Texto argumentativo
A continuación apreciaremos una tesis que
defiende a los consumidores de estupefacientes teniendo en cuenta
artículos que por sí son anticonstitucionales y
vulneran a su vez derechos que poseen las
personas que consumen drogas,
así como también veremos como se viola uno de los
derechos
inherentes al hombre, el
derecho a la igualdad.
Esta defensa se hace más explícita tomando
como base una sentencia que causó mucha controversia
dentro del ámbito jurídico, el cual tuvo como
magistrado ponente al Dr. Carlos Gaviria Díaz, que nos
habla del tema y dentro de dicha sentencia él expresa su
opinión haciendo este tema más
elocuente.
Además podremos desde un punto de vista muy
objetivo
darnos cuenta de cómo sería provechoso para la
economía
del país legalizar las drogas
alucinógenas, aunque sea únicamente la dosis de uso
personal. La
dosis personal es un
tema que ha causado gran polémica en los organismos de
control de
nuestro país, debemos tomar en cuenta que este es un tema
del cual se había tomado conciencia
años atrás el cual se le había atribuido
ciertas normas en la
constitución del año 1986. Ciertas
normas
según el ciudadano ALEXANDRE SOCHANDAMANDOU, son
anticonstitucionales para las personas que consumen
estupefacientes; dicha demanda de
inconstitucionalidad la llevó a ponencia el Magistrado Dr.
Carlos Gaviria Díaz, el cual tomamos como Filósofo,
donde nos habla de este fenómeno de carácter
juridico-político.
A través de esta tesis es
nuestro deseo demostrar que con la legalización de la
dosis personal de estupefacientes muchas cosas cambiarían
no tan solo para la sociedad sino
para nuestro país y en una forma positiva, así como
ya se ha hecho anteriormente con las legalización del
tabaco y los
licores. El objetivo es
interpretar más allá de las normas y de las
costumbres de la sociedad, la
forma en que afectaría dicha legalización dentro de
estos contextos de gran relevancia.
"Articulo 2. Para efectos de la presente ley se adoptaran
las siguientes definiciones:
- Dosis para uso personal: Es la cantidad de
estupefaciente que una persona porta o
consuma para su propio consumo.
Es dosis para uso personal la cantidad de marihuana que
no exceda de 20 gramos; de la marihuana
Hachís que no exceda de 5 gramos; de cocaína o
cualquier sustancia a base de cocaína la que no exceda de
un gramo y de metacualona que no exceda de 2 gramos.
No es dosis para uso personal el estupefaciente que la
persona lleve
consigo cuando tenga como fin su distribución o venta, cualquiera
que sea su cantidad" 2.
Articulo 51.El que lleve consigo, conserve para su
propio uso, consuma cocaína, marihuana, o cualquier otra
droga que
produzca dependencia, en cantidad considerada como dosis de uso
personal, conforme a lo dispuesto en esta ley,
incurrirá en sanciones de esta manera:
- Por primera vez en arresto hasta por 30 días y
multa de medio salario
mínimo mensual. - Por la segunda vez, por arresto de un mes a un
año y multa en cuantía de medio salario
mínimo mensual. - El usuario o consumidor
que, de acuerdo con dictamen médico legal, se encuentre
en estado de
drogación así halla sido sorprendido por primera
vez será internado en establecimiento
psiquiátrico o similar de carácter
oficial o privado por el término necesario para su
recuperación. Este caso no se aplicará multa o
arresto3.
Las normas acusadas violan el articulo 366 de la
constitución, pues, si el estado no
puede garantizar tampoco puede privarle de la droga que le
proporciona alivio. Si el Estado no
puede garantizar la recuperación de la salud de los enfermos
psicológicos de drogación o toxicomanía,
porque no existe clínicamente el tratamiento radical y
científico que asegure su curación, tampoco puede
el Estado impedir
o limitar el uso del medicamento que procura alivio al
sufrimiento del enfermo. Los estupefacientes hacen parte integral
de drogadicción o toxicomanía y a la
vez, son el medicamento que alivia el dolor y el sufrimiento de
los enfermos incurables.
Dichas normas violan también los
artículos, 5,28,29,34 y 49 de la carta política, porque los
drogadictos toxicómanos son enfermos
psicofisiológicos estén o no bajo los efectos de un
estupefaciente; "El ESTADO NO PUEDE SANCIONAR CON pena o medida
de seguridad el
derecho inalienable de las personas a estar
psicofisiológicamente enfermas por cualquier causa,
inclusive drogadicción o toxicomanía"
4.
TESIS
Con base en lo tomado de las anteriores normas
vulneradas y teniendo en cuenta que en nuestro país
siempre se juzgan de manera negativa viendo desde un punto de
vista inquisidor y despectivo a las personas que consumen
estupefacientes, observamos cuan provechoso sería para la
nación
y para la sociedad en general la legalización no tan solo
de la dosis personal sino también de las drogas
alucinógenas en general y de las casas de Hachís,
ya que como se tiene un estereotipo negativo de los consumidores
de drogas con
respecto a su comportamiento
(se dice que tienden a ser violentos, de una manera nociva con
tendencias suicidas y psicóticas.), Las casas de
hachís serían espacios donde podrían ser
controlados para evitar que hagan daño a otras personas o
a sí mismos.
Pensamos que sería bueno que se legalizara la
droga porque existen varios aspectos que favorecerían no
tan solo al sujeto que consume en cuestión sino
también a toda una sociedad; observemos los pros y los
contra que existen alrededor de este tema.
