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Los hijos de Dios (página 2)



Partes: 1, 2

  • Juan 1:12

"Mas a todos los que le recibieron, a
los que creen en su nombre, les
dio potestad de ser hechos hijos de Dios
…".

Como ya vimos en el estudio de El Nuevo Nacimiento, Dios
hace hijo(a) a quien recibe a Jesús como su Señor y
creen en Él. Entonces así Dios les de la potestad,
el derecho, el privilegio, de ser HECHO hijo(a) de Dios. Veamos
el siguiente versículo.

  • Efesios 2:8

"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don
de Dios…"

La Biblia dice que somos salvos por gracia, pero
¿qué significa "gracia"? Significa regalo
inmerecido, o sea, que Dios nos regala la salvación, el ir
al Cielo aun sin merecerlo. Por eso cuando alguien cree que se
merece el Cielo, está declarando su ignorancia en el tema.
De hecho el apóstol Pablo lo dice más adelante en
el mismo versículo, que la salvación no es por
nosotros mismos, sino que es un regalo de Dios. NADIE se merece
el Cielo por más "bueno" que sea, pues esa "bondad" es
desde el punto de vista humano, pero ya vimos que nuestras
justicias son como basura delante
de Dios. Para irse al Cielo no hay que ser "bueno" ni hacer cosas
"buenas", sino que se nos regala el pasaje siempre que
reconozcamos a Jesucristo como Señor y Salvador por la
acción
que hizo cuando se entregó a la cruz.

  • Romanos 8:14

"Porque todos los que
son guiados por el Espíritu de Dios, éstos
son hijos de Dios
".

Una vez que nacemos de nuevo y nos convertimos en
hijos(as) de Dios, tenemos que empezar a vivir de manera
diferente. Tenemos que tener conciencia de que
ahora las cosas ya no las vamos a conseguir por nuestra propia
cuenta, sino que Dios las consigue por nosotros. De hecho, si
siendo hijos(as) de Dios tratamos de hacer las cosas por nuestros
propios medios, la
mayoría de las veces fracasaremos, hasta que aprendamos a
vivir dependiendo de Dios, tal y como Él lo quiere, pues
es parte de la restauración del Plan Original de
Dios. Dejemos pues, de actuar independientemente de Dios, pues
éste es un principio satánico, porque
Satanás, antes de ser Satanás, estaba como el
lugarteniente de Dios en el Cielo, y por actuar y querer
independizarse de Dios, es echado fuera del
Paraíso.

De esta manera leemos en el versículo de Romanos
8:14, que dice que TODOS los que se dejan guiar por el Espíritu
Santo SON hijos(as) de Dios. ¿Por quién te
dejas guiar tú? Si dices que no te dejas guiar por nadie
ni por nada, entonces es Satanás quien te guía.
TODOS, sin excepción somos guiados espiritualmente
hablando; NADIE puede vivir solo ni actuar solo, SIEMPRE hay un
espíritu influenciando un nuestras vidas. Si dices que
nadie ni nada te guía ni te domina, entonces
entérate de que hay varios espíritus
engañándote para pienses así. Un par de esos
espíritus que te tienen dominado son un espíritu de
soberbia y uno de independencia,
y ambos trabajan bajo el yugo de Satanás.

Incluso hay hijos(as) de Dios que están
influenciados de alguna manera y que viven de manera desordenada.
Pero hasta que internalizan quiénes son en Cristo, hasta
ese momento llegan las opresiones demoníacas y se cumple
la Palabra cuando dice que conoceremos la Verdad, y la Verdad nos
hará libres (Juan 8:32).

  • Lucas 8:21

"El entonces respondiendo, les dijo: Mi
madre y mis hermanos son los que
oyen la Palabra de Dios y la hacen
".

Como Jesús es el Hijo de Dios, y nosotros nos
hicimos hijos(as) de Dios, entonces Jesús y nosotros somos
hermanos. Tenemos el mismo Padre de Jesús. Por eso
Jesús mismo dice cuando su mamá y sus hermanos
fueron a buscarlo a cierto lugar, que su familia SON los
que OYEN la Palabra y la HACEN. ¡Qué interesante es
descubrir cosas en la Biblia! Ahora sabemos que no sólo
basta con oír la Palabra de Dios, sino que hay que
hacerla.

Esta es la gran sabiduría de Dios, porque
Él sabe que todos pueden oír la Palabra:
cristianos, musulmanes, satánicos, etc.; pero aquellos que
además la hacen, esos son Su Familia. Porque
además, para HACER la Palabra de Dios, hay que SER hijo(a)
de Dios, de otra manera es imposible cumplirla. Por toda la
Biblia Dios ha dicho que Él es quien hace las cosas por
nosotros, que descansemos en Él, que Él pelea por
nosotros y Él es el que hace que cumplamos con sus
preceptos; porque sabe que nosotros por nuestra propia cuenta no
podemos cumplir con su Palabra.

  • Apocalipsis 1: 5-6

"…y de Jesucristo el testigo
fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los
reyes de la tierra. Al
que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su
sangre,
y nos hizo reyes y sacerdotes para
Dios
, su Padre; a él sea
gloria e imperio por los siglos de los siglos.
Amén."

Otra gran verdad expresada en este texto es
justamente que cuando nosotros nacemos de nuevo, Cristo nos hace
reyes y sacerdotes para Dios. Pensemos en esto un momento. Si
nosotros somos hijos(as) de Dios y Dios es el Rey de reyes,
entonces nosotros somos hijos(as) del Rey, o sea, que somos sus
príncipes y nos hizo reyes/reinas para que gobernemos
nuestras vidas conforme a Su voluntad. Cuando la Biblia dice que
nos hizo reyes, además significa que nos dio autoridad, la
misma autoridad que delegó en sus discípulos en
Marcos 16. Ahora somos sus hijos(as) y tenemos Su autoridad
delegada en nosotros, y podemos ejercerla.

Por otro lado, nos hizo también
sacerdotes/sacerdotisas porque ahora nosotros mismos podemos
hablar la Palabra de Diosa cualquiera. Podemos ministrar de
diferentes maneras a otras personas para que lleguen a conocer a
Cristo como nosotros lo conocemos o para que sean libres de
flagelos como los vicios, o comportamientos
inadecuados.

Si eres hijo(a) de Dios, entonces eres rey/reina y
sacerdote/sacerdotisa; y esto no es una metáfora, es
literal.

  • Apocalipsis 5: 10

"…y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y
reinaremos sobre la tierra
".

Un poco más adelante, en el mismo libro del
Apocalipsis podemos encontrar que Dios nos dice más; que
reinaremos sobre la Tierra.
Acá el Señor está revelando un poco
más sobre los planes futuros que tiene para con los que
somos hijos(as) de Dios. De hecho, el apóstol Pablo lo
dijo que nosotros reinaremos juntamente con Cristo (2ª
Timoteo 2:12). Por tal motivo es que también dice que
somos coherederos junto con Cristo (Romanos 8:17), porque si
Él va a reinar sobre la Tierra, nosotros lo haremos junto
con Él.

Notemos cómo Dios destaca lo que estaba
caído, cómo exalta al que se humilla (Santiago
4:10); y ser hijo(a) de Dios implica humillarse delante de su
presencia. Por eso de ser como basura ahora nos
exaltará junto con Cristo. Es increíble cómo
la Biblia se confirma sola, no hay contradicción alguna en
sus palabras; todo encaja perfectamente para que notemos que el
autor definitivamente fue Dios.

  • Gálatas 5: 13

"Porque vosotros, hermanos,
a libertad
fuisteis llamados
; solamente
que no uséis la libertad
como ocasión para la carne, sino servíos por
amor los unos
a los otros
".

Hay un versículo en la Biblia que dice que para
los que somos hijos(as) de Dios, todo nos es lícito
(1ª Corintios 10:32) y que la verdad nos hará libres
(Juan 8:32). Pero se nos hace una advertencia, que no usemos la
libertad para hacer lo que nos dé la gana. No podemos
abusar de nuestra libertad para convertirla en libertinaje, en
anarquía. Ciertamente estamos justificados por la Sangre
de Cristo, pero no usemos la justificación que tenemos
para entristecer y enojar a nuestro Dios. Pero la gran noticia de
estos versículos, es que como hijos(as) de Dios, somos
COMPLETAMENTE libres. Usemos de esa libertad conforme a Su
voluntad y no conforme a la nuestra para que seamos
perfeccionados y podamos acercar a otros a Cristo para que vayan
también al Cielo.

  • 1 Tesalonicenses 3: 12-13

"Y el
Señor os haga crecer y abundar en amor unos para con otros
y para con todos
, como
también lo hacemos nosotros para con vosotros,
para que sean afirmados vuestros
corazones, irreprensibles en santidad delante de Dios nuestro
Padre
, en la venida de nuestro
Señor Jesucristo con todos sus santos".

Este versículo resume lo que tenemos que hacer
envés de hacer lo que queremos con nuestra libertad. Si
nos sometemos a Dios entonces Él nos hará crecer y
pondrá de Su amor en nosotros, abundantemente. De esta
manera nuestros corazones, o sea, lo que pensamos y sentimos
serán afirmados en la Palabra de Dios, es decir, nuestras
voluntades y la voluntad de Dios, se fundirán para hacerse
una sola, y en este punto, nuestros deseos serán los
deseos de Dios y TODO lo que anhele nuestros corazones Dios mismo
lo concederá. Esto quiere decir tener un corazón
santo e irreprensible delante de Dios.

  • 1 Tesalonicenses 4: 1-12

"Por lo demás, hermanos, os
rogamos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la
manera que aprendisteis de nosotros cómo os
conviene conduciros y agradar a
Dios
, así abundéis
más y más. Porque ya sabéis qué
instrucciones os dimos por el Señor Jesús;
pues la voluntad de Dios es
vuestra santificación
;
que os apartéis de fornicación; que cada uno de
vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor; no en
pasión de concupiscencia, como los gentiles que
no conocen a Dios; que ninguno
agravie ni engañe en nada a su
hermano
; porque el Señor
es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado.
Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a
santificación. Así que, el que desecha esto, no
desecha a hombre, sino a
Dios, que también nos dio su Espíritu Santo. Pero
acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os
escriba, porque vosotros mismos
habéis aprendido de Dios que os améis unos a
otros
; y también lo
hacéis así con todos los hermanos que están
por toda Macedonia. Pero os rogamos, hermanos, que
abundéis en ello más y más; y
que procuréis tener
tranquilidad
,
y ocuparos en vuestros negocios, y
trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado, a
fin de que os conduzcáis honradamente para con los de
afuera, y no tengáis necesidad de
nada
".

Este párrafo
de 1ª de Tesalonicenses nos explica la conveniencia de
comportarnos bien delante de Dios, haciendo la voluntad de Dios y
no la nuestra porque esto nos lleva a la santificación. En
otras palabras, la santidad no es algo con lo que se nace, sino
que es algo que se puede alcanzar palpablemente; y digo
palpablemente porque según la Biblia, para Dios somos
santos desde que nacemos de nuevo.

Por otro lado, Pablo exhorta a que ninguno de los
hermanos dañe ni engañe a otro hermano, porque
dice, que Dios da la paga de estas cosas. Además, si Dios
es amor, lo que tenemos que aprender de Dios es justamente a dar
amor; por tal motivo el apóstol Pablo nos anima a que nos
amemos unos a otros, porque en eso conocemos que somos de
Dios.

Además de todo, Pablo nos anima a que procuremos
tener tranquilidad, no que estemos buscando pleitos o
metiéndonos donde no nos llaman. Nos dice que nos ocupemos
de nuestros negocios, de nuestros trabajos de manera honrada,
sujetándonos a nuestras autoridades, haciendo las cosas
como para Dios no como para los hombres, etc. Si seguimos el
consejo de Dios seguramente no nos faltará nada puesto que
para que una persona
así pierda su empleo, es
bastante difícil. Y si siempre vamos a tener un empleo, no
tendremos ninguna necesidad de nada, y Dios nos suple de todas
las cosas que necesitamos.

Pablo nos ruega que profundicemos cada vez más en
nuestro contacto con Dios y en seguir el consejo de Dios. Al
principio puede parecer muy difícil, puede parecer que no
lo vamos a alcanzar, pero quiero hacerle entender, estimado
lector, que es Dios quien hace todo, y si Él lo hace ya lo
que era imposible ahora es posible, pero gracias al poder de
Dios.

Es de esta manera como los que somos hijos(as) de Dios
nos tenemos que conducir en todo momento, que no sea algo
externo, sino que estamos convencidos que esa es la forma como le
agrada a Dios.

  • Filipenses 2: 1-5

"Por tanto, si hay alguna
consolación en Cristo, si algún consuelo de amor,
si alguna comunión del Espíritu, si algún
afecto entrañable, si alguna misericordia, completad mi
gozo, sintiendo lo mismo,
teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma
cosa.
Nada hagáis por
contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando
cada uno a los demás como superiores a él mismo; no
mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual
también por lo de los otros. Haya, pues, en vosotros este
sentir que hubo también en Cristo
Jesús
"…

Pablo en su carta a los
filipenses, nos aconseja a sentir lo mismo; ¿y cómo
puede lograrse eso? Pues bien, no está hablando de sentir
alegría o tristeza, pues estos sentimientos
dependerán de la persona y de lo que esa persona haya
pasado. Pero sí está hablando del gozo, está
hablando de que todos queramos siempre hablar de la Palabra y que
nos enseñemos unos a otros, que oremos juntos, que nos
pongamos de acuerdo en cuanto a las cosas que tenemos que
pedir.

También Dios dice que no hagamos nada por pleito,
o sea, por envidia, para destruir algo, ni por vanagloria, o sea,
para exaltarme yo mismo(a); por el contrario, mejor es que vea
por mis necesidades y también por las necesidades de los
demás, a los cuales, incluso debo estimar como superiores
de lo que ellos dicen que son. Claro está, esto aplica
para los cristianos maduros, porque no podemos creerle a un vago
que diga que es el vicepresidente de una empresa, esto
aquí sería un alarde de su parte. Pero si un
hermano maduro en el Espíritu nos dice algo con respecto a
él con humildad, Dios nos llama a que veamos como que
realmente es mayor y/o mejor de lo que él dice. Como este
mismo sentir hubo en Jesús, fue a la cruz para pagar el
precio de
sangre por ti y por mí.

Hasta ahora hemos visto cómo debemos actuar con
respecto a los demás, cómo debemos actuar con
respecto a nuestros hermanos en la fe. Todas estas cosas hacen
que nosotros tengamos un buen comportamiento
delante del mundo y el mundo pueda reconocer que somos hijos(as)
de Dios. Si el mundo reconoce que somos hijos(as) de Dios
entonces se cumple también con la Palabra que dice que
tenemos que ser tierra deseable para lo que no conocen a Cristo
(Malaquías 3:12)

  • 1 Pedro 2: 9-25

"Mas
vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación
santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las
virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su
luz
admirable
; vosotros que en otro
tiempo no
erais pueblo, pero que ahora sois
pueblo de Dios
; que en otro
tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero
ahora habéis alcanzado
misericordia
.

Vivid como siervos de Dios.

Amados, yo os ruego como a extranjeros y
peregrinos, que os
abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el
alma,
manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los
gentiles
; para que en lo que
murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en
el día de la visitación, al considerar vuestras
buenas obras.

Por causa del Señor
someteos a toda institución
humana
, ya sea al rey, como a
superior, ya a los gobernadores, como por él enviados para
castigo de los malhechores y alabanza de los que hacen bien.
Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo bien, hagáis callar la ignorancia
de los hombres insensatos
; como
libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto
para hacer lo malo, sino como siervos de Dios. Honrad a todos.
Amad a los hermanos. Temed a Dios. Honrad al rey.

Criados, estad sujetos con todo
respeto a
vuestros amos
; no solamente a
los buenos y afables, sino también a los difíciles
de soportar. Porque esto merece aprobación, si alguno a
causa de la conciencia delante de Dios, sufre molestias
padeciendo injustamente. Pues ¿qué gloria es, si
pecando sois abofeteados, y lo soportáis? Mas si haciendo
lo bueno sufrís, y lo soportáis, esto ciertamente
es aprobado delante de Dios. Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por
nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus
pisadas; el cual no hizo pecado, ni se halló engaño
en su boca; quien cuando le maldecían, no respondía
con maldición; cuando padecía, no amenazaba, sino
encomendaba la causa al que juzga justamente; quien llevó
él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero,
para que nosotros, estando muertos a los pecados,
vivamos a la
justicia
; y por cuya herida fuisteis
sanados
. Porque vosotros erais
como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al
Pastor y Obispo de vuestras almas".

El apóstol Pedro dice algo más sobre
nuestra identidad en
Cristo; dice que somos linaje escogido, es decir, que somos una
generación escogida por Dios. Somos real sacerdocio; como
ya vimos, somos reyes/reinas y sacerdotes/sacerdotisas, por lo
que Pedro junta ambos calificativos y dice que somos real
sacerdocio, haciendo alusión a lo anteriormente expuesto.
Dios nos llama también nación
santa. Como ya se mencionó, nosotros pasamos a ser santo
para Dios desde el día del nuevo nacimiento, por lo que
todos los que tenemos nueva vida en Cristo formamos una
nación santa, es decir, de santos. Por lo demás,
somos pueblo adquirido por Dios. ¿Cómo que
adquiridos? Bueno, cuando Cristo murió en la cruz, nos
compró por precio de sangre. En ese momento nos
compró legalmente de las manos de
Satanás.

Pero, ¿para qué Dios hizo esto por
nosotros? Como dice el versículo, para que anunciemos a
los demás que no conocen a Dios, las virtudes de Dios
mismo, pues tiene poder para sacarnos de las tinieblas donde
vivíamos, ciegos de todas las cosas, creyendo que muchas
cosas eran exageradas y que eran inofensivas. Anunciemos lo que
Cristo ha hecho en nuestras vidas a las personas que no lo
conocen todavía.

Por otro lado, Pedro nos dice que ahora somos
pueblo de Dios y que ahora hemos alcanzado misericordia.
Esta palabra "ahora" nos dice que efectivamente antes no
éramos hijos(as) de Dios pero que ahora sí
somos.

Una vez que Pedro nos hace reflexionar sobre lo que
somos en Cristo Jesús, nos anima a vivir como tales. Nos
dice que no actuemos por impulsos, porque eso sería seguir
la carne y que además mantengamos la BUENA manera de
vivir, esto es, vivir con el fundamento bíblico y que
mantengamos nuestra buena manera de vivir incluso con los
gentiles. Los gentiles son las personas que no conocen a Cristo,
pero que incluso mantengamos esta manera de vivir con ellos para
que ellos puedan aprender cómo se vive con Cristo. Si
tú vas a un sitio donde nadie te conoce y por eso te vas a
emborrachar o a hacer cualquier otra cosa que no conviene,
entonces estás desobedeciendo este mandamiento, que nos
comportemos igual en todo sitio, es decir, que vivamos en
integridad.

Parte de la integridad de una persona es el sometimiento
a las autoridades, por eso que Pedro nos dice que nos sometamos a
las instituciones
humanas sin importar quiénes sean y que además las
honremos. Nuestra vida debe basarse en hacer el bien, pues dice
que haciendo esto haremos callar a los que ignoran estos principios.
Incluso agrega que aunque somos libres no tomamos la libertad
como pretexto de hacer lo que nos venga en gana, sino que
más bien nos sometemos voluntariamente. Tenemos que
someternos a nuestros jefes en el trabajo y
honrarlos haciendo lo mejor que podamos nuestras labores.
También hace una advertencia, Dios nos dice que no siempre
vamos a estar muy bien, de hecho, nos dice que podemos sufrir
injustamente porque nos podrán involucrar en cosas, nos
podrán injuriar, pero nuestro corazón no debe
turbarse por esto, porque sabemos que detrás de todo esto
está Dios controlándolo todo y permitiendo estas
cosas en nuestras vidas para probar nuestro carácter; así nosotros descubrimos
que ciertamente teníamos cosas que ni siquiera nosotros
mismos sabíamos que teníamos en nuestros
corazones.

Si en algún momento sufrimos por causa de
Jesucristo, por habernos portado como Dios lo manda en la Biblia,
no nos angustiemos, pues para eso hemos sido llamados.
Jesús una vez dijo que así como a Él lo
persiguieron también a nosotros nos perseguirán
(Juan 15:20), e incluso se burlarán diciendo toda clase de
cosas, pero si es por Su causa, no nos las están diciendo
a nosotros, sino a Jesucristo mismo.

  • Colosenses 1: 4

"…habiendo oído de
vuestra fe en Cristo Jesús, y del amor que tenéis a
todos los santos…"

Como ya mencionamos, desde que nacimos de nuevo somos
santos para Dios. No importa lo que te digan sea quien sea, si
tú eres un(a) hijo(a) de Dios, para Dios eres santo(a), y
realmente la opinión de Dios es la que cuenta. Hay muchos
versículos donde se puede apreciar que efectivamente Dios
nos llama santos; éstos los pueden hallar principalmente
en las cartas de
Pablo.

  • Colosenses 2: 8

"Mirad que nadie os engañe por
medio de filosofías y
huecas sutilezas
, según
las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del
mundo, y no según Cristo".

Esta advertencia que Dios nos da, es para que no
escuchemos a aquellas personas que por su elocuencia nos puedan
desviar de lo que dice la Palabra de Dios. Notemos que Dios las
describe como "huecas sutilezas"; ciertamente nos desviamos con
sutilezas, porque es evidente que si viene un satanista y nos
dice que matemos o violemos a alguien, nos va a sonar totalmente
malo y no lo vamos a hacer; o si viene alguna persona a
contradecirte frontalmente lo que dice la Biblia, seguramente lo
rechazaremos.

Pero si alguien con astucia viene con palabras muy
parecidas a las que estamos acostumbrados de escuchar, a
hablarnos de forma casi igual a la Biblia, y simplemente con
algunos conceptos un tanto distintos, esas son las sutilezas que
definitivamente nos desvían.

Hermanos, sigamos SIEMPRE el Camino que indica la
Biblia. Si alguien viene a hablarte y no está conforme a
lo que dice la Palabra de Dios, entonces desecha lo que te dicen,
y sigue solo a Cristo, que sus pensamientos y su consejo
están escritos en la Biblia.

  • Colosenses 3: 17

"Y todo lo que
hacéis, sea de palabra o
de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor
Jesús
, dando gracias a
Dios Padre por medio de él".

Este consejo que Dios nos da es excelente, porque es la
manera de vivir mejor. Fijémonos que si yo hago algo o
digo algo, y lo hago en el nombre de Jesucristo, es como si lo
estuviera haciendo Él, y si involucras a Dios en todos los
detalles de tu vida, entonces las cosas empezarán a
mejorar notablemente, porque ya no serías tú
haciéndolas sino Dios mismo. Cumple siempre tus promesas y
nunca hables lo que no puedes cumplir porque caes en la mentira.
Entreguemos todo a Cristo para que nuestras vidas sean
restauradas en un 100%.

Este estudio no pretende abarcar todos los
versículos bíblicos con respecto a la forma de
comportarse de un(a) hijo(a) de Dios. Hay muchos
versículos más que pueden ser estudiados para el
mismo tema. Te animo a que los busques y amplíes este
estudio.

Desde ya te digo que estoy preparando otro estudio que
tiene que ver con la identidad cristiana, pero no tanto con
cómo comportarse, sino con lo que realmente somos en
Cristo. Ese estudio de la identidad en Cristo estará
basado en el libro de Victoria Sobre la Oscuridad y Rompiendo las
Cadenas, del autor Neil Anderson de Freedom in Christ
Ministeries
; así que espéralo, porque si crees
que este estuvo bueno, mejor es lo que viene. Lo que sí
espero es que toque tu vida de manera significativa, que puedas
entender mejor la Biblia y que por supuesto, seas prosperado(a)
en todas las cosas.

Te bendigo en el Nombre de Jesús.

*Citas bíblicas tomadas de la versión
Reina-Valera 1960.

 

Oscar Merino

VENEZUELA, CARACAS,
21/08/2006

Partes: 1, 2
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