Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

La salud comunitaria como eslabón del autodesarrollo de jóvenes en la comunidad del Reparto Universitario (página 2)



Partes: 1, 2, 3

Por su parte la Conferencia
Internacional sobre Atención Primaria en Alma
Atá, en 1986, la consideró como "El logro, cuando
las funciones de
todos los órganos y sistemas del
organismo humano se encuentran en equilibrio con
el medio natural y social y están ausentes todo tipo de
estado morboso
y limitaciones. Para lograr este estado de salud se debe potenciar la
responsabilidad ante la salud".[6]
Esta definición hace mención a la necesidad de
potenciar la responsabilidad ante la salud, potenciación
que esta mediada por los intereses clasistas de los estados, los
cuales como se apunta más arriba, son los encargados de
definir y poner en práctica las políticas
públicas en los diferentes países en materia de
salud a favor o no del mejoramiento humano.

Por tanto el fenómeno de la salud es
esencialmente social y no solamente ausencia de enfermedades. Es social
porque social y consciente es el hombre, que
vive en sociedad, que
produce y reproduce sus propias relaciones sociales, que vive en
grupos,
comunidades y sociedades en
general, condicionadas en última instancia por las
relaciones de producción, mediando éstas en la
formación, tanto de la conciencia social
como individual de los sujetos sociales, en sus sentimientos,
estados de ánimos, conducta, modo de
vida etc.

Razón por la cual se debe concebir el concepto de salud
con un enfoque multifactorial; es decir, tener en cuenta no
sólo la ausencia de enfermedad en las personas, sino
concebir otros factores que inciden positiva o negativamente en
el complejo bienestar de salud de los sujetos como pueden ser las
circunstancias de la realidad donde están insertados, el
sistema de
contradicciones y malestares, los cuales en estado de latencia
constituyen obstáculos, tanto para el desarrollo
personal como el social.

Directamente vinculado con el concepto de salud se
encuentra el de calidad de
vida, como un elemento que permite ponderar desde el punto de
vista cualitativo, las condiciones en que un individuo, un
determinado grupo, una
comunidad o la
sociedad en su conjunto, se desempeñan en la vida frente a
los procesos que
afectan su salud y la terapéutica empleada en su
restablecimiento, tanto físico, psíquico, como
socialmente.

El concepto de calidad de vida,
aún teniendo entre sus elementos el de salud, supera al
concepto tradicional de la misma, al centrarse esta última
únicamente en la ausencia de enfermedad física o mental, para
incluir al factor social como el elemento necesario a la hora de
hablar de salud, cuestión que permite hacer un análisis contextualizado y más
integral del hombre, al
preocuparse por el restablecimiento social de los mismos.
Significa por tanto valorar el concepto de calidad de vida con
una mirada más humanista, es decir reconocer el sistema de
contradicciones en el cual están imbuidos y necesitados de
descubrir, para poder cambiar
el estado de
cosas existentes. Por lo que no basta desde la perspectiva de
salud curarse físicamente, se trata de curarse
socialmente.

Este concepto supera también los principales
puntos que debían incluirse en un programa de salud
brindados por Sigerist[7]el cual enumeró
primero la educación gratuita
para todos, incluyendo la educación en salud;
segundo, las mejores condiciones de vida y de trabajo
posibles; y tercero los mejores medios
disponibles de descanso y recreación. La atención
médica en cuarto a la
investigación y la capacitación como quinto.[8]
Esta orientación conduce a varios componentes
básicos entrelazados de la promoción de la salud:

  • Acción intersectorial para obtener
    políticas públicas saludables, así como
    políticas de salud pública.

  • Afirmación del rol activo de los individuos
    para usar conocimientos de la salud que les permitan
    conductas conducentes a la salud y aumentar el control sobre
    su propia salud y sobre sus entornos.

  • Acción comunitaria desde las bases locales.
    Refuerzo de la participación del público y de
    su dirección de los asuntos de salud, como punto
    central de la estrategia de promoción de la
    salud.

Aunque dentro de los postulados brindados por Sigerist
para la promoción de salud, están presentes la
acción
intersectorial, así como la acción comunitaria
desde las bases locales, todavía en la práctica
estos postulados se tornan insuficientes.

Lo mismo ocurre con la práctica cotidiana, pues a
la hora de implementar los diferentes programas de
salud emitidos por el Ministerio de Salud
Pública de Cuba, por
ejemplo, ellos siguen siendo sectoriales, fragmentando de esta
forma la realidad, la que es bombardeada constantemente por
múltiples programas desde diferentes ángulos sobre
el mismo sujeto, que en ocasiones tienen carácter repetitivo. Otro aspecto
deficiente en la práctica, es el relacionado con la
acción comunitaria, pues casi siempre se concibe a la
comunidad como objeto al que hay que socorrer y resolver sus
demandas.

Cuando se habla de acción comunitaria, se hace
referencia a la necesidad de una acción transformadora que
permita un real cambio del
estado de cosas existentes en la comunidad, cambio que le viene
dado desde dentro a partir del reconocimiento del sistema de
contradicciones en los cuales están insertados y
dispuestos a superar a través de una real
participación.

Por eso se coincide con el concepto de
participación que brinda el Centro de Estudios
Comunitarios de la Universidad
Central "Marta Abreu "de las Villas
a saber: "La
participación comunitaria constituye un proceso que se
inicia cuando profesional y comunidad, desde sus lugares, sus
saberes y poderes, se relacionan para construir un saber social.
Al ser este un proceso de investigación-acción, esta
participación tiene la particularidad de ser
trasformativa, de conducir a nuevos descubrimientos y al planteo
de alternativa de cambio.[9]

Es decir cuando se habla de salud, no se está
haciendo referencia únicamente a la ausencia de enfermedad
física en los sujetos sociales, se incluye además,
la superación de enfermedades sociales, que se traducen en
el mejoramiento de la salud comunitaria a partir de el encuentro
entre el profesional y los miembros comunitarios, para construir
un saber social que permita un real cambio en los sujetos, sin
que sean manipulados, sino que se les indique el camino para que
puedan buscar formas alternativas de cambio y puedan crecer en
salud.

De lo que se trata entonces, es de implementar en la
práctica programas de salud, concibiendo al hombre como
sujeto participativo y no como un objeto al cual se debe socorrer
para curar su enfermedad física, hay que profundizar
más y además de curar el cuerpo, curar el alma y de
esta forma dignificar al hombre, ayudarlo a emanciparse,
permitiendo que vaya dejando de ser un objeto para convertirse en
una persona realmente
participativa y de esta forma pueda autodesarrollarse de forma
saludable.

Por tanto, cuando se habla de salud, se hace desde una
nueva perspectiva, diferente a la concepción que hasta hoy
ha primado en muchos profesionales del sector de la salud y en
algunos facilitadores de los proceso de intervención
comunitaria; pues hay que retomar el concepto de que "La salud
individual y social como la mayor o menor capacidad de las
personas de identificar y disponerse a superar el sistema de
contradicciones existentes en la estructura
social a la cual pertenecen".[10]

El principio del autodesarrollo comunitario, por sus
amplias posibilidades para la identificación
problemática, así como por sus viabilidades
solucionadoras, constituye una propuesta teórica y
practica de gran alcance movilizador y critico, lo que se aviene
las necesidades que presenta el proceso de intervención
para potencializar los conocimientos que tienen los adolescentes
sobre las Infecciones de
transmisión sexual en nuestras comunidades. Este
principio es concebido por los investigadores del Centro de
Estudios Comunitarios de la Universidad Central "Marta Abreu" de
las Villas
.

La proyección de este principio del
autodesarrollo, que parte de la identificación de
contradicciones, carencias y malestares, y que transita por el
camino del accionar consciente y asumido, emerge respuesta eficaz
y activa, situada en la problemática identificada por los
propios protagonistas y ejecutores de la solución: de
ahí su carácter social y humano, revolucionario,
cultural.

Importante resulta para la investigación, asumir
el concepto de comunidad que propone el Centro de Estudios
Comunitarios de la Universidad Central de las Villas
quien
define la comunidad como el "grupo social que comparte espacios
donde la participación y cooperación de sus
miembros posibilitan la elección conciente de proyectos de
transformación: dirigidos a la solución gradual y
progresivamente de las contradicciones potenciadoras de su
autodesarrollo".[11]

En la gestión
del proyecto de
intervención con los adolescentes del Reparto
Universitario de la Ciudad de Santa Clara, constituye vital ver
la participación como un accionar activo y asumido. "La
participación constituye una acción humana,
necesaria para la construcción de proyectos de desarrollo mas
acorde con necesidades de la población, necesario y encaminado a lograr
fines concretos, que permitan trabajar entre todos, por la
superación de las contradicciones de la vida cotidiana de
los individuos, en la cual se expresa un necesario proceso de
aprendizaje y
actitudes de
vínculos".[12]

La participación real y conciente comienza con la
identificación de saberes, que en el proceso de
gestación del proyecto comunitario se incorporan al saber
general y se convierten en herramientas
para transformar la realidad. Para que este proceso sea efectivo
es condición indispensable establecer relaciones
horizontales y no verticales.

En el interés
del autor por potenciar el
conocimiento sobre las infecciones de transmisión
sexual desde un programa de intervención comunitaria que
parte del principio del autodesarrollo, se parte de la metodología elaborada por el Centro de
estudios Comunitarios, Universidad Central " Marta Abreu" de Las
Villas
, (CEC) tomándose en cuenta los siguientes
principios:

-Principio de la salud comunitaria (se
considera a este como el más importante)

La definición de salud elaborada por el (CEC) en
su connotación social, estipula la identificación y
superación de contradicciones como premisa básica.
Elemento este que lo sitúa en un referente conceptual de
amplias posibilidades para la articulación de un proyecto
de intervención sobre conocimientos de los adolescentes en
torno a las
infecciones de transmisión sexual.

Asumir la salud individual y social como la mayor o
menos capacidad de las personas para identificar y disponerse al
cambio, superar el sistema de contradicciones existentes en la
estructura
social a la cual pertenece, supone la necesidad de ver el
desarrollo de los conocimientos sobre las infecciones de
transmisión sexual en los adolescentes, como un aspecto en
el desarrollo de sus procesos formativos en tanto seres humanos,
capaces de disponerse al cambio una vez visualizadas y asumidas
sus problemas y
contradicciones.

Es sabido que los adolescentes, en el marco del proceso
de intervención, constituyen observadores profundos y
críticos de sus realidades.

-Principio contradicción
rol-función

En el estudio del encargo social que tiene el
profesional del trabajo comunitario, es necesario detenerse en
dos elementos claves: los intereses del sector político y
económicamente dominante y los intereses de las masas
populares.

En nuestra sociedad, donde los poderes gubernamentales
presentan fuertes arraigos populares, están creadas las
condiciones para que intereses políticos gubernamentales e
intereses populares confluyan, siendo el profesional del trabajo social
comunitario puente comunicador y actor de ambos
intereses.

En CEC define por rol profesional del trabajo social
comunitario, "el conjunto de derechos y obligaciones
que proceden de normas y
expectativas aplicadas a esa posición particular de la
estructura social" y por función
"las características objetivas observables que favorecen
el ajuste en la realización profesional trabajo social
comunitario destinatario de su labor: la
comunidad".[13] Más adelante se plantea que
"estos elementos no tienen por que ser excluyentes, pero entre
ellos existe hoy cierta distancia, pues el rol del profesional no
propicia en la medida necesaria el ajuste antes
mencionado".[14]

Este ajuste, que se traduce en contradicciones entre el
rol del profesional del trabajo comunitario y su función
como tal en el ámbito del proceso de intervención,
se aprecia en la dejación de este proceso a la
espontaneidad o al empirismo; sin
que exista un accionar solidamente concebido desde vaciamientos
científicos y mediados por los intereses y saberes de los
adolescentes en su condición de participantes
comunitarios.

El momento del proceso de intervención en los
adolescentes, no se aprecia potenciado por profesionales del
trabajo comunitario. Cuestión esta que lo convierte en un
fiel reflejo de esa contradicción rol-función. En
virtud de esa contradicción, es justo señalar que
tampoco el profesional del trabajo social incorpora en su proceso
de formación de herramientas y conocimientos
científicos que lo preparen para asumir el proceso de
intervención en los adolescentes desde un accionar
comunitario.

Hasta aquí se han presentado los referentes
teóricos que sustentan el proceso de intervención,
los cuales de forma sintética, están relacionados
con las nociones teórico conceptuales sobre la
potencialidad de los adolescentes y los aportes realizados por
autores, al estudio de esta temática, algunos referentes
teóricos relacionados con hábitos y conductas de
estos adolescentes y su repercusión en el desarrollo social
del ser humano, así como las potencialidades que brinda la
metodología del autodesarrollo comunitario para potenciar
los conocimientos sobre las infecciones de transmisión
sexual en los adolescentes.

Prevención: Concepto y Modelo de
Prevención

La conducta de los seres humanos ha sido objeto de
profundas investigaciones
porque unas veces ha estado acorde a las normas establecidas y
otras no. Asimismo, han sido multiples los intentos por evitar
las conductas delictivas en la sociedad, con el fin de mejorar
las interrelaciones entre los hombres.

En este sentido surge la prevención, vocablo que
proviene del latin preventione que significa
acción o efecto de prevenir, de disponer o prever para
tratar de evitar un riesgo.

La prevención fue una de las perspectivas que dio
origen al trabajo de la Psicológia Comunitaria. Sin
embargo, no es solo objeto de esta ciencia. La
multidimencionalidad de los problemas
sociales requiere, a la luz de estos
tiempos, un abordaje multidiciplinario y/o transdisciplinario,
para poder evaluar la totalidad del fenómeno lo más
próximo posible a la realidad.

Varias ciencias han
tratado de definir la prevención, pero hasta el momento no
se ha llegado a un consenso sobre el contenido y el alcance de
las misma. Asi por ejemplo, la medicina y la
psicologia clinica se encaminan a la prevención de
enfermedades y a la promoción de salud. En el caso de la
sociologia, el trabajo
social, la psicologia social y la pedagogia, trabajan con el
concepto de prevención social para abarcar los problemas
sociales. La criminología la asocia al delito y a la
delincuencia,
por ser su objeto de estudio; pero ambos conceptos de
prevención social y prevención del delito,
están estrechamente relacionados.

No solo la ciencia de
que se parte para su definición determina el campo de
acción de la prevención; tambien depende de los
autores que han trabajado el tema y de la posición
axiologica y epistemiológica ante los fenómenos de
la realidad asumida por ellos .

Introducida en el campo de la psiquiatria a partir del
siglo XX por autores como Erich Lindemann y Caplan, asumida
posteriormente por otros autores, la prevención se dirige
a analizar y eliminar los factores psicosociales que constribuyen
al desarrollo de la enfermedad; de esta forma actua como un
complemento de la asistencia individual. Sin embargo, la
asociación a condiciones de salud y los resultados de las
prácticas interventivas utiltizadas han sido ampliamente
cuestionadas.

Desde el campo de la criminologia, M. Viera define la
prevención como "el conjunto de medidas o indicadores
elaborados por el Estado, las organizaciones
politicas y de masas, organismos y entidades estatales para
minorizar el delito, sus causas y consecuencias, neutralizando
sus efectos.[15] En un sentido más radical,
A.Garcia Pablos de Molina la considera como "una
intervención dinámica y positiva que neutralice sus
causas y sus raices".[16]

Ambos autores dirigen la prevención al hecho
delictivo, más que al fenómeno social de la
delincuencia. La reducen a las medidas tomadas por el Estado y
las organizaciones politicas y de masas, limitando asi la lucha
de los ciudadanos por su bienestar social.

Abordada como la lucha contra la delincuencia,
criminologos del desaparecido campo socialista, la valoran como
"un conjunto de medidas estatales y sociales de diversa indole
(morales,psicológicas,juridicas), dirigidas a errradicar
las causas y condiciones que engendra el fenómeno social
de la delicuencia".[17]

Encaminar la prevención hacia fenómenos
sociales como la delincuencia, otorga a este proceso un caracter
más abordador, en tanto permite determinar las
contradicciones que están en la base de los problemas
analizados, y examinar las manifestaciones expresadas en el modo
de vida de una sociedad.

Teniendo en cuenta la labor educativa que debe
realizarse en la sociedad, reduciendose solo a deteminados
grupos
sociales, se define la prevención como
"intervención sociopedagogica, confiada a educadores
especializados y aplicada sobre todo a los jovenes
inadaptados que viven en zonas urbanas, con un indice elevado de
inadaptación juvenil, con vista a reducirla o
prevenirla".[18]

La dimensión y complejidad que adquieren cada dia
los fenómenos sociales, y como consecuencia de estos, los
compartimientos inadecuados en la sociedad, demuestran lo
problematico que resulta definir el termino prevención. No
obstante, al parecer, todos los autores coinciden al valorar la
prevención, con la idea de tratar de evitar o anticipar
una conducta contraria al orden social o legal impuesto por la
sociedad.

Lograr la acción anticipada ante los hechos
negativos, debe convertirse en una meta de la labor preventiva.
Por la envergadura de esta tarea con sus multiples
propósitos y consecuencias para toda la población,
no se puede limitar solo a las instituciones
especializadas, sino debe de tratar de implicar a todas las
personas de la comunidad y la sociedad en general.

Desde una visión sociológica,
R.Campoalegre la definió como "un tipo de actividad social
enfocada sistematicamente; una institución social
reguladora del sistema de relaciones sociales; una función
social orientada a constribuir con la organicidad y viabilidad
del sistema; y un proceso ideológico de formación,
conservación y promoción de valores
socialmente aceptados".[19]

Esta autora destaca el enfoque sistemático que
surge a partir de las interaciones en el sistema de relaciones
sociales, como elemento efectivo en la prevención social.
Esta idea es acentuada por M.Morales, quien define la
prevención "como la categoria que designa el sitema
historicamente formado por premisas objetivas y subjetivas de
liquidación de la delincuencia, asi como un conjunto de
medidas estatales y sociales tendentes a extirpar este
fenómenos y las causas y condiciones que lo engendran. El
mismo designa tanto las premisas objetivas de la
liquidación de este fenómeno como los factores
subjetivos de la lucha contra el
mismo".[20]

La existencia y funcionamiento de las organizaciones del
sistema preventivo a nivel comunitario, desempeñan un
papel protagonico en el cumplimiento de esta labor.Solo mediante
el trabajo coordinado de dichas instituciones se logran
solucionar los problemas existentes en la sociedad.

Una importante contribución a este concepto es el
expuesto por M.Soñora, quien define la prevención
comunitaria como:"Sistema de acciones de
organización,preparación y
disposición de la comunidad (a través de sus
estructuras
organizativas) para identificar primero y revertir despues, sus
problemas especificos en materia de delito, a partir de sus
recursos,
necesidades y potencialidades comunitarias".
[21]

El nexo entre prevención y comunidad es
indisoluble. Para contrarrestar o eliminar las problematicas
sociales,es imprencidible la intersectorialidad y la unidad de
esfuerzos entre los agentes de cambio social; y la comunidad es
el escenario fundamental para esto, porque constituye el espacio
de confluencia y participación de las masas en el
desarrollo del proyecto social.

Por ello, un colectivo de autores cubanos define la
prevención como "Proceso dirigido a garantizar la reproducción efectiva de las relaciones
sociales estables y armonicas y la reducción de la
vulnerabilidad social y/o remozamiento de problemas sociales
criminogenos en el escenario comunitario,a partir de la
organización, preparación, planificación y participación de la
propia comunidad en la transformación de su realidad
teniendo en cuenta sus recursos y potencialidades".
[22]

A partir del estudio del entorno sociocultural y la
elaboración de la planeación
estrategica de desarrollo, los autores expresan la
prevención social comunitaria como :

  • Enfoque multidiciplinario, integral y
    sistemico.

  • La conjugación de los intereses mas generales
    con los especificos, enfocando a la comunidad como un todo, a
    la vez que focalizando las acciones preventivas en los grupos
    mas vulnerables.

  • Caracter predominantemente educativo y sociocultural
    de las acciones.

  • La busqueda de consensos representativos que
    legimiten las normas sociales establecidas.

A pesar de que estos autores señalan la
prevención como un proceso, con formas y metodos propios,
insisten en la vinculacion de las estructuras organizativas en el
contexto comunitario para desarrollarla.Todavia la comunidad
sigue siendo el objeto de la prevención, aunque ellos
dejan clara la intención de que se convierta en actor de
estas acciones.

Mientras la comunidad se analice como espacio
geográfico donde se realizara la prevención, la
participación ciudadana quedara limitada a
la colaboración con los proyectos elaborados, sin una real
implicación en este proceso.Esta es una de las
dificultades que tiene hoy la prevención en el pais, entre
otras como la ausencia de un enfoque sistemático en el
trabajo, y la falta de continuidad y colaboración en las
acciones planificadas.

El contenido de la prevención, que es otra de las
problemáticas en torno al tema, estará determinado
por la especificidad de los problemas que se necesiten modificar
en un contexto histórico-social concreto. En
este sentido las Infecciones de Transmisión Sexual es uno
de los fenómenos sociales que necesitan atención en
la sociedad actual.

Erradicar esta problemática, es uno de los
principales propósitos de las políticas nacionales
e internacionales, y encontrar la forma de hacerlo, es objetivo de
varios investigadores interesados en la salud de la
población. Al respecto se han propuesto varias
definiciones sobre prevención de las Infecciones de
Transmisión Sexual:

-Entramado dinámico de estrategias, cuyo
propósito es evitar o reducir la aparición de
problemas relacionados con el aumento de las Infecciones de
Transmisión Sexual.

-Conjunto de actuaciones para incidir sobre los factores
que provocan determinados fenómenos.

-Conjunto de acciones dirigidas a promover la salud de
las personas, con el objetivo de reducir la probabilidad
de aparición de los problemas derivados de Infecciones de
Transmisión Sexual.[23]

Igualmente se han expuesto los objetivos de
la prevención de las Infecciones de Transmisión
Sexual: "reducir la incidencias de las infecciones, difundir las
vías de infestación, extender el comienzo de las
relaciones
sexuales como principal vía de contagio de estas,
facilitar la asistencia medica de los contagiados.

Modelo de prevención:

A. Modelo
Jurídico-Represivo:

Las infecciones de transmisión sexual se analiza
como una acto de delincuencia, por lo tanto la forma de enfrentar
el hecho es mediante el aumento de la legislación
represivas cree que entre mas fuerte sean las leyes, menos se
propagaran las infecciones, olvidándose en la
mayoría de los casos los derechos mas elementales del
hombre.

B. Modelo medico o de salud
publica:

Se centra en la importancia que el individuo le concede
a su salud. El papel fundamental en la educación para la
salud se lo atribuye a la información sobre los daños que
ocasionan las Infecciones de Transmisión Sexual al
organismo. Sin embargo, las Infecciones de Transmisión
Sexual no es solo un problema de salud, causado por falta de
información, por lo tanto requiere de un abordaje
integral.

C. Modelo Sociocultural:

Las causas de las Infecciones de transmisión
sexual se le atribuyen al inicio cada vez más temprano en
el comienzo de las relaciones sexuales en la comunidad. Centra el
programa de prevención en las condiciones socioculturales
del contexto, mediante el ofrecimiento de posibilidades, medios y
oportunidades para la integración al entorno. A pesar de tener en
cuenta los factores psicosociales, su intervención se
redujo a charlas informativas, a inculcar el miedo y a la
exposición de contagiados.

D. Modelo Psicosocial:

Se considera las infecciones de Transmisión
Sexual como problema determinado por las conductas individuales
en un contexto social complejo y variable. La prevención
se encamina a descubrir los factores psicosociales que han
influido en la aparición del fenómeno tales como la
disfuncionalidad familiar, las presiones grupales, la
vulnerabilidad en la adolescencia,
las dificultades en la
comunicación, etc. Dentro de este modelo ha recibido
especial atención en los últimos años la
orientación conductual-comunitaria.

Este submodelo ha servido de base teórica a los
programas dirigidos al aumento del conocimiento y
a la educación de comportamientos para la
prevención de las Infecciones de Transmisión
Sexual.

Las estrategias preventivas mencionadas fueron objeto de
profundas criticas, evolucionando hasta la creación de
programas específicos e inespecificos.Los primeros se
orientan a prevenir el fenómeno de las Infecciones de
Transmisión Sexual abordando abiertamente la
problemática .Los segundos dirigen a otros tipos de
actividades no relacionadas directamente a ellas, tales como
emplear sanamente del tiempo libre,
fomentar el desarrollo y el autocontrol, la
autorrealización, el uso del condón ,las cuales
tributan al desarrollo personal y al
comportamiento
adecuado del individuo.

Los programas preventivos de mayores éxitos,
fueron aquellos donde se combino la información necesaria
para enfrentar las Infecciones de Transmisión Sexual desde
una actitud
consciente, y el aprendizaje de
habilidades para enfrentar las situaciones de riesgo. A pesar de
ello, la experiencia en el trabajo preventivo ha demostrado que
los programas no deben parcializarse en uno u otro enfoque .Las
Infecciones de Transmisión Sexual es un problema muy
complejo, determinado por factores jurídicos,
éticos, psicológico, médicos, educativos,
culturales, económicos y políticos, que no permiten
la unidireccionalidad en su abordaje.

Los modelos que se
atribuyen actualmente, deben integral al respecto educativo, los
aportes de otros modelos, para poder formar en el individuo la
capacidad de enfrentar los problemas de la vida cotidiana sin
recurrir a adquirir una infección de transmisión
sexual. Es aquí donde el sujeto se convierte en
responsable de su salud y su bienestar, porque cuenta con los
recursos necesarios para orientarse dentro de sus condiciones de
vida.

La prevención debe partir de una posición
dialéctico-materialista, donde se tenga en cuenta tanto al
hombre como a las condiciones que propician su comportamiento, y
la relación entre ambos .Tiene como objetivos disminuir
progresivamente las Infecciones de Transmisión Sexual como
fenómeno social productor de conductas y modos de vida
asociados a la cultura y al
orden económico-social imperante en una sociedad
determinada, en correspondencia con su momento
histórico.

La prevención de las Infecciones de
Transmisión Sexual esta , entonces dirigida a eliminar o
reducir la incorporación y/o reiteración de los
sujetos a formas de vida asociadas a conductas sexuales
inadecuadas, y de este modo, lograr un crecimiento en salud
asociados a la minimización de las amenazas para la
integridad física y la seguridad
social de la población.

Relación
de la prevención con las etapas de la
adolescencia

Los estudios sobre adolescencia comienzan a finales del
siglos XIX con el desarrollo de las Ciencias
Sociales y la necesidad de mejorar la preparación
profesional de los individuos para responder a los avances
científico-técnicos. A partir de ese momento surgen
varias concepciones sobre la misma, apuntando a los factores
determinantes del desarrollo y a la periodización que se
deriva de la concepción asumida.

Unas enfatizan en la determinación de los
factores biológicos (la maduración sexual y el
desarrollo físico): enfoque biogenético
representado por Stanley Hall, Sigmund Freud,
E.Kretschmer, entre otros.

Otras corrientes valoran aspectos sociales como la
posición del adolescente respecto a quienes lo rodean, y
la socialización como forma de
adaptación a la estructura social: enfoque
sociogenético vinculado a la Psicología
Social Norteamericana, representado por Kart Lewin y Robert
E.Grinder.

Para algunos autores el papel decisivo en el desarrollo
lo tiene las funciones y procesos psíquicos que
caracterizan cada etapa, tales como: los procesos
afectivos, según Eric Ericsson( la identidad y la
autovaloración),los procesos cognostivos como el pensamiento
operatorio formal de carácter hipotético deductivo,
para Jean Piaget, y
los aspectos de la
personalidad que emanan en cada etapa como la identidad, el
sentimiento de aislamiento, la tendencia a la reflexión
desarrolladas por E.Spranger y C.Bulher:enfoque
psicogenetico.

A pesar de que cada uno de estos enfoques,
señalados por I. S. Kon,[24]centra
diferentes aspectos del desarrollo de la personalidad
en esta etapa, aun conservan su valor
teórico hasta nuestros días, por las importantes
contribuciones que hicieron a la caracterización de la
adolescencia.

Sin embargo, para analizar una etapa de la vida hay que
tener en cuenta tanto los cambios que se dan en las estructuras
internas del individuo, ya sean biológicos o
personológicos, como en el contenido de su actividad
social. La personalidad no se puede valorar como universal e
invariable, sino expresada de forma particular en cada sujeto
como individuo único e irrepetible.De igual forma,
entender el desarrollo
humano como un proceso dialéctico, dinámico y
continuo, y considerar los elementos histórico-sociales
como determinantes de la personalidad, se convierte según
el enfoque histórico-cultural de L.S.Vigotsky, en
condición esencial para estudiar el desarrollo de la
personalidad.

La teoría
psicológica de L.S. Vigotsky puntualiza la tesis marxista
sobre la esencia social del hombre, toda vez que expresa
que:"toda función en el desarrollo cultural del
niño aparece en escena dos veces, en dos planos: primero
social, después dentro del niño, como
categoría
ínterpsíquica."[25]Para este autor
las funciones psíquicas superiores se forman en la
relación con el entorno, y solo después pasan a
formar parte de la personalidad.

En correspondencia con este enfoque, se asume la
categoría "Situación Social del Desarrollo",
expuesta por el autor para explicar el desarrollo de la
personalidad."Con este termino el designo esa combinación
especial de los procesos internos del desarrollo y de las
condiciones externas, que es típica en cada etapa y que
condiciona también la dinámica del desarrollo
psíquico durante el correspondiente periodo evolutivo y
las nuevas formaciones psicológicas, cualitativamente
peculiares, que surgen hacia el final de dicho
periodo."[26]

Por lo tanto, las transformaciones biológicas que
ocurren en cada etapa de la vida, así como las
modificaciones, que se establecen en los sistemas de actividad y
comunicación sobre la base de lo logros
alcanzados en la personalidad en la etapa precedente, propician
el surgimiento de las nuevas características
psicológicas que derivan en regulaciones o tendencias del
desarrollo en los periodos evolutivos.

Varios autores han denominado la adolescencia como
"pubertad",
refiriéndose esencialmente a la maduración
biológica de lo órganos sexuales. Sin embargo, la
adolescencia alude al proceso total crecimiento del individuo
.Otros autores la consideran como etapa de "transición" de
una época de la vida a otra: de la infancia a la
adultez.

La adolescencia es un periodo en el que surgen nuevas
responsabilidades en el ámbito familiar y social, que
implican la activación de los recursos personales y de las
potencialidades del sujeto para afrontar exitosamente el
recorrido por la etapa, por lo que para el adolescente esta se
convierte en un momento de nuevas posibilidades para el
crecimiento, el desarrollo personal y para insertarse activamente
en la vida social.

No obstante, las características que
acompañan el recorrido por la etapa, pueden colocar al
sujeto en una situación transitoria de mayor
vulnerabilidad frente a conductas de riesgo para la salud y otros
comportamientos problemáticos, si no existe una
compresión adecuada de los cambios ocurridos, ni una
orientación correcta por parte de las influencias
educativas.

Se han establecidos múltiples periodizaciones
bajo óptica
de diversas posturas teóricas, criterios y autores, sin
llegarse a un consenso sobre la delimitación de las edades
que encierra la etapa adolescente. Esto demuestra como el
desarrollo no ocurre de forma mecánica; sino de manera dinámica y
procesal, determinado por el contexto cultural donde se analiza.
Es un proceso que no solo representa cambios físicos, sino
también sociales y emocionales, y no depende
únicamente de la edad cronológica.

L. I. Bozhovich denomina la adolescencia como la
Edad Escolar
Media, que transcurre de 11-12 a 13-14 años .Para H. L.
Bee y S. K. Mitchell se extiende de los 12 a 18 años. A.
V. Petrovsky la enmarca de 11-12 a 14-15 años y los 17-18
años. Para desarrollar esta investigación se acepta
la propuesta de I. S. Kon sobre su culminación alrededor
de los 14-15 años, en tanto la mayoría de los
autores la hacen coincidir con la enseñanza secundaria.

Si bien es cierto que en este periodo se muestran
características especificas en cuanto a los sistemas de
actividad y de comunicación, vale destacar que varias de
las regularidades de esta etapa trascienden y se consolidan en la
juventud
temprana, al decir de I. S. Kon entre los 15-16 años y los
17-18 años. Esto sustenta la idea expuesta por L.
Domínguez de que la adolescencia constituye, sobre todas
las cosas, una "edad psicológica" que no esta determinada
fatalmente por la maduración del
organismo.[27]

Durante la adolescencia se produce un crecimiento
general de las dimensiones corporales, lo cual aparece recogido
en la literatura
psicológica como el "segundo estirón".Abarca
modificaciones en la estructura corporal y en el peso
expresándose de forma diferente en hembras y varones. Las
extremidades crecen y se producen modificaciones en la cara. Se
retrasa el aumento anual del ritmo del crecimiento de la columna
vertebral. Aumenta la masa corporal, fortaleciendo y
enriqueciendo los músculos del cuerpo.

Se pueden presentar alteraciones neurovegetativas:
mareos, palpitaciones, dolor de cabeza, ocasionadas por los
cambios en el sistema
circulatorio, debido al rápido crecimiento del
corazón
respecto a los vasos sanguíneos, al igual que pueden
aparecer desordenes funcionales del sistema nervioso,
manifestándose en agotamiento físico e intelectual,
hipersensibilidad, desajustes del sueño, susceptibilidad a
contraer enfermedades.

Se intensifica la actividad de la hipófisis con
el incremento de la actividad del hipotálamo, lo que puede
estimular el crecimiento de los tejidos y el
funcionamiento de importantes glándulas de
secreción interna como las suprarrenales, la tiroides, las
sexuales, lo cual puede influir sustancialmente en el proceso de
maduración sexual.

En esta etapa, aparece la primera menstruación en
las hembras, y en los varones la eyaculación nocturna o
espontánea. Ocurren cambios en la estructura del sistema
reproductor: aumenta el tamaño de los testículos
y del pene en el caso de los varones, y de los ovarios, el
útero y la vagina en las hembras. Aparece el vello
púbico y axilar en ambos sexos, y el vello facial en los
varones. En el caso de las hembras, aumenta la dimensión
de los senos y las caderas. En los varones, el tono de la voz se
hace mas grave con el incremento del tamaño y la fuerza de los
músculos de la laringe.

La maduración sexual abarca, según
estudios realizados en nuestro país por L.
Domínguez, para las hembras el periodo de 12,5 a 17-19
años y en los varones de 13,5-14 a 17-18
años.[28]Esto revela la capacidad
biológica para procrear, aunque en este periodo
todavía no están creadas las condiciones
psicosociales ni económicas para afrontar la
formación de una familia.

Si bien se considera la adolescencia como un periodo de
esplendor en cuanto al desarrollo humano, los autores han
señalado como las contradicciones que debe enfrentar el
adolescente ante las modificaciones de su cuerpo, lo cual se
recoge en la bibliografía científica como las
repercusiones psicológicas de las transformaciones
puberales, pueden traer apareado consecuencias negativas para la
salud y el comportamiento de los
adolescentes.[29]

En este sentido se reflejan problemas con la imagen corporal,
la salud, la autovaloración, la aceptación social,
la autoestima, la
independencia,
la flexibilidad, las practicas sexuales y la conducta social. Sin
embargo, los cambios que se producen constituyen regularidades
del desarrollo que se manifiestan de forma particular en cada
individuo, el cual enfrenta dichos cambios en correspondencia con
sus recursos psicológicos y con el apoyo que reciba del
entorno.

En esta etapa también ocurren transformaciones en
los sistemas de actividad y de comunicación, las cuales
juegan un papel importante como impulsoras de las
características psicológicas que emergen en la
adolescencia. Durante estas edades, el sujeto continúa
implicado en la actividad de estudio, con carácter
obligatorio en nuestro medio; pero este cambia tanto en su
contenido como en su forma: se acentúa el carácter
científico de las asignaturas, se diferencian mas una de
otras, lo cual impone al adolescente la necesidad de emplear
nuevos métodos
para la asimilación del material
didáctico.

Con el aprendizaje de las ciencias exactas, los
adolescentes aprenden a dominar sus símbolos, captar sus conceptos esenciales,
interrelacionarlos con los de otras ciencias y a valorar su
aplicación en la vida practica. Durante el transcurso de
la etapa, sé muestran mas interesados hacia el trabajo
intelectual, la adquisición de conocimientos y de
habilidades. Con esto, desarrollan la capacidad de resolver
problemas de la vida cotidiana, utilizando el conocimiento
científico, aunque todavía lo hacen de forma
limitada, por carecer de juicios críticos
valorativos.

El adolescente no solo se ve inmerso en las actividades
docentes, sino
en otras extracurriculares que favorecen el desarrollo de sus
intereses y capacidades. De igual modo, se comporta en ellas
más independiente y selectivo.

El nuevo sistema de actividades en que transcurre la
vida del adolescente, desarrolla su personalidad en sentido
general, lo cual repercute positivamente en el desarrollo de las
capacidades y habilidades intelectuales,
en la formación de los intereses cognoscitivos.

La percepción
se torna más reflexiva. El adolescente debe establecer las
relaciones e interconexiones entre todo el contenido recibido.
Debe puntualizar las dependencias, las causas y los efectos de
los diferentes fenómenos de la realidad.

La memoria
también se modifica. Aumenta la reserva de procedimientos de
memorización y se hacen cada vez mas concientes e
intencionados, lo que permite una mayor recordación y
reproducción.

A partir del quinto grado comienza la asimilación
consciente de los conceptos científicos; pero las nuevas
asignaturas impondrán al adolescente nuevos modos de
asimilación del conocimiento, y por tanto, el desarrollo
del intelecto hacia un nivel superior: el pensamiento
teórico, formal y reflexivo.Este tipo de pensamiento varia
la actitud del adolescente hacia las tareas docentes, en tanto
necesita de la resolución previa a través de la
reflexión critica de forma mental.

Para G.Piaget en esta
etapa se desarrolla la inteligencia
operatorio-formal o estadio de las operaciones
formales. Plantea que "el adolescente superpone la lógica
preposional en la lógica de clases y
relaciones,"[30] típica de la etapa
anterior, por lo tanto utiliza una serie de esquemas
operacionales que le permiten experimentar usando la
lógica formal en las transformaciones.

La valoración de este autor sobre el pensamiento
comparte características similares a las expuestas por los
psicólogos de orientación marxista, aunque no tiene
en cuenta el papel de la enseñanza en su desarrollo. Este
elemento fue bien analizado por S. L. Rubinstein, quien describe
como en esta etapa, a partir de la asimilación, surge el
pensamiento teórico-abstracto o como también lo
denomino, el raciocinio teórico de los conocimientos
teóricos en conceptos abstractos.

Este pensamiento es hipotético deductivo pues
opera a nivel abstracto, sin recurrir a objetos concretos, de lo
general a lo particular. Esta característica otorga al
pensamiento un carácter proposicional, en tanto posibilita
establecer relaciones entre los objetos y su contenido. Es un
pensamiento reflexivo que busca la comprobación y la
demostración de la hipótesis en la realidad.

La importancia de este pensamiento radica en que
posibilita razonar en un plano mental, analizar e interrelacionar
conceptos y comprender la lógica de las operaciones para
así desarrollar la capacidad de interpretar y solucionar
problemas del entorno. El desarrollo del pensamiento
conceptual-teórico y la reestructuración de los
restantes procesos cognoscitivos constituyen de manera sustancial
al desarrollo de la autorreflexión y la autoconciencia.
Tributa además a la formación de la
concepción del mundo en la próxima
etapa.

Las transformaciones en el sistema de relaciones del
adolescente lo ubican también en una nueva posición
social, con múltiples exigencias para su comportamiento.
La relación del adolescente con sus coetáneos
ejerce especial influencia sobre su conducta. A través de
ella aprende la moral de
los adultos, las normas de igualdad,
fidelidad y compañerismo. Esto permite desarrollar la
madurez socio-moral.

Para el adolescente esta relación adquiere
carácter "intimo-personal", en la cual puede actuar
independientemente, reflexionar sobre los diferentes aspectos de
la vida, valorar las características de sus
compañeros y las suyas propias. Esto es importante, ya que
la corrección de la conducta individual depende muchas
veces de la critica de los compañeros .A partir de lo
diferentes criterios, el adolescente va formando sus
convicciones.

Sobre la base de relaciones de grupo, comienza a formar
las primeras relaciones de amistad,
construidas a partir del vínculo afectivo, el respeto mutuo y
la confianza. En este periodo se tiende a idealizar al amigo, y
por lo tanto se manifiesta una búsqueda constante de este
modelo, que puede ser encontrado tanto en el colectivo escolar
como en las relaciones que se establecen fuera de
este.

Aparecen las primeras relaciones de pareja, un tanto
inestable debido a la experimentación, formadas sobre
todo, por los atributos externos de la personalidad pesar de
ello, las relaciones de pareja, junto a las relaciones de
amistad, facilitan el intercambio afectivo e intelectual; son
importantes para la formación de la identidad personal,
sobre todo la identidad sexual y de genero; permiten
ganar experiencias y gratificar las necesidades del amor, seguridad y apoyo
emocional.

Sin embargo, el grupo también ha sido analizado
como motivo de conductas problemáticas, capaz de inhibir
la responsabilidad individual y la libre toma de
decisiones. Fenómenos como el conformismo y el
negativismo han sido ampliamente explicados en la
bibliografía psicológica. El primero, referido a
mostrar una aceptación ilimitada de los criterios del
grupo para ganar la aprobación social; y el segundo,
relacionado con la oposición a dichas opiniones, sin
suficiente argumentación, o sea una "rebeldía sin
causa".

Investigaciones expuestas sobre la problemática,
por L. I. Bozhovich, respaldan este criterio cuando comentan que
"la causa frecuente de la conducta indisciplinada en los grados
medios es el no saber conquistar el lugar deseado en el colectivo
de condiscípulos."[31]

Por otro lado afirma que:" la incapacidad de encontrar
su lugar en el colectivo determina también una
aspiración muy característica en los adolescentes:
la de lograr a toda costa buenas notas, incluso en el caso en que
sus conocimientos no correspondan a las
mismas.[32] Este fenómeno ha sido
denominado" la persecución de las notas" y se refiere a la
necesidad del adolescente de ser valorado como buen
estudiante.

Igualmente valora que:"la particularidad
característica de los adolescentes es la tendencia a
evitar, de todas formas, la critica de los compañeros de
aula y el miedo a ser rechazados por ellos. Los autores
señalan asimismo que los adolescentes están
excesivamente expuestos a la influencia del grupo y que en su
anhelo de ser aceptados por sus condiscípulos pueden
llegar incluso a renunciar a sus
convicciones.[33]

Se han realizado además varios estudios acerca de
la capacidad de influencia del grupo de iguales, tratando de
averiguar como de produce y que tipo de factores intervienen en
este proceso, al respecto se han señalado dos importantes
aportes que pueden resultar explicativos de este fenómeno.
Por una parte "el aprendizaje social" que se realiza en el
interno del grupo y "el reforzamiento" de estas conductas en el
seno del mismo, pueden dar cuenta del comportamiento del
adolescente en su interactuar social, tanto en su sentido
positivo como negativo.

Por otra parte , se señala "la capacidad del
adolescente para elegir los grupos de pertenencia",determinada en
gran medida por el sistema de educación recibido, la
influencia de la familia,
los modelos de amistad aprendidos, las conductas previas
asumidas, y por cuestiones propias de la personalidad como los
ideales, las actitudes, los valores y
las motivaciones. Téngase en cuenta que las cualidades
personales (psicológico-morales)del adolescente, son las
que ubican dentro del grupo y las que determinan su
posición y actitud en el mismo.

Partes: 1, 2, 3
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter