ABSTRACT
This article introduces a discovery of a double memory
register in human mind. The second memory register now discovered
is until unknown by science
and has different function of the first one well know by science.
They are not similar at all. That discover is published here
under lights of Epistemology.
Este artigo
contém a comunicação científica da
descoberta de que há um duplo registro de
memória na espécie humana. O segundo registro, ora
comunicado ao meio científico, é desconhecido pela
ciência e difere do que a ciência, a psiquiatria e a
psicanálise conhecem e nominam como memória,
até o presente momento.
Tal conhecido registro é um dos registros de
memória que tem o ser humano, mas o segundo registro que
se distingue completamente do que hoje se conhece como
memória, ainda é ignorado por estas
ciências.
A descoberta aqui publicada o foi à luz da
Epistemologia.
RESUMEN
El artículo contiene la
comunicación científica del descubrimiento de
que hay dos y no solo un registro de memoria en los
humanos.
El nuevo registro es desconocido por la ciencia, la
psiquiatría, el psicoanálisis, y es muy
diferente de lo que estas ciencias
conocen con el nombre de memoria (este es solamente uno de los
registros de memoria en el hombre y ya
se lo conoce bien) hasta nuestros días.
El artículo, como el descubrimiento, se hace
descrito a la luz de la Epistemología.
Este artículo contiene la comunicación del descubrimiento de que hay
dos registros de memoria en los humanos. Como suele suceder en
todo descubrimiento, el artículo se fundamenta en la
Epistemología.
Así, resulta de utilidad precisar
una noción de lo que es Epistemología para hacer
más sencillo un mejor conocimiento
de la información que sigue.
Tal ponencia va también posibilitar que se lo ponga a
prueba, como todo en ciencia, bajo
las directrices epistemológicas de Karl Popper
que voy a exponer.
Para la Epistemología son fundamentales las nociones
filosóficas de lo que es objetividad y subjetividad y, por
tal razón, empiezo mi explicación sobre la
Epistemología con estos dos conceptos fundamentales.
La conceptualización filosófica de las palabras
objetividad y subjetividad fue especialmente trabajada por
Kant, que utiliza
el nombre objetividad para indicar que el conocimiento
científico debe de ser justificable,
independientemente del capricho personal.
Una comunicación, un descubrimiento, son objetivos si
fueran, en principio, puestos a prueba y tuvieran la
comprensión de todos.
Dice Kant: "Si alguna cosa tuviera validez para todos los que
posean la razón, sus fundamentaciones son objetivas y
suficientes". Aplica el nombre "subjetivo" para nuestros
sentimientos de convicción (de muchos grados).
Tales sentimientos suceden, por ejemplo, en acuerdo con las
leyes de la
asociación, añadiendo el filósofo que
"razones objetivas también suelen actuar como causas
subjetivas de juicio, a la medida en que se pueda reflejar sobre
tales razones, convenciéndonos de su carácter racionalmente necesario".
Karl Popper, a su vez, sostiene que las teorías
científicas jamás son enteramente justificables y
ni siquiera verificables pero suelen ser susceptibles de ser
puestas a prueba.
En consecuencia, la objetividad de las teorías
científicas está muy cercanamente relacionada con
la elaboración de hipótesis y enunciaciones
universales.
Sólo cuando determinados acontecimientos se
repiten, de acuerdo con reglas y regularidades, como en el caso
de los experimentos que
se pueden reproducir, suelen las observaciones ser puestas a
prueba -en principio- por cualquiera.
En la teoría
popperiana, llamada "teoría del Método
Deductivo de Prueba", una hipótesis
sólo acepta la prueba experimental – y tan sólo
después de ser formulada. El trabajo del
científico consiste en elaborar teorías y ponerlas
a prueba. Quiere decir "que el paso inicial, el acto de concebir,
generar o inventar, jamás pide análisis lógico y tampoco es
susceptible, lo único que importa es la
justificación de validez (el quid juris?, de Kant)"
(Popper). Sostiene también que no existe cualquier
metodología lógica
para concebir nuevas ideas ya que todo descubrimiento contiene
"un elemento irracional bien como una intuición creativa,
en el sentido que le da Bergson".
Más allá de tal punto, Popper sostiene que no hay
teorías definitivas en ciencia, en lo que está en
acuerdo con Kant, porque el ser en sí mismo, la absoluta
verdad es incognoscible y, por lo tanto el
conocimiento en ciencia es siempre aproximativo y puede ser
cambiado por otro más nuevo.
El error en ciencia es inevitable.
En Psicoanálisis, el desarrollo
científico no es diferente del de las otras ciencias y,
tampoco en este hay desacuerdo con los criterios
filosóficos de Kant y Popper. La realidad que el
psicoanálisis puede conocer es la realidad de las
representaciones psíquicas de la pulsión, pero
jamás de las pulsiones en sí mismas.
Freud habló al respecto que "el objeto interno es
menos incognoscible de que el mundo exterior… al igual que el
mundo físico, el mundo psíquico tampoco necesita
ser en realidad tal como nos parece.
Nos agradará descubrir que la
rectificación de la percepción
interna es menos difícil que la rectificación de la
percepción externa y, que el objeto interno, es menos
incognoscible que el mundo exterior".
"Pero", dice Popper, "toda teoría científica
empírica suele ser presentada de tal modo que todos
aquellos que puedan dominar la técnica adecuada puedan
ponerla a prueba. En caso de que haya rechazo de la
teoría, no es suficiente que el sujeto haga su
refutación sólo por convicción, en lo que
respecta a sus percepciones subjetivas.
Lo que el sujeto debe hacer es formular otra
teoría para contradecir la nuestra, añadiendo
indicaciones para que seamos capaces de ponerla también a
prueba. Si el sujeto deja de proceder así, sólo
resta contestarle que haga un nuevo y más cuidadoso examen
de nuestro
experimento, y que va a repetir más cuidadosamente."
Bajo las luces de la Epistemología, voy, por lo tanto,
presentar mi teoría de que hay dos registros de memoria
muy diferentes uno del otro en los humanos y, a su vez, hacen
posible que quienes puedan dominar la técnica adecuada
puedan poner mi teoría a prueba.
Por razones didácticas voy dividir mi ponencia, a
continuación, en dos capítulos.
CAPITULO 1
Nuestro destino se va construir con el
desarrollo de nuestra ontogénesis, como edificación
psíquica fantasmal que tiene comienzo en el útero,
con impresiones y emociones que
vienen desde el inconsciente de nuestra madre.
El destino se resguarda en las profundidades de nuestra psique,
de tal modo que cada uno de nosotros, dependiendo de como
resuelve o no el complejo de Edipo, determina para el propio
sujeto, sin saber conscientemente, todo el trayecto de
vicisitudes y desvíos que va a recorres por su vida desde
ahora.
Esto no está escrito en los astros, aunque muchas
veces suele ser previsible a la perfección por
astrólogos, cartomantes, videntes paranormales:
pero no porque fuerzas del 'além' o almas de "otro mundo",
cosas que no existen, vengan para ayudar a los maravillosos
videntes. Lo que sucede en estos casos es que ellos tienen la
facultad, aún desconocida por la ciencia en cuanto a la
fisiología, de hacer la lectura
directa del inconsciente (de la persona que los
consulta) por el inconsciente del vidente.
Pero es de conocimiento público y universal que
tales acertadas previsiones sólo dicen para el consultado
lo que va a suceder en su vida y, exactamente son acertadas,
porque jamás pueden cambiar el curso del destino del
sujeto o su historia.
No hay psicoprofilaxis (psicoprofilaxia) para miles de
autoconfiguraciones ontogenéticas de la
psicogénesis de cada uno de nosotros.
Todo va depender, en cada sujeto, de factores
intrínsecos e imponderables de cada niño que llega
al mundo, dependen poco o nada de nuestro DNA, una vez que
gemelos homocigóticos pueden trazar para cada uno destinos
completamente distintos – lo que da una sensación de
culpabilidad a
los padres y a la
familia.
En el punto más grande de mi carrera profesional, en el
año de 1991, he descubierto la "memoria de los Freitas" (y
aquellos que tengan curiosidad sobre por qué que di a tal
memoria el nombre de mi familia, les digo
que fue por un imperativo categórico, extensamente
explicado en mi libro,
véase la bibliografía) y la hice pública en
la tercera edición
de mi libro "Psicofarmacología Aplicada a la
Clínica".
La memoria de los Freitas es un descubrimiento
psicoanalítico y también una expresión de
nuestro destino. Muchas personas pasan toda su vida estrictamente
en sus preceptos y límites,
pero una pequeña parte de los humanos rompe con estos
preceptos y límites, aún así, la influencia
de los preceptos sobre estos transgresores va continuar
implacable por toda su vida.
Aquellos sujetos que viven tan sólo dentro de los
preceptos y límites de la Memoria de
los Freitas son la mayor parte del pueblo, los que tienen poca
inquietud con sus dogmas, los que no sienten la necesidad de
generar y buscar un pensamiento
genuino, innovador o revolucionario, ni bien alcanzan una
diferenciación de sí mismos en relación al
conjunto simbiótico de la horda humana en que viven. Se
comportan en el mundo como rebaño.
Para tales sujetos hay una tesitura de vida ya
determinada, establecida, aprendida y aprehendida en la casa
familiar, en la convivencia social, y, en general, pueden tener
la garantía de una vida más tranquila, estable, lo
que ya esta escrito por aprendizaje en la
parte oculta de la psique. Suelen mantenerse en la mediocridad de
ser y no necesitan transgredir la Memoria de los Freitas.
Esta memoria es la memoria
socio-cultural-familiar-cultural-mitica-inconsciente-familiar-ersonal
del sujeto, toda su mitología, su religión y creencias,
sus ideales dentro de su tradición y su folclore.
Los transgresores no lo hacen por placer y sí por
necesidad (inquietud anímica, sensibilidad supramediana).
En Brasil existe la
conocida historia de la gran compositora Chiquinha Gonzaga, hija
de un militar que le prohibió estudiar piano porque los
músicos y pianistas en su ciudad eran bohemios, gente que
el padre de Chiquinha juzgaba inicua.
Pero su alma, su
creatividad y
su música
reclamaban por crecer y, cada vez, la vida familiar le
parecía más extraña; lo que a su familia le
parecía lo mejor ella lo sentía como
frivolidad.
Su cuerpo y su alma estaban, según su forma de ver, como
una golondrina prisionera en un vivero lujoso. A temprana edad,
poco más de 20 años, al final del siglo XIX,
Chiquinha rompe con su padre (quien jamás la
reconoció nuevamente como hija) y se va a vivir a un
cabaret, donde se estudiaba música y piano, con sus amigos
y afines, sin jamás tener vida promiscua, con muchas
privaciones materiales.
El reconocimiento social llegó en su vejez, cuando
ya era conocida como una de las mayores compositoras de
música clásica brasileña, pero el
reconocimiento más grandioso lo tuvo post-mortem: hasta
hoy Chiquinha Gonzaga es festejada como una de las más
importantes creadoras de música en Brasil. Su familia la
dejó en absoluto abandono hasta el final de su
vida. Curiosamente, no hay brasileño que recuerde de quien
era el padre de Chiquinha, o su madre o sus hermanos o su
familia: ellos están igualmente muertos, pero Chiquinha,
por su creatividad fue inmortalizada.
Cuando se rompe por la izquierda con la memoria de los
Freitas, no hay como volver a sus cánones otra vez. En las
personas en que hay esta ruptura, el sujeto trasgresor tiene que
generar para sí mismo y para el mundo, rediseñar
otros medios y
métodos,
otros paradigmas,
otros ideales que van a ser perseguidos, otra manera que le ayude
a no sucumbir a el caos consecuente al abandono de patrones
socio-cultural-familiares, educativos pre-establecidos en el
transcurso de muchas generaciones, que tienen por objeto
"encuadrar" el rebaño para que se pueda ser posible la
vida en sociedad (la
mediocridad del encuadramiento como rebaño es necesaria,
ya que sin las normas
inconscientes las masas humanas promoverían la barbarie y
la autodestrucción: la memoria de los Freitas es,
pués, una necesidad humana en esta pre-historia del
humanismo en
que vivimos).
Para los sujetos que hacen la ruptura por la izquierda,
el acto de crecer pasa a ser una tarea ardua y compulsiva !ah!
estos príncipes y princesas de la soledad.
El sujeto bien adaptado a la Memoria de los Freitas vive,
generalmente, sin grandes inquietudes en el alma y sus ambiciones
van coincidir con las de su medio socio-cultural, razón
por la que son aceptados y queridos en sus comunidades. Tales
personas suelen enriquecer en dinero,
escalar puestos en la gran empresa, en las
carreras políticas
o religiosas, como pueden -la mayor parte- habitar la población de baja renta, todavía.
Todos estos derroteros de que hablé son los sujetos
comunes del pueblo y en su mayoría son, lo que podemos,
llamar de "personas normales".
Para los que rompen por la izquierda con la memoria de los
Freitas, sucede, inexorablemente, la hostilidad familiar y
social: el sujeto pasa a ser mirado como extraño,
expugnable, extravagante, incluso "loco". Todo este malestar que
molesta a la familia y al medio social hace nacer desde el medio
y desde la familia una reacción de ataque, y el objetivo
(inconsciente) de esta reacción es forzar al sujeto a
volver a los cánones de la Memoria de los Freitas (lo que
es imposible), ya que el trasgresor se pregunta sobre dogmas y
valores
sociales vigentes, lo que amenaza la homeostasis
del rebaño.
Un gran artista o un compositor talentoso va experimentar
extrañeza ante lo que ayer le parecía familiar y va
empezar a preguntar y a cambiar su forma de ver el mundo.
Entonces, hay que pagar el precio por ser
diferente, para que pueda convivir aceptablemente y en
armonía en el medio social que aún le será
hostil.
Por paradójico que parezca, con el pasar de los
años (a veces post-mortem) ganará compensaciones y
reconocimientos, pero generalmente muy tarde en la vida. Ganan
para sí mismos los lujos de una mayor riqueza espiritual,
más allá de dejar un legado más rico para el
edificio de la humanidad.
La memoria de los Freitas es también una fuente de
conocimiento de nuestra pre-historia y, en tal sentido, no puede
ser despreciada. Por ejemplo, el los sueños, en la
regresión hipnótica, en las rememoraciones
verdaderas -aunque explicadas con teorías espurias y
llenas de errores- que suelen aparecer en las denominadas
"terapias-de-vidas-pasadas" (que de nada son útiles
precisamente porque su fundamentación teórica es
bizarra), en gesticulaciones y comportamientos "involuntarios"
(inconscientes) que el sujeto reproduce en su cotidianidad o en
cualquier época de su vida (reacuérdese la Gradiva,
de Jansen, analizada por Freud), o al
hacer movimientos coreográficos con las manos o el cuerpo,
o comportarse con gesticulaciones, temperamento, carácter,
iguales que los de su bisabuelo o bisabuela que jamás
conoció (características muchas veces
atávicas).o una compulsión para una
pseudo-enfermedad en los miembros inferiores que empiezan en una
cierta edad en la vejez, muy frecuente en algunas generaciones de
familias que he acompañado en mi clínica, a las que
hago registro genealógico, de tal forma que el
descendiente remoto, sus hermanos, y otros familiares
congeneracionales dejan de caminar sin patologías o
razón médica detectable:
Es un comportamiento
de completa imitación, algunas veces atávicamente,
de sus ancestros, de modo inexplicable, inconsciente,
predominantemente averbal, hasta por parte de antepasados que el
sujeto siquiera conoció, muy remotos en el tiempo.
Esta transmisión inconsciente de códigos
comportamentales y de destinos fue reconocida por Freud como
fenómeno natural en la psique humana. Dijo Freud en el
Capítulo V de su libro "Esbozo de psicoanálisis",
una de sus últimas obras, que "los sueños traen a
la luz un material oculto, originado no sólo en la vida
adulta de quien sueña, sino también en su infancia
olvidada.
Somos obligados a considerarlos como parte de una herencia arcaica
que un niño trae al mundo, antes de cualquier experiencia
propia, influenciada por las experiencias de sus antepasados.
Hemos descubierto la contrapartida de este material
FILOGENÉTICO (el resaltado es mío) en las leyendas mas
arcaicas y en costumbres que han sido sostenidas por años,
de generación en generación, sin contacto temporal.
De tal manera que los sueños constituyen una fuente de la
pre-historia humana que no se puede
menospreciar".
En tal declaración, Freud reconoció el
fenómeno de la transmisión de códigos
inconscientes
comportamentales transgeneracionales y socio-culturales entre
generaciones que ni siquiera tuvieron contacto temporal, pero
también podemos observar, con igual transparencia, su
error teórico craso, absurdo para los conocimientos de la
ciencia actual. Para Freud, la fijación de la memoria de
costumbres, recuerdos y códigos comportamentales
transmitidos por nuestros antepasados sería
FILOGENÉTICA, lo que significa, repasada de las vivencias
de generaciones antiguas PARA Y POR EL DNA. El padre del
psicoanálisis no estaba sólo cuando pensaba
así, Jung también.
La Ley de la
Herencia de Caracteres Adquiridos de la Teoría de la
Evolución de Jean-Baptiste Lamarck
aún tenía seguidores, lo que incluía la
teoría de la degeneración de Lamarck, de la que
Freíd hizo una defensa en sus obras completas. Freud
siempre fue un adepto de Lamarck y abominaba la Teoría de
la Evolución, de Charles Darwin
(Freíd habla de Darwin de manera elogiosa y respetuosa en
su obra, pero tan solamente con la lucidez de su razón. El
padre de la psicoanálisis habló el nombre de Darwin
muchas veces en el cuerpo de sus obras completas, pero de la
misma manera que los católicos hablan todos los
días de Poncio Pilatos en el CREDO:
el nombre de Darwin está en su obra pero no tiene ninguna
función: no hay una sola interpretación en los casos clínicos
de Freud y tampoco en su océano de introspecciones,
contenido en sus obras completas, que hayan sido intuidos con
matices subjetivos de la teoría darwinista. Tiene una
explicación. La teoría darwinista jamás fue
abrazada por Freud porque supuestamente (hasta hoy) es una
profanación de las escrituras sagradas judaicas, que dicen
que Dios creó a Adán y a Eva en el Paraíso.
Y Freud siempre fue solidario con respecto a las tradiciones
judaicas, tanto en lo que está correcto como en lo que
no.
Hoy, cualquier niño de curso elemental no va a
aceptar explicaciones lamarckistas, ni el mismo Freud las
aceptaría si estuviera vivo hoy.
Es necesario que yo dedique un párrafo
a esto porque desde 1991 vengo experimentado la oposición
en exposiciones verbales de ideas con varios psicoanalistas,
judíos
y no judíos, por mi afirmación de que Freud
abominaba EMOCIONALMENTE de Darwin y mantenía su soporte
teórico en Lamarck para (inconscientemente) dar
protección a la cultura
judía. Incluso ya fue llamado antisemita!
Otros, menos radicales dicen que Freud adoraba a Darwin:
mis preciados lectores, basta sólo con leer a Ernest
Jones, el insuspecto Ernest Jones, en las paginas de mi
bibliografía para hacer callar los insultos que he
recibido hace trece años! Pienso que Freud se hace
inestable cada vez que escucho a un psicoanalista argumentar
tales horrores ortodoxos y dogmáticos en contra de mi
descubrimiento.
La investigación sobre la transmisión
de códigos entre generaciones, comentada por Freud,
jamás tuvo ningún seguimiento (no se habla de eso)
por parte de los psicoanalistas porque muchos son ortodoxos y, lo
que es peor, dogmáticos.
Elegir a Freud para leerlo como la Biblia es un insulto al padre
del psicoanálisis que jamás pidió un
rebaño y tenía horror de fanáticos –
dogmáticos! Ortodoxia psicoanalítica bien como
dogmatismo psicoanalítico = memoria de los Freitas adentro
del propio psicoanálisis. Quién fue más
heterodoxo con sus propias ideas, quien insatisfecho con la
primera teoría creó la segunda, fue Freíd
mismo, y fue él quien me inspiró hacer este
artículo.
Pero no imaginan mis lectores cuanta incomprensión he
recibido! Igualmente, no voy sucumbir al dogma.
Mi teoría suele ser refutada (y espero que lo sea)
más por los criterios de Karl Popper. No con base en la
ortodoxia psicoanalítica, Porque, sin pruebas que la
refuten, estoy convencido de tener la razón.
Por otros caminos, en el vacío teórico dejado por
Freud, los espíritus pasarán a "explicar" tal
"memoria-de-vidas-pasadas" con una teoría absurda. La
teoría de los espíritus es común, hoy, entre
los "terapeutas-de-vidas-pasadas" en todo el mundo, y proliferan
tal como las distintas sectas evangélicas dentro y fuera
de Brasil, haciendo victimas.
Creen estos "terapeutas", todos espiritistas, que en la
configuración de la sección de
"terapia-de-vida-pasada" almas de "otro mundo" bajan en el cuerpo
y el espíritu del paciente, hipnotizado o no, lo que
entonces, puede explicar los recuerdos de épocas remotas,
anteriores al día de nacimiento de los
pacientes.
Tal teoría no necesita refutación, por lo
bizarra. Pero el fenómeno, ya percibido por Freud, de
recuerdos que el sujeto tiene de hechos que son anteriores a su
nacimiento es un hecho de la naturaleza,
sucede y reclama una explicación. Lo que hice al nombrar
(crear) la noción de memoria de los Freitas fue refutar,
de acuerdo con los criterios epistemológicos de
refutación de Karl Popper, las dos teorías
descritas, la de Freud y la de los espíritus, trazando una
nueva teoría contradictoria a aquellas y ofreciendo al
lector medios para refutarla. El concepto y la
constelación de proposiciones que componen la memoria de
los Freitas, todavía, no se
agota acá.
En verdad, frente a este asunto de memoria entre
generaciones no convivientes apelando a la atención pública, pero esto es tan
solamente un tema un tanto periférico de mi
descubrimiento. Otros aspectos más relevantes y más
importantes voy abordar en el Capítulo 2 de este ensayo, para
dar un tiempo para que el lector pueda respirar.
Muy borrosos, he de afirmar que los recuerdos de hechos que pasan
más allá en el tiempo la época del
nacimiento del paciente, por lo que observo en mi clínica,
no se refieren solamente a familiares consanguíneos, lo
que sepulta definitivamente la hipótesis de
transmisión por el DNA. Y tales recuerdos pueden ser
interpretados y decodificados en la configuración del
psicoanálisis. Cuando el psicoanálisis, decodifica
e interpreta la memoria de los Freitas, cambia el destino, y
después de esto, no hay cartomante o vidente paranormal
que pueda hacer previsiones sobre lo que sucederá en el
futuro de un paciente bien analizado.
Otras consecuencias de mi descubrimiento, dichas antes, ya que
cuando publiqué la 3° edición de mi libro
aún no lo había percibido, es que sólo hay
receta de psicoanálisis para aquellos que rompen por la
izquierda con la memoria de los Freitas.
Es cruel psicoanalizar un paciente, aunque
neurótico, bien adaptado a la memoria, ya que el
psicoanálisis (bien hecho) va a hacerlo romper con la
memoria y será fuente de sufrimiento para el paciente,
muchas veces sin la fuerza
creativa necesaria para reordenar el caos que surge del
psicoanálisis, con el apoyo del psicoanalista
todavía.
La indigencia del espíritu, la adaptación a la
mediocridad son, por lo tanto, contraindicaciones absolutas para
la práctica del psicoanálisis. Los sujetos que
rompen con la memoria de los Freitas por la derecha –
psicópatas, dementes, esquizofrénicos con
sintomatología negativa (las formas hebefrénicas y
catatónicas por ejemplo), las esquizofrenias
crónicas, la deficiencia mental – el psicoanálisis
es una hipótesis que debe ser definitivamente separada,
una vez que en tales sujetos no hay como crear y reordenar el
caos por la introspección y las interpretaciones.,
provocando un rompimiento imposible por la izquierda con la
memoria de los Freitas. Para tales pacientes hay terapias
alternativas que no molestan el inconsciente
y son bien indicadas.
Otra consecuencia de mi descubrimiento, que tampoco había
percibido cuando hice la tercera edición es que en los
sicóticos que rompen por la derecha (esquizofrenia
hebefrénica, o la forma catatónica de la molestia,
psicosis
crónicas), en la demencia o ciertos sicóticos
oligofrénicos, solo hay dos antipsicóticos
(neurolépticos) de 2° generación que ayudan a
tratar: la quetiapina -la mejor de todos- y la amisulprida, el
haloperidol, bien como otros antipsicóticos de 2°
generación como la olanzapina, la risperidona, la
clozapina, por ejemplo, no solo no ayudan a tratar como hacen
agravar estos cuadros mórbidos.
Esta experiencia empírica de los colegas
psiquiatras va a confirmar (todavía no recomiendo que lo
experimenten más), pero es un hecho clínico
observado por quienes escribe libros y
artículos sobre psicofarmacología desde 1981.
Entretanto, el haloperidol o los antipsicóticos
tradicionales, bien como los otros antipsicóticos de
2° generación que no sean la quetiapina y la
amisulprida son de valor y ayudan
a tratar, con eficacia similar
a los otros (la elección debe ser hecha teniendo solamente
en cuenta el perfil de efectos adversos) a los
esquizofrénicos y otros sicóticos que tienen
síntomas productivos (delirios y alucinaciones
predominantemente),
como en la forma paranoide de la esquizofrenia, en la
manía, pero estos pacientes generalmente rompen por la
izquierda con la memoria de los Freitas.
También en estos pacientes el psicoanálisis es
generalmente bien indicada como técnica de
investigación del inconsciente, siendo terapéutico.
El psicoanálisis, en los que rompen por la izquierda suele
decodificar e interpretar la memoria de los Freitas y es el
camino que conozco para modificar el destino porque envía
un rayo de luz en las regiones oscuras de la mente.
Antes de que algún lector pregunte que cuando yo hablo de
romper por la izquierda y romper por la derecha pueda tener
cualquier motivación
de ideología política, la
respuesta es no. En mi libro hay un grafico publicado con
cuadrante cartesiano de abscisas y ordenadas, en diedro, con
proyección en épura, en el plano, de la figura
espacial que he visualizado de la memoria de los Freitas, con el
ojo del observador y proyector puesto en perpendicular (90°)
relativamente al plano cartesiano, puesto abajo de la imagen espacial y
sobre el centro de la figura. En esta proyección aparece
la imagen plana de la memoria de los Freitas centralizada en el
cuadrante cartesiano.
Las dolencias de que he hablado como un rompimiento
creativo están proyectadas a la izquierda de la imagen
central de la épura de la memoria, y el rompimiento
destructivo es visualizado a la derecha de la épura de la
memoria. Todo eso es Geometría Descriptiva. Es igual como sucede
cuando se va estudiar un tórax por rayos X: no se
hacen radiografías del pulmón en tres dimensiones,
pero si la épura (y no deja de ser épura) de la
figura espacial del pulmón que se desea estudiar, que es
mirada en el plano de la película radiográfica.
Así también ocurre con la tomografía o la
resonancia magnética: nos sería imposible trabajar
con resonancia magnética de una imagen espacial del
cerebro, por
ejemplo, tenemos que traerla al plano, en épura.
CAPITULO 2
En el capitulo anterior he hablado sobre la
memoria de hechos sucedidos antes de nuestro día de
nacimiento, que se aprende y se aprehende desde el útero
materno y después del nacimiento en la casa familiar y en
el medio social. He dicho que esta memoria es inconsciente e
imposible de evocarse conscientemente sin ayuda especializada, y
hace el amoldamiento de nuestro comportamiento cotidiano,
creencias, errores, aciertos, en nuestras relaciones
con el prójimo; esta memoria proviene del aprendizaje
informal, la llamé memoria de los Freitas y de ella hacen
parte los recuerdos de hechos que preceden nuestro
nacimiento.
Esto es solamente un aspecto periférico de una
constelación de complejidades que dan forma a la memoria
de los Freitas; hay otros mucho mas importantes, aún
cuando no tengan el mismo interés en
la curiosidad del hombre.
Todavía su utilidad y su descubrimiento son una
nueva adquisición de la Ciencia y acá voy a
revelarlos.
El fenómeno de recuerdos de hechos anteriores a venir al
mundo fue primeramente observado por Freud, pero la
investigación se paralizó porque Freud afirmaba que
la transmisión de memoria inter generaciones no
contemporáneas era hecha por los gametos, lo que vale
decir, por el DNA, lo que es una teoría inaceptable hoy.
Pero Freud tenía su entorno cultural en una época
donde el Lamarckismo era muy fuerte, aún cuando la
teoría de la Evolución, de Charles Darwin, ya fuera
conocida.
Nosotros sabemos que Sigmund Freud,
escritor de "El futuro de una ilusión" se distanció
mucho, intelectualmente, de las posiciones y dogmas religiosos,
pero para ello el peso mítico de este aspecto
evolucionista darwiniano, por ser judío, inconscientemente
le fue imposible de vencer y Freud no alcanzó
distanciarse, en este particular, AFECTIVAMENTE, de su cultura
judía, de tal manera que este aspecto afectivo se
quedó en un PUNTO INATINGIDO. Voy aprovechar el concepto
de punto intangible como marca de la
cultura y de la tradición regional, familiar y personal de
cada uno de nosotros, para explicitar la tradición a la
que llamé memoria de los freitas.
Lo que llamé memoria de los Freitas es nuestra instancia
mítica. ¿Qué es un mito? Los
mitos son
cuentos que no
se consigue desmentir, decodificar o reducir con el curso normal
del pensamiento y con la evocación de la memoria
común, ya que los mitos no son conscientes. Son relatos de
origen popular, no reflexivos, en la mayoría de las veces
retratando fuerzas de la naturaleza o creencias tan
ilógicas como omnipresentes y activas en nuestra
cotidianidad,
escondidas en el lado oscuro de nuestra psique: hombres lobo,
ideas de que "ojo grande" y envidia de otros tienen
"energía" contra nosotros infortunio (sin mirar la
razón científica de que la envidia no tiene
energía ninguna, tanto en la concepción de la
Física
clásica, de Newton, como
de la Física Quántica, y por ser solamente un
sentimiento inherente al sujeto que lo
siente, de ella padece y solo hace mal al envidioso)
El raciocinio crítico sucumbe a los mitos porque
los mitos, siendo inconscientes, no son susceptibles de examen
por la razón y tampoco a ella llegan, por más
inteligente y perspicaz
que sea la persona. Estos son aprendidos inconsciente e
irracionalmente.
Puedo decir también que el mito es una verdad de la que el
sujeto inconscientemente se cree poseedor, que no es establecida
por la razón. Su decodificación es difícil
pero posible mediante el psicoanálisis y la dificultad
está anclada en el hecho de que no podemos evocar los
recuerdos de la memoria común.
Muchas veces es difícil decodificar la propia
enunciación, que puede ser intensamente vivida por el
sujeto, sin que esto se perciba siquiera de cómo es que su
propio mito se enuncia. Como he dicho, los mitos son cuentos que
no podemos desmentir, descubrir, decodificar o reducir por las
vías normales del pensamiento y tienen un carácter
universal; la humanidad, la región,
la familia o la propia subjetividad del sujeto (mitos
personales).
¿Y ahora? He dicho que los mitos son cuentos y que hay en
su trasmisión, por generaciones, un aprendizaje informal!
El lector ha de preguntar: ¿entonces quién cuenta
estos cuentos? A esta pregunta voy contestar con un caso
clínico del propio Freud, sobre un pasaje de su libro
"análisis de la fobia en un niño de cinco
años", el conocido caso del pequeño
Hans.
En la introducción, primera parte del texto, cuenta
Freud que Hans, a los tres años y medio
de edad fue visto por su madre tocando con la mano su propio
pene. Ella lo amenazó con las siguientes palabras:"si
usted hace eso nuevamente voy llamar el doctor A para que le
quite su 'pipi'". Como podemos ver, esta pequeña historia,
tan universal, que sucedió entre Hans y su madrecita – y
todos nosotros ya presenciamos madres y personas adultas
amenazando niños
con esta misma amenaza, sin saber que están propagando un
trágico mito inconsciente
– contiene una codificación inconsciente mítica que
la madre de Hans no conocía su significado,
codificación que le fue transmitida por sus ancestros y
que ella retransmitió a su hijo. Exactamente por no tener
conciencia del
enunciado del mito que estaba retransmitiendo a su hijo, ella lo
hizo de manera incompleta y falseada.
En la verdad, no era el doctor A que estaba presente en
el inconsciente de la madre de Hans cuando ella ha retransmitido
a su hijo una amenaza aprendida inconscientemente con sus propios
ancestros.
Este material, incompletamente verbalizado dio a Hans
munición para la formación de uno de sus mitos, el
mito de la castración. Entre las lagunas que quedan en
aquello que es transmitido por las generaciones anteriores, entre
las lagunas de aquello que es retransmitido incompleta y
falseadamente, entre las lagunas de aquello que el niño o
la niña pueden aprehender con sus propias palabras
(único instrumento simbólico de que disponen para
construir su mirada de mundo) y fantasías que encuentran
sobre lo que observan en sí mismos y en el mundo exterior
nacen los mitos, todos los mitos, estos tapaojos del pensamiento
humano.
Nuestros mitos más primitivos y más universales son
nuestras protofantasías, la de seducción, la de
castración y la de la cena primaria. Son ellas
fantasías sobre el origen y no fantasías presentes
desde el origen (como imaginaban Freud, Jung y muchos
psicoanalistas aún hoy, residuos del lamarckismo, que
imaginaba, adentro del psicoanálisis, que las
protofantasías ya venían desde el origen,
provenientes de los gametos – DNA). Y que en la verdad, son
solamente fantasías creadas por las representaciones
simbólicas a través de impresiones
y experiencias inconscientes, y, por lo tanto, fantasía
que todos nosotros creamos como edificaciones simbólicas
en la ontogénesis – desarrollo que depende de la cultura –
si fueran fantasías por herencia de DNA
(filogenéticas) como pensaban Freud y Jung,
¿Cómo iba a poder el
psicoanálisis mitigar efectos mitológicos
desestructurantes?
Mitos desestructurantes, tanto cuanto mentirosos son aquellos que
las personas tienen de que la envidia o su "ojo grande", o el
odio de otros pueden tener una "energía" que hace mal a la
persona envidiada.
Esto es tan solamente un ejemplo de entre
miríadas. Si fuéramos hasta la razón y el
conocimiento de la ciencia, los mitos caerían uno a uno
por tierra al
primer examen.
Los mitos sólo sirven a la perpetuación de los
dogmas y a la manutención del espíritu de
rebaño, generalmente provocan miedo y tienen la
función social de complementar a las leyes civiles y
religiosas, siendo más poderosos que esos porque no son
verbalizables, son impuestas por la memoria de los Freitas e
inmunes al raciocinio crítico y a la libertad de
opinión, y tienen como función primordial no
permitir que el sujeto medio transgreda "normas"
establecidas socialmente y, por lo tanto, tienen eficacia en
impedir una barbarie, aún mayor de la que hoy presenciamos
en todo el mundo El descubrimiento de la memoria de los Freitas y
la posibilidad que se abre para pasar sobre ella (que habita en
la parte oscura de la psique y cuyos subproductos
ensombrecedores, castradores, tiránicos e impositivos
proliferan como lobos en la oscuridad) rayos de luz, permiten el
alivio y la liberación de todos nosotros de los grilletes
que nos cercenan los pasos del desarrollo anímico,
deshacen nuestra ignorancia sobre las verdades de la naturaleza y
ayudan en el sentido de hacer que nuestra vida sea más
productiva, libre, descontrariada y prolífica, sin miedos
absurdos e irracionales.
En estos días sólo una pequeña parte de los
pueblos logran romper por la izquierda con la memoria de los
Freitas, y no lo hacen por elección, lo hacen por
disconformidad, sufrimiento. Pero cuando hay tal rompimiento el
sujeto crea todas las obras que edifican el confort y el progreso
de la humanidad: todos nosotros vivimos en los hombros de estos
gigantes. La inmensa mayoría de la población tiene
necesidad de quedarse en la memoria de los Freitas por toda su
vida, ya que la civilización no edificó un
instrumento menos cruel para garantizar a la masa la necesaria
humanización sin valerse de instrumentos coercitivos; y no
sólo sufrimos de la memoria de los Freitas para que no
haya toda clase de
delitos,
crímenes horribles: aún carecemos de Código
Penal, policía, Fuerzas Armadas! La humanidad aún
está en la pre-historia del humanismo. Tan solamente los
muy grandes de espíritu perciben la coerción
que la Memoria de los Freitas representa y rompen por la
izquierda, para crear. Pero si toda la humanidad hiciera el
rompimiento, sin los mismos recursos
creativos de estos super-hombres, resultaría en un
desastre.
1. Jones, Ernest – Vida e Obra de Sigmund
Freud, IMAGO ED. Vol.2, páginas
de 301 a 313, Título X – Biología, Río
de Janeiro, 1975.
2. Kalmus, H. – Genetics, Pelican Ed., London, 1948.
3. Lamarck, Jean Baptiste – Philosophie Zoologique, Librairie
Reinwald,
Schleideir Frères Editeurs, Paris, 1907.
4. Freitas, Ednei – psicofarmacología Aplicada à
Clínica, EPUB ED., 3° Edição,
páginas de 3 a 47, Río de Janeiro, 2000.
5. Freud, Sigmund – Análise de uma fobia em um menino de
cinco anos, IMAGO
ED., Edição Standard Brasileira, Vol. X, Río
de Janeiro, 1975.
6. Freud, Sigmund – Os instintos e suas vicissitudes, IMAGO ED.,
Edição
Standard Brasileira, Vol.XIX, Río de Janeiro, 1975.
7. Freud, Sigmund – (1937-1939) – Esboço de
Psicanálise, IMAGO ED., Edição
Standard Brasileira, Vol XXIII, páginas de 169 a 210,
más especialmente
la página 193, Río de Janeiro, 1975.
8. Kant, I. – (1781). Critique of pure reason, in The
Transcendental Doctrine
of Method, N. Kemp Smith Ed., Capítulo II,
seção 3, página 645, England,
1933.
9. Popper, Karl – A lógica da pesquisa científica,
Ed. Cultrix, páginas
de 46 a 49 e 106, São Paulo, 1989.
10. Popper, Karl – Conhecimento Objetivo, Ed. Itatiaia,
páginas de 152 a
158, Belo Horizonte, 1975.
Ednei José Dutra de Freitas
Ph.D. Psiquiatra, Psicoanalista, Miembro Titular
de la International Psychoanalytical Association (Londres) y de
la Sociedad psicoanalítica de Río de Janeiro
(Brasil), Ex-Profesor de la
facultad de Medicina de la
Universidad
Estadual del Río de Janeiro (UERJ-Brasil) en las
disciplinas de psiquiatría y Psicología
Médica, Miembro Titular de la Sociedad Brasileña de
Médicos Escritores, autor del libro PSICOFARMACOLOGIA
APLICADA À CLINICA, 3° edición, Editorial EPUB,
Río de Janeiro, 2000.