Monografias.com > Geografía
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Amazonia, El pulmón del planeta




Enviado por dario75tma




    1.
    Introducción


    2. Características generales.
    biodiversidad.


    4.
    Ecoturismo

    5. El pulmón del planeta en peligro de
    muerte

    6. Los excesos de hacendados y buscadores de
    oro

    7.
    Conclusión

    8. Fuentes

    1.
    Introducción

    La selva amazónica, cuyo desarrollo
    tardó más de 22 mil años, es una obra
    natural de bellezas difícilmente imaginables. Pero lo que
    más importa resaltar aquí es su importancia
    ecológica.

    Esta selva, en su intercambio de gases con la
    atmósfera,
    libera el 50% del oxígeno necesario para la vida de los
    seres humanos y de las demás especies animales;
    además es la generadora de las corrientes de calor que,
    expandiéndose hacia el norte y hacia el sur, consiguen
    templar el clima del
    planeta.

    En 1982, de un relevamiento de flora y fauna se
    obtuvieron los siguientes datos: en un
    espacio de 10 Km2 hay 760 especies de árboles,
    125 clases de mamíferos, 400 tipos de aves, 100 de
    reptiles y 60 de anfibios, entre otras. Por otra parte, el
    Río Amazonas, de 7 millones de metros de longitud, es el
    mayor sistema
    hidrográfico del planeta: contiene las dos terceras partes
    del agua dulce
    disponible y lo habitan 200.000 especies de peces.

    Dicho esto, es fácil medir la importancia que
    tiene este ecosistema
    para la vida de todos los seres que habitamos el tercer planeta.
    Sin embargo estas estimaciones no parecen hacer mella en el
    espíritu de codicia de las multinacionales y en el
    indolente de los lugareños, pues todos a una colaboran
    para continuar la destrucción de este tesoro de valor
    incalculable (para no hablar de la generalizada
    dilapidación de los recursos
    naturales en todo el planeta): la construcción de la Ruta
    Transamazónica, a más de haber demandado la
    destrucción del hábitat natural de cientos y miles
    de especies, es ahora un camino seguro para
    quienes se internan para seguir destruyendo; los incendios
    provocados por granjeros y hacendados en busca de tierras
    cultivables han llegado a liquidar 80 mil Km2 de
    jungla por año, con su consiguiente contaminación de 620 millones de toneladas
    de gases
    carbónicos, etc.

    Todo esto, a más de ser inútil (el
    suelo del
    Amazonas es paupérrimo para la siembra común),
    representa poco menos que un suicidio. La
    salud del planeta
    está ya en pésimas condiciones. Ya no es
    sólo el efecto
    invernadero provocado por los gases o el enrarecimiento del
    aire, sino que el
    mismo Río Amazonas –la mayor reserva de agua
    dulce– se ve hoy contaminado por el abuso de herbicidas,
    plaguicidas y fertilizantes, además de los desperdicios
    imputrescibles que se arrojan en él.

    Los grupos
    ecologistas están intentando detener por todos los
    medios la
    degradación, no sólo del Amazonas, sino de todos
    los recursos
    naturales; pero, aunque quisieran, no pueden hacer milagros. Por
    lo mismo, aquí se intentará hacer un pequeño
    review y, si se quiere, análisis del problema, y, dentro de lo
    posible, proponer soluciones.
    Todo esto con el objeto de despertar conciencias, para que no
    lleguemos al punto de hacer irreversible el
    daño.

    2. Características generales. biodiversidad.

    Edad y ubicación del Amazonas y su río
    homónimo.

    La selva amazónica, de 5 millones de
    kilómetros cuadrados, fue durante la era mesozoica el
    lecho de un mar, y se desarrolló progresivamente durante
    22 mil años. De estos 5 millones de Km.2,
    pertenecen a Brasil 3.579.991
    Km.2, repartidos entre los Estados de Amazonas,
    Pará y los territorios de Acre, Rondonia, Río
    Branco y Amapá. Lo demás pertenece a los
    países limítrofes de Venezuela,
    Guyana, Surinam y Guyana Francesa al Norte; Bolivia al
    Sur, y Colombia y
    Perú al Oeste. Se sitúa, aproximadamente, entre los
    paralelos 10º N y 15 Sº, y entre los meridianos
    40º y 75º W.

    Por otra parte, en la selva tropical del Amazonas se
    halla el río homónimo, el mayor del mundo por su
    caudal y por la extensión de su cuenca (esta comprende el
    56% del área total del país) y el tercero por su
    longitud, que es de 6.500 Km. Nace en Los Andes del Perú,
    cuyo país atraviesa en dirección S. a N. con el Nombre de
    Marañón, y después de recibir las aguas del
    segundo brazo inicial, el Uyacali, tuerce en dirección E. al llegar cerca de la ciudad
    de Iquitos, donde toma el nombre de Amazonas, penetrando
    después en el país y atravesándolo de O. a
    E. hasta desembocar en el Atlántico. Este río es,
    como ya se dijo, el mayor sistema
    hidrográfico del planeta, conteniendo las dos terceras
    partes del agua dulce disponible en el mundo y lo habitan 200 mil
    especies de peces, cifra
    que tiene importancia si tenemos en cuenta que en todos los
    ríos de Europa apenas
    suman 150.

    3. Biodiversidad.
    Los primeros habitantes de la selva.

    Desde la llegada de los primeros europeos allá
    por el 1800, entre los cuales se cuenta el historiador Humboldt,
    se han hecho continuos relevamientos de esta jungla, que junto
    con todas las selvas tropicales lluviosas ocupan sólo el
    6% de la superficie del planeta y albergan entre el 70% y 90% de
    las especies existentes en la tierra. El
    Amazonas en particular, según uno de los más serios
    relevamientos (1982), alberga en un espacio de 10
    Km.2, 760 especies de árboles, 125 clases de
    mamíferos, 400 tipos de aves, 100 de
    reptiles y 60 animales
    anfibios. Este mismo análisis demostró que cada
    árbol alberga 400 especies de insectos. Y así se
    podría continuar agregando especies a esta cadena de nunca
    acabar.

    Esta gran diversidad de especies animales y vegetales
    que existe en el Amazonas, así como en todas las selvas
    tropicales, hizo pensar a los primeros conquistadores que
    llegaron a estas tierras que las mismas no eran otra cosa que el
    Edén; imaginaban que la selva era una inagotable fuente de
    fertilidad al ver esos gigantescos árboles sobre los que
    viven tantas clases de animales e insectos, plantas
    parásitas y, en fin, todo un despliegue de vida sin igual
    en cualquier otra parte del planeta. Despliegue de vida del que
    también formaba ya parte el hombre.
    Pues aquellos conquistadores encontraron varias tribus salvajes a
    su llegada. Estas tribus eran descendientes de aquellos hombres
    que, según las teorías
    más aceptadas, cruzaron el Estrecho de Bering en plena
    Edad de Hielo, para luego establecerse en los territorios del
    actual Canadá desde donde se diseminaron por todo el
    continente. Se cree que las primeras sociedades
    salvajes del Amazonas se formaron hace aproximadamente 20 mil
    años de las cuales aún subsisten algunas, aunque
    muy pocas. Estas sociedades
    nunca formaron una civilización propiamente dicha, pues
    eran tribus dedicadas casi exclusivamente a la caza, aunque no se
    puede negar que vivían, y viven, en perfecta
    armonía con la naturaleza.

    Algunas de las tribus que habitaron este territorio son
    las siguientes: los tucanos, cobeuas, yahunas, tuyucas, tamas,
    panos, kaiowas y mikiritare. Éstas dos últimas
    aún viven en la jungla conservando su estilo de vida casi
    inalterado.

    En estos gráficos se puede ver cuanto ocupan las
    selvas tropicales de la superficie total del planeta y la
    cantidad de especies que albergan:

