- Antecedentes
históricos - El
Derecho Aduanero - Qué
es una Aduana - Secretaría
de Hacienda y Crédito Público
(SHCP) - Manera en
que intervienen las Aduanas en el ambiente jurídico
económico del país - Marco
legal - Bibliografía
Manera en que las aduanas
determinan el ambiente
jurídico económico del país
Antecedentes históricos
Para entrar al estudio del derecho aduanero y por
consiguiente al tema que nos ocupa, en lo que respecta a la forma
de cómo intervienen las aduanas en el ambiente
jurídico económico de nuestro país, es
necesario y esto es sin lugar a dudas, conocer lo que son los
antecedentes históricos de las aduanas en México y
en el mundo, que como podremos darnos cuenta mas adelante, se
encuentran íntimamente relacionados con la actividad
comercial en nuestro México, y por ende la forma en que se
ha desarrollado este, a su paso a través del tiempo y
asimismo la transformación que ha habido en materia
aduanal en razón del mismo comercio tanto
externo como interno.
Dicho lo anterior, se recopilo de manera
cronológica los antecedentes históricos, de igual
manera solo trate de utilizar lo que son de acuerdo al tema en
comento, marcando con negritas los puntos objetivos ya
que, en esos puntos se observa como de manera incipiente
nacía la actividad aduanal.
Época Prehispánica
En la época prehispánica existía
una intensa actividad comercial entre los pueblos
mesoamericanos; tenían, además del trueque,
sistemas de
valor y medida
que se empleaban para el intercambio de mercancías. Tal y
como ahora utilizamos billetes, monedas y cheques,
entonces se usaban pequeños carrizos rellenos de polvo de
oro,. Los
tianguis o plazas de mercadeo estaban
sujetos a reglamentos estrictos, cuyo cumplimiento era
vigilado por inspectores especiales. Las culturas dominantes,
como la mexica, exigían a los pueblos sojuzgados el pago
de tributos e
imponían una organización del Comercio a grandes
distancias, organización que resultó vital para la
sociedad
precortesana.
Del año 1500 a 1600
La formalización del comercio de España con
sus colonias comenzó con la expedición de las
reales cédulas de 1509, 1514, 1531 y 1535, que
legitimaban el monopolio
mercantil de ésta con los territorios recientemente
conquistados. Para tal efecto se instalaron en Nueva
España las Casas de Contratación, instituciones
creadas desde 1503 con el propósito de controlar y
fiscalizar el comercio y la navegación entre España
y las Indias. En 1551, en Veracruz, se inició la
edificación de las primeras instalaciones
portuarias.
El comercio con Oriente se inició en la segunda
mitad del siglo XVI, cuando se instituyó la ruta mercantil
entre Acapulco y Manila. Cabe recordar que las islas Filipinas
formaban parte también del Virreynato de la Nueva
España. En 1593, la Real Cédula de Felipe II
ordenó restringir el volumen de la
carga comercial para limitar las mercancías no filipinas,
los llamados "productos de
la China",
procurando así evitar daños al comercio español.
Dado que en el puerto de Manila no se efectuaba ningún
control de los
embarques, la revisión aduanal se realizaba en
Acapulco.
En el Virreinato de la Nueva España se
estableció el llamado derecho de almojarifazgo
(impuesto a la
importación). La relevancia de este
tributo fue de tal magnitud que la corona española
dictó sobre la materia numerosas cédulas reales,
decretos y ordenanzas, desde 1532 a 1817, mismas que regulaban la
entrada y salida de mercancías; incluso ya se habla de
franquicias
diplomáticas por la introducción de
mercancías.
Del año 1600 a 1700
Debido a los constantes ataques de los barcos piratas
ingleses y franceses a los puertos de Veracruz, Acapulco y
Campeche, en 1597 se dispuso que los oficiales a cargo de la
Casa de Contratación se trasladaran a la Banda de
Buitrón, lugar situado frente a San Juan de Ulúa,
hecho que permitió que en 1601, por órdenes de
Felipe II, se instalara la aduana en
tierra
firme. En 1647, el rey Felipe IV vio la necesidad de que
la ciudad contara con una aduana cerrada donde fueran captados
todos los productos que entraban al puerto.
Del año 1700 a 1800
En el puerto de Acapulco, el tráfico comercial se
llevaba a cabo mediante esporádicas ordenanzas y
cédulas reales; en 1702 se elaboró el primer
reglamento para el tráfico comercial entre Filipinas y
la Nueva España.
El virrey Casafuerte expidió en 1728 una
cédula a fin de que ninguna de las mercancías que
ingresaban al puerto de Veracruz pudiera bajarse a tierra sin el
consentimiento del oficial de justicia o
regidor. La pena por incumplimiento era el decomiso de los
productos.
El establecimiento de la Real Aduana del puerto de
Acapulco se verificó alrededor del año
1776.
Época independiente
Del año 1800 a 1900
El primer documento legal del México
independiente fue el Arancel General Interno para los
Gobiernos de las Aduanas Marítimas en el Comercio Libre
del Imperio, publicado el 15 de diciembre de 1821. En este
documento se designaron los puertos habilitados para el
comercio, se especificó el trabajo que debían
realizar los administradores de las aduanas, los resguardos y los
vistas; además se plantearon las bases para la
operación del arancel, estableciendo que los
géneros, las mercancías de importación
prohibida y las libres de gravamen quedaban a criterio de los
administradores de las aduanas.
En el año de 1831, México firmó un
tratado de amistad con los
Estados
Unidos, uno de sus primeros convenios en materia de
comercio
internacional.
Por disposición presidencial se creó la
Aduana de México en 1884 y se instaló el 8 de
mayo en el antiguo edificio de la Casa de Contratación y
de la Real Aduana en la plaza de Santo Domingo.
Del año 1900 al 2000
El 19 de febrero de 1900 se constituyó por
decreto presidencial la Dirección General de Aduanas,
conformada por seis secciones.
El 17 de octubre de 1913 se firmó el
decreto por el cual se crearon ocho secretarías
de Estado
para el despacho de los negocios
administrativos, entre ellas la Secretaría de Hacienda
y Crédito
Público y Comercio, con atribuciones sobre aranceles de
aduanas marítimas y fronterizas, vigilancia, impuestos
federales y otros conceptos.
Con la publicación de la Ley Orgánica
de la Administración
Pública Federal, el 29 de diciembre de 1976, se
publicó un nuevo Reglamento Interior de la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público el
23 de mayo de 1977, quedando integrada por la
Subsecretaría de Hacienda y Crédito Público;
la Subsecretaría de Ingresos; la
Subsecretaría de Inspección Fiscal, a la que se
encontraba adscrita la Dirección General de Aduanas; la
Oficialía Mayor; la Procuraduría Fiscal de la
Federación y la Tesorería de la
Federación.
La Ley Aduanera,
publicada el 30 de diciembre de 1981, contenía la
terminología utilizada internacionalmente; se
simplificó la estructura de
los recursos
administrativos, remitiéndose a los previstos en el
Código
Fiscal de la Federación y se regía por un nuevo
principio de confianza en el contribuyente, a través de la
autodeterminación del impuesto; se recopilaban las
normas de
valoración de mercancías; se promovía la
industria
maquiladora y las empresas Pitex, y
se definieron los regímenes aduaneros que conocemos
actualmente.
México se incorporó en 1986 al Acuerdo
General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), y en mayo de 1988 al
Consejo de Cooperación Aduanera (CCA), que tienen por
objeto armonizar y facilitar el comercio
internacional.
En 1989, la Dirección General de Aduanas
quedó asignada a la Subsecretaría de Ingresos,
mediante la reforma del Reglamento Interior de la
Secretaría de Hacienda y Crédito
Público.
El 25 de enero de 1993 se publicó la
reforma al Reglamento Interior de la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público, en la que se
modificó el nombre de la Dirección General de
Aduanas por el de Administración General de Aduanas y se
estableció la jurisdicción de 45 aduanas en el
país.
A partir del 1 de julio de 1997 se creó el
Servicio de
Administración Tributaria (SAT), al cual
quedó adscrita la Administración General de
Aduanas. El Reglamento Interior del Servicio de
Administración Tributaria se publicó el 30 de junio
de 1997.
Época Moderna
Del año 2000 a nuestros
días
Se hicieron algunas modificaciones, principalmente en el
manejo, almacenaje y custodia de mercancías de comercio
exterior; el ingreso o extracción de mercancías
por vía postal; el reconocimiento aduanero de
mercancías; la valoración aduanera; la
garantía de contribuciones para el régimen de
tránsito de mercancías, los procedimientos
administrativos y las infracciones aduaneras, entre
otras.
Con el fin de facilitar la operación mediante
métodos de
control, se instrumentó el Sistema
Automatizado Aduanero Integral (SAAI), así como el sistema
de selección
automatizado en los reconocimientos, lo que conocemos como
semáforo fiscal. Se
delegó la responsabilidad de clasificar, determinar el valor
en aduana y el origen de las mercancías a los agentes
aduanales, quedando a cargo de la autoridad
sólo la facultad de verificación del cumplimiento
de esta obligación, así se redujo la
discrecionalidad de los empleados en la aduana.
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