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La obesidad como medio de conocimiento en los departamentos, disciplinas y asignaturas en la Escuela Internacional de Educación Física y Deportes (página 2)



Partes: 1, 2

 

Los sistemas
eferentes de control del peso
corporal son el motor para la
adquisición de alimentos, el
endocrino y el neurovegetativo. El sistema endocrino
está representado por las hormonas del
crecimiento, las tiroideas, las gonadales, los glucorticoides y
la insulina.

Durante la etapa del desarrollo, la
hormona del crecimiento y las tiroideas trabajan al
unísono para aumentar el crecimiento. En la pubertad
comienzan a funcionar los esteroides gonadales, los que provocan
desplazamiento en la proporción de la grasa respecto al
peso corporal magro en niños y
niñas. La testosterona aumenta el peso corporal magro y en
relación con la grasa y los estrógenos tienen un
efecto contrario. Los niveles de testosterona disminuyen cuando
el varón humano se hace mayor, y provocan un aumento de la
grasa visceral y corporal total, con disminución del peso
corporal magro. Con la edad, esto se complica con la
disminución de la hormona del crecimiento, que se
acompaña de aumento de la grasa corporal. (49)

El sistema neurovegetativo completa el círculo en
el control del peso como regulador de las secreciones hormonales
y de la termogénesis. Cuando todos estos sistemas,
señales
y genes funcionan correctamente y están bien modulados por
un ambiente
favorable, el peso corporal permanece estable o con pocas
variaciones anuales. Cuando este equilibrio de
fuerzas se quiebra por
motivos diversos, aparece la obesidad.
(49

CONSECUENCIAS ASOCIADAS CON LA
OBESIDAD

La obesidad trae como consecuencias
varias afectaciones y alteraciones en el funcionamiento de los
diferentes órganos y sistemas del cuerpo. El grado de
riesgo depende
entre otras cosas de la cantidad relativa de exceso de peso, la
localización de la grasa corporal, cuánto se ha
subido de peso durante la edad adulta y la cantidad de actividad
física

Sistema respiratorio.

Alteración de la respiración externa, reducción de la
capacidad vital de los pulmones, y limitación de la
movilidad de la caja torácica y del diafragma que resulta
en disnea.

Sistema digestivo.

Se presenta meteorismos, estreñimientos, inflamación de la
vesícula.

Sistema nervioso.

Afectaciones del sistema nervioso
periférico y desarreglos funcionales del sistema nervioso
central son otras tipos de consecuencias.

Sistema circulatorio.

El corazón se
trabaja mas en las personas obesas debido a la gran masa corporal
que necesita sangre para
funcionar, esta misma resulta en el desarrollo de varias enfermedades crónicas
cardiovasculares como la hipertensión, fatiga
rápida.

La obesidad también es asociada y es una de las
principales causas de varias enfermedades crónicas entre
cuales son:

Diabetes de tipo
2.
Enfermedades
cardiovasculares e hipertensión.
Enfermedades respiratorias (síndrome de apnea del
sueño).
Algunos tipos de cáncer.
Osteoartritis.
Problemas
psicológicos.
Empeoramiento en la percepción
de la calidad de
vida.

Diabetes de tipo 2

De todas estas graves enfermedades es la diabetes de
tipo 2 (que normalmente se desarrolla en la edad adulta y
está asociada al sobrepeso) o la diabetes mellitus no
insulinodependiente, la que está más ligada a la
obesidad y el exceso de peso. De hecho el riesgo de desarrollar
una diabetes de tipo 2 aumenta con un IMC que esté
bastante por debajo del límite de la obesidad (IMC de 30).
La probabilidad
de que las mujeres obesas desarrollen una diabetes de tipo 2 es
12 veces mayor que en mujeres con un peso saludable. El riesgo de
padecer este tipo de diabetes aumenta conforme el IMC sea
más alto, especialmente en las personas con antecedentes
familiares de diabetes, y disminuye si se pierde peso.

