjunto incluyen 300.224 terminales en más de 50
países. Rhoads (1997) señala: "además de
incrementar competencia y
bursatilidad, el sistema de market-makers aumenta la visibilidad
de las acciones menos bursátiles y ofrece el sistema de
valuación de acciones más eficiente que se conoce".
(p. 37).

Debido a su estructura
sofisticada y descentralizada, el Nasdaq se ha convertido en el
mercado de valores de mayor enfoque internacional en el mundo.
Más empresas extranjeras cotizan sus acciones en el Nasdaq
que en todos los demás mercados de Estados Unidos juntos.
El interés
a nivel mundial en la tecnología de Nasdaq
sigue en aumento. Países como Rusia han adaptado un
sistema
operativo, por medio de terminales, tipo Nasdaq, como base de
un mercado de valores geográficamente disperso.
Además, el NASD ha participado en pláticas para
desarrollar un mercado paneuropeo, tipo Nasdaq, que
cotizaría las acciones de empresas pequeñas y
medianas en proceso de desarrollo.

Sin embargo, la bolsa de valores
más grande del mundo es la New York Stock Exchange, la
cual fue fundada el 17 de mayo de 1792 cuando veinticuatro de los
comerciantes y hombres de negocios más fuertes y
destacados de la ciudad de Nueva York acordaron intercambiar
acciones de sus empresas únicamente entre ellos mismos y
adherirse a tarifas uniformes. El concepto de un
piso de remates surgió de la necesidad de acercar al
vendedor con el comprador en una época en la que no
existían las telecomunicaciones. Todo esto era compatible
con la tecnología que existía en ese momento. A
partir de la fundación de la NYSE, han surgido otras
bolsas de valores, en Estados Unidos y el resto del mundo. Todas
ellas han tenido un común denominador, un piso de
remates.

Sin embargo, no cualquier acción debe, o puede
ser cotizada en una bolsa de valores. Inclusive desde los
primeros años, se requería que las empresas
cumplieran con ciertos requisitos antes de poder cotizar
sus acciones en el New York Stock Exchange, el American Stock
Exchange, o cualquier otra bolsa de valores que se haya
constituido.

 

Para lograr cotizar sus acciones, una empresa
requería de cierto monto de activos y
utilidades, y un número mínimo de accionistas.
Conforme pasaba el tiempo, las restricciones se hacían
más estrictas.

Las empresas que no cumplían con los lineamientos
de las bolsas de valores, o que simplemente no querían
cotizarse en una bolsa tenían la opción de lograr
la negociación de sus acciones
físicamente over-the-counter, en las oficinas de los
banqueros de inversión que surgieron para satisfacer la
demanda de
capital de las empresas en crecimiento. Actualmente, las
transacciones con este tipo de acciones se llevan a cabo
típicamente, por medio de un sistema electrónico
sofisticado que enlaza a compradores y vendedores. Por lo menos
es lo que sucede con las acciones cotizadas en el mercado Nasdaq.
A pesar de ello, el término over the counter sigue siendo
aplicado a los sistemas basados
en computadoras, en vez de asignarse a cualquier operación
de compra/venta de valores no realizada en una bolsa de valores
registrada.

Una bolsa de valores tradicional utiliza el sistema de
especialistas, que otorga a un especialista en particular el
derecho exclusivo de crear o hacer un mercado con un valor en
especial. La función
básica del especialista es la de mantener un mercado
ordenado mientras permite que órdenes públicas del
valor en
cuestión se ejecuten entre sí. Esta labor se
realiza en un recinto específico, llamado piso de remates,
donde acuden todas las órdenes para su ejecución en
un ambiente de
tumulto.

Como contraste, el mercado Nasdaq utiliza el sistema de
market-makers enlazados vía un sistema operativo
computacional. Tantos como cincuenta market-makers compiten
abiertamente entre sí en muchas de las emisoras cotizadas
activamente. La remuneración de los market-makers se
deriva del diferencial obtenido entre sus operaciones realizadas
para la clientela.

El Nasdaq fue desarrollado para dar visibilidad a un
tipo de mercado que anteriormente no la tenía. El uso de
las computadoras hizo posible que se diseminaran las posturas de
los market-makers dispersos geográficamente en las
pantallas de Nasdaq. De esta manera, tanto los corredores como
los inversionistas pueden consultar las pantallas y enterarse de
las posturas de market-makers, y ellos mismos pueden ver las
posturas de sus competidores y mejorarlas con el fin de atraer a
la clientela. La habilidad del sistema Nasdaq en interactuar con
otros mercados de valores en el mundo lo ha convertido en el
mercado más eficiente y efectivo del mundo.

Mientras que una bolsa de valores está limitada a
las restricciones de su piso de remates, el Nasdaq literalmente
no tiene fronteras. Principalmente por este motivo, el Nasdaq ha
sido escogido como un modelo
flexible para la mayoría de los mercados de valores
asiáticos y europeos que buscan desarrollar nuevas
opciones o mejorar sus mercados existentes.

Rhoads (1997) define a la figura del market-maker
como:

Cualquier especialista autorizado para
desempeñarse como operador, cualquier operador
desempeñándose como representante de una
posición accionaria, y cualquier operador dispuesto a
comprar o vender acciones de una emisora para su
posición propia, de manera regular o continua, a someter
posturas en sistemas
operativos o de otro tipo. (p. 43).

Un operador que con respecto a un valor en particular:
(a) somete de manera regular posturas competitivas de
buena fe en un sistema operativo o reconocido; o (b)
proporciona posturas competitivas de buena fe al
requerírselo; y está dispuesto y posibilitado para
efectuar transacciones de los valores
sobre los cuales ha sometido sus posturas.

Por lo anterior, las empresas que hacen los mercados en
valores cotizados en la Nasdaq están obligados a responder
por sus posturas y ejecutar las transacciones a los precios
sometidos.

En términos amplios, las empresas market-makers,
(De la Guardia, 1999), se dividen en seis grupos:

1. Empresas excepcionalmente grandes, con cientos de
oficinas y miles de promotores, y generalmente altamente
capitalizadas. Típicamente hacen mercados en 500 y hasta
2.500 emisoras y cuentan con departamentos de operación de
enorme tamaño.

2. Empresas mayoristas formadas por un grupo de
empresas especializadas, ubicadas en la zona metropolitana de la
ciudad de Nueva York, que realizan la mayoría de sus
operaciones con otras instituciones. Operan de 1.000 a 5.000
emisoras, y algunas se concentran en emisoras más
Pequeñas e inactivas, otras en emisiones nuevas, y otras
en emisiones de alta bursatilidad.

