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Venezuela, 1950-1980: la esperanza del petróleo (página 2)



Partes: 1, 2

Gastos del gobierno central

(millones de
bolívares)

Años

Ley de presupuesto

Créditos
adicionales

Total

1962

5942

697

6639

1963

6225

411

6636

1964

6349

871

7220

1965

7260

340

7600

1966

7852

168

8020

1967

8186

568

8754

1968

8965

118

9083

1969

9280

904

10184

1970

9886

475

10361

1971

10987

1800

12787

1972

13412

187

13599

1973

13858

1036

14894

1974

14584

27957

42541

1975

41526

-1648

39878

1976

33167

(-)

33167

Fuente: Ministerio de
Hacienda

Otros elementos representativos del gobierno de este
personaje los expone Harry Bernstein:

Contreras fue, en general, una sorpresa.
Comenzó por permitir las demostraciones públicas
de violencia y
hostilidad hacia el recuerdo y los retratos de Gómez.
Abolió la censura, puso en libertad a
los presos políticos y permitió que los exiliados
regresaran. En ese primer año [1935], Venezuela
adquirió libertades que le habían sido negadas a
sus ciudadanos por muchos años. (…)las ideas
públicas aparecieron nuevamente y la federación
de estudiantes de 1928 fue reactivada en 1935 y 1936.
(…)Demostraciones y huelgas, desfiles y protestas marcaron la
nueva escena política.

A López Contreras le sucedió Isaías
Medina Angarita, el cual gobernó de 1941-1945. Este nuevo
presidente siguió los pasos de su antecesor al propiciar
la apertura democrática y otras libertades a la ciudadanía. Se modificó la constitución para permitir la
creación de partidos considerados "revolucionarios" y para
establecer el sufragio
universal y directo. A este respecto, Bernstein afirma que:
"Medina concedió el sufragio a la mujeres. También
otorgó la libertad de palabra y defensa restaurando al
periodismo y a
la intelectualidad venezolana a su posición de
influencia".

Durante este período, en específico el 13
de septiembre de 1941, se fundó el partido Acción
Democrática (AD), liderado por Rómulo Betancourt y
por Rómulo Gallegos, quienes tendrían una gran
influencia en los años posteriores. El partido de gobierno
dirigido por el propio presidente Medina, era el Partido
Democrático Venezolano (PDV). Medina es derrocado el 18 de
octubre de 1945. El poder fue
asumido por una junta de gobierno que representaba a
Acción Democrática, la cual estaba presidida por
Rómulo Betancourt.

La nueva "Junta Revolucionaria de Gobierno"
ofreció la realización de elecciones en abril de
1946 para un nuevo congreso, la restitución de las
garantías constitucionales, de la libertad de prensa y de
agrupación sindical. Al poco tiempo se
fundaron dos partidos de origen estudiantil, que llegarían
a tener mucha influencia: La Unión Republicana
Democrática (URD), fundada por Jovito Villalba y el
Comité de Organización Política Electoral
Independiente (COPEI) fundado por Rafael Caldera.

Durante este periodo, en lo económico,
según Bernstein, el gobierno se "apartó del exceso
de libre empresa y del
liberalismo
económico, ayudando, regulando e interviniendo en la
economía".
Esta acción permitió brindar la atención necesaria a los campesinos y
proletarios tanto en la proyección de la reforma
agraria y la sindicalización de los petroleros,
respectivamente. Otro de los pasos evolutivos fue la
creación de nuevas leyes que dieron
como resultado la Constitución de 1947.

A partir de 1948, la junta revolucionaria pone al frente
a Rómulo Gallegos; sin embargo su periodo fue muy breve
(del 15 de febrero hasta el 24 de noviembre de 1948) cuando fue
derrocado por una Junta Militar formada por los tenientes
coroneles Carlos Delgado Chalbaud, quien era ministro de la
defensa, Marcos Pérez Jiménez y Luis Felipe Llovera
Páez, quienes acusaban al gobierno de haber sido incapaz
de resolver la crisis y a
Acción Democrática de ser un partido sectario. El
nuevo régimen expulsó del país a
Rómulo Gallegos y disolvió al partido Acción
Democrática, así como a la Confederación de
Trabajadores de Venezuela (CTV).

EL PERIODO DE
1950 A 1980

En 1950, el presidente de la Junta Militar de Gobierno,
Carlos Delgado Chalbaud fue secuestrado y asesinado, por lo que
fue reemplazado por el civil Germán Suárez
Flamerich. Esta situación motivó a la Junta de
Gobierno a visualizar y llevar a cabo para noviembre de 1952
nuevas elecciones, en las cuales el partido Unión
Republicana Democrática (URD) resultó ganador. Pero
el gobierno en boga realizó un fraude electoral
y mandó apresar y después exiliar a Jovito
Villalba, ganador de las elecciones por el URD.

En este contexto, el coronel Marcos Pérez
Jiménez fue nombrado Presidente Provisional, el 2 de
diciembre de 1952. Más adelante, será reconocido
como presidente constitucional gracias a la construcción de un congreso de
simpatizantes del militar. Su gobierno pronto se convirtió
en una dictadura, en
la cual se persiguió y encarceló a todos los
opositores, principalmente simpatizantes de Acción
Democrática y comunistas "empedernidos".

En el ámbito económico, según
Raúl López Alacayo, durante el gobierno de
Pérez Jiménez, Venezuela fue el país en el
cual:

(…)las transnacionales encontraron un terreno
propicio para el desenvolvimiento de sus actividades, debido a
que el orden militar establecido evocaba las libertades
disfrutadas durante el gomecismo, las cuales se habían
obstaculizado en las relativas aperturas y efímeros
períodos democráticos que medían
(sic) entre ambas dictaduras. El incremento de los
ingresos
fiscales fue considerable, como consecuencia de la mayor
producción, producto del
otorgamiento de mayores concesiones y al hecho circunstancial
del ‘problema’ Árabe en 1956, que
favoreció la mayor colocación del crudo
venezolano en el mercado
internacional(…).

El desgaste del gobierno fue progresivo y se
podría decir que insalvable, pues la oposición
compuesta por estudiantes, profesionales, grupos
económicos y la misma iglesia,
comenzó a indagar sucesivamente al gobierno sobre la forma
en la que vivían los obreros y los campesinos, a pesar de
la riqueza que el gobierno estaba registrando en actas
económicas. Sin embargo, aquí habría que
advertir que, como en casi todos los países
latinoamericanos que viven dictaduras, los militares
servían a los intereses extranjeros, principalmente los
estadounidenses a cambio de
dádivas económicas que provenían del mismo
saqueo del país. Era algo así como repartir las
migajas del pastel que obtenían.

La síntesis
de lo que ocurría en esta época puede ser vista en
lo que Héctor Malave explica:

En los años 1956 y 1957 la industria
petrolera alcanzó en Venezuela un elevado nivel de
operaciones
debido a la alteración geográfica de la oferta
mundial de hidrocarburos ocurrida a raíz de la
crisis de Suez. El gobierno nacional, interesado en arbitrar
recursos
fiscales extraordinarios, percibió alrededor de 2000
millones de bolívares por otorgamiento de nuevas
concesiones. Fueron esos los años de un auge artificial
que sólo prodigaba lucros espurios a la
oligarquía y enriquecimientos ilícitos a quienes
constituían la élite del
régimen.

En noviembre de 1957, Pérez Jiménez
anunciaba que pretendía la reelección. En
consecuencia, la oposición movilizó al pueblo para
que se abstuviera de participar en esa farsa electoral, logrando
la realización de huelgas y manifestaciones que minaron el
poder estatal, al grado de que Marcos Pérez Jiménez
tuvo que huir del país. El 23 de enero de 1958, un
movimiento
civil y militar derrocó al gobierno de Marcos Pérez
Jiménez, quien abandonaría el país con rumbo
a República Dominicana. El asombro de los
pérezjimenistas fue enorme, incluso para los propios
partidarios del gobierno, ya que no había pasado ni un mes
cuando se había propuesto el plebiscito para lograr la
reelección. Este referendo
parecía darle cierta solidez a su régimen y
legitimidad ante las Fuerzas Armadas; sin embargo, las cosas no
parecían iguales para el pueblo.

La opinión
pública no tardó en aparecer y es que muchas
personas tenían algo que decir al respecto:

A partir de los sucesos del 1 de enero y ante la
manifiesta crisis política y militar del régimen
perejimenista (sic), comenzaron a publicarse diversos
manifiestos en contra del gobierno tambaleante, firmados por
hombres y mujeres representativos de diferentes campos de la
actividad económica, profesional y cultural, así
como pronunciamientos públicos de instituciones nacionales como el Colegio de
Ingenieros, la Asociación Venezolana de Periodistas,
federaciones obreras y sectores empresariales que hasta ese
momento no habían manifestado abiertamente su repudio a
la dictadura. Todas las acciones de
calle en contra del régimen, tendrán su momento
cumbre en la huelga
general del 21 de enero, movilizada por la Junta
Patriótica (unión de los diversos partidos
políticos), junto a los estudiantes, empresarios y
las masas populares, la cual tomó un carácter unitario que prestó el
apoyo necesario a los oficiales alzados.

Los días del mandatario presidencial figuraban
tormentosos y para la madrugada del 23 de enero ya eran funestos,
ya que a pesar de que contaba con el apoyo de un importante
sector de las Fuerzas Armadas, Pérez Jiménez
declinó y huyó. Al conocerse la noticia del
derrocamiento, se dijo que:

(…)el pueblo se lanzó a la calle, saqueando
las casas de los adeptos al régimen; atacando la sede de
la Seguridad
Nacional y linchando a algunos funcionarios.

Asimismo, destruyeron la sede y los equipos del
periódico oficialista El Heraldo.
Por otra parte, en pocas horas el Palacio de Miraflores se
convirtió en el sitio de reunión de los
sublevados y de innumerables dirigentes políticos y
personalidades, quienes procedieron a nombrar una Junta de
Gobierno Provisional que reemplazara al régimen
derrocado. La Junta la constituyeron el contralmirante Wolfang
Larrazabal como presidente y los coroneles Carlos Luis Araque,
Pedro José Quevedo, Roberto Casanova y Abel Romero
Villate. Al amanecer del día 23, los venezolanos
celebran la caída de Pérez Jiménez, a la
vez que protestan por la presencia en la Junta de Gobierno de
Casanova y Romero Villate, reconocidos miembros del
perejimenismo; los cuales finalmente fueron obligados a
renunciar y reemplazados el día 24 de enero por los
empresarios Eugenio Mendoza y Blas Lamberti.

Por el contrario, como lo afirma López Alacayo
esta acción resultó favorable para el país
venezolano tomando en cuenta la continua dependencia externa a la
que había llevado Pérez Jiménez:

Con el 23 de enero de 1958 se marca el final
de diez años de dictadura. La conformación de un
nuevo orden democrático, iniciado con la Junta de
Gobierno, asoma cambios en la política petrolera. En
diciembre del mismo año se aumenta el impuesto
complementario de 26% a 45% sobre las utilidades brutas de las
compañías, generando, como era de esperar, la
agresiva respuesta de los trusts petroleros, quienes
inmediatamente rebajan, a comienzos de 1959, los precios del
barril de petróleo, expulsando igualmente un
promedio de 9 mil empleados de la industria, bajo el argumento
de reorganización de las empresas.

Después de la expulsión de Pérez
Jiménez, la Junta de Gobierno eligió a Wolfang
Larrazábal, este personaje trajo consigo nuevas horizontes
a la política, ya que de "1958 a 1959, hizo volver a los
liberales, los exiliados y a Acción Demócrata(…).
También demostró un buen dominio de las
fuerzas que han estado
agitando a Venezuela. Elevó las regalías y los
impuestos
sobre la industria del petróleo,
de 50 a 60 por ciento". Su gobierno, no obstante fue nimio,
debido a que ese mismo año (1958) se convocó a
elecciones y resultó perdedor al obtener mayoría
Rómulo Betancourt a principios de
1959.

Durante el gobierno de Betancourt se propician una serie
de juicios contra los seguidores y compañeros de
Pérez Jiménez por corrupción
administrativa. Bajo su mandato, se promulga la segunda Ley de Reforma
Agraria en 1960. a pesar de que este presidente aseguraba
tranquilidad y buen camino para Venezuela, la inestabilidad
política caracterizó su gobierno, al grado que un
24 de julio de 1960 sufrió un atentado. No obstante, como
se puede apreciar, entre sus proyectos de
gobierno figuró aquel en el que:

(…)se procedió a la creación de la
Corporación Venezolana del Petróleo (CVP) en
1960, teniendo como imperiosa necesidad superar la
participación mediatizada del Estado en el negocio
petrolero(…). Bajo el lema de ‘no más
concesiones’ se iniciaron las actividades de la empresa
venezolana(…). [No obstante, no tardaron] las amenazas
reiteradas de los trusts del petróleo ante la pretendida
emancipación de Venezuela, que en reprimenda aplicaron
restricciones a las compras de
petróleo venezolano con la firme intención de
disminuir el ingreso fiscal por
la disminución de exportaciones.

Incluso el problema era tan grave que ya los capitales
extranjeros decidían el curso del país. Al
respecto, Héctor Malave sostiene que "En el inicio de la
década del sesenta se estableció una política
económica que permitió la penetración de
consorcios industriales extranjeros en la economía
venezolana, la política industrial del país fue
desviada de las etapas programadas hacia objetivos
inconfesables de nueva mediatización".

Entre los problemas
sociales existentes figuraron los que tuvieron que ver con
grupos rebeldes como bien lo apunta Bernstein cuando dice que
"muchos incidentes comunistas y terroristas han ocurrido desde
1960. a partir de un atentado contra la vida de Betancourt, la
violencia pasó a actos públicos y casi criminales
de sabotaje y destrucción. Una organización que se
hace llamar la FALN (Fuerzas Armadas de Liberación
Nacional), con la bendición de Gustavo Machado (el
líder
comunista y miembro del Congreso) y Fidel Castro,
de Cuba,
declaró que actuaba en nombre de la liberación
nacional".

En 1963 resulta electo luego de las elecciones,
Raúl Leoni, quien ejerció un mandato sin mayores
penas, alegrías y pesares. No obstante, sigue en boga la
inestabilidad política del sistema. Cuando
este presidente deja el poder, se lleva tras de sí un
aumento sustancial de la deuda externa de
la nación.

En 1969, el 11 de octubre, es electo como presidente
Rafael Caldera, el cual lleva a cabo la política de
pacificación, asimismo se cuestiona el Tratado de
Reciprocidad Comercial con los EU. En el régimen de este
presidente se realiza una amnistía para los presos
políticos quienes se incorporan a la legalidad del
ejercicio político. Así, en 1970 se funda el
partido Movimiento al Socialismo
(MAS).

No obstante, López Alacayo expone que la "riqueza
obtenida a costa del agotamiento irracional del crudo sólo
daba una prosperidad aparente, muy lejos de la realidad, ya que
su beneficio seguía siendo limitado y excluyente, no
utilizado para el bienestar social, ni reinvertido ese
‘inmenso’ capital en
obras de provecho nacional".

También durante su mandato se llevó a cabo
lo que se conoce como Reversión Petrolera, el cual
pretendía dar autonomía a la producción
petrolera del país. Así pues, esta acción
como lo menciona Alacayo fue:

(…)un derecho consagrado en la Ley de
Hidrocarburos de 1973 y con bases jurídicas donde se
establece el regreso a la Nación, en calidad de
propiedad,
sin ningún tipo de indemnización, al finalizar
los contratos de
las áreas otorgadas en calidad de concesiones,
así como también las obras, equipos,
instalaciones y demás instrumentos dedicados a la
industria, con la finalidad de preparar las bases
óptimas necesarias para poder emprender el camnio a la
futura nacionalización de la industria
petrolera.

El 3 de diciembre de 1973 se realizan las elecciones,
saliendo electo presidente Carlos Andrés Pérez como
candidato de Acción Democrática. En su periodo se
elevan vertiginosamente los precios internacionales del
petróleo; se promulga una ley que declara salarios
mínimos y estabilidad laboral de los
empleados.

Su preocupación por el sector petrolero lo lleva
a que durante su gobierno, como lo afirma Guillermo Morón,
la "nacionalización de la industria petrolera se
consumó en 1975(…), quien introdujo al Congreso Nacional
el respectivo proyecto de ley
el 11 de marzo de 1975(…), que no entró en vigor sino
hasta el 1 de enero de 1976". Otras acciones en el año de
1975 hablan de la nacionalización de la industria del
hierro,
terminando así con la exagerada explotación de las
empresas transnacionales. En 1977, se crean los ministerios de
ambiente y
recursos
naturales, equipamiento urbano, transporte y
comunicaciones, información, de la juventud y el
ministerio de la secretaria de la presidencia. Durante este
gobierno suben a 41.921 millones de bolívares las importaciones de
productos
procedentes del extranjero.

De esta manera se pude notar cómo para estos
años, Venezuela logra liberarse un poco de la presión
que EU ejercía sobre el control de la
industria petrolera a través de sus empresas nacionales.
Incluso López Alacayo expone una explicación sobre
la mínima reacción estadounidense ante la actitud de
Venezuela para deshacerse del yugo al que estaba sometida, bajo
este aspecto el autor explica que:

(…)al deterioro del dólar es importante tomar
en cuenta el costo que
representa para las compañías petroleras seguir
manteniendo el control directo sobre los hidrocarburos no
sólo en Venezuela sino también en África y
Medio Oriente. (…)sobre todo si se toma en cuenta la derrota
sufrida por el imperialismo
estadounidense en Indochina entre los años 1974 y 1975,
donde los pueblos de Vietnam, Laos y Camboya (Kampuchea) logran
expulsar a los yankis que en los últimos cinco
años de guerra
habían aumentado desproporcionadamente los gastos
bélicos, no sólo en armamentos convencionales
sino en la experimentación de armas
químicas que aún en la actualidad siguen su
secuela de miseria y muertes congénitas".

Para 1978, es elegido como presidente Luis Herrera
Campins, quien implementa una política de
liberación de precios,. En 1982, Venezuela ingresa al
grupo
Contadora en donde se intentan aportar soluciones
pacíficas a los problemas de
América
Central. Durante este gobierno se implementan medidas
económicas que conllevan a una gran devaluación que origina un aumento
vertiginoso de la inflación e, incluso, provoca al cierre
de instituciones bancarias.

En las elecciones de 1983 sale electo Jaime Lusinchi,
quien enfrentó durante su gobierno una serie de protestas
populares ante las políticas
económicas que fueron implementadas, las cuales
además conllevaron a la suspensión del pago de la
deuda externa. En 1988 es elegido por segunda vez Carlos
Andrés Pérez, quien implementa una serie de medidas
económicas de shock de corte neoliberal
diseñadas por un grupo de tecnócratas, quienes
sumergen al país en una grave crisis social y
política que desencadenó el "sacudón" del 27
de febrero de 1989 a sólo pocos meses de su ascenso al
poder, la cual fue seguida por las intentonas golpistas del 4 de
febrero de 1992 y del 27 de noviembre de ese mismo año.
Este presidente culmina su mandato al ser destituido por
acusaciones de malversación de los fondos públicos.
Cuestión seriamente conocida en los políticos que
sirven para fines personales auspiciados en estas ideas
neoliberales.

El interés
por restablecer el orden que beneficiaba a los empresarios
estadounidenses trajo consigo la obstaculización de las
reformas que se interrumpieron desde el derrocamiento de la Junta
Revolucionaria en 1948. Ahora el medio no era imponer un
régimen dictatorial sino desestabilizar
económicamente a los nuevos gobiernos.

La economía de mercado en Venezuela la domina
su principal recurso natural – el
petróleo. Las reservas venezolanas de
petróleo fueron descubiertas en 1914 y
rápidamente transformaron la economía del
país de una nación pobre a una de las más
ricas de América del Sur. El boom más grande
llegó en 1970 cuando la OPEP,
organización co-fundada por Venezuela, incrementó
el precio del
petróleo cuatrocientos por ciento, cuadruplicando los
ingresos del país. El GNP creció
rápidamente y comenzó el ingreso constante de
personas de otros países buscando trabajo. En
1982, el ingreso petrolero alcanzó el tope. Con
ganancias de US$19.3 billones, consistían en más
del 95 por ciento del total de exportaciones del
país.

Sin embargo, la recesión global de los
años 80 causaron el colapso de los precios petroleros.
Los ingresos de Venezuela por las exportaciones petroleras
cayeron dramáticamente, dejando al gobierno con pocos
medios para
pagar las fuertes deudas contraídas en bancos
extranjeros para financiar las importaciones de los años
70. El PIB
descendió y la economía se volvió
débil e inestable. Solo en 1997 empezó a ver
indicios de mejoría".

La exagerada importancia que se puso en el
petróleo como fuente de ingresos hizo que otros sectores
de la economía venezolana fueran ignorados, como la
industria, la pesca y la
agricultura.
Fundamental esta última para solventar las crisis internas
de un país. La agricultura nunca ha sido particularmente
importante, ya que sólo el cuatro por ciento del
área total es asignada a este rubro, de la cual un tercio
permanece sin cultivar. Al respecto se dice también que
"aunque la agricultura emplea a casi el 12 por ciento de la
fuerza
laboral, Venezuela no es autosuficiente e importa la
mayoría de sus alimentos. Los
principales cultivos incluyen bananas, maíz,
caña de azúcar,
café,
cacao y tabaco".

En cuanto a los rubros industriales, Venezuela no cambia
su fisonomía en mucho. Dentro de ella existen grandes
cantidades de hierro, diamantes, carbón, bauxita y
oro; no
obstante la mayor extracción de éstos lo realizan
empresas que negociaron su estancia con la mínima cantidad
de impuestos y grandes ganancias Como suele ocurrir con la
mayoría de los países latinoamericanos las vetas
mineras desde la Conquista se vienen sucediendo para intereses
ajenos al lugar de donde se extraen.

CONCLUSIÓN

Como pudo ser visto las largas contradicciones y
problemas que aquejan a los países latinoamericanos son el
producto de una organización interna poco favorable. Esta
situación se desprende desde la continua dependencia que
se llevó a cabo con la conquista española, desde
entonces pocos han sido los factores que han permitido la
consolidación de reglas y leyes propuestas por las
personas originarias de un país.

Si a esto le aunamos el hecho de que los Estados Unidos,
claramente, ha creado una red muy compleja de
países dependientes a él por medio de la
imposición de regímenes militares o civiles, como
lo hicieron en Venezuela, así como intromisión en
la economía por medio de empresas transnacionales se
entenderá, pues, la nula libertad que se permite para
erigir un estado independiente y, a la vez, autosuficiente. Esta
situación es muy remarcada en este trabajo cuando se
señalan las protestas y chantajes que hacían los
trusts y holdings cuando se veían afectados
sus intereses por algún presidente o grupo social. En este
sentido, se puede decir que Venezuela estancó sus reformas
debido al imperialismo estadounidense que no le permitió
su desarrollo
hasta que, como se vio, los factores externos de la guerra que
afectaron a los EU lo hicieron posible.

Es innegable, entonces, que Venezuela figura como uno de
los países latinoamericanos más ricos por su
producción petrolera; sin embargo, dentro de él se
vive la pobreza,
expresada con la rebelión de grupos, y la
marginación a la industria nacional. Los intereses
extranjeros son los que reciben los dividendos más
sustanciosos y los naturales de Venezuela sólo son parte
de un eslabón en la capitalización de los
estadounidenses.

La continua fe en la extracción el combustible ha
originado que Venezuela deje olvidados otros modos de producir
capital como son la agricultura, la minería,
la industria, entre otros. Al respecto, habría que
advertir también que la tecnología
también es aportada por los capitalistas extranjeros, lo
que hace también un gran negocio dentro del país en
las que logran vender. Bajo este tenor, Venezuela no
encontrará nunca la salida del subdesarrollo,
pues, en primer lugar, el petróleo no es eterno y, en
segundo lugar, con la intromisión de empresas
transnacionales se auto eliminara de la competencia
mercantil y productiva.

BIBLIOGRAFÍA

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Diana, México,
1967, 187 pp.

IZARD, Miguel, Tierra firme. Historia de
Venezuela y Colombia
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LÓPEZ Alacayo, Raúl, Historia
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Venezuela, 1990, 191 pp.

MALAVE MATA, Héctor, Formación
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PÁGINAS WEB

Venezuela Tuya, "La transición a la democracia",
Febrero de 2001. Tomado de la página
web:

Think C.A., "Economía de Venezuela", Noviembre de
2002. Tomado de la página web:

http://www.think-venezuela.net/spanish/i_economy.htm

 

Javier Cervantes
Mejía

Partes: 1, 2
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