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Importancia del Discipulado en el contexto de la sociedad globalizada del Nuevo
Milenio




Enviado por pastorrodrigo



Partes: 1, 2



    1.
    Introducción.

    2. Metodología
    General

    3. Fenómenos del Nuevo Milenio y
    propuestas para un Discipulado Cristiano

    4. Primera propuesta: El
    Discipulado financiero.

    5. Segunda Propuesta:
    Discipulado de la marginación. (San Lucas
    14:16-24)

    6. Tercera Propuesta:
    Discipulado en el humanismo cristiano

    7. Cuarta Propuesta:
    Discipulado de la Ministración del Poder de
    Dios.

    8.
    Recomendaciones

    1. Introducción.

    Hoy como siempre, el discipulado cristiano goza de una
    importancia radical dentro de nuestras iglesias, porque a
    través del mismo se va forja la
    personalidad del creyente como seguidor de Cristo, asunto de
    mucha prioridad en las actuales coordenadas de una sociedad nueva,
    compleja y globalizada que no tiene como norma
    epistemológica al Evangelio de Jesucristo, sino las
    conveniencias del Mercado
    Neoliberal.

    La presente exposición
    tiene como objetivo
    destacar qué tipo de programa de
    discipulación necesitamos para este actual momento, en
    este Nuevo Milenio y en esta sociedad en creciente proceso
    globalizador en la República Dominicana. Solamente
    podremos acercarnos al fenómeno, tímidamente
    definirlo e interpretarlo y formular con toda humildad y
    prudencia algunas recomendaciones para el Arte de
    Discipular en el actual Nuevo Orden de Cosas.

    Jesús dijo: "Toda autoridad me
    es dada en el cielo y en la tierra. Por
    tanto id y haced discípulos a todas las naciones,
    bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
    Espíritu Santo, enseñándoles que guarden
    todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con
    vosotros todos los días, hasta el fin del mundo" Mat.
    28,19

    Discipular consiste en el cumplimiento de este mandato
    bíblico presentado en las palabras de Cristo, en lo que
    conocemos como la Gran Comisión, que consiste en ir por
    todo el mundo predicando el Evangelio , formando seguidores y
    bautizándolos e incorporándolos al Cuerpo de Cristo
    que es la Iglesia con la
    finalidad de impactar el mundo a través del Poder de
    Dios.

    La mejor forma de entender qué es discipular
    comienza por definir lo que significa ser un discípulo.
    Este término castellano
    proviene del latín discipulus, y significa aprendiz, el
    equivalente a la palabra griega mathetes. Harrison en su Diccionario de
    Teología lo resume muy bien en un solo párrafo
    cuando dice: "En resumen, discípulo puede significar: (1)
    un creyente, como en Hch 11:26, (2) un aprendiz en la escuela de
    Cristo, (3) uno que está dispuesto a sacrificar su vida
    por sus creencias, como en Lc.14:26,27,33, (4) uno que
    actúa para cumplir la máxima obligación del
    discipulado, es decir, hacer otros discípulos (Mt.
    28:19).

    El Diccionario
    Teológico de Fernando D.Saraví lo reafirma de este
    modo: "Discípulo:
    La palabra proviene de la misma raíz que "disciplina" y
    se refiere a un alumno o seguidor de una religión, persona o
    movimiento.
    Como cristianos, debemos ser discípulos de Jesús
    (Luc. 14:26,27). En la Biblia, es la denominación
    más frecuente de los cristianos. Seguidor en la enseñanza que Jesucristo impartió y
    en el ejemplo que dio. Un discípulo es un convertido, pero
    no todos los convertidos son discípulos. Como
    discípulos, hemos de cargar nuestra cruz cada día
    (Mat. 16:24). Esto significa vivir por El y de ser necesario,
    morir por El (Mat. 16:25) y, desde luego, vivir vidas santas y
    sin mancha delante de El y de nuestro prójimo."

    En esta exposición sobre la importancia del
    discipulado en el presente milenio, proponemos tres estaciones
    escalonadas en la formación de un discípulo
    discipulante, cristiano y de identidad
    metodista libre dominicano.

    En primer lugar, los elementos esenciales del
    discipulado cristiano contenidos en la Biblia: Jesucristo, su
    Persona, su
    enseñanza y su Misión. La
    iglesia, los
    apóstoles, sus doctrinas, ministerios y misión.

    En segundo término y en calidad de
    identidad
    denominacional, tenemos los contenidos expuestos en El pacto de
    membresía, Los artículos de Religión, La historia, La
    eclesiología, El gobierno y
    Liturgia metodista, enseñados en el Libro de
    Disciplina de
    la Iglesia Metodista Libre como paradigmas
    irrenunciables en todo sistema de
    discipulado básico para una membresía
    específicamente metodista libre.

    En tercer lugar , siguiendo el ejemplo de nuestro Dios,
    quien para discipular a la humanidad se contextualizó, " Y
    aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros y
    vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre,
    lleno de gracia y de verdad" Juan 1,14, tenemos la necesidad de
    hacer el esfuerzo por interpretar los signos negativos y
    positivos de los tiempos (Mt. 16,3) y así diseñar
    el perfil del tipo especial de discípulo-discipulador
    cristiano-metodista libre encarnado en el actual medio
    globalizado y específicamente dominicano del presente
    milenio.

    En esta exposición nos dedicaremos exclusivamente
    a este último elemento, tratando de caracterizar el
    terreno ideológico y conductual de la presente sociedad o
    nuevo orden globalizado, comprendiendo que no o hay otro método
    bíblicamente aceptable que no sea éste de
    encarnarse en la realidad social con la oferta de las
    Buenas Nuevas del Reino, al igual que lo hicieron Jesús,
    los discípulos, los paladines de la Reforma, los Wesley,
    Tito Roberta, Samuel Mills y todos los que nos han precedido en
    el camino de ser discípulos discipuladores..

    Desde esa premisa habrá que preguntarse :
    ¿Cuáles son los principales fenómenos
    socio-económicos e ideológicos de este Nuevo Orden
    y que presionan a la iglesia cristiana en la búsqueda de
    una "nueva forma de discipulado encarnado?

    En la presente charla nos acercaremos a estos
    fenómenos, pronosticando el posible desafío que
    cada uno de ellos representa para la tarea evangelizadora y
    discipuladora de la iglesia, lo que nos permitirá trazar
    pautas pastorales a seguir para cada instancia.

    Previamente, la presentación de una metodología general nos ayudará a
    aclarar: cómo proceder o caminar en este desafío
    general de formar cuadros o líderes para el discipulado,
    desde lo general de los contenidos doctrinales a lo particular de
    la realidad diagnosticada en donde implantar la semilla del Reino
    de Dios.

    No pretenderemos hablar de un Discipulado para el Nuevo
    Milenio, es decir de las pautas para un Discipulado Coyuntural
    sin antes establecer metodológicamente cuáles deben
    ser los peldaños y contenidos de un Discipulado
    General

    2. Metodología General

    El primer paso es el Discipulado Fundamental, que
    consiste en formar la personalidad
    cristiana por medio de la Biblia.

    El segundo paso debe ser el Discipulado Especial, que
    forma al creyente en las esencias de su denominación,
    movimiento,
    concilio o rama de la cristiandad: católico, anglicano,
    ortodoxo, metodista, bautista, Pentecostal, reformado, incluyendo
    las sub-especialisdades de las diversas corrientes: metodista
    libre, metodista unida, etc.

    El tercer paso debe concentrarse en discipular de cara a
    los desafíos de la actualidad. Discipulado Coyuntural o de
    Contexto. En nuestros días se trata del discipulado para
    el Nuevo Milenio Dominicano.

    Un ejemplo de este tipo de búsqueda, la hemos
    experimentado en los últimos seis meses mediante los
    talleres sobre Discipulado Metodista Libre que realizamos en las
    iglesias de Enriquillo, Los Jardines (allí fue solo una
    charla) y del Ensanche Ozama, ambas de la Conferencia
    Sureste.

    Estas iglesias desde su fundación han discipulado
    básicamente desde la óptica
    del primer paso, y lo han hecho de forma loable, pero sin
    profundizar lo suficiente en el segundo carisma
    metodológico, es decir en lo específicamente
    congregacional.

    Por esa razón expuesta en el párrafo
    anterior y atendiendo a las necesidades empíricamente
    diagnosticadas por sus respectivos comités de Educación,
    particularmente los de la iglesia de Enriquillo y la de Ozama
    donde se desarrolló el Programa
    completo, les brindamos una herramienta de ocho sesiones de
    entrenamientos basados en este segundo nivel de Discipulado en el
    Metodismo Libre.

    1. Primer entrenamiento:
      Objetivo:
      Familiarizarse con el Panorama del Metodismo
      Histórico
    2. Segundo entrenamiento:
      Objetivo: Identificarse con la corriente teológica
      representada por Arminio, con su historia y sus cinco
      famosos puntos que influirán radicalmente el posterior
      cuerpo teológico del pensamiento
      wesleyano.
    3. Tercer entrenamiento: Objetivo: Fundamentarse en la
      Teología wesleyana de los sacramentos.
    4. Cuarto taller: Objetivo: Valorar
      teológicamente El Ministerio Femenil en la Historia y
      práctica discipuladora d el Movimiento Metodista
      Mundial.
    5. Quinto taller: Cómo usar un Manual de
      Discipulado Metodista (material de la iglesia Metodista Unida
      hispana de EE.UU)
    6. Sexto encuentro: Qué es el Metodismo Libre:
      Historia, Libro y
      Herencia
      Espiritual.
    7. Séptimo evento: Cómo discipular con el
      Libro de Constitución y Disciplina de la Iglesia
      Metodista Libre.
    8. Octavo momento : Desafíos para un discipulado
      en la actualidad y en la localidad . Conclusiones y
      Propósitos

    Las conclusiones del esfuerzo realizado se resumen en
    ratificar la importancia de un Discipulado definido y
    contextualizado para este actual momento de nuestra la iglesia y
    sociedad dominicana.

    Siguiendo el camino trazado por esta reflexión
    responderemos primeramente a los desafíos generales del
    Nuevo Orden, quedando cómo tarea para cada
    federación e iglesia seguir trabajando el tema en dirección a un Catecismo Común de
    discipulado Metodista Libre Dominicano para su medio y en
    respuesta a los desafios particulares de esta cultura y
    coyuntura.

    3. Fenómenos del
    Nuevo Milenio y propuestas para un Discipulado
    Cristiano

    El advenimiento del Nuevo Milenio es inseparable del
    nacimiento de un Nuevo Orden en el campo ideológico,
    cultural, económico y social en donde la
    globalización, la economía de mercado, la
    modernidad y la
    tecnología
    son sus principales componentes, produciéndose alrededor
    de los mismos una serie de fenómenos
    socio-ideológicos y económicos como lo son la
    opulencia, la marginalidad, la
    deshumanización tecnológica, la adicción a
    las sectas energéticas y el deterioro y disfunción
    de la
    familia..

    Veamos cada uno de estos factores por separados para
    proyectar la respectiva recomendación en cuanto al
    discipulado se refiere:

    El fenómeno de la opulencia.y la Teología
    de la Prosperidad

    La riqueza en este Nuevo Orden Neoliberal está
    concentrada en determinados núcleos y al mismo tiempo
    globalizada.

    Una sola muestra, son los
    famosos supermercados transnacionales y las
    compañías de productos
    globalizados de sistemas y
    programas de
    computación.

    Al interior de los países, los capitales
    nacionales van formando alianzas internas y externas ,
    diseñando así nuevas políticas
    de mercado, y la creación de un anillo de alternativas de
    productos de
    alta tecnología como lo vemos claramente en el
    mundo de las telecomunicaciones y en las actividades
    económicas, científicas, comerciales y culturales
    en general. Tecnología y Capital se han
    entrelazado en un romántico idilio dando como resultados
    nuevas modalidades sociales de opulencia y extrema marginalidad.

    Alrededor de estos núcleos de poder se
    levanta una nueva clase gerencial y ejecutiva sobre la base del
    conocimiento
    tecnológico, que aspira con todo rigor y ansiedad a
    prosperar por encima de los limitados marcos de las anteriores
    moldes de sociedad tradicionales.

    Así como en el pasado miles de personas
    salían de Europa movidos
    por la fiebre del oro en América, hoy la alta temperatura
    que arropa la mentalidad moderna es la de la PROSPERIDAD
    ECONOMICA, incluyendo a los miembros de nuestras iglesias
    cristianas.

    En la República Dominicana hemos presenciado un
    crecimiento
    económico desigual y que en alguna proporción a
    beneficiado a un sector de creyentes introducidos en el sistema
    productivo que han visto mejorar su condición y sus
    posibilidades, como una Bendición de Dios.. Frente a esa
    realidad, ¿Cómo evangelizar y discipular a este
    cristiano actual, bendecido por el Señor en la sociedad de
    opulencia, sin que tenga que renunciar a ese vital deseo de
    prosperar pero que necesita reubicarlo en su ser de cristiano,
    servidor del
    Reino de Dios, evangélico, dominicano y metodista
    libre?

    ¿Cómo ha venido discípulando la
    iglesia metodista libre a sus actuales y futuros empresarios y
    gerentes y ejecutivos? ¿de una manera general o
    especializada.

    Estamos en el tiempo de las
    especializaciones y el diseño
    de un discipulado especial en el área financiera requiere
    algo más que unos cuantos versículos
    bíblicos alrededor del tema de la
    mayordomía.

    Este esfuerzo exige no solo una teología de las
    finanzas sino
    también una metodología de la inversión.

    El primer intento para discipular en esta área
    dentro de este nuevo orden, recibe el nombre de Teología
    de la Prosperidad, que aunque sus raíces son más
    viejas que el actual estado de
    globalización, vino a estructurarse
    posteriormente en la iglesia cristiana como el recurso
    disimulador de emergencia en el campo de las finanzas del
    Nuevo Orden

    Repetimos , La Teología de la prosperidad ha
    representado el más novedoso intento de discipulado
    financiero.

    Con sus grietas teológicas, con sus aciertos, con
    sus dificultades y distorsiones, representa un engranaje que
    necesariamente tenemos que analizar sin apresurarnos a ejercer
    censuras ni despojos sino con la inteligencia
    bíblica de separar el trigo de la cizaña en este
    tiempo de cosecha y reflexión. Mateo 13,30.

    La teología de la Prosperidad tiene sus
    orígenes remotos por los años cincuenta cuando
    varios evangelistas norteamericanos comenzaron las grandes
    campañas de sanidad divina, surgiendo al mismo tiempo las
    presiones económicas para lo cual se requería un
    mensaje que se tradujera en nuevos y más jugosos ingresos para la
    obra de Dios.

    La configuración de la teología de la
    prosperidad como tal encuentra en Essek William Kenyon ,
    neoyorquino nacido en 1867 su progenitor con el
    acuñamiento del concepto
    "Confesión Positiva", o "lo que yo afirmo, eso
    poseo".

    Sus discípulos más abnegados lo fueron
    Keneth Hagin y Keneth Copeland quienes le dan forma y estructura al
    movimiento de la Prosperidad.

    En los países desarrollados y muy en vías
    de desarrollo,
    este movimiento encontró un fértil terreno tal y
    como lo señala Juan Aníbal Sandoval en su estudio
    Impactos del Evangelio de la prosperidad, cuando dice:

    " La rápida difusión de las
    enseñanzas de estos predicadores, a través los
    medios de
    comunicación escritos y audiovisuales,
    significó que sus ideas cruzaran las barreras nacionales y
    se proyectaran buscando adeptos y colaboradores alrededor del
    mundo. En este sentido es muy interesante notar que los
    proponentes de estas doctrinas afirman que sus enseñanzas
    no son aplicables a los países que tienen una economía pobre. Por
    ende, la selección
    de los nuevos mercados se
    realizó con un riguroso control de
    calidad, eligiéndose aquellas naciones que
    manifestaban mejores índices macroeconómicos,
    economías en vías de desarrollo o
    aquellas que hubiesen experimentado un crecimiento
    sostenido"

    En Sur y Centro América, ha presentado tres resultados
    innegables:
    1.El evangelismo masivo cosechó excelentes frutos
    2.Fuerte Presión
    Económica a las masas evangélicas para poder
    hacerle frente a los altos costos del
    evangelismo electrónico y espectacular.
    3.Crisis en el
    manejo de los recursos por
    parte del liderazgo.

    Tres son los postulados fundamentales sobre los que
    descansa la formación del discipulado de la prosperidad
    contenidos en esta novedosa teología que estamos
    analizando:

    a. La pobreza, la
    enfermedad y la muerte como
    maldición.

    "Cristo nos ha redimido de la maldición de la
    ley.
    ¿Cuál es la maldición de la ley? La
    única manera de averiguar lo que es la maldición de
    la ley es volver a la ley. En el Nuevo Testamento la
    expresión "la Ley" generalmente se refiere al Pentateuco,
    o sea los primeros cinco libros de la
    Biblia. Al estudiar los libros que son
    la ley, hallamos que la maldición o pena por haber
    quebrantado la ley de Dios es triple: la Pobreza, la
    Enfermedad y Muerte
    Segunda" Hagin, Kenneth E. Redimido de la Pobreza,
    Enfermedad, y Muerte
    Espiritual. 2ª ed. Tulsa, OK.: Kennett Hagin Ministries,
    1989.

    La teología de la Prosperidad afirma que la
    pobreza, la
    enfermedad y la muerte son
    resultado directo de la maldición en que las personas,
    aún los cristianos se encuentran, lo cual es parcialmente
    cierto si se acompaña con la otra paradoja bíblica
    de que Dios usa la pobreza, la enfermedad y la muerte en la vida
    de los hombres para santificarlos y él glorificarse y si
    además de señalar esta dialéctica divina en
    la que Dios se mueve, fuera capaz, esta teología de la
    prosperidad de puntualizar el hecho de que la enfermedad, la
    pobreza y los altos índices de mortalidad son parte , en
    algún nivel, del pecado social y estructural en donde el
    fenómeno de la opresión y la explotación de
    los poderosos sobre los débiles, sean estos paises,
    grupos o
    personas, son realidades que claman al cielo por justicia y
    equidad para los menos favorecidos pero, desafortunadamente
    termina calificando de "malditos", a los pobres, los enfermos y
    los moribundos.,delatándose de esa manera como una
    ideología neoliberal (que desecha lo
    aparentemente inútil como lo son los marginados), que como
    Teología Bíblica de la Prosperidad, que valore la
    condición del caido, del pobre y del enfermo como las
    razones y estímulos que dan sentido al ministerio y
    servicio
    cristiano en el mundo.

    Son los desposeídos, no por falta de
    oración ni de fe, porque quizá son los que
    más oran y creen, los que sufren de desnutrición, desventajas educativas,
    insalubridad, prisión vergonzosa, malas viviendas,
    desatención al nacer, al crecer y al morir. Son los
    poseedores quienes tienen las mejores oportunidades. ¿No
    es esta una condición estructural, pecaminosa , injusta y
    producida por razones ajenas a una exclusiva la voluntad
    individual?

    Es allí, en este punto del círculo
    hermeneútico en donde la Teología de la Prosperidad
    no logra cerrarse en una comprensión científica de
    la realidad y termina refugiándose pragmáticamente
    como gustan hacerlo nuestros amigos del norte , en un simplismo
    exegético basado en versículos aislados,
    poniéndose de esa forma al margen de la metodología
    de la fe cristiana y convirtiéndose en una atractiva
    Teología de la Oportunidad.

    b. La
    motivación para el dar consistente , en invertir en el
    Reino .

    Esta afirmación es otra de sus elaboraciones
    pragmáticas pero. Lo que esta Teología de la
    Prosperidad no explica suficientemente es en qué consiste
    para ellos el Reino de Dios, que por supuesto no es comida ni
    bebida sino gozo y paz en el Espíritu, pero que incluye a
    la comida y a la bebida en el servicio
    compasivo, Mt.25,34-35 y el sufrimiento 2 Tes 1,5.

    En que consiste su "Reino de Dios", comparablemente con
    el que el mismo Jesús definió como ajeno a este
    actual sistema de poder humano comercial y competitivo en Juan
    18,36, en donde el Maestro enseñó que si su Reino
    fuera de este sistema materialista (mundo) él no hubiese
    sería entregado por los judíos. Y que como su Reino
    responde a otro orden de valores,
    contrario al Poder Imperial , tendría que ser desechado,
    marginado y ejecutado injustamente. Esta dimensión es
    ignorada por la Teología de la Prosperidad o
    ideología religiosa de la Oportunidad. .

    c. La fe es una fuerza que
    debe ser canalizada en orden a conseguir el objeto
    anhelado.

    El me dijo, "Mi pueblo hace otra cosa por cuya
    razón no puedo multiplicarles su dinero. La
    mayoría de ellos ofrendan sin pedirme un resultado
    específico, no esperan nada a cambio de su
    ofrenda o regalo. John, la multiplicación de dinero que yo
    le devuelvo al dador siempre va acompañada de un milagro.
    Todos los milagros operan por fe. Cuando mi pueblo da sin esperar
    nada, no se están moviendo en fe" J Avanzini, John. 30, 60
    Ciento por uno. Fort Worth, Tx.: His Publishing Company,
    1989

    Esta afirmación de la Teología de la
    Prosperidad es parcialmente verdadera como casi todo en esta
    teología, el asunto en que se queda limitada y atrapada es
    en el comercialismo relacional con Dios que riñe con el
    fundamento Bíblico de la sujeción a la soberana
    voluntad divina, en donde la fe no es esa fuerza
    mágica para lograr metas de estatus socioeconómico
    sino la energía disponible por Dios para su Gloria y la
    extensión de su Reino de Buenas Nuevas de Amor.

    Una lectura
    sincera y completa del Capítulo 11 de la carta a los
    Hebreos es suficiente para descubrir esta verdad y evidenciar la
    parte vulnerable de esta teología que trata de inducir la
    fe cristiana en una filosofía de la facilidad, en donde la
    lucha real del cristiano, se sustituye por el rito mágico
    que lo exima de la conflictividad poniéndose así al
    margen del mandato bíblico, "porque aún no
    habéis resistido hasta la sangre
    combatiendo contra el pecado" Heb.12,4.

    d. La voluntad de Dios es que sus hijos prosperen
    económicamente.

    "Uno de los pasajes bíblicos más mal
    interpretado por los maestros del evangelio materialista es
    3ª de Juan 2. "Amado, yo deseo que tú seas prosperado
    en todas las cosas, y que tengas salud, así como
    prospera tu alma". Dicen que esto es la voz de Dios, quien
    principalmente desea sus hijos sean prosperados materialmente.
    Esta salutación es usada como un principio de
    aplicación universal para todos los cristianos, en la
    cual, supuestamente Dios está dando a conocer su voluntad
    de que todos sean ricos y sanos. Pero, ¿Es Dios quien
    habla? Lamentablemente no. Estas son las palabras que el
    apóstol Juan dirige a Gayo, su colaborador. Y lo que Juan
    desea para su amigo es que tenga éxito
    en las actividades que emprenda, no que se convierta en un
    magnate". Impactos del Evangelio de la Prosperidad, Juan Vidal,
    Chile
    99.Internet.

    Lo que la Teología de la Prosperidad anuncia como
    su mejor propaganda es
    también una verdad cortada por la mitad. La voluntad de
    Dios es eso y mucho más que incluye el amor, el
    sacrificio, la renuncia y la vocación
    profética.

    El apóstol Pedro insiste, en cuál es el
    motivo de las doctrinas incompletas de las cuales según
    varias epístolas advierten de que hay que cuidarse : "y
    por avaricia harán mercadería de vosotros con
    palabras fingidas…" 2Pedro 2, 3,.

    Ese es el mismo Pedro,que en su primera carta ha
    advertido que parte de la voluntad de Dios consiste en pasar por
    pruebas que
    nada tienen que ver con prosperidad económica:

    "De modo que los que padecen según la voluntad de
    Dios, encomienden sus almas al fiel Creador y hagan el bien" I
    Pedro 4,19, y coincidiendo con la enseñanza paulina de
    cuál es la Voluntad Divina por excelencia:"Pues la
    voluntad de Dios es vuestra santificación … I Tes
    4,3.

    Las historia de los mártires, en sociedades
    imperiales, totalitarias, dictatoriales como en los sistemas
    fascistas, comunistas y sus diabólicas variantes, no
    fueron un buen retrato para el anuncio publicitario de esta
    Teología de la Sorpresa. Por eso la recomendación
    del autor de Hebreos sigue siendo válida cuando nos
    advierte en el versículo 9 del cap.13: "no os
    dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas;
    porque buena cosa es afirmar el corazón
    con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que
    se han ocupado en ellas".

    Partes: 1, 2

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