Enfermedades cardiovasculares e
hipertensión

Las enfermedades cardiovasculares incluyen las enfermedades
coronarias, los accidentes
cerebro
vasculares y la enfermedad vascular periférica. Estas
enfermedades son las responsables de una gran proporción
de las muertes (una de cada tres) en los hombres y mujeres de los
países industrializados y su incidencia está
también aumentando en los países en vías de
desarrollo.

En las personas obesas su corazón trabaja mas
para distribuir sangre a la crecida masa corporal, este sobre
carga resulta en una presión
excesiva sobre el corazón.

La obesidad predispone al individuo a
varios factores de riesgo cardiovascular, entre ellos la
hipertensión y elevados niveles de colesterol en sangre.
En las mujeres, la obesidad es la variable más importante
en las enfermedades cardiovasculares, después de la edad y
la presión sanguínea. El riesgo de sufrir un
infarto es
unas tres veces mayor en una mujer obesa que
en una mujer delgada de la misma edad.

Las personas obesas son más propensas a tener
altos niveles de triglicéridos en sangre (lípidos
sanguíneos), y colesterol LDL, con lipoproteínas de
baja densidad
("colesterol malo") y bajos niveles de colesterol HDL con
lipoproteínas de alta densidad ("colesterol bueno "). Este
perfil metabólico es característico en personas
obesas con una alta acumulación de grasa intra-abdominal
("manzanas") y normalmente se asocia a un mayor riesgo de padecer
enfermedades coronarias. Usualmente, si se pierde peso, los
niveles de lípidos en sangre (grasas)
mejoran. Si se pierden 10 Kg., se puede producir un descenso del
15% en los niveles de colesterol LDL y un aumento de un 8% en los
de colesterol HDL. Lipoproteína de baja densidad es el
transporte
principal de colesterol en la sangre mientras la
lipoproteína de alta densidad es lo más
pequeño y lo más abundante de las
lipoproteínas, es transporte de colesterol de los tejidos periféricos al hígado para
excreción, es cardioprotectiva.

La relación entre la hipertensión
(elevación de la presión arterial) y la obesidad
está bien documentada, y se calcula que la
proporción de hipertensión atribuible a la obesidad
es del 30-65% en las poblaciones de Occidente. De hecho, la
presión arterial aumenta si se incrementa el IMC; Por cada
10 Kg. de aumento de peso, la presión arterial sube 2-3mm
Hg. Por el contrario, si se baja de peso disminuye la
presión arterial, y normalmente, por cada 1% de
reducción de peso, la presión arterial disminuye
1-2mm Hg.

La prevalencia de la hipertensión en adultos con
sobrepeso es tres veces mayor que en adultos sin sobrepeso, y el
riesgo de hipertensión en personas con exceso de peso
entre 20-44 años es casi 6 veces mayor que en los adultos
con peso normal.

Cáncer

Aunque la relación entre la obesidad y el cáncer
no esta bien definida, hay varios estudios que han descubierto
que el sobrepeso está asociado a la incidencia de ciertos
tipos de cáncer, y más concretamente,
cánceres gastrointestinales y de origen hormonal. Se ha
observado que las mujeres obesas tienen un mayor riesgo
cáncer mamario, endometrial, ovárico y cervical, y
hay evidencias de
que en los hombres hay un riesgo más elevado de padecer
cáncer de
próstata y cáncer rectal. La asociación
más clara es la que existe entre el cáncer de colon
y la obesidad, que triplica su riesgo tanto en mujeres como en
hombres.

Otras afectaciones.

Embarazo.

La obesidad incrementa los riesgos de la
hipertensión sanguínea y cierto tipo de diabetes
que se desarrolla durante el embarazo. Las
mujeres obesas tienen más probabilidades de enfrentar
problemas durante el trabajo de
parto y el
alumbramiento.

Osteoartritis

Las enfermedades degenerativas de las articulaciones,
como la rodilla, son complicaciones normales asociadas a la
obesidad y el sobrepeso. Se piensa que el daño
mecánico de las articulaciones se produce debido al exceso
de peso que tienen que soportar. También es más
común en las personas obesas el dolor lumbar, que puede
ser una de las causas principales de ausentismo laboral en
personas obesas.

