Discurso de Thomas Macaulay sobre la intervención del Estado en la educación del pueblo
Título original: DISCURSO SOBRE
LA INTERVENCIÓN DEL ESTADO EN LA
EDUCACIÓN DEL PUEBLO
ABSTRACT
El presente trabajo es un
análisis y comentario acerca de Thomas
Macaulay y su Discurso sobre la intervención del Estado en
la
Educación del Pueblo
A-
THOMAS BABBINGTON MACAULAY. INTERVENCIÓN EL ESTADO EN
LA EDUCACIÓN DEL PUEBLO (Discurso en la Cámara
de los Comunes, 19.04.1847)
B.1 – SÍNTESIS
BIOGRÁFICA
Primer Barón Macaulay, nació en Leicestershire
el 25 de octubre de 1800 y murió el 28 de diciembre de
1859. Poeta, historiador y político del Partido Whig,
antiguo nombre del Partido Liberal Británico. Fue un
niño superdotado que no dio muestras de saber hablar en
sus primeros años de vida, debido a un carácter singular. En 1826 obtuvo el
título de abogado. Inició su carrera política y en 1830
entró en el Parlamento. Se destacó por una serie de
discursos a
favor de la reforma parlamentaria, en los cuales atacó
normas como la
exclusión de los judíos.
Intervino en el proyecto de
Ley para la
Reforma Electoral y defendió el de abolición de la
esclavitud.
Fue entre 1834 y 1838 miembro del Consejo Supremo de la India.,
ocupándose del Código
Penal Indio. También trató el tema de los derechos de
autor, siendo su posición, con ligeras modificaciones,
la base del sistema legal
anglosajón por décadas. Fue diputado por
Edimburgo, Secretario del Ministerio de Guerra. En
1857 es nombrado Barón Macaulay, pero su salud le impidió
asistir frecuentemente a la Cámara de los Lores.
Murió sin poder culminar
su obra maestra, Historia de Inglaterra.
B.2 – EL LIBERALISMO
Corriente ideológica típica (fundamentalmente de
la primera mitad) del Siglo XIX, es producto de
la
Ilustración y de la Revolución
Francesa en su inicio, cuando fue dirigida por la
burguesía, siendo por lo tanto bandera política de
esta clase social
europea, oponiéndose a la monarquía absoluta y a la democracia
jacobina. Opuso los derechos naturales de los
ciudadanos frente a los privilegiados del Antiguo régimen,
y las ideas de libertad e
igualdad a los
principios
absolutistas de la autoridad y la
jerarquía.
El liberalismo no
es una posición originariamente democrática, pese a
que en Inglaterra y Francia
evolucionó hacia este tipo. La burguesía liberal
aspiró a desempeñar un papel político
importante basado en su hegemonía económica sobre
la nación.
Consideró como régimen político ideal a la
monarquía constitucional con base en el sufragio
censitario.
Es una ideología que se acentúa sobre las
ideas de la libertad y los derechos naturales, y es aplicada en
variados campos de la actividad humana, político, social,
religioso, etc., siendo los dos primeros los que alcanzaron mayor
desarrollo
doctrinario y que tuvieron más influencia en as corrientes
de ideas del Siglo XIX.
La Burguesía liberal mantuvo con los absolutistas y los
partidarios de la restauración, a la caída
del Imperio napoleónico, del Antiguo Régimen, lucha
armada, aunque su lucha fue siempre de tipo
ideológico.
Para poder salvaguardar los derechos políticos del
ciudadano, la única vía era limitar la autoridad
del soberano y del Estado. Y para mantener vigentes estas dos
cosas, era imprescindible la existencia de una Constitución, que sería
garantía de aplicación de aquellos derechos y de la
limitación del poder.
Otro objetivo
primario era la participación de la burguesía en
la
administración del Estado y en la redacción de las leyes a
través de asambleas legislativas, ya que los liberales
estaban convencidos que debían tener protagonismo en la
vida política del país, dado su papel predominante
en lo económico.
Aquí es importante destacar que el Siglo XIX es el
siglo de ascenso de esta clase social y que el liberalismo es su
ideología.
Se pueden distinguir matices dentro del pensamiento
liberal de esta época; el liberalismo monárquico –
constitucional y el monárquico – parlamentario (el primero
da autoridad máxima al monarca, pero reclama
Constitución y el segundo aspira al predominio
político de las asambleas legislativas a las cuales
pretendían subordinar incluso a los Ministros del Poder
Ejecutivo). No obstante, ambas fracciones son partidarias de
un régimen electoral basado en la riqueza (censitario),
otorgando derecho a voto a quienes pagaban ciertos impuestos, y
excluyendo a la masa popular de estos beneficios que su programa
reclamaba. El pensamiento queda bien claro en la frase "Ni
Napoléon ni Robespierre" (ni poder absoluto ni
gobierno
democrático), de Benjamín Constant, pensador
francés de esta época.
Página siguiente |