OPERACIONES A MÁQUINAS
- Manutención de materiales
pesados.
Para definirlos de algún modo se puede decir
que se consideran como materiales pesados aquellos que en los
procesos de
producción requieren, sin lugar a dudas,
la ayuda de dispositivos mecánicos para ser colocados en
las máquinas. Cuando se trata de este tipo de
manejo no sólo existe el problema de mover el material
desde cada operación hasta la siguiente, sino que,
además, es preciso emplear algún dispositivo
mecánico elevado para colocarlo en la mesa o plato de la
máquina en la debida posición.
En estas industrias,
el costo de
manutención puede llegar a ser hasta diez veces superior
a la cantidad gastada en mano de obra directa de
mecanización. Un estudio realizado en una fábrica
de acero
reveló que por tonelada de producto
acabado se habían movido, en el proceso,
más de 80 toneladas. En otras fábricas, la
manutención y los gastos
producidos entre operaciones se
evalúan, normalmente, en una cantidad que en total
representa del 200 al 400 %, o aún más, de los
gastos de mano de obra de mecanización.
En la fabricación de elementos estructurales de
acero, por ejemplo, debe disponerse de un equipo de
manutención de mucha capacidad. Por otra parte, las
operaciones suelen ser de corta duración. Por ello, para
conseguir un flujo continúo de producción a lo
largo de la fábrica, e, preciso ir moviendo dichos
elementos paso a paso desde cada posición de trabajo
hasta la siguiente. Es necesaria esta progresión
ordenada de los materiales para que sea económica la
fabricación del tipo de productos
metálicos en cuestión.
Los principales factores que han de tenerse en cuenta
al elegir los tipos de aparatos que hacen falta para realizar
esta manutención, son:
Utilización de un polipasto eléctrico
para colocar el contrapeso de una carretilla de horquilla en
una taladradora radial.
1. Peso, tamaño y forma del
artículo que se ha de mover.
2. Frecuencia del movimiento.
3. Superficie servida por el equipo. Por ejemplo, si
únicamente se exige un movimiento vertical, bastará
disponer de un sencillo polipasto. Si además es necesario
un movimiento horizontal en un plano, la solución puede
ser un sistema
monocarril.
Para el movimiento dentro de un área determinada
se utiliza una grúa de pluma. Para cubrir completamente
una superficie dentro de la fábrica, con movimiento
simultáneamente frontal y lateral, pueden utilizarse
grúas-pórtico. Finalmente, cuando sea necesario
mover objetos pesados por encima de toda el área de
fabricación, será probablemente preciso utilizar
una grúa puente.
Utilización de una grúa
puente
a. Polipastos. Se empleará el polipasto cuando se
trate simplemente del trabajo de subir o bajar objetos pesados.
El tipo más comúnmente usado hoy en la industria es
la unidad accionada eléctricamente (fig. 2). Puede ser un
modelo de
serie o de un tipo colgante especial para atender a los servicios de
una nave determinada. Si el trabajo del
mecanismo elevador es intermitente y la altura de
elevación está dentro de ciertos límites,
puede ser ventajoso el uso de polipastos de aire comprimido.
En instalaciones más pequeñas, en las que la
frecuencia del movimiento no justifica la instalación de
un aparato con motor, se
empleará un polipasto de cadena con accionamiento a mano.
Este se utilizará para pesos de hasta 1.000 o 1.500
libras.
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