El profesor tutor
y el nuevo modelo
pedagógico en la Sede Fructuoso Rodríguez de
San Antonio de
los Baños
Resumen
Las nuevas concepciones de la Educación en
Cuba, en los
últimos años ha tomado una nueva
significación para el estudiante y para los profesores,
los cuales poseen formación universitaria, pero no
pedagógica, esto trae consigo que un ingeniero, un
médico entre otros tienen que trasmitir haciendo uso de la
didáctica que no aprendieron en su
formación. Asumir la tarea de profesor tutor es un reto
para estos profesionales máxime cuando tienen que dirigir
el proceso de
forma individualizada y tutorar las investigaciones
que los estudiantes realizan para alcanzar su titulación.
El propósito de la autora es dar de forma clara herramientas a
los mismos para que desde su puesto de trabajo
realicen actividades de aprendizaje sobre
la
investigación que contribuyan al éxito
de su labor como tutor.
Introducción
La presencia de la universidad en
cada municipio se ha convertido en un espacio importante de
realización personal y
colectiva, lo que ha demostrado que Cuba tiene una fuerza
profesional altamente preparada lo que hace posible utilizar de
manera racional y óptima los recursos materiales y
humanos disponibles en cada municipio en función de
la educación
y la elevación cultural del pueblo.
La formación profesional en las Sedes
Universitarias ha exigido una concepción y práctica
pedagógica renovadora basada en la auto evaluación
en la que se potencia la
flexibilidad del currículum de formación, el
sistema de
relaciones e intercambio permanente, la respuesta educativa
individualizada en función de las necesidades y
potencialidades de cada estudiante y responsabilidad de la educación
directamente compartida con la familia, el
profesorado, la institución y la comunidad en
general.
En la formación profesional que se realiza en las
Sedes Universitarias municipales adquiere una relevante
significación el papel del profesor tutor ya que ellas se
encuentra concebido como estructura el
director, el jefe de colectivo de carrera, los profesores que
imparten las diferentes asignaturas y los profesores tutores
considerados sin lugar a dudas una pieza clave del proceso de
formación integral de los estudiantes ya que en este
proceso formativo no solo intervienen los docentes sino
también el entorno sociocultural, socio laboral, la
comunidad y
las familias.
El modelo pedagógico que se está aplicando
está constituido por tres compontes fundamentales: el
sistema de actividades presenciales, el estudio independiente y
los servicios de
información científico
técnica y docente.
Por lo antes expuesto se puede afirmar que la actividad
del profesor tutor tiene como propósito asesorar y guiar
al estudiante durante sus estudios, para contribuir así a
su formación general integral lo que significa que esta se
produce no sólo en la relación tutor-tutelado, sino
que integra el sistema de relaciones que se establecen a partir
de la asesoría académica e investigativa por parte
del profesor y de otros especialistas, los servicios
especializados de orientación así como las
actividades de extensión universitaria por el vinculo que
se establece con las propias actividades del
territorio.
El papel del profesor tutor se personaliza cada vez
más en el marco de este modelo pedagógico por eso
se considera la actuación de los mismos como
transformadora y centrada en el auto aprendizaje dirigido a un
estudiante o a un reducido grupo de ellos
para que los mismos se apropien de un sistema de saberes y
valores que
determinan la posición vital, activa y creativa en su
desempeño profesional, personal y
social.
Lo planteado hasta aquí permite definir que el
tutor de las sedes universitarias debe ser un educador
responsables cuyos modos de actuación se identifican con
orientar la formación del estudiante promoviendo el
crecimiento personal y de desarrollo de
la autodeterminación por la vía de la ciencia ya
que hasta hace pocos años la concepción que
existía sobre el desarrollo
humano se sustentaba básicamente en indicadores de
orden económico, hoy resulta incuestionable que el
desarrollo de la vida humana está en función de la
vinculación de las necesidades espirituales para alcanzar
la plenitud en su quehacer cotidiano.
La educación constituye un satisfactor de
necesidades humanas, por eso según reportes de la UNESCO
debe fundirse en tres funciones
primordiales: la adquisición, actualización y
utilización de los conocimientos. Esto significa que en
Cuba el sistema
educativo redefina sus fines y esto se ha ido logrando a
través de las diferentes transformaciones desde la
Educación Infantil hasta la Enseñanza Superior, para lo que es de gran
importancia que el profesional que dedique sus esfuerzos en las
universidades a tutorar a los estudiantes tiene que ser un eterno
investigador de las necesidades de sus
estudiantes.
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