    4.
    Ecoturismo

    Las tribus que aún subsisten en la selva forman
    parte del atractivo de los recorridos turísticos que se
    hacen actualmente. En claros circulares abiertos en la jungla los
    visitantes son alojados en chozas de paja y adobe sin puertas ni
    ventanas, lo cual les permite convivir casi directamente con
    caimanes, jaguares, pumas, monos y miles de aves al mismo
    tiempo que,
    por expreso pedido de los guías, tienen un cuidado
    especial de las serpientes más peligrosas que son la
    coral, la cobra papagaio y la surucucu pico de jaca. Estos tipos
    de campamento son realizados a orillas del Río Negro,
    donde no hay mosquitos ni pirañas debido a que sus aguas
    son muy ácidas (tampoco hay una gran variedad de peces).
    Por otra parte, cuando los lugares están cerca de
    ríos verdes como el Xingu o el Tapajós, los
    visitantes se alojan en cómodos hoteles con
    aire
    acondicionado. En ese caso los turistas pueden pescar y
    llevarse la presa, siempre y cuando el pez mida más de
    1.50 m. de largo. A este respecto hay algunos ecologistas,
    exagerados si se quiere, como Brigitte Bardot, que no ven con
    buenos ojos estos viajes
    ecológicos; pues, según Bardot, el solo hecho de
    que un hombre pise
    este edén significa contaminación. Esto no es del todo falso,
    si se toma en consideración que muchas veces se ha abusado
    del tráfico de fauna: resulta
    una tentación muy grande para los turistas llevarse
    algún animalito a modo de souvenir. Lamentablemente, en un
    tiempo, los
    más los rapaces habían elegido al chimpancé
    de cabeza dorada al que, luego de matarlo le cortaban las manos
    y, después de embalsamdas, lucían en lujosos
    livings de Roma o New
    York.

    Actualmente, este tipo de viajes
    están siendo organizados por empresas
    responsables e incluso por organizaciones
    ecologistas, como W.W.F. (World Wildlife Found). De esta forma
    los recorridos rísticos se hacen con una verdadera
    conciencia
    ecológica, y están programados de forma
    talquenointerfieran, o interfieran lo menos posible, en la vida
    de la selva.

    5. El pulmón del
    planeta en peligro de muerte

    Los incendios y la
    producción

    Los miles de incendios intencionales que se producen
    día con día destruyen aproximadamente 100 mil
    Km2 de jungla por año, y lanzan al espacio
    alrededor de 620 millones de toneladas de gases carbónicos
    (aproximadamente el 10% de todos los contaminantes presentes en
    la atmósfera). Las emisiones de dióxido
    de carbono,
    óxido nitroso y metano provocan una concentración
    que actúa como barrera aislante y mantiene el calor de la
    Tierra
    provocando el efecto
    invernadero, al tiempo que contribuye a la destrucción
    de la capa de ozono.
    Se calcula que si la destrucción de la selva sigue
    así, dentro de 50 años los efectos del desastre
    serán más que notorios: la flora y la fauna
    estarán tocados de muerte y
    aún no se puede predecir cuál será el
    destino del hombre con el
    aire tan
    enfermo.

    Hoy mismo se hacen sentir los efectos del desastre.
    El Estado de
    San Pablo ha eliminado los bosques del 93% de su superficie; la
    Cuenca del Plata ha perdido 47 millones de hectáreas de
    las cuales 43 pertenecen al Brasil. Estos
    datos se
    vuelven impresionantes cuando se hace la relación
    deforestación-inundaciones. Las áreas boscosas
    linderas con los grandes ríos, según un informe de la
    UNESCO, funcionan en épocas de lluvias como gigantescas
    esponjas que absorben el agua
    caída y la liberan lentamente, determinando que el caudal
    aumente tan sólo en un tres por ciento. Cuando la zona
    está deforestada, se incrementa en un 97 por ciento y
    así se producen los aluviones y las violentas
    inundaciones. Según expresiones de los expertos, "el
    Brasil está yéndose al mar por el Río de la
    Plata". También han contribuido al desastre los embalses
    que, a más de haber cambiado completamente el paisaje del
    Amazonas, han inundado unos 5.000 Km2 de bosque. Bajo
    el agua
    quedaron los hogares de cientos y miles de especies.

    Los principales responsables de esta destrucción
    son los hacendados, que aniquilan todo lo que se oponga a sus
    proyectos
    expansionistas: hombre, animal o planta. Las hogueras que
    devastan el centro de Sudamérica se desatan a razón
    de ocho mil focos por día, según las
    fotografías tomadas por los satélites
    artificiales. Como ya se mencionó, estos incendios se
    hacen con el objeto de obtener tierras cultivables y para que
    paste el ganado. Sin embargo, esto es un sacrificio terrible e
    inútil, puesto que el suelo del
    amazonas es casi totalmente improductivo, es muy ácido
    para la siembra común; los hongos que
    habitan la capa de humus, son totalmente inofensivos para la
    homogénea vegetación de la jungla, pero son una
    plaga irremediable para las plantaciones que el hombre
    programa. En
    realidad, sólo el tres por ciento de esta región es
    cultivable, el resto es suelo ácido tropical que no vale
    nada sin su protección arbórea. Los expertos
    aseguran que estas tierras pobres en humus pronto se
    volverán inservibles.

