- Trabajar con valores es
complejo, es necesario y es posible - Conceptos
necesarios - Efectos que se pueden provocar al
no tener en cuenta los valores - Bibliografía
consultada
Trabajar con
valores es complejo, es necesario y es
posible.
El tema de los valores se
ha colocado durante los últimos años en el centro
del debate del
pensamiento
social y a partir de su análisis han surgido muchas interrogantes,
algunas no han encontrado respuesta pero hay un aspecto que queda
claro para todos:
Los valores se desarrollan en condiciones muy
complejas.
Los valores son necesarios para producir cambios a favor
del progreso.
Los valores son posibles porque muchos seguimos creyendo
en ellos.
Es cierto que la escasez de
recursos nos pone
en condiciones muy difíciles con el propósito de
formar valores a escala social y
organizacional pero es necesario luchar contra trabas externas e
internas como la única forma de encontrar la
solución a este asunto.
El tema se hace urgente, hay que formar y desarrollar la
capacidad de descubrir desde adentro el bien para el colectivo y
no el individual.
Está claro que esto no es responsabilidad solo de la empresa sino de
cada uno de los elementos que conforman la sociedad, pero
si todos decimos "eso no puedo resolverlo yo solo" entonces
estaremos contribuyendo a perder cosas que aún
están a salvo como son los deseos de una buena parte de la
comunidad de
preservar lo mas auténtico del ser humano: los
valores.
Los valores no son ni pueden ser un simple enunciado;
ellos requieren y tienen un papel especial en el desarrollo de
las acciones
consecuentes con dichos valores.
Hasta hoy la experiencia indica que todos tenemos
enunciados valores organizacionales pero pocos trabajamos con
ellos y por ellos y aún peor una parte importante de los
trabajadores no conocen esos valores.
Al tema de los valores hay que ponerle también ciencia y
estamos hablando de la ética como
ciencia del comportamiento
pero antes de obtener un comportamiento hay que establecer:
Valores: Es el grado de significación positiva
que algo tengo tenga para el hombre y
que una forma de actuar estable en el tiempo.
En las organizaciones,
los valores son importantes fuerzas impulsoras del cómo
hacemos nuestro trabajo.
Normas: Son táctica que facilitan la evaluación
de las actitudes y
comportamientos en correspondencia con los valores
esperados.
El no cumplimiento de las normas que deben
estar en línea directa con ciertos valores esperados,
puede implicar sanciones por parte de quien tiene expectativas en
función
de dichos valores.
Eso no es imposible de obtener, sólo es necesario dar
respuesta a la siguiente pregunta ¿qué fundamentos
básicos de actuación deben servir como normas para
alcanzar nuestros valores tácticos?
Actitudes: Tendencias evaluadoras, ya sean positivas o
negativas, y reflejan cómo nos sentimos con respecto a
algo o a alguien. Asimismo, predicen nuestra tendencia a actuar
de una determinada manera, o sea, a desarrollar una conducta.
Comportamiento (conducta): Acciones concretas derivadas de una
actitud.
VALORES
NORMAS
ACTITUDES
COMPORTAMIENTO
Logramos una nueva forma de desarrollar un trabajo porque nos
dedicamos con entusiasmo a él (conducta), dado que
valoramos positivamente (actitud) que no tenemos barreras
(normas) y esto nos proporciona la posibilidad de poner en
práctica la creatividad
(valor) porque
creemos en lo que hacemos.
Efectos que se pueden
provocar al no tener en cuenta los valores:
- Fracasos en la implantación de la estrategia.
- Conflictos.
- Interacción infructuosa.
- No adaptación de los individuos.
- Fracasos en los procesos de
mejora continua.
Valores tácticos o compartidos: Son los que
deben guiar la conducta cotidiana de todos para realizar
la misión, la
visión y la identidad.
Para llegar a establecerlos hay que trabajar en equipos y
después confrontar:
¿Cuáles son los valores que tiene la
organización?
¿Cuáles valores no que tiene la organización y necesita tener?
¿Cuáles antivalores tiene la organización
(para eliminarlos)?
Hay experiencias que indican que tanto los directivos, como
los expertos como los trabajadores logran hacer esto con
resultados positivos, quedando entre seis y ocho valores donde la
organización debe concentrarse.
Ejemplo: Universidad de La
Habana.
- Compromiso con la patria, la Revolución y el Socialismo.
- Consagración.
- Excelencia.
- Sentido de Pertenencia.
- Integridad.
- Visión de futuro.
- Democracia participativa.
- Cultura humanista y
científico-tecnológica.
Cada uno de esos valores tiene normas para guiar la
actuación, escogemos uno que es muy frecuente en la empresa cubana
que es el sentido de pertenencia: Conocemos y nos identificamos
con la historia y las
mejores tradiciones de la Universidad de La Habana y su papel en
la
educación cubana y nos sentimos orgullosos de formar
parte de ella. Divulgamos sus logros y contribuimos a cuidar y
enriquecer su patrimonio.
Defendemos a la Universidad de la Habana en todos sus
ámbitos y hacemos que la crítica
siempre tenga un carácter constructivo. Somos Caribe y
mantenemos en todas nuestras acciones la cubana que nos
caracteriza.
Como los valores no son piezas sueltas, deben estar insertados
en documento de identidad de la empresa.
La identidad es un documento que recoge las variables
principales de comportamiento de una organización,
así como acontecimientos relevantes de la historia y la
trayectoria de ésta.
Este documento lo elabora el equipo directivo de la
instalación y expertos y responde preguntas como:
- ¿Quiénes son nuestros clientes?
- ¿Dónde están nuestros clientes?
- ¿Qué es lo que le ofrecemos a nuestros
clientes? - ¿Qué deseos satisfacen nuestros
clientes? - ¿Qué deseos del consumidor
aún hoy no satisfacemos? - ¿Qué es lo que nuestra instalación
ofrece a sus clientes de manera diferente a los
competidores? - ¿Qué es lo genuino de nuestra
instalación? - ¿Qué ventajas ofrece la manera en que hacemos
nuestro trabajo? - ¿Qué le ofrecemos a nuestros
trabajadores? - ¿Cuáles son nuestros valores
compartidos? - ¿Qué es lo que debe ser nuestra
organización?.
Cuando tenemos definidos los valores debemos llegar a la
convicción de:
- Es una decisión estratégica a largo
plazo. - Es un factor determinante para agregar valor y definir la
manera de cómo debe vivir la organización. - Requiere voluntad y perseverancia para ponerlos en
acción.
De esta manera valores, objetivos y
realidad estarán en concordancia:
| ESENCIA | DECISIÓN_ACCIÓN | EJEMPLO |
VALORES | Así es como ha de ser. | Elección estratégica inicial. | ¡Calidad, |
OBJETIVOS | Esto es lo que vamos a conseguir. | Propósito instrumental | Conseguir cumplir con la normativa de calidad |
REALIDAD | Esto es los que hemos conseguido. | Consecuencia observable al final de la | Emisión de la certificación oficial |
La dirección por valores no es un sustituto de
la dirección por objetivos, sino mas bien un complemento
previo que facilita su puesta en marcha y le da mayor sentido, ya
que los valores pasan a ser factores críticos de
éxitos y alrededor de éstos giran los
objetivos.
Sólo queda enfatizar que:
"En una empresa que
realmente administra por valores no hay más que un jefe:
LOS VALORES DE LA EMPRESA.
Todo se consulta con el nuevo jefe en busca de soluciones:
desde qué proveedor de software conseguir hasta
cómo manejar un conflicto en
una reunión de equipo de trabajo" (Administración por valores. Blanchar y
O´Connor)
Revista Temas #15/1998. p.28-38.
Revista Apuntes (suplemento) 5. 2001. Ediciones
Balcón. Escuela de Altos
Estudios de Hotelería
y Turismo.
¿Qué es la dirección por valores?
(material fotocopiado).
MsC. Irela Barreras Cedeño
Licenciada en la Educación en la
especialidad de Marxismo e
Historia (1989). Master en Educación (2002). Profesora
adjunta de la Universidad de Cienfuegos. Dos diplomados
relacionados con la actividad turística, así como
cursos y post-grados relacionados con la Metodología de la Enseñanza, la Cultura
Política y
la Gestión
Turística.
Ha impartido cursos y conferencias en todos los
subsistemas de la enseñanza turística incluyendo la
superación de directivos así como postgrados de
teoría
de la educación para los profesores de FORMATUR.
Investigadora del tema de valores, ha recibido premios en
eventos por
trabajos relacionados con la temática.
Tiene artículos sobre el mismo publicados en el
Boletín Turístico. Es miembro del grupo de
Dirección por Objetivos del MINTUR y ofrece asesoramiento
a las entidades de ese Ministerio en el territorio.
Actualmente se desempeña como profesora principal
de la disciplina de
Política e Ideología de la Revolución
Cubana de la EHT en Cienfuegos.