Monografias.com > Historia
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

El ejército romano




Enviado por casaligui_matias



    1. Composición del
      ejército romano mediante la historia del
      Imperio.
    2. Los estandartes y signos de
      Roma.
    3. Las vestimentas de los
      legionarios y de los oficiales.
    4. Armas y artillería de la
      Monarquía, República, Principado y Dominado
      romano.
    5. Los Castros o Campamentos
      romanos.

    Introducción:

    El ejército romano fue la clave para la
    supremacía de la pequeña ciudad entre el palatino y
    el capitolio. Esta data desde la era monárquica,
    sufrió grandes modificaciones durante la republica, fue el
    más impresionante e imponente durante el alto imperio, por
    último produjo las crisis del
    bajo imperio. Esto nos demuestra que el ejercito romano no
    siempre fue de un modo en particular, eso nos responde
    también a las preguntas de porque en tantos textos, por
    ejemplo, varia en numero de las legiones, o porque varia el
    numero de la
    organización. Esto se debe a una serie de personas,
    como Servio Tulio, Camilo, Cayo Mario, Julio Cesar, Augusto,
    entre otros, que hicieron su gran aporte para forjar lo que fue
    el centro del poderío
    romano.

    Si bien recordamos, es preciso mencionar que roma fue el
    único imperio antiguo que poseía un ejército
    fijo (solo a partir de la republica), además de adiestrado
    en academias (a partir de Mario), con número fijo de
    organizaciones
    y rangos (a partir de Servio Tulio y Camilo). Además desde
    la época de Cayo Mario, roma se convirtió en el
    único pueblo que presidía los costes de su
    ejercito, en la actualidad si tomásemos el valor de las
    monedas romanas, y comparásemos ese coste con el del
    "Euro", nos daría un total de más de
    15.777.245.

    Composición del
    ejército romano mediante la
    historia del
    imperio:

    En un principio, en la heptarquía de la ciudad
    romana, el ejército estaba compuesto solo por los
    ciudadanos patricios. De este modo los patricios estaban
    divididos en 30 curias. Cada curia debía aportar con 100
    hombres, a estos se les denominaba "Milities", ya que eran de
    infantería. Además cada curia debía aportar
    un mínimo de otros 10 hombres para conformar la
    caballería, llamada "Decuria", compuesta por 10 jinetes
    llamados celeres. Los infantes eran comandados por un Tribuno
    Militaris y los jinetes por un Tribuno Celeres. Al mando supremo
    de todo el ejército estaba el rey. El ejército
    monárquico no era permanente, tan solo se reclutaba en
    primavera y se disolvía en otoño, ya que los
    sacerdotes consideraban una falta de respeto combatir
    en aquellos meses de invierno.

    Servio Tulio, segundo rey etrusco, produjo una reforma
    general en todo el ejército romano, reorganizó al
    pueblo, desechando las curias, y reorganizándolo en
    centurias, cada una de 100 personas. El ejército de Servio
    Tulio ahora además aceptaría a los plebeyos en las
    legiones, dependiendo de la renta de cada legionario este
    podía ser de caballería, infantería pesada o
    ligera, o podía ser dejado como albañil, constructor o músico. De
    este modo el ejército de Servio Tulio pasó a estar
    conformado por 4.500 personas. La cantidad de infantes de
    armadura pesada eras de 3.000 aproximadamente, los infantes
    ligeros de 1.200 y los celeres o jinetes continuaron siendo
    300.

    Hacia el siglo IV antes de Cristo, el ejército de
    roma empieza a ser algo más uniforme, la nueva republica
    implanta un servicio de
    indemnización a los campesinos que deben dejarlo todo por
    ir a las líneas del ejército. Este pago era llamado
    "Septendium", con ello la carrera militar empezó a ser
    más respetada y se consideraban los soldados por su
    rendimiento, edad y valor en la lucha. De este modo es cuando un
    patricio llamado Camilo interviene, considera una
    formación antigua propuesta por Servio Tulio, de este modo
    se crea de forma fija el "Manipulum" o Manipulo, organización de 200 hombres, cada
    legión poseía 21 manipulos. De este modo Camilo
    organizo a sus 21 manipulos en cuatro líneas. En la
    primera línea había 6 manipulos, es decir 1.200
    hombres, estos eran los llamados Velties, estos eran los
    ciudadanos más jóvenes y pobres, constituían
    a la infantería ligera. Luego de estos venía la
    segunda línea, conformada por otros 6 manipulos, estos
    eran llamados los Hastatos, eran los hombres jóvenes y
    maduros, pero en cierta manera de lo que hoy sería
    clase media,
    de este modo estos 1.200 hombres constituían la
    infantería pesada. Luego de estos venía la tercera
    fila, los llamados príncipes, los ricos y jóvenes,
    eran también de infantería pesada. Por
    último estaban los Triatos, los más viejos y
    veteranos, pero nunca inferior a los 50 años en esta
    época, eran algunos soldados de infantería pesada,
    otros de ligera, solo actuaban si se ponía muy dura la
    lucha, eran 3 manipulos, es decir 600 hombres. A esta
    época el ejercito romano estaba compuesto por 4.500
    hombres en total.

    Las reformas del ejército no empezaron hasta luego
    de la constitución de los tribunos militares en
    el 444. En este instante el comandante en jefe del
    ejército de roma dejo de ser el Rex –rey-, en lugar
    de este los nuevos generalísimos fueron los dos
    cónsules, quienes tenían a su cargo cada uno dos
    legiones, las cuales seguían siendo cada una de 4.500
    hombres. Hacia el año 300 roma constaba con más de
    18.000 hombres romanos para la lucha, sin contar las legiones de
    aleae, las cuales son las de los pueblos aliados, ya que la
    constante emigración de roma y su comercio,
    habían llevado a que esta afianzara su dominio sobre las
    tierra centro
    itálicas. Si recordamos, el número de patricios era
    mínimo, el crecimiento demográfico era monopolizado
    por las familias plebeyas, y los pueblos aliados llegaban por
    montones, por ejemplo, siendo tan solo una ciudad tan
    pequeña, roma hacia el año 300 ya poseía
    embajadas en Epiro y Egipto.

    La división del ejército y de la
    legión mediante manipulos continuó siendo de la
    misma forma, hasta la época de Cayo Mario. El orden del
    ejercito cambió, la organización que el formulo no
    cambiaria nunca más.

    En obras maestras de diversos autores, como por ejemplo de
    Polibio, se describe al ejército romano, estos apuntes son
    los que tomaremos en cuenta para describir a este gran gigante
    imponente de la antigüedad.