3. Empresas regionales que generalmente limitan sus
actividades a una región geográfica, realizando
promoción de menudeo, análisis y banca de inversión.
Operan entre 100 y 400 emisoras, generalmente de empresas
locales.

4. Empresas de banca de inversión, la
mayoría de las cuales se ubican en la ciudad de Nueva York
y se dedican a la operación con emisoras grandes en cuyas
colocaciones han participado y que se consideran las blue chips
del Nasdaq. Generalmente operan con clientes
institucionales.

5. La categoría más pequeña la
conforman empresas locales. Sus departamentos de operaciones
pueden tener apenas uno o dos operadores que se especializan en
10 a 50 emisoras.

6. Otras empresas como pueden ser las conocidas como
boutiques o que operan únicamente con un tipo particular
de clientela, o las que no caen dentro de las categorías
mencionadas.

En tal sentido, una empresa
regional puede ser tan efectiva como una empresa de mucho mayor
tamaño, aunque tenga menos capital global, si destina los
recursos disponibles a una cantidad pequeña de valores
locales. Este tipo de empresa no siempre podrá competir en
la operación de un número elevado de emisoras ni
podrá comprometerse a paquetes muy grandes de acciones,
pero sí podrá ser muy efectiva en la
distribución de una acción que conoce
bien.

Se puede observar, que las aplicaciones de las nuevas
tecnologías han revolucionado a todos los sectores de
la economía
mundial. Uno de los sectores más beneficiados ha sido el
de los servicios financieros, que se ha convertido, casi de un
día para otro, en una red electrónica mundial de terminales
interconectadas de pantallas múltiples. Todos los mercados
que componen la industria de
servicios financieros dependen en menor o mayor medida, de las
tecnologías computacionales y, de telecomunicaciones para
conjuntar a los clientes y a los participantes de los mercados.
El mercado Nasdaq debe tanto su existencia misma como su liderazgo a
esta misma tecnología.

El éxito
del Nasdaq lo ha convertido en el modelo de
varios mercados extranjeros que han aplicado sus conceptos al
estructurar mercados internos a las necesidades y capacidades
propias de esos países. El sistema Nasdaq es flexible y
proporciona a sus usuarios un mercado de valores con servicios
completos que utilizan tecnologías de informática para enlazarlos con otros
usuarios en todo el mundo. Los participantes pueden establecer y
conectar estos mercados electrónicos a otros de manera
expedita, mejorando así las estructuras de
mercado existentes y adicionando nuevas donde no habían
existido antes.

2.4.2 El Mercado de Capitales dirigido a la
Pequeña y Mediana Empresa en México.

El mercado de capitales para la pequeña y mediana
empresa Mexicana comenzó sus operaciones en julio de 1993.
La razón principal de ser de un mercado accionario es el
facilitar la formación de capitales corporativos a
través de colocaciones públicas de acciones.
Adicionalmente, deberá proveer un mercado secundario
eficiente que permita la cotización e intercambio de los
títulos. La Bolsa Mexicana de Valores (BMV), es el
único mercado accionario de México, ha realizado
una labor admirable en facilitar la creación de capital a
empresas mexicanas a través de colocaciones accionarias,
particularmente a partir de 1991.

Sin embargo, las emisoras han sido principalmente las
empresas y grupos
corporativos más grandes del país; siendo
éstas las beneficiadas de las abundantes fuentes
domésticas de capitales, así como de los altamente
receptivos y líquidos mercados internacionales.

En estricto rigor, los mercados accionarios de
México aún muestran limitaciones en cuanto a su
influencia. A pesar de que constantemente se nos informa sobre el
comportamiento
de acciones mexicanas cotizadas en mercados domésticos e
internacionales, el número de emisoras operadas es
relativamente reducido y representan únicamente a las
empresas más grandes del país.

Los requisitos principales que deben cumplir las
empresas que buscan registrarse en la Bolsa Mexicana de Valores
incluyen lo siguiente: historial operativo mínimo de 3
años, un capital contable de 3 millones de unidades de
inversión (UDI´s), haber registrado una utilidad neta
durante los últimos 3 años, y la colocación
pública inicial que deberá representar por lo menos
(30%) del capital social pagado después de la
colocación entre un mínimo de 200 accionistas.
Dichos requisitos son independientes de la obligación de
cumplir con lo dispuesto en el Artículo 14 de la Ley del
Mercado de Valores y otros artículos relativos a1 registro y oferta
pública de valores; así como el apego a reglamentos
internos de la Bolsa Mexicana de Valores y a otras regulaciones
aplicables.

Una colocación primara de acciones es aquella en
la que la empresa
emisora autoriza, emite y vende acciones de nueva creación
y el producto de la
venta se revierte directamente a la emisora. Se le denomina
secundaria a una colocaci6n accionaria cuando las acciones que se
ofrecen al público inversionista ya están en
circulación con accionistas actuales, los cuales venden
dichas acciones a terceros y el producto de la
venta es recibido por los accionistas vendedores.

El flujo de capitales durante el período en
estudio también se vio influido por el resultado del
programa
gubernamental de privatización, así como por los
fondos recibidos por las empresas cotizadas en Bolsa que
efectuaron ofertas de suscripción de acciones para
incrementar capital, pero que no se consideran ofertas
públicas de acciones.

Para Rhoads (1997):

Es evidente que los mercados mexicanos de capitales
han servido a muy pocas y selectas empresas, contribuyendo
así a la concentración de la riqueza y excluyendo
a una inmensa mayoría de empresas pequeñas,
medianas y grandes en todo el país, con enormes
necesidades de capital. (p. 78).

Para lograr crecer y/o modernizarse, la mayoría
de las empresas, han tenido que depender de utilidades acumuladas
o del crédito, el cual conlleva a las
dificultades ya expuestas.

Por esta razón, se reconoce la necesidad de
incrementar el ahorro interno, tanto el voluntario como el
obligatorio, para complementarse con el ahorro externo e
invertirse en el desarrollo futuro del país. Sin embargo,
el elemento que ha faltado desde la introducción del actual modelo
económico del país es el énfasis en que por
lo menos una parte del ahorro sea canalizado a la
inversión en acciones de forma permanente, así las
empresas no dependerían tan particularmente del crédito
para financiarse.