Aspectos psicológicos y
sociales

Gordura y ginecomastia que llevan a la vergüenza y
a las bromas en los adolescentes,
que reducen su participación en los deportes e incrementan la forma de
vida sedentaria. La obesidad se considera una lacra en muchos
países Europeos, y se percibe como una apariencia física no deseable y
un signo de los defectos de carácter que se supone que indica. Incluso
los niños de seis años perciben a otros
niños obesos como "vagos, sucios, estúpidos, feos,
mentirosos y tramposos".

Perdida de oportunidades de empleos y enfrentarse muchas
veces a la discriminación. Según los estudios
realizados en el Reino Unido y en Estados Unidos,
las jóvenes con exceso de peso ganan mucho menos que las
mujeres sanas, sin sobrepeso o que otras mujeres con problemas
crónicos de salud.

Fracaso al atraer al sexo opuesto,
o si la obesidad ocurre después del matrimonio, un
desencanto progresivo conduce a dificultades sexuales y
sociales.

Aislamiento social que provoca depresión.

También es más frecuente que las personas
obesas coman compulsivamente, y que tengan una largo historial de
desórdenes alimentarios que se caracterizan por los
atracones y las variaciones de peso.

Aspecto
Económico

Los estudios internacionales sobre los costes
económicos de la obesidad han demostrado que constituyen
entre un 2% y un 7% del total de los costos
sanitarios, aunque estos porcentajes dependen del método de
análisis utilizado. En Francia, por
ejemplo, el coste directo de enfermedades asociadas a la obesidad
(incluyendo gastos de
asistencia sanitaria personal,
cuidados hospitalarios, servicios
médicos y medicamentos para enfermedades con una
relación demostrada con la obesidad) ascendía a un
2% del total de los gastos sanitarios. En los Países
Bajos, la proporción del total de gastos de medicina
general atribuibles a la obesidad y al exceso de peso es
aproximadamente de un 3-4%.

En Inglaterra, el
coste anual de la obesidad y su tratamiento es para el National
Health Service (Servicio
Nacional de Sanidad) de aproximadamente 500 millones de libras, y
se calcula que su impacto en la economía es de 2.000 millones de libras al
año. El coste humano estimado de la obesidad es de 18
millones de días de baja al año; y de 30.000
muertes al año, que tienen como consecuencia que se
pierdan 40.000 años de vida laboral y que la esperanza de
vida disminuya en los próximos años.

Un reciente estudio en los Estados Unidos estimó
el gasto médico anual debido al sobrepeso y obesidad (IMC
> 25) como $92.6 mil millones en 2002 dólares (9.1 por
ciento de gastos de salud americanos). Fuente Wolf y
Colditz,

CLASIFICACION DE LA
OBESIDAD

1) Clasificación
Etiológica:

a) Exógeno o primaria:

Surge por un consumo
excesivo de alimentos y por una actividad física
limitada.

b) Endógena o secundaria:

Está condicionada por alteración de las
funciones de
las glándulas de secreción interna (la tiroides, el
lóbulo anterior de la hipófisis, la corteza
suprarrenal, las glándulas genitales, el páncreas)
o del aparato de regulación del metabolismo
graso en el sistema nervioso central.

– El hiperinsulinismo secundario a los tumores de
células
insulares del páncreas o a la inyección de cantidad
excesivas de insulina, lo que provoca aumento de la ingesta
alimentaría y crecimiento de los depósitos de
grasa, pero de una magnitud modesta.

– Aumenta de secreción de cortisol en el
síndrome de Cushing.

– Hipotiroidismo.

Hipogonadismo donde se producen alteraciones en la
distribución de la grasa en el
cuerpo.

c) La obesidad mixta se produce como resultado de la
aparición de las causas primarias y secundarias en un
mismo individuo.

2) Según el índice de masa corporal (IMC)
la obesidad está divido en tres grados:

Clasificación

IMC

Grado I Obesidad ligera

30.0 – 34.9

Grado II "Obesidad moderada"

35.0 – 39.9

Grado III "Obesidad Severa"

>40.0

3) Clasificación Anatómica: Se base en el
número de adipositos y en la distribución de la
grasa

a) Según la parte del cuerpo que más afecta:

Si la grasa está distribuida por el abdomen se denomina
obesidad de la parte superior del cuerpo o de tipo androide
(porque se produce principalmente en los hombres) y se asocia
más con una morbilidad y mortalidad mayores que la grasa
distribuida por debajo de la cintura denominada obesidad de la
parte inferior del cuerpo o ginecoide.

b) En cuanto al número de adipositos:

En muchos individuos con problema de la obesidad desde la
infancia, el
número de adipositos puede ser 2 a 4 veces superior al
normal. Los individuos con gran número de estas
células tienen una obesidad hipercelular. Esto permite
distinguirlos de los que padecen otras formas de obesidad, en los
que el número total de adipositos es normal pero el
tamaño de cada uno de ellos es más grande,
hipertrofia.

4) Según la edad de aparición:

a) Obesidad progresiva de la infancia (prepubertad o
hiperplastica): suele ser hipercelular y puede ser resistente al
tratamiento. El periodo crítico de la aparición de
la obesidad progresiva de la infancia son los dos primeros
años de edad y luego, entre 4 y 11 años de edad. La
forma más grave comienza en este ultimo periodo y a partir
de ahí, puede seguir progresando.

b) Obesidad que comienza en la edad adulta (postpubertal o
hipertrofica): tiende a ser hipertrofia con grandes
adipositos.

Al momento de parto el cuerpo del niño tiene un 12 por
ciento de grasa.

De 0-6 meses el porcentaje de grasa se aumenta hasta 25%

Desde los 6 meses a la pubertad 15- 18% del cuerpo es
grasa.

De la pubertad hasta los 18 años:

a) Los hombres 15 a 18%.

b) Las mujeres 20- 25%.

Entre 20 – 50 años los hombres se duplica y las
mujeres aumentan aproximadamente 50%

Sin embargo el peso total se eleva de 10-15% lo cual indica
que se produce una reducción en la masa corporal magra. El
porcentaje de grasa corporal depende del nivel de la actividad
física. Durante el entrenamiento
físico, la grasa corporal suele disminuir a la vez que
aumenta el tejido magro

FACTORES QUE CONTRIBUYEN
AL DESARROLLO DE LA OBESIDAD

Los factores que influyen en el
desarrollo de la obesidad son varios, aquí tenemos un
resumen de los más comunes.

Factores ambientales (socio-económicos)

La evidencia de que el hambre evita o revierte la obesidad,
aun en las personas con gran carga genética,
junto a su incremento en los países industrializados o en
vías de desarrollo en los cuales la dieta es rica en
grasas y carbohidratos,
y los hábitos sedentarios han aumentado con el desarrollo
económico, se muestra a favor
del factor ambiental en su origen y desarrollo. Otro hecho
relevante lo representa el incremento epidémico de la
obesidad en los últimos veinte años, que no puede
ser explicado por alteraciones genéticas poblacionales
desarrolladas en tan corto tiempo. Por
otra parte, a medida que la pobreza ha
disminuido en países industrializados o en vías de
desarrollo, ha aumentado en forma proporcional la obesidad. Lo
cierto es que el desarrollo económico trae aparejado
problemas sociológicos importantes: aumenta la vida
sedentaria al disponerse de medios de
transporte, elevadores, equipos electrodomésticos
diversos, incluido el uso del control remoto y el tiempo
destinado a ver televisión o trabajar en el computador; a
su vez, la actividad física programada, aunque se
practique quizás con mayor frecuencia e intensidad, no es
siempre por los más sedentarios, y la mayoría de
las veces está seguida de un período de actividad
sedentaria. También se suman la comercialización de comidas altas en
calorías y bajas en nutrientes, el aumento
en la frecuencia de estas por su fácil accesibilidad, el
aumento en la ingestión de grasas saturadas y la
disminución en el aporte de comidas sanas, como los
vegetales, frutas, pescado y cereales, cuyo costo y tiempo de
preparación puede ser mayor que el de la comida
fácil. Todo esto, unido a efectos psicológicos de
la vida moderna con sus grandes conflictos,
ayuda y perpetúan el incremento del fenómeno.
(15,25)

Factores genéticos

Dentro los factores genéticos destacamos la ausencia de
genes importantes en la regulación de la grasa en el
cuerpo en familias obesas entre cuales son:

El gen ob responsable para la producción de leptina. (47)

El gen humano que codifica la propiomelanocortin (POMC),
produce obesidad severa por fallo en la síntesis
de alfa MSH, el neuropéptido que se produce en el
hipotálamo, e inhibe el apetito. La ausencia de POMC causa
insuficiencia suprarrenal por déficit de la hormona
Adrenocorticotrópica (ACTH), palidez cutánea y pelo
rojo por ausencia de alfa MSH. (50)

El gen fat codifica la carboxipeptidasa E, una enzima
procesadora de péptidos, que participa en el procesamiento
de hormonas y neuripéptidos, y la mutación de este
gen causa obesidad en ratones.

Dos síndromes raros, pero conocidos y con base
genética, tienen entre sus componentes fundamentales la
obesidad: el síndrome de Prader Willi, que se caracteriza
por baja estatura, retraso mental, hipogonadismo
hipogonadotrópico, hipotonía, pies y manos
pequeñas, boca de pescado e hiperfagia, y en la
mayoría de los casos tiene una dilección del
cromosoma 15 y el síndrome de Laurence-Moon Biedl, con
retraso mental, retinosis pigmentaria, polidactilia e
hipogonadismo hipogonadotrópico. Lo mismo sucede con otros
síndromes raros con base genética como son los de
Alstron, de Bardet-Biedl, de Carpenter y de Cohen.
(49)

Factores relativos al desarrollo:

Un aumento del tamaño o del número de
células adiposas, o ambos, se suma a la cantidad de grasas
almacenadas en el cuerpo. Las personas obesas, en particular las
que han desarrollado la obesidad durante la infancia, pueden
tener una cantidad de células grasas hasta cinco veces
mayor que las personas de peso normal. Debido a que no se puede
reducir el número de células, se puede perder peso
solamente disminuyendo la cantidad de grasa en cada célula.

Actividad física Reducida:

La actividad física reducida es probablemente una de
las razones principales para el incremento de la obesidad entre
las personas de las sociedades
opulentas. En algunas, los Estados Unidos, por ejemplo, la
obesidad es hoy dos veces más frecuente que en el
año 1900, aun cuando el término medio de
calorías consumidas diariamente ha disminuido un 10 por
ciento. Las personas sedentarias necesitan menos calorías.
El aumento de la actividad física hace que las personas de
peso normal coman más, pero puede que no ocurra lo mismo
en las personas obesas.

Factores hormonales:

Algunos trastornos hormonales puedes causar obesidad, como son
el síndrome de Cushing, insuficiencia suprarrenal,
diabetes entre otras.

Lesión del cerebro:

Sólo en muy pocos casos, una lesión del cerebro,
especialmente del hipotálamo, puede dar como resultado
obesidad.

Fármacos:

Ciertos fármacos utilizados frecuentemente causan
aumento de peso, como la prednisona (un corticosteroide) y muchos
antidepresivos, así como también muchos otros
fármacos que se utilizan para curar los trastornos
psiquiátricos.

MÉTODOS
ANTROPOMETRICOS PARA MEDIR LA OBESIDAD

  • Índice de Masa Corporal (IMC)

Una persona esta
considerada obesos cuando su índice de masa corporal
(relación entre talla y peso) es por encima de 30 Kg.
/cm2. El índice de masa corporal (IMC) esta dado por una
comparación entre el peso y la talla del individuo e
independiente del sexo o sea el sexo no tiene influencia en la
comparación y no es género-específico. Es el
método más efectivo y más utilizado hoy. El
IMC es un método simple, rápido, barato pero tiene
sus limitaciones.El IMC no mide por ciento de grasa del cuerpo
directamente, pero es un indicador que nos da un resultado
más exacto en las personas con sobrepeso y obesidad que
confiando en el peso exclusivamente. Un problema con el uso de la
IMC como una herramienta de la medida es que las personas muy
musculosas pueden caer en la categoría de "el sobrepeso"
cuando ellos son realmente saludables. Otro problema con el uso
de la IMC es que las personas que han perdido masa muscular, como
el anciano, pueden estar en la categoría de "un peso
saludable" según su IMC, cuando en realidad ellos
realmente han reducido sus reservas nutritivas. Por consiguiente,
IMC es útil como una pauta general para analizar y
supervisar las tendencias en la población, pero no lo podemos utilizar como
un método diagnóstico que nos determine el estado de
salud de un paciente. (9)

IMC = PESO (Kg.)/ TALLA (m2)

Para calcular el índice de masa corporal en libras y
pulgadas, multiplica el peso por 704.5 luego divide el resultado
por la talla en pulgadas y después el nuevo resultado por
la talla en pulgadas una segunda vez.

  • Método de Índice Cintura Cadera
    (ICC)

Este método consiste en una comparación entre la
medición de la cintura y la medición
cadera útil en el diagnóstico de la cantidad de
grasa intra-abdominal:

ICC = Circunferencia de Cintura

Circunferencia de Cadera

Este índice es mayor en el hombre que
en la mujer,
precisamente por la distribución de la grasa en ambos
sexos y tiende además a aumentar con la edad. Un
índice mayor de 0,95 en el hombre y de
0,80 en la mujer es predictor de aumento del riesgo de
anormalidades metabólicas. (9,10,)

  • La Tomografía axial computerizada (TAC) y la
    resonancia magnética nuclear (RMN).

Estos métodos
proporcionan cálculos cuantitativos de la grasa regional y
determinan la proporción entre la grasa abdominal y
extra-abdominal. Las ondas
ultrasónicas aplicadas a la piel son
reflejadas por la grasa y el músculo y otras interfases,
por lo que también proporcionan una medida del grosor del
tejido adiposo en determinada regiones.

Las activaciones de neutrones en la totalidad del organismo
para identificar composición corporal química de sus
tejidos, gracias a los distintos aspectos de emisión.

  • El grosor del pliegue cutáneo

Este método consiste en la medición de los
pliegues cutáneos en diferentes sitios, con ecuaciones y
nomogramas para la conversión del grosor del pliegue en
grasa y que se expresa en el porcentaje de grasa corporal que
debe ser no mayor de 28 % en la mujer y no mayor del 20 % en el
hombre. Se requieren cuatro pliegues para estas mediciones, que
son los del bíceps, tríceps, subescapular y
suprailíaco, aunque es también útil la
medición de solo dos. Una forma menos complicada es la
utilización aislada del tríceps, que se considera
normal en la mujer por debajo de 30 mm y en el hombre de 23 mm.
Esto tiene su explicación a partir de la
consideración de que aproximadamente el 50 % de la grasa
corporal se encuentra en el tejido celular subcutáneo. La
medición de los pliegues tiene el inconveniente de que la
distribución de la grasa difiere en individuos con igual
cantidad de tejido adiposo y que en ciertas formas de obesidad,
la grasa tiene una distribución generalizada, mientras en
otras es fundamentalmente abdominal. Por otra parte, la
relación grasa subcutánea/grasa profunda (visceral)
puede ser de 0,1 a 0,7, además de que la grasa corporal
aumenta con la edad, no así el grosor del pliegue.

En nuestro trabajo
utilizaremos el Índice de Masa Corporal como método
antropométrico para medir la obesidad debido a su
fácil entendimiento, su efectividad y popularidad.

El tratamiento de la obesidad

El tratamiento de la obesidad se apoya en cuatros pilares
fundamentales:

Educación para la salud: El obeso debe conocer
todo lo relacionado con la obesidad, por lo que la información constituye un pilar
fundamental. Lo ayudará a comprender su problema y a
erradicarlo adecuadamente.

El apoyo psicológico: Es un aspecto de mucha
importancia en el tratamiento de estos pacientes, ya que una gran
parte de los obesos son muy ansiosos, y esto le da más
apetito, además es importante descubrir las motivaciones
que puede llevar a cada paciente a interesarse por el tratamiento
de reducción del peso corporal.

Dieta: Sin ella no hay reducción de peso. La
dieta debe ser hipocalórica, calculada para las 24 horas
del día, fraccionada en seis comidas, individual, en
dependencia del gusto del paciente y su familia, ya que
surge de lo que come la familia,
solo que reducida en cantidad. Debe ser calculada a razón
de 20 calorías por kilogramos de peso ideal.

Ejercicio físico: La aplicación de
ejercicios físicos a pacientes afectadas con la obesidad
juega un papel muy importante en la rehabilitación de
dicha enfermedad. Mediante el ejercicio físico se gasta
energía excesiva (grasa), se puede suprimir el apetito,
mejorar el funcionamiento psicológico, se produce efectos
positivos sobre la presión sanguínea, el colesterol
sérico, la composición corporal y la tensión
cardiorrespiratoria independientemente de la perdida de peso.
Importante, el ejercicio físico puede minimizar la perdida
de masa corporal magra. A través de la dieta, el paciente
puede perder un 25% de masa corporal magra, si la dieta se agota
las reservas de proteínas
en algunas de sus áreas esenciales puede ser peligrosa.
Los ejercicios recomendable son de tipo aerobio como la marcha,
carrera de distancia larga o tiempo largo (de intensidad baja
hasta media) y la participación de grandes grupos musculares
con esfuerzos dinámicos, estos ejercicios o actividades se
provocan el uso de la grasa como fuente de energía,
aumenta el consumo de energía almacenada y disminuye el
tejido adiposo del paciente y crear menos productos de
desechos nocivos al organismo como el acido láctico por su
utilización como fuente de energía.

Hoy en día el ejercicio con pesas, es un componente
importante en el entrenamiento de los obesos ya que hace aumentar
el volumen muscular
( tejido magro) y esto contribuye a mantener un metabolismo basal
elevado (Gasto Metabolismo en Reposo)

El ejercicio físico se aumenta el Gasto Metabolismo en
Reposo, GMR. El gasto metabolismo en reposo, no es mas que la
cantidad de energía que necesita el organismo para
mantener las funciones vitales o para estar con vida en una
situación de reposo. El GMR supone el 60-70 % del gasto
calórico total a lo largo del día.

BENEFICIOS DE LA
PÉRDIDA DE PESO
(48)

Con una perdida de 10Kg del peso, la salud de una persona
obesa se puede mejorar en las siguientes maneras:

Mortalidad

+ 20% de disminución en el riesgo de mortalidad

+ 30% de disminución en la mortalidad por diabetes
mellitas

+ 40% de disminución en la mortalidad por cáncer
relacionada con la obesidad.

Presión Sanguínea

  • Disminución de 10mmHg en la presión
    sistólica
  • Disminución de 20mmHg en la presión
    diastolica

Diabetes Mellitus

Disminuye un 50% la glucosa de
fasting

Lípidos

  • Disminuye un10% la colesterol total
  • Disminuye un 15% la lipoproteína de baja
    densidad
  • Disminuye un 30% los triglicéridos
  • Aumenta un 8% la lipoproteínas de alta densidad

CONCLUSIONES

El trabajo ofrece una fuente amplia de contenidos
teóricos acerca de la obesidad como material de consulta a
todos los profesores y trabajadores de la EIEFD

La obesidad es uno de los grandes enemigos a la humanidad.
Esta vinculada con muchas enfermedades crónicas, que a
periodos prolongados se resultan en la muerte de
muchas personas y el gasto de muchos recursos en el
tratamiento de estas enfermedades. Tenemos que seguir en combate
contra esta enfermedad, la obesidad, no podemos perder la
guerra contra
esta enfermedad.

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    Autores:
    LIC. Eugenio Rodolfo González Pérez Profesor
    Asistente

    MSc. Regla Cárdenas
    Sardiñas

    Escuela Internacional de Educación
    Física Y Deporte, Provincia La Habana
    Cuba

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