Todos los años, en época de las navidades, somos
testigos de las tragedias privadas que visitan a aquellos quienes
lograran acceso al "paraíso", siempre efímero, de
haber bajado de peso, anticipando las tentaciones que
surgirán, desde la última semana de noviembre hasta
el principio del mes de enero siguiente.
Como ya hemos descrito en otras ponencias, enero, es el mes
consagrado al dios romano Jano. Dios de las puertas, del pasado y
del futuro (por lo que se representa con dos caras, sin necesidad
de ser político). Dios asimismo de nuestras resoluciones
privadas y efímeras. (Véase mi ponencia Celebremos
enero, el mes de Jano, el dios que simboliza las resoluciones
fallidas).
Jano
Nuestros planes consisten, casi siempre, en prevenir la
acumulación de las libras inevitables que vendrán.
Trataremos el logro de nuestras metas, generalmente, siguiendo
los consejos de amigos o por aplicación de lo que leemos
en las revistas que abundan en los salones de belleza.
Pero, nuestros nobles propósitos — como sucede todos
los años — no llegarán a ver su
fruición.
La razón para ello es tan simple, que escapa el
entendimiento de la mayoría de todos. Y lo es, porque
corre en contradicción a las creencias populares, la
más común de entre éstas, consiste en la
creencia de que las calorías cuentan en el proceso de
engordar.
- Que las calorías hay que contarlas
Pero, de veras, las calorías no cuentan
(Véanse mis ponencias al respecto).
Veamos la razón porque las calorías no
cuentan
Cuando se ingieren una taza de vodka y una de helado de
chocolate, el metabolismo
final de lo que se consumió, es diferente de la siguiente
manera:
- La energía (calorías) del vodka, no pudiendo
ser convertida en grasa, por ser una fuente (inadecuada de
nutrición) para nuestra especie — pero,
fuente energética, de todos modos — se utiliza
preferencialmente como combustible por el cuerpo, con el
resultante efecto de que lo que acompaña a la bebida, si
es de valor
nutritivo, se convierte en grasa acumulada. Por esa razón es que la cerveza
"engorda": Alcohol +
componentes nutricionales + azúcar que entran en su manufactura = ¿gordura?…
perhaps…- En el caso del helado, en nuestro ejemplo susodicho: Este
alimento consiste en una mezcla de azúcar, harina
refinada y de otras sustancias de alto contenido
energético, lo que hace que se convierta,
rápidamente, en la grasa acumulada, que en la lengua
vernácula, se conoce como "gordura".
Pero hay más acerca de este asunto
Si, en nuestro plan de alimentación, en
lugar de ser seres omnívoros, fuésemos
herbívoros como son las vacas. Entonces, comiendo yerbas o
vegetales de hortaliza, engordaríamos — lo que
actualmente, nosotros no podemos hacer, aunque muchos no lo
crean. Las hierbas, o las verduras, sabemos que no nos engordan,
simplemente, porque no pueden hacerlo.
- Que el gimnasio ayuda en la pérdida de peso
El gimnasio ayuda. Pero muy poco
Ayuda de modo insignificante pero no en la reducción de
nuestro peso actual. Ya que si, como a menudo sucede, nos
aumenta la musculatura, asimismo nos aumenta el peso registrado
en la escala, como
resultado — aunque eliminemos la grasa. El músculo pesa
más que la grasa. Simple.
Nadie, que no sea un poco trastornado se pasa horas en el
gimnasio con el fin de reducir. Los que lo hacen se dicen que
sufren de otro de los tantos trastornos del comer. Sin embargo,
quienes usan ejercicios moderados como son el caminar, el correr
distancias limitadas o nadar, se benefician de los efectos de las
actividades físicas en la reducción del estrés que
se traducen en la reducción o en el control del
sobrepeso.
- Que las dietas
restrictivas son buenas
No lo son. Ninguna funciona y ninguna ha funcionado
¡Punto!
Las dietas no funcionan porque son actividades innaturales que
se basan en la desregulación de las actividades del
hipotálamo cerebral. El resultado final: el retorno de las
libras perdidas más una ñapa, cortesía del
hipotálamo mismo. Esa ñapa es algo que nadie
solicita o desea.
Pero es ñapa, no obstante…
- Que para el sobrepeso y su control, es
suficiente el seguimiento de un plan
dietético endosado por quienes las anuncian para
"beneficio" de los incautos del mundo, generalmente, en la
televisión — y, comenzando en
enero.
No es así y existen muchos peligros
Una dieta que no se asocia con los beneficios adicionales de
actividades de terapia es lo mismo que el someterse a una
ordalía mecánica con repercusiones emocionales sin
prestar atención debida, a los factores de
lugar.
El sistema
fiduciario es una falsedad. (Leamos mis ponencias al
respecto).
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