Estudio de factibilidad para la creación del Instituto de aguas del Páramo del Sumapaz, localidad 20 Bogotá D.C.
- Resumen
ejecutivo - Antecedentes
de la propuesta - Localización
de la zona de estudio - Marco
conceptual - Justificación
de la creación del Instituto - Marco
legal - Ruta
de creación del Instituto - Estudio
técnico para la creación del
Instituto - Propuesta
virtual del Instituto - Sostenibilidad
financiera del Instituto - Consideraciones
finales - Bibliografía
citada y consultada
"El páramo es tierra de paz,
no posee animales
agresivos
Ni plantas
urticantes, todo se puede tocar, puede jugarse
Con los insectos de colores como
juguetes vivos
y se puede
Descansar libremente en el pajonal viendo pasar las
nubes
A través de una atmósfera muy ligera,
limpia y tenue.
El páramo es tierra de libertad en
todo sentido, porque ahí
El hombre se
somete a prueba como parte de la naturaleza.
El páramo no es triste, es serio. No es
melancólico, es severo.
No es hostil, es grandioso y como culminación
geográfica y
Ecológica de los andes ecuatoriales de
Colombia
es
Único en el
mundo"
Ernesto Guhl.
INTRODUCCIÓN
El instituto de aguas para la localidad del Sumapaz,
agrupa entidades tales como la Alcaldía Local del Sumapaz,
la Universidad
Distrital Francisco José de Caldas y la Empresa de
Acueducto y Alcantarillado de Bogotá; a profesionales de
distintas disciplinas en las áreas técnicas,
ambientales, sociales y educativas, los cuales aspiran a producir
resultados valiosos en las diferentes áreas del conocimiento
social, población, cultura,
comunicación, estudios rurales, urbanos,
conflicto y
cambio social,
educación
y sociología histórica.
Desde esta perspectiva, este instituto es repensado como
núcleo de organización de la actividad
científica, técnica y académica, centrada en
la idea de comunidad
disciplinaria y de la existencia de una profesión
universitaria de dedicación integral que le sirva de
sostén. Es pertinente, dentro de este marco destacar la
importancia de los encuentros que se tengan con la localidad para
favorecer la interacción y posibilidades de
cooperación entre las entidades, los profesionales y la
comunidad.
La generación de un instituto de aguas,
permitirá canalizar recursos
económicos y humanos para implementar programas y
acciones
tendientes a promover el reconocimiento sobre las practicas
ancestrales que los campesinos han generado alrededor del recurso
hídrico, como una riqueza inalienable que no debe ser
privatizada si no un bien de uso colectivo, dimensionando la
importancia de promover dicha cultura y los beneficios directos
que trae para la población.
Contar con un instituto de aguas, permitirá
concientizar a la comunidad sobre la riqueza hídrica,
natural y ambiental de la región, puesto que el
páramo posee valores
intrínsecos, naturales y adquiridos, de carácter histórico, cultural y
social, así como toda la oferta
ambiental para la región y el mundo; de ahí la
importancia de promover la creación esta instancia,
máxime cuando es prioridad y compromiso de la alcaldesa
Magnolia Agudelo Velásquez, fomentar el desarrollo en
la región y promover oportunidades para hombres y
mujeres.
La creación del instituto de aguas supone,
fundamentalmente un reconocimiento al valor que la
sociedad civil
tiene en negociaciones que involucran, igualmente, a los actores
interesados en los procesos de
decisión política, por tanto
se recomienda a la comunidad en general y a las organizaciones
sociales que la lideran, generar un observatorio social del
agua, que
responda a las necesidades sociales, que de facto deben
satisfacerse, que sea estable y se aplique con respeto, es
decir, que sea observado por todos los miembros de la comunidad.
Por ello, involucrar a diferentes actores de la sociedad
civil, supone un ejercicio de transparencia en el desarrollo de
acuerdos, que, tiene como destinatarios principales a los
lideres, sindicatos,
asociaciones, organizaciones de la más diversa
índole y en definitiva a los ciudadanos.
Dentro del papel que esta llamada a jugar la sociedad
civil, esta el lograr que tales negociaciones tengan lugar de
forma abierta y en espacios de decisión de mayor
transparencia, esto supone un avance importante, de incentivo a
los propios actores quienes tendrían la función de
institucionalizar este tipo de acercamientos. Por ello, la
gestión
del agua a través del instituto de Aguas de la localidad
del Sumapaz, no obedece a otra cosa que la concertación de
intereses entre actores competitivos presentes y
futuros.
Para entender de manera adecuada el tema del recurso
hídrico, es necesario tener en cuenta todas las
situaciones económicas, sociales y naturales que se mueven
en torno al agua,
como son las características geográficas,
físicas y las practicas sociales, en el plano regional
(provincia del Sumapaz, localidad 20 de Bogotá), nacional
e internacional.
Así pues, se ve el drama mundial del agua, por
que los países industrializados han agotado sus fuentes
hídricas con el desarrollo; se sabe que el 97% del agua en
el mundo es salada y solo el 1% del agua es dulce, es accesible
al consumo
humano; 1.100 millones de personas en el mundo carecen de
agua potable,
afectándose la salud y los servicios
sanitarios; otros factores que agudizan el drama son el
crecimiento demográfico, la deforestación, el calentamiento
global y el cambio climático entre otros.
Frente a este drama aparecen los ecosistemas
hídricos como un puente de salvación, este es el
caso del páramo del Sumapaz, que es una región en
donde se genera y almacena agua. El páramo, es un
territorio heterogéneo, en formas de uso y
ocupación, rico en valores ecológicos y
paisajísticos, bajo condiciones socioeconómicas
complejas por que conviven la ruralidad y lo urbano
acompañado de zonas de reserva.
Con la creación del Instituto de Aguas para la
localidad del Sumapaz, se crea una entidad nueva responsable de
las actividades científicas, tecnológicas y
académicas, revalorizando la importancia social, como un
espacio de creación y generación de nuevas
posibilidades para la trascendencia del ser humano.
Esta propuesta de creación del instituto de
aguas, en el plano académico, convoca a mirar sin limites
la
educación y a ser capaces de enfrentar cambios
profundos para seguir avanzando en más movilidad social,
para que los jóvenes tengan oportunidades de acceder a la
educación
superior, pero sobre todo para tener una educación
universitaria y técnico profesional de clase mundial,
por ello el proyecto busca
incentivar a la comunidad sumapaceña para formarse en la
academia y construir un tejido social de la mano de la ciencia, la
investigación y la tecnología, en torno
a la defensa y la legitimación de la cultura del
agua.
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