Monografias.com > Educación
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

La Orientación. Aprendizaje como proceso: elemento dinamizador del aprendizaje
a distancia



    1. Resumen
    2. Desarrollo
    3. Bibliografía

    Resumen:

    En este trabajo aborda
    la dinámica de los procesos
    educativos a distancia, desde la perspectiva de su
    dinámica, entendida como el proceso de
    orientación-aprendizaje. Se destaca la definición y
    su modelación, sustentado en la relación
    "dimensión – etapas -momentos".

    Palabras claves: Educación a
    distancia

    Introducción.

    La educación a
    distancia como modalidad se está implementado con
    mucha rapidez en la mayoría de las instituciones
    educativas. Estos procesos son descritos y/o explicados por
    diferentes teorías, desarrolladas a partir de casi un
    siglo de existencia, entre las que se pueden mencionar: de la
    independencia
    y autonomía, de la interacción y comunicación, industrialización y
    del diálogo
    didáctico mediado, etc.
    No obstante, es imposible
    inferir en ellas cómo conducir el proceso de
    orientación al aprendizaje, entendido como asistencia o
    apoyo.

    Es en tal sentido que se encamina el presente trabajo,
    es decir, en fundamentar una propuesta de modelo que
    permita desarrollar el proceso de asistencia (orientación)
    al aprendizaje del estudiante que está separado física y
    psicológicamente de la institución educativa que lo
    pretender formar.

    Para darle solución a esta problemática se
    utilizaron el método
    sistémico-estructural y el de modelación. El
    primero permitió establecer los componentes, así
    como las relaciones entre ellos, conformando una nueva cualidad
    como totalidad, determinando la estructura y
    jerarquía de cada componente y su dinámica; el
    segundo permitió crear una abstracción del proceso
    de asistencia que permita explicar esta realidad, cuya
    condición fundamental es la relación entre el
    modelo y el objeto que es modelado para que exista
    correspondencia y uan manera de sustitución de esa
    realidad que se estudia.

    Desarrollo:

    McIsaac M. J. y Gunawaderna C. N. (1996) plantean que no
    existe una única teoría
    de educación a distancia que explique sus fundamentos,
    estructuras y
    propósitos, funciones,
    posibilidades, guíe la práctica y la investigación.

    Las teorías de Educación a distancia son
    constructos científicos, consistentes en la
    sistematización de leyes, ideas,
    principios y
    normas, con el
    objetivo de
    describir, explicar, comprender y predecir el fenómeno
    educativo en la modalidad a distancia y regular la
    intervención pedagógica.

    Keegan D. J. (1996) clasificó a estas
    teorías en tres grandes grupos:

    • Teorías de la Independencia y la
      autonomía (Wedemeyer C. .A. y Moore G. )
    • Teoría de la Industrialización (Peters,
      O. ).
    • Teorías de la interacción y la
      comunicación (Holmberg, B. y Bååt, J. A.
      Garrison, D. R. Shale, D.)

    Todas las teorías describen y/o explican el
    proceso educativo a distancia, más aún, insisten en
    la necesidad de un sistema de
    asistencia; sin embargo ninguna describe o explica cómo se
    debe realizar este.

    Es en este sentido, en que se dirige el siguiente
    trabajo, el que centrará el énfasis en fundamentar
    cómo se debe realizar la asistencia por parte del equipo
    docente al proceso de aprendizaje de los estudiantes.

    Para fundamentar el proceso de asistencia al aprendizaje
    individual y colaborativo de los estudiantes por parte del equipo
    docente utilizaremos el método de modelación y el
    sistémico estructural, ya que nos permiten realizar
    abstracciones para explicar una realidad educativa, siendo el
    modelo un sustituto del objeto en cuestión y mediante el
    sistémico determinaremos los componentes y las relaciones
    entre estos, las que permitirán la determinación de
    la estructura y dinámica del fenómeno o
    acontecimiento (Objeto).

    Toda modelación independientemente del aspecto de
    la realidad que anticipe, según Rossental, M. y Iudin, P
    (1982), se identifica con la reproducción de las propiedades del objeto
    que se estudia en otro análogo, que se construye,
    según reglas.

    Esta operación ocurre a través de la
    elaboración del modelo. Muy relacionado con ello y
    compartiendo el criterio de Álvarez de Zayas, C, (2002),
    concordamos que la modelación está estrechamente
    relacionada con la caracterización de los elementos del
    proceso que se representa y la relación que existe en
    ellos.

    La modelación del proceso educativo a distancia
    asistida en la Universidad de
    Pinar del Río (Frías, Y. y Malagón, M. 2005)
    determinó que el control es el
    resultado de la intersección de los macrocomponentes
    (Equipo docente, estudiantes, Unidad) y los microcomponentes
    (independencia, habilidad y apoyo).

    Un análisis al modelo permite observar que es
    necesario desarrollar un proceso de negociación que ponga los elementos del
    modelo triádico en un balance consciente para que los
    estudiantes puedan realizar los ajustes conductuales
    correspondientes, negociación que obliga a fomentar el
    acercamiento e individualización del proceso de manera
    intencional y activa por parte de los docentes
    (apoyo).

    Significa que el énfasis no estará en el
    qué (contenidos) del aprendizaje, sino en
    que debe desplazarse la preocupación por el propio proceso
    de aprendizaje, por el cómo, lo cual es
    más congruente con lo expresado por Piaget, J.
    … "El estudiante no solo aprende lo que aprende sino
    como lo aprende" …

    En este caso específico, concebimos un modelo que
    tiene su origen en un conjunto de principios y categorías
    que se integran en sus componentes y constituyen el marco
    referencial a partir del cual se fundamenta.

    Por su carácter se cataloga como, modelo
    concéntrico, jerarquizado en la relación:
    dimensión – etapa –
    momento
    . El mismo concibe una nueva manera de
    investigar el proceso educativo a distancia desde la perspectiva
    de su dinámica (ejecución), es decir, desde el
    proceso de orientación –
    aprendizaje.

