La Lumen Gentium (LG) es una de las tres constituciones
contenidas en el concilio vaticano II, y es conocida con el
nombre de constitución dogmatica sobre la Iglesia, fue
promulgada por el Papa Pablo VI el 21 de Noviembre de
1964.
CAPITULO 1 EL MINESTERIO DE LA IGLESIA
La voluntad de Dios fue enviar a su Hijo
Unigénito; convirtiéndose en la imagen de Dios
invisible, para que con su obediencia rescatara la humanidad.
Configurado a su Santa Iglesia desde el origen de mundo. Cristo
Inaugura su Santa Iglesia o reino de los cielos; manifestado por
la palabra, obras y Cristo. Y en el pan eucarístico
hacemos parte del cuerpo de la Iglesia siendo por supuesto la
cabeza el mismo Cristo, es decir la Iglesia esta compuesta de dos
partes una divina y otro humano
LA VOLUNTAD DEL PADRE ETERNO SOBRE LA SALVACIÓN
UNIVERSAL
Dios no solo crea el hombre si
no todo el universo, para
dar a los hombres la gracia de participar en la vida divina,
dando a su Hijo como ayuda por el pecado,
Él quien es imagen de Dios invisible, primogénito
de toda criatura, que configuró a su Santa Iglesia desde
el origen del mundo.
LA MISIÓN Y OBRA DEL HIJO
Cristo inaugura en la tierra su
Iglesia o el reino de los cielos. El como parte del misterio
efectúa la redención con su obediencia que se
renueva en el altar con su sacrificio y la obra de nuestra
redención, donde el pan eucarístico constituye a la
Iglesia como un solo cuerpo en Cristo.
EL ESPÍRITU, SANTIFICADOR DE LA
IGLESIA
Fue enviado el Espíritu
Santo en el día de pentecostés para que
continuamente santifique a la iglesia, logrando que los fieles se
acerquen por Cristo al Padre en un mismo espíritu. El
Espíritu Santo habita en la iglesia y en los corazones de
los fieles y que con la palabra de Dios rejuvenece la
Iglesia.
EL REINO DE DIOS
Comienza con la predica de la buena nueva, este reino se
manifiesta por la palabra, por las obras y por la presencia de
Cristo. La Iglesia recibe la misión de
anunciar el Reino de Cristo y establecerlo en medio de todas las
gentes, constituyendo el germen y el principio del reino de
Dios.
LAS VARIAS FIGURAS DE LA IGLESIA
Las Sagradas Escrituras utilizan varios figuras para
identificar y caracterizar la Iglesia; es como; redil, grey
(Rebaño), campo de labranza de Dios, edificación,
Jerusalén de arriba y madre nuestra.
LA IGLESIA, CUERPO MÍSTICO DE CRISTO
Como participamos de un mismo pan eucarístico
somos parte también de un solo cuerpo místico por
que nos unimos en Cristo, así todos quedamos hechos
miembros del mismo cuerpo.
LA IGLESIA, VISIBLE Y ESPIRITUAL A UN TIEMPO
La Iglesia esta compuesta por dos elementos; uno divino
y otro humano, la sociedad con
los fieles, la comunidad terrena
y espiritual, son una solo iglesia, que unida sirve como
incremento de la Iglesia de Cristo, esta es una solo Iglesia que
confesamos que es una, santa, católica y
apostólica, la que fue confiada a Pedro y los demás
apóstoles para su difusión y gobierno en
común unión con El, que la erigió como
columna y fundamento de la verdad y llamada a comunicar los
frutos de la salvación de Cristo.
CAPITULO 2 EL PUEBLO DE DIOS
Dios pues establece un nuevo pacto con su pueblo pero
esta vez en el Espíritu, para hacer su pueblo profeta,
sacerdote y rey. Estableciendo el sacerdocio de los fieles y
ministerial, guiados por el Sagrado Magisterio de la Iglesia
participamos todos de un mismo testimonio de vida, de fe.
Participando de los sacramentos, la oración, donde cada
uno se enriquece con los dones del Espíritu Santo. Todos
hacemos parte de una sola Iglesia, católicos o no y
reconoce la salvación de los no cristianos que practican
la rectitud y la justicia.
NUEVO PACTO Y NUEVO PUEBLO
Dios establece un nuevo pacto con el pueblo de Israel; en
Cristo, es decir el nuevo testamento en su sangre, no en la
carne si no en el agua y el
Espíritu Santo, constituyendo un pueblo santo.
EL SACERDOSIO COMÚN
El sacerdocio común esta compuesto por;
Sacerdocio de los fieles y Sacerdocio ministerial o
jerárquico. El sacerdocio ministerial en virtud de la
sagrada potestad que posee, forma y dirige al pueblo sacerdotal,
efectuando el sacrificio eucarístico en la persona de
Cristo, el sacerdocio de los fieles se ejerce con la
repetición de los sacramentos, con la oración y
acción
de gracias.
EL EJERCICIO DEL SACERDOCIO COMÚN EN LOS
SACRAMENTOS
Los fieles; incorporados a Iglesia por el bautismo,
quedan destinados por el carácter al culto de la religión cristiana,
teniendo el deber de confesar su fe que recibieron de Dios por
medio de la Iglesia. En el sacramento de la confirmación
se enriquecen con la fuerza del
Espíritu Santo para difundir y establecer su fe con su
palabra y sus obras como verdaderos testigos de Cristo.
Participando del sacrificio eucarístico, fuente y culmen
de toda vida cristiana; ofrecen a Dios la Víctima divina y
así mismos juntamente con ella. En el sacramento de la
penitencia obtienen el perdón de sus ofensas hechas a Dios
y a la Iglesia. Con la sagrada unción de los enfermos y
con la oración de los Sacerdotes, la Iglesia encomienda al
Señor a los que sufren para que los alivie y los salve. En
el Orden Sacerdotal quedan destinados en nombre de Cristo para
apacentar la Iglesia. En el sacramento del matrimonio por el
que participan de la unión de Cristo con la Iglesia,
ayudándose mutuamente a santificarse en la vida conyugal,
en la procreación y en la educación de los
hijos de Dios.
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