- ¿Por
qué comemos tanto que necesitamos las
dietas? - La
obesidad… - La
Selección Natural… ¿Por qué no
actúa? - Bibliografía
Obviamente la Naturaleza,
"novicia" como sería en el diseño
de universos, cuando concibiera éste, tuvo que atravesar
el destino de cometer errores en su búsqueda por
perfección. Sin embargo, en un breve tiempo
cósmico, logró hacerlo tan bien y tan
perfectamente, que comenzaría a incorporar en sus principios
leyes; algunas
que serían inmutables, y otras, que aun operan como
normas —-
estas últimas, sujetas a ser modificadas, abolidas y
reemplazadas —
La Naturaleza, no descansó… como nunca
descansará… Génesis incorpora el descanso
para el ser humano y nada más. De lo último
hablaremos en otra ponencia.
Cuando creara los seres vivientes, la naturaleza, les
asignó a todos, estrategias
únicas de alimentación para su
adaptación a la supervivencia en esta tierra. Nada
más impresionante que apreciar y ser testigos directos, de
la diversificación que se refleja en las Islas
Galápagos; donde existen iguanas vegetarianas que se
alimentan de algas que encuentran bajo las aguas del mar. Donde
se descubren las trece variedades de pinzones que a Darwin tanto
fascinaran, con sus picos especialmente adaptados. Donde se
conocen los cormoranes sin alas, porque éstos, en lugar de
volar, obtienen su comida "en vuelo simulado" bajo las olas del
mar. Y donde medran las tres variedades de "bobees"
(género
Sula, miembros de la orden Pelecaniformes).
Este grupo, siendo
de nuestro interés,
no sólo por los colores
distintivos de sus patas y de su plumaje, sino, porque las tres
variedades que habitan las islas poseen estrategias de comer y de
hacer sus nidos —- enteramente distintas — aunque
anatómicamente son indistinguibles entre ellos si a la
distancia se observan.
Variedades de picos de
pinzón…
Las ballenas, los rinocerontes, los elefantes, las
chitas, y todos los demás animales que
habitan nuestro planeta tienen asignada una esfera
ecológica nutritiva que se adapta a sus necesidades y a
sus características específicas.
El ser humano: el gran descubridor, el gran explorador,
el andariego incansable, el proyectil más veloz
(careciendo de alas), el navegante más prodigioso
(careciendo de aletas), el colono de los polos (careciendo de
abrigo natural), el consumidor
omnívoro; que cazara especies enteras hasta su
extinción, tiene espacio ilimitado en nuestro planeta,
para su alimentación y para su reproducción.
Para lograr esta proeza, la Naturaleza nos
habilitó con características únicas de orden
físico y reproductivo.
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