    Significa, por tanto, que la función de
    los docentes no se identifica con el de la
    enseñanza (transmisión) sino con la
    orientación (ayuda, apoyo). Es decir, que la
    atención se desplaza de un proceso de
    enseñanza – aprendizaje a uno de
    orientación – aprendizaje.

    Es pues, el proceso de orientación –
    aprendizaje
    , el que dinamiza el proceso educativo
    a distancia y se manifiesta en la tutoría, consultoría, asistencia,
    etc.

    La ausencia de la tutoría, consultoría,
    asistencia, etc. debilita el proceso educativo a distancia de tal
    manera que lo puede extinguir, por lo que se necesita que la
    misma se haga cuidadosamente, enfatizando su carácter
    sistémico y sistemático.

    Para emitir una definición del proceso de
    orientación-aprendizaje, realizaremos un

    un análisis a los componentes de esta
    díada. El primer componente es la orientación,
    utilizando el método comparativo valoraremos las distintas
    definiciones que plantean los autores con relación a esta
    categoría:

    La orientación debe ser considerada como el
    servicio
    destinado a ayudar a los alumnos a escoger inteligentemente
    entre varias alternativas, ayudarlos a conocer sus habilidades
    y limitaciones y ayudarlos adaptarse a la sociedad
    donde viven (Jacobson, P. y Revis, W., citado por
    Morejón , R. 1996).

    La orientación es el proceso por el cual son
    descubiertas y desarrolladas las potencialidades de un individuo a
    través de sus propios esfuerzos, por su propia felicidad
    y para la utilización social. (Strang, R. y Hatchev. L.
    , citado por Morejón , R. 1996).

    La orientación tiene como propósito
    asistir al educando para que adquiera suficientes conocimientos
    de si mismo y de su medio
    ambiente, para ser capaz de utilizar más
    inteligentemente las oportunidades educacionales ofrecidas por
    la Escuela y la
    Comunidad
    (Ross, C., citado por Morejón , R. 1996).

    Orientación es una forma de asistencia
    sistemática aparte de la instrucción regular,
    proporcionada a los alumnos, u otras personas, para ayudarlos a
    adquirir conocimientos y sabiduría, libre de
    compulsión o prescripción y calculada a estimular
    la auto dirección. (Good, C., citado por
    Morejón , R. 1996).

    La orientación es la relación de
    ayuda, en la que uno de los participantes intenta sugerir, de
    una o ambas partes una mejor apreciación y
    expresión de los recursos
    latentes del individuo, y un uso más funcional de estos.
    (Rogers, C., citado por Morejón , R.
    1996).

    La orientación es un proceso de ayuda,
    consejería para fomentar en las personas la auto
    realización, no a curar enfermedad. (Maslow, A.,
    citado por Morejón , R. 1996).

    La orientación es un servicio destinado
    fundamentalmente a facilitar que los individuos normales
    realicen las elecciones de los que depende su desarrollo
    (Tyler, L, citado por Morejón , R. 1996).

    En todas estas definiciones encontramos aspectos que
    caracterizan la orientación, en cuanto al proceso en
    sí, su finalidad y función, que convienen
    mencionarlos por el valor que
    tienen en cuanto a su concepción general:

    • La orientación es vista como ayuda,
      servicio o asistencia
      que le ofrece un sujeto de
      mayor preparación a uno que además de tener
      menos, lo demanda,
      es decir, se trata de un fenómeno que no se da aparte,
      sino como parte de la relación humana, por lo que se
      considera, comunicación.
    • La orientación tiene carácter
      regular, sistemático, o sea es ante
      todo, un proceso.
    • La orientación surge como necesidad
      derivada de problemas
      de las personas
      , que provocan en ellas la
      búsqueda interna, el autoconocimiento de las
      potencialidades, lo que significa aprehenderse a si mismo,
      por consiguiente podemos catalogar dicha actividad como una
      forma especial de aprendizaje vital y
      significativo.
    • La orientación persigue que la persona se
      autorrealice, se perfeccione, que logre superar
      obstáculos y se decida por alternativas que lo
      mejoren, o sea que lo desarrollen.

    Podemos concluir este análisis comparativo con
    las palabras del Dr.. Gustavo Torroella González (1992)
    que plantea … "el fin de la orientación es la de
    formar una personalidad,
    sana, eficiente y madura, con un desarrollo integral de todas sus
    potencialidades fundamentales, para prepararlo para la vida, que
    es prepararlo para realizar tareas propias de cada
    edad"…

    Finalmente nuestra propuesta fundamentará la
    orientación simultáneamente como
    comunicación, aprendizaje y desarrollo.

    Nuestro análisis continua con el segundo
    componente de la díada , es decir, el aprendizaje.
    Con respecto a este concepto,
    también existen diversas concepciones e
    interpretaciones:

    Díaz Bondenave, (1986) ofrece la siguiente
    definición: … "Llamamos aprendizaje a la
    modificación relativamente permanente en la
    disposición o en la capacidad del hombre,
    ocurrida como resultado de su actividad y que no puede
    atribuirse simplemente al proceso de crecimiento y
    maduración"

    Cotton, (1989, citado por Pérez Gómez,
    1993) afirma que el aprendizaje es un proceso de
    adquisición de un nuevo conocimiento
    y habilidad
    , que debe implicar una retención del
    conocimiento o de la habilidad en cuestión que permita
    su manifestación en un tiempo
    futuro.

    Maillo Alfonso (1973, citado por Bravo, L. 2005)
    define el aprendizaje como el cambio de
    comportamiento de relativa permanencia no
    atribuible ni al desarrollo madurativo ni a la
    fatiga.