Esto se puede lograr en parte con el desarrollo de un
sistema de mercado de capitales de mayor alcance y accesibilidad,
al cual acudirían por igual todas las empresas que
cumplieran con los requisitos iniciales, sean pequeñas,
medianas o grandes.

 

2.5 Glosario de
Términos

Acción
Título valor de carácter
negociable que representa un porcentaje de participación
en la propiedad de
la compañía emisora del título. / Parte
alícuota del capital de una sociedad
mercantil.

Accionista
Titular de una o más acciones y por tanto copropietario de
una sociedad
anónima o en comandita por acciones en función de
su aporte a la misma. Dicha titularidad le confiere al accionista
la condición de socio y le atribuye derechos reconocidos por la
Ley y por los Estatutos de la sociedad.

Agente
Término utilizado para definir una firma de corretaje de
títulos valores que actúa en nombre de sus clientes
como intermediario para comprar o vender valores.

Bolsa de Valores de Caracas

Institución de carácter
privado organizada de acuerdo con la Ley venezolana para
facilitar la negociación de títulos valores
autorizados por los organismos competentes y que actúan
bajo la vigilancia de la Comisión Nacional de
Valores.

Cartera de valores

Conjunto de títulos valores en poder de una
persona
natural o jurídica.

Comisión Nacional de Valores

Organismo creado por la Ley de Mercado de Capitales de
fecha 16 de mayo de 1975, dependiente del Ministerio de Finanzas
(antiguo Ministerio de Hacienda) y el Banco Central de
Venezuela que tiene por objetivo la
regulación, fiscalización y control del mercado
público de valores.

Nasdaq

Es un índice accionario que recoge a los
títulos valores, del sector tecnológico, inscritos
en la Bolsa de Valores de Nueva York.

Tiempo Diferido

Transmisión de los datos, a partir
de los 15 minutos de haber sido producidos en Tiempo
Real.

CAPITULO III

MARCO METODOLOGICO

3.1 Tipo y Diseño
de la Investigación

En toda investigación es de fundamental
importancia que los hechos y relaciones que establecen los
resultados o los nuevos conocimientos tengan un grado de
máxima exactitud y confiabilidad por esta razón se
presenta un procedimiento
ordenado que se sigue para establecer lo significativo de los
hechos y fenómenos hacia los cuales está encaminado
el interés de la investigación.

Para lograr esto, es necesario determinar el marco
metodológico, en todo trabajo de investigación, el
cual se define como "la instancia metodológica que alude a
conjunto de reglas, registros y
protocolo con los
cuales una teoría
y un método
calculan las magnitudes de lo real". (Balestrini, 1997, p.
12).

Este constituye la médula del plan, el cual se
refiere a "la descripción de las unidades de análisis o de investigación, las
técnicas de observación y recolección
de datos, los instrumentos, los procedimientos
así como de las técnicas de análisis".
(Balestrini, 1997, p. 12).

"La metodología incluye el tipo o tipos de
investigación, las técnicas y los procedimientos
que serán utilizados para llevar a cabo la
indagación" (Arias, 1999, p. 45). Debido a que el
propósito de este trabajo fue realizar un estudio para
analizar el mercado de capitales como alternativa de
financiamiento para la pequeña y mediana empresa (PYME) en
Venezuela, se puede indicar que éste es de tipo
documental, con apoyo principalmente, en trabajos previos,
información y datos divulgados por medios
impresos, audiovisuales o electrónicos, permitiendo
conocer la situación, sobre la base de las
características del problema.

El análisis realizado se fundamenta en una
investigación documental, debe señalarse que la
estrategia
utilizada para obtener el contenido requerido, se enmarco en la
búsqueda y comprensión de la literatura recopilada, la
cual es considerada como significativa, puesto que aporta una
información valiosa, para comprender y evaluar el
fenómeno o problema tratado.

Para Tamayo y Tamayo (l997), la Investigación
Documental es:

Una variante de la Investigación Científica, cuyo
objetivo fundamental es el análisis de diferentes
fenómenos (de orden histórico,
psicológico, sociológico, etc.) de la realidad a
través de la indagación exhaustiva,
sistemática y rigurosa, utilizando técnicas muy
precisas; de la documentación existente, que directa o
indirectamente, aporte la información atinente al
fenómeno que estudiamos. (p. 48).

De acuerdo a la problemática tratada se tomaron
en consideración los siguientes aspectos:

  • Características de las PYME.
  • El Funcionamiento del Mercado de Capitales
    Venezolano.
  • El Mercado de capitales dirigido a la pequeña
    y mediana empresa en Estados Unidos y
    México.
  • El mercado de capitales como alternativa de
    financiamiento para la pequeña y mediana empresa (PYME)
    en Venezuela.

La Bibliografía considerada es
multitemática y sus fuentes
proceden de:

  • Materiales de autores venezolanos residentes en el
    país y en el exterior
  • Materiales de autores extranjeros sobre la
    temática en estudio.
  • Materiales publicados en el país en
    relación con el tema tratado.

El criterio de selección
para la incorporación del material bibliográfico
clasificado, fue el cumplimiento de los objetivos
General y Específicos. Por otra parte, cabe considerar,
que la investigación documental tiene su importancia en
las ciencias
sociales, puesto que viene dada por su carácter
social, es decir la representación de la
información que permite conocer y trascender lo
significativo del documento, y a su vez tiene por objeto el
estudio de los fenómenos a través del
tiempo.

En opinión de los autores, cuando la fuente
principal de información son documentos y
cuando el interés del investigador es analizarlos como
hechos en si mismos o como documentos que brindan
información sobre otros hechos, se está en
presencia de una investigación que se tipifica como de
Investigación
Documental.

Según Tamayo y Tamayo (1997), un Diseño
Bibliográfico "es cuando se recurre a la
utilización de datos secundarios, es decir, aquellos
obtenidos por otros y nos llegan elaborados y procesados de
acuerdo con los fines de quienes inicialmente lo elaboran y lo
manejan". (p. 70).

En la investigación planteada, cuyos objetivos
están referidos al analizar el mercado de capitales como
alternativa de financiamiento para la pequeña y mediana
empresa (PYME) en Venezuela en la consecución de una
visión conceptual de los elementos que intervienen en
ellas, el diseño que se aplicó fue
bibliográfico.

