- Surgimiento de la ciencia
psicológica. Retos de la complejidad - La psicología como
ciencia - Formación de la
teoría psicológica - Bibliografía
La epistemología o filosofía de
la ciencia, es
la rama de la filosofía que estudia la investigación científica y su
producto: el
conocimiento
científico. La epistemología es por sí
un área imprescindible en el saber, tanto conceptual como
profesional; de ahí la importancia de averiguar qué
es y para qué sirve o podría servir.
Hace apenas medio siglo la epistemología era
sólo un capítulo de la teoría del
conocimiento o gnoseología; presentándose solo
problemas
tales como la naturaleza del
conocimiento
científico, en contraposición al vulgar, la
clasificación de la ciencia, y el
problema de la inducción a partir de la observación, siendo esto lo que se puede
llamar el periodo clásico de la epistemología.
Hasta ese momento no se habían detectado problemas tales
como los semánticos, los ontológicos,
axiológicos, éticos y de otro tipo que se presentan
en el curso de una investigación científica.
Según bibliografía consultada
acerca de esta temática, vista desde la psicología,
la epistemología puede entenderse en dos sentidos: a) como
una reflexión sobre el
conocimiento que adquiere el psicólogo sobre un
objeto, y b) como una reflexión sobre el conocimiento que
adquiere el psicólogo sobre un sujeto capaz de
representarse los objetos. En el primer sentido la
epistemología se limita a describir hechos, mientras que
en el segundo da un paso más: busca interpretarlos. La
epistemología debe centrarse en el estudio de los métodos
que usa la psicología, y en la forma en la cual intenta
explicar las conductas.
Es importante destacar que la inclusión de la
epistemología en su interrelación con la
psicología es un elemento constatable a partir de la
elaboración de los distintos diseños curriculares
tanto en pregrado como en postgrado (inclúyase doctorados
y maestrías). Referimos esto por el hecho de que priman
los análisis de los tipos anteriormente
mencionados, lo que podría significar un vacío
importante en cuanto a investigaciones
significativas en esta área a pesar de que se le concede
significación a la misma.
1.Surgimiento de
la ciencia psicológica. Retos de la
complejidad.
La Psicología nació en la remota
Antigüedad y durante mucho tiempo se
desarrolló en el seno de la Filosofía. A mediados
del siglo XIX, la psicología se separa como esfera
independiente en virtud de que se introduce en ella la
experimentación. Pero en la actualidad la
delimitación del objeto de estudio de cada una de ellas ha
permitido un mayor y más riguroso control en las
investigaciones y en los campos a trabajar. Esta cuestión
no puede verse como la negación de una ciencia con los
resultados obtenidos por otra sino que es necesaria, hoy
más que nunca la interdisciplinariedad.
La psicología como ciencia que estudia la
subjetividad del hombre se
encuentra unida a muchas ramas del saber humano. Cuestión
esta que se refleja en las principales aristas investigativas
actuales que no ven a la psicología desligada de otras
ciencias,
teniendo puntos de contacto que permiten completar la
visión de los problemas abordados. Tal es el caso de la
pedagogía, la biología, la sociología, la filosofía, las
neurociencias, e incluso la computación; permitiéndonos
constatar la importancia y necesidad de la integración del conocimiento. Esta
integración es posible a través del reconocimiento
de la complejidad de las sociedades y
el mundo en general. La misma solo existe cuando son inseparables
los elementos diferentes que constituyen un todo, (como el
económico, el político, el sociológico, el
psicológico, el afectivo, el mitológico) y que
existe un tejido interdependiente e interactivo entre el objeto
del conocimiento y su contexto, las partes y el todo, el todo y
las partes; por esto, la complejidad es la unión entre la
unidad y la multiplicidad. En síntesis
la complejidad nos lleva a la comprensión de los
diferentes puntos de vista, a superar las visiones unilaterales,
unidimensionales y convergentes.
Los desarrollos propios a nuestra era planetaria, nos
enfrentan cada vez más, y de manera cada vez más
ineluctable a los desafíos de la complejidad y aunque se
ha venido haciendo énfasis sobre esta problemática
"todavía estamos ciegos ante el problema de la complejidad
(…) Solo el pensamiento
complejo nos permitirá civilizar nuestro conocimiento"
1
De manera específica en la ciencia
psicológica lo transdiciplinar puede verse expresado en la
concepción, comprensión y abordaje del sujeto
psicológico real, que se perpetúa día a
día en la interrelación sujeto-sociedad. En
este sentido el sujeto (individual y social) es un importante
momento de integración de las distintas ciencias
sociales, permitiendo un espacio metodológico
común, en tanto en él confluyen lo
psicológico y otras dimensiones sociales del individuo en
su existencia social. Esto evidencia el valor
epistemológico de la categoría sujeto para el
conocimiento de la sociedad.
"En la explicación del sujeto psicológico
real, la psicología necesita de la integración
interdisciplinaria, pues solo en ella podría comprender el
sentido de las manifestaciones sociales del sujeto que, apoyadas
y configuradas en la
personalidad, solo pueden ser aprehendidas en el estudio de
su historia social "
2
2. La
psicología como ciencia, problema
epistemológico.
Uno de los problemas epistemológicos que
aún se refleja en las reflexiones de los investigadores se
refiere a la consideración de la psicología como
ciencia. La concepción de las ciencias se ha visto
identificada con el paradigma
positivista. En el que se la considera como una construcción teórica cuyo fin es
conceptualizar lo empírico.
Partiendo de las concepciones desarrolladas por Fernando
González Rey sobre este tema consideramos, en
contraposición con el paradigma positivista, que la
teoría
es una elaboración que le atribuye sentido a lo
empírico, trascendiendo el plano de los hechos y
penetrando en el de sus relaciones. En la concepción
positivista se privilegia el método
como elemento que garantiza captar la realidad de manera pura,
excluyendo toda participación de la subjetividad del
investigador como sujeto del conocimiento. Este elemento si bien
podía ser incorporado en el modelo de las
ciencias puras o naturales, no es pertinente extenderlo a las
ciencias del hombre sobre todo porque las mismas tienen un
carácter histórico, ya que la
acción
intelectual del científico como sujeto del conocimiento
expresa la época en que vive y su posición ante el
mundo por lo que se construye sobre estos elementos
cosmovisivos.
"Representarse la ciencia como algo puro, es negar su
carácter de proceso
objetivo que,
en calidad de tal,
se regula por la interacción activa del hombre, portador de
su condición histórica, con un objeto igualmente
histórico y cambiante, integrado de forma
simultánea en múltiples sistemas de
relaciones de la realidad. La condición histórica
del sujeto cognoscente no es una limitante para el conocimiento,
sino una condición de este. " 3
Lo anteriormente expuesto se enlaza con la
cuestión de la objetividad del conocimiento
científico. En contraste con la posición
positivista que define la objetividad por la capacidad del
método
científico para descubrir la realidad de forma pura:
"La objetividad se apoya en mi capacidad como sujeto cognoscente,
desde una forma de organización, que es la ciencia, para que
los resultados reportados por los instrumentos puedan encontrar
una representación conceptual que tenga valor explicativo
sobre el comportamiento
del objeto"5
Una cuestión que distingue a las ciencia sociales
es que no puede escapar a la intencionalidad como
característica distintiva del hombre y de la sociedad. El
objeto de las mismas es a la vez un sujeto productor de leyes, es decir,
las regularidades sociales e individuales operan a través
de un sujeto activo cuya acción modifica de forma
intencional o no dichas leyes. Estas ciencias por tanto deben
tener una permanente interpretación y tener en cuenta la
necesidad de la interrelación de lo objetivo y lo
subjetivo como cuestión que garantice progresivamente la
objetividad del conocimiento científico.
"En las ciencias sociales y la psicología, el
momento objetivo del conocimiento está indisolublemente
relacionado con el subjetivo, pues no existen recursos
metodológicos reales para lograr los niveles relativos de
separación que ambos momentos han tenido en las ciencias
naturales. Por el tipo de conocimientos, los aspectos
ideológicos, cosmovisivos y filosóficos, forman
parte necesaria de la construcción de lo particular."
4
El avance en el conocimiento del objeto de la
psicología implica en cualesquiera de sus niveles, de
manera explícita o implícita elementos
cosmovisivos, ideológicos, filosóficos como
elementos conceptuales del sujeto cognoscente. Según
Fernando González Rey la psicología buscó la
precisión en los métodos simplificando la
complejidad de su objeto, desglozándolo en
categorías que permitieron su descripción y cuantificación. Esta
tendencia ha traído consigo una acumulación de
datos
provenientes de la investigación y de resultados
contradictorios, lo que se relaciona con un insuficiente desarrollo de
lo explicativo quedando espacios aún no
conceptualizados.
3.
Formación de la teoría
psicológica
Existen factores que han atentado en la
psicología contra la elaboración del aparato
metodológico. Entre estos podemos mencionar la
imposibilidad de demostrar la superioridad epistemológica
de un modelo sobre el otro, al encontrarse todos avalados en la
práctica
profesional; la inexistencia de un marco
teórico de referencia común que permita
organizar el conocimiento adquirido en la investigación
científica y la diversidad de exigencias
metodológicas dentro de la misma ciencia.
Otras de las cuestiones relativas al conocimiento
psicológico de validez desde el punto de vista
epistemológico es la relación entre lo
empírico y lo teórico .
Nuestra concepción se opone al punto de vista
positivista que privilegia lo empírico como momento y
espacio de la verdad científica cuya máxima
expresión es el dato, mientras que lo teórico solo
lo conceptualiza y organiza, por lo que en este nivel no se
construyen conocimientos. Consideramos que el dato solo tiene
sentido dentro de un marco teórico y que lo teórico
y lo empírico son dos momentos del conocimiento humano
indisolublemente ligados que tienen como base la teoría
general en que se inscriben.
