Monografias.com > Psicología
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Psicoterapia para las adicciones




Enviado por Felix Larocca



Partes: 1, 2

    1. Los impulsos
      incontrolables
    2. ¿Qué
      es lo que suelen pensar las personas con dificultades para
      controlar sus impulsos?
    3. El
      rol del psicoanálisis freudiano
    4. Apéndice:
      La plantación de la adormidera en
      Tasmania

    Las personas que son adictas y que sufren de
    dependencias, a menudos son personas que igualmente sufren de
    problemas de
    control de
    impulsos. Personas que, frecuentemente como niños
    fueran hiperactivos, inquietos e incapaces de modular sus
    reacciones afectivas — tendiendo a estallar con poca
    provocación.

    Los niños que padecen de trastornos en la
    satisfacción de sus necesidades básicas, encuentran
    que les resulta difícil posponer sus respuestas negativas
    al ambiente.
    Habiendo carecido de la nutrición emocional
    adecuada, que ambos padres deben siempre proveer, crecen
    sufriendo de privaciones narcisistas y recubiertos de un tipo de
    rabia, asimismo narcisista.

    Rabia y dependencias que son difíciles para ellos
    controlar. Su inclinación y propensión a los
    comportamientos de dependencias en las drogas y de
    codependencias en relaciones, son debidas a una necesidad a
    controlar sus ansiedades usando las drogas y/o las
    relaciones patológicas para borrar un dolor insoportable
    y, muy a menudo, para llenar un vacío emocional de
    proporciones devastadoras e intolerables.

    Los impulsos
    incontrolables

    Las personas que tienen dificultades para controlar sus
    impulsos se encuentran incapaces de dejar de hacer algo que les
    es imposible no hacer — aunque sepan que no deben
    hacerlo o que haberlo hecho, resulte perjudicial para sí
    mismos o los demás.

    En las adicciones
    (alcohol,
    drogas, tabaco, juego, gastar
    el dinero,
    sexo) el
    adicto se siente impulsado a beber, fumar, jugar, comer, y lo que
    sea, siéndole imposible encontrar la manera de dejar de
    hacerlo.

    Tiene que obedecer su impulso y satisfacerlo aunque,
    hacerlo, le duela más a largo plazo.

    De acuerdo a lo que hemos comentado en el apartado de la
    psicoterapia
    psicoanalítica, para entender porqué estas personas
    no son capaces de "resistir sus impulsos" tenemos que observar
    qué está pasando por sus mentes en ese momento y
    qué se están diciendo a sí mismos — ya que
    son pensamientos los que regulan la conducta.
    Pensamientos que siempre se originan en el pasado dinámico
    de los conflictos
    reprimidos. Por ejemplo, antes de abrir la puerta de casa y salir
    a la calle, hemos pensado algo parecido a "se antoja salir a dar
    una vuelta" o "voy a la tienda de la esquina". Sin embargo, a
    menudo sucede que las personas tienen la sensación de que
    no han pensado nada. Simplemente sienten la "necesidad" de
    fumarse un cigarrillo o beberse un vaso de vino. Esto es debido a
    que este tipo de pensamientos aparecen de forma rápida y
    automática, pudiendo conformar patrones de reacción
    aprendidos en la infancia. Es
    decir, forman parte del modo particular que tiene cada persona de ver el
    mundo.

    Ese modo particular de ver el mundo en que se vive, se
    construye en la infancia como resultado de la interacción de las fuerzas del entorno con
    las agencias emocionales que regulan nuestras mentes.

    A veces, pueden surgir como respuesta a una necesidad
    fisiológica. Por ejemplo, si alguien tiene la
    sensación de hambre, lo primero que piensa es "tengo
    hambre". Después evalúa lo que eso significa y toma
    una decisión respecto a cómo actuar. En función de
    cuál haya sido esta decisión actuará de un
    modo u otro. Es decir, si piensa "voy a comer ahora mismo, aunque
    me engorde y sea por el mero placer de hacerlo" irá
    derecho a la nevera. Si piensa "voy a esperar hasta la hora de
    cenar; puedo aguantar el hambre perfectamente, no comeré
    el azúcar", su conducta será muy
    diferente. Y si piensa "necesito comer algo ahora mismo y no
    puedo soportar no hacerlo", y así lo piensa muy a menudo,
    es muy probable que sea un comedor compulsivo a quien le resulta
    casi imposible esperar para comer a sus horas.

    Resultado, será un gordo amargado. ¿Por
    qué? Porque come como respuesta a una idée
    fixe
    , una monomanía que controla toda su vida
    emocional. (Lectura
    oportuna: Counseling Addicted Families, por G. Juhnke y W.
    B. Hagedon).

    Partes: 1, 2

    Página siguiente 

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter