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Desarrollo de la materia Educación ambiental (página 4)



Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6

Llamamos residuo a cualquier tipo de material que esté
generado por la actividad humana y que está destinado a
ser desechado.

6.1.6 Cadena Trófica

Red alimentaria en la cual organismos vivos se relacionan
mediante el proceso
alimenticio, necesario para su sustento.

6.1.8 Ecosistema

El concepto de
ecosistema es
especialmente interesante para comprender el funcionamiento de la
naturaleza y
multitud de cuestiones ambientales que se tratarán con
detalle en próximos capítulos. 

Hay que insistir en que la vida humana se desarrolla en
estrecha relación con la naturaleza y que su
funcionamiento nos afecta totalmente. Es un error considerar que
nuestros avances
tecnológicos: coches, grandes casas, industria,
etc. nos permiten vivir al margen del resto de la biosfera y el
estudio de los ecosistemas,
de su estructura y
de su funcionamiento, nos demuestra la profundidad de estas
relaciones. 

El ecosistema es el nivel de organización de la naturaleza que interesa
a la ecología. En la naturaleza los
átomos están organizados en moléculas y
estas en células.
Las células forman tejidos y estos
órganos que se reúnen en sistemas, como el
digestivo o el circulatorio. Un organismo vivo está
formado por varios sistemas anatómico-fisiológicos
íntimamente unidos entre sí. 

6.1.9 Bio-Degradable

Sustancia que se transforma en otra, no contaminante, por la
acción
de organismos presentes en el medio.

6.1.10 Biósfera

La biosfera es la delgada capa de la tierra y su
atmósfera
que cubre la superficie del planeta, y en la que viven todos los
seres vivos. Es una zona relativamente delgada que está
formada por los océanos, lagos y ríos, la tierra firme y
la parte inferior de la atmósfera, que es capaz de
mantener la vida en el planeta.

6.1.11 Sustentabilidad Ambiental

Se refiere a la
administración eficiente y racional de los recursos
naturales, de manera tal que sea posible mejorar el bienestar
de la población actual sin comprometer la
calidad de
vida de las generaciones futuras.

6.1.12 Biodiversidad

Solbrig (1991) define la diversidad biológica o
biodiversidad como la propiedad de
las distintas entidades vivas de ser variadas. Así cada
clase de
entidad (gen, célula,
individuo,
comunidad o
ecosistema) tiene más de una manifestación. La
diversidad es una característica fundamental de todos los
sistemas biológicos. Se manifiesta en todos los niveles
jerárquicos de las moléculas a los ecosistemas.

6.2 DESARROLLO DE
TEMAS AMBIENTALES

6.2.1 Concepto de Medio
Ambiente

El concepto de Medio Ambiente
resulta ser de por sí bastante intuitivo.

Tradicionalmente ha sido definido de manera un tanto
genérica, como "entorno natural en el que habita cualquier
organismo vivo" o, con una visión tremendamente
antropocéntrica, como "los problemas
ambientales que sufre la humanidad sus bienes".

A medida que se ha ido estudiando y profundizando, el
verdadero significado del término Medio Ambiente se ha ido
ampliando y concretando. Hoy,  se  considera
 Medio  Ambiente  al  conjunto  de
 valores
 naturales,  sociales  y culturales
 existentes  en  un  lugar  y  en
 un  momento  determinado,  que
 influyen  en  la vida  del  hombre  y
 en  las  generaciones  futuras.
 
Es  decir,  el  concepto  de
 Medio Ambiente engloba no sólo el medio
físico (suelo, agua,
atmósfera), y los seres vivos que  habitan  en
 él,  sino  también  las
 interrelaciones  entre  ambos  que  se
 producen  a través de la cultura, la
sociología y la economía.

En 1972 durante la Conferencia de
las Naciones Unidas
sobre medio ambiente, celebrada en Estocolmo, se definió
como Medio Ambiente, como el conjunto de componentes
físicos, químicos, biológicos y sociales
capaces de causar efectos directos o indirectos, en un plazo
corto o largo, sobre los seres vivos y las actividades
humanas.

6.2.2 Medio Ambiente y calidad de
vida

¿Y a qué denominamos "calidad de vida"?
Habitualmente la gente usa esta expresión sin saber muy
bien de qué está hablando. «Esto es calidad
de vida», se dice cuando alguien ha conseguido una
ocupación en la que trabaja poco y cobra bien, o si se
tienen muchos días de vacaciones, etc. Pero,
¿qué significa formalmente este concepto?,
¿cómo se define? Bien, el término comienza a
utilizarse en los años 60, coincidiendo con la creciente
preocupación por el deterioro del medio ambiente. El
interés
por conocer el bienestar humano y las consecuencias de la
industrialización provocan la aparición, desde el
ámbito de las Ciencias
Sociales, de los primeros indicadores
sobre la calidad de vida, que en su origen contemplaban
fundamentalmente aspectos objetivos, de
índole económica y social.

Posteriormente, fueron incorporándose otros elementos
de carácter subjetivo. Aún actualmente
existe un desacuerdo notorio sobre la definición del
concepto de calidad de vida y los indicadores que requiere.

Autores como Borthwick-Duffy diferenciaban entre tres posibles
conceptualizaciones:

a) las condiciones de vida de una persona;

b) la satisfacción de la persona respecto a tales
condiciones; y

c) la combinación de las dos anteriores.

Felce y Perry añadían una cuarta: la
combinación de las anteriores ponderada por la escala de
valores, aspiraciones y expectativas personales.

En este punto se hace patente el problema que plantean los
paradigmas de
calidad de vida, que incluyen aspectos subjetivos como la
satisfacción personal o las
aspiraciones, variables que
no siempre se ajustan a la lógica
y que dependen de muchos factores. Basta un ejemplo para ilustrar
esta idea: los países industrializados presentan sociedades
plagadas de individuos cada vez más insatisfechos, a pesar
de que tienen todo lo que desean para vivir. A esta
insatisfacción se unen unas aspiraciones ilimitadas de
propiedad, consumo,
disfrute, etc. El caso contrario se da en las sociedades que
todavía no han perdido completamente su modo de vida
tradicional —ante la invasión del modelo
occidental—, donde imperan valores sencillos y se presta
más atención a las cuestiones esenciales de la
existencia humana.

6.2.3 Situación del Hombre en la Naturaleza

La palabra "naturaleza" tiene dos significados fundamentales:
En primer lugar, podemos entender la Naturaleza como el conjunto,
orden y disposición de la realidad material existente,
entendida como un sistema dotado de
leyes propias
al margen de la intervención humana. En este sentido, la
Naturaleza está formada por el conjunto de todos los seres
no artificiales que existen en el universo; y es
cosmos (y no caos), en cuanto es un conjunto ordenado y regulado
por leyes (físicas, químicas,
biológicas…). En segundo lugar, el término
naturaleza también designa la esencia o modo de
ser que determina específicamente a un ser; el conjunto de
caracteres particulares o propiedades que le definen. En este
segundo sentido, cada individuo posee una naturaleza o esencia
que se corresponde con su modo de ser específico.

El hombre es un ser vivo y, como tal, forma parte de la
Naturaleza. El hombre es
un ser natural, cuya naturaleza específica consiste en la
racionalidad, en poseer una inteligencia y
una voluntad libre. Dicha naturaleza
humana es universal y lo coloca en una situación
privilegiada ya que, a diferencia del resto de los seres
naturales, su comportamiento
no está determinado por los instintos y necesidades
naturales sino que, gracias a su voluntad libre, incluso puede
obrar en oposición a los mismos (sacrificio de la propia
vida, huelga de
hambre…). No obstante, en el hombre no existe oposición
entre naturaleza y libertad, ya
que la libertad pertenece a su naturaleza.

Desde sus orígenes, el hombre siempre ha intentado
conocer la Naturaleza, ya que de ello dependía su
supervivencia. El
conocimiento del marco natural, así como su
transformación y aprovechamiento motivó e
impulsó el conocimiento
científico y la técnica. Gracias a su
inteligencia, el hombre ha sabido adaptar la realidad a sus
propias necesidades, ha sido capaz de utilizar la naturaleza y
perfeccionarla acomodándola al modo de ser y necesidades
humanas. Así por ejemplo, el hombre no se ha conformado
con recolectar los frutos que la naturaleza le ofrece, sino que
aprendió a sembrar y cosechar: primero manualmente, luego
ayudado por animales y
finalmente creando máquinas
con esa finalidad. Nuestros sistemas de embalse y
canalización permiten tener agua corriente en lugares en
los que las lluvias son prácticamente inexistentes. El
hombre "usa" la naturaleza para satisfacer sus necesidades, pero
también es cierto que, lamentablemente, muchas veces
"abusa" de ella y acaba destruyéndola: extinción de
especies animales y vegetales, deforestación, contaminación del agua y de la
atmósfera… Que el hombre no sea un ser natural
más, no significa que sea "dueño de la naturaleza"
o que pueda utilizarla de un modo arbitrario o agotar sus
recursos
indiscriminadamente: el hombre no posee derechos absolutos sobre la
naturaleza, sino que debe administrar sus recursos naturales en
un marco de respeto hacia la
realidad natural en sí misma considerada y hacia las
generaciones futuras. Destruir la naturaleza, no respetar su
riqueza, dinamismo y leyes equivale a no respetar al hombre que
ha de vivir de ella y en ella. Cuando no tratamos adecuadamente y
con benevolencia la naturaleza, tampoco nos estamos comportando
nosotros de acuerdo con nuestra naturaleza humana y dignidad.

La ecología no parte de consideraciones éticas,
sino que es la "ciencia que
estudia las relaciones de todos los organismos vivos entre
sí y con el medio físico en lo que se refiere a
producción o intercambio de materia
orgánica". Sin embargo, sus valoraciones sí que
pueden tener un carácter normativo para la conducta
humana.

 

De hecho, la progresiva conciencia de los
peligros que entraña la explotación no equilibrada
de la naturaleza por parte del hombre ha llevado a incorporar los
resultados y métodos de
la ecología a la economía, la
sociología y la política. El hombre
cada vez va tomando una mayor conciencia de la necesidad de
preservar el medio natural. De ahí la importancia
creciente de los movimientos ecologistas. Los problemas
ecológicos son, en el fondo, problemas morales ya que el
bienestar del hombre y la subsistencia de la humanidad dependen
de su solución.

6.2.4 Salud y Medio
Ambiente

Nuevos conocimientos sobre la dispersión de las
enfermedades
infecciosas.

Los científicos han ofrecido al mundo otra buena
razón para proteger el medio ambiente. Han puesto al
descubierto un odioso catálogo de enfermedades infecciosas
que ha reaparecido y prosperado en lugares en los que los
hábitats naturales están alterados o degradados por
explotadores forestales, constructores de carreteras y presas e
invasiones urbanas.

Descripción de la situación.

La repercusión de la actividad humana en el medio
ambiente adopta numerosas formas, muchas de ellas muy divulgadas,
pero los expertos parece que han señalado ahora otro
efecto secundario de esta interacción que tiene repercusiones
directas en la salud de la población.

El Programa de las
Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) advierte de que la
pérdida de bosques, la construcción de carreteras y presas, la
dispersión de las ciudades, la limpieza de los hábitat
naturales para la agricultura y
la minería y
la
contaminación de las aguas costeras están
impulsando condiciones en las que pueden propagarse nuevos y
viejos patógenos, bacterias,
virus y
microorganismos que causan enfermedades. El PNUMA advierte que
los hábitats y paisajes intactos tienden a frenar los
agentes infecciosos, mientras que los hábitats y paisajes
dañados, alterados o degradados cambian el equilibrio
natural, poniendo en marcha la difusión a la
población de enfermedades nuevas o existentes. El PNUMA
señala igualmente las posibles conexiones con el cambio
climático que puede alterar las temperaturas en beneficio
de portadores como los mosquitos o que sobrecargan el medio
ambiente y alteran los hábitats hasta tal punto que las
poblaciones emigran como "refugiados ambientales".

La Organización Mundial de la Salud ha advertido la
aparición de por lo menos 30 nuevas enfermedades en los
últimos dos decenios "que amenazan la salud de cientos de
millones de personas".

6.2.4.1. Enfermedades producidas por el Desequilibrio
Ambiental.

Son enfermedades causadas por la exposición
a ciertos agentes ambientales. El término enfermedad
ambiental designa las enfermedades no infecciosas y las
producidas por la exposición a agentes que escapan al
control del
individuo; esto último excluye los procesos
derivados de hábitos personales como el fumar, y el uso o
abuso de fármacos o drogas como el
alcohol
(véase Alcoholismo).
Las enfermedades laborales relacionadas con la exposición
a diversos agentes en el entorno laboral
constituyen una categoría importante dentro de las
enfermedades ambientales.

Desde un punto de vista histórico, la concepción
del término enfermedad ambiental empezó con el
reconocimiento de las enfermedades ocupacionales, ya que es en el
medio laboral donde la exposición a ciertos agentes suele
ser más intensa y por tanto, más susceptible de
producir enfermedades. Algunos ejemplos de esta circunstancia son
la silicosis, enfermedad pulmonar que afecta a los mineros,
trabajadores de la industria y alfareros por la exposición
al polvo de sílice; el cáncer
de escroto en los deshollinadores, en relación con el
hollín; alteraciones neurológicas en los alfareros
por el uso de productos con
base de plomo o alteraciones óseas en los trabajadores de
la industria de cerillas por la exposición al
fósforo. Muchos de estos procesos captaron la
atención general durante la Revolución
Industrial en el siglo XIX.

6.2.4.2 Causas de las Enfermedades Ambientales

Las enfermedades ambientales son producidas por agentes
químicos, radiaciones, y fenómenos físicos.
Tanto en el medio natural como en el entorno laboral, los efectos
de la exposición dependen mucho de la forma en que se
recibe: las principales vías son la contaminación
atmosférica y la contaminación del agua, los alimentos
contaminados, y el contacto directo con ciertas toxinas. La
sinergia (la
potenciación de dos o más agentes cuando
actúan de forma simultánea) se manifiesta, por
ejemplo, en el aumento de la incidencia de cáncer de
pulmón en los trabajadores expuestos al polvo de asbesto
que además son fumadores. La interacción que se
produce entre distintos agentes químicos en lugares como
basureros o almacenes de
residuos plantea un problema sanitario frecuente y de
consecuencias desconocidas.

Productos químicos.

La industrialización ha supuesto un aumento
espectacular en la exposición a agentes químicos,
algunos de ellos nuevos. Entre éstos destacan productos
inorgánicos como el plomo, mercurio,
arsenio, cadmio y asbesto, o productos orgánicos como los
bifenilos policlorados (PCB), el cloruro de vinilo, o el
pesticida DDT (diclorodifeniltricloroetano). Una peculiaridad de
alguno de estos agentes es la capacidad de facilitar el
desarrollo de un cáncer, como el cáncer de
pulmón y los mesoteliomas relacionados con el asbesto, el
cáncer de hígado por cloruro de vinilo, o las
leucemias relacionadas con la exposición al benceno. La
enfermedad de Minamata, producida por ingerir pescado contaminado
por mercurio, y la enfermedad de Yusho, relacionada con alimentos
contaminados con furanos clorados, son ejemplos de procesos
tóxicos agudos que acaecen fuera del ámbito
laboral.

No se conoce con detalle el efecto perjudicial de la
mayoría de los tóxicos del entorno. La incidencia y
frecuencia de cada enfermedad guardan relación con la
dosis de toxina. Para los efectos crónicos o retardados,
como el cáncer o las alteraciones en los descendientes de
los individuos expuestos, no hay un umbral de dosis seguro por debajo
del cual no se desarrolla la enfermedad. En consecuencia, el
efecto cancerígeno de ciertos agentes ambientales
contaminantes como el DDT o los PCB es de una magnitud
desconocida.

Radiaciones.

Tanto las radiaciones ionizantes como las no ionizantes pueden
producir efectos agudos o crónicos sobre la salud en
relación con la dosis recibida (véase Enfermedad
por radiación). En la actualidad, no se conocen
los efectos de las radiaciones no ionizantes en dosis bajas. Las
dosis altas de radiación ionizante producen enfermedades
agudas por un lado, y efectos retardados, como el cáncer,
por otro. Los trabajadores que por su ocupación se exponen
a rayos X o a
material radiactivo constituyen la población de riesgo. Aunque no
se conocen con detalle los problemas relacionados con las
radiaciones ionizantes a bajas dosis, se ha demostrado la
existencia de alteraciones cromosómicas en los
trabajadores de ciertas industrias.

Agentes Físicos.

Los principales agentes físicos son los traumatismos y
el ruido. Los
traumatismos ocurridos en el lugar de trabajo se
pueden prevenir en la mayoría de los casos; el ruido en el
medio laboral es una de las principales causas de incapacidad
ocupacional ya que puede provocar desde una pérdida de
audición hasta una sordera permanente.

Enfermedades Ambientales.

Las enfermedades ambientales pueden afectar a cualquier
sistema del organismo. Dependiendo de cómo penetre el
agente en el organismo, se metabolice o se excrete, la enfermedad
se manifestará de una u otra forma. La piel,
pulmones, riñones, hígado o sistema nervioso
se ven afectados por múltiples agentes en diversas
circunstancias. Muchos de estos agentes ambientales son
peligrosos por su capacidad de inducir cáncer,
anomalías congénitas o abortos espontáneos
(si el feto es
expuesto a ellos), y mutaciones en las células germinales.
Este último mecanismo implica la capacidad de ciertos
agentes ambientales de producir enfermedades genéticas en
la siguiente generación.

Dependiendo de la dosis recibida, las enfermedades producidas
por los agentes ambientales pueden ser leves o graves, y
transitorias o crónicas. Mientras algunos de estos
procesos se manifiestan inmediatamente después de la
exposición, otros tienen un periodo de latencia variable.
En el caso del cáncer inducido por agentes ambientales,
por ejemplo, este periodo de latencia oscila entre los 15 y los
30 años. Los procesos que se manifiestan inmediatamente
después de la exposición a un agente tóxico
concreto se
atribuyen fácilmente a esa exposición ambiental u
ocupacional, pero cuando no existe una relación temporal
tan directa, no se llega a identificar en muchas ocasiones la
causa, ya que el cuadro clínico no suele ser lo
suficientemente específico. A esto se suma el que
diferentes causas, ambientales o no, pueden dar lugar al mismo
proceso. En tales circunstancias los estudios
epidemiológicos de la población expuesta son de
gran ayuda para relacionar esa exposición con el cuadro
clínico que produce.

Incidencias.

Debido a las razones comentadas, es difícil conocer la
frecuencia real de las enfermedades ambientales. Cuando se ha
identificado al agente responsable, se ha observado que la
frecuencia de la enfermedad que provoca está relacionada
de forma directa con la intensidad y la gravedad de la
exposición. Las lesiones cutáneas son muy
frecuentes en el medio laboral y se deben a múltiples
causas; las enfermedades pulmonares se relacionan con la
inhalación de distintas partículas, como el polvo
de carbón (pulmón negro), polvo de algodón
(pulmón pardo), fibras de asbesto (asbestosis) o polvo de
sílice (silicosis). Los agentes ambientales son capaces de
producir cambios biológicos en el individuo sin que
existan manifestaciones clínicas: es el caso de las
alteraciones cromosómicas debidas a la radiación.
En esta situación el sujeto no es consciente del daño
causado. La importancia de estos cambios está aún
por determinar.

El control de las actividades ambientales y laborales en
distintos países está coordinado a través de
la
Organización Mundial de la Salud (OMS). En los
países en vías de desarrollo, este control
internacional resulta imprescindible ya que el proceso de
industrialización en estas regiones se sitúa en un
contexto de pobreza y
crecimiento de la población.

 

En la actualidad, la
investigación en el campo de las enfermedades
ambientales se esfuerza en poner de manifiesto la relación
entre dosis bajas de exposición y alteraciones en la
salud, la influencia de ciertas toxinas ambientales en la
función
reproductora en ambos sexos, y las posibles consecuencias de los
cambios producidos por lesiones biológicas (por ejemplo
las alteraciones en la información genética o
en los cromosomas). Hay
un interés creciente por investigar los efectos a largo
plazo sobre la salud de las personas y por conocer las posibles
interacciones entre el ambiente y el individuo (por ejemplo el
poder
tóxico potencial de ciertos agentes según la
susceptibilidad individual).

6.3 RESIDUOS

Llamamos residuo a cualquier tipo de material que esté
generado por la actividad humana y que está destinado a
ser desechado.

6.3.1 Clasificación por Estado y
Origen

Un residuo es definido por estado según el estado
físico en que se encuentre. Existe por lo tanto tres tipos
de residuos desde este punto de vista sólidos,
líquidos y gaseosos, es importante notar que el alcance
real de esta clasificación puede fijarse en
términos puramente descriptivos, en general un residuo
también puede ser caracterizado por sus
características de composición y
generación.

Se puede definir el residuo por la actividad que lo origine,
esencialmente es una clasificación sectorial. Esta
definición no tiene en la práctica límites en
cuanto al nivel de detalle en que se puede llegar en ella.

6.3.2 Residuos
Sólidos Urbanos

Los que componen la basura
doméstica, La generación de residuos varía
en función de factores culturales asociados a los niveles
de ingreso, hábitos de consumo, desarrollo
tecnológico y estándares de calidad de vida de la
población.

6.3.3 Residuos Industriales

La cantidad de residuos que genera una industria es
función de la tecnología del
proceso productivo, calidad de las materias primas o productos
intermedios, propiedades físicas y químicas de las
materias auxiliares empleadas, combustibles utilizados y los
envases y embalajes del proceso.

Dentro de los residuos que genera la industria es conveniente
diferenciar entre:

Inertes: Que son escombros y materiales
similares, Residuo estable en el tiempo, el
cual no producirá efectos ambientales apreciables al
interactuar en el medio ambiente.

Similares a residuos sólidos urbanos: Restos de
comedores, oficinas, etc.

Residuos peligrosos: Que por su composición química u otras
características requieren tratamiento especial.

 

Residuos agrarios: Son los que proceden de la agricultura, la
ganadería,
la pesca, las
explotaciones forestales o la industria alimenticia.

Residuos médicos y de laboratorios: Restos del trabajo
clínico o de investigación.

Residuos radiactivos: Materiales que emiten radiactividad.

Sistema de manejo de residuos sólidos

Básicamente el sistema de manejo de los residuos se
compone de cuatro sub sistemas:

Generación: Cualquier persona u organización
cuya acción cause la transformación de un material
en un residuo. Una organización usualmente se vuelve
generadora cuando su proceso genera un residuo, o cuando lo
derrama o cuando no utiliza más un material.

Transporte: Es aquel que lleva el residuo. El transportista
puede transformarse en generador si el vehículo que
transporta derrama su carga, o si cruza los limites
internacionales (en el caso de residuos peligrosos), o si acumula
lodos u otros residuos del material transportado.

Tratamiento y disposición: El tratamiento incluye la
selección y aplicación de
tecnologías apropiadas para el control y tratamiento de
los residuos peligrosos o de sus constituyentes. Respecto a la
disposición la alternativa comúnmente más
utilizada es el relleno sanitario.

Control y supervisión: Este sub sistema se relaciona
fundamentalmente con el control efectivo de los otros tres sub
sistemas.

6.3.4 Riesgo Asociado al Manejo de los Residuos
Sólidos

6.3.4.1 Gestión
Negativa

Enfermedades provocadas por vectores
sanitarios: Existen varios vectores sanitarios de gran
importancia epidemiológica cuya aparición y
permanencia pueden estar relacionados en forma directa con la
ejecución inadecuada de alguna de las etapas en el manejo
de los residuos sólidos.

Contaminación de aguas: La disposición no
apropiada de residuos puede provocar la contaminación de
los cursos superficiales y subterráneos de agua, además de
contaminar la población que habita en estos medios.

Contaminación atmosférica: El material
particulado, el ruido y el olor representan las principales
causas de contaminación atmosférica.

Contaminación de suelos: Los
suelos pueden ser alterados en su estructura debida a la
acción de los líquidos percolados dejándolos
inutilizada por largos periodos de tiempo.

6.3.4.1 Gestión Positiva

Conservación de recursos: El manejo apropiado de las
materias primas, la minimización de residuos, las políticas
de reciclaje y el
manejo apropiado de residuos traen como uno de sus beneficios
principales la conservación y en algunos casos la
recuperación de los recursos naturales. Por ejemplo puede
recuperarse el material orgánico a través del
compostaje.

Reciclaje: Un beneficio directo de una buena gestión lo
constituye la recuperación de recursos a través del
reciclaje o reutilización de residuos que pueden ser
convertidos en materia prima
o ser utilizados nuevamente.

Recuperación de áreas: Otros de los beneficios
de disponer los residuos en forma apropiada un relleno sanitario
es la opción de recuperar áreas de escaso valor y
convertirlas en parques y áreas de esparcimiento,
acompañado de una posibilidad real de obtención de
beneficios energéticos (biogás)

Residuos tóxicos y peligrosos: Son considerados en este
grupo los que
entran dentro de las características especificadas por las
diferentes normativas medioambientales. Este grupo de residuos
exige, en función de sus características,
físicas o químicas un proceso de tratamiento,
recuperación o eliminación específica.

6.4. ECONOMÍA AMBIENTAL

La economía
ambiental es aquella rama del análisis económico que aplica su
instrumental tradicional al estudio de los problemas
ambientales. Pretende con ello ofrecer una información
que puede ser de utilidad en
cuatro aspectos fundamentales: ¿En la
identificación de las causas del surgimiento de estos
problemas: la racionalidad económica que subyace en el
comportamiento de los distintos agentes (ciudadanos, empresas,
gobierno) que
generan el deterioro ambiental. ¿En la
identificación y valoración de las distintas
funciones de
los recursos ambientales y naturales, de modo que su valor
económico total pueda ser tomado en cuenta a la hora de
decidir sobre su destino. ¿Proporcionando al decisor
público un inventario de
medidas de política ambiental con el que poder corregir el
comportamiento de los agentes económicos que provoca el
deterioro ambiental, así como un análisis
comparando de la eficacia de cada
una de ellas. ¿Analizando la relación existente
entre los distintos problemas ambientales y el grado de
desarrollo de la sociedad que
los genera, para poder prever su posible evolución en el futuro y las implicaciones
del creciente intercambio de bienes, servicios y
capitales entre países desarrollados y
subdesarrollados.

En los tiempos modernos donde la
globalización gana los titulares de los medios de
comunicación, parece mostrarnos una aparente falta de
interés hacia la conservación del medio ambiente,
pero en realidad no es así, una verdadera integración
económica debe ir a la par de la implementación
de medidas regulatorias que no coarten la actividad
económica y que contribuyan a un desarrollo
sustentable, además de una gestión
ambiental en donde se vea implicada la ciudadanía, no como grupo de presión,
sino como personas partícipes al tomar decisiones con
consecuencias ambientales.

Es precisamente en este esquema general donde la
economía ambiental surge para buscar o por lo menos
plantear vías favorables que conlleven a la
optimización en la explotación de recursos
naturales, cuyas reservas son escasas pero con usos diversos por
los cuales hay que optar.

La economía ambiental abarca el estudio de los
problemas ambientales empleando la visión y las herramientas
de la economía. Actualmente, existe un concepto
erróneo de Economía, ya que lo primero que se
piensa es que su campo de estudio es en su totalidad sobre
decisiones de negocios y
cómo obtener rendimientos en el modo de producción capitalista. Pero la
Economía se enfoca sobre las decisiones que realizan
actores económicos sobre el uso de recursos escasos.

6.5 MECANISMOS PRODUCCIÓN LIMPIA (MDL)

Protocolo de Kyoto

La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el
Cambio Climático, adoptada en Río de Janeiro en
junio de 1992, estableció un marco legal para manejar los
temas relacionados al cambio climático.

Durante la tercera conferencia de las partes, celebrada en
Kyoto (Japón)
en diciembre de 1997, se estableció el Protocolo de
Kyoto.

Bajo el Protocolo, los países industrializados
negociaron metas para reducir las emisiones de Gases de
Efecto
Invernadero (GEI). Estas reducciones pueden ser alcanzadas a
través de acciones tanto
locales como internacionales.

Los GEI son: dióxido de carbono (CO2),
metano (CH4),
óxido nitroso (N2O), hidrofluorocarbonos (HFC),
perfluorocarbonos (PFC) y hexafluoruro de azufre (SF6).

Los más importantes son los tres primeros, en
particular el dióxido de carbono (CO2), que es el que se
toma como referencia en lo que se refiere al potencial de
calentamiento
global ("GWP" en inglés).

El objetivo
principal de este acuerdo internacional es lograr que, para el
periodo 2008 – 2012, los países industrializados
disminuyan sus emisiones de GEI a un 5% menos del nivel de
emisiones de 1990 (año base).

El Protocolo provee una variedad de medidas para lograr la
reducción de GEI a través de tres "mecanismos
flexibles" especiales: Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL),
Implementación Conjunta (JI) y Comercio
Internacional de Emisiones
.

República Dominicana ratificó la
Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio
Climático el 7 de octubre de 1998 (resolución
número 182).

El Protocolo de Kyoto fue ratificado el 12 de febrero del
2002, lo que nos permite entrar al mercado
internacional del carbono. Para tener acceso a este mercado el
país ha firmado, hasta la fecha, memorandos de
entendimiento con el Banco Mundial,
para el Fondo de Carbono Prototipo, y con los gobiernos del
Canadá y España.

Es importante destacar que el 9 de agosto del 2004 se
creó por decreto presidencial No. 786-04 las Oficinas
Nacionales de Cambio Climático y del Mecanismo de
Desarrollo Limpio, con asiento en la Subsecretaría de
Gestión Ambiental. La Oficina Nacional
del Mecanismo de Desarrollo Limpio (ONMDL) funge como la Autoridad
Nacional Designada (AND) en lo que al MDL se refiere.

Este mecanismo permite proyectos de
reducción de emisiones entre países
industrializados y países en desarrollo.

Por medio de este mecanismo una entidad o gobierno de un
país industrializado invierte en un proyecto de
reducción de emisiones en un país en desarrollo. A
cambio, el país industrializado recibe Certificados de
Reducción de Emisiones (CER). Ver figura 1

Monografias.com

Los gobiernos de países pertenecientes al Anexo I
(países industrializados que tomaron responsabilidad en la reducción de los GEI
durante la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre
el Cambio Climático y que forman parte esencial del
Protocolo de Kyoto), como por ejemplo Canadá, pueden
asistir a las compañías de países en
desarrollo en su participación en el MDL a través
de entrenamientos, desarrollo de proyectos y actividades de
creación de capacidades.

Los países industrializados – a través del
Estado o de la empresa
privada – invierten en proyectos ubicados en países
en desarrollo, que reducen las emisiones de GEI.

Los países en desarrollo – a través del
Estado o de la empresa privada
– también podrán ejecutar tales proyectos en
forma independiente.

Realizar estos proyectos no sólo contribuye a la
modernización de un sector específico, sino
también aporta una contribución positiva a la
protección del clima global.

El país industrializado inversionista podrá
también deducir de sus obligaciones
de Kyoto las reducciones logradas en el país contraparte
en desarrollo.

Requisitos que deben cumplir los Proyectos MDL:

1. La fecha de inicio del proyecto deberá ser
posterior al 1 de enero de 2000.

2. La actividad de proyecto debe ser realizada en un
país no Anexo I (un país en desarrollo) parte del
Protocolo de Kyoto.

3. La participación debe ser voluntaria y estar
aprobada por la Autoridad Nacional Designada.

4. La actividad de proyecto debe generar una
reducción de emisiones de gases de efecto invernadero
produciendo beneficios reales, mensurables y de largo plazo en
relación al cambio climático. La reducción
de emisiones del proyecto resulta de restar a las emisiones en el
escenario con proyecto, de las emisiones que hubieran ocurrido en
la situación sin proyecto (línea de base).

5. La línea de base representa las emisiones que
hubieran ocurrido en la ausencia del proyecto. La metodología para determinar la línea
de base a utilizar por el proyecto deberá ser previamente
aprobada por la Junta Ejecutiva del MDL o, si corresponde, ser
seleccionada entre las metodologías ya aprobadas.

6. Debe haber un plan de monitoreo
(previamente aprobado por la Junta Ejecutiva del MDL) que permita
cuantificar la reducción de emisiones lograda por el
proyecto.

7. Las reducciones de emisiones deberán ser
adicionales5, a cualquier otra reducción de emisiones que
pudieran ocurrir en ausencia de una actividad certificada de
proyecto.

8. La actividad de proyecto debe contribuir a la meta de
desarrollo
sostenible del país en donde se realice.

9. Para el financiamiento
del proyecto debe demostrarse que no se ha utilizado Asistencia
Oficial para el Desarrollo ("Official Development Assistance" u
ODA).Además, el proyecto debe cumplir con las modalidades
y procedimientos
establecidos en los Acuerdos de Marrakech y las decisiones de la
Junta Ejecutiva del MDL en sus sesiones.6.

6.6 BONOS DE
CARBONO

Es un mecanismo que nació al alero del protocolo de
Kyoto, el cual obliga a que los países desarrollados
reduzcan sus Gases Efecto Invernadero (GEI).

Para cumplir con sus metas de reducción de emisiones,
los países desarrollados pueden financiar proyectos de
captura o abatimiento de estos gases en otras naciones
-principalmente en vías de desarrollo-, acreditando tales
disminuciones como si hubiesen sido hechas en territorio propio.
Esto abarata significativamente los costos de
cumplimiento. En concreto, esto significa que una empresa
chilena que disminuye sus emisiones de CO2 puede vender esta
reducción a empresas de países desarrollados que
estén obligadas a bajar sus emisiones de GEI.El mercado de
carbono se viene desarrollando a nivel mundial desde 1996, pero
sólo en los últimos años adquirió
mayor fuerza. Se
estima que sólo en el año 2002 se transaron bonos
equivalentes a 70 millones de toneladas.

En 2003 Chile lideró el uso de bonos de carbono con su
proyecto Chacabuquito en donde la compañía Guardia
Vieja S.A. que opera en la V Región, se convirtió
en el primero en el mundo en desarrollo, que verifica reducciones
de emisiones de los gases que producen el efecto invernadero. El
proyecto es parte del portafolio del PCF, donde participan seis
gobiernos y 17 compañías que hicieron una alianza
en el año 2000 con el Banco Mundial y
contribuyeron con 180 millones de dólares para crear este
fondo, que tiene planeado comprar cerca de 110 millones de
dólares en reducciones de emisiones de 26 proyectos en
países en desarrollo.

El Protocolo de Kioto, otorga a los Estados, cierto grado de
flexibilidad en los mecanismos por los cuales logran y miden sus
reducciones de emisión. Estos se circunscriben a 3 tipos
de mecanismos:

  • Mecanismo de Desarrollo Limpio: los países
    industrializados pueden financiar proyectos de
    reducción de emisiones en países en desarrollo
    y recibir créditos por ello.

  • Implementación Conjunta: este mecanismo permite a
    los países adquirir unidades de reducción de
    emisiones a través del financiamiento de ciertos tipos
    de proyectos en otros países miembros.

  • Transacción de Emisiones: corresponde a un
    régimen de transacción internacional de
    emisiones que permite a los países industrializados
    comprar y vender créditos de emisiones entre ellos
    mismos.

Concentraciones Atmosféricas de Co2 y cambios de
temperaturas.

Monografias.com

6.7 POLÍTICAS AMBIENTALES, EL AMBIENTE Y
EL ROL DEL ESTADO

El diseño
e implementación de una política ambiental en los
países actualmente en proceso de desarrollo, se erige como
una condicionante importante para lograr la equidad, el
desarrollo
económico e indiscutiblemente, el cuidado del medio
ambiente. Dicha política ambiental deberá reunir
características de estabilidad a través del tiempo;
consistencia con el desempeño institucional y general; y de
consideración de las capacidades de liderazgo
público y privado, así como de las condiciones
económicas, políticas y sociales nacionales.
Aún más, el éxito
de la gestión ambiental deberá fundarse en una
clara definición de objetivos y prioridades que,
además de ser congruentes con las necesidades reales de la
sociedad, sean cuantificables y evaluables. De esta manera, se
espera que se generen soluciones
medibles a problemas previamente cuantificados física y
económicamente.

En el caso de Chile y en el de tantos otros países de
desarrollo similar, los principales problemas que demandan una
política ambiental eficaz son el deterioro de los recursos
naturales y los relacionados con las concentraciones urbanas y la
contaminación. Para ello, se ha diseñado un proceso
de gestión ambiental que incluye cinco elementos
indispensables:

1) Legislación; 2) institucionalidad; 3) marco
conceptual de aplicación; 4) uso de instrumentos
económicos y; 5) fiscalización, seguimiento y
evaluación.

Primeramente, la política ambiental requiere de un
marco que dé sustento legal al ejercicio de controles
directos sobre la contaminación, a la asignación de
responsabilidades y funciones, y al uso de instrumentos
económicos (incentivos y
punitivos) que por un lado motiven la creatividad
del sector privado y por el otro, disminuyan los costos de su
cumplimiento. De esta manera, la legislación deberá
integrar un cuerpo de normas generales,
disposiciones especiales, reglamentos para regular en detalle
obligaciones y derechos de los normados, así como los
acuerdos y compromisos contraídos internacionalmente e
incorporados como leyes internas de cada país.

A la par del marco legal, y con la finalidad de eliminar la
incertidumbre relacionada con la falta de definición de
los derechos de propiedad y la discrecionalidad funcionaria, se
requiere de una institucionalidad que, además de coordinar
las políticas intersectoriales, diseñe los
procedimientos de gestión ambiental y asigne los recursos
para su ejecución. Así, el marco institucional de
una política ambiental tendrá como objetivos
básicos la asignación de atribuciones privativas y
compartidas, la coordinación de dichas atribuciones en el
ámbito organizacional y el mantenimiento
de la
comunicación entre los participantes en la
gestión.

Las atribuciones sobre las que habrá de girar la
política ambiental se agrupan en cuatro: a) la
generación de reglamentos y el diseño de
políticas corresponden a las atribuciones normativas; b)
la coordinación intersectorial y la asignación de
recursos, a las del orden administrativo; c) la
inspección, verificación, investigación y
evaluación de la actuación de los particulares, de
los programas y
acciones públicos, así como de la misma eficiencia
institucional, son campo de las atribuciones fiscalizadora; y d)
la imposición de penas ante violaciones a la ley, corresponde
a las atribuciones punitivas.

La coordinación y la comunicación también son elementos
básicos de la institucionalidad. La compatibilidad entre
el marco legal y el institucional y entre éstos y la
operación ambiental, deberá tener un fundamento
teórico que elimine cualquier posibilidad de conflictos
ocasionados por la valoración diferenciada de conceptos en
uso.

La base conceptual que da paso a la operatividad del cuarto
elemento de la política ambiental es la
internalización de costos ambientales. El quinto y
último elemento está dado por la
fiscalización, seguimiento y evaluación de la misma
gestión y de su efectividad para solucionar y prevenir los
problemas ambientales.

Finalmente, la política ambiental que integra los
elementos descritos estará completa si toma en cuenta el
papel fundamental de la participación ciudadana en todos los
niveles, asentada en bases educativas sólida y equitativa,
así como el impacto importante de la actuación y
compromiso de las organizaciones no
gubernamentales en el mundo y en América
Latina.

6.8. UTILIZACIÓN DE LOS RECURSOS

6.8.1. Recursos Naturales y riquezas

Conocemos con este nombre a los elementos materiales que la
Naturaleza nos brinda en forma espontánea. Es decir sin
que intervenga la mano del hombre.

Los recursos naturales son aprovechados por el hombre y sirven
para satisfacerlas necesidades de la población. Son
refuerzos naturales por ejemplo los Árboles que forman los
bosques tropicales de nuestra Amazonía los pastos
naturales que crecen en la región andina; los peces que
viven en los mares, ríos y lagos; los minerales que
yacen en el subsuelo como el cobre,
el
petróleo o la plata; los suelos de los valles y
pampas; los animales silvestres de las diferentes regiones
naturales del país; el aguas de nuestros ríos,
lagunas, lagos, etc.

 

Los recursos naturales se convierten en riqueza con el trabajo
organizado de los hombres. Los países que explotan
racionalmente sus recursos naturales crean riqueza, para ponerla
al servicio de la
población.

Los recursos naturales solo tienen valor económico
cuándo son explotados racionalmente, es decir cuando son
convertidas en riquezas y estas puestas a mano del hombre. Un
país que tiene abundantes recursos naturales inexplorados
todavía a pesar que sus habitantes padecen de hambre, se
parece a un mendigo sentado en un banco de oro. Los
recursos naturales deben estar al servicio del hombre. Deben ser
utilizados para satisfacer las necesidades humanas.

6.8.2 Recursos Naturales

Los recursos naturales son el conjunto de elementos naturales
que se encuentran en la naturaleza de forma no modificada,
escasos con relación a su demanda actual
o potencial.

6.8.2.1. Los Recursos Naturales renovable y no renovables

  • Renovable: son aquellos que, con los cuidados adecuados,
    pueden mantenerse e incluso aumentar. Los principales
    recursos renovables son las plantas y los animales.

A su vez las plantas y los
animales dependen para su subsistencia de otros recursos
renovables que son el agua y el
suelo.

  • No renovables: son aquellos que existen en cantidades
    determinadas y al ser sobre explotados se pueden acabar. El
    petróleo, por ejemplo, tardo millones de años
    en formarse en las profundidades de la tierra, y una vez que
    se utiliza ya no se puede recuperar.

Si se sigue extrayendo petróleo
del subsuelo al ritmo que se hace en la actualidad, existe el
riesgo de que se acabe en algunos años.

6.8.3 Los Recursos Naturales según su origen

Los Recursos animales. Están conformados por las
especies de nuestra fauna silvestre
como la taruca, el venado, la vicuña, los peces del mar,
los camarones de los ríos, etc.

Los recursos vegetales. Están conformados por la
vegetación silvestre que se ofrece en forma
espontánea, como pastos naturales de la región
andina los bosques de nuestra región, o la
vegetación de las lomas.

Los recursos minerales. Son los que más abundan, los
conforman todos los minerales metálicos que en el subsuelo
forman vetas o filones, como el plomo, el oro, el zinc. etc., y
los minerales no metálicos como el petróleo, el carbón y los materiales
de construcción.

6.8.4 Recursos Naturales de la costa

Los recursos minerales, entre estos recursos minerales de
costa destacan por su importancia los siguientes:

6.8.4.1Suelos

El suelo es considerado como uno de los recursos naturales
más importantes, de ahí la necesidad de mantener su
productividad,
para que a través de él y las prácticas
agrícolas adecuadas se establezca un equilibrio entre la
producción de alimentos y el acelerado incremento del
índice demográfico. El suelo es esencial para la
vida, como lo es el aire y el agua, y
cuando es utilizado de manera prudente puede ser considerado como
un recurso renovable. Es un elemento de enlace entre los factores
bióticos y abióticos y se le considera un
hábitat para el desarrollo de las plantas.

Gracias al soporte que constituye el suelo es posible la
producción de los recursos naturales, por lo cual es
necesario comprender las características físicas y
químicas para propiciar la productividad y el equilibrio
ambiental (sustentabilidad). Los suelos son clasificados de
acuerdo con su estructura y composición en órdenes,
subórdenes, grandes grupos,
subgrupos, familias y series. Se ha visto que las
características del suelo varían enormemente de un
lugar a otro; los científicos han reconocido estas
variaciones en los diferentes lugares y han establecido distintos
sistemas de clasificación. En la costa del Perú hay
cerca de 700 000 hectáreas de suelos cultivados destinados
a la agricultura intensiva.

Más de un millón de hectáreas lo
conforman nuestras pampas que esperan ser incorporadas a la
agricultura mediante obras de irrigación.

6.8.4.2. El agua

El agua es un componente de nuestra naturaleza que ha estado
presente en la Tierra desde hace más de 3.000 millones de
años, ocupando tres cuartas partes de la superficie del
planeta. Su naturaleza se compone de tres átomos, dos de
oxígeno
que unidos entre sí forman una molécula de agua,
H2O, la unidad mínima en que ésta se puede
encontrar.

La forma en que estas moléculas se unen entre sí
determinará la forma en que encontramos el agua en nuestro
entorno; como líquidos, en lluvias, ríos,
océanos, camanchaca, etc., como sólidos en
témpanos y nieves o como gas en las nubes.
El agua es necesaria para vivir. Sin ella todo estaría
seco. No habría plantas ni animales. Tampoco los hombres
podrían vivir.

El agua es una gran riqueza:

– Para los pueblos y ciudades (para beber, cocinar, limpiar,
lavar).

– Para regar los campos.

– Para producir hidroenergía.

También forman los ríos y los lagos.

Hay aguas que no puedes ver a simple vista porque se
encuentran debajo de la Tierra recibiendo el nombre de aguas
subterráneas. En el agua también viven muchos
animales. Estos animales están dotados de branquias, que
les permiten utilizar el oxígeno disuelto en el agua para
respirar y vivir. Las plantas necesitan igualmente del agua que
hay en el suelo en el que se encuentran, y que les permiten
absorber las sales minerales necesarias para su alimentación.

6.8.4.3. El Petróleo

Es otro de los recursos naturales que tenemos, en la
actualidad existen numerosos pozos de explotación. Su
explotación nos ha permitido organizar la Refinería
de Petróleo de Talara para la obtención de sus
productos derivados, así como para organizar la industria
petroquímica peruana con la planta de
fertilizante, la Planta de Negro de Humo y la Planta de
Solventes, todas en Talas. Se extrae también el
petróleo del zócalo continental, frente a
Piura.

6.8.4.4. La sal

La sal es otro recurso natural. Se explota este mineral
comestible en las depresiones costeñas, es decir en las
zonas que han sufrido un lento proceso de hundimiento y cuyo
territorio se encuentra bajo el nivel del mar. En estas zonas
afloran aguas marinas que al evaporarse dejan en libertad las
sales. Los Fosfatos.- Los fosfatos conforman otro grupo de los
recursos minerales de la costa. Son minerales formados por los
esqueletos de animales marinos de épocas geológicas
pasadas. Se utiliza para fabricar abonos fosfatados para
agricultura.

6.8.4.5. El Hierro

Se obtienen minerales de hierro de baja ley, que son
procesadas en Planta Metalúrgica, obteniéndose el
hierro, parte del cual se envía a la Siderúrgica,
el resto se destina a la exportación. Otros recursos minerales de la
costa.- una gran variedad de minerales no metálicos como
los que se extraen de las canteras y se utiliza en la
fabricación de cemento.

6.8.5. Los Recursos vegetales y animales

Los pequeños bosques de algarrobo -Los bosques
semitropicales- Los manglares, los esteros, utilizados en la
industria de curtiembres por la apreciable cantidad de tanino que
contiene. – La vegetación, que sirve de alimento a la
ganadería. Sus principales especies son el maicillo, la
cebadilla, el tabaco silvestre,
etc.

En la costa hay una gran variedad de recursos animales
conformados por la rica fauna marina, las aves que viven
en nuestras islas, los lobos marinos pueblan los farallones y los
camarones de los ríos costeños.

6.9 FLUJOS DE ENERGÍA Y REDES TRÓFICAS

Los organismos pueden ser productores o
consumidores en cuanto al flujo de energía a
través de un ecosistema. Los productores convierten la
energía ambiental en enlaces de carbono, como los
encontrados en el azúcar
glucosa. Los
ejemplos más destacados de productores son las
plantas; ellas usan, por medio de la fotosíntesis, la energía de la
luz solar para
convertir el dióxido de carbono en glucosa (u otro
azúcar). Las algas y las cianobacterias también son
productores foto sintetizadores, como las plantas. Otros
productores son las bacterias que viven en algunas profundidades
oceánicas. Estas bacterias toman la energía de
productos químicos provenientes del interior de la Tierra
y con ella producen azúcares. Otras bacterias que viven
bajo tierra también pueden producir azúcares usando
la energía de sustancias inorgánicas. Otro
término para productores es autótrofo.

Los consumidores obtienen su energía de los enlaces de
carbono originados por los productores. Otro término para
un consumidor es
heterótrofo. Es posible distinguir 4 tipos de
heterótrofos en base a lo que comen:

Consumidor

Nivel trófico

Fuente alimenticia

1. Herbívoros

primario

plantas

2. Carnívoros

secundario o superior

animales

3. Omnívoros

todos los niveles

plantas y animales

4. Detritívoros

—————

detrito

El nivel trófico se refiere a la posición de los
organismos en la cadena
alimenticia, estando los autótrofos en la base. Un
organismo que se alimente de autótrofos es llamado
herbívoro o consumidor primario; uno que
coma herbívoros es un carnívoro o
consumidor secundario. Un carnívoro que coma
carnívoros que se alimentan de herbívoros es un
consumidor terciario, y así sucesivamente.

Es importante observar que muchos animales no tienen dietas
especializadas. Los omnívoros (como los humanos)
comen tanto animales como plantas. Igualmente, los
carnívoros (excepto algunos muy especializados) no limitan
su dieta sólo a organismos de un nivel trófico. Las
ranas y sapos, por ejemplo, no discriminan entre insectos
herbívoros y carnívoros; si es del tamaño
adecuado y se encuentra a una distancia apropiada, la rana lo
capturará para comérselo sin que importe el nivel
trófico.

Flujo de Energía a través del
Ecosistema

Monografias.com

El diagrama
anterior muestra como la
energía (flechas oscuras) y los nutrientes
inorgánicos (flechas claras) fluyen a través del
ecosistema. Debemos, primeramente, aclarar algunos conceptos. La
energía "fluye" a través del ecosistema como
enlaces carbono-carbono. Cuando ocurre respiración, los enlaces carbono-carbono se
rompen y el carbono se combina con el oxígeno para formar
dióxido de carbono (CO2). Este proceso libera
energía, la que es usada por el organismo (para mover sus
músculos, digerir alimento, excretar
desechos, pensar, etc.) o perdida en forma de calor. Las
flechas oscuras en el diagrama representa el movimiento de
esta energía. Observe que toda la energía proviene
del sol, y que el destino final de toda la energía es
perderse en forma de calor. ¡La energía no se
recicla en los ecosistemas!

Los nutrientes inorgánicos son el otro componente
mostrado en el diagrama. Ellos son inorgánicos debido a
que no contienen uniones carbono-carbono. Algunos de estos
nutrientes inorgánicos son el fósforo en sus
dientes, huesos y
membranas celulares; el nitrógeno en sus
aminoácidos (las piezas básicas de las proteínas); y el hierro en su sangre (para
nombrar solamente unos pocos nutrientes inorgánicos). El
flujo de los nutrientes se representa con flechas claras. Observe
que los autótrofos obtienen estos nutrientes
inorgánicos del 'almacén'
de nutrientes inorgánicos (usualmente el suelo o el agua
que rodea la planta). Estos nutrientes inorgánicos son
pasados de organismo a organismo cuando uno es consumido por
otro. Al final, todos los organismos mueren y se convierten en
detrito, alimento para los des componedores. En esta etapa, la
energía restante es extraída (y perdida como calor)
y los nutrientes inorgánicos son regresados al suelo o
agua para ser utilizados de nuevo. Los nutrientes
inorgánicos son reciclados, la energía no.

Para resumir: En el flujo de energía y de nutrientes
inorgánicos, es posible hacer algunas
generalizaciones:

  • La fuente primaria (en la mayoría de los
    ecosistemas) de energía es el sol.

  • El destino final de la energía en los ecosistemas
    es perderse como calor.

  • La energía y los nutrientes pasan de un organismo a
    otro a través de la cadena alimenticia a medida que un
    organismo se come a otro.

  • Los des componedores extraen la energía que
    permanece en los restos de los organismos.

  • Los nutrientes inorgánicos son reciclados pero la
    energía no.

6.9.1 Cadenas y Redes alimenticias

Una cadena alimenticia es la ruta del alimento desde un
consumidor final dado hasta el productor. Por ejemplo, una cadena
alimenticia típica en un ecosistema pudiera ser:

Pasto —> saltamontes –> ratón —> culebra
—> halcón

Aún cuando se dijo que la cadena alimenticia es del
consumidor final al productor, se acostumbra representar al
productor a la izquierda (o abajo) y al consumidor final a la
derecha (o arriba). Se debe ser capaz de analizar la anterior
cadena alimenticia e identificar los autótrofos y los
heterótrofos, y clasificarlos como herbívoro,
carnívoro, etc. Igualmente, debe reconocer que el
halcón es un consumidor cuaternario.

Desde luego, el mundo real es mucho más complicado que
una simple cadena alimenticia. Aún cuando muchos
organismos tienen dietas muy especializadas (como es el caso de
los osos hormigueros), en la mayoría no sucede así.
Los halcones no limitan sus dietas a culebras, las culebras comen
otras cosas aparte de ratones, los ratones comen yerbas
además de saltamontes, etc. Una representación
más realista de quien come a quien se llama red alimenticia, como se
muestra a continuación:

Monografias.com

Solamente cuando vemos una representación de una red alimenticia como la
anterior, es que la definición dada arriba de cadena
alimenticia tiene sentido. Podemos ver que una red alimenticia
consiste de cadenas alimenticias interrelacionadas, y la
única manera de desenredar las cadenas es de seguir el
curso de una cadena hacia atrás hasta llegar a la
fuente.

La red alimenticia anterior consiste de cadenas
alimenticias de pastoreo
ya que en la base se encuentran
productores que son consumidos por herbívoros. Aún
cuando este tipo de cadenas es importante, en la naturaleza son
más comunes las cadenas alimenticias con base en los
detritos
en las cuales se encuentran des componedores en la
base.

6.9.2 Pirámides

Un concepto muy importante es el de biomasa. Un principio
general es que, mientras más alejado esté un nivel
trófico de su fuente (detrito o productor), menos biomasa
contendrá (aquí entendemos por biomasa al peso
combinado de todos los organismos en el nivel trófico).
Esta reducción en la biomasa se debe a varias razones:

  • no todos los organismos en los niveles inferiores son
    comidos

  • no todo lo que es comido es digerido

  • siempre se pierde energía en forma de calor

Es importante recordar que es más fácil detectar
la disminución en el número si lo vemos en
términos de biomasa. No es confiable el número de
organismos en este caso debido a la gran variación en la
biomasa de organismos individuales. Por ejemplo, algunos
animales pequeños se alimentan de los frutos de árboles. En términos de peso
combinado, los árboles de un bosque superan a los animales
pero, de hecho, hay más individuos de los animales que de
los árboles; ahora bien, un árbol individual puede
ser muy grande, con un peso de cientos de kilos, mientras que un
animal individual (en el caso que estamos analizando) puede
pesar, quizás, un kilo.

Hay unas pocas excepciones al esquema de pirámide de
biomasa. Una de ellas se encuentra en sistemas acuáticos
donde las algas pueden ser superadas, en número y en masa,
por los organismos que se alimentan de las algas. Las algas
pueden soportar la mayor biomasa del siguiente nivel
trófico solamente porque ellas pueden reproducirse tan
rápidamente como son comidas. De esta manera, ellas nunca
son completamente consumidas. Es interesante notar que esta
excepción a la regla de la pirámide de biomasa
también es una excepción parcial a por lo menos 2
de las 3 razones para la pirámide de biomasa dadas
arriba.

Aunque no todas las algas son consumidas, sí lo son la
mayoría de ellas, y aunque no son totalmente digeribles,
las algas son, en términos generales, mucho más
nutritivas que las plantas leñosas (la mayoría de
los organismos no pueden digerir la madera y
extraer energía de ella).

6.10 DESEQUILIBRIOS PRODUCIDOS POR EL PROCESO
ECONÓMICO Y TECNOLÓGICO

El consumo como problema ambiental tiene importancia social
desde el mismo momento en que el individuo y la propia sociedad
necesitan consumir para poder vivir. Las relaciones entre
sociedad y naturaleza son siempre un reflejo de la
organización económica y políticas
establecidas por la sociedad vigente y, consecuentemente, los
problemas ambientales sólo pueden explicarse en referencia
a dichas organizaciones.

Si bien las amenazas ecológicas producidas por el
consumo de la especie humana han existido a lo largo de toda la
historia de la
humanidad, es a partir del siglo XVIII cuando éstas, y
debido al asentamiento de la industrialización, comienzan
a agudizarse hasta hacerse patentes en la sociedad de consumo del
siglo XX (Kates, 1994). Con anterioridad a la
industrialización, el problema ecológico, que
siempre ha existido, se resolvía por sí solo. El
incremento del consumo, generado por la industrialización
y agudizado por la sociedad de consumo, comportó que la
especie humana dejara de respetar la cadena trófica y los
ciclos naturales de la materia para establecer, prioritariamente,
la cadena económica; supuso, también, un aumento de
la complejidad en la relación consumo – naturaleza y
creó graves desequilibrios.

A las puertas del siglo XXI la sociedad institucional asume el
reto de conseguir un nuevo desarrollo económico y social
basado en la sostenibilidad del medio ambiente y los recursos
naturales que no ponga en peligro y quiebra las
garantías de vida de la actual y futuras generaciones y el
equilibrio ecológico global del planeta.

Si cada época de la historia se ha caracterizado por la
consecución de logros e innovaciones de orden cultural,
económico, tecnológico y político que han
ido posibilitando nuevas expectativas al desarrollo y formas de
vida de la sociedad humana, nuestro tiempo marca la
necesidad de un nuevo y verdadero orden mundial, más justo
y equitativo, basado en la extensión de los
benéficos del desarrollo y la cultura a los países
y comunidades menos favorecidas por el actual sistema y en la
capacidad para contrarrestar y corregir los grandes
desequilibrios ambientales y sociales producidos por el actual
ritmo de crecimiento
económico, tanto en sus aspectos cuantitativos, lo que
atañe directamente al medio ambiente y a los recursos,
como cualitativamente , lo que repercute en las formas de
organización social y en las condiciones de vida de los
países.

Tras la conferencia de Río en 1992 se impuso la
necesidad de promulgar políticas locales orientadas hacia
la sostenibilidad, no sólo como argumento necesario para
preservar el patrimonio de
los países y ciudades considerados de forma aislada, sino,
sobre todo, para evitar y subsanar las grandes
problemáticas globales relacionadas con el medio ambiente,
el desarrollo económico y la justicia
social, a escala mundial. La denominada Carta de Aalborg
(Dinamarca 1994), "Carta de las Ciudades y Pueblos Europeos hacia
la Sostenibilidad", fue el punto de partida en Europa. Desde el
que se pretendió iniciar las estrategias de
acción local necesarias para la consecución de un
futuro sostenible.

La ciudad de Talavera de la Reina, integrada en la red de
Ciudades Saludables de la OMS desde 1993, está
experimentando en los últimos años un notable
crecimiento económico y poblacional, por lo que para
conseguir que este crecimiento pueda ser sostenible, tanto en
términos ambientales, como económicos y de
relaciones sociales, es necesario plantearse de forma colectiva y
tanto a nivel institucional como de participación de los
diferentes agentes sociales, la forma en que debemos y podemos
organizar la consecución de las necesidades sociales y la
mejora de la calidad de vida de los ciudadanos, teniéndose
en cuenta que nuestra sociedad, quizás por su peculiar
situación geográfica y composición
poblacional de marcado carácter comarcal, no ha parado de
crecer hasta ser actualmente la segunda ciudad en número
de habitantes de nuestra Comunidad
Autónoma.

Conforme a las nuevas directrices Europeas e internacionales
para la consecución de la sostenibilidad, el Pleno del
Ayuntamiento de Talavera de la Reina ha aprobado por unanimidad,
recientemente, asumir y adherirse a los principios de
sostenibilidad recogidos en la carta de
Aalborg: los cuales subrayan la necesidad de dinamizar la
participación social, de resolver los problemas de
gestión de las ciudades mediante negociaciones abiertas,
de preservar el medio ambiente y los espacios naturales locales,
así como de asumir la corresponsabilidad en el equilibrio
ecológico y climático del planeta. Este nuevo reto,
inaplazable dado el actual ritmo de crecimiento, nos invita ahora
a movilizarnos socialmente a través del debate
sectorial, la discusión de nuevos planteamientos que se
sustraigan a las rígidas leyes del modelo único de
actual crecimiento, al ensayo de
alternativas y caminos diferentes.

La ciudad, nuestro medio entorno, se nos presenta como el
marco irremplazable para trabajar por la consecución de
diferentes objetivos comunes: solidaridad,
mejoras sociales, nuevas oportunidades de empleo,
apertura cultural, habitabilidad, salubridad y mayor conciencia
de las dependencias ambientales…, en suma, la ciudad nos
proporciona una fuente inagotable de nuevos retos y la
posibilidad de resolver la problemática social en un marco
privilegiado para la elaboración democrática de
soluciones, que para el mundo de la educación no hace
sino que conducirnos a una continua reconsideración de las
necesidades educativas del individuo y de los planteamientos y
metodologías adecuados para su consecución.

Si todos los componentes del sistema
educativo de nuestra ciudad y comarca asumimos nuestro
compromiso para la mejora de la sociedad, a través de
nuestra actividad cotidiana de estudio, investigación y
reflexión de la realidad: el resultado no debería
ser otro que el ir creciendo en una actitud
crítica
y activa frente a los problemas del mundo y del medio ambiente
que se traduzca en la transformación positiva de nuestro
propio espacio educativo y de las condiciones que inferimos en
él mediante nuestras acciones relacionadas con aspectos,
ya ampliamente conocidos, que tienen que ver con la
gestión y consumo de recursos naturales, con una ética y
estética más ambientales y, sobre
todo, con la asunción de comportamientos que puedan
general la confianza y complicidad necesarias para
confraternizarnos y entrañarnos con nuestro entorno. Hoy
ya nadie duda que romper equilibrios en nuestro espacio cercano y
tangible, no sólo puede ocasionarnos perjuicios locales,
sino también para toda la humanidad y la biosfera debido a
las interdependencias complejas y dimensión de
universalidad de los problemas ambientales.

Los nuevos diseños curriculares pueden y deben ser la
fórmula adecuada para aplicar un planteamiento de
coherencia ambiental, tanto en el desarrollo de contenidos
transversales como del comportamiento y proceder de la comunidad
escolar, que facilite al alumnado la transmisión y debate
de valores y actitudes, la
práctica de procedimientos eficaces y pedagógicos y
la adquisición de conocimientos que permitan utilizar
sensatamente y conservar el medio ambiente de nuestro entorno
próximo, empezando por nuestro centro, como del medio
ambiente global y planetario, para poder así llegar a
apreciarlo y sentirlo como un valioso bien social colectivo.

Detener el proceso destructivo del hombre sobre la Naturaleza,
defender el patrimonio
cultural de los pueblos, y hacer posible un verdadero
desarrollo sostenible no es algo que los gobiernos, aun los
más progresistas, puedan hacer sin el concurso diario de
cada ciudadana. La ciudad nos ofrece el marco ideal para el aprendizaje
debido a su insuperable carácter interdisciplinar: como
ámbito de convivencia plural y democrática,
foro de discusión de
ideas y escenario de la vida real al que abrir las puertas de la
escuela. Creo que
los educadores y profesores, al menos deberíamos
plantearnos si podemos o debemos estar ausentes del debate
constructivo y la participación social.

Las nuevas posiciones ecológicas alternativas tratan de
buscar nuevos modelos de
producción y consumo; cuestionan las formas actuales de
medir la riqueza y el crecimiento y centran sus propuestas en la
necesidad de un replanteamiento del valor que la economía
actual ofrece de los bienes. Sostienen que la actual
tecnología utilizada es ineficaz en el sentido de que
existen conocimientos tecnológicos capaces de ahorrar
energía y producir menor impacto ambiental
y que además no se desarrollan por intereses
económicos; consideran, asimismo, la necesidad de la libre
transferencia de tecnología no impactante. Sostienen,
así mismo, que es un engaño hablar de que los
problemas ambientales están vinculadas a la
superpoblación del planeta, si no se precisa que lo que
ocurre, en realidad, es que la riqueza la poseen unos pocos y se
considera que el impacto ambiental producido por la
minoría rica es mucho mayor que el producido por la
mayoría pobre. Promulgan la necesidad de nuevos estilos de
vida. Propugnan un cambio en el modelo de vida de las personas,
basado en un concepto distinto de calidad de vida para todos.

Si bien entendemos que la ciencia y
la tecnología aplicadas a la producción han llevado
a la humanidad a una sociedad de consumo desenfrenado y
contaminante hasta el límite de poner en peligro la propia
supervivencia de la especie humana, pensamos que, paralelamente,
gracias a ello la humanidad ha podido transformar la naturaleza
para conseguir unas existencias mejores inherentes a cualquier
desarrollo, y que, como dicen Kostka y Gutiérrez (1997),
sería erróneo negar el papel liberador de la
razón y la ciencia a través de un naturalismo que
devolviera al hombre de hoy a las cavernas y es por ello que urge
encontrar caminos de solución efectivos.

Entendemos que todo consumidor humano busca y buscará
siempre ampliar los límites de la libertad de
elección para aumentar su calidad de vida; constituye ello
un derecho de la condición humana que conlleva la
búsqueda, por un lado, de un replanteamiento del
significado del concepto de calidad de vida y que comporta
redescubrir que ésta no pasa por una posesión cada
vez mayor de bienes, sino por reencontrar la esencia de la
calidad humana; por otro lado entendemos que todo esto supone
encontrar nuevas formas de control y gobierno de la
producción y administración de bienes, en este sentido
las perspectivas que ofrece el nuevo ecologismo deben ser
ampliamente consideradas.

6.11. REVOLUCIÓN VERDE

Revolución verde se llama un período que abarca
más o menos de 1960 a 1990, cuando hubo un gran auge en la
productividad agrícola en el mundo en desarrollo.

En esos decenios, en muchas regiones del mundo, especialmente
en Asia y América
Latina, la producción de los principales cultivos de
cereales (arroz, trigo y maíz) se
duplicó con creces. También aumentó mucho la
producción de otros cultivos.

Desde 1950 la producción agrícola ha ido
aumentando continuamente, a un ritmo que ha superado con creces
al muy importante aumento de la población, hasta alcanzar
una producción de calorías alimenticias que
serían suficientes para toda la humanidad, si estuvieran
bien repartidas.

Este incremento se ha conseguido, principalmente, sin poner
nuevas tierras en cultivo, sino aumentando el rendimiento por
superficie, es decir consiguiendo mayor producción por
cada hectárea cultivada. Es lo que se conoce como revolución
verde.

El aumento de productividad se ha conseguido con la
difusión de nuevas variedades de cultivo de alto
rendimiento, unido a nuevas prácticas de cultivo que usan
grandes cantidades de fertilizantes, pesticidas y tractores y
otra maquinaria pesada.

Algunos de los logros más espectaculares de la
revolución verde fueron el desarrollo de variedades de
trigo, arroz y maíz con las que se multiplicaba la
cantidad de grano que se podía obtener por
hectárea. Cuando a lo largo de los años 1960 y1970
se fueron introduciendo estas mejoras en Latinoamérica y Asia, muchos países
que hasta entonces habían sido deficitarios en la
producción de alimentos pasaron a ser exportadores.
Así la India,
país que sufría el azote de periódicas
hambrunas, pasó a producir suficiente cereal para toda su
población; Indonesia que tenía que importar grandes
cantidades de arroz se convirtió en país
exportador, etc

Los beneficios traídos por la mejora agrícola de
la llamada Revolución Verde son indiscutibles, pero han
surgido algunos problemas. Los dos más importantes son los
daños ambientales, de los que trataremos con más
detalle a continuación, y la gran cantidad de
energía que hay que emplear en este tipo de agricultura.
Para mover los tractores y otras máquinas agrícolas
se necesita combustible; para construir presas, canales y
sistemas de irrigación hay que gastar energía; para
fabricar fertilizantes y pesticidas se emplea petróleo;
para transportar y comerciar por todo el mundo con los productos
agrícolas se consumen combustibles fósiles. Se
suele decir que la agricultura moderna es un gigantesco sistema
de conversión de energía, petróleo
fundamentalmente, en alimentos. 

Como es fácil de entender la agricultura actual exige
fuertes inversiones de
capital y un
planteamiento empresarial muy alejado del de la agricultura
tradicional. De hecho de aquí surgen algunos de los
principales problemas de la distribución de alimentos. El problema del
hambre es un problema de pobreza. No es que no haya capacidad de
producir alimentos suficientes, sino que las personas más
pobres del planeta no tienen recursos para adquirirlos.

En la agricultura tradicional, también llamada de
subsistencia, la población se alimentaba de lo que se
producía en la zona próxima a la que vivía.
En el momento actual el mercado es global y enormes cantidades de
alimentos se exportan e importan por todo el mundo. 

Para los próximos decenios se prevé que si bien
la producción agrícola aumentará más
rápidamente que la población mundial, este aumento
será más lento que el actual. Esta
disminución refleja algunas tendencias positivas. En
muchos países la gente come hoy todo lo que desea, por lo
que ya no hace falta aumentar la producción. Pero
también refleja la triste realidad de centenares de
millones de personas que necesitan desesperadamente más
alimentos pero que no pueden comprarlos a los precios que
animarían a los agricultores a producir
más. 

6.11.1 Productividad

Desarrollo de la agricultura

El desarrollo rural está dirigido a mejorar la calidad
de vida de las comunidades rurales por medio de la
satisfacción de sus aspiraciones socioeconómicas y
culturales y el fortalecimiento de su organización social,
al mismo tiempo que protege los recursos naturales.

La agricultura ecológica, gracias a su enfoque
holístico, contribuye al desarrollo rural de las
siguientes formas:

Mejora la gobernabilidad:

Coloca al productor en el centro de la estrategia de
producción agrícola restableciendo la
función de toma de
decisiones de las comunidades locales, garantizando su
derecho a controlar sus propios recursos y dedicando su
participación activa en una cadena alimentaria de valor
agregado.

Crea un espacio económico dinámico. Al reducir
la mecanización y evitar el uso de agroquímicos,
crea puestos de trabajo y aumenta los retornos de la mano de
obra. La producción diversificada de productos de calidad
disminuye los impactos de las malas cosechas y aumenta las
oportunidades de comercialización. La diversidad es el medio
para alcanzar la seguridad de
ingresos y
alimentaria.

Mantiene un ambiente saludable. Por medio de su enfoque
ecológico, mantiene la integridad del ecosistema y la
productividad de los recursos naturales. Conserva los paisajes
naturales y las especies silvestres, devuelve la vitalidad a los
suelos y mantiene la biodiversidad por medio del uso y desarrollo
de semillas locales. Al reducir el uso de insumos
agroquímicos, la agricultura ecológica proporciona
un ambiente de trabajo más saludable para los
productores.

Edifica el capital social de las áreas rurales:

La agricultura ecológica se caracteriza más por
la intensidad de conocimiento
que por la intensidad de capital o de recursos; por lo tanto,
hace uso del conocimiento tradicional y promueve el intercambio
campesino a
campesino. Proporciona las herramientas necesarias para la
inspección y el control, tal es el caso de los Sistemas de
Control Interno y de Garantía

Participativos que fortalecen la organización social y
empoderar a las comunidades rurales.

La agricultura ecológica es un sistema holístico
de manejo de la producción que aumenta la salud del
agroecosistema haciendo uso, tanto de conocimiento tradicional
como de conocimiento científico. Los sistemas de
agricultura ecológica se basan más en el manejo de
los ecosistemas que en el uso de insumos agrícolas
externos.

Las prácticas agrícolas actuales obligan a las
personas a abandonar las áreas rurales.

Sistemas alimentarios insostenibles.

Muchos más productores dependen solamente de unos
cuantos cultivos que exigen inversiones sustanciales y crean
dependencia de insumos agrícolas que algunas veces no se
encuentran disponibles o que son ineficaces. Los costos de los
insumos son elevados y los precios de mercado de los productos
agrícolas siguen disminuyendo, forzando a los productores
y trabajadores a abandonar sus parcelas. Milenios de conocimiento
tradicional e indígena se están perdiendo.

Pérdida de recursos naturales

Los monocultivos que hacen uso de grandes cantidades de
fertilizantes y plaguicidas químicos provocan
desertificación, salinización y
contaminación de suelos y agua, dando como resultado la
pérdida de tierras productivas y biodiversidad de los
ecosistemas así como la extinción de especies.

Pobreza

En la búsqueda de medios de vida, los productores y
trabajadores migran hacia las ciudades aumentando así la
vivienda deficiente y el empobrecimiento de las comunidades
urbanas marginales. En esos lugares, estas personas tienen poca
capacidad para la compra de alimentos de calidad. Disminuyen la
diversidad de sus dietas y con ello sus posibilidades de tener
acceso a una salud nutricional adecuada.

La agricultura ecológica es un modelo para el
desarrollo rural.

La agricultura ecológica está demostrando con
ejemplos de la vida real cómo aumentar la sostenibilidad
económica, social y ambiental. No solamente las
poblaciones rurales gozan de los resultados de la agricultura
ecológica, también los habitantes urbanos
están en una mejor situación.

Por lo tanto:

Los gobiernos a nivel local y nacional deberían
utilizar la agricultura ecológica como una estrategia para
el desarrollo rural, involucrando a las comunidades y a los
consumidores en sus decisiones. Las autoridades locales pueden
crear condiciones positivas para el desarrollo de la agricultura
ecológica en sus regiones. Esto puede lograrse de las
siguientes formas:

Organizar mercados diarios
y semanales de productores en las ciudades.

Ofrecer alimentos locales y orgánicos en comedores
públicos (escuelas, hospitales,

etc.).

Promover el establecimiento del agroturismo
ecológico.

Educar a las generaciones jóvenes sobre los
vínculos cercanos entre la agricultura, la ecología
y su alimentación diaria.

6.12 REGIONES CLIMÁTICAS

Teniendo en cuenta la circulación atmosférica y
otros factores, en el mundo se diferencian cuatro grandes zonas
climáticas:

6.12.1 Zona de convergencia intertropical

La podemos llamar también zona ecuatorial porque se
sitúa en las cercanías del ecuador. En
esta zona el aire cálido y húmedo tiende a
ascender, especialmente con la insolación del día.
Al ir subiendo se enfría por lo que se forman grandes
nubes que, prácticamente todos los días al
atardecer, descargan lluvia. La abundancia de lluvias y las
elevadas temperaturas favorecen el desarrollo de la
vegetación y es en esta zona en la que se desarrollan los
grandes bosques selváticos. Esta zona climática no
se sitúa a lo largo de todo el año en el mismo
sitio, sino que sufre desplazamientos hacia el norte o hacia el
sur, dependiendo de las estaciones o empujada por los vientos
monzones, que son especialmente fuertes en el sur de Asia.

6.12.2. Zonas tropicales

Son las situadas al norte y al sur de la zona anterior. En
ellas predominan los llamados vientos alisios que se forman
cuando las masas de aire del norte o del sur se mueven para
ocupar el espacio que deja libre el aire ascendente de la zona
ecuatorial. Por el efecto Coriolis, en el hemisferio norte los
alisios soplan predominantemente de noreste a suroeste, mientras
que en el hemisferio sur lo hacen de sudeste a noroeste.

En altura la circulación del viento se hace en sentido
contrario, hasta los 30º de latitud, aproximadamente, lugar
en donde el aire, ya enfriado, se desploma hacia la superficie
cerrándose así las corrientes convectivas
próximas al ecuador.

Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6
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