- Con la legalización de la droga se
asestaría un fuerte golpe al narcotráfico y a la subversión ya
que este es un método
de financiamiento de estos grupos al
margen de la ley, considerando el fenómeno ocurrido
anteriormente con el tabaco y el
alcohol
cuando eran ilegales en nuestro país. Teniendo en cuenta
y tomando como base que nuestro país es el primer
productor de cocaína en el mundo, el Estado puede
proveerse de cuantiosas sumas de dinero
mediante impuestos
promulgados a exportación de dicho producto. - Analizando la situación desde un punto de
vista científico y más humano estos
alucinógenos podrían servir para apaciguar el
dolor de las personas con Cáncer, Sida y enfermedades terminales,
además de que se vería factible la investigación y creación de nuevos
sedantes a base de dichos productos. - La creación de casas de hachís
permitiría que las personas que deciden consumir drogas
pudieran hacerlo en un espacio en el cual puedan ser
controlados por su respectivo jíbaro evitando disturbios
a la sociedad y manteniendo así la paz de nuestra
comunidad
con la creación de dichos espacios; espacios similares a
las cantinas, bares, prostibulos y moteles; así como el
magistrado CARLOS GAVIRIA dice: "que si de todas maneras legal
o no la gente consume drogas alucinógenas y
estupefacientes es mejor dejar que lo hagan pero con ciertas
limitaciones y en espacios provistos para ello en donde se
pueda ser controlado". - En la infraestructura militar nos
favoreceríamos al aumentar nuestro pie de fuerza, YA
que al legalizar la droga deja de ser un delito
exportarla, y sin narcotráfico qué perseguir no
serían necesarios los bloques y redes de las fuerzas
armadas en contar del narcotráfico, de este mismo modo
en el que podríamos aumentar nuestro ejercito,
tendríamos autoridad
para estimularlos al igual que algunos bloques de las FARC
estimulan a sus hombres con cocaína durante el combate
para darles valor y
coraje(dato tomado del libro
Crónica "Los niños
de la oscuridad").
- En una ardua tarea de investigación realizado profunda y
concienzudamente el único aspecto negativo que
encontramos fue que los fármacos alucinógenos
tienen efectos secundarios nocivos para la salud así como
también los poseen el licor y el tabaco, y la
única medida a tomar en esta situación
sería que al igual que en los anteriores productos,
mencionar en la publicidad que
se le haga a este vicio los efectos secundarios que produzca,
de ahí en adelante la decisión de utilizar
estupefacientes o no, está únicamente en el
consumidor.
A cerca de este asunto quisiéramos hacer
énfasis en la vulneración que hay por parte de la
ley colombiana al derecho de igualdad.
¿ Por qué si ese es el motivo de la
prohibición no se le combina bajo la pena del consumo del
tabaco, que de acuerdo bajo investigaciones
médicas confiables, y de amplia aceptación, en el
campo científico es causa del cáncer de
pulmón y el cáncer
en general?, Y ¿Por Qué no se le prohibe la
ingestión de sustancias grasas que aumentan el grado de
colesterol y propician las enfermedades coronarias,
acelerando el proceso que
conduce a la muerte?.
Pero no. El sujeto en cuestión sería justificable
por la conducta que,
desea esa perspectiva, resultaría socialmente provechosa.
Luego tampoco parece ser esa la razón justificativa de la
represión.
¿No es acaso un hecho empíricamente
verificable que la ingestión de alcohol, en un
elevado número de personas ocasiona relajamiento de lazos
inhibitorios y la consiguiente exteriorización de actitudes
violentas reprimidas hasta entonces, y es factor eficiente en la
comisión de un sin número de delitos?
¿Por qué, entonces, el tratamiento
abiertamente distinto, irritantemente discriminatorio, para el
alcohólico(quien puede consumir sin medida ni
límite) y para el drogadicto?. Veamos sino, los datos
suministrados por el instituto de medicina legal
y de ciencias
forenses, Regional Nor-oriente-Medellin, a cerca de la incidencia
del alcohol en las conductas delictivas no solo desde el punto de
vista de los sujetos activos sino
también de las víctimas.
Dice dicho informe en su
parte pertinente: "En la cifra bruta de mortalidad por causas
violentas, al menos para la ciudad de Medellín, existe un
factor que parece pudiera considerare como riesgo, y es el
de la ingestión de bebidas alcohólicas; para 1980
el 27% de víctimas de muerte
violenta tenían en su sangre cifras
positivas para el alcohol, para el año 1990 ese porcentaje
se había incrementado al 48,51%" 5.
Y luego a través de 2 anexos, que se incluyen al
final de dicho fallo, que ilustramos gráficamente y
establecemos específicamente, una relación entre
los delitos cometidos
en estado de embriaguez y las conductas delictivas determinadas
por la dependencia de drogas.
Con razón ha dicho Thomas Szasz, critico agudo de
lo que pudiéramos llamar el totalitarismo
psiquiátrico: "En una sociedad de hombres libres, cada uno
debe ser responsable de sus actos y sancionado como tal.
Sí el drogadicto comete un crimen, debe ser castigado por
ese crimen, no por ser drogadicto. Si el cleptómano roba,
si el pirómano incendia, sí el regicida asesina,
todos deben caer bajo el peso de la ley y ser
castigados".
Podemos darnos cuenta de que el tema de las drogas es
muy controversial y requiere del concepto de
personas capacitadas para dar una opinión acertada que nos
lleve a una conclusión definitiva e imparcial que toque
este problema que ha causado tanto revuelo jurídico no
solamente dentro de nuestro ámbito nacional sino
internacional.
Augusto Antonio Argel Orduz
UNIVERSIDAD INDUSTRIAL DE SANTANDER
FACULTAD DE DERECHO. FILOSOFIA
BUCARAMANGA