El Islam es un
sistema religioso
nacido en Arabia durante la edad media.
Sus planteamientos teológicos se conectan con las
tradiciones judeocristianas, los cuales fueron introducidos por
Mahoma, quien según la tradición tuvo varias
experiencias con Alá, las cuales están consignadas
en el libro sagrado
llamado EL CORÁN. Es así como este texto
religioso constituye la norma espiritual y política de sus
creyentes, pues comprenden ellos que la riqueza de su contenido
es presencia de Alá en sus vidas.
Pienso profundamente que es este uno de los temas
más importantes en el mundo postmoderno, debido a las
múltiples formas de interpretación actual y su relación
o no con las formas de violencia. En
cuanto a la experiencia religiosa considero que por ser esta una
de las religiones
monoteístas de raíz judía posee estos
fuertes valores y
criterios que aportan a nuestra formación
académica, creando por medio de esta una lectura
más comprensible y aprensible de la tradición
patriarcal y mosaica, por consiguiente nutre las siguientes
experiencias de en el hecho religiosos puntual.
Además me emociona de sobre manera el estudio de
esta forma religiosa, ver en ella también las maneras por
medio de las cuales Dios se ha manifestado a este pueblo
medieval, y el cual ha seguido interpelando su quehacer cotidiano
hasta nuestros días.
Así mismo, fundo mi gusto por el análisis científico social en esta
religión:
observar el caminar político de esta religión
semítica, constituye un argumento valedero para entender y
profundizar los procesos
sociológico y políticos de éste conjunto
religioso atravesado por un fuerte convencimiento de su fe, por
una enérgica conciencia
religiosa (digna de admirar en estos tiempos de secularismo),
encontramos es estos pueblos del oriente cercano un paradigma que
es sin lugar a dudas aplicable en estos tiempos, en donde prima
un desorden político y económico garrafal, que
desembocan una variedad de problemáticas sociales
considerables.
Son éstos pueblos que enseñan un tipo de
organización política,
económica, social, vinculada por unos criterios religiosos
que desembocan dicho orden.
Entendamos también el contexto histórico
del momento de la civilización Árabe en el momento
de revelación, fijémonos que este es un resultado
de diversas influencias religiosas y tensiones políticas
de su momento: su política interna convergió en
presupuestos
de jurisprudencia
Coránica, alimentada por la tradición musulmana de
años póstumos. Es así como encontramos en la
ley musulmana
una fuente digna de admirar estudiar pues su organización
tal como la judía (y en construcción la cristiana) se fundamentan
en su principio escriturístico de la adoración a
Alá y el respeto
profundísimo a su profeta Mahoma, junto a un seguimiento
casi minucioso a las prácticas religiosas que como
decía anteriormente desembocan un orden armonioso de cosas
en lo político, económico y social.
El interés
por el estudio de esta forma religiosa nace con el interés
propio por encontrar y entender la experiencia religiosa del
creyente desde sus múltiples explicaciones a saber. Pues
desde un tiempo hacia
acá, hemos visto expectantes el mundo occidental un cierto
grado de renacimiento
(gracias a los medios masivos
de comunicación) de forma exponencial del
mundo árabe, del mundo musulmán. Sus variantes y
evolución histórica la han llevado a
tomar matices diferentes a lo largo del itinerario humano que
trasformaron o auto afirmaron el creer del musulmán en sus
principios,
creencias, cosmovisión, discurso
teológico, y por ende político, según
corresponda. El mundo occidental o desertor, ha mal interpretado
o no ha tenido las herramientas
hermenéuticas para seguir el proceso del
credo Islámico.
En ciertas ocasiones se ha dejado amoldar por la
posición de los medios masivos de comunicación
respecto al mismo; es por esto que muchas de sus opiniones
convergen en torno del
discurso "seudo humanista" de estos medios, los cuales han
estado a favor
de posturas reaccionarias y caducas simultáneamente, y
peor aún desprestigiando la riqueza que esta y cualquier
religión merece por el simple hecho de ser
manifestación parcial o total de lo sagrado, de
Dios.
De modo que al sumergirnos en el estudio
sistemático de la historia de las religiones nos
encontramos con casos muy particulares e inquietantes que sirven
de problema núcleo para llevar a feliz término la
investigación , para encontrar le posibles
soluciones a
dicho caso.
Cuando nos encontramos con las manifestaciones
religiosas contemporáneas tendemos a caer en el vicio de
juzgarlas con pocos criterios científico-sociales,
llegamos a estados de "piadosísimos", que terminan por
desestructurar la cosmovisión de dichos creyentes o de
nosotros mismos.
Por consiguiente se crea una necesidad de manejar con
total madurez y espíritu crítico dicha
problemática religiosa. Ahora bien, si esta fuese una
problemática de tipo contemporáneo se hace un tanto
complicada y mas aún se hace si esta fuere de
índole antiquísima o lejana a nuestro momento
histórico, político, económico y por ende
etnológico; de manera que se combinan un sin número
de elementos a esta sumatoria social.
Tal como lo cito en los títulos y lo reafirmo en
el prefacio, mi problema núcleo es la "la
aproximación a la experiencia político-religiosa
del Islam ". En esta quiero desarrollar contenidos de orden
general y específico, planteo en su recorrido
epistemológico generalidades históricas del Islam,
pasando por contenidos un tanto antropológicos de los
mismos sin perder conexión uno de otro. Además
haré especial énfasis en una de las figuras
centrales del Islam: Mahoma, vinculándolo con el
máxima revelación para estos: El
Corán.
Dicho de otra manera, expondré de manera sencilla
las formas por medio de las cuales el Islam se propaga como
religión y luego se afirma como
política.
Por otro lado hablaré brevemente sobre las
teorías
políticas del Islam clásico y contemporáneo,
haciendo mayor hincapié en este último, para luego
continuar con una crítica
al capitalismo
neoliberal postmoderno y analizar dicho fenómeno con
puntos de orden científico-social.
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