Monografias.com > Educación
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Investigación, Universidades, Postgrados y Sociedad




Enviado por luisbo



    1. Resumen
    2. El
      Génesis
    3. Conocimiento, Poder y Estado en
      el tránsito epocal
    4. Siglo XX
    5. Reforma del Estado en
      Venezuela
    6. Ciencia, Tecnología y
      Educación en la mira de la acción
      reformista
    7. La Investigación
      Universitaria
    8. La Gerencia de la
      Investigación Universitaria
    9. La Dimensión
      comparativa
    10. Una breve
      conclusión
    11. Lista de
      Referencias
       

    Para ver
    el gráfico seleccione la opción "Descargar" del
    menú superior

    RESUMEN

    La actividad científica es un proceso social
    resultante de realidades en una dinámica de constantes cambios. Por lo
    tanto no ajena a las injusticias y miserias evidentes en otros
    espacios; sólo que en ella se presentan de forma
    más refinada. En este trabajo, desde
    la perspectiva de procesos
    convergentes, se reflexiona sobre los retos que se le imponen a
    la educación
    superior, en cuanto a la formación para la investigación, producto de
    las enormes expectativas sociales derivadas de las
    dicotomías propias de la sociedad
    globalizada.

    Investigación, Universidad,
    Postgrados y Sociedad

    El
    Génesis

    Desde los inicios de la civilización humana, la
    investigación es una actividad que ha contado con adeptos
    y detractores. Fundamentada en la curiosidad, no es atrevido
    señalar que, literariamente hablando, Adán fue el
    primer hombre de
    ciencia y la
    reproducción de la especie, el dilema
    inicial; cuya resolución ocasionó las
    simpatías del maligno y la furia del creador.

    El hombre, al asumir el riesgo de buscar
    su propio destino, escogió un modo de vida y desarrollo,
    que le ha caracterizado hasta el presente. Selección
    que desde el comienzo, como lo refleja el mítico incidente
    bíblico, ha molestado a los instalados en el poder, porque
    la investigación conduce al conocimiento
    que es poder y, por ende se convierte en una actividad
    revolucionaria.

    Inicialmente de forma empírica, el género
    humano se valió de la investigación para la
    resolución de problemas,
    estrechamente vinculados a la realidad en la cual vivía.
    Los vacíos, como problemas no resueltos, fueron ocupados
    durante siglos por la superchería, las religiones y hasta por el
    sincretismo religioso. En la medida que las incógnitas se
    iban despejando una a una, disminuía el poder omnipotente
    de las supersticiones, como propuestas que conducían al
    colectivo social.

    La aparición y generalización del Estado
    reavivó la dicotomía entre conocimiento e
    ignorancia. Claro está, es más fácil
    conducir a colectivos con la expectativa de poderes extra
    terrenales, que a individuos y grupos
    sociales conscientes de sus limitaciones pero, también
    de sus inmensas posibilidades, a partir del conocimiento de la
    realidad.

    Conocimiento,
    Poder y Estado en el tránsito epocal
    .

    En la ciencia, el
    paradigma del
    trabajo individual se impuso durante centurias, como mecanismo
    para privilegiar el control social
    por parte de quienes detentaban el poder y, como vía para
    acceder al prestigio social por parte de los
    investigadores.

    En la medida que era más evidente la necesidad
    del conocimiento, este adquiría la connotación de
    poder para garantizar la supremacía de unos pocos, sobre
    colectivos sociales. Esto es ratificado por Popkewitz (1994),
    para quien, en el presente, todo conocimiento innovador es
    reflejo y expresión de las nuevas manifestaciones del
    poder, en una sociedad global. La anarquía de la naturaleza y
    la necesidad de su sujeción a los intereses del hombre,
    justificó que un modelo de
    racionalidad se impusiera en el corpus
    científico.

    En consecuencia, el gobierno humano
    más allá de los linderos atribuidos a los dioses,
    evidenció sus limitaciones para imponer un modelo societal
    de explotación del hombre por el hombre,
    derivadas de la carencia de instituciones
    y, se apresuró a construirlas. La Universidad y las
    comunidades científicas constituyen reflejo del desarrollo
    contradictorio de este proceso. La Academia de Platón
    (Asimov,1992) y
    las Universidades Chinas (Padrón, correo-e, Agosto 12 de
    1998) constituyen los antecedentes más remotos de la
    Universidad. Por su parte, la Sociedad de los Secretos de
    la Naturaleza
    , fundada por Giambattista della Porta
    (1560), es la concreción del proceso iniciado con la
    invención de la imprenta
    (1454) y el episodio Tartaglia – Cardano (1535);
    configurándose como el antecesor más remoto de las
    comunidades científicas. Ante la incertidumbre para el
    status quo al cual pertenecía, el poder
    inquisitorial clausuró la instancia fundada por el
    estudioso italiano.