No obstante privilegiamos el momento de la
construcción teórica que posibilita construir y
explicar el objeto, trascendiendo el instante descriptivo que
aunque necesario no agota el sentido de la ciencia.
En la psicología para afirmar el carácter
científico de lo teórico sobre lo empírico
se ha abogado por la capacidad de predicción. Sin embargo
la cientificidad de la teoría no está dada por su
capacidad de predecir conductas puntuales para el universo de
individuos; pues la determinación de su ocurrencia no
tiene lugar en este nivel.
El momento inicial en la formación de una
teoría psicológica general debe partir de la
necesaria construcción de una teoría de la personalidad
que facilite su desarrollo. Esta categoría
psicológica ha sido devaluada en sus potencialidades
epistemológicas por dos factores: estar estrechamente
vinculada con escuelas tradicionales de la psicología que
a pesar de tener una práctica clínica,
carecían de un marco metodológico sólido
orientado a la investigación y por la presencia de
sistemas teóricos cerrados.
Se plantea la pertinencia de desarrollar una metodología de efectividad en el
comportamiento del objeto partiendo de una teoría que
así lo permita.
Dicha metodología permitiría captar la
vida psicológica en su integridad. Partiendo de este
propósito la personalidad, como objeto de estudio de la
psicología, no se puede ver de manera estática o
rígida, sino que es necesario tener una
representación dinámica que nos permita comprenderla en su
totalidad. Refiriéndonos a dicha categoría desde su
carácter dinámico, urge encontrar una
definición precisa en el planteamiento metodológico
para su estudio.
En este sentido la relación entre lo
teórico y lo metodológico es necesario abordarla
desde la integración configuracional en el comportamiento
del sujeto, considerándola como la alternativa
metodológica para el estudio de la personalidad. Esto
significa que los elementos psicológicos no tiene un valor
por sí solos, sino en su integración en
configuraciones de la personalidad.
Relacionado con lo anterior, privilegiamos entonces el
estatus epistemológico de lo individual en la
especificidad de su condición, para el estudio de la
personalidad, asumiéndolo en su complejidad y
contradicciones y sin concluirlo por ser portador de
particularidades que solo adquieren sentido en sus marcos y que
podrían adquirir significación ulterior para la
teoría. Esto exige una construcción única
por parte del investigador.
La interpretación es, por tanto, un recurso
metodológico esencial que permite conocer la
configuración irrepetible de la personalidad en un caso
concreto, como
organización específica que no se agota en un caso
individual.
Se requiere además para el estudio
psicológico una pluralidad de técnicas
que impliquen de diferentes maneras al sujeto de forma tal que
este se exprese tanto en lo afectivo como en lo cognitivo. Esta
cuestión nos ubica en un problema metodológico
específico de la ciencia psicológica por el doble
carácter del investigador en relación al objeto que
estudia.
"Primero, no hay instrumento para estudiar al hombre
como personalidad, que funcione fuera de un sistema de
comunicación y, (….) el material
relevante que el instrumento nos brinda, lo sintetiza el hombre a
través de su interpretación.
Segundo, el investigador es sujeto del proceso del
conocimiento, pero simultáneamente es objeto, pues su
propia naturaleza es su objeto de estudio. "6
Se plantea la necesidad teórica,
metodológica y práctica de un enfoque personalizado
que se centre en la persona y trate
de descubrir cómo la personalidad se implica en todos los
procesos en
los que el individuo participa. En el mismo se debe analizar lo
social desde el sentido que adquiere para el desarrollo
individual, y no desde una comprensión estática,
noción que contribuye a la cosificación de lo
social.
Hasta aquí hemos hecho referencia a algunos
problemas epistemológicos de la ciencia psicológica
que poseen actualidad e importancia para el desarrollo de esta
ciencia. Esto nos ofrece una visión, aunque no acabada, de
aquellas cuestiones que científicos y profesionales de la
psicología tienen en su punto de mira.
1 Viegas Fernandes, Joao: "La
educación que necesitamos", Revista Temas, #
31, La Habana, octubre-diciembre del 2002.
2 Gónzalez Rey, Fernando: Problemas
epistemológicos de la Psicología, Editorial
Academia, La Habana, 1996.
www.iin.oea.org/Alerta-Bibliografica/sdi-Family.htm- www.cienciapolitica.fsoc.uba.ar
- www.cuv.edu
- www.capacytc.edu.ar
- www.eurosur.org
- www.psicologia.ufc.br
http://members.fortunecity.es/robertexto/archivo11/epistem_de_psico.htm
Citas:
1 Viegas Fernandes, Joao: "La educación que necesitamos", Revista
Temas, # 31, La Habana, octubre-diciembre del 2002, pp.
4-17
2 Gónzalez Rey, Fernando: Problemas
epistemológicos de la Psicología, Editorial
Academia, La Habana, 1996, p. 97
- Idem p.5
- Idem p. 9
- Idem p.12
- Idem pp. 34-35
Autoras:
Lic. en Psicología
Malena Abreu Sintes
Lic. en Psicología
Lisneth Rodríguez
Hernández