- Introducción
- Problema
científico - Diseño
metodológico - Temáticas
que conforman el programa de actividades para desarrollar
hábitos alimentarios sanos en las
embarazadas - Resultados
- Análisis
y discusión - Conclusiones
- Recomendaciones
- Referencias
bibliográficas - Anexos
Título original: Intervención
educativa en embarazadas anémicas en el municipio
Florida
Pensamiento:
"El médico será algo más que alguien
que atiende a uno que se enferma y va al hospital, sino que
tendrá un papel especial en la medicina
preventiva",.,"En fin un guardián de la salud"
Fidel A. Castro Ruz
Resumen
En la presente investigación se realiza una
intervención educativa consistente en proponer una dieta
saludable con apoyo de los suplementos dietético en
gestantes que presentaron anemia en el
primer trimestre del embarazo en el
municipio Florida de Enero a Octubre del 2008. El universo
estuvo constituido por 638 embarazadas y la población por 57 pacientes que presentaron
anemia de este
se extrajo una muestra de 24
gestantes que padecían de anemia en el primer trimestre
del embarazo. Se desarrolló la intervención
educativa donde predominaron las gestantes multíparas y
las normo peso en edad fértil entre 20 y 34 años
con el bachiller terminado, logrando que 20 de estas gestantes
llegaran al final del embarazo con una hemoglobina por encima de
110g/l, las mujeres que no habían presentado historia de anemias
anteriores fueron las que predominaron, así como las que
no habían padecido de anemia en los embarazos anteriores.
Los recién nacidos con pesos adecuados ocuparon el mayor
número de casos. Más de la mitad de las embarazadas
tomaban los suplementos dietéticos al inicio del estudio y
al final del mismo logramos que todas los ingirieran y
adquirieran conocimientos nutricionales.
Introducción
Estudios internacionales describen que la cuarta parte de la
población mundial tiene anemia, la cual en la mitad de los
casos es causada por ferropenia o carencia de hierro. En el
grupo de las
embarazadas la frecuencia de anemia a través del tiempo se ha
mantenido constante, a pesar de la suplementación
profiláctica y la atención priorizada que recibe este grupo
en el país, por lo cual recientemente se adoptó la
estrategia de
extender las medidas preventivas a todas las mujeres en edad
fértil. La deficiencia de hierro es la carencia
específica de nutrientes más frecuente en la
población cubana, siendo la anemia por esta causa un
problema de salud en el país, por lo cual el Estado
concebió un proyecto
abarcador para hacia el 2010 disminuir significativamente la
incidencia de este mal. De acuerdo con los reportes de la
Organización Mundial de la salud el 30 % de todas las
mujeres embarazadas sufren deficiencia de hierro.(1,2)
Al inicio de la década de los 90 en nuestro país
se registró un incremento en la proporción de
embarazadas que presentaban anemia. Se estimó en 1994 la
presencia de anemia entre el 25 y el 35 % de las mujeres en edad
fértil y en 1996 se reporta a nivel nacional el 25 % de
anémicas al inicio del embarazo.La anemia es la más
frecuente de las enfermedades que pueden
coincidir con el embarazo o ser producidas por este, ya que las
necesidades para el desarrollo del
feto y la
placenta, aumentan el consumo de
hierro elemental. La anemia del embarazo no es fácil de
definir puesto que durante dicho estado se
produce un aumento sustancial del volumen total de
sangre y se
incrementa la producción eritrositaria.(3)
Para asegurar un aporte adecuado de oxigeno y
nutrientes al feto, placenta, útero y tejido mamario, el
estado de gravidez requiere de ajustes fisiológicos y
bioquímicos que incluyen alteraciones significativas del
volumen plasmático y de la masa eritrositaria pero hay un
aumento desproporcionado del volumen de plasma circulante que da
como resultado hemodilución. El aumento del volumen
plasmático llega a un promedio de 1000ml, necesario para
llenar la vascularización expandida de los tejidos maternos
hipertrofiados y la circulación feto- placentaria. El
Grado de aumento del volumen plasmático se correlaciona
con el tamaño del feto. También hay un aumento de,
masa eritrositaria circulante, en un promedio de 300 a 400ml,
para el feto único. (4)
La hemodilución consecuente del aumento promedio de
solo 300ml del volumen eritrositario en comparación con
los 1000ml del volumen plasmático, da como resultado una
disminución promedio del hematocrito de 41 a 37,5% y de la
hemoglobina de 140 a 110g/l de sangre y el hematocrito menor del
33% durante el 3er trimestre de la gestación. Por lo
tanto, se considera como anemia durante el embarazo cuando la
cifra de hemoglobina está por debajo de 110g/l de sangre y
el hematocrito menor del 33% durante el tercer trimestre de la
gestación. (5)
Página siguiente |