3.2. Procedimiento.

Para el desarrollo de la investigación trazada, y
de acuerdo al planteamiento del
problema y los objetivos que se persiguen; se estudiaron a
través de una revisión hemero-bibliografica de las
variables en
estudio. El presente trabajo se realizó, utilizando en
primer lugar el apoyo de fuentes bibliográficas y
documentales aplicadas al tema tratado, para de esta forma
cumplir con el objetivo fundamental de este trabajo.

Para el desarrollo de la investigación se
cumplieron tres (3) etapas:

1. La etapa inicial consistió en:

Las técnicas de recolección de
información, que para Arias (1999) "son las distintas
formas o maneras de obtener la información". (p.
53).

Conocer y explorar todo el conjunto de fuentes
útiles como libros,
artículos científicos, revistas, publicaciones y
boletines diversos, ubicadas en bibliotecas,
utilizando los ficheros. Consulta de la literatura: selección
y extracción o recopilación de la
información a través de las técnicas
apropiadas, luego se procesó la información a
través del método
deductivo. Se revisaron trabajos monográficos y de grado
relacionados con la investigación propuesta.

2. La etapa intermedia comprendió:

El ordenamiento del material recabado para incorporar
todo aquel que se considero importante, lo cual se realizó
a través de las técnicas de
estudio las cuales "se refieren a los medios que
hacen manejables a los métodos de
pensamiento".
(Méndez, 1994, p. 18).

3. En la etapa final, se realizó:

La ubicación y selección del material,
luego se inició el proceso de registro de
información, a través de la técnica del
fichaje. Para Tamayo y Tamayo (1997) "las fichas de
Trabajo son aquellos instrumentos que nos permiten ordenar y
clasificar los datos consultados y recogidos, incluyendo
observaciones y criticas.". (p. 212)., la cual permitió
recabar toda la información proveniente de las fuentes
documentales y bibliográficas, que sustentaron el trabajo de
investigación planteado.

CAPITULO IV

EL
MERCADO DE CAPITALES COMO ALTERNATIVA DE FINANCIAMIENTO PARA LA
PEQUEÑA Y MEDIANA EMPRESA (PYME) EN
VENEZUELA.

4.1 Generalidades.

La ausencia de un mercado de valores para empresas de
baja capitalización en Venezuela dificulta también
la formación de nuevas inversiones
productivas. Se podría esperar que se incluyeran inversiones
conjuntas de empresas internacionales bien establecidas que
buscaran inversionistas locales, así como proyectos
corporativos bien analizados y prometedores.

Un mercado de valores para empresas de baja
capitalización podría facilitar la
colocación de ofertas públicas pequeñas. De
acuerdo a Rojas (1999) "esto sería posible pero
dependerá de la estructura y
el volumen potencial del mercado". (p.9). Es por ello que para el
caso Venezolano se hará necesario el desarrollo
tecnológico y un marco legal acorde a las exigencias
internas, que facilite el desenvolvimiento de las pequeñas
y medianas empresas dentro del mercado de capitales.

La operación de los mercados electrónicos
es más económica que la de los mercados
convencionales con piso de remates. El costo de
transacción en un mercado electrónico
debería ser considerablemente más bajo, lo que
haría posible negociar en valores de
compañías registradas más pequeñas.
El costo de transacción en una institución grande y
altamente estructurada, como la Bolsa de Valores de Caracas,
sería prohibitivo para un mercado de empresas de baja
capitalización.

Para Gómez (1998), en Venezuela, un nuevo mercado
de valores para empresas medianas y pequeñas
"deberá ser de propiedad independiente, así como
operado de manera aislada de cualquier otro mercado de valores
organizado". (p. 21). Su junta directiva podría consistir
primordialmente de empresarios de compañías
medianas y pequeñas, representantes de Cámaras
Nacionales de Comercio y
Miembros de la Comunidad
Financiera Venezolana, quienes se especialicen en valores de un
mercado para compañías de baja
capitalización. Gracias a la sencillez de los mercados
electrónicos, la inversión de capital necesaria
para establecer uno nuevo debe ser moderada. También en
este caso, sería necesario hacer un estudio de
factibilidad.

4.2 Aplicación del Mercado de Capitales para
las PYME Venezolanas.

Venezuela requiere desarrollar alternativas viables
dentro de los mercados de capital que proporcionen a cientos de
empresas, medianas y pequeñas, capital para crecer,
así como una salida del círculo vicioso que
presenta la insolvencia continua de créditos a corto plazo. El presente estudio
pretende analizar nuevos enfoques que pudieran llegar a servir de
utilidad en la
creación de un mercado de valores como alternativa de
financiamiento para las PYME venezolanas.

El siguiente paso debería consistir en la
creación de un mercado para compañías mucho
más pequeñas que el existente hoy en día. Un
mercado electrónico para empresas de baja
capitalización podría facilitar la
colocación de ofertas públicas pequeñas. El
incremento en el ahorro interno se traduce naturalmente en mayor
inversión y por ende, en mayor tasa de empleo. El
ahorro extranjero seguirá contribuyendo en forma
importante al desarrollo futuro de Venezuela, pero deberá
complementar y no subsistir al ahorro interno.

Se requiere de un nuevo mecanismo de mercado de
capitales para financiar satisfactoriamente el crecimiento del
sector de las PYME en el país. Gómez (1998) refiere
que "una alternativa apropiada y viable sería la
implantación de un sistema de mercado Over the Counter
tipo NASDAQ" (p. 29). El tipo de mercado de baja
capitalización propuesto para Venezuela sería
minúsculo en comparación con el de Estados Unidos,
pero sus estructuras
operativas y legales serían semejantes.

El mercado NASDAQ en Estados Unidos es el mercado de
valores electrónico más grande del mundo. Mediante
el uso innovador de tecnología de punta computacional y de
telecomunicaciones, el NASDAQ mantiene una red de operadores conocidos
como market-makers que compiten libremente entre sí por
medio de terminales de computadora, en un ambiente operativo sin
piso de remates físico.

Estos market-makers compiten abiertamente para ejecutar
sus órdenes capturando en el sistema, a través de
sus terminales, por lo menos el lote mínimo estipulado de
títulos acciones a los precios a los
que están dispuestos a comprar o vender esas acciones.
Esta es una red internacional de remate totalmente visible y
transparente.

Rhoads (1997) señala que a través de su
compañía subsidiaria de mercados
internacionales:

NASDAQ ha contribuido a la creación y
desarrollo de varios mercados emergentes de valores, incluyendo
los de la Federación Rusa, Ucrania, Australia y la
República Popular de China.
También ha colaborado en los procesos de
modernización de mercados desarrollados mediante
consultorías, entrenamientos y transferencias de
tecnología. (p. 83).

El amplio alcance de los proyectos
internacionales de NASDAQ ha permitido su participación en
programas de
asesoría técnica relacionados con el desarrollo de
sistemas de compensación y liquidación, mercados
por terminales y en la creación de redes de información
compartida; entre otros.

Un mercado tipo NASDAQ, conformado por empresas de baja
capitalización, serviría para unir a los muchos
centros urbanos que existen en Venezuela mediante intermediarios
regionales y nacionales dentro de una red de cobertura nacional
de terminales operativas con lo que se facilitaría el
desarrollo de mercados de capital locales y regionales y no se
requeriría recinto de remates en piso alguno. El mercado
potencial consistiría en las empresas medianas,
pequeñas y hasta grandes.

Muchas empresas altamente endeudadas obtienen utilidades
operativas, pero los costos del servicio de su
deuda son prohibitivos. Dentro de un sistema de mercado tipo
NASDAQ de baja capitalización, los bancos acreedores
podrían promover que las empresas medianas y
pequeñas altamente endeudadas y que califiquen para ello,
sustituyeran deuda por capital realizando ofertas primarias de
acciones. Esto contribuiría a que los bancos lograran
bajar sus índices de cartera vencida, mientras que los
empresarios lograrían capitalizar sus
compañías.

El ahorro obligatorio a través de un sistema
nacional de fondos de pensiones ayudará a incrementar los
niveles de ahorro interno, el cual se canalizará hacia
inversiones productivas.

La reacción de los inversionistas extranjeros
ante un mercado del tipo descrito sería de
beneplácito, dada la posibilidad de tener una gran
cantidad de oportunidades de inversión en acciones
venezolanas de fácil acceso y buena liquidez. La
operación internacional se efectuaría dentro de la
red de terminales donde las órdenes de compra y venta se
consumarían directamente sin necesidad de utilizar uno o
varios intermediarios. Además, los múltiples
market-markers aportarían al mercado una liquidez
continua, incluso tratándose de las emisiones más
pequeñas. Usando tecnología actual, las
órdenes ejecutadas se confirmarían en menos de
noventa (90) segundos y los procesos de compensación,
liquidación y custodia se manejarían también
electrónicamente.

Una gama más amplia de acciones venezolanas
operadas activamente estimularía asimismo la
participación de fondos de inversión nacionales y
extranjeros. Francés (1999) opina al respecto que "los
fondos extranjeros de capital de riesgo estarían
particularmente interesados, ya que tendrían dentro de sus
opciones de inversión las acciones de crecimiento de
medianas y pequeñas empresas que actualmente están
fuera de su universo de
inversión". (p. 84). Se podrían crear
también fondos de inversión regionales o
especializados en una industria o ramo específico, lo cual
contribuiría a incrementar la demanda total del
mercado.

En tal sentido, las condiciones básicas
requeridas para lograr el crecimiento económico de las
PYME venezolanas serian: el nivel del ahorro total,
particularmente el ahorro interno, necesariamente será
incrementarse durante los próximos años. Se
requiere ahorro que pueda ser canalizado a la inversión
productiva. Los mercados de valores pueden realizar una
función importante en este proceso. Se crea riqueza por
medio de los mercados públicos de capitales cuando
los valores de
mercado superan los costos originales. El valor de mercado, es
decir, el precio al que
una acción puede ser vendida, está relacionado con
el ahorro en el sentido de que los recursos monetarios obtenidos
de la venta de acciones se transforman en ahorro.

El ahorro privado, interno y del extranjero, puede
estimularse de varias maneras. Las tasas de inflación
tienen que ser lo suficientemente bajas y sostenibles para
motivar al ahorro y convertirse en inversión productiva.
Se deberán diseñar reformas fiscales que
revitalicen la actividad productiva, la inversión y el
ahorro. En este sentido, se deberán legislar
modificaciones fiscales que motiven a las empresas venezolanas a
reinvertir sus utilidades en vez de distribuirlas en forma de
pago de dividendos. Otra consideración sería el
permitir la depreciación acelerada de nuevos activos fijos
productivos, tales como maquinaria y equipo. Esta medida
contribuiría a fomentar nuevas inversiones de parte de las
pequeñas y medianas empresas en Venezuela.

En este orden de ideas, el mercado de valores se
presenta como una nueva alternativa de financiamiento para las
PYME Venezolanas. Es por esta razón, que las empresas
pequeñas y medianas necesitan capital para no depender del
costosísimo crédito bancario, a veces inaccesible
con la necesidad de opciones para invertir en empresas con
rentabilidad y liquidez.

4.3 El Desarrollo
Económico Venezolano y la Pequeña y Mediana
Empresa

Las prácticas proteccionistas aplicadas desde la
década de los cincuenta como: sustituciones de importaciones,
mercado protegido, tasas de interés controladas, moneda
sobrevaluada, control de precios y ayuda financiera estatal
contribuyeron a crear muchas empresas diseñadas para
atender el mercado nacional. Cuando la crisis de los
ochenta obligó a desmantelar esa política
económica, quedó en evidencia la deficiente
gerencia de
muchas empresas, especialmente las PYME, y las necesidad de
internacionalizarlas para que pudieran penetrar mercados de otros
países que compensarán las pequeñas
dimensiones del mercado nacional con los productos
importados.

Las políticas
públicas dirigidas a la PYME se limitaron durante muchos
años a otorgar financiamiento barato y fijar aranceles
altos que la protegieran de la competencia internacional. Pero,
al mismo tiempo, no se exigió que esas empresas fueran
competitivas ni se brindaron programas de
capacitación empresarial y técnica;
tampoco se establecieron plazos a la protección.
Así, se puso en práctica un apoyo deficiente para
empresas poco eficientes que dio argumentos a los detractores del
intervensionismo estatal para desmantelar cualquier
protección a la PYME. Desde entonces, las políticas
públicas han oscilado entre el paternalismo estatista y el
neoliberalismo
salvaje.