    Por esto mismo la productividad de
    la ganadería extensiva amazónica es nula: para
    criar una sola vaca se necesitan diez hectáreas; esto es,
    una producción de alrededor de 40 kilos de
    carne por hectárea al año. Pésima producción, si se tiene en cuenta que, por
    ejemplo, en la Argentina una
    zona mala como el Salado produce el doble o el triple, y el oeste
    de la provincia de Bs. As., siete veces más.

    En este gráfico se vera con más claridad
    cuán deficiente es la ganadería amazónica,
    por la que se está pagando un precio tan
    alto:

    Si bien este es el ecosistema
    más rico, es también el más frágil.
    El calor y la humedad, permanentes todo el año, permiten
    el desarrollo de
    una vegetación perenne de hoja ancha sobre la cual se
    sustenta la mayor diversidad de especies animales; determinando,
    al mismo tiempo, que la vida y la muerte se
    sucedan aquí con una velocidad
    desconocida en otras latitudes. Los expertos explican que
    "aquí todo se quema con rapidez sin igual: la materia
    orgánica que cae sobre el suelo, en lugar de acumularse en
    gruesas capas de tierra negra
    en promesa de futuras cosechas como en las pampas húmedas
    argentinas, vuelve rápidamente a la vida en forma de
    nuevos organismos vegetales y animales."

    6. Los excesos de
    hacendados y
    buscadores de
    oro

    Los terratenientes no sólo están
    contribuyendo a la degradación del medio
    ambiente, sino que para llevar a cabo sus proyectos cometen
    toda clase de violaciones contra los derechos humanos,
    mientras la justicia del
    país hace oídos sordos a todo tipo de reclamos.
    Pero empecemos por el principio.

    Esto comenzó a principios de la
    década del setenta. por esta época nadie
    sabía con exactitud quién era propietario de
    qué en aquellas espesuras. En líneas generales este
    título le correspondía al Estado
    brasileño, por entonces en manos de los militares, y
    éstos decidieron colonizar la Amazonia. El primer paso
    consistió en la constricción de la carretera
    Transamazónica, mencionada anteriormente, que tenía
    por objeto llevar "hombres sin tierra a una tierra sin hombres".
    Toda persona capaz de
    demostrar que había ocupado y hecho fructificar una
    parcela durante cinco años se convertía en su
    dueño. En teoría
    la cuestión era clara, pero en la práctica todo
    resultó una barrabasada. El gobierno de Mato
    Grosso otorgó, por ejemplo, títulos de propiedad
    equivalentes a una vez y media la superficie real de ese Estado; otras
    veces las autoridades estatales y federales vendían los
    mismos lotes a distintos colonos.

    De todo esto los campesinos salieron perdiendo y los
    fazendeiros se llevaron la mejor parte, pues además de
    poseer casi todas las tierras (el 67% de las tierras pertenece al
    4% de los propietarios), consiguieron mano de obra muy barata,
    por no decir lisa y llanamente esclava. Los pequeños
    agricultores, cuyas parcelas son reducidas a cenizas, se ven
    obligados a trabajar en las fazendas donde les entregan comida,
    carpas y herramientas a
    crédito, una deuda que jamás
    podrán pagar porque los precios de las
    cosas son mucho más altos que sus salarios. La
    deuda se hace cada vez mayor y si estas personas intentan escapar
    son cazados como animales por los ejércitos privados de
    los propietarios.

    En la última década, sus matones
    asesinaron a 2 mil campesinos y seringueiros (extractores de
    savia de heveas -látex-). éstos suelen venir del
    Nordeste o de las villas miseria de Río y San Pablo en
    busca de otra vida. Se instalan en las miserables parcelas
    situadas en los límites indecisos de las grandes estancias
    y encuentran la
    muerte.

    Quienes protestan ante tamaña injusticia
    también son asesinados. En 25 años 1.500
    sindicalistas agrícolas fueron callados a balazos, entre
    ellos Chico Mendes. Como la ONU le
    había otorgado el premio Global 500 por sus esfuerzos en
    favor de la selva amazónica, su asesinato
    desencadenó un gran escándalo mundial, lo que
    provocó que salieran distintos defensores para su causa:
    el Partido de los Trabajadores brasileño, la Iglesia,
    organizaciones
    ecologistas e incluso los grandes bancos
    internacionales. Pero, a pesar de esto, tan escandalosa matanza
    de campesinos y sindicalistas no ha producido más que una
    veintena de juicios.

    Además de campesinos y sindicalistas, han
    aniquilado tribus indígenas completas, que vivían
    allí desde hacía milenios. La
    Transamazónica, por ejemplo, perjudico a noventa y seis
    tribus, de las cuales muchas desaparecieron (casi la mitad de los
    indios parakanás murieron durante su construcción). Muchas de ellas
    desaparecieron durante los incendios de la jungla con napalm
    (combustible de uso bélico). La desesperación
    llevó al suicidio a
    más de un centenar de kaiowas.

    también los mineros invadieron sus territorios en
    busca de oro, quienes además de traer enfermedades (gripe,
    malaria, bronquitis) contra las cuales los nativos no tienen
    defensas, muchas veces masacraron a todos los que se opusieron
    ante la indiferencia oficial: "Los indios son unos holgazanes y
    unos imbéciles que ocupan demasiada tierra
    –declaró hace un tiempo el secretario de Justicia de
    Mato Grosso–. Un lujo folklórico que ninguna
    nación moderna, con aspiraciones de desarrollo, puede
    permitirse". A modo de ejemplo, en el año 1992, un
    grupo de
    garimpeiros (mineros) mutilaron y decapitaron a setenta y tres
    yanomamis (20 mujeres y 35 niños, entre ellos).

    La "fiebre del oro" comenzó a principios de
    1980, cuando la onza alcanzó los 850 dólares en el
    London Metal Exchange. Desde entonces empezaron a surgir miles de
    minas en la jungla, hasta que a mediados de la década
    contaban más de un millón y medio. Cada
    patrón de un yacimiento formó su ejército y
    empezaron las guerras entre
    los distintos bandos: hubo miles de muertos. Las autoridades
    hacían la vista gorda a estos horrores, con tal de seguir
    cobrando el 20% de la explotación. A medida que la
    competencia se
    fue haciendo más ardua los garimpeiros comenzaron a
    invadir las reservas aborígenes; nadie, ni siquiera el
    papa pudo detener semejantes atropellos.

    Luego de extraído el precioso metal, las minas se
    convierten en tierra de nadie, pues los mineros no sólo
    llevan la muerte a
    través de las armas. Para
    separar el oro de otros minerales, los
    garimpeiros usan grandes cantidades de mercurio (una tonelada por
    cada tonelada de oro extraído); el metal tóxico se
    arroja a los ríos y va contaminando toda la cadena
    alimentaria. Ya en 1988 se calculaba que medio millón de
    personas estaban envenenadas. Otras sustancias, llevadas por la
    "civilización", como desfoliantes e insecticidas, han
    terminado de envilecer el medio ambiente: en
    muchas partes el aire es irrespirable.

    Ante todos estos crímenes contra la humanidad, ya
    que no sólo contra los aborígenes y la selva; ante
    las flagrantes violaciones de los derechos humanos declarados
    por la ONU, derechos que pregonan la
    igualdad
    jurídica: "Ante la ley, todos los
    hombres son considerados iguales, tienen deberes y derechos
    iguales e iguales posibilidades"; "Todo ser humano tiene derecho
    en todas partes al reconocimiento de su personalidad
    jurídica", ante las violaciones a estos derechos,
    decía, el gobierno
    brasileño es ciego, sordo y mudo. Si bien en Brasil se han
    puesto en práctica leyes que tienden
    a sofrenar todos estos excesos y que ha puesto coto a la caza
    indiscriminada, las hay más que amparan a los hacendados y
    mineros.

    Algunos políticos brasileños protestaron
    por los retos de las naciones desarrolladas que "parecen haber
    olvidado los apremios económicos del país". Se
    quejan: "con tanta miseria no nos podemos dar el lujo de
    organizar una cruzada ecológica". Sin embargo, cuando en
    1989 Francia y
    Estados Unidos
    propusieron al entonces presidente José Sarney canjear
    parte de la deuda externa por
    la conservación de esa preciosa selva, que ocupa
    más de la mitad de Brasil, no dieron respuesta y todo
    quedo casi en la nada. En cuanto a la demarcación de los
    novecientos mil Km2 de territorio indígena, la
    respuesta de Mauricio Correa, ministro de Justicia, fue la
    siguiente: "No se justifica resolver el problema de algunos
    indios –los pocos que quedaron después de la llegada
    de los terratenientes– perjudicando a millares de blancos
    que viven en la región".

    Esto dicho es bastante claro que quienes deben tomar
    decisiones urgentemente para frenar este desastre son los
    funcionarios brasileños. De otro modo la selva
    continuará desapareciendo, como hasta ahora, a
    razón de varias hectáreas por minuto, y los excesos
    de los terratenientes no tendrán límite.

    7.
    Conclusión

    De lo dicho anteriormente podemos sacar en claro que la
    destrucción de la selva amazónica es un problema
    gravísimo que no sólo afecta a Brasil, Venezuela,
    Guyana y a todos los demás países por donde se
    extiende este maravilloso vergel, sino que nos afecta a
    todos.

    Los problemas ya
    mencionados: los incendios, la contaminación de la
    atmósfera, del Río Amazonas, el asesinato de los
    aborígenes y de los campesinos, y, en fin, la alarmante
    desaparición de la selva tropical más importante
    del planeta, con todas sus consecuencias, no son problemas
    fáciles de resolver. Pero hay muchas personas que se
    están ocupando permanentemente del tema y están
    buscando soluciones
    para este, el mayor desastre ecológico del
    siglo.

    Dado que el problema tiene un origen económico, y
    que por lo mismo se agrava cada vez más, las
    organizaciones ecológicas (GREENPEACE, WWF, Amazonas
    Forever Green Foundation, etc.) se centran en la búsqueda
    de emprendimientos económicos de tipo sustentable. Por
    ejemplo, algunos especialistas sostienen que si Brasil se
    concentrara en la explotación del caucho y de una fruta
    llamada aguaje, abundantísima en la región,
    lograría duplicar los ingresos que le
    reportan el ganado y la madera.
    Greenpeace también pone de manifiesto que la
    extracción de caucho, entre otras cosas, reportaría
    mayores ingresos que las
    actividades nocivas que se están llevando a cabo. De
    hecho, el gobierno brasileño ya ha establecido 63.000
    familias de extractores de caucho en zonas de la selva que han
    sido nombradas reserva con este único objeto, y que en un
    principio ocupaban el 1% del total del amazonas; los extractores
    esperan que en un tiempo más se les designe el 10% del
    Amazonas como zona de reserva. También se ha echado mano,
    para este tipo de emprendimientos, a las fibras, semillas,
    flores, frutas y miel, entre otras muchas opciones. Un ejemplo de
    esto es la palmera y su fruto. Esto es una pequeña parte
    del informe de
    Greenpeace:

    "The fruits of Acai Palm are traditionally used to make
    a wine rich in minerals. One palm tree produces about 20 Kg. of
    fruits per year. The tasty, dark violet wine is the most
    important non wood forest product in terms of money from the
    river delta of the Amazon. In 1995 almost 106.000 tons were
    produced at a value of US$ 40 million."

    Esto es: "Los frutos de la palmera Acai son usados
    tradicionalmente para hacer un vino rico en minerales. Una
    palmera produce alrededor de 20 Kg. de fruta por año. El
    sabroso vino de color violeta
    oscuro es le más importante producto, no
    proveniente de madera, en
    términos de dinero, del
    delta del Río Amazonas. En 1995 fueron producidas 106.000
    toneladas por un valor de US$
    40 millones."

    Para concluir, baste decir que, si bien los problemas
    son muchos a más de graves, no bastará con el
    sólo emprendimiento de estas organizaciones. Es llegado el
    momento de que todo el mundo tome conciencia porque
    la selva no puede esperar y –según los
    pronósticos más agoreros– de seguir a este
    ritmo, para el 2.490 no quedará un solo árbol sobre
    la tierra.
    Cabe aclarar aquí que mucho antes de que eso suceda, tal
    vez dentro de 50 o 60 años, la vida será casi
    imposible. Ojalá que no sea demasiado tarde.

    8.
    Fuentes
    :

    –Sue Brooks, Atlas de la Tierra, Editorial Sigmar.
    Bs. As.,1993.
    Revista
    Conozca Más (Vida Verde), Editorial Atlántida,
    Números varios. Bs. As.,años 1989 a 1996.
    –Revista Nueva,
    Editorial Antártida, Números varios. Santiago de
    Chile y
    Bs.As., años 1990 a 1999.
    –Greenpeace, Website: www. greenpeace.com

    Trabajo enviado y realizado por:
    Ramirez Dario

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter