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El Estado y los procesos de descentralización política en Bolivia (página 2)



Partes: 1, 2


JUSTIFICACIÓN Y ALCANCES, FILOSOFÍA DE NUESTRO
EMPRENDIMIENTO

Su utilidad, su
pertinencia y sus límites

Careciera de sentido el emprender algo, sin prever las
posibilidades de su utilidad presente o futura, respondiendo a
esta temática, hemos querido encarar el estudio de esta
problemática, con fines meramente académicos, y de
facilitación del conocimiento,
a un nivel social, y crítico, generalmente escaso en
nuestra realidad, pero que necesita de estos insumos, para formar
su propio conjunto de ideas que la haga impermeable, a las
deformaciones, discursivas y a los falsos criterios de
verdad.

En síntesis
la filosofía de este trabajo se
reduce a esclarecer, y sobre todo a sistematizar y resumir todo,
o parte de cuanto se ha dicho y escrito sobre la
problemática de la descentralización, con el deseo de abrir la
ruta de la compresión y la critica en los niveles
universitarios; esta temática que ha sido ampliamente
abordada, por eminentes politólogos y sociólogos es
preciso, ahora cotejarla con las propuestas que sobre el mismo
tema han presentado las organizaciones
sociales y los pueblos indígenas ha objeto luego de
sistematizarlas y establecer criterios de convergencia y
divergencia, para obtener conclusiones y reflexiones que nos
servirán para tener un conocimiento cabal sobre el tema, y
no dejarnos seducir por consideraciones, y propuestas que nos
vienen de uno o de otro lado, y que en la mayoría de los
casos, representan los interés de
sus impulsores.

CONTEXTO
TEÓRICO E HISTÓRICO

Una introducción al problema de la
descentralización y las autonomías.

La problemática en torno a las
autonomías, denominación muy politizada a estas
alturas, ha sobrepasado las fronteras de su significación;
representa también, un conjunto de problemas, que
alejándonos de su aspecto formal, pende entre sistemas de
percepción subjetiva, diferenciada, agrupa,
consecución de situaciones históricas, y
enraíza también posicionamientos ideológicos
y políticos.

Esa riqueza pluridimensionada de visión, respecto
al tema, identifica sus contenidos, que sobrepasan su
nominalidad, encuadrándola entre límites que
parecieran poco definidos, estos contornos son precisamente, los
que le dan su carácter de complejo y hasta conflictivo.
Las autonomías, no son un problema en si,¾ al menos subjetivamente¾ si no que detrás de este concepto se
esconden, y subyacen situaciones diversas de entre las cuales
resaltamos, las histórico-culturales,
etnologico-antropológicas, situaciones sociales
económicas y políticas,
entre otras, que revisten el devenir actual de la estatalidad
boliviana, y que adquieren relevancia conflictual en torno al
desgaste de modelos y
sistemas, estatales, mentales y sociales que antes las
negaban.

Intentada la ubicación conceptual del
término de autonomías, es preciso ahora
señalar sus orígenes, esta palabra muy usada ahora
en el campo discursivo político, no es reciente y tampoco
esta separada de procesos que
le dan su trascendencia política; como vimos
en la definición referenciada por García Linera,
las autonomías significan una distribución de poder estatal
a ámbitos territoriales, por tanto esta íntimamente
ligada a procesos de descentralización y
desconcentración del poder político dentro de un
estado
determinado.

Estos fenómenos, han estado rondando
intermitentemente las realidades políticas de los estados
latinoamericanos, que desde las reformas liberales de los 80 y
90, han buscado modernizar sus estados, a través de
políticas de eficiencia
administrativa, que en estados de fuerte tradición
centralista, se han aplicado con la figura de la
municipalización territorial, a la cual se han transferido
competencias
políticas, administrativas, y tributarias, con el objeto
de que sean los poderes locales los encargados de gestionarlas,
esto en sociedades de
alta homogeneidad cultural y política no ha tenido mayores
inconvenientes, pero en sociedades como la nuestra, donde se
superponen varias realidades culturales y políticas
aquello no ha sido sencillo.

Las políticas de descentralización que en
historia reciente
tienen su inicio en la ley de
participación popular, no han considerado esa realidad, y
claro testimonio de aquello es la situación actual, que
promueve fuerzas centrifugas en torno a la
descentralización que rebasan al ámbito municipal,
y que llegan al intermedio e incluso al nacionalitario con el
consiguiente estrangulamiento del viejo sistema
estado-nación
bolivianos.


CONSIDERACIONES GENERALES SOBRE EL ESTADO Y
SUS FORMAS: EL ESTADO BOLIVIANO

Procesos de centralización y descentralización,
entre el unitarismo y el federalismo.

El Estado, como órgano y realidad sustancial de
una sociedad que
regula las relaciones de gobierno, con
apoyo de la fuerza
legítima, en función de
las características sociologicas e históricas en la
que se desenvuelve toma diversas formas. Entendidas estas como la
diferente estructuración y distribución del poder
dentro del contenido territorial de ese Estado. Los procesos de
descentralización cuyo ápice ahora en nuestra
realidad es la autonomía, necesariamente involucra estas
mutaciones estatales que brevemente las resumiremos en sus
aspectos más centrales y relevantes.

El eje temático de las autonomías, derivan
como ya lo dijimos antes necesariamente, de procesos de
descentralización y desconcentración tanto a nivel
administrativo como político de Estados cuya
característica fundamental es su carácter unitario,
representado formalmente en una organización constitucional que responde a
la triple unidad del poder estatal y de los gobernantes, siendo
uno en su fundamento, en su estructura y
en su ejercicio.

Precisamente este parece ser el caso boliviano, cuyo
centralismo si
no es absoluto, es por lo demás evidente, en la medida en
que en esta realidad, se presentan las siguientes
características que aclaran las afirmaciones
anteriores:

  • La subordinación del orden territorial en
    manos del nivel superior
  • La adjudicación de poder hacer leyes
    sólo a la fuente legislativa Nacional.
  • La no segmentación de niveles subnacionales,
    o regionales
  • La supervivencia de la "administración periférica" del
    nivel Nacional en el ámbito subnacional.

Fuera de estas es indudable, que la estructura del
estado boliviano, ha sufrido diferentes procesos de recambio en
torno a las características descentralizadoras, de ellas
la mas importante es el proceso
iniciado por la ley de participación popular, la cual
significo, la bipolarización política en la
distribución del poder, entre nivel superior nacional, y
nivel local o municipal, dejando de lado el nivel meso o
intermedio, consolido así una autonomía municipal
relativa, de tipo federalista.

Básicamente estás serian las
características de configuración espacial del
estado boliviano, no circunscritas ortodoxamente, al unitarismo o
al federalismo. Aunque tiene mas características del
primero, y casi nada del segundo.

Respecto al segundo comporta decir, que
básicamente es una forma estatal, asociativa, donde varios
estados agrupados, hacen renuncia expresa a su independencia,
estableciendo a la vez una soberanía común, y
sometiéndose a un poder o nivel superior.

Forman así una comunidad de
estados co-soberanos. Algunas de sus características
son:

  • La colegislación del nivel meso o intermedio
    en aspectos determinados de la norma (constitución federal) del Estado
    global.
  • La dependencia del nivel municipal en el
    ámbito de estatalidad del nivel meso, o intermedio
    (estados asociados).
  • La alta densidad
    constitucional del nivel meso o intermedio, regulación
    de los estados, asociados, desde el poder central federalizado
    solo en aspectos determinados, dejando un amplio margen de
    autonomía legislativa, administrativa y política
    a los estados periféricos.

El tipo de estado federal, básicamente se
diferencia del unitario, en su mayor grado de
descentralización política y administrativa como lo
sugieren las características arriba enunciadas.

Estas son grosso modo, los dos tópicos sobre los
cuales se cierne el debate
descentralizador y autonómico, del Estado; existiendo sin
embargo formas intermedias, como el regionalismo, per se o
alternativas como el tipo triterritorial empero todas ellas
destinadas a fundamentar las reformas constitucionales, cuyo
análisis mesurado de sus alcances
serán desarrolladas en las paginas siguientes.

La forma, o el tipo, de estado "triterritorial" es la
alternativa heterodoxa, no federal ni unitaria construida por
Franz X. Barrios Súbelza, que preconiza una
equiparación política y normativa de los tres
niveles del estado, del nacional o superior, del intermedio o
meso, y del local o inferior, cuyas partes conformarían el
estado global total.

EL
PROCESO CONSTITUYENTE Y EL DEBATE DE LA
DESCENTRALIZACIÓN

INTRODUCCIÓN AL PROBLEMA

Una breve interpretación de la
crisis

Antes de ingresar en el análisis y
comparación de las más importantes propuestas
teóricas respecto a la problemática que gira en
torno a las autonomías precisaremos algunas
consideraciones para ubicar las causas y los orígenes para
que esta discusión teorética y discursiva adquiera
tal dimensión, que ahora se ha convertido en
discusión política, y se ha tornado
irreversible.

Los ciclos históricos de las sociedades, marcadas
por un rumbo evolutivo y dialéctico tienen siempre un
contenido conflictual, la bipolaridad es inmanente a la realidad
humana y a la del universo, y esto
adquiere cuerpo más todavía en las sociedades y
agrupaciones humanas que por su estructuración forman un
Estado, naturalmente y la historia lo ha demostrado, los ciclos
históricos del Estado, devienen en crisis y
renovación permanentes, este el caso de nuestro
país, cuya crisis es sobretodo política y
social.

En consecuencia nos encontramos en una crisis cuyas
causas es preciso delimitarlas, empezaremos identificando una
matriz
conceptual que agrupa a las cuestiones de nación,
Estado y ciudadanía, sobre las cuales se cierne la
problemática, asistimos entonces a un debate en torno al
Estado y en relación a su hegemonía cultural y
política, que con el desgaste histórico de su
ultimo impulso nacionalista (1952) ha entrado en una severa
crisis, de identidad que
ha escindido su unidad, en base a nuevas propocisiones pluri
identitarias que desarticulan su composición centralista,
y que pugnan centrífugamente por la
autodeterminación y por la reconfiguracion de esa
hegemonía que rompe el viejo esquema del
estado-nación.

Esto ha ido acompañado en estos últimos
años, de la formación y fortalecimiento ¾ en algunos casos¾ de los movimientos de presión
política, del nivel regionalista, por un lado, y del
sindical-campesino por
el otro, cuyas visiones en torno al proceso descentralizador
vía autonomías, son contradictorias, lo que ha dado
lugar a muchos roses entre estos sectores, que tampoco son los
únicos, pero son los que preponderan, y los que
representan las visiones contradictorias también por su
contenido ideológico político.

CONSIDERACIONES EN TORNO A LAS
"AUTONOMÍAS"

Tres mitos que
debemos enterrar:

…La autonomía y su problemática
no es un problema reciente, es ante todo un problema de
acumulación histórica…

Ya lo habíamos mencionado antes, y lo
precisaremos ahora, con el objeto de desembarazarnos, de
preconceptos y prejuicios, embarcándonos con criterio
equilibrado. La estatalidad boliviana, producto de su
mediana formación como estado nación republicana,
que nace en 1825, no puede ser explicada si no haciendo
abstracción de ese su "nacimiento", y estableciendo sus
verdaderos antecedentes histórico-culturales; aunque
muchos quieran negarlo, Bolivia es en
el fondo un país donde la esencia, su "ser" diferencial,
no se reduce a su historia particular, ni a lo construido hasta
ahora, esa esencia es su diversidad, su pulir-etnicidad, y su
conflictividad social permanente. Clara muestra nos han
dejado nuestros antropólogos, e historiadores, que no es
posible cortar la historia de este país a partir de 1825 y
menos aun dividirla desde 1492 hacia delante, la historia para
entender sus productos
actuales, debe remontarse hasta los límites mismos de la
aparición del hombre en
estas tierras.

El actual territorio del estado boliviano,
considerándolo en el sentido amplio, ha sido cuna de
múltiples civilizaciones y culturas, que antes de la
conquista, han rematado en las mas desarrolladas, como lo son por
un lado, las culturas aymaro-kechuas, situadas en la meseta
andina y la sierra, y por el otro las organizaciones, clanicas y
tribales, situadas en la amazonia y el chaco.

Los limites geográficos, de aquellas culturas y
nacionalidades, aunque si interesan para el tratamiento de este
tema, nunca han sido claros, se sabe documentalmente que las
migraciones étnicas fueron el común, en la vida
precolonial, y las porosidades étnicas,
prácticamente produjeron el inmenso abanico de pueblos
originarios que tenemos ahora repartidos en toda la geografía nacional,
pero que durante aquellas épocas, fueron concentradas al
menos en la meseta andina en torno a tiwuanaku primero, y al
imperio inkaico después.

La conquista que sobrevino, con el descubrimiento del
nuevo continente, en palabras de Engels citado por J. Antonio
Arze corta en redondo el desenvolvimiento civilizatorio, de estas
culturas, tanto las de oriente como las de occidente, y las
incorpora a las nuevas instituciones
españolas, respetando en el lado occidental algunas de sus
características, con el objeto de facilitar la
dominación, para el fin económico.

La guerra de la
independencia, que sobrevino después, que en palabras de
Baudin, citado por Arze no fue un movimiento de
rebelión popular si no de grandes propietarios,
comerciantes y clérigos, deseosos ante todo de
autonomía, respecto a la metrópoli peninsular, que
va a dar surgimiento al estado boliviano, que desde el transe
caudillista (1825-1880) y de democracia
censitaria (1880-1952) va a transitar hacia un estado que intento
homogenizar culturalmente a la población.

Este fenómeno, es en mayor medida explicado desde
la perspectiva etnológica y culturalista ampliamente
desarrollada por Álvaro García linera, pero lo que
si aquí nos interesa analizar, es que en la historia de
nuestro país, siempre han estado, presentes las demandas
de mayor descentralización y desconcentración del
poder,¾
autonomías¾ tanto en el
siglo XIX con la demanda
primero del cruceño Andrés Ibañes, que
según Roberto Barbery marca la fisura
mas antigua al centralismo, en la historia del oriente boliviano,
y después con la guerra federal.

El siglo XX va a continuar con estos lineamientos, pero
esta vez va a tomar cuerpo más democrático, y
límites más ambiciosos. Todo esto nos permite
confirmar, lo que dijimos antes, el problema autonómico, o
de la descentralización, no es reciente, estuvo siempre
ahí, y responde quizá a las enormes diferencias
entre regiones, culturas, visiones, sistemas de
percepción, y sistemas de evolución histórica, todo esto que
se ha ido acumulando a lo largo de los años, y ahora, ha
tomado un nuevo repunte, debido a la crisis del estado, que
parece, no tener vuelta.

….El "centralismo", como critica al modelo de
Estado a más de ser un defecto, es también una
construcción simbólica y ficticia
alimentada por intereses egoístas de diversa
índole…

Un otro mito que es
preciso borrar, y que ha rondando en los discursos por
mas interesados de los "descentralizadores", ha sido de que el
estado boliviano es altamente centralizado, y que su
actuación, de poder se ha reducido al ámbito
andino; no puede caber peor error de percepción respecto a
este prejuicio, la
historia de construcción y a veces de destrucción,
del aparato administrativo-político del estado, siempre ha
estado rodeado de políticas y visiones que en todo
tiempo han
impulsado una verdadera descentralización, tanto
política como administrativa, antecedentes, nunca han
faltado incluso algunos se remontan al periodo mismo del caudillismo.

Véase por ejemplo que ya el mariscal
Andrés de Santa Cruz allá por 1838, intento
mediante una ley, descentralizar el estado, y dar preponderancia
a las capitales de departamento y de provincia, en el
ámbito municipal, y para ello creo los consejos
departamentales, que aun funcionan hoy, con las modificaciones
que se han hecho, en la misma vía fueron los movimientos
federalistas, de 1899 aunque culminaron con una guerra fraticida,
que patentizo una vez mas su subyacente hegemónico de
conquista del poder, y no de verdadera construcción
nacional, con el saldo amargo y trágico que hoy lo
sentimos los chuquisaqueños.

Un tinte mas maduro de esta construcción
política sin duda se muestra ha partir de la guerra, de
chaco, que en opinión personal, ha
significado, el afianzamiento, de la "nacionalidad",¾
que con sus connotaciones de multiculturalidad y plurietnicidad,
se cohesiono en torno al sentimiento de
soberanía¾ que
anteriormente se encontraba larvaria. Muestra de ellos son los
diferentes intentos de consolidar aquella
descentralización iniciada en el periodo crucista, pero
esta vez con una madurez más democrática que
viabilizo su funcionalidad, ejemplos de ello son la
constitución de 1967 y mas todavía la ley de bases
de 1970 que reorganizo el poder
ejecutivo y creo las corporaciones departamentales de
desarrollo.

Pero nadie puede negar que el éxito
de la descentralización, administrativa y política
en Bolivia han venido de la mano de las reformas liberales que en
la década de los noventa impulso el MNR con Gonzalo
Sanchez, entre ellas la ley de Participación popular, que
a la par de criterios de descentralización administrativa,
fue en mayor medida, de descentralización política,
cuyo producto mas importante es la autonomía municipal,
sobre la que volveremos mas adelante al momento de ingresar al
estudio de las propuestas, de autonomización
estatal.

Hasta aquí hemos esclarecido un panorama, que
parecía invisible, y que derivaba, y deriva
todavía, en los argumento mas inverosímiles, pero a
la vez seductores, apropiados por unos y por otros al momento de
cuestionar la debilidad institucional del estado, por
considerarlo falsamente centralista, y excluyente, que no
esconden, si no fines determinados.

Un último mito:…El panorama del
conflicto
autonómico y descentralizador no es como parece, encierra
otros matices que superan su contexto de mera
reorganización

Al concluir este breve panorama de consideraciones
previas para ubicarnos en el tema, precisaremos, algo que no es
producto del capricho personal, si no de las investigaciones y
reflexiones que se han realizado y que las he recogido, para
desmentir algunas argucias, y falsos criterios de clientelismo
político, que rondan los oídos de la opinión
publica. A primera vista, pareciera ser que este es un problema
que tarde o temprano debía darse, en función a las
consideraciones históricas que hemos
mencionado.

Esto es cierto, las contradicciones dialécticas,
siempre tienen un enclave histórico que las fusiona, y que
de la misma surge un nueva realidad superior y objetivada,
muestra de ello es que, en la problemática actual, el tema
autonómico ha sido derivado a la asamblea constituyente,
pero esto de ninguna manera debe relativizar sus alcances, su
alta conflictividad que podría desencadenarse cualquier
momento, pues analizando los hechos; los diferendos y las
contradicciones entre las diferentes partes parecen no encontrar
ni un mínimo de consenso.

Empero este clima de
conflictividad que no debe ser reducido a criterios regionales o
sectoriales, esconde en su seno mismo, intereses ocultos, y hasta
antinacionales¾ ponemos nuestra
mas fervorosa fe en que a partir de la reconfiguracion estatal
boliviana, se consolidara la "nacionalidad,
boliviana tan cuestionada pero que a todas luces es
existente"¾ una pequeña
muestra de lo que acabo de afirmar es que, existen entre los
contendientes criterios y consideraciones totalmente ajenas al
espíritu democrático en el cual pactamos solucionar
este tema; posiciones totalmente radicales de uno y de otro
ámbito que rondan desde la dictadura
vertical de una colectividad étnica o conjunto de ellas,
hasta las posiciones fascistas, y secesionistas propugnadas por
algunas elites oligárquicas de origen colonial.

En suma, el panorama no es lo que parece, no es como lo
describen los medios, que
son también contendientes mediáticos, o algunos discursos en
apariencia patrióticos, pero sin duda de que lo que hasta
aquí hemos escrito nos ayudara a entender el problema
desde sus aspectos mas específicos.

CARACTERIZACIÓN Y POSICIONES
IDEOPOLÍTICAS MÁS IMPORTANTES RESPECTO AL
TEMA

Síntesis de las posiciones, las propuestas y
sus protagonistas

La cuestión autonómica descentralizadora y
su referente estatal, ha suscitado un amplio debate, y estudio a
lo largo de estos últimos cinco años, diferentes
estudiosos y desde diferentes enfoques, le han dado cuerpo
teórico a esta problemática, no han estado exentos
de este fenómeno las instituciones tanto privadas como
publicas, y las agrupaciones políticas, que a su tiempo
han publicado sendas propuestas de salidas a esta crisis. Con el
objeto de hacerlas didácticas previamente delimitaremos
las mas importantes, tanto por las adhesiones que suscitan, como
por la viabilidad de su aplicación; las englobaremos
primero en ejes generales y después estudiaremos sus
propocisiones de reformas concretas. Las miradas más
importantes en torno a la descentralización serian las
siguientes:

1.- Las miradas étnico-cultural, comunitaria e
histórica

La llamada también etnologica o culturalista, que
parte de la visión de lo pluri o lo multi, y ancla en el
pasado milenario, de las diferentes culturas y civilizaciones que
se sucedieron en territorio boliviano, y que la colonia no pudo
destruir, rescata de esta la tradición comunitaria en
la
organización y la vida social, que se mantuvo a pesar
de los intentos de homogeneidad cultural, compulsivamente
aplicados por el Estado, esta representada principalmente, por
los mas destacados sociólogos indianistas e indigenistas
occidentales, entre ellos hemos rescatado a Álvaro
García Linera, y a Simón Yampara.

2.- Las miradas jurídico – institucional
departamentalistas

O "autonomistas" en el mejor y más amplio sentido
de la palabra, las representan principalmente las visiones de
lado oriental del país, los propugnadores de las
autonomías departamentales, y las organizaciones en torno
al Comité cívico pro Santa
cruz, la propuesta es básicamente, que fuera de otras
condiciones de regionalización, las autonomías
giren primordialmente en base al reparto geográfico
actual, unas autonomías que se construyan en el marco de
la ley y la constitución.

Desechando prejuicios sus representantes, aunque con
diferencias pequeñas entre uno y otro, son Juan Carlos
Urenda Díaz y Roberto Barbery Anaya.

3.- La mirada teórica-técnica y
ecléctica

Una tercera vía que nos obligamos analizar, es la
creada por F. Barrios, en su, pomposo ensayo "el
estado triterritorial", que más que una propuesta resulta
ser un muestrario de erudición respecto al tema y un
resumen de crítica
al sistema descentralizado de las autonomías municipales,
planteándonos, después de una fastidiosa
redundancia teórica, un "modelo" de Estado, dividido en
tres niveles: el nacional, el meso, y el local, coordinados y
equiparados constitucionalmente.

PROPUESTAS DE DESCENTRALIZACIÓN TRES
VISIONES COMPLEMENTARIAS Y CONTRADICTORIAS A LA
VEZ

A manera de introducción

Como ya lo hemos establecido, son tres las propuestas,
más elaboradas en torno a la descentralización del
Estado, aunque estas, están matizadas desde diferentes
perspectivas que le dan sus autores, las hemos agrupado
así, por considerarlas las más completas, y sobre
las cuales gira el debate intelectual, no descartando, sin
embargo, que existen otras, pero que ciertamente, encajan de una
o de otra manera, dentro de estas tres principales.

Empezaremos entonces a desarrollar, cada uno de estos
ejes de propuesta, solamente en sus aspectos más
generales, o en los que presentan menos ambivalencia, por el fin
mismo del trabajo, además de que cada una de estas
propuestas están detalladas en los trabajos de sus autores
o de las organizaciones e instituciones que las impulsaron o
financiaron.

MATRIZ DE PROPUESTAS Y EJES TEMÁTICOS DE LA
DESCENTRALIZACIÓN

La matriz y los ejes temáticos giran en torno
a:

Ciudadanía política:
redefinición del término o contenido de la palabra
ciudadanía, antes o hasta ahora restringida al derecho al
sufragio, o a
la participación, como elector o elegible para la gestión
pública, concebir las nuevas connotaciones de lo que
implicaría, la redefinición de un nuevo Estado, la
conformación de un estado plurinacional, o,
multicivilizatorio, la equiparación cultural de las
visiones étnicas, dentro del marco
constitucional.

Nueva distribución geográfica: o
reterritorializacion del Estado nacional global, implica concebir
un nuevo diseño
territorial, al ámbito subnacional, que involucre los
criterios económicos, medio ambientales, y sobretodo los
étnicos o culturales.

Nuevo orden legal o constitucional:
Replanteamiento del contenido institucional o legal del Estado,
en torno a las nuevas unidades político- administrativas
autónomas, reestructuraciones normativas y
democráticas al momento de la conformación de la
autoridad y de
las decisiones.

PROPUESTA Y BASE TEÓRICA, LA
DESCENTRALIZACIÓN DESDE LA VISIÓN ÉTNICO
CULTURAL Y COMUNITARIA

Como ya lo habíamos anticipado, esta propuesta,
constituye la matriz teórica de la visión de los
pueblos indígenas de nuestro país, y sobre todo de
los pueblos del occidente andino boliviano.

Los estudios sociológicos, antropológicos
y etnoculturalistas, han dado pie a esta propuesta, el desarrollo
y acceso a niveles de educación superior,
de indígenas aymaras y de otras "étnias",
también ha contribuido, pero el salto cualitativo ha sido
la influencia, que ejercieron las Ongs. europeas asentadas en las
regiones de esos pueblos, las que de alguna manera, impulsaron o
financiaron estos estudios.

Su base teórica:

En si su base teórica, representa la
visión misma de los pueblos indígenas, de
tradición ancestral y comunitaria. Las diferencias entre
uno y otro representante de esta corriente, son mínimas,
pero acá rescatamos la más importante, la elaborada
por el indigenista Álvaro García, ahora
vicepresidente de la republica, tomando también las
consideraciones de Simón Yampara.

Álvaro García parte de un hecho
fundamental, la problemática en torno al Estado, a su
debilidad institucional, a los desencuentros que sufre frente a
la sociedad, parten de la concepción previa, de un estado,
altamente monolingüe y monocultural. Estas ultimas
generalizaciones, nos llevan a considerar a Bolivia, como un
país, de alta tradición excluyente hacia las
culturas y civilizaciones pre-republicanas, y precoloniales, una
realidad aceptada tácitamente, pero
sistemáticamente burlada, por las esferas de
poder.

La estructuración de la población
boliviana, presenta una ingente mayoría indígena,
¾ 54%¾ una suma de civilizaciones y sociedades
articuladas moderadamente, sobre sus diferencias
lingüísticas y culturales, que han estado
permanentemente subordinadas o dominadas por una cultura que
desde la fundación de la republica, hegemonizo el poder
desde sus costumbres y normas, hablamos
de la cultura mestizo castellano
hablante, o "boliviana" como tal, con sus variantes de ascenso y
enclasamiento social, en virtud de los procesos de
conversión y reconversión social y
económica.

Esta realidad eufemistizada, durante las últimas
décadas, ha sido patentizada por las reformas recientes al
Estado, una de las cuales ha sido el proceso de
descentralización que trajo la ley de Participación
popular que voluntaria o involuntariamente, comprimió, o
legitimizo las aspiraciones étnicas, se produjo entonces
un proceso de reetnificacion cuyo causa principal fue las
disputas por el poder a nivel local, con la conformación
de municipios indígenas.

La conversión étnica se da de la siguiente
manera, la revolución
del 52, que supuso una política de corte liberal,
negó entonces las aspiraciones étnicas, en torno a
la consideración del Estado-nación único,
homogenizo las identidades culturales, bajo la
denominación de "campesino" al habitante de las
áreas rurales de origen indígena, y conjunciono a
las colectividades así concebidas en torno a criterios
económicos y clasistas liberales, los pueblos entonces se
organizaron en federaciones, confederaciones, gremios,
etc.

Los ajustes posteriores, y sobre todo los
reconocimientos a nivel internacional de los derechos indígenas,
supusieron un cambio de
criterios, el Estado reformo sus políticas igualando
derechos, se produjo entonces la reetnificacion, en base al
rescate y valoración con alcance universal de las
costumbres y de la forma de vida de aquellos pueblos, algunos se
cohesionaron con fuerte base política y sindical, los
aymaras por ejemplo, que representan mas de dos millones de la
población boliviana, otros como la población
quechua, que representa a mas de tres millones de la
población; cuya tendencia a la porosidad la hace
vulnerable a fusionarse a las culturas mestizas y cuya base
territorial no esta nada definida, no tendieron al
fenómeno nacionalitario, sino que se mantuvieron en torno
a organizaciones de tipo sindical, exceptuando los casos de los
ayllus del norte de Potosí y Chuquisaca.

Por el otro lado las comunidades culturales del oriente
que llegan casi al medio centenar por los procesos de migración
y colonización españoles, adoptaron otros patrones
de organización, que las hace viables en torno a
federaciones de esos pueblos que abarquen el criterio
regional.

Esta síntesis etnocultural,
demográficamente mayoritaria, pero políticamente
subordinada, o excluida, fundamenta la visión de la
igualación de culturas (la aymará, la quechua, la
castellana o mestiza) en torno a las reformas espaciales de
validez del poder estatal.

SÍNTESIS DE LA PROPUESTA

Partiendo de la realidad multicivilizatoria y
multisocietaria del agregado humano, boliviano
propone:

La descentralización política en Base a
las "Autonomías indígenas" diferenciadas o
construidas, sobre la base de comunidades
lingüísticas particulares, divide principalmente las
comunidades lingüísticas aymará y quechua
primero, y las comunidades culturales del oriente
después.

En torno a la cultura o a la civilización
aymará propone por su grado de construcción
nacionalitaria, una autonomía plena, política y
administrativa, que abarcaría territorialmente incluso a
la ciudad de La Paz, en base a los siguientes
parámetros:

a) El derecho de la nacionalidad aymara, no solamente de
comunidades, a la libre determinación y, por tanto, a la
autonomía política como parte del Estado
boliviano.

b) Una cámara legislativa nacional aymara de
entre cuyos miembros es elegido el ejecutivo del régimen
autónomo. Esta asamblea ejerce sus funciones sobre
la jurisdicción territorial continua en la zona
aymará hablante (urbana-rural), es elegida directamente
por los propios miembros de la comunidad cultural y
únicamente es responsable ante ellos.

c) Gobierno autónomo con competencias
políticas totales en el sistema
educativo primario y superior, administración
pública, titulación de tierras, medios de
comunicación, impuestos,
vivienda, obras públicas, turismo, comercio,
industria,
transporte,
vivienda, comercio interior, medio
ambiente, derecho civil,
policía y recursos
naturales.

En torno a la población quechua, carente de
cohesión a diferencia de la aymará exceptuando los
casos de los ayllus del norte de Potosí y Chuquisaca,
considera viable los mismos criterios que para las comunidades
culturales del oriente es decir que estas poblaciones quechuas
concentradas, podían federalizarse y constituir regiones
de base cultural lingüística diferenciada que accedan a
una autonomía relativa o regional, cuyas competencias
serian negociadas con el estado boliviano.

Respecto a estas, las culturas quechuas formadas por
ayllus, cohesionados (vrg. los ayllus de Laimes y Kakachacas de
Oruro y Potosí) y a las demás comunidades del
oriente propone, una autonomía en base a los siguientes
criterios:

a) Elección de autoridades ejecutivas y
formación de estructuras de
deliberación regional por las comunidades culturales
resultantes de la federación de pueblos y etnias
indígenas.

b) Preservación del principio de proporcionalidad
y representación étnica equilibrada en la
formación de los gobiernos regionales autonómicos,
a fin de impedir la sobreposición de un grupo
étnico o una comunidad lingüística sobre
otra.

c) Integración de los habitantes no
indígenas de ciudades o barrios comprendidos dentro de la
territorialidad autonómica, como sujetos de los mismos
derechos individuales y colectivos en la conformación de
los sistemas de autoridad regional.

d) Jurisdicción territorial de la
autonomía con competencias administrativas negociadas con
el Estado en el ámbito educativo, judicial,
titulación agraria, manejo y protección de recursos
naturales (agua, bosques,
flora, fauna, recursos
minerales e
hidrocarburiferos).

e) Acceso a fondos del Estado bajo los principios de la
equidad y la
solidaridad a fin
de que las regiones más empobrecidas, por las exacciones y
exclusiones precedentes, puedan participar del bien común
estatalmente regulado.

Conclusión:

El resumen de la propuesta de los pueblos
indígenas, nos trae las siguientes conclusiones, primero
en base a su consideración étnica, o racial,
significaría una reterritorializacion del estado en base a
estas comunidades lingüísticas y culturales, en si no
propone una cambio en los limites geográficos de los
departamentos, sino que estas autonomías indígenas
funcionarían dentro de los departamentos, pero
también abarcarían a uno o mas, de ellos, por el
criterio eco-biológico, a nivel político,
significaría una reingeniería política y
constitucional, que nivele estas comunidades autónomas,
tranfieriendoles según su grado de cohesión y
capacidad competencias legislativas y administrativas,
haciéndolas participar también en el nivel superior
o federal del estado, en base a reformas de las diputaciones y
senaturias, que equipararían a las culturas principales,
en la dirección del estado global.

PROPUESTA, Y BASE TEÓRICA LA MIRADA
JURÍDICO INSTITUCIONAL DE LAS
AUTONOMÍAS

(Propuesta del oriente
boliviano)

Esta propuesta representa principalmente la
posición mas moderada en torno a las autonomías,
desechando las más radicales como la propuesta de Estado
"confederal" de la "nación camba" logia de tendencia
nacionalista o separatista, u otras similares, es también
la mejor fundamentada técnica y jurídicamente, y se
debe sin duda, al trabajo del constitucionalista Juan Carlos
Urenda Díaz que en sus sucesivas otras sobre
descentralización, cimentó las aspiraciones
regionalistas de las organizaciones cruceñas.

Sus fundamentos y su base
histórica:

La propuesta de Urenda que la tomaremos como la mas
representativa de las miradas departamentalistas, y la mas
elaborada por su puesto, se erige, en primera instancia, en las
argumentaciones y la doctrina histórica del pueblo
cruceño, con un amplia critica hacia el Estado
centralista, o andinocéntrico, critica también a la
mentalidad, de los gobernantes bolivianos, cuya falta de ética
entre otros males, produce la ineficacia en la conducción
del país.

Sus argumentos para afirmar la autonomía del
departamento de Santa Cruz son los mismos que utiliza la logia
"nación camba"¾ aunque
en tono moderado¾ en torno al
pasado histórico autonómico del pueblo
cruceño, y a su vocación de progreso, es por esto
también que se le denomino "departamentalista" ya que en
esencia, defiende la división política actual, de
los nueve departamentos con pasado histórico propio, y les
sugiere una plena autonomía en el marco de la ley y de la
constitución, por esto se le añadió
también el termino de institucional, en base al transito
legalista progresivo que sugiere.

SÍNTESIS DE SU PROPUESTA

Nos remitiremos ahora a los puntos más centrales
de su propuesta tomados de su último libro
"Separando la Paja del trigo".

El modelo autonómico departamental, se
debería construir ¾
propone¾ sobre las bases de la
unidad en la diversidad, unidad que no signifique por cierto
uniformidad, sobre el principio de subsidiariedad, en el sentido
que este debería ser el principio legal o constitucional,
la base para ordenar el grado de autonomía, o la cantidad
de competencias de los gobiernos departamentales, el principio de
voluntariedad, por el cual, solo los departamentos que decidan su
autonomía vía referéndum plebiscitario,
accederían al nuevo régimen; y el de solidaridad
basado en la mutua cooperación entre las regiones o
departamentos, en materia
económica, creando para este fin un fondo de
compensación de autonomías departamentales o FOCAD,
que amortiguaría las disparidades fiscales del Estado
central al momento de disponer del erario publico, ya que una
buena parte de los fondos actuales del TGN se quedarían en
los departamentos.

Presupuestos jurídicos de las
autonomías departamentales:

Las reformas constitucionales como presupuesto
básico para transitar al régimen de
autonomías, exigirían previamente, las
delimitaciones jurídicas y administrativas; en este marco
Urenda propone, repotencializar el nivel subnacional o
departamental, otorgándole autonomía plena,
legislativa y ejecutiva, esta debería estar definida por
la transferencia de competencias progresivas desde el Estado
central, hacia el nivel subnacional, o el gobierno departamental,
el cual compuesto por un gobernador, elegido
democráticamente, y una asamblea legislativa,
tendría atribuciones exclusivas para, legislar en materias
permitidas por la ley¾
entiéndase constitución¾ , como, leyes internas de administración, o gestión publica,
leyes sobre conformación de las asambleas departamentales,
estatutos de sus funcionarios, legislación sobre
migración interna, leyes de impuestos departamentales,
agricultura,
ganadería,
etc. entre otras que a pesar de ser "exclusivas" del departamento
autónomo responderían sin embargo a los principios
de orden constitucional superior.

Las competencias de desarrollo legislativo,
reglamentario, o de ejecución es decir, proponen normar,
reglamentar, o ejecutar regionalmente las políticas y
materias publicas más diversas, cuyas directrices sean sin
embargo nacionales, en, áreas, como hidrocarburos,
vivienda, policía, prensa, radio, impuestos,
trabajo, medio ambiente,
obras publicas, salud, turismo, transportes,
desarrollo forestal, cooperativas,
ferrocarriles, carreteras y otros. Para este fin se
crearían mecanismos jurídicos o institucionales, de
revisión, de aquellas normas, para que sean
constitucionales, o filtros de control de parte
del nivel nacional, en los ámbitos
departamentales.

Las competencias concurrentes o de colegislación,
donde participan en la elaboración de las normas de
alcance nacional o general, tanto gobierno nacional, como
departamental autónomo; principalmente proponen las
competencias concurrentes o de colegislación en materia de
educación¾ todos los
niveles de enseñanza¾ y
en materia de salud.

Sintetizando el aspecto de las competencias normativas o
de legislación departamental, llegamos a colegir, que en
materia de justicia,
permanece la uniformidad y la unidad del poder judicial,
es decir el nivel nacional, superior, o gobierno central
mantiene, o se reserva el derecho legislativo en materias del
derecho positivo
como tal, como elaborar, reformar, o suprimir los códigos,
civil, penal, laboral,
mercantil entre otros. Además de todas las prerrogativas
que por su naturaleza, no
puedan ser ejercidas por el nivel subnacional, como las
políticas de seguridad,
comercio
exterior, moneda, legislación bancaria, recursos
naturales estratégicos, obras publicas de interés
general, políticas sobre producción y protección cultural,
planificación económica general
entre otras.

Presupuestos de descentralización fiscal de las
autonomías departamentales:

El logro de los anteriores presupuestos,
no serian posibles, sin la disposición de los recursos
económicos, para hacerlos viables, es en este sentido que
la propuesta de Urenda delimita también la transferencia o
la descentralización fiscal, hacia los departamentos, y
propone que el 66,67% de los impuestos nacionales (IVA, IT,
RC-IVA IU, ICE, IBE, ITGB) recaudados en los territorios
autónomos, se queden en estos, y se distribuyan en, un 20%
para los gobiernos municipales, 10% para las universidades
publicas, 10% para el fondo de compensación para
departamentos menos favorecidos, y el restante de libre
disponibilidad para los gobiernos autónomos.

Fuera de estos ingresos, los
gobiernos departamentales mantendrían sus derechos a las
regalías y la coparticipación en otros impuestos,
(IEH, IED) pero además, dentro del marco de su
autonomía tendrían derecho a crear impuestos
adicionales, tasas, sobretasas, o a modificar las existentes,
para contribuir de esta manera al sostenimiento del gobierno
departamental.

Estos son grosso modo los lineamientos de las
autonomías departamentales, propuestas por los
cruceños, que en la versión de Urenda, establece
básicamente, un nivel de autonomía moderado, esta
elaboración ha servido también para las propuestas
de otros departamentos como Tarija, que camina sobre el mismo
rumbo de las autonomías en el nivel departamental,
exclusivamente.

Conclusión:

Es preciso aquí identificar algunas de las
deficiencias, al respecto de la propuesta cruceña, siendo
como es, una demanda autonómica, que ancla en el pasado, y
que esta recargada de prejuicios, hacia el Estado central o hacia
determinado grupo de personas, deja pendientes sin embargo
algunos aspectos centrales sin los cuales cualquier propuesta
carecería de seria viabilidad, uno de esos aspectos
centrales, es el referido a los pueblos indígenas u
originarios, insertos dentro de los limites departamentales, o
mas todavía, pueblos y comunidades indígenas que
comparten territorialmente dos o mas departamentos,
empobrecería en todo caso el debate si no se habla desde
la perspectiva de hacer viable económicamente a las
regiones y a los grupos humanos
asentados en ellas, dándoles paso a ecosistemas
complementarios, que propulsen su desarrollo, y que en la
mayoría de los casos estos ecosistemas están
cortados arbitrariamente por los limites departamentales, en todo
caso, aquí las propuestas de regionalización,
serian mas aceptadas, otro esquema profuso en la propuesta, es el
estatus en que quedarían los municipios, o gobiernos
municipales, ¿nos acercaríamos entonces a un
centralismo departamental? estas pueden ser las
incógnitas, en todo caso, queda para el debate la
propuesta cruceña, que también enriquece de alguna
manera la bibliografía, sobre el proceso
descentralizador.

PROPUESTA Y BASE TEÓRICA, LA MIRADA
"ECLÉCTICA" PROPUESTA DE UN MODELO
"TRITERRITORIAL"

(Propuesta de Franz Barrios
Súbelza)

Como lo mencionamos en un acápite anterior vemos
por conveniente analizar esta propuesta, sin duda que hay muchas
quizá mejor hilvanadas con la realidad, pero nos llama la
atención la de Barrios, por ser una de las
primeras que se elaboraron, su edición
viene del año 2002, por lo tanto, no podemos
desdeñar, algunas precisiones e impresiciones conceptuales
que nos propone el autor, al momento de estudiar, las
"territorialidades" en Bolivia.

Sus Fundamentos y Base
teórica.-

La propuesta que nos presenta Barrios, parte de un
elemento esencial, el titulo, con que nos bautiza su propuesta,
precisamente el llamado "Estado triterritorial", entonces
visualizamos, preliminarmente, una de sus intenciones, el
contenido redundantemente teórico, de su propuesta, y la
intencionalidad de la figuración eruditicia que lleva
implícita.

Pero vayámonos al fondo, Barrios, parte de un
principio elemental, que el debate descentralizador en Bolivia
resulta dicotómico, entre lo federal o lo unitario, y
trata, al momento de empeñarse en resolver esta
dicotomía, en la creación de una alternativa, a
esas dos vías que según el, seria totalmente
diferente, a un unitarismo bien descentralizado, o a un
federalismo moderado, entonces nos habla de una
equiparación de los tres niveles es decir el nivel
superior o nacional, el meso, o intermedio, y el local o
municipal, estros tres ámbitos o "segmentos que el los
denomina" con su propuesta, obtendrían un mismo nivel es
decir un rango constitucional igualitario.

Cimenta su propuesta, en un conglomerado inconexo de
conceptos que trata de afianzar, apoyado en las experiencias
europeas, como la francesa y la española, por ello las
fuentes de
consulta, son tantas y provienen sobre todo de teóricos
europeos.

Su propuesta

Parece compleja pero en realidad su simplicidad desnuda
su inaplicación para una realidad como la nuestra,
entonces, aclarando una vez mas que la propuesta es sobre todo
teórica, y técnico/geométrica, es
difícil resumirla al modo que lo hicimos con las
anteriores que parecerán menos difíciles de
resumirlas. Intentaremos entonces, resaltar los aspectos
más comprensibles de la propuesta de Barrios,
dividiéndolos si pareciera mas didáctico en puntos
contenedores de aspectos separables.

El análisis territorial

Es elemento esencial, para la comprensión de la
propuesta Barrios parte del análisis ya mencionado de los
tres niveles de territorios en Bolivia, establecidos dice desde
las reformas Toledanas en la colonia, tres "territorios"
conectados de manera vertical, con un atrofiamiento del nivel
central, o el nivel intermedio, aquí partimos de la
critica de Barrios al sistema de la descentralización
municipal boliviana inducida por la ley de participación
popular, nos habla entonces de que el nivel subnacional o meso,
representado en nuestro país por las prefecturas, sufre un
achicamiento competencial en referencia con los demás
niveles, es decir, según nuestro autor, con la
municipalización "extremista" apelativo que usa el, se ha
desnaturalizado el nivel intermedio, al desfuncionalizarlo, y
reducirlo a las atribuciones desarrollistas, de
planificación o de reglamentación normativa,
impuestas por la ley 1654 de 1995 y por reformas anteriores y
posteriores, entonces, la concepción de territorio,
deviene en aspecto fundamental, para ensamblar u ordenar el nuevo
Estado, sin tocar la ordenación en departamentos,
provincias y municipios.

Las criticas a la descentralización
municipal.-

El segundo puntal en la obra de Barrios, es la
crítica severa que realiza al modelo de
descentralización municipal impuesto desde el
año 1994, su afrenta al funcionamiento del municipio, lo
obliga a erigir el flanco subnacional, como si fuera la panacea
de la solución al tema territorial en Bolivia, entonces
critica severamente al estado de funcionamiento de los
municipios, donde nos habla de un "encapsulamiento" o aislamiento
municipal, y su falta de coordinación efectiva con los demás
niveles, con el subnacional, y con el superior, su critica puede
resumirse así, nos dice que la reforma municipalista,
entre muchos defectos, produjo un quiebre en el tejido civil de
la sociedad al momento de crear entes, como los "comités
de vigilancia" y otros que duplicarían innecesariamente
las organizaciones vecinales o locales que ya existían, en
otro ámbito, al segmentar o subdividir o crear
sub-alcaldías indígenas se produce un
desconocimiento de la magnitud de el tamaño de las
comunidades campesinas e indígenas, que llegarían
fácilmente a componer municipios
íntegros.

De estas consideraciones llega Barrios, a describir el
nivel de crisis de las prefecturas, donde la superposición
de los municipios, los ha reducido, al ámbito de
planificación y de inversión en infraestructura, esta realidad
se compara con el nivel fiscal de inversión global entre
los dos ámbitos, mientras el municipal se acerca a los dos
tercios de ingresos fiscales, el departamental llega solo al un
cuarto, entonces las diferencia entre uno y otro son
notables.

El modelo "triterritorial"

Con un titulo pomposo, Barrios nos propone su modelo
particular, no bien explicado facticamente, pero afianzado en una
revuelta de consideraciones teóricas, que resumiremos de
la siguiente manera.

a) Equiparación geométrica del los tres
niveles, es decir el nivel superior el meso y el local o
municipal se igualan horizontalmente mediante la
constitución del estado global que reúne estos tres
niveles, donde cada uno de ellos tiene amplias competencias,
primero en el nivel normativo se darán sus "constituciones
territoriales" y podrán autolegislarse en amplias
materias, solo restringidas por las llaves de la
"constitución suprema" o la ley fundamental que engloba a
estos tres niveles.

b) La
administración corresponderá en estros tres
niveles a asambleas legislativas y "poderes ejecutivos" elegidos
de manera directa en los territorios, con facultades normativas y
de definición de políticas, no aclara en este punto
como los niveles municipales empequeñecidos podrían
darse el lujo de tener "poderes ejecutivos" o instancias
legislativas" añade aquí, a modo de accesoriedad,
el tema tan importante en Bolivia, como es el referido a su
composición indígena, y nos dice que el nivel meso,
con esta su independencia podría fácilmente,
incluir los colectivos étnicos en su composición
gubernativa.

c) Por ultimo agruparemos aquí las demás
diferencias que nos parecen interesantes de esta "propuesta" con
las características ya mencionadas mas arriba, el nuevo
modelo, empeñosamente diferenciado por Barrios del modelo
federal y el unitario, se propondría eliminar el senado
nacional, innecesario, por la autolegislacion de los territorios,
se eliminaría también la administración
desconcentrada, o periférica, así se
consolidaría un nivel fuerte de autonomía
territorial solo subordinada constitucionalmente.

Conclusiones.-

La propuesta de Barrios, que se perfila como uno de los
descentralizadores más famosos de la coyuntura, no por su
capacidad, si no por su "peculiar" modo de ver la realidad,
denota, o entraña, muchas observaciones y criticas que se
ha hecho a su obra, sin duda que después de la lectura de
su ensayo uno queda con mas dudas que certezas, y al momento
mismo de abordar, su trabajo, se advierte una redundancia
fastidiosa de teorías
y de consideraciones harto inconexas, fundadas en la terquedad de
crear una alternativa, que no fuera ni federal ni unitaria. No
aclara por ejemplo en queda el tema de la justicia o de las
fuerzas armas, o como se
concilia los interés municipales con los departamentales,
además del harto costo que
significaría ensayar esta propuesta.

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA

2002 F. Barrios Súbelza "El estado
triterritorial" Plural editores

2005 A. García Linera "Autonomías
indígenas y Estado multicultural" FES-ILDIS

2005 J. C. Urenda Díaz "Separando la paja del
trigo" "bases para constituir las autonomías
departamentales"

2005 S. Yampara H. "Descentralización y
autonomías de la visión de los pueblos
originarios"

2005. R. Barbery "Participación popular,
Descentralización y Autonomías departamentales en
Bolivia"

1965 D. E. Ibarra Grasso "Prehistoria de
Bolivia" Los amigos del libro Cbba.

1939 Enrique Finot "Historia de la conquista del oriente
boliviano" Casa Librería Cervantes,
Buenos Aires

1989 I. S. Gonzáles Aramayo "El proceso de
descentralización administrativa en Bolivia" Cbba. La
Paz

 

Jorge B. Quiroga Nava

Soy un joven estudiante de quinto año, de la
carrera de Derecho y ciencias
políticas, de la Universidad
Autónoma de San Francisco Xavier de Chuquisaca,
autodidacta en sociología, y ciencias
sociales, en realidad este es el primer trabajo que publico
en la Web, mi desempeño académico, esta
indisolublemente unido a la docencia y la
investigación, desempeño la labor de
auxiliar de docencia, en la carrera, en las materias de "Derecho Agrario",
y "Ciencia
Política y teoría
del Estado"

Bolivia, Ciudad Sucre, 20 de octubre de 2006

 

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