INTRODUCCIÓN
El trabajo es una
coherente aproximación a un tema de trascendencia tope en
los principios de
este siglo al abordar una arista del integral desenvolvimiento de
unos de los líderes más prominentes que ha aportado
el siglo XX y lo que va de siglo XXI, sin dudas es notable su
quehacer que lo ha llevado a tener la posibilidad de conducir uno
de los procesos
sociales más cultos que la historia humana ha conocido,
la emancipación real y materializante del pueblo cubano,
esa especie de dinosaurio que emerge en el caribe cualificando de
manera valedera los ideales de justicia y de
equidad
sociohumana en indicadores
sumamente palpables y que han catalizado la necesidad de seguir
contando con ese hombre mayor
que ha sido, es y será Fidel Castro Ruz; dejemos pues a la
consideración del lector este interesante
abordaje.
FIDEL CASTRO RUZ:
¿ PROLONGADA PRIMACÍA EN EL PODER
?
En la Revista
Síntesis No. 15 de septiembre-diciembre de
1991, entre otros, aparece un artículo de la
politóloga norteamericana Rohdas Pearl Rabkin titulado:
"Instituciones
y Política
1970-1980" en el que la autora examina la situación que
presentaba el sistema
político cubano en esos diez años. Son
sometidos a críticos análisis, las autoridades cubanas,
comenzando por el Partido Comunista de Cuba (PCC), su
papel, militancia, el Buró Político, las
instituciones estatales: Asamblea Nacional, Consejo de Estado,
Consejo de Ministros, Asambleas Provinciales y Municipales, la
Constitución de 1976 y la organizaciones de
masas hasta llegar al punto controversial: la prologanda
primacía de Fidel.
El artículo de la Rhodas Pearl Rabkin en su
conjunto está bien elaborado, mediante un lenguaje ameno
y claro aborda una serie de aspectos que resultan interesantes.
En su exposición
se mezclan verdades, verdades a media y tergiversaciones o
desconocimiento en el mejor de los casos de la realidad cubana.
Mantiene bastante vigencia por ser coincidentes en muchos
aspectos con las opiniones y términos al uso por los
ideólogos del imperialismo,
que si bien, con la
administración Bush, no se caracterizan en sentido
general, por ser "tanques pensantes", no deja de contar con algun
que otro "analista" que a partir del poder mediático
difunde su ideología, por muy absurda que ésta
sea.
Diez años después, Heinz Dieterich
Steffan, destacado intelectual y Presidente del Foro por la Emancipación y
la identidad de
América
Latina en aquellos momentos escribe en la Revista
Tricontinental No. 146 año 35/2001 un artículo bajo
el título: "El comandante de la dignidad"
referido a la figura de Fidel Castro.
Dieterich analiza el marco histórico que condiciona la
disyuntiva Latinoamericana, en el siglo XXI, de ser anexo
necolonial de EEUU o dueña de su propio destino,
círculo que se abrió en 1492, con el proceso que el
autor califica como primera globalización colonial de América
Latina y que se cierra en 2005 en la recolonización
terminal por el neoliberalismo. Por último se refiere a
Fidel : "Uno de los mayores estadistas mundiales de la
postguerra"
Uno y otro artículo, el de la Rabkin y el
Dieterich nos han servido para establecer una suerte de
comparación entre una y otra interpretación acerca de una indudable
personalidad
histórica trascendental en los marcos de una realidad
histórico-concreta específica como lo es el caso de
Cuba. Misterioso para los que intenten analizar nuestra
situación sin tener en cuenta los condicionamientos
económicos, socioculturales y políticos de una
nación
forjada en el pensamiento de
la Padres fundadores de la patria, que entre otros valores nos
legaron su sentido ético de la vida y enfrentada
además a las pretensiones y agresiones del imperialismo
yanqui que han dado lugar al histórico diferendo Cuba –
EUU.
Muchos de los temas abordados se mantienen en los
medios de
propaganda
norteamericanos y su epígonos en otros países, con
distintos matices. Los puntos de vista esgrimidos motivaron
nuestro interés
por profundizar en el tema referido a la
personalidad de Fidel . Ello conllevó a un acucioso
rastreo de las fuentes, sobre
todo secundarias a nuestro alcance. Fueron consultados más
de cien títulos diversos y discursos e
intervenciones del máximo líder
de la Revolución
Cubana, desde la alocución " Revolución, SI; golpe militar, No" del 1 de
enero de 1959, pasando por "Quizás en lo adelante todo sea
más difícil" el 8 de enero de 1959 y otros en
años sucesivos, hasta "Podemos construir la sociedad mas
justa del mundo", discurso
medular del 17 de noviembre de 2005. Asimismo se consideró
como antecedente una serie de escritos e intervenciones del
máximo dirigente de la Revolución Cubana anteriores
al triunfo de enero del 59, para poder asumir criterios propios,
desde nuestra modesta óptica
provinciana, acerca de la personalidad histórica de Fidel
Castro, su pensamiento filosófico, ético, ideo
político y militar como paradigma de
las actuales y futuras generaciones frente a la
sistemáticas campañas mediáticas que son
desatadas en medio de la Batalla de Ideas más grandiosa de
todos los tiempos que libra nuestro pueblo
Han pasado 15 años del artículo de Rabkin
y 5 del escrito de Dieterich. En el transcurso de este tiempo se
produjeron substanciales cambios situacionales en la arena
internacional, sobre todo en América Latina . Fidel Castro
cumplirá 80 años dentro de unos días y los
enemigos de la Revolución y otros escépticos
apuestan en el sentido de que con la desaparición física de Fidel
Castro se desmoronará la obra a la cual ha dedicada toda
su vida desde que maduró su conciencia como
ente social: La Revolución.
En el presente artículo realizamos un desmontaje,
sobre bases científicas y metodológicas, acerca de
los planteamientos de la Rabkin y otros más recientes que
insisten en el supuesto "culto tropical a la personalidad" de
Fidel y el destino futuro de la Revolución Cubana ligado a
la existencia del máximo dirigente de la misma.
En todo caso la cuestión de la " la prolongada
primacía de Fidel Castro" continúa teniendo un
vigor tal en las valoraciones del procedo revolucionario cubano,
realizadas por amigos y enemigos que lejos de menguar, parece
acrecentarse por días. No es casual que la prepotente
Ley
Helms-Burton mencione, entre otros inaceptables exigencias, la
eliminación del escenario político de nuestro
país, de la figura de Fidel y Raúl Castro. El
actual gobierno
ultraconservador y neofascita de W. Bush ha añadido nuevos
componentes a las mismas. La prensa
extranjera, en gran medida, se refiere también a este
tópico al cuestionar nuestra democracia y
sistema
político.
El estudio de Rabkin parte de varios presupuestos
que pueden ser resumidos como sigue
- Establecimiento de una relación unívoca
entre lo que ha dado en nombrar "liderazgo
carismático" de Fidel con la participación de las
masas en un sistema político supuestamente
institucionalizado
- Consideración de que el liderazgo de Fidel
Castro es un elemento clave en el sistema político
cubano, pues el prestigio, legitimidad y autoridad
del propio aparato del partido,el gobierno, y de las
organizaciones de masa, son provisionales y en "definitiva
están supeditados a su persona
(Fidel), ya que él los evalúa, mientras
éstos no tienen posibilidad de evaluarlo a su vez" Cita
como ejemplos la decisión de revisar completamente la
planificación que se venía
aplicando, hecho que se produjo en noviembre de 1895,
así como el proceso de rectificación en 1986. Los
actuales "estudiosos" del caso cubano, sitúan ejemplos
más recientes. Todas estas medidas son presentadas como
decisiones unipersonales. La Rabkin señala:
"…Castro sólo, y ni siquiera la primera
institución en Cuba, el PCC, es el garante de los valores
revolucionarios (…) Castro no sólo determina las
líneas maestras de las políticas nacionales, sino que
continúa involucrándose en los detalles de muchos
asuntos aparentemente poco importantes "
- Planteamiento de que Fidel es un infatigable
recolector de información que conoce el sentir de las
masas a través del Partido, el Gobierno y de las
organizaciones de masa, pero también a la labor que
despliega el Grupo de
Coordinación y Apoyo, cuyos integrantes
son nombrados "a dedo"
- Dice que el interés de Fidel por controlar
personalmente cada aspecto de la sociedad cubana es
consecuencia de su trastorno de la personalidad,
"expresión de condiciones mentales patológicas",
basadas en el rumor de que el líder cubano es un
maníatico depresivo. En este mismo orden compara a Fidel
con otras personalidades históricas como Abraham
Lincoln, Wiston Churchill, José Stalin e incluye a
Adolfo Hitler; todos
dados a intervenir en los detalles de las acciones
militares, pero señala que en el caso de Fidel se dan
dos circunstancias singulares: " …el número de
responsabilidades que éste ha concentrado en sus manos y
de que Cuba no está en guerra con
ningún país extranjero"
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