    El ejército romano se componía de legiones,
    agrupaciones que constaban de 4.200 hombres de infantería,
    300 o 600 hombres de caballería, en algunos casos 500 o
    1.000, todo dependía del capital
    proporcionado por el estado al
    cuestor, encargado de las relaciones económicas entre los
    Tribunos Militares y el capital disponible del gobierno romano.
    Además a este número se le sumaban los aliados o
    socci, que eran de un número casi igual que la
    legión. Además estaban los proletarios o auxilia,
    un número reducido de legionarios y de gente de otros
    pueblos destinada a poyar a la legión cuando la batalla
    era demasiado dura. Además el ejército romano
    empezó a contar con 55 catapultas para cada legión,
    sin contar las casas y los otros utensilios del campamento, para
    esto eran necesarios músicos, albañiles,
    carpinteros, esclavos, los cuales eran por lo menos unas 700
    personas. De este modo una legión completa variaba su
    numero entre los 4.000 y 6.000 dependiendo su función,
    la cual a su vez dependía primordialmente del tipo de
    provincia y de que si era senatorial u imperial.

    Por lo general los 4.500 hombres de la legión
    estaban divididos en cohortes, cada una comandada por un Tribuno
    Militia. De este modo en cada legión había entre
    tres o cuatro tribunos. Si bien recordamos, Polibio nos pone en
    el caso de que aproximadamente cada año se investía
    a dos legiones en roma. Esto era más de 18.000 hombres, si
    bien recordamos, Roma debió haber contado con un
    número superior a los 7.000.000 de habitantes al llegar a
    la época de Cayo Mario y unos 9.000.000 millones a la
    época de Julio Cesar. Durante Augusto y Tiberio debe haber
    habido unos 13.000.000 de personas en el imperio. Lo más
    probable es que por lo menos hayan llegado a haber en roma por lo
    menos un número de casi 20.000.000 habitantes, algunos
    incluso han llegado a estimar un periodo de sobrepoblación
    de más de 70.000.000 de habitantes. Esto indica un
    índice de natalidad alto, al igual que uno de mortalidad
    muy bajo, a excepción en las fronteras, que gozaban de
    inestabilidad, lo que implicaba la creación de nuevas
    legiones cada año. De este modo es como Polibio nos dice
    que cada año el ayuntamiento romano se debían
    inscribir todos los ciudadanos romanos para formar parte del
    ejército, algunos si eran necesarios, otros porque les
    gustaba la carrera, de este modo, haya sido cual haya sido la
    razón, es que roma organizaba más de 18.000 hombres
    al inicio de la republica y al final del imperio, ¾ de la
    población pertenecían o
    habían pertenecido a la clase equina.

    Como ya lo dijimos, cada legión se dividía en
    cohortes, tomando como ejemplo a una legión de unos 4.200
    soldados, se especula que esta haya podido estar dividida en 3 o
    en 4 cohortes. Esto dependía si era para batalla o para la
    contención de rebeliones internas, ajenas al pretorio y a
    la especie de policía que poseía roma. De este modo
    Roma dividía a la legión en 4 cohortes de 1.000
    cada una, a excepción de la primera, la cual poseía
    1.200 hombres, es decir un manipulo más, esto se debe a la
    importancia que poseía el primer Tribuno, de este modo nos
    podemos percatar que la importancia de los Tribunos
    dependía de que cohorte tuvieran a su cargo. El Tribuno
    más conocido por tanto era el de la Primi Cohortis o
    Primera Cohorte. En los casos que la legión no fuese para
    alguna provincia fronteriza o para alguna guerra, como
    ya dijimos se dividía en 3 cohortes, cada una de 1.400
    hombres, en este caso el número de legionarios no
    varía, pero aún continúa la preponderancia
    de la Primi Cohortis.

    A su vez cada cohorte estaba dividida en centurias, las
    centurias eran unidades de 100 hombres, en cada cohorte por tanto
    había 10 centuriones, es decir, generalísimos de
    esos 100 hombres ya designados. Pero en la Primi Cohortis,
    recaía el mando de un centurión de confianza del
    tribuno y de uno electo por los propios soldados, de este modo
    los otros 200 hombres obedecían a dos
    generalísimos, los cuales en muchos casos se vieron
    obligados a repartirse el poder de los 200 hombres, este sistema de los
    manipulos no se siguió usando por sus problemas en
    el comando, por esto es que en muchos casos futuros los manipulos
    se disolvieron y se ocuparon, más seguidamente dos
    centurias más en la Primi Cohortis. Lo mismo
    sucedió con las dos manipulos con los que se dotaba a las
    legiones de tres Tribunos, simplemente luego se disolvieron
    creándose 4 centurias más. En resumen hacia la
    época imperial en una legión de tres Tribunos
    había 14 centuriones por cohorte y 42 en toda la
    legión. Además en las legiones de 4 Tribunos
    había 42 centuriones y 10 por legión a
    excepción de la primera en la cual había 12
    centuriones. Además las centurias, como siempre se a dicho
    zonal unidad base del ejército romano, por ello es que
    cada centuria podía estar compuesta de tan solo infantes,
    de este modo se llamaba Centuria Peditata, o de infantes y
    caballeros, de este modo era llamada Centuria Mixta. Esta
    también era llamada Centuria Equitata, se componía
    generalmente de 2/3 de infantes y de 1/3 de turmas o
    jinetes.

    Además cada centuria se dividía en 10
    centubernias, cada una de 10 hombres, no tenían
    ningún hombre al
    mando de ellas, solo al Centurión, tan solo eran una
    unidad útil en cierta forma en la movilización y en
    el campamento, ya que debía haber un prefecto que ayudase
    a la movilización de estos 10 hombres.

    Según Polibio, cada hombre en roma debía
    servir en el ejército, los que tenían un ingreso de
    más de 500 dracmas debían de elegir entre 16
    años en la infantería y 12 años en la
    escuela de
    turmas. Además cuando los cónsules o el emperador
    fijaba la investidura de una legión, era un hecho de
    celebración en roma, nunca se hacia en febrero, porque era
    tan solo el mes de la purificación, por lo general se
    hacia en la primavera europea, que corresponde a los meses de
    Abril y Mayo. De este modo los postulantes son dirigidos al
    capitolio donde oran a Júpiter para purificar sus almas.
    Luego pasan a las puertas del Palatino, en el foro, donde el cónsul o el
    emperador proceden a la ceremonia de nombramiento de las nuevas
    legiones. De este modo, es como el grupo es
    dividido en 2 grandes masa de hombres, es decir dos legiones,
    luego es vuelto a dividir en las 4 o 3 cohortes cada una,
    correspondiente a cada legión. Ahora pondremos el ejemplo
    tomado por Polibio de cuando un cónsul esta invistiendo a
    dos legiones, una de tres tribunos y otra de cuatro tribunos. De
    este modo es como empieza, toma a la primera legión,
    dividida entre 4 cohortes, y les asigna a dos veterano Tribuno
    Militia de confianza, luego asigna a los dos más
    prestigiosos de los nuevos soldados para que sean los otros dos
    Tribunos Militares. Luego toma a la otra legión dividida
    entre 3 cohortes e impone a sus 3 Tribunos Militares, veteranos
    de confianza del cónsul. Este acto, según Polibio,
    era común, el de consagrar a Marte y Júpiter dos
    legiones, una de 3 y otra 4 cuatro Tribunos. Sumado a los vuelcos
    de los prestigios y cercanía a los cónsules
    gobernantes. De este modo los Tribunos dan sus botos de
    confianza, luego proceden a escoger a sus respectivos
    centuriones, Polibio nos explica que primero el Tribuno escoge a
    la mitad de los centuriones, es decir a 6 o 7. El resto son
    electos entre los soldados. De este modo se prosigue a tomar el
    voto de confianza y de no matrimonio, entre
    otros, asegurando la confianza de los nuevos legionarios romanos.
    Luego de esta ceremonia se prosigue a la separación de las
    legiones y envío a sus respectivos lugares. Por lo
    general, cuando a las legiones se les asigna una misión de
    batalla y conquista, son puestas a cargo de algún legato
    –titulo de general en roma-, sea o no gobernante alguna
    tierra cercana al lugar del asedio o asalto. El legato era sierre
    de clase senatorial, de confianza del cónsul o el
    emperador, este no podía intervenir en las elecciones de
    los Tribunos, pero si podía elegir a su Prefectus Castrum,
    o prefecto de campamento.