    De la Torre, M, (s/f), citado por Bravo, L. 2005)
    plantea que el aprendizaje es el cambio de la
    disposición o capacidades humanas, con carácter
    de relativa permanencia y que no es atribuible simplemente al
    desarrollo.

    Mello, C. (1974, citado por Bravo, L 2005) manifiesta:
    "El aprendizaje es modificar el comportamiento por medio del
    adiestramiento o de la
    experiencia".

    González , A. (1995, citado por Bravo, L, 2005)
    le introduce nuevos elementos a la definición de
    aprendizaje diciendo: "Aprendizaje es el proceso por el cual
    el sujeto cambia como consecuencia de un estímulo
    externo, experiencia o reflexión, en término de
    cambio en conocimiento, habilidad o actitudes".

    Por su parte Arnaz, J. (1999) define que el
    aprendizaje es un término que se utiliza en dos
    sentidos: a) como proceso, por el cual los educandos
    experimentan transformaciones en su conducta; b)
    como producto de
    dicho proceso, esto es, las transformaciones efectuadas, los
    cambios de conductas ocurridas.

    En base a estas definiciones, se puede decir que el
    aprendizaje es el proceso mediante el cual el hombre
    cambia o modifica su comportamiento, estructura o enriquece su
    personalidad, adquiere nuevos conocimientos, actitudes,
    habilidades, destrezas, etc., que le ayudan a desenvolverse de
    manera eficiente en su vida social, cultural y personal.

    Este proceso es el resultado de la interacción
    del sujeto con el medio ambiente donde
    se encuentra inmerso, se propician las experiencias, recibe los
    estímulos que lo conducen a la actividad reflexiva y
    produce la transformación de sus esquemas
    mentales.

    Para que se produzca el aprendizaje es necesario contar
    con la atención, empeño y esfuerzo del aprendiz, ya
    que el aprendizaje es un efecto interno que necesita de la
    disposición del aprendiz para analizar, comprender y
    asimilar la información; de esta forma puede
    internalizarla produciendo cambios en su personalidad y modo de
    actuar en su vida intelectual o afectiva.

    El aprendizaje puede ser entendido: (Pérez
    Gómez, 1993):

    1. 1. Como producto, es decir, el resultado de
      una experiencia o el cambio que acompaña a la
      práctica.
    2. 2. Como proceso en el que el comportamiento se
      cambia, perfecciona o controla
    3. 3. Como función ya que es el cambio que
      se origina cuando el sujeto interacciona con la
      información.

    En otro orden de cosas existen una serie de factores
    contrapuestos que condicionan el propio aprendizaje
    (García Aretio, L. 1997):

    • Heterogeneidad del grupo
      (edad, ocupación, motivaciones, experiencias,
      aspiraciones, etc.).
    • Intereses del escolar (ocupación, bienestar
      familiar, ascenso social y laboral,
      autoestima, etc.).
    • Motivación hacia el estudio (espontaneidad,
      intensidad, persistencia, etc.).
    • Preocupaciones, confianza y seguridad
      en si mismo.
    • Responsabilidad ante el estudio.
    • Personalidad en formación.
    • Experiencias de aprendizaje (relaciones con los
      hechos de la vida).

    Cuando se pretende estudiar, la meta suele ser
    prioritariamente una: Aprender. Pero debería ser aprender
    bien, porque aprender no es memorizar apartados inconexos, con el
    fin de volcarlos durante el examen. Son muchos los estudiantes
    que dedican la mayor parte del tiempo de estudio a memorizar
    literalmente ideas, conceptos, hechos, principios, etc. sin
    detenerse a realizar:

    • Proceso de comprensión de lo que son
      capaces de repetir.
    • Un análisis de los términos
      memorizados.
    • Una aplicación, si es el caso, a
      realidades, situaciones o aprendizajes futuros.
    • Una reelaboración o síntesis
      de lo estudiado con el fin de hacerlo propio.
    • Una valoración, cuando sea preciso,
      de las ideas o conceptos que pretenden
      aprenderse.
    • Una organización y relación de las
      nuevas ideas aprendidas con las que ya formaban parte de
      la
      memoria.

    Compartimos con Gracía Aretio, L. (1997) que se
    aprende sólidamente si existe:

    1. Esfuerzo por comprender (entender).
    2. Esfuerzo por ubicar las nuevas ideas en la mente,
      relacionándolas con las ya existentes.
    3. Expresión verbal o escrita de forma
      organizada.

    Cuando ocurre el aprendizaje existe satisfacción
    porque es un logro no solo intelectual sino también
    experiencial y afectivo, fruto de la iniciativa
    humana.

    En tal sentido, el presente trabajo define el
    proceso de orientación – aprendizaje como aquel
    proceso de ayuda continúa individual y/o grupal, con
    carácter intencional en el ámbito afectivo –
    cognitivo que favorece el desarrollo
    personal y profesional de los estudiantes.

    El modelo para la ejecución del proceso educativo
    a distancia está basado en la relación entre los
    componentes del proceso de orientación –
    aprendizaje, (orientación afectiva –
    orientación cognitiva)
    . La selección
    de estos como componentes del proceso de orientación –
    aprendizaje se realiza a partir de los siguientes
    criterios:

    • La integridad del proceso de orientación
      afectiva – cognitiva, pues a partir de ello se establecen sus
      nexos y relaciones esenciales, en correspondencia con la unidad
      de estudio.
    • La orientación afectiva – cognitiva enmarca el
      funcionamiento de la orientación – aprendizaje
      como proceso a través de las etapas diagnostico,
      pronóstico, tutela,
      observación, construcción y
      representación.
    • Los momentos de las etapas diagnóstico, pronóstico, tutela,
      observación, construcción y representación
      encierran la función movilizadora, direccional y
      reguladora del proceso de orientación-aprendizaje, en su
      condición de mecanismo conducente al
      aprendizaje

    Una representación ideal del modelo responde a un
    sistema circular concéntrico, que se erige sobre
    una circunferencia, que subyace en el centro del conjunto y que
    constituye en su condición de resorte cíclico,
    punto común de todo el sistema. Pues, representa la
    estructura curricular donde sucede y se evalúan los
    componentes esenciales del modelo y sus relaciones. Es decir, la
    unidad de estudio. Es en ella donde se logra el dominio de la
    habilidad a través de un sistema de tareas, aquí es
    donde se obtiene un resultado, el aprendizaje.

    El modelo para la ejecución de la
    orientación – aprendizaje como proceso y las
    relaciones que entre sus elementos se establecen se representa a
    continuación.

    En el segundo círculo se encuentran dos
    puntos que constituyen centros de otros anillos. Estos
    representan las dimensiones (componentes esenciales) del
    proceso que se estudia, los cuales mantienen una relación
    dialéctica entre sí.

    Uno de los centros es la orientación
    afectiva
    , constituyendo la dimensión educativa
    del modelo y asumimos las siguiente definición
    "proceso individualizado y/o grupal de ayuda continua al
    educando en su progresiva realización personal, lograda a
    través de la libre asunción de valores, y
    ejercido intencionalmente por los educadores, en situaciones
    diversas que entrañen comunicación" (Gordillo, M,
    1984).

    El proceso de orientación afectiva se ejerce
    sobre la
    personalidad en su carácter de sistema
    (configuración subjetiva), lo que implica la unidad entre
    lo cognitivo y lo afectivo como célula
    esencial que caracteriza la regulación del comportamiento
    humano.

    También se expresa lo general y lo particular: El
    crecimiento y maduración de la personalidad del estudiante
    se instrumenta de forma particular en dependencia de sus
    características, las cuales son específicas e
    irrepetibles.

    Otro aspecto, es la consideración de lo
    individual y lo social, de lo interno y lo externo, el estudiante
    debe interiorizar un conjunto de normas y valores sociales que
    operan en el plano interno, y que deben guardar cierta
    congruencia con lo expresado y aceptado a nivel social. La
    vía esencial para lograr la orientación educativa
    es la comunicación, en donde las partes implicadas
    reflexionan, valoran y expresan sus propias conclusiones,
    vivencias y valorizaciones.

    La orientación afectiva estará dirigida a
    los ámbitos personal, escolar y profesional. En el
    ámbito personal se ofrece un servicio de atención
    psicológico o clínico, para auxiliarlo ante una
    determinada problemática que obstaculiza su desempeño, su adaptación al ambiente
    o su elección vocacional; en el ámbito escolar se
    ofrece ayuda para mejorar su aprovechamiento académico y
    se instrumenta con técnicas de
    estudio, de lectura
    dinámica y de preparación de exámenes; y en
    el ámbito profesional se ofrece consejo para llegar y
    prepararse en una profesión, donde lo importante es
    establecer congruencia entre los intereses del educando y el
    mercado de los
    profesiones.

    El otro centro es la orientación
    cognitiva
    , constituyendo la dimensión
    instructiva
    , entendida como el proceso individualizado
    y/o grupal de ayuda continua al estudiante en su progresiva
    realización profesional (potencialidad intelectual),
    lograda a través del domino de conocimientos y habilidades
    y ejercido intencionalmente por los docentes, en situaciones
    diversas que entrañen
    comunicación.

    El desarrollo de la potencialidad cognoscitiva en el
    estudiante implica que este participe activamente en su proceso
    de aprendizaje.

    Estos centros del segundo anillo (subsistemas) irradian,
    a través de sus centros, nuevas configuraciones, que
    conforman una tercera circunferencia concéntrica,
    pero que poseen también en su superficie puntos que
    constituyen centros de subsistemas menores (etapas), que a su vez
    establecen relaciones entre sí como subsistemas
    independientes, pero subordinados en su funcionalidad al
    subsistema primario que funciona en el circulo dos.

    La orientación afectiva se estructura en tres
    etapas, las cuales son:

    1. Diagnóstico: etapa, en la que el
    orientador (docente) del sujeto orientado (estudiante) promueve
    el autoconocimiento del mismo, determinando la
    problemática que le afecta y las opciones posibles para
    su solución, así como los recursos con que cuenta
    para alcanzarlo.

    Es decir, se trata de profundizar en las
    características psicológicas del sujeto
    orientado, tanto en el orden intelectual como
    personológico.

    2. Pronóstico: Etapa, en que se analizan
    las distintas posibilidades del sujeto orientado, las
    decisiones que puede adoptar previendo posibles consecuencias y
    esfuerzos que se requieren.

    Es una etapa de predicción, de
    elaboración de hipótesis acerca del nivel de éxito
    o rendimiento académico que podrá obtener el
    estudiante.

    3. Tutela: Es la etapa de
    operacionalización de la orientación, ya que
    está dirigida a la elaboración de un plan de
    acciones o
    metas y las estrategias
    para alcanzarlas, en función de lo que el educando puede
    y desea realizar.

    La orientación instructiva se estructura,
    también en tres etapas:

    1. Observación: Etapa de
    problematización del tema, en la cual se pretende llamar
    la atención del estudiante sobre el objeto, hechos o
    fenómenos, tal como se presentan en la realidad, en la
    misma se deben incorporar datos, mediante
    procedimientos
    lógicos (inductivo-deductivo, análisis-síntesis, hipotético-deductivo), a
    los que se habían adquiridos por
    intuición.

    La observación puede ser tanto a objetos
    materiales,
    como a hechos o fenómenos de otra naturaleza.
    La misma puede darse de forma directa, la que se realiza sobre
    el objeto, hecho o fenómeno real; y de manera indirecta,
    la que se hace en base a su representación
    gráfica o multimedial.

    La observación se limita a descripción y registro de
    fenómenos sin modificarlos, ni externar los juicios de
    valor.

    En esta etapa se realiza un análisis de la
    situación dada en el objeto, esto es, el problema.
    Aquí se debe incluir una actualización de los
    contenidos anteriores que son necesarios para enfrentar y
    resolver el problema planteado. Se trata de que el estudiante
    disponga de una base necesaria para poder
    comprender el problema planteado y buscar
    vías
    para su solución. Las acciones que puede
    realizar el estudiante son comprar y hacer
    inferencias.

    La forma organizativa "encuentro" (conferencia
    problémica, video
    lección problémica o encuentro a distancia en
    forma de audioconferencia problémica o video conferencia
    problémica) es la recomendada para ejecutar la etapa de
    observación, en la que se puede utilizar el
    método de exposición problémica, para buscar
    las contradicciones entre la cultura del
    estudiante, lo conocido y lo que es necesario conocer, esto es
    el contenido, la nueva cultura.

    El contenido no se dará como un todo acabado,
    por el contrario se debe promover la duda, la inquietud,
    revelando matices sobre los cuales el estudiante siente la
    necesidad de indagar, de completar información y de
    ampliar el
    conocimiento que le permita dar solución a los
    problemas, la esencia está en promover la
    motivación y comprensión del
    contenido.

    La participación del estudiante no tiene que
    ser externa, aunque si debe ser interna cuando en él se
    crea motivación y
    comprensión.

    2. Construcción: Es la etapa de
    búsqueda de la solución problémica, donde
    se estimula al estudiante para buscar, discriminar,
    seleccionar, clasificar y anticipar la
    solución.

    Es importante tener en cuenta que para que el
    estudiante se enfrente a la etapa, incorporar informaciones
    adicionales y preguntas que constituyan indicaciones o
    vías para llegar a encausar la
    solución.

    Determinar las preguntas problémicas y las
    informaciones adicionales constituyen aspectos esenciales a
    tener en cuenta por los docentes para que los estudiantes
    dominen y ejerciten la unidad de estudio.

    La forma organizativa que se sugiere para la etapa de
    construcción es el "estudio independiente"
    individual y/o grupal, sustentado en métodos
    de búsqueda heurística o guiada, en donde los
    estudiantes desarrollan acciones relacionadas con la
    búsqueda, análisis, discriminación y reflexión. Es
    aquí donde el estudiante busca la solución al
    sistema de tareas que le permitirá el dominio y la
    ejercitación.

    3. Representación: Es la etapa de
    aplicación o transferencia cognitiva. Es donde se
    realiza la socialización, consolidación y
    validación de los aprendizajes, a través del
    intercambio de ideas entre los estudiantes y entre estos y el
    docente.

    Durante esta etapa se valoran los resultados
    alcanzados, identificando fortalezas y debilidades que tiene el
    estudiante frente al sistema de tareas, relativas a la
    apropiación, asimilación e integración en la unidad de estudio, por
    otro lado se consolidan las interacciones sociales que
    favorecen y fomentan el proceso de aprendizaje.

    Esta valoración se realiza mediante la evaluación, concebida como un proceso
    integral en la que cada persona es partícipe
    activo.

    La evaluación se realiza mediante la
    autoevaluación, coevaluación y
    heteroevaluación.

    La autoevaluación esta concebida como el
    proceso de reflexión y regulación del
    aprendizaje, que permite al estudiante identificar las
    fortalezas y debilidades de su aprendizaje en la unidad de
    estudio. No sólo tiene en cuenta los productos
    realizados, desempeño y dificultades, sino
    también el plan de mejora.

    La coevaluación está fundamentada en el
    intercambio de juicios valorativos sobre el desempeño,
    productos, dificultades y planes de mejoramiento, de un
    estudiante hacia los demás. Se da usualmente en dos
    niveles; en el primero, durante el trabajo
    en grupo que se desarrolla como parte de la unidad de estudio
    (actividades independientes que deben realizar los
    estudiantes); y en el segundo, durante la socialización
    y por lo tanto, en el pleno del grupo, cuando los demás
    miembros del grupo evalúan los resultados logrados por
    cada estudiante y le ofrecen realimentación mediante el
    debate y la
    discusión de los planteamientos presentados al docente y
    demás compañeros.

    La heteroevaluación es la valoración que
    realiza el docente al estudiante teniendo en cuenta la
    apropiación, comprensión e integración de
    la habilidad, conocimientos y valores, incorporados a su
    estructura cognitiva, y que se evidencia (o debe evidenciarse)
    en el desarrollo de diferentes actividades de aprendizaje
    propuestas para la unidad de estudio.

    Durante la representación cognitiva se realiza
    la retroalimentación del proceso educativo a
    distancia, la que favorece el desarrollo de los procesos
    metacognitivos y de autorregulación en los estudiantes,
    si se le permite a estos conocer cuáles fueron los
    aciertos, errores cometidos y fortalezas, qué
    información sobre la unidad es relevante, qué
    habilidad desarrolló y cuáles aún debe
    trabajar para calificar su desempeño académico,
    personal y profesional.

    A partir de lo explicado en este subsistema es necesario
    enfatizar que la orientación afectiva debe preceder y
    mantenerse durante la orientación cognitiva. La misma
    parte del diagnóstico, evaluando los elementos del
    estudiante, y está presente durante todo el proceso de
    orientación cognitiva para evaluar y controlar el
    aprendizaje permitiendo "reorientar" en el momento que
    resulte necesario.

