HISTORIA DE LA CIBERNETICA
Desde que terminó la segunda guerra
mundial, se ha trabajado en la teoría
de los mensajes. Además de la parte electrotécnica
de su transmisión, existe un campo muy amplio que incluye,
no solo el estudio del lenguaje, sino
además el estudio de los mensajes como medio de manejar
aparatos o grupos humanos,
el desarrollo de
las maquinas de
calcular y otros autómatas similares, algunas reflexiones
sobre la psicología y el sistema nervioso
y una tentativa de enunciar una nueva hipótesis del método
científico. Esta teoría
mas amplia de los mensajes es probabilística y porte
intrínseca de aquella corriente que debe su origen a
Willard Gibbs.
Hasta hace muy poco tiempo no
existía una voz que comprendiera ese conjunto de ideas;
para poder
expresarlo todo mediante una palabra, me vi obligado a
inventarla. De ahí: cibernética, que se deriva de la voz griega
kubernetes o timonel, la misma raíz de la cual los
pueblos de Occidente han formado gobierno y de sus
derivados. Por otra parte, se encontró mas tarde que la
voz había sido usada ya por Ampere. aplicada a la política, e
introducida en otro sentido por un hombre de
ciencia
polaco; ambos casos datan de principios de
siglo XIX.
En la época de los 50, consistía en esa
época en unas pocas ideas compartidas por los doctores
Claude Shannon, Warren Weaver y yo, se ha convertido en un campo
permanente de investigación. En consecuencia, aprovecho
la oportunidad que me da esta nueva edición para ponerla
al día y suprimir ciertos efectos e incongruencias de su
estructura
original.
Cuando alguien se pone en contacto con otra persona, le da un
mensaje y cuando responde, tiene que tener relación con lo
primero que se dijo, conteniendo informes
accesibles a el primordialmente; lo cual tiene una
relación entre hombres y maquinas, entre maquinas y
hombres y entre maquina y maquina.
Cuando se da una orden a una maquina, la
situación no difiere esencialmente de la que se produce
cuando mando algo a una persona. La
señal en sus etapas intermedias, haya pasado por una
maquina o por una persona carece de importancia y de ninguna
manera cambia esencialmente mi relación con señal.
Así la teoría de la regulación en ingeniería, sea humana, animal o mecánica, es un capitulo de la
teoría de los mensajes. Naturalmente, existen diferencias
de detalle en los mensajes y en los problemas de
regulación, no solo entre un organismo vivo y una maquina,
sino también dentro de cada clase mas especializada de
seres. Es propósito de la cibernética desarrollar una lengua y unas
técnicas que nos permitan, no solo encarar
los problemas mas
generales de comunicación y regulación sino
además establecer un repertorio adecuado de ideas y
métodos
para clasificar sus manifestaciones particulares por
conceptos.
Las ordenes mediante las cuales regulamos nuestro
ambiente son
una especie de información que le impartimos. Como
cualquier otra clase de informe,
están sometidas a deformaciones al pasar de un este a
otro. Generalmente llegan en una forma menos coherente y, desde
luego, no mas coherente que la de partida. En las comunicaciones
y en la regulación luchamos siempre contra la tendencia de
la naturaleza a
degradar lo organizado y a destruir lo que tiene sentido, la
misma tendencia de la entropía a aumentar, como lo
demostró Gibbs.
El hombre se
encuentra sumergido en un mundo que percibe mediante sus
sentidos. El cerebelo y el sistema nervioso
coordinan los informes que
reciben, hasta que, después de almacenarlos, colacionarlos
y seleccionarlos, resurgen otra vez mediante órganos de
ejecución, generalmente los músculos. Estos a su
vez actúan sobre el mundo exterior y reaccionan sobre el
sistema nervioso
central mediante receptores tales como los extremos de la
sensación centésica; la información que estos proporcionan se
cambian con la acumulación de vivencias pasadas influyendo
sobre las acciones
futuras.
Damos el nombre de información al
contenido de loa que es objeto de intercambio con el mundo
externo, mientras nos ajustamos a el y hacemos que se acomode a
nosotros. El proceso de
recibir y utilizar informaciones consiste en ajustarnos a las
contingencias de nuestro medio y de vivir de manera efectiva
dentro de el. Las necesidades y la complejidad de la vida moderna
plantean a este fenómeno del intercambio de informaciones
demandas mas intensas que en cualquier otra época; la
prensa, los
museos, los laboratorios científicos, las universidades,
las bibliotecas y los
libros de
texto han de
satisfacerlas o fracasaran en sus propósitos. Vivir de
manera efectiva significa poseer la información adecuada.
Así pues, la
comunicación y la regulación constituyen la
esencia de la vida interior del hombre, tanto
como de su vida social.
El lugar que ocupa el estudio de las comunicaciones
en la historia de
la ciencia no
es trivial, ni fortuito, no nuevo. Aun antes de Newton esos
problemas eran corrientes en la física; especialmente
en las investigaciones
de Fermat, Huyghens y Leibnitz; todos ellos compartían el
interés
por una ciencia cuyo
centro no era la mecánica sino la óptica,
la
comunicación de imágenes
visuales.
Fermat hizo progresar el estudio de la óptica
con su principio, según el cual la luz, en un
recorrido suficientemente corto, sigue el cual la luz, en un
recorrido suficientemente corto, sigue la trayectoria que le
exige el tiempo
mínimo para pasar de un punto a otro. Huyghens enuncio la
forma primitiva del principio que se designa hoy con su nombre,
diciendo que la luz se propaga desde un punto luminoso creando
algo así como una pequeña esfera, formada por
fuentes
secundarias que propagan la luz como lo hace la primitiva.
Mientras tanto, Leibnitz consideraba que todo el universo esta
compuesto de monadas cuya actividad consiste en la percepción
mutua, basándose en una armonía preestablecida por
Dios; es bastante claro que para él esa acción
mutua era en gran parte óptica. Aparte de esa percepción, las monadas no tienen
"ventanas", por lo que, según el, todos los efectos
mecánicos mutuos no son mas que una sutil consecuencia de
la acción óptica entre ellas.
La preocupación por la óptica y los
mensajes que aparece claramente en esta parte de la
filosofía de Leibnitz, se encuentra también en toda
su obra. Leibnitz, poseído por la idea de las
comunicaciones, es en varios aspectos, el antepasado intelectual
de los conceptos de este libro, pues
también se intereso por las maquinas de calcular y los
autómatas. Las maquinas de calcular de Leibnitz fueron
solo un resultado de su interés
por un lenguaje
aritmético, por un calculo razonador que para el era solo
una extensión de su idea de un lenguaje artificial
completo. Es decir que, aun al ocuparse de maquinas de calcular,
el interés capital de
Liebnitz residía primordialmente en la
lingüística y en las comunicaciones.
A mediados del siglo pasado, las investigaciones
de Clerk Maxwell y de Faraday, su precursor, atrajeron nuevamente
la atención de la física hacia la
óptica, la ciencia de
la luz, considerada desde entonces como un aspecto de la electricidad que
podía reducirse a la mecánica de un curioso medio
invisible y rígido llamado éter; en aquella
época se suponía que el éter impregnaba la
atmósfera,
el espacio interestelar y todas la sustancias trasparentes. Las
investigaciones ópticas de Clerk Maxwell consitieron en
desarrollar matemáticamente las ideas de Faraday
había expresado sin formulas de manera muy clara. El
estudio del éter planteaba ciertas cuestiones cuya
respuesta no era muy evidente como, por ejm, la del movimiento de
la materia a
través de ese medio. Con la famosa experiencia de
Michelson y Morley en la ultima década del siglo XIX se
pretendió resolver ese problema; proporciono una respuesta
inesperada: no ha ningún modo de determinar el movimiento de
la materia a
través del éter.
La primera solución satisfactoria del problema
que planteo el resultado de ese experimento fue dada por Lorentz;
este investigador explico que, si son eléctricas u
ópticas las fuerzas que mantienen unida la materia,
debería esperarse u resultado negativo del experimento de
Michelson y Morley. Sin embargo, Einstein en 1905, puso esas
ideas de Lorentz en forma tal que la imposibilidad de observar el
movimiento de absoluto venia a ser un postulado de la
física y no consecuencia de alguna estructura
peculiar de la materia. En lo que respecta a nuestros
propósitos importa que, en las investigaciones de
Einstein, la luz y la materia se encuentran en un pie de igualdad, como
ocurría en las obras de los autores anteriores a Newton, sin la
subordinación newtoniana de todo a la materia y al
movimiento.
Para explicar sus ideas Einstein utiliza ampliamente el
ejm de un observador en reposo o en movimiento. En su
teoría de la relatividad es imposible introducir un
observador sin incluir al mismo tiempo el concepto de
mensaje y sin volver de hecho a colocar el centro de gravedad de
la física en un estado
quasi-leibnitziano, cuya tendencia es nuevamente
óptica. La teoría de la relatividad de Einstein y
la mecánica estadística de Gibbs se encuentran en
campos enteramente opuestos, pues el primero, como Newton, se
ocupa de la dinámica de cuerpos absolutamente dentro
del calculo de probabilidades; sin embargo, ambas tendencias
equivalen a desplazar el punto de vista de la física; en
ellas, por un metodo y otro, se reemplaza el universo tal como
existe realmente por otro, conforme a las observaciones que se
hayan efectuado; el arcaico realismo
ingenuo de la fisica cede a algo que Berkeley habria considerado
con una sonrisa de satisfaccion.
Las maquinas mas antiguas, en particular, las primeras
tentativas de producir automatas, funcionaban como el mecanismo
de un reloj, sin admitir variacion despues de iniciado el
movimiento. Pero las modernas, tales como los proyectiles
teledirigidos, la espoleta de aproximacion, el mecanismo de
apertura automatica de las puertas, los aparatos de regulacion de
una fabrica de productos
químicos y las otras que efectuan trabajos militares o
industriales, poseen organos sensoriales, es decir, mecanismos de
recepcion de mensajes que provienen del exterior. Pueden ser tan
sencillos como una celula fotoelectrica, que cambia cuando la luz
incide sobre ella y que puede distinguir la luz de la obscuridad,
o tan complicados como un aparato de television. Pueden medir una
tension por el cambio que
produce en la conductibilidad de un alambre sometido a ella o
estimar temperaturas mediante un par termoelectrico, que consiste
en dos metales distintos
intimamente unidos que producen una corriente cuando se calienta
uno de ellos. Todo instrumento del repertorio del fabricante de
aparatos cientificos es un organo sensorial posible; mediante
sistemas
electricos se obtiene que las lecturas se registren a distancia.
Asi, pues, ya poseemos desde hace tiempo maquinas cuyo comportamiento
esta regulado por el mundo exterior.
También nos es familiar la maquina que obra sobre
su ambiente al
recibir un mensaje. Toda persona que ha pasado por la
estación Pennsylvania de Nueva York
conoce el aparato fotoeléctrico para abrir puertas. Cuando
llega a él un mensaje, que consiste en la intercepcion de
un rayo luminoso, se abre la puerta y el viajero para a
través de ella.
Las etapas entre la recepcion de un mensaje mediante
aparatos de este tipo y la ejecusion de una tarea pueden ser muy
simples, como en el caso de la apertura de una puerta, o pueden
tener cualquier grado de complejidad deseada, dentro de los
limites de
nuestra tecnica actual.
Una acción compleja es aquella en que los datos
introducidos, que llamaremos entrada, implican un gran
numero de combinaciones para obtener un efecto, que llamaremos
salida, sobre el mundo exterior. Esta ultima es
combinacion de los datos recibidos
en ese momento y de los hechos registrados en el pasado, que
llamaremos memoria y que guarda el aparato. Las mas
complicadas maquinas construidas hasta ahora que transforman los
datos de la entrada en otros de salida son las
electrónicas de calcular de alta velocidad. La
determinación de la forma de comportamiento
de estas maquinas esta dada por una entrada especial, que
consiste generalmente en tarjetas
perforadas, cintas o alambres magneticos que fijan la manera como
ha de actuar la maquina en una operacion dada, una manera
diferente de la que podria ser en otra ocasion. Debido al uso
frecuente de tarjetas
perforadas o de cintas mangeticas, los datos que se suninistran
al aparato y que indican el modo de operar de una de esas
maquinas para combinar los informes, se llaman
tecleado.
Es cierto que han de tomarse las precauciones necesarias
para que no sea muy intenso, pues si lo es, el tubo pasara mas
alla de la posicion correcta y habra que hacerle girar de vuelta
en una serie de oscilaciones que muy bien pueden aumentar en
amplitud y conducir a una enestabilidad desastrosa. Si el sitema
de retroalimentacion se correge automaticamente, en
otras palabras, si sus propias tendencias entropicas estan
limitadas por otros mecanismos que las mantinen entre muy
estrechas cotas, eso no ocurrira y la existencia de ese
dispositivo aumentara la estabilidad del funcionamiento del
cañón. Dicho de otra manera, la actividad dependera
menos de la carga de friccion o, lo
que es lo mismo, del retardo causado por la rigidez de la grasa.
Algo muy similar a esto ocurre en los actos humanos como llevarse
un cigarro a la boca.
El funcionamiento fisico del ser vivo y el de algunas de
las mas nuevas maquinas electronicas son exactamente paralelos en
sus tentativas analogas de regular la entropia
mendiante la retroalimentacion. Ambos poseen receptores
sensoriales en una etapa de su ciclo de operaciones, es
decir, ambos cuentan con un aparato especial para extraer
informes del mundo exterior a bajos niveles de energia y para
utilizarlos en las operaciones del
individuo o de la maquina. En ambos casos, esos mensajes del
exterior no se toman en bruto, sino que pasan a través de
los mecanismos especiales de transformación que posee el
aparato, vivo o inanimado.
EL HOMBRE Y LA CIBERNETICA:
Hemos decidido llamar a toda la materia referente al
control y
teoría de la comunicación, tanto en la maquina como en
el animal, con el nombre de cibernética. Ciertamente que
ya Platón
empleo la
palabra en el sentido de forma de pilotar una nave. Cierto que
Ampere, en su clasificación de todos los conocimientos
humanos, la utiliza para designar los medios de
gobierno. La
palabra, en fin, procede etimológicamente del griego
Kybernetes, piloto, timonel, de ahí su sentido
actual, superador del mas estricto de Plato o de la Iglesia que la
utiliza como ciencia de su propia organización.
Pero la cibernética obviamente no se circunscribe
al platónico "arte de gobernar
un timón". Es un concepto mucho
mas amplio. Y lo es aun cuando consideremos, siguiendo a
Guilbaud, el existente entre el capitán que señala
adonde ha de ir la nave y el timonel que maneja la barra, a traes
del piloto que señala el rumbo. Ciertamente, el piloto es
ejm de pensamiento
cibernético, puesto que situado entre el capitán
que fija el objetivo y el
timonel que lleva el buque, elige el programa de
acción y da las ordenes al timonel. Es ciertamente algo
mas amplió: es el estudio del funcionamiento de toda clase
de sistemas.
Louis Couffignal, fundamenta: "Ya fue el propio Wiener
quien, anticipándose a buscar una concreción a su
fundamental concepción, vasta y difícil, en su
segunda obra The Human Use of Human Beings, se oriento
especialmente hacia el campo de las ciencias
humanas"; así como también "no aporto los elementos
suficientes para construir esta extensión".
En Wiener hay mucho, sin duda. Pero era necesario al
"humanizar" la cibernética sustituir y precisar las
nociones implícitas y a veces poco claras de el, por otras
mas explícitas y concretas. Así, de su
definición "…control y
comunicación tanto en la maquina como en el animal" con
que iniciamos, seria preciso primero sustituir maquina,
concepto vago e impreciso, por mecanismo. También
será necesario -y quizá mucho mas fundamental que
lo anterior- que el termino control tuviese un significado
mas concreto, como
el de orden mandato…, por analogía en la sociedad humana;
igualmente la palabra comunicación tiene que ser
concretada. No nos vale. A ello se llego, como se vera, a
través de la teoría de la
información.
En efecto, el sentido etimológico de
cibernética es mas amplio de lo que en principio parece.
Volvamos nuevamente al ejm de la nave, su capitán, piloto
y timonel. El piloto controla, gobierna u ordena el rumbo del
barco tiene, previamente, que estar informado no solo de adonde
ha de dirigirse (orden del capitán), sino del estado de la
mar, velocidad y
dirección d los vientos, etc. Recibe toda
esta información y toma una decisión: el
rumbo.
Es por ello por lo que el propio Wiener en su segunda
obra dice: "Cuando controlo las acciones de
otra persona le comunico un mensaje y aunque este sea de naturaleza
imperativa, la técnica de la comunicación no
difiere de la técnica de la transmisión de un
hecho. Por demás, si deseo que mi control sea eficaz, debo
informarme de todos los mensajes procedentes de la persona,
capaces de advertirme que la orden ha sido comprendida y
ejecutada".
"En forma similar -señala Couffignal- el cerebelo
humano recibe del cerebro las
indicaciones de lo que hay que hacer: por los nervios
propioceptores recibe en cada momento la indicación del
estado de cada músculo y por los nervios de los canales
semi-circulares la indicación de la posición del
cuerpo, en relación a la vertical de un triedro de
referencia; el cerebelo constituye a partir de estos datos las
ordenes que han de enviarse a los músculos para que el
movimiento sea ejecutado sin comprometer el equilibrio del
cuerpo: el cerebelo es un órgano
cibernético"
Pero también las maquinas tienen "órganos"
cibernéticos. El mas simple es el regulador de Watt,
aplicable a las maquinas de vapor.
Veamos la descripción que de él nos hace
Guillaumaud. Para este autor, de una solida formacion tecnica, es el
antecedente de todos los servomecanismos industriales,
componiendose de:
– Un árbol O movido por el volante de la
maquina de vapor cuya velocidad se quiere regular.
– Un equipo articulado que comprende dos varillas mn y
dos balancines qp, cuyas extremidades q estan unidas por articulaciones a
un anillo A que se desliza sobre O. Cuando la velocidad de la
maquina, y, por lo tanto, la de rotacion del arbol O aumenta, las
bolas se levantan bajo la accion de la fuerza
centrifuga y hacen subir A a lo largo de O. A lleva hacia lo alto
una varilla T que manda el Cierre de una compuerta que estrangula
parcialmente la llegada del vapor; la velocidad de la maquina
tiene entonces a decrecer. La compuerta se abre de nuevo y la
velocidad tiende entonces a aumentar. Por ultimo, la velocidad se
mantiene practicamente constante despues de un cierto tiempo, al
menos durante las condiciones normales de carga de la
maquina.
Prácticamente todos los reguladores, incluyendo
el prosaico y generalizado flotador de las cisternas de los no
menos vulgares retretes, pasando por los termostatos y
reguladores modulantes, hasta llegar al piloto automatico, son
organos ciberneticos.
Pero con independencia
de este desarrollo de
los mecanismos de control, lo importante a nuestro juicio, es la
semejanza desde el punto de vista cibernético entre
ciertos organos de los seres vivos y los órganos
cibernéticos de las maquinas en su objeto o fin,
así como en su estructura y su funcionamiento. Esto hace
decir a Wiener que "Los numerosos automatas de la epoca actual
estan acoplados al mundo exterior tanto por la recepcion de
impresiones como por la ejecucion de acciones. Contienen organos
sensoriales, causas eficientes y el equivalente de un sistema nervioso
para integrar la transferencia de informacion de uno a otro. Se
prestan muy bien a la descripcion en
terminos fisiologicos. Es casi un milagro que puedan ser
agrupados bajo una misma teoria con los mecanismos de la
fisiologia"
Es por ello por lo que, distinguiendo los mecanismos
artificiales construidos por el hombre, de
los mecanismos naturales, no construidos por el, se ha llegado a
hablar de una zoologia de las maquinas basada en la
cibernetica. Pero no es nuestro objetivo
seguir por este camino todavia oscuro y muy discutible. Quiza
este nos llevase a las aberraciones de la iatroquímica que
considera al hombre como una maquina. Nuestro objetivo es buscar
la relacion del hombre con la cibernetica a través de un
concepto mas amplio de esta nueva ciencia que el plasmado por
Wiener. Quiza Wiener no pase de ser, a este respecto un humanista
imprudente, como lo califico Aurel David.
Para Couffignal, la cibernética no es el
descubrimiento de maquinas intermedias mas perfeccionadas, ni el
descubrimiento de lo que en el hombre probablemente es
mecánico, por ser intermediario. Para Couffignal la
cibernética es:
El arte de hacer
eficaz la acción.
El arte de asegurar la eficacia de la
acción.
Dejemos a un lado un aspecto importante, pero en cierto
modo ajeno: El de sí la cibernética es para
Couffignal un arte y no una ciencia. Preguntémonos con
más interés, Pero de qué acción? Es
casi obvio señalar que se trata de la acción
lógica
del hombre.
Es precisamente para la sociedad humana
para la que Wiener había previsto que la
cibernética llevaría una revolución
profunda en sus métodos de
acción. Es quizá esto último lo que
Couffignal nos quiere decir al definir también la
cibernética como una metodología de la acción.
En este sentido, si las facultades esenciales del hombre
son la comprensión global y las operaciones
lógicas, la primera asimilada en paralelo y a gran
velocidad por el sistema nervioso
y las segundas son secuenciales y, por tanto, realizadas a un
ritmo mas lento, no hay duda que la máquina
cibernética puede ser un auxiliar valiosísimo en la
acción que el hombre realiza.
A estos efectos Kaufmann nos dice: "Las operaciones
lógicas que el hombre lleva a cabo tan lentamente, el
ordenador puede realizarlas un millón o mil millones de
veces más rápido, con la condición de que
ello pueda hacerse a partir de un programa
establecido por el hombre".
Pero antes de insistir sobre este punto es conveniente
que veamos la diferenciación a efectos cibernéticos
entre el animal y el hombre. Y ello porque Wiener, con el famoso
título de su fundamental obra, puede inducirnos a creer
que podemos actuar cibernéticamente sobre los animales no
racionales. Casi es obvio señalar que esto no es posible
con independencia
de otras múltiples razones que pueden ser traídas a
colación, puesto que si tanto el animal como el hombre en
sus acciones intentan conseguir ciertas satisfacciones, si ante
las contrariedades reaccionan adaptándose, huyendo o
luchando, si la reacción del hombre como la del animal es
de tipo aleatorio, la mentalidad del hombre está
obviamente mucho más desarrollada diferenciándolo
del animal. Tienen, en suma, distintos comportamientos. Por
demás, "La acción del hombre sobre el hombre se
realiza por comunicación de informaciones".
Sentada esta diferencia que nos permite corregir al
profesor Wiener en el sentido de denominar o definir con
más propiedad,
según creo, la cibernética como el control y
comunicación en el hombre u en la máquina, es
conveniente, para evitar posible confusión, establecer las
diferencias entre el hombre y la máquina, entendiendo
aquí por hombre, la "máquina" cerebral.
Acudamos para ello a un trabajo del eminente profesor
John von Neumann. Es bastante conocido que el cerebro con sus
varios miles de millones de células
funciona con una energía inferior a 100 vatios. Una
máquina que tuviera tantas células
como el cerebro necesitaría 100 millones de vatios. Von
Neumann ha calculado, sin embargo, que, en teoría, las
células pueden ser 10.000 millones de veces más
eficientes en el uso de la energía. La economía de
energía del cerebro es evidente-
Por el contrario, en el uso de la energía el
hombre va muy por detrás. Mientras que un nervio no puede
ser usado más de cien veces por segundo
–señala Kemeny-, un tubo de vacío puede ser
abierto y cerrado un millón de veces por segundo y se
espera que se pueda hacer aún más
rápidamente. Sin duda, pese a las actuales limitaciones,
las máquinas
aventajan en velocidad al cerebro, y ello es una gran ayuda a la
acción del hombre.
Pero el cerebro humano es mucho más complejo y
hace muchas cosas que la máquina no puede hacer. Tiene
10.000 millones de células, mientras que una computadora
sólo tiene unas cuantas decenas de miles. Aun con los
transistores
que vencen problemas de espacio, la dificultad de construcción no permitirá más
que un millón, según previsiones
optimistas.
Por otro lado, la memoria del
cerebro humano es mucho más completa que la de las
máquinas más perfectas en cuanto a su capacidad. No
son comparables por la simple razón de que las
máquinas no han imitado todavía el método del
cerebro humano en el almacenamiento y
recuperación de la información.
Según Wiener: "Una función
muy importante del sistema nervioso y, como hemos dicho, una
función igualmente exigible en las máquinas
computadoras,
es la de la memoria, la
habilidad de guardar los resultados de operaciones pasadas para
utilizarlos en el futuro. Se verá que los usos de la memoria son
muy variados y es muy improbable que cualquier mecanismo simple
pueda satisfacer las demandas de todos ellos".
Existe, primeramente, la memoria que es
necesaria para la realización de un procedimiento
corriente, como la multiplicación, en el que los
resultados intermedios no tienen valor hasta
que el procedimiento no
esté acabado, y en el que el aparato operador debe
entonces quedar libre para un uso posterior. Tal memoria debe
registrarse, ser leída y borrarse, todo ello
rápidamente.
Por otra parte, existe la memoria que se pretende sea
parte de los archivos, del
registro
permanente, en la máquina o en el cerebro, y que
contribuye básicamente en su conducta futura,
al menos durante una operación de la
máquina.
La PRAXEOLOGIA, que es la lógica
de la actividad racional: como la ciencia que estudia los
métodos a los que aquélla recurre. Aparece los
siguientes casos:
Cuando la actividad humana se propone un fin de forma
indirecta, por medio de la utilización de una larga
cadena de causas y efectos, cuyos elementos están
concatenados los uno a los otros; en estos casos, la
cibernética procede a un análisis preciso de los procesos que
se producen en esta cadena.
En los casos en que las condiciones externas se
modifican en el curso de la acción, sobre todo si esta
modificación es el resultado de la acción en
curso. En este caso, se queremos alcanzar el fin que nos hemos
propuesto, se deben modificar los medios de
acción. Aparece entonces una cadena que puede expresarse
en:
Fin.
Medios de la acción.
Modificación de condiciones.
Nuevos medios.
Nueva modificación de condiciones, y así
sucesivamente.
El elemento básico en estos casos es una
rápida información, exacta y suficiente, sobre la
modificación de las condiciones que se producen en el
transcurso de la acción y la adaptación
rápida de los medios a las nuevas condiciones.
Es un proceso de
ajuste de la acción a las condiciones en constante
adaptación que se sigue mientras las condiciones se
modifiquen.
"La significación de la cibernética para
la praxeología consiste en que, en ciertas cuestiones,
esta última utiliza los resultados de aquélla,
aplicándolos al estudio de problemas determinados de la
actividad humana".
Así comprendemos que la cibernética y sus
relaciones con la praxeología, pero teniendo que recurrir
a los sistemas relativamente aislados y su aplicación a la
cibernética.
SISTEMAS CIBERNETICOS:
SISTEMA PROSPECTIVO DETERMINADO:
La llave y su correspondiente cerradura y cerrojo. La
llave es el único input y el cerrojo de la
cerradura su único output. El estado del
cerrojo siempre está determinado únicamente por
el estado
pasado (movimiento) de la llave.
SISTEMA PROSPECTIVO SEUDODETERMINADO:
Supongamos dos urnas que contiene sólo bolas
negras y bolas blancas. En una de las urnas hay más bolas
negras que blancas y en la otra urna sucede lo contrario. Se
extraen las bolas, una a uno, indistintamente de las urnas
colocándolas en un plato. Antes de hacer la siguiente
extracción se reintroduce la bola en su correspondiente
urna.
El input al sistema es obviamente la mano extractora,
representando dos: uno a cada urna. Los outputs son
también dos (bola blanca y bola negra en el plato). Si el
input está en la urna con más de bolas blancas, la
probabilidad
de sacarla de ese color es mayor
que un medio.
SISTEMAS RETROSPECTIVO DETERMINADO:
La habilidad de un policía estriba en conocidos
los estados presentes de output (huellas dactilares o de otro
tipo) determinar únicamente los estados pasados del input
(el auto del delito).
SISTEMA RETROSPECTIVO SEUDODETERMINADO:
Utilizando el ejemplo anterior, que es el ideal
soñado por el policía, cabe señalar que la
realidad difiere de los sueños, de forma que todos los
policías tienen que luchar en sus investigaciones con
sistemas retrospectivos seudodeterminados.
CONCEPTOS BASICOS EN LA CIBERNETICA:
La mejor formulación se debe a Louis Couffignal.
Por demás, y con independencia de su valor
intrínseco, tuvo ocasión de contrastarlos en el
simposio sobre
Cibernética y Conocimiento,
y de revisarlos para su publicación, La
Cybernétique.
Presenta las siguientes definiciones, casi inspiradas en
las obras de Grey Walter, cuyo trabajo más significativo
ha sido despojar de sus evocaciones metafísica
los términos que la biología toma de la
psicología.
CONCEPTO BASE I. SER HUMANO:
Medio exterior. Todo lo que no es parte del ser
humano.
Acción física sobre el ser humano.
(acción ejercida por el medio exterior).
Acción física del ser humano
(acción ejercida sobre el medio exterior).
Circunstancia (de un ser humano). Parte del medio
exterior en situación de actuar sobre este ser humano o
de sufrir su acción.
CONCEPTO BASE II. ACCION HUMANA:
La acción del ser humano se
ejerce:
Sobre una zona limitada de su
circunstancia.
Durante un período limitado.
Comienza en un momento determinado.
Campo de la acción. (conjunto de
circunstancias ligadas a la acción).
La acción exige:
Definir su objeto. (modificar las
circunstancias).
Preparación (elaboración de un
programa de acción).
Decisión de actuar (toma de conciencia o juicio de valor).
Ejecución.
Programa (descripción de un conjunto de actos
elementales estructurados cuya realización presupone
alcanzar el fin propuesto).
Reacción (modificación del medio
exterior como consecuencia de los actos elementales
realizados).
Comportamiento (modo de reacción del medio
exterior).
Pasivo (la reacción que se presupone en el
programa).
Determinista. (la reacción no es la que se
presupone en el programa, pero está ligada a los
agentes de ejecución de la acción por
leyes
conocidas.
Aleatorio (la reacción del medio exterior
no es la que presupone el programa y se desconoce la
ley que
la relaciona con los agentes de
ejecución).
Guía de la acción (conjunto de medios
puestos en juego para
que la acción sea eficaz).
Cibernética: Arte de hacer eficaz la
acción.
Para Couffignal la cibernética es, como ya
sabemos, el arte de hacer eficaz la acción, pero no debe
confundirse con la guía de la acción, ya que
ésta última es un conjunto de operaciones, unas
materiales,
otras psíquicas. La cibernética se ocupa de
la
organización de estas operaciones y de otras
necesarias para la eficacia de la
acción, en especial en preparación y la
decisión.
Autor:
Miguel Martín Arroyo Beltrán