Francés (1999) refiere que "la política
económica de los gobiernos venezolanos entre 1989 y
1999 estuvo marcada por la apertura comercial que se
inició a finales de los años ochenta". (p. 44).
Esta política se tradujo en reducciones
arancelarias y en la formación de zonas de libre comercio,
principalmente con los países signatarios del Acuerdo de
Cartagena: Colombia,
Ecuador,
Perú y Bolivia.
Durante la década de los noventa, que abarca el segundo
gobierno de
Carlos Andrés Pérez (1989-1993) con El Gran Viraje
y la segunda administración de Rafael Caldera
(1994-1999), principalmente a partir de 1996 con la Agenda
Venezuela, la política hacia la pequeña y mediana
empresa (PYME) estuvo reducida a medidas específicas y
coyunturales que intentaron responder a sus principales problemas: las
dificultades para acceder al financiamiento y el encarecimiento
del crédito.

Las cifras de la OCEI, (1999), muestran que:

Entre 1989 y 1995, el número de PYME se redujo
de 9.977 a 8.055. Esta tendencia se revirtió a partir de
1996; pero nuevamente aparecieron signos de decrecimiento en
1998, debido a la contracción de la economía y el
alza de las tasas de
interés. (p. 3).

Las estadísticas de la ONUNDI (1999), el gremio
de las PYME, indican que 2.400 empresas cerraron o redujeron su
capacidad de producción durante 1998, lo cual
implicó la desaparición de 350.000 empleos.
Según los indicadores
del mercado laboral de la
OCEI, había 2.226.083 artesanos, operarios en
fábricas y trabajadores en ocupaciones afines al sector
industrial a finales de 1998, 23 por ciento de la población económicamente activa, de
los cuales se encontraban desocupados 303.143, equivalente a 13,6
por ciento de este grupo. En 1989, de acuerdo con la OCEI, la
PYME empleaba 189.760 personas 39 por ciento del total de
trabajadores de la industria fabril. En 1994, cuando
concluyó el primer año del gobierno del
presidente Caldera, esa cifra se redujo a 172.794, mientras que
el porcentaje con respecto al total de trabajadores del sector
industrial no varió.

Durante la
administración de Carlos Andrés Pérez,
las PYME no participaron en el diseño de la
política de apertura comercial ni se diseñaron
políticas que les permitieran invertir en mejoramiento de
tecnología, modernización de la gerencia y
desarrollo de productos. En el período del presidente
Caldera, las dificultades comenzaron con la crisis del
sistema financiero de 1994, que se inició con la
intervención del Banco Latino y se
extendió a más de una decena de instituciones
bancarias. Por un lado, resultaron afectadas las empresas que
tenían créditos con los bancos intervenidos; por
el otro, se suspendió el financiamiento a las
PYME.

La situación no ha cambiado: las altas tasas de
interés y los trámites o recaudos que exige el
sistema financiero no han permitido restituir el crédito a
las PYME. Además, el sector se vio afectado por la
inexistencia de una política de fianzas o garantías
para las inversiones, sobre todo porque la única
institución destinada a este fin, la Sociedad de
Garantías Recíprocas para la Pequeña y
mediana Industria (SOGAMPI), que desde 1993 enfrenta problemas
financieros, se creó, sin soporte legal ni reglas de
supervisión financiera.

En abril de 1996, cuando se eliminaron los controles de
cambio y de
precios establecidos en junio de 1994, la economía
venezolana volvió a abrirse con la aplicación de la
Agenda Venezuela. En este programa
económico se establecieron los objetivos de diversificar
la economía y fortalecer las PYME mediante cadenas o
vínculos de negocios con la gran industria en áreas
competitivas o grupos líderes de actividad: petróleo,
petroquímica, metal y metalmecánica,
eléctrico y forestal. Además, se crearon fuentes de
financiamiento mediante convenios entre entes oficiales como
el Banco Industrial de Venezuela (BIV), el Fondo de
Crédito Industrial (FONCREI), Corporación de
Desarrollo para la Pequeña y Mediana Industria
(CORPOINDUSTRIA) y la Sociedad Nacional de Garantías
Reciprocas para la Mediana y Pequeña Industria (SOGAMPI),
de manera que los préstamos para mejoramiento y
modernización se ofrecieran con tasas de interés
entre 80 y 90 por ciento menores que las del resto del sistema
financiero.

Esta acción buscaba revertir la tendencia que
hasta 1996 mostraban las PYME: no emprender mejoras productivas
ni ejecutar programas de capacitación. Además, se propiciaron
convenios entre gobernaciones y entes financieros del Estado para
realizar actividades de entrenamiento, y
se intentó que las PYME exportaran y tuvieran mayor
presencia en el mercado interno.

Los representantes de las PYME advirtieron ausencia de
estímulos fiscales y políticas de compras
gubernamentales, situación que contrasta con la de
Brasil,
Colombia o
Trinidad y Tobago. En relación con las compras
gubernamentales, la situación se agravó cuando en
el primer semestre de 1998, el sector
público gobierno central y Petróleos de
Venezuela restringió su adquisición de bienes
nacionales: primero, por la limitación financiera que
impuso la caída de los ingresos
petroleros; segundo, por la decisión de reducir la
liquidez monetaria o dinero
circulante como manera de abatir la inflación.

Rojas (1999) señala que:

Un reclamo adicional de pequeños y grandes
industriales es la dificultad de competir en mercados
foráneos, debido a la política del Banco Central
de Venezuela de reducir la inflación mediante la
sobrevaluación del bolívar, un reclamo más
contundente en momentos de caída en la demanda interna.
(p. 32).

Por último, durante el gobierno de Caldera no se
efectuaron las reformas educativas que mejoraran la
capacitación de los recursos humanos de las PYME y la gran
industria.

Dentro de esta perspectiva, el presidente Hugo
Chávez fue el candidato presidencial que más
referencia hizo en su discurso y en
su oferta electoral a la pequeña y mediana empresa, aunque
otras opciones presidenciales destacaron la necesidad de
fortalecer este sector. En la propuesta de Hugo Chávez
para transformar a Venezuela, las PYME fueron incluidas en un
apartado sobre las medidas relacionadas con la producción de bienes de
consumo
esenciales y con el impulso a la economía. Se enfatiza su
importancia por el volumen de empleo que
genera este sector y su aporte productivo y se ofrecieron
políticas, tanto crediticias como de incentivos.

Una diferencia entre el programa de Hugo Chávez y
el de otros candidatos era la participación de la PYME en
el programa de desconcentración para el desarrollo
sustentable. Las cooperativas y
las PYME son agentes capaces de frenar la concentración de
la población en la zona centro norte costera
del país, porque son los que más reinvierten
localmente, estimulan inmediatamente al mercado, crean circuitos
económicos en sus regiones y generan
democratización del capital.

En tal sentido, las PYME deben incorporarse a las
regiones con programas determinados por tres ejes: Orinoco,
Apure, Occidental entre Maracaibo, San Cristóbal y
Guasdualito y Oriental entre Porlamar, Puerto La Cruz,
Maturín y Ciudad Guayana. Incluso, se otorga importancia a
los estímulos que las PYME puedan recibir del Estado en
particular, en los sectores del acero, aluminio,
química,
petroquímica, petróleo y
gas.

El gobierno de Hugo Chávez comenzó en un
escenario económico de contracción: la
economía arrastra una caída de 1,7 por ciento del
Producto Interno
Bruto (PIB) al cierre
de 1998 y durante el primer trimestre de 1999 muestra una
contracción de 9,8 por ciento del PIB comparado
con los primeros tres meses de 1998. Al mismo tiempo, el sistema
financiero registra altas tasas de interés. Aunque se
ofrecen préstamos a las grandes corporaciones a 20 por
ciento anual, estimación de la inflación anual en
diciembre de 1999, las PYME deben pagar tasas de 40 por ciento o
más y cumplir trámites exigentes para conseguir
financiamiento. Esto determinó que el Ministerio de
Industria y Comercio (MIC)
retomara el proyecto de Ley
para las Sociedades de Garantías Recíprocas en el
marco de la Ley Habilitante, de manera que a estas sociedades se
les otorgara el soporte legal que necesitaban ante el Ministerio
de la Secretaría de la Presidencia, (OCEI,
1999).

La ausencia de base jurídica, sobre todo en lo
relativo a la supervisión, nunca generó confianza
en el sistema financiero. Incluso SOGAMPI fue intervenida y no ha
logrado independizarse de los aportes del Estado, como fue la
intención al crearla en 1991 y recibir un capital semilla
de los ingresos
públicos, lo que obligo a las sociedades de
garantías recíprocas a regirse por los criterios de
supervisión que utiliza la Superintendencia de Bancos para
el sector financiero que permite la creación de este tipo
de instituciones por sectores, regiones o con capitales mixtos.
Además, se acepta que las sociedades otorguen fianzas o
garantías a las compañías que soliciten
créditos o préstamos a entes estatales como
CORPOINDUSTRIA o el BIV.

La intención del MIC es que la obtención
de una garantía recíproca o fianza permita a las
PYME obtener préstamos a tasas de interés menor,
por la disminución o eliminación del riesgo de que
las empresas incurran en mora.

Existen dudas sobre la efectividad de las
garantías para el desarrollo de las PYME. La Oficina de
Asesoría Económica y Financiera del Congreso de la
República (1999) hizo las siguientes
advertencias:

  • Dado que el retorno de la inversión es
    garantizado por el agente fiador, no hay incentivo para que el
    prestamista supervise el desempeño del prestatario.
  • El otorgamiento de garantías podría
    inducir un exceso de inversión en actividades
    productivas que involucran un riesgo mayor.
  • El Ejecutivo tendría que absorber las
    pérdidas de aquellas sociedades de garantías
    recíprocas caso SOGAMPI que se deriven de fracasos de
    proyectos de
    inversión.
  • En una situación de inestabilidad
    económica, el otorgamiento de garantías con
    respaldo de recursos públicos podría empeorar las
    cuentas
    fiscales.

En tal sentido, la propuesta del sistema de
garantías también se recoge en las acciones de
mediano plazo del Programa Económico de Transición
1999-2000, elaborado por CORDIPLAN en 1999. En este programa se
plantea la unificación de los organismos financieros del
Estado, de manera que conformen un fondo único global que
incluya asistencia técnica y financiera especialmente para
las PYME. Al igual que la legislación sobre
garantías recíprocas, la unión de los entes
financieros públicos está incorporada en la
autorización que dio el Congreso al Poder
Ejecutivo con la Ley Habilitante. Asimismo, el referido
programa incorpora postulados de la Agenda Venezuela: prioridad
de determinadas áreas productivas, sustentadas sobre
ventajas comparativas y competitivas, y la necesidad de propiciar
vínculos entre la PYME y la gran industria en las
áreas de hidrocarburos,
aluminio,
forestal, frutas frescas y derivados del mar.

La situación de crisis económica
generalizada por la que ha atravesado el país, ha obligado
a que las instituciones, tanto públicas como privadas, se
transformen y tengan una visión mas articulada en su
conjunto, abriendo espacio para la concertación. Cabe
destacar que desde el año 1999 a la fecha de
realización de este estudio, el gobierno nacional ha
trabajado en la creación de un contexto legal para
promover el desarrollo y financiamiento de la PYME.

Durante el marco de la Ley Habilitante de 1999 fueron
aprobadas diez y ocho (18) leyes que se
relacionan, tienden a regular y dar una estructura
jurídica a la PYME, siendo las siguientes:

  1. Ley Nº 1.547 para la Promoción y
    Desarrollo de la Pequeña y Mediana
    Industria.
  2. Ley Nº 1.250 de Creación, Estimulo,
    Promoción y Desarrollo del Sistema
    Microfinanciero.
  3. Decreto con Rango y Fuerza de
    Ley Nº 1.526, de reforma de la Ley General de Bancos y
    otras Instituciones Financieras.
  4. Decreto con Rango y Fuerza de
    Ley Nº 1.552 de Reforma Parcial de la Ley del Fondo de
    Crédito Industrial (FONCREI).
  5. Decreto con Rango y Fuerza de Ley Nº 1.274 de
    Transformación del Fondo de Inversiones de Venezuela
    en el Banco de Desarrollo
    Económico y Social de Venezuela.
  6. Banco Industrial de Venezuela.
  7. Decreto con Rango y Fuerza de Ley Nº 1.455 de
    Reforma Parcial a la Ley del Banco de Comercio
    Exterior (BANCOEX).
  8. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1.550 de los
    Fondos y las Sociedades de Capital de Riesgo.
  9. Ley de creación del Fondo de
    Garantías para la Pequeña y Mediana
    Empresa.
  10. Sociedad de Garantías para la PYMI
    (SOGAMPI).
  11. Ley de creación del Banco del
    Pueblo.
  12. Ley de creación del Banco de Desarrollo de
    la
    Mujer.
  13. Decreto con Rango y Fuerza de Ley Nº 1.532 de
    creación del Fondo Único Social.
  14. Decreto con Rango y Fuerza de Ley Nº 1.440 de
    reforma parcial de la Ley Especial de Asociaciones Cooperativas.
  15. Decreto con Rango y Fuerza de Ley Nº 1.469 de
    Zonas Especiales de Desarrollo Sustentable
    (ZEDES).
  16. Decreto con Rango y Fuerza de Ley Nº 1.290 de
    Ciencias,
    Tecnología e Innovación.
  17. Decreto con Rango y Fuerza de Ley Nº 1.127 de
    Reforma Parcial de la Ley sobre Adscripción de
    Institutos Autónomos, Empresas del Estado,
    Fundaciones, Asociaciones y Sociedades Civiles del Estado a
    los Órganos de la
    Administración Central.
  18. Ley Marco que Regula el Sistema Financiero
    Público del Estado Venezolano.

Todo lo expuesto debe considerarse bajo la
estructuración que abordó la Fundación para
el Desarrollo de la Pequeña y Mediana Empresa en América
Latina (FUNDES), en función al diseño e
implementación de políticas económicas para
clarificar el rol del estado en el contexto específico de
operación, es decir no sólo la
organización del estado, sino también el origen
y la evolución del sistema normativo y
regulatorio de la vida social y económica, con el fin de
desarrollar el sector de las PYME como apoyo fundamental para el
crecimiento sostenido de la economía
venezolana.

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

Conclusiones

Efectuado el análisis bibliográfico de las
variables en
estudio se concluye que:

Las PYME son unidades de explotación
económica que realizan actividades de producción de
bienes industriales y servicios conexos, con una carga laboral
relativamente baja que oscila entre 11 a 50 empleados promedio
anual, con las cualidades de generar niveles competitivos de
producción que ayudan al crecimiento económico y
social del país, y que a su vez sirven de redes
articuladas para la distribución y comercialización a escala de los
bienes y servicios de las grandes corporaciones.

Hoy día, las PYME juegan un papel importante en
el desarrollo de las economías modernas por diferentes
razones, entre las cuales se encuentran: son fáciles de
establecer, generan empleos, son grandes empresas en potencia y, si
bien se pueden producir bienes tradicionales.

Sin embargo, las necesidades de financiamiento para su
funcionamiento y crecimiento, no han sido abordadas
eficientemente por los entes competentes , aunado a esto, esta el
difícil acceso a los recursos financieros en el mercado de
dinero, por
los distintos requisitos exigidos como solvencia, rentabilidad,
patrimonio y
afianzamiento que le son difícil de cubrir al momento de
solicitar un créditos a corto plazo, donde las tasas de
interés no son preferenciales, provocando su
descapitalización y por consiguiente se declaran en
suspensión de pagos o en quiebra.

Por lo antes expuesto, los autores consideran al mercado
de capitales como una fuente alternativa de financiamiento a
largo plazo para las PYME venezolanas, ya que este les
permitirá generar nuevas perspectivas de crecimiento y
dejar de depender del costosísimo crédito bancario,
que en muchos casos se ha vuelto inaccesible. Es importante
destacar que en este momento las normativas que rigen al Mercado
de Capitales y la Comisión Nacional de Valores dificultan
la participación de las PYME, por lo que su
inclusión en dicho mercado requerirá hacer cambios
en este aspecto, entre los cuales se pueden mencionar el capital
mínimo requerido, niveles de facturación y
rentabilidad.

Generalmente se sostiene que los mercados de capitales
son unos de los factores básicos del crecimiento
económico. En cada país las instituciones
correspondientes desempeñan el papel de intermediados
entre ahorradores e inversionistas y movilizan una
proporción importante del ahorro interno. Habida cuenta
que la mayor parte de la inversión es financiada por
frentes nacionales se puede sostener que el crecimiento
económico de los distintos países depende en gran
medida de la capacidad y eficiencia de los respectivos mercados
de capitales.

Por esta razón, es importante resaltar el
éxito
que ha tenido la aplicación del mercado de capitales en
Estados Unidos y México donde han estructurado sus
mercados internos a las necesidades y requerimientos de los
mismos. El sistema NASDAQ es flexible y proporciona a sus
usuarios un mercado de valores con servicios completos, contando
con una legislación ajustada a las necesidades del mercado
y con una tecnología de punta que les permite enlazarlos
con otros usuarios en todo el mundo. Por otra parte el mercado de
capitales desarrollado en México, ha tenido una labor
admirable al facilitar la creación de capital a empresas
Mexicanas a través de colocaciones accionarias, sin
embargo, no ha sido del todo exitoso, ya que las empresas
beneficiadas en su mayoría pertenecen a los grupos
corporativos más grandes del país.

Con apenas 23 años desde su creación el
NASDAQ ha llegado a convertirse en el mercado de capitales
electrónicos más grande del mundo, llegando a
realizarse más de la mitad de las acciones operadas
diariamente en los Estados Unidos de Norte América. Siendo considerado como el segundo
mercado de valores a nivel mundial en términos de monto en
dólares operados.

Recomendaciones

Efectuadas las conclusiones sé formularon las
siguientes recomendaciones:

El financiamiento de las PYME a través del
Mercado de Capitales, requiere que estas se adecuen a las
exigencias de La Ley de Mercado de Capitales y Reglamentaciones,
Normativas de la Comisión Nacional de Valores, y de la
Bolsa de Valores de Caracas, y otras relacionadas, es de hacer
notar que en este momento éstas dificultan la
participación de las PYME, por lo que para su
inclusión en dicho mercado se requiere hacer cambios en el
capital mínimo exigido, niveles de ventas e
indicadores de
rentabilidad.

Un mercado del tipo de NASDAQ de baja
capitalización sería idóneo para Venezuela
en estos momentos. Los centros urbanos más grandes de la
provincia venezolana se unirían fácilmente por
medio de los intermediarios financieros nacionales y regionales,
a través de una red nacional de estaciones de trabajo
computarizadas. No se requeriría un recinto físico
de piso de remates, substituyéndose por un sistema de
mercado electrónico basado en terminales de computadora.
El mercado potencial consistiría de aquellas empresas
pequeñas, medianas y grandes en todo el país que
calificarían para cotizarse en un mercado venezolano para
empresas de baja capitalización pero no en la Bolsa de
Valores de Caracas o Maracaibo, o que por alguna otra
razón, prefirieran registrarse en un mercado
electrónico over the counter.

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<>

 

 

Autor:

González, Mirla A.

C.I. 6.965.014

Lárez, Arquímedes R.

Medina, Humberto J.

Caracas

Partes: 1, 2
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