    Como ya lo hemos dicho otras veces, también las
    legiones constaban de caballería cuando no estaban estas
    combinadas con la legión, conformando las Centurias
    Equitatas. De este modo es como los ciudadanos que estuviesen
    dispuestos a pagar su entrada en la academia podrían
    entrar a ser jinetes para el imperio romano.
    Los jinetes eran llamados Turmas, los cuales se organizaban en
    Alae, las cuales podían ser generalmente de 100 hombres,
    pero en algunos casos especiales, como en el de provincias
    orientales como Palestina y la Capadocia, los cuestores asignaban
    un numero mayor de jinetes, en algunos casos las Alae de jinetes
    llegaban a dar un total de 500 turmas –Alae Quinquenaria- o
    en casos extremos más de 1.000 –Alae Miliaria-. Los
    escuadrones o Alae de jinetes estaban comandadas por decuriones,
    cada decurión comandaba a 100 jinetes, mientras que una
    Alae se componía de 10. Generalmente había 3
    decuriones, dos electos por los jinetes y 1 electo por el
    cónsul o emperador gobernante. Si habían más
    de 3 decuriones, se dividía en la mitad el número
    de comandantes de las tropas de a 100, y se daba a escoger una
    mitad a los jinetes y la otra al cónsul o Augusto (o Cesar
    si es la dinastía Julio-Claudio).

    Además a esto se le sumaban los Prefecti, generales
    a cargo de las cohortes de las tropas auxiliares. En algunos
    casos comandaban conjuntamente con algún general aliado
    las tropas de algún pueblo amigo, estos eran los socios o
    socci. Por lo general las filas de las tropas auxiliares fueron
    llenadas en un principio por astures, los cuales fueron muy
    conocidos por su forma de montar a caballo. Además hacia
    el final del imperio, los más conocidos fueron otros como
    los Francos, Visigodos y Burgundios. La diferencia entre los
    socci y los auxilia recae en que el primer grupo nombrado, los
    socci, poseen su libertad y tan
    solo son un apoyo para roma, son aliados a cargo de sus propios
    generales, pero en algunos casos aceptan dentro del mando a los
    prefecti romanos, por su sabiduría en la lucha. En el caso
    de los auxilia, son tropas plenamente bajo el dominio de roma,
    adquirían la ciudadanía luego de 7 años de
    servicio, mientras que los socci luego de 10 años de
    servicio. Los auxilia eran mayoritariamente de países
    sometidos o poco romanizados, los Triatos ocupaban los cargos de
    tribunos en las líneas de este tipo de legiones.

    Dentro de las líneas de ataques de las legiones,
    cada cohorte y centuria era meticulosamente estudiada y dividida
    en las antiguas bases de división por edades, de este modo
    nos cuenta Polibio que se continuo dividiendo a los soldados en
    Triatos, Hastatos, Velties y Principes. En muchos casos, los
    Velties comenzaron a ser comunes en la arquería romana.
    Los Hastatos y Principes, tanto en la infantería pesada
    como la ligera, además de las turmas, en especial estos
    últimos, los príncipes. Los Triatos continuaron
    siendo en su mayoría los auxilias de las batallas. Todos
    estos eran estudiados meticulosamente y distribuidos en las
    distribuciones de cohortes y centurias.

    Con las guerras
    civiles fue necesario poner un arbitraje al
    conflicto
    entre los legatos –generales romanos-, de este modo entre
    las reformas de Cesar Augusto se distingue la división de
    las carreras cívicas y militares, esta última
    saliendo victoriosa de la crisis republicana, erigiéndose
    como la clase dominante en el alto imperio, se transformo en la
    que monopolizaba el imperio, e incluso fue tanto su monopolio que
    se extendió hasta por la clase imperial, infundiendo el
    poderío sobre los emperadores y cesares. De este modo la
    clase caballeresca o equina, nombre de la clase de los militares
    viene siendo en algunos casos la que provocase la crisis de
    finales del alto imperio, provocando esta la gran anarquía
    en roma.

    De este modo en el principado la clase equina estaba
    dividida en dos: por un lado el "Sequito del emperador", mientras
    que por el otro "Las legiones de campañas".

    Por un lado el sequito del emperador estaba compuesto por
    tres tipos de cohortes, unas llamadas las cohortes pretorianas,
    eran aproximadamente 9 cohortes, es decir 9.000 hombres, dos
    legiones completas a cargo de las ordenes del emperador. Sus
    deberes eran proteger al emperador de cualquier ataque u intento
    de homicidio,
    registraban mucho a los visitantes del palacio imperial del
    palatino. En resumen se convirtieron en el servicio de defensa
    del soberano. Los pretorianos estaban todos a cargo de un
    Prefecto Pretoriano. Siguiendo con el sequito del emperador, los
    pretorianos tan solo defendían la autoridad
    imperial en la ciudad o zona donde se encontrase el emperador, de
    este modo Cesar Augusto creó las cohortes urbanas, eran
    una legión completa con el cargo de proteger la autoridad
    romana, eran algo así como el servicio de policía
    imperial de Roma, en un inicio fueron 3.000, luego una
    legión completa y posteriormente fueron ganando más
    y más terreno. Por último el sequito imperial
    contaba con unas cohortes de vigilancia, eran 3 o 4 cohortes
    aproximadamente, se encargaban de extinguir incendios y de
    la guardia nocturna estaban a cargo de un Prefecto. Por lo
    general estaban compuestas estas últimas clasificaciones
    de cohortes por libertos –esclavos liberados-, por ello es
    que eran las de menor prestigio.

    El último punto que me gustaría destacar, es
    que conforme ascendía la republica y aumentaba la crisis,
    si bien recordamos el ejército se engrandecía y
    roma ya no solo contaba con 4 legiones repartidas entre los dos
    cónsules, en esta instancia fue cuando apareció una
    nueva reforma, y quedo a mando de un propretor o un
    procónsul un grupo de dos, tres o cuatro legiones. El
    procónsul o propretor poseía un titulo militar que
    actualmente sería general, de este modo este general era
    llamado "Legato", este portaba una capa de color
    púrpura o rojo oscuro, era el único que la portaba.
    De este modo los generales se distinguían dentro de la
    legión. Además los tribunos militares portaban
    también portaban esta capa, pero al contrario de los
    legatos, esta era de color blanco. Por último los otros
    comandantes importantes dentro de las batallas y asedios, los
    centuriones, vestían igual que los legionarios comunes,
    pero solo se le distinguía por pequeños detalles,
    estos era: el centurión llevaba la espada al lado
    izquierdo, mientras que los legionarios comunes la portaban en la
    derecha. Su distintivo más común era que su cimera
    era de forma transversal, distinta a todas las otras de tanto los
    legatos como de los legionarios y tribunos. Por último en
    algunos casos el centurión portaba espinilleras de metal,
    que lo recubrían desde la rodilla hasta los
    tobillos.

    Los estandartes y signos de
    Roma:

    La primera de estas imágenes,
    de izquierda a derecha, corresponde a la insignia más
    importante para roma, esta es el "Aquila", signo de la deidad
    protectora de roma. Esta insignia era la que representaba a cada
    legión, su protección estaba a cargo de la Primera
    Cohorte. La aquila era el objeto de culto dentro de la
    legión. En un principio el aquila no era el único
    símbolo, también estaba el lobo, el minotauro, el
    caballo y el jabalí, pero a instancias de Cayo Mario, este
    abolió los otros 4 signos, dejando como único
    representante de roma al águila o aquila. En la
    época de Cayo Mario las aquilas estaban hechas de plata,
    pero a instancias de Augusto se empezaron a fabricar de oro.

    Además del aquila, el ejército contaba con otras
    insignias, la que vemos al lado derecho del estandarte del
    águila es la insignia del Vexillum, esa insignia le
    correspondía a las tropas que se encontraban en lugares
    lejanos luchando, por lo general más allá de los
    límites
    imperiales, además las unidades que se apartaban de la
    legión, por ordenes del legato o tribuno, ya sea para
    explorar, negociar o hacer algún otro servicio mediante la
    campaña, también portaban la Vexillum. Este
    estandarte era un largo bastón con una bandera que
    tenía un águila en el centro de esta. Hacia la
    época de Augusto se empezó a usar tan solo de color
    rojo, esto fue por primera vez con las legiones que ocuparon
    Cirenaica y Egipto al mando de Octavio en la guerra civil.

    La última insignia corresponde a la Signum, estandarte
    que pertenecía a las centurias, por esto es que era la
    insignia más usada en las legiones, dentro de cada una por
    lo menos debían de haber más de 40 Signum. Este
    estandarte estaba constituido por el águila y la insignia
    de la corona romana en la punta, bajo esta la inscripción
    de SPQR, solo durante la republica, luego fue remplazada por el
    nombre del soberano. En la inscripción también se
    encontraba escrito que numero de cohorte eran. Por último
    las insignias en forma de círculo, significaban el
    número de centuria que correspondía a la cohorte
    correspondiente.

    La pérdida de cualquier estandarte era considerada la
    deshonra para roma y en especial para el legato, dentro de la
    sociedad
    romana se celebraba la recuperación de las insignias
    romanas y se consideraba una desgracia la desaparición de
    alguna. Como ejemplo esto, puedo nombrar a generales importantes
    que arriesgaron su vida por alguna insignia, en este caso el
    águila. Como ejemplo tomare a Julio Cesar, quién en
    sus relatos de la conquista de las Galias señala que
    cuando se encontraban en el canal de la mancha, un Aquilifer,
    guardián del águila, perdió la insignia,
    dejándola caer en las aguas del canal, rápidamente
    Cesar se percato y según relata, el Aquilifer se lanzo a
    las turbulentas aguas a recuperar la insignia. Por lo cual
    él mismo se encargo de premiarlo y condecorarlo, tanto
    como si este le hubiese salvado la vida en aquel instante.
    Además hay que recordar que dentro de la historia romana
    este hecho marcaba un hito social, de este modo es como muchos
    historiadores antiguos y escritores señalas estos
    continuos hechos, como por ejemplo: Mientras César luchaba
    en las Galias, su amigo Craso fue derrotado por los partos en
    Carras, al norte de Siria, el 53 a.C. Todo su ejército de
    siete legiones fue muerto o prisionero y las siete águilas
    capturadas. El sucesor de César, Augusto, consiguió
    tras años de negociaciones que las águilas fueran
    devueltas y toda Roma lo celebró como una gran victoria.
    Pero años más tarde, el ejército de
    Quintilio Varo fue majaderamente derrotado por los germanos en
    Teutoburgo y las tres águilas capturadas. Augusto
    pasó días y noches gritando desesperado
    "¡Quintilio Varo! ¿Dónde están mis
    águilas?". Las 3 águilas fueron recuperadas
    años después por el emperador Claudio.

    Además cuando eran robadas las insignias por lo general
    un colegio de sacerdotes se encargaba de negociar la
    recuperación de estas, cuando este tomaba la
    resolución de que seria imposible recuperarlas si no es
    por la fuerza, se
    dirigía el sumo sacerdote del colegio a la frontera
    romana donde yacía el problema, y lanzaba una pilum
    –lanza romana arrojadiza- para así declarar la
    guerra al pueblo vecino por la razón de haber robado las
    insignias imperiales.

    Además entre las insignias que portaba el emperador
    estaban las águilas, las cuales las usaba en sus ropas.
    Cuando Rómulo Augustulo cayo, Odacro mando a Zenón
    las águilas imperiales y las legionarias a Zenón,
    emperador del oriente.

    Otro gran comentario que hay que hacer es que por ejemplo, las
    grandes potencias de la actualidad y del pasado continuaron
    ocupando el águila como signo, para representar así
    la grandeza del imperio romano, un ejemplo de esto es Estados Unidos,
    la Alemania nazi,
    Italia, la
    España
    de Franco, la Rusia zarista,
    etc.

    Por último cuando a un legato lo deponían de su
    cargo o se deseaba disolver a una legión, el senado, el
    cónsul o el emperador tan solo procedía a quitarles
    las insignias imperiales.

    Las vestimentas de los
    legionarios y de los oficiales:

    El ejército romano fue prácticamente el
    primer estado antiguo
    en otorgar un tipo de uniforme generalizado para todos sus
    efectivos. El cual además desde Cayo Mario fue totalmente
    cotizado y pagado por el mismo estado romano. De este modo hasta
    los más pobres podían llegar a poseer una carrera
    militar y surgir, un claro ejemplo es el mismo emperador
    Dioclesiano, el cual era pastor y se volvió legionario y
    luego ascendió hasta legato y posteriormente hasta
    emperador, lo que demuestra que teniendo las puertas abiertas del
    ejercito se podía llegar a mucho en el mundo
    romano.

    Pero a la vez que el estado romano costeaba lo que sus
    oficiales y legionarios necesitaban, nos damos cuenta de que no
    siempre fue un gasto fijo y parejo. De este modo podemos explicar
    que el ejército fue evolucionando a través de la
    historia romana, junto con sus propios uniformes. Bajo el reinado
    de Servio Tulio por primera vez se impone un tipo de uniforme
    general, compuesto por una cota de malla, un escudo redondo como
    el griego, además los romanos ocuparon la espada larga y
    pesada de los helénicos hasta el siglo III antes de Cristo
    aproximadamente. Hacia el siglo III también se
    difundió el uso de lanzas cortas, como la pilum,
    además del uso de corazas pesadas para los triatos y
    oficiales mayores, mientras que a los hastatos y principes de
    altos rangos y honores dentro de la legión se les fue
    otorgando una coraza ligera.

    De este modo, un simple legionario menor, veltie o un
    hastato pobre, vestían un uniforme compuesto por una cota
    de malla, la cual se empezó a fabricar a base de hojas de
    acero hacia la
    época de Claudio I. La cota de mallas romanas iba desde
    los hombros hasta unos centímetros antes de las rodillas,
    además los legionarios ligeros, compuestos por velties y
    hastatos pobres como se dijo anteriormente portaban hombreras
    hechas de cotas de malla. Las insignias de premiaciones eran
    adheridas a la cota. Debajo de la cota de malla portaban una
    larga túnica roja, la cual se extendía hasta las
    rodillas, además ocupaban unos pantaloncillos de cuero que se
    extendían hasta las rodillas, muchas veces no se
    veían por efecto de la túnica roja. Además
    portaban un cinturón de cuero, del cual pende la espada
    corta, la cual se empezó a usar desde el siglo III y se
    generalizo con Cayo Mario, esta era la Gladius Hispanicus.
    Además en el cinturón portaban un pugio o
    puñal. Con el paso del tiempo, los
    legionarios ligeros empezaron a dejar de lado las cotas, hacia la
    época de trajano los legionarios romanos, pesados y
    ligeros y los oficiales portaban una coraza, con solo
    pequeñas diferencias, como que entre los legionarios
    pesados y ligeros, los primeros ocupaban hombreras y un tonelete
    de acero, mientras que los segundos de cota de malla.
    Además los centuriones ocuparon siempre un tonelete tan
    solo hecho de cuero. Los legionarios pesados portaban desde el
    siglo III una coraza sin hombreras ni tonelete, este
    último seguía siendo de cota de malla.

    Además los legionarios ocupaban yelmos, compuestos
    tan solo por un morrión y una cimera, sin contar los
    cinchos del yelmo. El yelmo era generalmente de bronce y hacia la
    época de Trajano de acero también. También
    desde la antigüedad los romanos habían adornado los
    morriones con un penacho que estaba hecho de plumas de animales o de
    pelo de colas de caballos.

    Los legionarios romanos, correspondientes a los hastatos,
    triatos, velties y príncipes, los cuales luchaban en las
    líneas de infantería pesada y ligera, no siempre
    portaban del mismo modo que en la batalla el uniforme. Cuando
    había un traslado de un lugar a otro para establecer una
    campaña un legionario romano vestía con su cota de
    mallas hasta las rodillas y con Trajano portaban su coraza sin
    hombreras ni tonel. Portaban debajo de su cota o peto la misma
    túnica roja con los pantaloncillos de cuero. Portaban
    colgando al pecho el yelmo, llevaban en su brazo el escudo,
    recubierto de su funda de cuero; en sus manos izquierdas portaban
    dos lanzas, las pilum, esta podía ser corta o larga. Si
    era corta era para las primeras divisiones de infantería
    ligera, esta servia para lanzarla y se desarmaba al clavarse en
    la tierra, de
    este modo quedaba inutilizada por si el enemigo deseaba
    utilizarla. La pilum corta es de origen semnita. Mientras que la
    pilum larga es la típica lanza larga la cual ocupan los
    legionarios pesados, es semejante a una pica como las de Alejandro
    Magno, por esto probablemente sea de origen griego la pilum
    larga. Además de portar estas jabalinas, portaban un largo
    palo en la mano derecha para sujetar distintas cosas, la tienda
    de campaña y las estacas, etc. Además portaban una
    mochila en sus hombros en la cual iban distintas cosas como
    implementos para trabajar los campos, herramientas
    de construcción, juegos como
    dados, elementos para cocinar, alimento para 5 días
    –las tropas auxiliares y los triatos debían
    encargarse de los suministros aparte que necesitasen los otros
    legionarios-; también portaban un segnum, que era una
    túnica de lana impermeabilizada; cambio de
    ropa; repuestos para las sandalias, las cuales poseían
    clavos de acero en las plantillas; entre otras cosas. Todo esto
    pesaba aproximadamente 30 kilos.

    Los centuriones, que dejaban de ser clasificados como
    triatos, hastatos, velties o príncipes, eran los oficiales
    a cargo de 100 hombres, estos eran jerarquizados a medida de su
    antigüedad, de este modo el centurión más
    importante era el de la primera centuria de la Cohorte I y el
    menos importante era, poniéndolo hacia la época de
    Augusto y Tiberio, donde en muchos casos las cohortes eran
    compuestas por 600 legionarios a veces, distinguimos al
    centurión menos importante como el cual comandaba el III
    Manipulum o la VI Centuria, ambas de la X cohorte. En muchos
    casos los puestos de centurión, los cuales eran más
    de 70 escalafones, dependían de su antigüedad, de
    este modo el último centurión debía de
    esperar a que muriera un centurión más alto o este
    se jubilara como veterano militar. Pero hacia la época de
    Cesar, se empezó a generalizar el orden de los centuriones
    por meritos de guerra, obediencia o servicios,
    como por ejemplo aquel legionario que salvo el aquila cuando
    callo al canal de la mancha cuando Cesar estaba al norte de las
    Galias.

    De este modo el centurión era un cargo muy
    utilizado, si recordamos en la época de Cesar era mucho
    más corta la carrera del centurión, por la
    minoría de los escalafones –casi 50-, pero hacia la
    época de Claudio ya eran más de 70 los centuriones
    que servían en una legión.

    De este modo, tomando como ejemplo las organizaciones desde
    Augusto, donde las cohortes eran generalmente de 600 hombres,
    destacamos a 6 centuriones, cada uno contaba con suboficiales a
    su servicio, estos eran escogidos por él, mientras que 3
    centuriones eran electos por los Tribunos y los otros 3 por un
    sufragio de la
    centuria. De este modo el centurión como ya dijimos
    escogía a sus suboficiales los cuales no tenían
    ninguna ropa en especial, el primer suboficial era el optio,
    brazo derecho del centurión. Los siguientes eran un
    portaestandarte o signifer, el cual defendía las insignias
    de la centuria, y un cornicem, el cual era un suboficial para
    transmitir las órdenes.

    El Primus Pilus era el nombre dado al centurión
    más importante y con más meritos, antiguamente
    también era el más antiguo, por lo tanto este
    centurión era el primero de la I cohorte. Cuando la
    legión tenía como misión una campaña
    y se había establecido un castro o una fortaleza, el
    procónsul o el propretor –si eran más de una
    legión en campaña- o el legato –si era una
    legión en campaña- establecían a un prefecto
    que se encargase de todo el campamento, de este modo el con
    más méritos de los Primus Pilus era escogido como
    Prefectus Castrum, que significaba prefecto del
    campamento.

    La vestimenta de los centuriones era muy semejante a la de
    los legionarios, se diferenciaban por detalles como llevaba la
    espada al lado izquierdo, mientras que los legionarios comunes la
    portaban en la derecha. Su distintivo más común era
    que su cimera era de forma transversal, distinta a todas las
    otras de tanto los legatos como de los legionarios y tribunos.
    Además el centurión portaba insignias en forma de
    círculo dependiendo del número de centuria que
    comande. Por último en algunos casos el centurión
    portaba espinilleras de metal, que lo recubrían desde la
    rodilla hasta los tobillos. Hacia la época de Tiberio el
    uniforme de los centuriones y de los suboficiales de este fue
    reformado, instituyéndose una nueva coraza llamada "Lorica
    Segmentata", un tipo de coraza que recubría hombros y
    pecho, fue usada posteriormente por los altos oficiales, y a la
    época de Trajano la lorica segmentata fue de uso
    común en toda la legión. Este tipo de coraza no
    sería desechada nunca más y seria de uso
    común y muy conocida para los conocedores de roma, tan
    difundida fue esta coraza que muchos piensan que fue utilizada a
    lo largo de toda la historia de roma. Además hacia la
    época imperial se generalizo que los centuriones
    utilizasen una túnica hecha de color blanco, pero
    también fue muy común la de color rojo, tanto que
    no se pudo desechar.

    Entre los oficiales superiores registra el tribuno militar,
    durante la republica, hasta Cayo Mario, los tribunos
    habían sido 4 o 3 en cada legión, pero junto con la
    reforma y los ajustes posteriores de Augusto y Tiberio el
    ejercito romano contó con diez tribunos militares por
    legión, de este modo se fue adaptando a cada cohorte con
    600 hombres, que era la unidad táctica que los tribunos
    manejaban. De este modo los 10 tribunos, electos todos por el
    emperador, el legato o los procónsules o propretores. Por
    lo general debían de ser 5 tribunos con más de 10
    años de servicio, mientras que los otros 5 eran escogidos
    a base de las referencias y recomendaciones por servicios y
    meritos ya sea en guerra o dentro del ayuntamiento romano o en la
    academia de oficiales romanos. Los tribunos vestían por lo
    general con la típica túnica corta hasta las
    rodillas, esta era de color blanco, que era general en todos los
    oficiales, lo que hizo que también se hiciera común
    entre los centuriones. Pero solo hubo una pequeña
    diferencia, la cual radicaba que solo los oficiales superiores
    portaban la túnica blanca con rayas púrpuras en las
    puntas, propia de los tribunos y de los legatos. Además
    portaban una camisa de cuero llamada pteriges. El pteriges era
    una camisa formada por una serie de tiras de cuero que
    recubrían las caderas y los hombros, las puntas eran de
    color plateado para los tribunos. Por lo general el pteriges
    actuaba también de tonelete y era igual al que portaban
    los centuriones, con la diferencia es que el del centurión
    era de color café y
    en las puntas portaba unos hilos de distintas clases de animales.
    En el caso del tribuno como ya dijimos las puntas eran como
    botones de plata y el pteriges era de color blanco. Además
    ocupaban un pantaloncillo de tela de color blanco que llegaba
    hasta más debajo de las rodillas. No ocupaban canilleras
    como los centuriones, pero si las típicas sandalias para
    la guerra, a veces cuando los tribunos iban con misiones
    comerciales o diplomáticas en vez de llevar las pesadas
    sandalias de guerra portaban las sandalias negras que ocupaban
    los senadores. Ocupaban obviamente la gladius hispanicus y el
    puñal. Su yelmo era como el del tipo helénico, con
    un penacho grande y largo de manera longitudinal. Como de
    costumbre, como no portaban la cota de malla como los legionarios
    hasta Trajano o como los centuriones hasta Tiberio, portaban una
    coraza, pero no la ideada por Tiberio, la llamada Lorica
    Segmenta, en este caso los tribunos ocupaban una coraza
    anatómica, de una sola pieza que era muy unida al cuerpo.
    Esto les facilitaba el poder montar a caballo y movilizarse muy
    rápido para poder dar las ordenes, lo cual al mismo tiempo
    no se dejaba de lado la típica elegancia y cultura
    greco-romana. También utilizaban una cinta llamado
    "Ritual", esta era de color blanco y atravesaba todo el abdomen.
    Era común entre los altos oficiales como los tribunos,
    legatos, procónsules, cónsules, propretores, dux,
    pretores, procuradores, entre otros. Lo único que
    diferenciaba cada lazo era el color, el cual tan solo era blanco
    para los tribunos como se menciono anteriormente. Por
    último el uniforme del tribuno portaba una larga capa de
    color blanco probablemente –esta información no a sido aclarada hasta la
    actualidad-, la túnica era llamada Palludamentum, este
    manto no se ocupo entre los emperadores hasta la época de
    Vespasiano o Trajano probablemente. Además como era de
    costumbre los soldados romanos, tanto legionarios como los
    más altos oficiales portaban el pelo corto y en muchos
    casos era común que no llevasen barba, a menos que fuesen
    un emperador o algún oficial ya veterano. Además la
    moda de la barba
    se dejo de ocupar desde los años de Escipión el
    africano, donde se difundió entre los romanos las
    tradiciones griegas de no llevar barba. La barba se volvió
    a ocupar hacia el gobierno del emperador Adriano.

    Otro de los grandes oficiales superiores era el legato, el
    cual comandaba toda una legión, en muchos casos cuando se
    mandaba a más de una legión a campaña y no
    se les designaba a algún oficial superior al mando general
    de las legiones, uno de ellos era dejado al mando. Por lo general
    los mismos legatos eran también procónsules,
    propretores y dux, lo que favoreció mucho el caso nombrado
    anteriormente. Las vestimentas del legato eran las mismas que las
    del tribuno, solo que con algunos meros detalles de diferencia.
    El pteriges era igual que el del tribuno, una camisa echa de
    tiras de cuero blanco que protegía los hombros y caderas,
    la única diferencia era que las puntas del pteriges del
    legato eran de oro. El yelmo, las armas, el
    calzado, el peto anatómico, el pelo y la barba, todas eran
    iguales. La túnica que portaban bajo la armadura era
    plenamente de color blanco y sus pantaloncillos también,
    no como los de los tribunos que tenían una línea de
    color púrpura en las puntas. El lazo ritual era de color
    rojo con hilo de oro en las puntas y la palludamentum era de
    color rojo. Además los oficiales al mando del grupo de
    legiones en campaña no portaban nada que los diferenciase,
    a veces tan solo portaban la palludamentum algo más
    oscura, como púrpura o escarlata, como lo menciona Cesar
    en la batalla de Alesia. Como comentario general de los altos
    oficiales podemos decir que todos vestían similarmente,
    tantos tribunos como procónsules, dux, legatos, entre
    otros, y su indumentaria no sufrió variaciones notables en
    ninguna época de la historia romana.

    Armas y artillería de
    la
    monarquía, republica, principado y dominado
    romano:

    Un yelmo y un peto al estilo celta, una espada de origen
    hispano, un escudo proveído de los samnitas, jabalinas
    etruscas, marina y cotas al estilo cartaginés, entre otras
    cosas, fueron la compilación del armamento que usó
    roma entre su historia para conquistar tierras en tres
    continentes y satisfacer y mantener por casi 2.000 años un
    inmenso imperio. Esta recopilación de lo mejor de cada
    pueblo europeo fue echa a lo largo de la historia de roma,
    llevó mucho pero valió la pena, es de este modo
    como podemos nombrar las siguientes armas:

    • La Gladius Hispanicus: Significa "espada
    española"; fue en la segunda guerra púnica cuando
    desde los Alpes, Aníbal llegó con un
    ejército cargado de infantes ibéricos, con los
    cuales flagelaron a toda Italia en 4 batallas principales,
    además casi arribaron a las puertas de roma. La gladius
    hispanicus es una adaptación de la falgata, nombre dado a
    esta espada por hispanos y cartagineses. La adaptación
    romana consistía en una espada corta de 50 cm. de largo
    por 7 cm. de ancho, hecha de hierro y
    posteriormente de acero, cuando los romanos aprendieron el
    sistema de fundición del material nombrado en un
    principio. La espada española estaba constituida de dos
    filos y una gran y aguda punta, preferiblemente la espada hispana
    de los romanos era buena para el ataque cuerpo a cuerpo y las
    estocadas. La filosa punta evitaba el tener que dar el movimiento en
    alto que permitía dar estocadas, ya que al alzar la punta
    se dejaba libre el antebrazo y el pecho ante cualquier ataque de
    una espada de corte. Con la punta de la gladius hispanicus era
    posible dar estocadas directamente, también eran posibles
    dar tajos a poca distancia, aprovechando el doble corte. Anterior
    a la gladius hispanicus se utilizaba la Hoplita Griega, espada
    algo ovalada y con un mango muy adherido al hilo de la espada.
    Buena para dar cortes en una sola dirección, pero ineficaz por su
    único filo y su incapacidad para dar estoques. Por ello se
    adopto una espada pesada y larga, de esta viene el termino
    espada, ya que los romanos la llamaban Spatha. En las guerras
    púnicas como ya dijimos se inicio la producción y enseñanza de los legionarios con las
    espadas españolas. Hacia le época de Cayo Mario la
    espada se habría generalizado en todo el ejército
    romano, tan solo entre los auxiliares se seguía utilizando
    la Spatha. Además de la espada española,
    también se ocupaba un puñal, de origen español
    también, era de 24 cm. de largo con 6 cm. de ancho.

    • La Pilum y la Hastata o Pilum pesada: Una de las
    más formidables armas jamás usadas por la
    infantería. Constaba de un asta de madera de
    aproximadamente 1.2 m. de longitud con un taco de madera de forma
    cónica en el que se insertaba una vara de hierro de unos
    60 cm. con punta troncocónica. El pilum lo arrojaba el
    legionario a la carrera a unos 20 m. del enemigo. Cayo Mario, el
    creador de las nuevas legiones, cambió uno de los dos
    remaches de sujeción de la vara de hierro por un taco de
    madera que se partía al impactar con el escudo enemigo,
    con lo que el pilum, al impactar, se doblaba como una bisagra
    haciendo que el escudo que había perforado fuese imposible
    de manejar y además no podía volver a ser utilizado
    por el enemigo para arrojárselo a los romanos. Sin
    embargo, César observó que los tacos de madera de
    algunos pila no se partían en el choque, con lo que el
    enemigo podía volver a lanzárselos a los
    legionarios. César, siempre atento a este tipo de
    cuestiones, ideó un refinamiento diabólico:
    destempló parcialmente el hierro de la vara con lo que
    ésta al impactar se deformaba impidiendo su uso posterior.
    De esta manera, una lluvia de pila bien lanzada era mortal, ya
    que descomponía las líneas enemigas segundos antes
    de recibir la carga de los legionarios espada en mano. Una vez
    recuperados, los pila eran fácilmente reparados por los
    armeros romanos. Cada legionario llevaba dos pila: uno ligero
    (pilum) y otro pesado (hastata). Sus inventores fueron, muy
    probablemente, los samnitas.

    • Scutum: En un principio, el escudo romano fue una
    replica del de la falange política de Grecia, pesado
    y redondo. Luego de las guerras samnitas, se adopto su modelo de
    escudo, junto con algunas perfecciones, es así como
    nació el Scutum romanum. El cual era un gran escudo de
    1.30 m. de altura, ovalado y curvado hacia dentro, proporcionando
    así una protección óptima al infante que lo
    portaba. Tenía un asa central protegida en el lado
    exterior por una pieza de madera. El escudo, formidablemente
    diseñado y elaborado para ofrecer a su portador una
    protección óptima, estaba formado por 3 capas de
    listones de madera contrapeados para aumentar su resistencia que
    eran pegados con cola, además estaba forrado con una capa
    de fieltro de lana virgen sobre la que se pintaban motivos de
    adorno como
    alas de águila y con un reborde completo metálico
    de bronce. La pieza que protegía el asa era recubierta por
    un umbo (palabra romana) o cazoleta de hierro. Esta pieza que se
    encontraba en el centro exterior del escudo romano no fue
    adoptada hasta las campañas de Julio Cesar en las Galias,
    ya que los aborígenes de estas tierras la ocupaban, uno de
    los fines de la cazoleta era el evitar grandes impactos de
    flechas.

    • Onagro y Ballista: Eran enormes maquinas de usos y
    funciones
    semejantes, se ocupaban en los asedios. Su función era
    disparar proyectiles de hasta 45 Kg. En las campañas de
    Cesar en las Galias fue donde empezaron a tener mayor relevancia
    en los asaltos a ciudades fortificadas, en especial en el asalto
    de Alesia.

    La única diferencia entre el Onagro y la Ballista es su
    tamaño y capacidad de alcance, por un lado, el Onagro es
    el arma romana más grande y puede alcanzar más de
    200 Km. Mientras que la Ballista, de tamaño menor, puede
    alcanzar hasta solo 180 Km.

    • Ballesta: Arma de tamaño intermedia entre el
    Onagro y la Ballista. El nombre de Ballesta no se refiere
    exactamente al tipo de arco ocupado desde el siglo XV, sino a un
    tipo de arma romana de asedio, de tamaño intermedio, como
    ya se dijo, del Onagro y Ballista. Su función era disparar
    grandes proyectiles con forma de flechas, los cuales en algunos
    casos iban prendidas con fuego. El máximo alcance de la
    Ballesta era el mismo que la Ballista, 180 Km.

    • Scorpio: Los escorpiones romanos, maquinas
    pequeñas, los que las manejaban eran llamados legio
    scorpio o legionario escorpión. El escorpión romano
    era el arma más temible, fácil de manejar, lanzaba
    proyectiles de hierro finos, los cuales podían alcanzar
    hasta 400 metros. La primera vez que los escorpiones fueron
    utilizados fue en el asedio de Avarico, en las campañas de
    Cesar. Desde ese entonces, cada legión contaba con al
    menos 40 o 50 legionarios escorpiones.

    Los Castros o Campamentos
    romanos:

    El ejército romano dominó a la
    perfección la técnica de la construcción de
    campamentos, tanto permanentes (stativa) o invernales (hiberna),
    como para fortificarse para pasar la noche, después de una
    jornada de marcha. En este último tipo es donde más
    se demuestra el dominio y la organización, de tal forma
    que en poco tiempo eran capaces de construir un campamento. Las
    noticias que
    poseemos del campamento fundamentalmente son de Polibio, Higinio
    y César. En muchos casos los campamentos fueron
    posteriormente el núcleo de origen para muchas colonias
    romanas, convertidas en ciudades posteriormente, de las cuales
    algunas aún continúan existiendo, un ejemplo es la
    colonia de Emerita Augusta, actualmente la ciudad española
    de Mérida. Por lo general estas colonias iniciaban su
    expansión cuando arribaban agricultores, generalmente de
    la plebe, en busca de tierras, o cuando se iniciaba la
    jubilación de los legionarios, es decir la
    asignación del titulo de veterano y la concesión de
    tierras en recompensa por el servicio.

    El emplazamiento del campamento dependía de la
    situación del enemigo, si estaba cerca o no, o si el
    terreno era accidentado o llano. Generalmente seguían el
    trazado regular; pero podía ser modificado si las
    circunstancias lo requerían. Los lugares preferidos eran
    las pendientes suaves y las llanuras. Si está el enemigo
    cerca, se orienta hacia él; si no, se busca en la
    orientación la facilidad del abastecimiento de agua y
    forraje.

    El trazado lo realiza una patrulla, mandada por un tribuno,
    sirviéndose de la "Groma", que es un instrumento
    óptico. El trazado interior se marca con
    banderas, de modo que, cuando llega el ejército, ya sabe
    cada soldado dónde tiene que situarse y lo que tiene que
    hacer. El campamento generalmente tiene forma cuadrada; durante
    el imperio, rectangular; pero puede adoptar otras formas, que no
    afectan casi a la distribución exterior.

    Para la protección del Castro se cavaba en el
    perímetro trazado por la patrulla un foso –Fossa-,
    el cual era de tres metros y medio de profundidad. Con la tierra
    sacada del foso se construía el "Agger", este era un
    terraplén que cubría, de igual manera, todo el
    perímetro del campamento. Por último sobre el agger
    se edificaba el "Vallum", esta era una empalizada hecha
    generalmente de estacas de madera. Entre el vallum se dejaba una
    zona de 70 metros aproximadamente, esta era llamada
    "Intervallum". Este servía en caso de un ataque de las
    tropas enemigas, no alcanzasen rápidamente las tiendas de
    los legionarios, además gracias a esto cuando el
    ejército necesitaba moverse en grandes masas, no
    había un reducido espacio para hacerlo, también en
    el intervallum se guardaban los tesoros y botines de las
    batallas. El campamento internamente se hallaba dividido en una
    calle que lo atravesaba transversalmente llamada "Via
    Principalis" o "Cardo Maximus", la función de este camino
    era unir las puertas laterales, por lo que se ubicaba de norte a
    sur. La via principalis, a su vez, se encontraba cruzada
    perpendicularmente por la calle llamada "Decumanus Maximus", esta
    estaba orientada de oeste a este y unía las puertas
    llamadas pretorianas y decumanas, puestas más alejadas del
    enemigo.

    En la zona cercana a la puerta pretoria se hallaban
    instalados en sus carpas los de sangres nobles, los llamados
    "princeps" dentro del régimen ecuestre. Este lugar era el
    centro de atención y la parte más destacada
    del campamento, no solo porque pernoctan allí las clases
    senatoriales y nobles de la republica, sino porque en ese lugar
    esta el foro del campamento, la tesorería del campamento,
    llamada "Cuestorio" porque el capital que allí se
    encontraba era dado por el Cuestor del lugar proveniente de la
    legión. Además también estaba el tribunal,
    centro de los altares a las divinidades romanas dentro del
    campamento. A ambos lados de este núcleo se situaban la
    caballería y las tropas de prestigio; detrás las
    tropas auxiliares y, delante, las tiendas de los tribunos y los
    legados. Esta
    zona comprendía por tanto, no solo la parte de la puerta
    pretoriana, sino que llegaba hasta la via principalis. Por ultimo
    este núcleo cuenta con una calle paralela a la via
    principalis, llamada "Principia Sociurum".

    Finalizando al otro lado de la vía principalis se
    ubican los legionarios y aliados, estos a su vez se encuentran
    divididos por un camino llamado "Via Quintana". Ambos grupos se ubican
    en sus carpas agrupadas en pequeños rectángulos,
    separados por pequeñas callejuelas llamadas "Strigae".
    Este tipo de campamento es el general para la republica, por los
    primeros años del imperio por lo general solo se cambio la
    distribución de las tropas, quedando los legionarios y
    auxilias en una zona representada como exterior y los aliados en
    el interior, y no entremezclados como en el descrito
    anteriormente. Además conforme Augusto y sus sucesores
    erigían grandes Limes Romanos, fueron surgiendo nuevos
    campamentos, hechos de ladrillos y materiales muy
    pesados, los que contaban en general con torres y estaban unidos
    a las grandes murallas de defensas que atravesaban el Rin y el
    Danubio, este fue el origen de los futuros castillos medievales.
    Interiormente la distribución de las tropas no
    cambió, pero al erigirse semejantes estructuras si
    se refinaron las tiendas y otros implementos internos.

     

    Mattia Mauro Raffaello Casali Guidugli

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter