- Introducción
Descripción
La auténtica comunicación de la palabra de
Dios
El Predicador, instrumento de
comunicación
Fundamentos de la educación bíblica
cristiana
Técnicas y métodos de la enseñanza
bíblica
Preparación y presentación de la palabra de
Dios
Directrices para escribir un tema
La motivación y su implicación con el
aprendizaje
Actualización
Discusiones
Conclusiones
Bibliografía
Sólo conozco dos tipos de personas razonables:
las que aman a Dios de todo corazón porque le conocen, y
las que le buscan de todo corazón porque no le
conocen.
Blas Pascal
Una obra presentada a Atlantic
Internacional University, para optar al título de
Licenciatura en Inglés.
Resumen
La comunicación es un don de
Dios para la humanidad, a fin de que viva una vida en
comunión en las diferentes sociedades que se desenvuelve,
las cuales tienen diferentes culturas. Tal es que Dios primero
creó al hombre a su imagen y semejanza, pero como el
pecado llegó a
través de su misma desobediencia, nos dio a su Hijo
Unigénito Jesucristo para que muriera en la cruz y nuestros
pecados fueran lavados y perdonados, ofreciéndonos el
privilegio de ser hijos de Dios si creemos en que Cristo
murió por nosotros y resucitó. Este es el mejor ejemplo
de comunicación eficaz, donde Dios nos manifiesta su
amor.
Enseñar La Palabra de Dios es un mandato que el
Señor nos dio a través de Mateo 20:19-20 "Por tanto id
y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos
en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo;
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado; y he aquí yo estaré con vosotros todos los
días hasta el fin del mundo"1. Pero
esto sólo lo podemos hacer con los dones que el
Espíritu Santo da a quien Él quiere y con su dirección. De lo
contrario, nuestra enseñanza no
producirá arrepentimiento genuino en el oyente, no
producirá santidad en el creyente, ni una relación
íntima de sus hijos con Dios.
En La Biblia tenemos las maneras de cómo
enseñó Jesús y al educador le es necesario imitar
al Maestro de maestros, para poder brindar un servicio al Señor con
efectividad.
Es necesario, pues, que los ministros llamados por Dios
a educar en La Palabra, conozcan con claridad la importancia y lo
que es la verdadera enseñanza de Las Sagradas Escrituras y
sean capacitados por el Espíritu Santo. Efesios 4:11 "Y
él mismo constituyó a unos apóstoles; a otros,
profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros"1.
Que entiendan que la base de toda enseñanza bíblica
está en llevar al oyente a una relación íntima con
Dios, y darles seguimiento para que esta relación permanezca
hasta el fin de sus días.
De ahí que el proceso de
enseñanza-aprendizaje de La Palabra de Dios
consiste en 1) conocer La Palabra, 2) comprenderla, 3) abrirle
nuestro corazón para que ella misma nos convenza de pecados
y nos lleve a un verdadero arrepentimiento, pudiendo mantenernos
constantemente en una experiencia con Dios y en obediencia total
a su Palabra.
Es necesario, además, superar los factores que
afectan este proceso, los que tienen que ver con el maestro, el
alumno y el ambiente en que se
efectúa dicho proceso; así, producirá un cambio de actitudes de parte de todos
los que participan en él, cambio que se da principalmente
por medio de la conversión de la persona a Jesucristo, al cambiar
nuestros conceptos mentales y al vivir una vida en sujeción
a los mandatos de Dios.
Introducción
El tema Comunicación, Enseñanza y Aprendizaje
de La Palabra de Dios, que nos ocupa en esta obra, ha sido para
mí de mucha bendición por cuanto ha afirmado mis
conocimientos acerca de las Sagradas Escrituras, instándome
-entre otras cosas que no dejan de ser más importantes- a
cumplirla totalmente para luego poderla enseñar. Este
también es el resultado que tú como Educador,
habrás de alcanza al terminar de leerlo.
Página siguiente |