INTRODUCCION
Como todos sabemos no hay un único modelo de
integración ni un único modelo de
libre
comercio. Siendo esto así, este ensayo quiere
dar a conocer de qué manera es posible asumir pactos o
acuerdos bilaterales de libre comercio sin
dejar de lado el espíritu integrador. Es el deseo de la
que escribe estas líneas, dejar en claro que nuestro
país necesita abrir puertas a fin de darse nuevas
oportunidades, sin embargo se debe considerar también que
siendo los Tratados de Libre
Comercio acuerdos y por lo tanto leyes entre las
partes que lo suscriben, estos acuerdos no deben encontrarse
disociados con la realidad, de lo contrario lejos de alcanzar
crecimiento sostenido, ahondaríamos en mayor desempleo y
aumento de la
pobreza.
Sirvan estas líneas para trasmitir tanto mis
inquietudes y puntos de vista así como las opiniones, a
favor y en contra, de otras personas referidas a que el interés en
las negociaciones llámese Tratado de Libre
Comercio o Acuerdo de Cooperación Económica u
otro término, no radica exclusivamente en obtener un pacto
con un país específico sino que el proceso mismo
de negociación debe poner de relieve la
realidad actual de cada país (en primer lugar), así
como la preparación y previsión para afrontar y
poner en práctica el convenio (en segundo lugar). De lo
contrario estará destinado al fracaso, conllevando ello
mayores índices de desempleo y pobleza, tal como lo
señalara anteriormente.
DESARROLLO
TLC son las iniciales o la abreviatura con que se conoce
un Tratado de Libre Comercio. Se trata de un convenio entre dos o
más países a través del cual éstos
acuerdan unas normas para
facilitar el comercio entre ellos, de tal manera que sus productos y
servicios
puedan intercambiarse con mayor libertad.
En un Tratado de Libre Comercio se incluyen muchos
temas, teniendo en cuenta diversos aspectos que pueden afectar el
comercio entre los países que lo firman, siempre con el
objetivo de
facilitar el intercambio comercial y siempre respetando los
derechos y
principios
consagrados en la Constitución o marco legal de cada Estado.
¿POR QUÉ SE BUSCA FIRMAR
TRATADOS DE LIBRE COMERCIO?
Básicamente, para poder vender
los productos y servicios en el exterior en mejores condiciones,
sin pagar impuestos
(aranceles) y
sin estar sometidos a otro tipo de barreras.
El mercado nacional
no es suficiente para impulsar el crecimiento del país y
por eso se debe buscar mercados en los
demás países. En la medida en que se exporte
más, la economía nacional crecerá, se
crearán nuevos puestos de trabajo y
mejorarán los ingresos promedio
de todos los habitantes, lo que generará a su vez una
mayor demanda para
quienes abastecen el mercado nacional.
Una economía más fuerte implica
también mejores servicios básicos, de salud y educación para la
población más vulnerable.
En el caso del Tratado de Libre Comercio con los
Estados
Unidos, éste significa poder ingresar y vender
libremente los productos peruanos al mayor mercado del mundo, con
una población con gran poder de compra, por lo que es una
oportunidad que vale la pena aprovechar.
El Tratado de Libre Comercio se negocia entre Estados
soberanos e independientes, en pie de igualdad. Se
hacen concesiones mutuas, pero se busca siempre defender y sacar
adelante los intereses nacionales. A pesar del mayor peso
económico de Estados Unidos frente a Perú,
jurídicamente somos sujetos equivalentes y como tales
negociamos. Y si bien sabemos que el Tratado de Libre Comercio es
beneficioso para países como el nuestro también es
verdad que este Tratado de Libre Comercio sólo es una
parte de la receta, pero no toda. El Tratado de Libre Comercio
solamente no es suficiente para incentivar el crecimiento de la
economía peruana, pero sí es una herramienta
fundamental para lograrlo, la cual debe unirse a otros programas y
estrategias para
mejorar nuestra infraestructura productiva, aumentar la competitividad, y controlar y hacer más
eficiente el gasto
público. El objetivo es llevar al país a
aumentar las tasas de crecimiento anuales que permitan disminuir
sustancialmente el desempleo, aumentar el gasto social y mejorar
la calidad de
vida de todos los peruanos. La esperanza en la firma de un
Tratado de Libre Comercio es que genere oportunidades para todos
los peruanos, sin excepción, y contribuya a crear empleo y a
mejorar el desempeño de la economía nacional.
Inicialmente claro está beneficiaría a los sectores
exportadores porque podrán vender sus productos y
servicios, en condiciones muy favorables, en el inmenso mercado
estadounidense. Pero no sólo a los exportadores.
También a todos los demás productores nacionales
porque al aumentar las exportaciones se
incrementa el empleo, aumenta el ingreso promedio de las personas
y la gente va a tener mayor capacidad para consumir lo que se
produce en el país. Igualmente se beneficiará la
población más vulnerable porque, además de
que gozará de las nuevas oportunidades que brinda una
economía fortalecida, podrán financiarse más
programas de carácter social que hagan realidad los
derechos consagrados en la Constitución. Además se
debe tener en cuenta que los Tratado de Libre Comercio
sólo se negocian temas de intercambio comercial y de
estímulo y protección de las inversiones, y
otros relacionados, como la protección de la propiedad
intelectual, pero NO SE NEGOCIAN temas que no están en
el ámbito del comercio, como la seguridad
nacional, la soberanía y la integridad territorial. El
Tratado de Libre Comercio lo negocian Estados soberanos y es, de
por sí, un ejercicio de soberanía. En él se
regulan aspectos del comercio entre los países pero no se
entregan concesiones que pongan en peligro la soberanía ni
mucho menos la identidad
cultural del país ni la de sus grupos.
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