    En el proceso de orientación-aprendizaje se han
    considerado las siguientes premisas:

    • La unidad de estudio es la estructura
      organizacional que en su desarrollo permite la
      formación de la habilidad.
    • En el objetivo de la unidad de estudio se precisa la
      habilidad, el conocimiento sobre el objeto y las condiciones en
      que debe desarrollarse. La unidad de estudio debe tener un
      fondo de tiempo, lo suficiente, como para que asegure la
      formación de la habilidad en correspondencia con el
      objetivo; se ha comprobado que debe estar alrededor de unas 20
      horas, sin que tal afirmación signifique algo
      rígido o absoluto. (Brito, H. 1988).
    • Del total de horas asignadas a la unidad, lo dedicado
      a la observación no debe sobrepasar el 20 % , como
      tendencia, quedando el mayor tiempo destinado al trabajo de los
      estudiantes (al proceso de aprendizaje).
    • Que el conocimiento se subordina a la habilidad, el
      mismo se da en la aplicabilidad de la misma, por lo que la
      estructura del tema estará centrada en las etapas para
      la apropiación de la habilidad.
    • El aprendizaje se desarrolla sobre la base de
      problemas que, en un sentido amplio, constituyen las
      situaciones que se dan en el objeto y crean la necesidad en los
      sujetos de darle solución, conllevando motivación, mediante la búsqueda
      constante a lo largo del proceso.

    Las etapas representadas en el círculo tres, se
    vehículizan a través de momentos que
    acontecen en el círculo número cuatro (sistema
    terciario), los que se encargan de direccionar el proceso de
    orientación – aprendizaje.

    Los momentos de la etapa de diagnóstico son:
    Caracterización personológica,
    caracterización intelectual y la evaluación del
    rendimiento.
    Para los dos primeros se utilizan Test
    psicológicos, de inteligencia,
    aptitudes, intereses y de personalidad; y para el último
    es recomendable analizar de manera cualitativa el comportamiento
    del estudiante en las diferentes actividades que conforman el
    proceso de aprendizaje (nivel de participación,
    persistencia, planteamiento de preguntas interesantes, nivel de
    elaboración y fundamentación de las respuestas,
    etc.).

    La etapa de Pronóstico se vehiculiza a
    través de un solo momento, en el que se elabora la
    hipótesis sobre el
    nivel de éxito o rendimiento del estudiante.

    Para llevar a cabo esta predicción, el orientador
    debe conocer exhaustivamente la modalidad educativa, así
    como las características personales que debe poseer el
    estudiante en ella. Para predecir el nivel de éxito se
    propone atender a los siguientes factores:

    • el docente, con su competencia;
    • el programa, con
      toda la precisión de sus categorías
      didácticas;
    • el alumno, con sus correspondientes capacidades y
      motivaciones, así como el ambiente social,
      destacándose la situación familiar desde el punto
      de vista sociocultural y económico.

    En la etapa de tutela se le da seguimiento al plan de
    acciones diseñado en la etapa precedente, las cuales por
    su nivel de complejidad se deben concebir a corto, mediano y
    largo plazo.

    La etapa de observación atravesará los
    siguientes momentos:

    • Presentación: Momento en el que se
      presentan el docente y los estudiantes, el curso, la
      asignatura y la unidad.
    • Información: Momento en el que se
      expone verbal y problémicamente la unidad, utilizado
      esquemas, retrotrasparencias, diapositivas informatizadas, y
      videos indistintamente.
    • Interacción: Momento en el que
      interactúan el docente y los estudiantes y estudiantes
      entre si, para atender conflictos
      y atender dudas en la información
      expuesta.
    • Propuesta: Momento de programación del sistema de tareas
      subordinado al objetivo y conducente a la solución del
      problema planteado en la unidad.

    La etapa de construcción está compuesta
    por dos momentos:

    • Interacción: Momento de
      relación intelectual entre el que estudia, con los
      materiales (conversación didáctica interna) y con los
      estudiantes, provocando cambios en la estructura
      cognoscitiva, donde ocurre una negociación interna
      entro lo previo y lo nuevo.
    • Propuesta: Momento en el que se le da
      solución al sistema de tareas.

    La última etapa, la de representación, se
    desarrollará utilizando los siguientes
    momentos:

    • Reconstrucción: Momento en el que se
      socializan las soluciones
      al sistema de tareas, se atienden los conflictos y se aclaran
      las dudas.
    • Valoración: Momento en que se valoran
      los resultados alcanzados, identificando debilidades y
      fortalezas.

    La ejecución del proceso educativo a distancia
    asistida se logra a través de la viabilización de
    los momentos, los que hacen converger en el círculo
    subyacente, los diferentes subsistemas que integran el sistema
    único, cuya funcionabilidad como proceso depende,
    precisamente, de la correlación entre los
    subsistemas.

    La consistencia interna que le concede al modelo el
    sistema de relaciones entre sus elementos, revela que para
    efectuar con efectividad la orientación –
    aprendizaje como proceso es necesario concebir este, no como el
    simple desarrollo de cada momento o etapa aislada, sino como el
    desarrollo en toda su integridad, en unidad y relación con
    todos aquellos elementos que posibilitan que la
    representación ideal de la realidad pueda adquirir un
    carácter objetivo y concreto.

    La graficación del modelo supone el
    establecimiento de los principios que los soportan y garantizan
    su funcionamiento, por lo que teniendo en cuenta los componentes
    del proceso de orientación – aprendizaje y sus
    dimensiones, se consideran los siguientes:

    • Integralidad: Orientación dirigida a
      todas las dimensiones de la persona.
    • Universalidad: Orientación dirigida a
      todos los individuos tutelados por igual.
    • Continuidad: Orientación realizada a
      lo largo de todo el proceso.
    • Oportunidad: Orientación que al
      margen de la continuidad deberá atender los momentos
      críticos del proceso.
    • Participación: Orientación
      dirigida a la coordinación y participación de
      todos los sujetos implicados

    Bibliografía:

    1. Abe, Y. (2001). Communications technology, en Sewart,
      D. y Daniel, J. S., Developing distance education. Oslo:
      ICDE.
    2. Abrahamson, C. E. (1998). Issues in interactive
      communication in distance education», College Student
      Journal, 32, 1.
    3. Bååt, J. A. (1979). Correspondence
      education in the light of a number of contemporary teaching
      models. Malmo: Liber Hermods.
    4. Bååt, J. A. (1983). A list of ideas for
      the construction of distance education courses, en Sewart, D.;
      Keegan, D. y Holmberg, B., Distance education: International
      perspectives. Londres: Croom Helm.
    5. Bååt, J. A. (1984). Pride and prejudice
      among distance educators, ICDE. Bulletin, vol. 5,
      mayo.
    6. Bååt, J. A. (1985). Postal Two-way
      communication in correspondence education. Malmo: Liber
      Hermods.
    7. Bates, A. W. (1999): Technology, open learning and
      distance education. Mexico: Trillas.
    8. Bates, T. (1993). Theory and practice in the use of
      technology in distance education, en Keegan (ed. nueva)
      Teoretical principles of distance education. Londres &
      Nueva York: Routledge.
    9. Body, G. (1993). A theory of distance education for
      the cyberspace era, en Keegan (ed.) Theoretical principles of
      distance education. Londres & Nueva York:
      Routledge.
    10. Bravo, L. (cord.) (2005). Diccionario
      latinoamericano de educación, en CD.
      Fundayacucho. Venezuela.
    11. Brito, H. (1989). Caracterización de la
      motivación profesional pedagógica. Tesis
      doctoral. La habana.
    12. Brito, H. y otros (1989). Psicología general.
      Editorial Pueblo y educación. La habana.
    13. Calvo, M. y otros (1993). La orientación
      educativa. Cuaderno 118. Editorial del magisterio "Benito
      Juárez". México.
    14. Campo, W. Y Miranda, A. (2004). La
      educación a distancia: su visión desde la
      UNESCO. En memorias del
      III simposio
      internacional de teleeducación y formación
      continua. La Habana.
    15. Cirigliano, G. F. J. (1983). La educación
      abierta. Buenos Aires:
      El Ateneo.
    16. Clarke, A. (1986).Tutor competencies for open
      learning. Sheffield: Services Commission.
    17. de Armas , N. y
      otros (2003). Caracterización y diseño de los resultados
      científicos como aportes de la investigación educativa. En http://server_ceces-upr.edu.cu/cvr.
    18. Díaz Bondenave, J. y Martins, A (1986)
      Estrategia
      de Enseñanza – Aprendizaje. San José, Costa
      Rica.
    19. Domínguez, L. (1990). Algunas cuestiones
      psicológicas del desarrollo de la personalidad.
      Editorial Universitaria. Universidad de la Habana. La
      Habana.
    20. Domínguez, L. (1992). Caracterización
      de los niveles de desarrollo de la motivación
      profesional en jóvenes estudiantes. Tesis doctoral, La
      Habana.
    21. Domínguez, L. y otros (1987). La
      motivación hacia la profesión en la edad escolar
      superior (en investigaciones
      de la personalidad en Cuba).
      Editorial Ciencias
      Sociales. La Habana.
    22. Domínguez. L. (1995). Orientación
      educativa y profesional (en
      http://srver_ceces.upr.edu.cu/cvr)
    23. Fainholc, B. (2000). Algunas consideraciones
      sociopedagógicas y tecnológicas para las acciones
      tutoriales
      en entorno de educación virtual. En
      http://cueyatl.uam.mx/~prodeco/primer/29.htm
    24. Frías, Y. y Malagón, M. (2004). Modelo
      de tutorización en la modalidad b- learning, en memorias
      del III simposio internacional de teleeducación y
      formación continua. La Habana. ISBN
      959-261-111-4.
    25. Frías, Y. y Malagón, M. (2002).
      Teleformación y Nuevas
      Tecnologías de la información y las Comunicaciones: Posibilidades y Condiciones de
      la Teleeducación en Pinar del Río. En memorias I
      simposio internacional de teleeducación y
      formación continua. La Habana. ISBN
      959-261-034-7.
    26. Frías, Y. y Malagón, M. (2002). Sistema
      de asistencia para la ejecución del proceso educativo a
      distancia, en memorias del II encuentro internacional de
      didáctica. Pinar del
      Río.
    27. Frías, Y. y Malagón, M. (2004). Un
      programa para la capacitación como factor para el triunfo
      en la Educación a distancia. En memorias del congreso
      internacional Universidad 2004. La Habana.
    28. Frías, Y. y Malagón, M. (2004). Modelo
      para el desarrollo del proceso de
      orientación-aprendizaje en condiciones de
      Universalización, en memorias del congreso internacional
      Universidad 2004. La Habana.
    29. García Aretio, L y Castillo, S. (1996). El
      profesor
      tutor y la tutoría en el modelo UNED, en García
      Aretio, L (coord.). La educación a distancia y la UNED.
      Madrid.
    30. García Aretio, L. (1990). Un concepto
      integrador de enseñanza a distancia. Villarroel y
      Pereira, La educación a distancia: desarrollo y
      apertura. Caracas: ICDE.
    31. García Aretio, L. (1994). Educación a
      distancia hoy. Madrid: UNED.
    32. García Aretio, L. (1999). Fundamentos y
      componentes de la educación a distancia, Revista
      Iberoamericana de Educaci6n a Distancia (RIED), 2,
      2.
    33. García Aretio, L. (1999). Perspectivas de la
      acción tutorial en la UNED. Madrid:
      UNED.
    34. García Aretio, L. (coord.) (1997). Aprender a
      distancia… estudiar en la UNED. Madrid: UNED.
    35. García Aretio, L. (coord.) (1999). La
      tutoría en la UNED. Bases y orientaciones. Madrid:
      UNED.
    36. García Aretio, L. (1986. Educación
      superior a distancia. Análisis de su eficacia.
      Badajoz: UNED-Mérida.
    37. García Aretio, L. (2001). La educación
      a distancia. De la teoría a la práctica. Ariel
      educación. Barcelona. España.
    38. Garrison, D. R. (1989). Understanding distance
      education. A framework for the future. Londres:
      Routledge.
    39. Garrison, D. R. (1993). Quality and access in
      distance education: theoretical considerations, en Keegan
      (ed.). Teoretical principles of distance education. Londres
      & Nueva York: Routledge.
    40. Garrison, D. R. (2000). Theoretical challenges for
      distance_ education in the 21st century: A shift from
      structural to transactional issues, International Review of
      Research in Open and Distance Learning, 1, 1.
    41. Garrison, D. R. y Shale, D. (1990). A new framework
      and perspective, en Garrison, D. R. y Shale, D. Education at a
      distance: from issues to practice. Malabar, Florida:
      Krieger,
    42. Garrison, D. R. y Shale, D. (1990). Education at a
      distance. Malabar, Florida: Robert E. Krieger Publishing
      Company.
    43. Gimeno Sacristán, J. & Pérez
      Gómez, Á. (2002). Comprender y transformar la
      enseñanza (10ª ed.). Madrid, España: Eds.
      Morata.
    44. González Rey, F. (1993). Motivación
      profesional en adolescentes
      y jóvenes. Editorial Científico-técnica.
      La Habana.
    45. Gordillo, A. (1984. La orientación en el
      proceso educativo. Editorial Pamplona. Ediciones Universidad de
      Navarra. España.
    46. Holmberg, B. (1985). Educaci6n a distancia:
      situación y perspectivas (traduccion de 1981, Londres).
      Buenos Aires: Kapelusz.
    47. Holmberg, B. (1985). On the status of distance
      education in the world in the 1980's. Hagen: FemUniversiHit
      (ZIFF).
    48. Holmberg, B. (1986). Growth and structure of distance
      education. Beckenham: Croom Helm.
    49. Holmberg, B. (1989). Theory and practice of distance
      education. Nueva York: Routledge.
    50. Holmberg, B. (1993. The tutorial in distance
      education, Epistolodidaktika, 1993/1.
    51. Holmberg, B.(1985). Communication in distance study.
      In Status and trends of distance education. Lund, Sweden:
      Lector Publishing.
    52. Kaye, A. y Rumble, G. (1983): Six distance education
      theorists. Hagen: ZIFF.
    53. Kaye, A. y Rumble, G. (1986). The foundations of
      distance education. Londres: Croom Helm.
    54. Keegan, D. J. (1980). On the nature of distance
      education. Hagen: ZIFF.
    55. Keegan, D. J. (1993) Theoretical principles of
      distance education. Londres: Routledge.
    56. Malagón Hernández, M. (2004).
      Educación a distancia: Fundamentos pedagógicos y
      tecnológicos. Colección autores. Serie
      formación. ESUMER, Medellín, Colombia.
    57. Márquez Marrero, L. (2004). Sicología
      de la Educación: Una aproximación a su estudio.
      Colección autores. Serie formación. ESUMER,
      Medellín, Colombia.
    58. McIsaac, M. S. Y Gunawardena, C. N. (1996). Distance
      education, en Jonassen, D. H. Handbook on research for
      educational communications and technology. Nueva York:
      Macmillan,
    59. Moore, M. G. (1972). Learner autonomy: The second
      dimension on independent learning, Collection of Conference
      Papers. Warrenton (Virginia), II.
    60. Moore, M. G. (1977). On a theory of independent
      study, Epistolodidaktika.
    61. Moore, M. G. (1990). Recent contributions to the
      theory of distance education», Open learning, 5,
      3.
    62. Moore, M. G. (1993). Three types of interaction, en
      K. harry. John & D. Keegan (eds) Distance education: New
      perspectives, Routledge. Londres.
    63. Moore, M. G. y Kearsley, G. (1996). Distance
      Education: As systems view. Belmont, CA: Wadswort.
    64. Morejón, R. (1996). La orientación
      educacional como alternativa para la formación integral
      de los jóvenes universitarios. Tesis de
      maestría,
    65. Universidad de Pinar del Río.
    66. Paz, M. (2000). Aspectos psicológicos en la
      relación virtual entre profesor y alumno. Grupo EIDOS.
      UNED. España.
    67. Pérez Gómez, A. y
      otros(1993).Comprender y transformar la enseñanza.
      Ediciones Morata. Segunda edición. Madrid.
    68. Pérez Gómez, A.. (2000). la cultura
      escolar en la sociedad neoliberal (3ª ed.). España:
      Eds. Morata.
    69. Peters, O (1983). Distance teaching and industrial
      production: a comparative interpretation, Sewart; Keegan y
      Holmberg (eds.). Distance education. International
      perspectives. Londres: Croom Helm.
    70. Peters, O (1993). Understanding distance
      education», en Harry, Magnus y Keegan: Distance
      education: New perspectives. Londres: Routledge.
    71. Peters, O. (1993). Distance education in a
      post-industrial society, en Keegan (ed.) Teoretical principles
      of distance education. Londres & Nueva York:
      Routledge.
    72. Roig Ibáñez, J. (1999). Fundamentos de
      la orientación escolar y profesional. Ediciones Anaya.
      Madrid.
    73. Rossental, M. y otros (1982). Diccionario
      Filosófico. Editorial política. La
      habana.
    74. Torroella González. G. (1992).
      Orientación psicológica. Folleto impreso. La
      habana.
    75. Tyler, L. (1988). La función del orientador.
      Editorial Trillas. México.
    76. Wedemeyer; C. A (1971. Independent study, en
      Deighton, L.C. (ed.) The encyclopedia of Education, 4. Nueva
      York: Macmillan.

     

    Datos de los autores:

    MsC. Yicel Frías Cabrera

    Ingeniera en Electrónica.

    Máster en Ciencias de la
    Educación

    Dr. Mario Jorge Malagón
    Hernández

    Ingeniero en Comunicaciones.

    Doctor en Ciencias Pedagógicas

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter