Indice
1.
Introducción
2. Conclusión
En la historia de la
Educación Argentina, los
distintos períodos y épocas que pueden
distinguirse, está, estrechamente vinculados con las
diversas concepciones que ha primado en el devenir
histórico. El sistema educativo
vigente en un determinado momento de la historia de un pueblo
siempre responde a una política educativa
basada en un conjunto de principios
políticos, socio-económicos y culturales,
emergentes de un proyecto
nacional, concebido de acuerdo con una determinada
cosmovisión.
Dentro de los distintos períodos del sistema educativo
en nuestro país, considero que el neoliberalismo
marcará un hito dentro de los momentos históricos
de la
Educación Argentina, para
la construcción de la ciudadanía.
En la época del Estado de
Bienestar (populismo) se
imponían los tres derechos ciudadanos:
derechos
políticos (participación política), derechos
civiles (libertades individuales) y todos los derechos sociales (
trabajo, educación, vivienda,
salud, prestaciones
sociales) cuya protección vendría garantizada por
el Estado.
En ese momento el Estado ha
recibido el nombre de Estado Social
de Derecho, donde incluye en el sistema de derecho no sólo
las libertades clásicas sino también los derechos
económicos, sociales y culturales, es decir que satisfacer
las necesidades básicas y el acceso a los bienes
fundamentales para todos los miembros de la comunidad "son
exigencias éticas a las que el Estado debe responder"
(Cortina, Adela "Ciudadanos del mundo")
Este sistema político fracasó cuando se
transformó en una tiranía haciendo un culto a la
persona que
ocupaba el poder.
Además los ciudadanos, especialmente la masa obrera
exigía cada vez más y por tal motivo se
llegó al caos.
Luego comenzó a gestarse una política
desarrollista, ahogada por los golpes militares de
represión y silencio por parte de los ciudadanos.
Contrariamente a esta postura populista, el neoliberalismo
garantiza la libertad de
los ciudadanos entendida como independiente con respecto a los
demás ciudadanos, garante del libre juego del
mercado y los
intereses económicos.
La vuelta a la democracia en
la década del 80, la sociedad civil
renace en las luchas por las libertades civiles y políticas.
El neoliberalismo tiende a ver a esta sociedad civil en
oposición al Estado, asimilándola al mercado para
satisfacer a los intereses privados.
En los años 60 y 70 se criticaba a la educación y al
Sistema Educativo porque planteaba que la escuela era un
aparato ideológico del Estado o sea que era promotora de
cohesión social.
El neoliberalismo trae una ruptura de cohesión social,
cada uno se las arregla como puede en el marco de un
individualismo desatado y salvaje. No hay vínculo entre
valores y
sociedad y
plantea que como somos globales no estamos vinculados a ninguna
sociedad. Aparece una idea distinta de cohesión social
desde una perspectiva democrática, porque los sectores
dominantes, el capital
financiero internacional, no tiene ningún interés en
reproducir ningún orden social.
La
globalización está produciendo fenómenos
como la ruptura del mínimo de solidaridad por
parte del Estado, el que en estos momentos se preocupa por
establecer claramente los límites
con una sociedad civil
que no se ocupa sino de satisfacer sus intereses
individuales.
Por lo antedicho los derechos sociales en el concepto de
ciudadanía dentro del neoliberalismo están rotos
"por la desigualdad en los bienes
materiales,
por el eje pobreza-riqueza
de los individuos como consecuencia natural de sus méritos
personales, sus éxitos u fracasos en la adecuación
a las leyes del
mercado. Como deben primar las leyes del
mercado, los derechos sociales como salud, educación,
jubilación o generación de empleo han
desaparecido como elementos compensadores de la sociedad y ahora
deben ser pagados por los individuos. Se apela a la solidaridad entre
los pobres para satisfacer sus necesidades y se propicia la
organización de las asociaciones no gubernamentales"
(Norma Paviglianiti. Nov. Educativas. Nº 57)
En un editorial del diario Clarín del 03-12-00 se da a
entender que el déficit en la inversión social es muy grande y que la
ciudadanía se ve desprotegida por el Estado y que al
gobierno le
corresponde fortalecerla, contribuir a preservar su pluralismo,
diferencia y riquezas culturales, crear situaciones de equidad y
afianzar la justicia y las
condiciones de seguridad, pero
como dice Portantiero "…Cuando el Estado delega esas
funciones
integradoras internas, en medio de la ola de globalización actual, es natural que la
polarización social crezca. En la lógica
de las políticas
neoliberales, es la polarización social la que lleva a la
degeneración de distintos niveles de
ciudadanía".
En educación esta polarización está bien
definida, todos acceden a la educación básica pero
hay escuelas primarias de calidad muy
distinta, diferencia que se oculta bajo la apariencia de un mismo
certificado nacional de aprobación. En tal caso la
apariencia de "Educación para Todos" se desvanece y se
hace evidentemente la dualización del modelo, donde
un derecho pretendidamente universal sólo es ejercido por
los "ciudadanos de primera" si es por los ingresos y los
"ciudadanos de segunda" lo hacen por la acción
pública.
Para el neoliberalismo la política es sólo un
instrumento para respetar las leyes, para mantener estos niveles
de exclusión de la ciudadanía la misma utiliza
altos niveles de autoritarismo.
Según Norma Paviglianiti (Nov. Educ. Nº 57) hay un
nuevo círculo de pobreza que
denominaría "pobreza política" que es más
difícil de reconocer, que afecta al tejido social en su
conjunto y básicamente a las nociones de
"ciudadanía y democracia".
Ella habla de tres dimensiones de pobrezas
política:
- Naciones políticamente pobres, cuando
éstas no pudieron lograr un espacio de
autodeterminación y sobreviven como espacios de un gran
centro (blindaje económico del F.M.I.) - Sociedades políticamente pobres: están
débilmente organizadas y sólo son objetos de
manipulación de grupos
económicos - Ciudadanos políticamente pobres: no conocen y
no comprenden las transformaciones económicas, sociales
y políticas que les toca vivir y por lo tanto no tienen
herramientas
para organizarse, reivindicar e influir en las decisiones del
gobierno.
Esta polarización también cuenta para la
política. El sector "integrado", sujeto de derechos y de
presión
sobre el Estado es el que conforma la sociedad civil y el otro
sector integrado por aquellos cuya existencia depende del Estado,
carente de derechos sociales y discriminado de derechos civiles,
sólo vive una mínima ciudadanía
política y por supuesto no accede a ella, salvo con
irrupciones violentas y fragmentadas de protestas colectivas,
aislada por represión del gobierno o cooptadas
segmentariamente.
En este caso se propone en educación la formación
de hábitos democráticos y aprendizajes de los
saberes, actitudes y
competencias
para alcanzar una participación social integral en
sociedades que
exigen un mayor nivel de conocimientos para
ejercer el protagonismo responsable.
Este discurso es
muy viable en escuelas destinadas a los sectores "integrados"
pero no para los ciudadanos olvidados que asisten a las escuelas
públicas donde el principal objetivo es el
asistencialismo (copa de leche, comedor
escolar, ropero escolar)
Sin embargo los ciudadanos están empezando a irrumpir en
los estratos políticos. Un ejemplo de ello lo describe el
diario Clarín en su editorial del día 14-12-00.
"…Una meta importante para el cultivo de la cultura
política es difundir el proyecto
(presupuesto
para la administración
pública), facilitar su estudio y receptar la
opinión de los ciudadanos.
Como punto de partida para lograr este mayor compromiso
ciudadano, alrededor de ochocientos alumnos de cuarto y quinto
año de veinte escuelas públicas y privadas de la
Ciudad de Buenos Aires
estuvieron estudiando durante seis meses el presupuesto 2000
de la Ciudad.""….El fruto de este trabajo le fue
presentado a los integrantes de la Comisión de Presupuesto
y Hacienda de la Legislatura de la Ciudad de Buenos
Aires."…" La mayor intervención de los
ciudadanos en los temas de interés de
toda la comunidad puede
promoverse a través de la promoción de la cultura
política, y esto, por su lado es capaz de iluminar y
mejorar facetas poco transparentes o ineficientes de los
órganos estatales".
El neoliberalismo, con su discurso de
características técnicas,
propone la libertad
individual. El ciudadano es libre para comerciar, tener propiedad
privada, o sea consumidor y
propietario de sus bienes; el dinero es
el mayor instrumento de mayor libertad, pero esa libertad no
puede concretarse si no hay dinero.
No se puede elegir, esto sucede con todos los derechos sociales,
especialmente salud y educación.
La política neoliberal va en desmedro de los
derechos del ciudadano y es lo que estamos padeciendo todos los
ciudadanos que conformamos la Rep. Argentina después de
diez años de esa política: un país
vació en valores, una
educación "para todos" que es sólo una
utopía y una sociedad totalmente polarizada, cuya balanza
se inclina hacia los sectores más necesitados.
El paradigma que
sostiene la reforma educativa impulsada por el gobierno de
Menem es
netamente neoliberal financiada por el Banco Mundial,
organismo que impone las pautas para dicha reforma.
Bajo un contexto discursivo como: "Estamos construyendo juntos
una nueva educación pública de calidad"
"Será la clave del crecimiento social y económico
de nuestro país y de nuestra gente en las décadas
futuras" (Susana Decibe. Zona Educ.Nº10) o también
los discursos de
"cambio",
"transformación", "progreso", "futuro" sólo
constituyen el discurso técnico característico de este paradigma.
Pero también hay otro discurso más amplio donde los
cambios, no sólo educativos, llevados adelante por el
gobierno se justificaron como "yo o el caos" o sea que el
presidente Menem se
ponía en primera persona, donde
parece que el caos no está lejos de la "barbarie" de
Sarmiento pero que actualmente se ha olvidado de un siglo de un
sistema educativo funcionando, creciendo, formando la
creación de un país.
Con esta reforma se introduce un nuevo sistema, con nuevos
significantes, todos muy reconocibles en el discurso neoliberal:
calidad, reciclaje
docente, equidad, vouchers, cambio
tecnológico, mercado laboral, sociedad
del conocimiento.
- La total descentralización y federalización
del sistema educativo, a cargo ahora de las distintas
provincias, (salvo las universidades que continúan
siendo nacionales), en especial lo que hace al aparato
burocrático-administrativo. - La centralización del establecimiento de los
Contenidos Básicos Comunes y la orientación
pedagógica generales de manos del Ministerio de
Educación y Cultura de la Nación. - El reemplazo de la histórica escuela
primaria por la Educación General Básica (EGB)
que extiende de siete a nueve años de escolaridad
obligatoria - El reemplazo de la escuela media o secundaria por la
Educación Polimodal de sólo tres años de
duración y con un fuerte compromiso en su oferta de
terminalidades, con el mercado laboral.
Con respecto a la educación universitaria
"…desde 1990 el Poder
Ejecutivo Nacional impulsa una reconversión
neoconservadora; va perfilándose entre dos grandes
líneas de política universitaria: la opción
diferenciadora y competitiva y la propuesta diversificadora y
cooperativa
interinstitucional". "…La opción neoconservadora
intenta achicar el sistema de educación
superior, concentra la calidad para unos y desliga al estado
del financiamiento
de la educación pública". "Abre una nueva etapa de
creaciones de universidades, especialmente privadas, como
mecanismo que presupone que el mercado es el mejor regulador de
las políticas universitarias." "…los resultados de
la aplicación del proyecto neoconservador han sido la
reorganización de las instituciones
jerarquizadas y segmentadas, las restricciones en el acceso, la
reducción del cuerpo docente y de investigación y la calidad para pocos
trasladadas a la cúpula del sistema de posgrados.(Norma
Paviglianiti, María C. Nosiglia, Mónica Marquina
"Recomposición neoconservadora. Lugar afectado: la
Universidad.)
El Estado viene achicándose a partir de las sucesivas
privatizaciones, en relación al sistema educativo su
descentralización viene a conformar una
forma de achicarse ya que han pasado a estar a cargo de los
estados provinciales y han quedado totalmente a merced de la
economía
de éstos.
Por otra parte, se impulsan mecanismos de gestión
institucional pertenecientes al modelo
empresarial, que incluyen la participación en el mercado
con "ofertas educativas" para conseguir "mejor calidad para
ingresar al mercado laboral".
A su vez las políticas de ajustes han impactado
directamente en las instituciones
escolares. Cada vez son más las escuelas afectadas en
alimentar a los alumnos, tarea muchas veces realizadas por los
mismos docentes, porque la función
pedagógica de la escuela convive con el sostenimiento de
la supervivencia de los alumnos. En estas escuelas el fracaso
escolar se ha resignificado, ya que un aplazo o la
expulsión del sistema significa que ese chico deja de
alimentarse a la vez que queda a merced de la calle, por lo que
con facilidad termina en la delincuencia.
Si las escuelas en Argentina tuvieron como mandato la
homogeneización de las diferencias en vista de la construcción de la Nación,
actualmente esa homogeneización se ha quebrado tanto por
las desigualdades socioeconómicas de los sujetos que se
educan, como por las desigualdades que la
descentralización introduce, produciendo un sistema
fragmentado.
El discurso de conocimiento
como llave para el progreso y el desarrollo de
la Nación choca constantemente con los índices de
desocupación, cuyas causas están
más allá de un problema de descalificación
laboral, como el discurso hegemónico que la
reforma pretendió hacer creer.
Esta reforma ha obviado al sector en cuyas manos está la
mayor posibilidad de realizar los cambios: los docentes.
El régimen laboral docente, que pasaron de ser
profesionales a ser trabajadores estatales, se ve cada vez
más ajustado, cuando se intentan ejecutar políticas
en un marco de inseguridad y
severos ajustes, como el que promueve el gobierno provincial con
el nuevo régimen de licencias, régimen que
sería impuesto por los
organismos de financiación internacional.
Estas cuestiones muestran que todavía queda mucho por
hacer en el campo de la educación, tanto si optamos por
continuar con la implementación a ciegas de la nueva
Ley como si lo
hacemos por evaluar los pasos que hemos dado y reajustamos el
rumbo, abandonando las imposiciones externas y recuperando la
voluntad de educar, de incluir, de escuchar.
También se muestra un
quiebre en lo que la educación significó para el
proyecto de la Argentina moderna: fue tarea ligada a un futuro
mejor, a la construcción de una Nación en
crecimiento, a la constitución de un todo. Hoy, el caos no
está constituidos por analfabetos o sujetos
"no-civilizados", hoy en el caos están sujetos
desnutridos, con dificultades para el acceso a la
alfabetización, pero también sujetos educados que
tienen que luchar día a día para permanecer en el
sistema.
Hoy ser pobre es comenzar desde una posición desfavorable,
una carrera librada a las "potencialidades individuales" donde
los sujetos tienen que medirse unos con otros y donde la
existencia de pocos ganadores son condiciones del éxito.
Autor:
Silvia Fosch
Sra. Pereira (Sta. Fe)