    Como en el pasado, progresivamente las ideas de los
    instalados en el poder permearon de forma casi imperceptible a
    las comunidades científicas y las universidades. Esto se
    reflejó, en la promoción de la investigación como
    una actividad extremadamente difícil, con protocolos
    rígidos y prácticamente inmanejables para el
    común, donde quien domine sus artes, deja de ser el
    iluminado del pasado, para convertirse en uno de los poderosos
    del presente.

    Posteriormente, la estratificación de la
    actividad y especialmente de su conducción, llevó
    al establecimiento de categorías de investigadores y
    jerarquías entre los logos que conducen la actividad. A
    ello contribuye el positivismo
    clásico.

    El efecto revolucionario del siglo de las luces, junto
    al trabajo de René Descartes, con
    su Discurso del Método y, Bacon con el
    Nuevo Órgano, sientan las bases de la
    racionalidad modernista, para la cual el hombre-sujeto del
    presente, se convierte en objeto del mañana.
    Complementariamente, como lo destaca Damiani (1997), en el
    setecientos se desarrollan las Ciencias
    Sociales.

    Siglo
    XX

    Durante el siglo XX se produce el más acelerado
    incremento de la actividad científica y tecnológica
    de la historia
    humana, que coincide con la masificación de la educación
    universitaria como uno de las aspiraciones de la comunidad de
    naciones.

    Adorno, Horkheimer y la escuela de
    Francfurt, marcan el inicio del ciclo de mayores críticas
    a la occidentalización de la racionalidad modernista, que
    alcanza su cenit en el Mayo Francés y, su
    concreción como discurso
    paradigmático con los Posmodernistas, posteriores al
    desmantelamiento de la experiencia del socialismo
    autoritario.

    Posmodernidad

    Es necesario ubicar el discurso posmodernista en su
    justa dimensión y contexto. En consecuencia urge precisar,
    como lo afirmo en un trabajo anterior (Bonilla, 1999), que la
    modernidad, es el
    resultado de un desarrollo
    económico del capital,
    denominado globalización.

    La modernidad generó dos grandes variantes
    discursivas y políticas:
    el capitalismo y
    el socialismo. Cada uno de ellos logra articularse en modelos
    sociales concretos. Sin embargo, el desmantelamiento del
    socialismo en un solo país, creó una especie de
    vacío referencial, que ha venido siendo ocupado por el
    discurso denominado genéricamente como posmodernista. Este
    no es una construcción teórica permanente,
    sino transitoria; mientras el capital retoma los espacios otrora
    ocupados por los herederos Estalinistas del
    bolchevismo.

    En consecuencia, el discurso posmodernista aparece
    cumpliendo dos funciones. La
    primera reagrupar las fuerzas socialistas mundiales en un teorema
    común que supere la dispersión post-caída
    del muro y, segundo asegurar que el capitalismo ocupe los
    espacios ocupados anteriormente por el modelo de Estado Obrero
    Burocrático.

    Así, el discurso y propuestas posmodernistas
    adquieren dialécticamente, la condición de
    propuesta contradictoria, que contiene en sí mismo la
    negación de su contrario y, tiene a la vez la posibilidad
    de propiciar el cambio que
    pretende negar.

    Una aspiración presente en todo el discurso de la
    posmodernidad,
    deriva del ideal de un progreso humano y social integrador y
    holístico, que contribuya a superar los nudos
    problemáticos derivados de un Estado, cada vez más
    ineficaz e ilegítimo.

    Reforma del Estado
    en Venezuela

    A finales de la década de los setenta es
    inocultable la crisis de
    eficacia y
    legitimidad del Estado nacional, dentro de una dinámica
    global.

    Como resultado, a comienzos de los ochenta, el Ejecutivo
    Nacional de Venezuela crea
    la Comisión Presidencial para la Reforma del Estado
    (COPRE). La decisión de iniciar un proceso de reformas
    progresivas, tropieza con la falta de voluntad política de los
    principales partidos
    políticos y los burócratas, reflejos del
    clientelismo en la
    administración pública y, el desprecio por la
    noción de ciudadanía plena.

    Para la COPRE (1994) la Reforma del Estado persigue
    alcanzar un sistema de
    gobierno realmente pluralista y en el cual la toma de
    decisiones se puedan realizar mediante mecanismos y estructuras
    flexibles, que descentralicen y democraticen la gestión
    gubernamental, sin quebrar el hilo constitucional; garantizando a
    la par, gobernabilidad.

    Este proceso tiene su expresión en el campo de la
    ciencia y la tecnología,
    así como en el educativo.

    Ciencia,
    Tecnología y Educación en la mira
    de la acción
    reformista

    Para Machado (COPRE, 1992) el nudo problemático
    del área científica y tecnológica,
    está localizado en los recursos
    humanos. Una de las alternativas formuladas por la COPRE
    (1992) se centra en la necesidad de estructurar un Ministerio de
    Ciencia y
    Tecnología, que integre los subsistemas que forman
    parte del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, entre
    los cuales destacan: (a) Investigación Científica;
    (b)Investigación y desarrollo tecnológico; (c)
    Enlace investigación – producción; (d)Planificación; (e)Enlace Educación
    Investigación; (f) Coordinación; (g) Reglamentación y;
    (h) Divulgación.

    Articulación que para Yero (1992,p.95)
    procuraría "que el sistema de investigación
    científica evolucione hacia un arreglo institucional
    flexible, diversificado, descentralizado, capaz de ser orientado
    a los problemas efectivos del país, coherente con los
    procesos de generación de conocimiento, compatible con las
    transformaciones" que estaban ocurriendo en el
    país.

    La inestabilidad política impidió
    comprobar la factibilidad de
    esta propuesta.

    En el presente, el gobierno reformista de Hugo Rafael
    Chávez Frías (1999), parece haber retomado la senda
    abandonada a comienzos de la década y anuncia la
    creación del flamante Ministerio de Ciencia, el cual tiene
    como primer responsable a un joven gerente, quien
    hasta la fecha había ocupado el cargo de Vice- Ministro de
    Infraestructura.

    El desarrollo futuro inmediato, permitirá conocer
    en detalle la orientación de la política en ciencia
    y tecnología de este nuevo Ministerio y, del Estado
    venezolano para la prospectiva.

    Por su parte, la Conferencia
    Mundial sobre la Educación Superior (CMES,1998), como
    actividad culminante de casi una década de discusiones,
    reflexiones y debates nacionales, regionales y continentales,
    destacó la complejidad de las instituciones de
    Educación Superior, al ser estas sistemas
    complejos en permanente interacción con el entorno local, nacional
    e internacional.

    El debate
    permitió precisar las paradojas tanto de la sociedad, como
    de las instituciones de educación superior en el presente.
    Las primeras caracterizadas por la
    globalización, se vinculan a la dinámica
    universitaria y se reflejan en: (a)el hecho que la exigencia de
    actualización de conocimientos para acceder a un empleo ha
    incrementado la demanda de la
    educación superior, mientras que como resultado de la
    crisis económica se está produciendo una
    disminución de los recursos
    asignados a las casas de estudios superiores; (b)la
    masificación de la educación superior pareciera
    contradictoriamente, generar una intensificación de los
    mecanismos de exclusión; (c)que a pesar que cada vez son
    mayores las exigencias de estudios superiores para impulsar el
    desarrollo, sin embargo es cada vez más creciente el
    número de desempleados con título universitario;
    (d) la crisis de eficacia de los Estados nacionales para asumir
    la mutación de las universidades; (e) la creciente
    exigencia a las universidades para que se abran a las nuevas
    realidades, internacionalizando su acción,
    acompañada de la necesidad de contextuar estos
    conocimientos y tecnologías internacionales a las
    realidades locales; (f)que a pesar de que las Nuevas
    Tecnologías de la Información y la
    Comunicación (NTIC) se han desarrollado en gran parte
    a partir de la investigación en las universidades, su uso
    en el campo de la educación es limitado, (g) la realidad
    determinada por la circunstancia que, mientras gran parte de los
    profesores universitarios ostentan la condición de
    investigadores, los resultados de investigaciones
    contextualizadas y pertinentes a la realidad local cada vez son
    menores, porcentualmente agregaría.

    Esto adquiere una connotación especial, en
    razón que "en nuestros países, las universidades
    constituyen la columna vertebral del sistema
    científico-tecnológico". (Tünnermann, 1997,
    p.117).

    La
    Investigación Universitaria

    La investigación en la universidad es una
    actividad inherente al pregrado y el postgrado, que se orienta de
    acuerdo a las políticas de las Subdirecciones, Decanatos
    y/o Departamentos de Investigación y Postgrado. Por lo
    general, se establecen coordinaciones o departamentos tanto para
    el postgrado, como para la investigación, los cuales al
    menos teóricamente debieran ser
    complementarios.

    Desde el punto de vista ideal, la actividad de
    investigación debe fundamentar la selección de los
    postgrados que se dictan en las casas de estudios superiores;
    apoyar de forma continua y transversal la escolaridad y nutrir
    los procesos de elaboración de tesinas, trabajos y
    tesis de
    grado. Sin embargo, la realidad tiende a distanciarse de los
    enunciados ideales.

    Una actividad de investigación institucional que
    apoye y sirva de base para los postgrados debería tener
    tantas líneas, núcleos y centros de investigaciones
    como la realidad social o la necesidad de construcción del
    conocimiento, lo demanden. En contraste, los postgrados tienden a
    superar las líneas de investigación.

    Esto se debe a múltiples factores, entre los
    cuales destacan:

    1. Una concepción elitesca de la
      investigación, que se refleja en estructuras
      rígidas para la investigación, en gran parte
      unipersonales.
    2. Líneas de investigación decretadas, que
      tienden a una actividad sui generis, caracterizada por
      la ausencia de proyectos de
      investigación acreditados, escasa o nula
      publicación de reflexiones o resultados de
      investigación, que convierten su labor en un
      misterio que contribuye a mitificar la
      investigación como una actividad inescrutable, cuando lo
      que sucede en realidad es que se hace poca o ninguna labor al
      respecto.
    3. Miembros de las líneas de investigación
      desvinculados de la docencia o
      del proceso tutorial en el postgrado, generalmente derivados de
      problemas administrativos o de desarrollo
      organizacional.
    4. Una actividad de investigación concentrada en
      las exigencias académicas (Tesinas, Trabajo y Tesis de
      Grado) o de ascenso académico (Trabajo de
      Ascenso).
    5. Limitado acceso a las fuentes de
      financiamiento, lo cual contribuye a crear la falsa
      imagen de
      actividad muy complicada, de la investigación
      universitaria.
    6. Escasa articulación entre las líneas y
      núcleos de investigación y las instancias que le
      corresponde la toma de decisiones, fundamentalmente en los
      procesos de reforma del Estado.
    7. Selección muchas veces caprichosa de los temas
      de investigación, de los cuales deriva un limitado
      impacto social.

    En el caso de la investigación inherente a los
    Postgrados el problema se profundiza. Esto se debe en gran medida
    a la carencia de unidad de criterios en torno a las
    funciones de la formación post-profesional del Postgrado
    (Especialización, Maestría y Doctorados) que se
    evidencia en: (a)Un curriculum
    cerrado, (b) unas actividades curriculares desvinculadas de
    procesos investigativos transversales, los cuales son sustituidos
    por pequeñas indagaciones, (c)docentes que
    facilitan las cátedras, que no están inscritos en
    una línea de investigación con lo que ello implica:
    ser parte de una investigación general, desarrollar
    investigaciones con resultados parciales a través del
    año; escribir para publicar resultados que no tienen
    necesariamente que ser grandes teoremas. Esto se agrava, cuando
    el requisito real para dictar una cátedra en el Postgrado
    se limita a poseer el título del nivel donde va a impartir
    clase y haber
    realizado una investigación, que por lo general pasa a ser
    la que ejecutó para la elaboración de su Trabajo (o
    Tesis) de Grado, que muchas veces sirve además, como
    trabajo de ascenso.

    La Gerencia de la
    Investigación Universitaria

    La conducción de la investigación en
    general y, la inherentes a las universidades en mayor medida
    tienen unas particularidades que les diferencian de los restantes
    procesos de toma de decisiones que, aún no han sido
    teorizados suficientemente. Sin embargo, es necesario precisar el
    esfuerzo que en este sentido ha venido adelantando el Convenio
    Andrés Bello, a través de los Ministerios de
    Ciencia de los distintos países del área. Como
    reflejo de este proceso, La Secretaría Ejecutiva del
    Convenio(SECAB) co edito con el CONICIT de Venezuela, una
    propuesta de Gerencia de la Investigación que persigue
    orientar la política gerencial en el sector.

    Para SECAB-CONICIT, la Gerencia de la
    Investigación aparece como un proceso que tiene su punto
    de partida en el Sistema nacional de Innovación, en el cual la inteligencia
    tecnoeconómica, la prospectiva y la planificación
    estratégica impacten positivamente la gestión
    de calidad de la
    actividad investigativa. A criterio de CONICIT-SECAB, la calidad
    es una aspiración que debe generalizarse para los
    organismos públicos, que se reflejará en la
    automatización y simulación
    de procesos, comercialización, mercadeo y
    transferencia de resultados. Para ello, desarrollan escenarios de
    vínculo entre legislación y política, para
    la gerencia de proyectos de
    investigación, los costos y presupuestos
    de estos y, la protección legal de los resultados y su
    desarrollo.

    Sin embargo, la adscripción al paradigma
    neoliberal para la gerencia de la investigación, deriva en
    limitaciones para que la actividad se oriente en función de
    los actores sociales. Las denominadas exigencias del mercado reflejan
    la esencia inhumana, de lo que Ernest Mandel denominó el
    desarrollo tardío del capitalismo.

    Pero, el enfoque gerencial constituye una evolución importante en la actividad
    investigativa, a través del cuál los paradigmas del
    trabajo de investigación en redes pueden posesionarse en
    las comunidades científicas y académicas. Esto no
    es el resultado de una simple sumatoria, sino que puede
    constituir la salida ideal a la contradicción entre las
    concepciones elitescas y, las democráticas, flexibles y
    horizontales de trabajo cooperativo.

    La concepción del trabajo en redes horizontales,
    desde el punto de vista teórico, tiende a propiciar una
    mejor articulación entre la especialización,
    maestría y doctorado con la investigación inherente
    a los postgrados, al quebrar las falsas divisiones
    burocráticas entre una escolaridad limitada a las unidades
    temáticas y una investigación en contravía a
    la formación de los posgraduados.

    La
    Dimensión comparativa

    Las fronteras nacionales, como expresión de
    sociedades
    encerradas en si mismas, no constituyen en el presente límites
    reales a la cultura y la
    identidad. La
    globalización, constituye un nivel del desarrollo del
    capitalismo a escala
    planetaria, en el cual el capital realmente deja de pertenecer a
    un país en especial, para asumir nuevas formas de organización, entre ellas la banca universal,
    los organismos multilaterales de financiamiento
    y los fondos mundiales de préstamo a los
    países.

    Esto trae como consecuencia desregulación de las
    relaciones internacionales hacia nuevas formas de
    concreción, una flexibilización de las
    legislaciones nacionales y la normalización de los procesos
    administrativos y los protocolos de las distintas
    disciplinas. Dentro de estos últimos procesos la
    indización de los términos educativos, adquiere una
    especial importancia.

    Sin embargo, en medio de la tendencia a la uniformidad
    se desarrollan procesos duales, de contradicción y
    complementariedad, como son las integraciones subregionales y
    regionales. En el caso de América
    Latina, la Comunidad Andina (CA), el Mercado del Sur
    (MERCOSUR), el
    Tratado de San José, el Convenio Andrés
    Bello (CAB) y el Tratado de Libre
    Comercio (TLC),
    constituyen expresiones desiguales y combinadas de una misma
    dinámica.

    La identidad ciudadana busca concreciones regionales que
    van generando una interculturalidad, que permita conducir a
    bloques sociales conformados por naciones, al encuentro con la
    sociedad global. Pero, estos mismos procesos colocan en evidencia
    similitudes y diferencias con referentes externos.

    En estos contextos, la investigación comparada y
    los estudios comparativos, recuperan una importancia de primer
    orden para el real establecimiento del estado del arte educativo y
    para prever políticas para la prospectiva.

    En consecuencia, instancias supranacionales de
    conducción social como la UNESCO, hacen énfasis en
    la necesidad de ir alcanzando conclusiones nacionales y
    regionales, previas al consenso mundial en un área, como
    sucedió con la Conferencia Mundial de Educación
    Superior. Precisamente la comparación entre las realidades
    nacionales y regionales, con respecto a las tendencias mundiales
    y el establecimiento de la interculturalidad, hace viable la
    implantación de políticas macros, en las
    micro realidades nacionales.

    Por ello, la investigación, la gerencia de la
    investigación universitaria y la dinámica
    académica, deberán ser analizadas en el futuro
    inmediato, de acuerdo a referentes externos, como corresponde a
    una sociedad globalizada.

    Una breve
    conclusión

    La realidad social del presente demanda a la
    investigación universitaria, un rol más
    protagónico en la resolución de los problemas que
    afectan a las grandes mayorías y, la búsqueda de
    una creatividad
    intelectual que permita a la sociedad Latinoamericana acceder al
    desarrollo societal propio de los países del primer mundo,
    con el humanismo de
    una nueva racionalidad holística.

    Esta afirmación coincide plenamente con lo
    expresado por González (1998) en torno a la
    concepción abierta de las ciencias
    sociales en América
    Latina, la conciencia sobre
    su particularidad y las enormes posibilidades de
    construcción de una visión compartida. Reto que
    para López (1999) impone redimensionar las ciencias
    sociales.

    Lista de
    Referencias

    • Adorno, T. W. y Horkheimer, M. (1997).
      Dialéctica de la Ilustración. Fragmentos
      filosóficos
      . Madrid:
      Ediciones Trotta.
    • Asimov, Isaac (1992). La historia de la ciencia y
      la tecnología al ritmo de los descubrimientos.

      Barcelona: Ediciones Ariel.
    • Bonilla, L. (1999) La Línea de
      Investigación
      . Trabajo no publicado. Instituto
      Pedagógico Rural Gervasio Rubio (IPRGR –
      UPEL)
    • CONICIT – SECAB (1994). Gerencia en Ciencia y
      Tecnología
      . Tomos 1 al 16. Caracas/Bogotá:
      Editores: Campo & Bernal.
    • Damiani, L.F. (1997). Epistemología y
      ciencia en la modernidad. El traslado de la racionalidad de las
      ciencias físico-naturales a las ciencias sociales
      .
      Caracas: Ediciones de la Biblioteca
      de la Universidad Central de Venezuela. Ediciones FACES –
      UCV.
    • González O., L.J. (1998).Las ciencias
      sociales en América Latina: condiciones y
      particularidades
      . En Villena (Editor) (1998). El desarrollo
      de las Ciencias Sociales en América Latina. Caracas;
      CRESALC/UNESCO y FLACSO.
    • López S., F. (1999) El pensamiento
      social Latinoamericano en el Siglo XX
      . Caracas: Ediciones
      CRESALC/UNESCO.
    • Machado, C. (1992) Ciencia y Tecnología en
      el contexto de la Reforma del Estado
      . En COPRE (1992).
      Ciencia y Tecnología en Venezuela. Caracas: Ediciones
      COPRE.
    • Popkewitz (1994). Sociología
      Política de las Reformas Educativas
      . Madrid:
      Ediciones Morata.
    • Yero, L. (1992) La Gestión de la
      Investigación Científica: ¿Una nueva
      Ilusión?
      . En COPRE (1992). Ciencia y
      Tecnología en Venezuela. Caracas: Ediciones
      COPRE.
    • Tünnermann, C. (1997) La educación
      superior en América Latina y el Caribe en su contexto
      económico, político y social
      . En
      UNESCO-CRESALC. (1997) Hacia una nueva educación
      superior. (pp.99-169). Caracas: Ediciones conjuntas
      UNESCO/CRESALC/ Ministerio de Educación Superior de
      Cuba.
    • UNESCO – Conferencia Mundial de Educación
      Superior (1998). La Educación Superior en el Siglo
      XXI: Visión y Acción
      . Documento de trabajo.
      París: UNESCO.

    Para ver el gráfico seleccione la
    opción "Descargar" del menú superior

    Libro
    Digital

    Ediciones Gato
    Negro

    Caracas
    – Venezuela

    ©
    2004

    Dedico esta publicación digital a
    Ligia

    mi eterna compañera de vida,
    testigo silenciosa de mis combates y luchas

    Ligia milita con la vida. Ella me
    enseñó que el amor, la
    ternura y el proyecto de vida
    familiar sólo son posibles en el marco de la solidaridad y el
    compromiso con los más pobres, es decir, en la lucha por
    un mundo más justo para todos y todas.

    Gracias amor

    Luis Bonilla

    Puede contactar con el autor escribiendo a:

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter