- Desarrollo de las necesidades
comunes, o la posibilidad de satisfacer las necesidades
individuales en el seno del grupo - Posibilidades de
comunicación - Las Normas
del grupo - Los Motivos
y metas - La
cohesión grupal - ¿Qué
es el clima sociopsicológico? - Conclusiones
- Bibliografía
Un método
eficaz en la estructuración de la preparación
psicológica en los voleibolistas escolares. 1ra
parte.
Es lógico partir en el análisis de la caracterización
psicológica individual de los deportistas en pos de
brindar y estructurar una adecuada preparación
psicológica, en dicha necesidad se hace vital dirigir
nuestra atención hacia una dirección de trabajo muy
poco sistematizada en el orden científico –
metodológico, que en muchas ocasiones carece de un cuerpo
teórico que permita a los especialistas que se adentran en
labor pedagógica promover actitudes
psicosociales acorde a las exigencias actuales de estos tipos de
deportes. Sin
duda alguna hacemos referencia a la caracterización
sociopsicológica, la misma es de obligada referencia y
tratamiento en los deportes de conjunto, cumpliendo con el
objetivo de
que el entrenador logre profundizar y orientar la
preparación psicológica al respecto en esta
actividad deportiva.
En estos momentos es de gran importancia penetrar en el
estudio de las características psicosociales que
objetivamente orientan el proceso de
dinámica grupal, como una de las
principales exigencias de los deportes de equipo, donde las
acciones se
realizan en plena interrelación e interdependencia entre
los jugadores que conforman el equipo.
Como plantea, García Ucha (1999), el estudio de
las exigencias de la actividad deportiva permite establecer
cuales son las demandas psicológicas que debe satisfacer
el atleta de acuerdo con las condiciones objetivas y subjetivas
para poder alcanzar
los resultados tanto en el entrenamiento
como en las competencias.
El análisis de las exigencias en el deporte demanda la
delimitación precisa de las propiedades de cada
requerimiento, así por ejemplo, se habla de la
decisión, constancia y capacidades tácticas en la
mayoría de los juegos con
pelotas como premisa subjetiva de rendimiento, pero se obvia que
estas premisas presentan peculiaridades específicas de
acuerdo con las condiciones concretas de cada deporte. Cuando se
plantea la necesidad de la toma de decisión en el voleibol, es
muy diferente a cuando nos referimos al baloncesto o
balonmano.
El estudio de las exigencias no debe reducirse al
establecimiento o mención de la lista de las mismas, es
necesario determinar las relaciones adecuadas entre las mismas,
su carácter prioritario y las posibilidades de
variabilidad o de compensación de una exigencia sobre otra
dentro del sistema atleta
– deporte. Además precisar las mismas en los
deportes de equipo teniendo como base la función de
cada jugador y la relación entre ellos en el proceso de
entrenamiento y juego.
Por ejemplo: – Entre el pasador y los atacadores
existe una estrecha comunicación, sobre la base de la
efectividad de las acciones a realizar; además debe
existir compatibilidad psicológica, en cuanto a
motivaciones, intereses, desarrollo de
capacidades físicas y psíquicas que permiten una
adecuada orientación y eficiencia en el
desarrollo de las acciones de juego.
En el Voleibol, las acciones del atleta dependen en gran
medida de sus características psicológicas, entre
ellas, el deseo de competir y ganar, nivel de relaciones
interpersonales, capacidad para autorregularse en el
transcurso de la competencia y
tomar decisiones que resuelvan los problemas del
juego. En este sentido se hace necesario analizar que en el
voleibol, deporte de conjunto, uno de los aspectos que distingue
y orienta la preparación psicológica esta dado en
la consecución de la dinámica grupal; donde las
relaciones interpersonales, la cohesión grupal, la
compatibilidad psicológica, la estructura del
equipo deportivo, los estilos de dirección, entre otros
factores sociopsicológicos, determinan en indudable medida
el éxito
en los entrenamientos y competencias y que el equipo como tal
eleve su rendimiento cualitativo y cuantitativo.
Ahora bien, ¿Cuáles son las
condiciones, requisitos y determinantes que permiten orientar
el trabajo del
equipo como un todo, en la unidad de objetivo, intereses y
acción?
Antes de pasar al análisis detallado sobre los
requerimientos que deben existir para un adecuado trabajo grupal,
debemos partir del conocimiento
de un grupo de
características psicologicas importantes que caracterizan
a los adolescentes
en relación al trabajo de grupo, de colectivo; que puede
ser utilizado con tacto pedagógico en función de
mejorar las condiciones para la educación de la
conciencia de
grupo, como aspecto constitutivo del trabajo educativo del
entrenador y como componente de la preparación psicosocial
en este tipo de deporte.
El grupo de adolescentes tiene una estructura más
compleja que el de los escolares menores; representa un sistema
de relaciones tanto de dependencia operativa¨, como de
relaciones subjetivas: simpatías, antipatías,
confianza, respeto,
indiferencias, etc. El lugar de cada miembro del colectivo en
este sistema de relaciones depende en gran medida de sus
cualidades moral –
psicologicas (valentía, firmeza, disposición a
brindar ayuda mutua, apoyo, capacidad de ser buen amigo,
etc.).Esto también determina el grado diverso de los
estados emocionales de cada adolescente en el equipo.
Si por ejemplo, el adolescente no es comprendido ni
reconocido, trata por todos los medios
posibles de ganar el respeto de sus compañeros o al menos
de atraer su atención; si no lo logra y siente que el
colectivo no lo necesita, experimenta una constante
insatisfacción y se siente herido en su amor propio.
Por esta razón los adolescentes con frecuencia caen en
grupos
casuales con dudosa reputación, en los que si es aceptado
como igual, se subordina con alegría a las exigencias de
dicho grupo, aunque con frecuencia tengan un carácter
antisocial.
Como generalidad podemos destacar como dichos problemas
se aprecian constantemente en los equipos deportivos, donde
podemos percibir que de acuerdo al nivel de desarrollo social
de los equipos se puede destacar que dada la madurez deportiva,
en los equipo de categoría escolar y juvenil predominan
las relaciones personales por encima de las relaciones de
trabajo; cuestión que trae aparejado que los problemas que
ocurren de enemistad, falta de apoyo moral y constantes
discusiones y disputas son llevados al seno del
equipo.
–
Desarrollo de las necesidades comunes, o la posibilidad de
satisfacer las necesidades individuales en el seno del
grupo.
La primera condición para la existencia de un
grupo sociopsicológico esta dado en que en el seno del
propio grupo se logre satisfacer las necesidades comunes o las
individuales de los miembros que lo integran.
El destacado psicólogo social de origen
alemán, uno de los promotores del estudio de los grupos;
considera en relación a esta condición, que la
permanencia y estabilidad grupal solamente vendrá dada
cuando en el seno del grupo puedan satisfacerse las necesidades
individuales.
Se debe destacar además que al sujeto lo mueve
pertenecer al grupo la satisfacción de las crecientes
necesidades que van surgiendo; como por ejemplo la
aprobación y aceptación de sus compañeros,
posibilidad de expresar sus pensamientos y sentimientos, el
desarrollo de necesidades y el aprendizaje de
nuevas formas de relaciones, entre otras; que aunque la
pertenencia de un numero de personas a un grupo esta dada para la
solución de determinadas tareas siempre o casi siempre la
permanencia y estabilidad será objetiva cuando en el seno
del grupo puedan satisfacerse las necesidades individuales de los
miembros.
2.- La segunda condición esta centrada en el
proceso de diferenciación entre miembros.
Esta condición esta relacionada con la estructura
del grupo, con la diferenciación de los papeles o roles,
estos surgen en el grupo y se desarrollan a través de la
cooperación y la colaboración de los
miembros.
En relación a dicho aspecto es importante dejar
claro como se hace necesario que la máxima autoridad en
el grupo pueda detectar y conocer como para la eficaz
ejecución de las tareas cooperativas,
se requiere que los miembros posean determinadas
características psíquicas, capacidades, que
permitan un buen desempeño del papel a realizar por cada uno
de los miembros. Al respecto dicha limitación de roles
permite que no exista con el desarrollo del proceso una
alteración en la dinámica del proceso grupal,
disgustos y pueda fluir con efectividad la gama de
comunicación que debe desarrollar el grupo en el logro de
los objetivos
propuestos.
3.-
Posibilidades de comunicación.
Tanto como Hiebsch y Vorwerg destacan como por medio de
la comunicación no solo garantiza la interacción necesaria para la actividad,
sino también y por encima de ello, el desarrollo de las
interrelaciones humanas, personales.
Por tanto se considera en si, la
comunicación un aspecto sustancial que permite las
influencias reciprocas de carácter personal que
forman parte del mecanismo de formación social del
individuo.
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