Trabajo de Grado para optar al
título de Magister Scientiarum en Psicología
Educacional
- El problema
- Fundamentación
teórica - Marco
metodológico - Resultados de la
investigación - Conclusiones y
recomendaciones - Referencias
bibliográfícas
La presente investigación estudia a catorce (14)
jóvenes, de sexo masculino
y edades comprendidas entre quince (15) y diecisiete (17)
años, todos participantes y/o aprendices del programa de
Formación de Técnicos Medios
Industriales de la Unidad Educativa "Dr. Manuel Acedo Mendoza",
paralelo al Programa de Desarrollo del
Aprendizaje en
la Empresa
(D.A.E.), que se desarrolla en las instalaciones de la C. A.
Vencemos – Planta Mara. La finalidad de este estudio es
determinar el grado de relación existente entre la
motivación al trabajo y el rendimiento, tanto
académico como laboral, de los
citados jóvenes, quienes combinan educación y trabajo
bajo una nueva filosofía educativa concebida y
desarrollada a través de convenios entre el Ministerio de
Educación
(M.E.), el Instituto de Cooperación Educativa (I.N.C.E.) y
la empresa. Para
llevar a cabo el estudio se recurrió al instrumento C.M.T.
de Fernando Toro Álvarez, quien ha desarrollado una
incesante carrera en el área de la investigación industrial, con especial
atención al estudio de la motivación. El instrumento, es un test que consta
de setenta y cinco (75) ítems, que evalúa quince
(15) factores motivacionales agrupados en tres (3)
categorías específicas, y se sustenta en diversas
corrientes psicológicas, y en los propios planteamientos
de su autor, data a recién fecha: 1.990, haciéndo
que éste sea un instrumento actualizado y adaptado al
contexto latinoamericano. El procedimiento
estadístico para el análisis de los datos fue el
Coeficiente de Correlación por Rangos, conocida como "r"
de Spearman. Entre los resultados destaca la significativa
correlación entre poder y
rendimiento académico, y sobre todo la correlación
dada entre el rendimiento laboral y factores como contenido de
trabajo y dedicación a la tarea; el factor supervisión es percibido de manera
negativa, y factores tradicionales en trabajos como este, tales
como afiliación y salario no
representan ningún elemento motivador en esta población específica. Se menciona la
significativa incidencia que tienen los docentes y tutores en
este tipo de programas. Se
sugiere la realización de cursos y
actividades orientadas a desarrollar una motivación
al logro, así como capacitar y orientar al personal que
labora como facilitador y tutor del programa, con la finalidad de
reconsiderar los incentivos del
grupo que
conlleven a una nueva concepción de la
motivación y su incidencia en la formación del
recurso humano a través de esta novedosa concepción
educativa y ocupacional.
Hoy por hoy, las más variadas organizaciones,
públicas y privadas, industriales, comerciales o de
servicios,
invierten cuantiosas sumas de dinero en su
recurso humano, no obstante las deficiencias evidenciadas a
algunos procesos
productivos, e incluso la baja calidad de muchos
productos y
servicios,
pareciese indicar que algo está ocurriendo. Cabe
preguntarse ¿Están fallando las habilidades y
destrezas de los trabajadores? ¿Está fallando el
personal
gerencial y supervisorio en el cumplimiento de sus obligaciones?
¿No contamos con el recurso humano más
idóneo y capacitado? ¿Es un problema de actitud o
aptitud? ¿Persiste la resistencia al
cambio?
Estas interrogantes, muchas de ellas planteadas por
diferentes autores e investigadores en sus diferentes estudios,
conlleva a reflexionar sobre el futuro del recurso humano en
países como el nuestro, bajo las actuales perspectivas de
una incierta economía, de un poco
estable sistema
político y de una incuestionable pobreza social,
moral y
educativa.
En busca de una posible solución, el empresariado
consciente de su compromiso con la sociedad y el
país, con el valioso apoyo del estado a
través de entes como el Ministerio de Educación y
el Instituto Nacional de Cooperación Educativa, ha ideado
planes educativos bajo una nueva concepción
filosófica-educacional, que combina hábilmente el
estudio y el trabajo, y
orienta las acciones y
reformas educativas pertinentes que respondan a las necesidades e
intereses del mercado laboral;
todo ello con la esperanza de ofrecer una posible alternativa a
las dificultades de un recurso humano joven, debidamente
capacitado, de nivel técnico medio que contribuya al
proceso
productivo de la nación,
y a mejorar las condiciones socioeconómicas de familias de
medios o escasos recursos. Con
este claro objetivo nace
el programa "Cada Empresa una
Escuela: Dr.
Manuel García Poblette".
La Corporación VENCEMOS, específicamente
C. A. Vencemos – Planta Mara, desde 1.992 puso en marcha el
programa "Cada Empresa una Escuela",
programa de Formación de Técnicos Medios
Industriales en la mención Producción de Cementos, al mismo tiempo, y a la
misma población, aplicó las estrategias del
programa de Desarrollo del
Aprendizaje en
la Empresa
(D.A.E.) con la finalidad, además de dar cabal
cumplimiento a la Ley Nacional de
Aprendizaje, de formar una generación de relevo altamente
calificada, capacitada y capacitable, joven, y con una nueva
visión de la
organización.
Considerando la importancia, e incluso la trascendencia,
de una educación para el trabajo, en
el trabajo, así como la incidencia que ésta ha de
tener en el proceso
productivo de las empresas donde se
desarrolla este tipo de programas, el
presente estudio se avoca a determinar factores
psicológicos y sociales de los jóvenes que
actualmente se encuentran adiestrándose bajo esta
modalidad educativa; especialmente se ha pretendido conocer
aquellos factores motivacionales, internos o externos, que puedan
incidir en el rendimiento académico y en el desempeño o rendimiento laboral de los
mismos.
En tal sentido, la primera parte de este estudio,
Capítulo I, El Problema, presenta el planteamiento del
mismo, así como su justificación; se señalan
los objetivos a
seguir y las delimitaciones del problema. En el segundo
capítulo, Fundamentación Teórica, se hace un
recuento de los antecedentes bibliográficos de esta
investigación; se presentan las principales bases
teóricas que sustentan este estudio, haciendo importantes
referencias al rendimiento académico, al rendimiento
laboral y al Programa "Cada Empresa una Escuela", así como
también se presentan las definiciones básicas, o
marco conceptual, y las variables
consideradas en este trabajo. La tercera parte, Capítulo
III, Marco Metodológico, se señala el tipo de
investigación, así como la población
estudiada; se presentan los instrumentos utilizados para medir
las diferentes variables, se
explica detalladamente el procedimiento
metodológico y se señala el tipo de análisis estadístico. Se discuten
luego los resultados obtenidos en un cuarto capítulo,
titulado Resultados de la Investigación, presentando una
descripción de los mismos. Finalmente,
culmina este trabajo con un quinto y último
capítulo donde se presentan las conclusiones a las que se
llegó, y se hacen las sugerencias necesarias para mejorar
la calidad de
la
educación en este tipo de programas, respetando los
lineamientos de la investigación.
El presente trabajo es un pequeño pero
significativo aporte a esa nueva y alentadora propuesta educativa
llamada Programa "Cada Empresa una Escuela: Dr. Manuel
García Poblette", que desarrolla estrategias de
estudio y formación formal en el ámbito laboral;
aprender haciendo. En la actualidad esta concepción
educativa y ocupacional ha de ser concebida como un proceso
íntegro, único; en tal sentido, la capacitación del recurso humano debe ser
holística, sustentado en aquel principio de la Escuela
Gestaltista donde "el todo es más que la suma de sus
partes", y que actualmente se conoce como "Sinergia",
tanto del punto de vista de los involucrados, como del
proceso.
"Una rosa pintada de azul es un
motivo,
una simple estrellita de mar es un
motivo,
escribir un poema de amor es
fácil si existe un motivo,
y hasta puedes lograr mundos nuevos con
la fantasía…"
Italo Pizzalonte
CAPÍTULO 1
1. Planteamiento.
Los constantes cambios que se operan en todos los
ámbitos del quehacer humano obedecen a ese dinamismo
propio del hombre y de
una generación dada, dispuesta y capacitada a asumir
retos, enfrentar nuevas situaciones y a no dejarse arrastrar por
la monotonía de una rutina diaria; si a ello se agregan
las transformaciones políticas
y económicas que día a día se llevan a cabo,
el hombre de
hoy se encuentra frente a una nueva visión del mundo,
susceptible a cambios, que exige actualizarse, renovarse,
adaptarse ante tales situaciones.
En Venezuela,
como en otras naciones de la América
Latina, la privatización y la
globalización se presentan, más que como una
alternativa, como una solución viable y confiable a las
diversas y serias dificultades económicas, políticas
y sociales que atraviesa el país; es así como los
términos privatización, globalización o asociación
multinacional son expresiones del argot diario, acepciones
incorporadas al léxico industrial, empresarial y
gubernamental de una nación
que comienza a reconocer sus deficiencias e intenta solventarlas
y superarlas exitosamente.
En el marco de esta tendencia, casi universalizada, de
cambios y transformaciones, el gobierno nacional
-nuevamente- confía en la empresa privada, para que sea
ésta quien lleve a cabo programas de formación y
capacitación, tal como lo establece la
Ley Nacional
de Aprendizaje, y actualizada por el Decreto Presidencial N°
3.230, con fecha del 28 de octubre de 1.993.
El decreto, y por medio de la citada ley, pone en manos
de las empresas la
responsabilidad de enseñar un determinado
oficio a jóvenes menores de dieciocho (18) años y
mayores de catorce (14), en un número equivalente al 3%
del personal en nómina.
De esa manera se intenta estimular la formación,
instrucción y capacitación de una mano de obra
joven y dispuesta al trabajo, y que a su vez cumpla con los
requisitos, exigencias y/o necesidades de las diferentes
empresas.
En tal sentido, personal de la Corporación
Vencemos-Cemex y analistas del Instituto Nacional de
Cooperación Educativa (I.N.C.E.) y del Ministerio de
Educación (M.E.) diseñaron un Perfil Profesional de
un Técnico Polivalente capaz de desempeñarse
adecuadamente en cualquiera de las áreas de trabajo
involucradas en la producción de cemento, con
los conocimientos, las habilidades y el dominio de
competencia
requeridos para un óptimo desempeño laboral y un continuo crecimiento
profesional; y siguiendo dentro del Sistema Educativo
Formal, que le garantiza a los jóvenes, además de
la obtención del título de Técnico Medio (o
su equivalente Bachiller Industrial) y su continuidad en la
empresa, la posibilidad de cursar estudios superiores en
cualquier institución: universidad,
politécnico o tecnológico; pública o
privada.
Para ello fue necesario elaborar un plan de estudio
donde se especifican las diferentes asignaturas y sus respectivas
cargas horarias semanales, lo que significó a su vez,
preparar los diferentes contenidos programáticos, en
función
de las competencias
laborales que califican a un técnico de nivel medio; todo
esto con la intención de llevar a cabo un programa
formativo que cumpla con los requisitos y las exigencias tanto
del I.N.C.E. como del Ministerio de Educación, pues se
pretende homologar el Programa Nacional de Aprendizaje con la
Formación de Bachilleres Industriales o Técnicos
Medios Industriales con la mención requerida y dada por su
centro de formación, es decir, la empresa.
Ese técnico polivalente, no es más que la
concepción de un hombre
íntegro, desarrollando al máximo sus
potencialidades, permitiéndole crecer conjuntamente con la
empresa, la sociedad; un
hombre multihabilidoso, capaz de laborar satisfactoriamente en
cualquiera de las etapas que implica un proceso productivo, y
para ello es necesario satisfacer sus necesidades, lo cual
garantizará la formación de un hombre digno,
inteligente y emprendedor, así como un ente productivo y
altamente competitivo.
Todo este proceso innovador en materia
educativa dio origen a la Unidad Educativa "Dr. Manuel Acedo
Mendoza", inscrita y registrada oficialmente en el Ministerio de
Educación, según Gaceta Oficial N° 4.593
(Extraordinario) de fecha 21 de junio de 1.993, con la firme
intención de desarrollar programas de capacitación y
adiestramiento en sus diferentes plantas, y
así, legalizar el otorgamiento de certificados y
títulos.
Partiendo de esa base legal, la C. A. Vencemos –
Planta Mara puso en marcha en agosto de 1.993 el primer Programa
de Formación de Técnicos Medios en
Producción de Cementos, compatible con el Programa de
Desarrollo del Aprendizaje en la Empresa (D.A.E.) propuesto por
el I.N.C.E., con tal éxito,
que en agosto de 1.996 arrancó la segunda cohorte de estos
programas.
Todos los planteamientos señalados hasta ahora, y
el éxito
obtenido por las empresas que desarrollaron estos programas,
dieron origen, a su vez, al Proyecto "Dr.
Manuel García Poblette: Cada Empresa, Una Escuela", hoy en
ejecución a través del Programa del mismo nombre,
según las Resoluciones N° 1.210, con fecha del 08 de
agosto de 1.996, y N° 1.694, con fecha del 20 de septiembre
de 1.996, emanadas por el Ministerio de Educación, y
publicadas en la Gaceta Oficial N° 36.019 de fecha 12 de
agosto de 1.996.
Ahora bien, el éxito que se obtenga de la puesta
en marcha de estos programas depende de diversos factores, no
obstante, es indudable que el mayor peso lo constituyen los
jóvenes participantes de los mismos, de ello depende en
gran medida, no sólo la continuidad del programa, sino el
demostrar que los mismos y su filosofía son
garantía de éxito, calidad y productividad,
así como evidenciar que esta novedosa propuesta educativa
logra satisfacer las necesidades y exigencias del empresariado,
principal patrocinador y beneficiado en la Formación de
Técnicos Medios Industriales.
Los Programas de Formación de Técnicos
Medios Industriales, y su equivalente, Programas de Desarrollo
del Aprendizaje en la Empresa (D.A.E.), establecen una
relación nueva, distinta y poco común, en
términos tanto laborales como educativos: empresa
(patrón) – estudiantado (participantes), entendiendo a
éstos últimos como entes activamente involucrados
en el proceso productivo de la empresa en la cual llevan a cabo
su formación y capacitación. En tal sentido, el
abastecimiento de un personal calificado, objetivo
fundamental de estos programas, incide notablemente en el
éxito o no de la empresa, de hecho "las
compañías excelentes son lo que son porque su
organización les permite obtener esfuerzos
extraordinarios de seres humanos ordinarios" (Peters, T. 1.982).
Siguiendo esta línea, "esta afirmación apunta al
control de una
variable por sobre todas las demás: la motivación."
(Salas A. Ricardo, 1.996).
Numerosos investigadores se han avocado a estudiar y
profundizar sus conocimientos en los impulsos internos de la
conducta humana,
con la finalidad de establecer las diferentes relaciones
motivacionales presentes en ella. McClelland (1.967), pionero en
el estudio de las motivaciones, y quien sostiene que la
motivación es el resultado de una asociación
afectiva que se manifiesta como conducta
intencionista, determinada por la vinculación previa de
señales, el placer y el dolor, asegura que las
motivaciones sociales son las asociaciones de pensamientos,
matizados afectivamente alrededor de metas sociales relevantes,
lo que repercute directamente en la actuación del
individuo y en las acciones
derivadas de esa
conducta.
McClelland, señala que existen tres (3) variantes, las
cuales denomina: motivación al logro, motivación al
poder y
motivación a la afiliación, en tal sentido, depende
del tipo de motivación que guie la conducta del sujeto y
su fuerza,
indicaría en un momento determinado su rendimiento en una
organización, y que podría ser
medido a través de una evaluación
de desempeño.
Por su lado Whittaker (1.970) afirma que la
motivación es un término utilizado para comprender
los estados que pueden activar o energizar al organismo, en
función
de una o varias metas específicas; ello incide
decisivamente, desde sus relaciones afectivas íntimas
(familiares o de pareja) hasta su desenvolvimiento en la
sociedad.
Diversos estudios llevados a cabo en el país,
permiten inferir la importancia dada a la motivación como
factor incidente en el rendimiento del hombre, ya sea en el campo
académico como en el profesional. Oswaldo Romero
García (1.977), Colombia
Salón de Bustamante (1.981) y más recientemente
Mario Bedoya Orozco (1.992-1.995), quienes han trabajado para el
Laboratorio de
Psicología
de la Universidad de
los Andes (Mérida, Venezuela),
hoy Centro de Investigaciones
Psicológicas, y han desarrollado una serie de investigaciones
orientadas a descubrir la importancia que tiene la
motivación sobre el rendimiento académico del
estudiantado venezolano. En esta línea, algunos
especialistas piensan que el rendimiento académico de los
estudiantes está ligado a las habilidades intelectuales de
los mismos, no obstante, un estudio realizado por Romero
García en 1.980 comprobó que no existen diferencias
significativas entre el cociente intelectual de estudiantes
repitientes y no repitientes, lo que le incentivó a buscar
razones en otros ámbitos, descubriendo a la
motivación como factor interviniente y decisivo en el
citado rendimiento.
Una vez seleccionados los jóvenes e iniciado el
proceso de formación y capacitación, en
oportunidades éstos se muestran preocupados tanto por su
rendimiento académico como por su desempeño
laboral, evidenciando elementos inhibidores en la conducta en sus
actuaciones, tanto en el aula como en las áreas de
trabajo: agotamiento, stress,
desmotivación, falta de confianza y seguridad en
sí mismos, sobre todo en las áreas industriales,
que aunado a las exigencias del profesorado, y a uno de los
requisitos que les exige el programa como tal para mantenerse
dentro del mismo: las asignaturas deberán ser aprobadas
con un mínimo de quince (15) puntos, en caso contrario el
participante deberá ser retirado del programa, son
variables que obviamente inciden en el rendimiento
académico y laboral de los jóvenes.
Lo anterior resulta, en parte, razonable y hasta
comprensible; los participantes del Programa de Formación
de Técnicos Medios, paralelo al Programa de Desarrollo del
Aprendizaje en la Empresa (D.A.E.), cuyas edades oscilan entre 14
y 17 años, culminaron en julio de 1.996, su
educación básica: algunos estudiaban en la
mañana, otros en la tarde, pero ninguno trabajaba, no se
sentían comprometidos a rendir académicamente, ni
mucho menos a cumplir obligaciones
de carácter
laboral: puntualidad, responsabilidad, controles y normas tanto de
la empresa como del programa, en fin, sufrieron un cambio radical
en sus formas de vida, lo que por supuesto puede generar serias
dificultades de adaptación; ciertamente hubo un
subprograma de nivelación e inducción con una duración de ocho
(8) semanas, pero ello no garantiza la adaptación, ni
mucho menos la motivación (que conlleva a la permanencia)
de los jóvenes.
Considerando que los participantes de los Programas de
Técnicos Medios estudian y trabajan, teniendo una
experiencia previa en la formación de estos
técnicos en el área de Producción de
Cementos, y centrando el interés
del presente estudio en la materia prima
de estos programas, es decir, los participantes, queda un
interés
especial en estudiar los principales factores que inciden
directamente en el rendimiento académico y laboral de
dichos jóvenes. Conscientes del variado número de
factores que pueden influir en el rendimiento académico y
laboral de los participantes de los Programas de Formación
de Técnicos Medios en la C. A. Vencemos – Planta
Mara, el presente estudio se limitará a determinar la
posible correlación entre la motivación de los
jóvenes y su rendimiento, tanto académico como
laboral; con ello se logrará, como apunta Fernando Toro
Álvarez (1.990), mejorar el
conocimiento que se tiene sobre los recursos
humanos con que cuenta Venezuela y de las condiciones de vida
laboral que promueven su protección y
desarrollo.
1.1. Formulación.
¿Existe relación entre la
motivación al trabajo y el rendimiento académico y
laboral de los participantes del Programa de Formación de
Técnicos Medios Industriales, Mención:
Producción de Cementos, (Programa D.A.E.), en la C. A.
Vencemos – Planta Mara?
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