Capacitación de los docentes de la escuela secundaria básica para el proceso de orientación profesional
Resumen.
En el universo
teórico de los estudios de la orientación
profesional pedagógica se expresan múltiples
posibilidades para propiciar una concepción más
integradora, motivante y contextualizada que forme, despliegue y
consolide verdaderos motivos por la profesión
pedagógica.
Sin embargo, los resultados científicos obtenidos en
las investigaciones
realizadas con estos propósitos evidencian, que desde la
clase en la
Escuela
Secundaria Básica no siempre se aprovechan las
potencialidades para su desarrollo.
Precisamente hacia ahí se dirige el objetivo de
este trabajo:
Proponer actividades metodológicas dirigidas a la
orientación profesional vocacional pedagógica desde
la capacitación de los docentes.
El aporte práctico de la propuesta consiste en una
propuesta de actividades metodológicas debidamente
organizadas que insertadas en el sistema de
trabajo metodológico de la escuela, se encaminan a
favorecer el proceso de
orientación profesional vocacional pedagógica desde
la capacitación de los docentes y se distinguen por el
empleo de
talleres reflexivos con técnicas
grupales que garantizan la preparación teórica
y metodológica de los docentes en este sentido.
Summary
The cientific results obtained in the fulfil investigations
proof, that since the lesson in the Secundary School, the
potencialities are not always available for its development. So
toward it, is guide the objective of this work. To propose
methodological activities direct to the pedagogical vocational
professional orientation with the teachers capacitation.
The practic contribution of the proposal consist in organize
methodologic work system of the school guide the pedagogical
professional orientation process with the teachers' capacitation
and these activities are distinguish for the use of reflexives
work groups with groupal tecnnics that guarantee the theoric and
methodologic preparation of the teachers in this direction.
Introducción.
Nuestro tiempo es
también el de un país que, inserto en los
escenarios del mundo unipolar surgido a raíz del derrumbe
del campo socialista, requiere imperiosamente construir
alternativas para sobrevivir como nación
independiente y lograr un desarrollo socioeconómico que
asegure la sustentabilidad del proyecto social
revolucionario, preservando sus conquistas.
El desarrollo
económico social y científico-técnico de
nuestro país requiere de la preparación de los
trabajadores, técnicos y cuadros altamente calificados en
las diferentes ramas de la producción y los servicios que
demanda la
sociedad. La
necesidad de estructurar la matrícula de nivel medio
superior a tono con las exigencias de la formación de
profesores es obvia para todos: si no tenemos los graduados
previstos, carecemos del recurso humano indispensable para la
capacitación de nuestro pueblo.
La formación integral de la
personalidad de las nuevas generaciones es objetivo
fundamental de nuestra sociedad y principio esencial de nuestra
profesión. Un aspecto de esta misión es
la formación de la vocación de los estudiantes y su
orientación hacia las profesiones que requiere el
país.
Los cambios educativos que hoy marcan la tercera revolución
educacional en Cuba, reclaman
no solo el rescate de lo más auténtico de las
tradiciones del pensamiento
pedagógico cubano y latinoamericano sino su
inserción en la obra creadora de las generaciones actuales
de maestros, las que al fragor del proceso revolucionario a
partir del 1ero. de enero de 1959, se han incorporado a las
tareas de movilización en el país y fuera de
él. Formar maestros significa, por tanto, hacer que los
jóvenes aprecien la necesidad social de nuestra
profesión, no se viene al mundo con una vocación,
esta se desarrolla en un proceso asociado con la formación
de la personalidad,
es un producto de
los vínculos sociales.
Las transformaciones que se realizan en la educación
están también dirigidas a fortalecer el papel
educativo del maestro, ya que el proceso de instrucción
puede ampliarse con el empleo de los medios
técnicos, pero siempre esa función
mentora del educador será insustituible.
En las condiciones actuales de nuestro país la selección
de carreras no puede dejarse a la espontaneidad ni al azar. La
necesidad de continuar elevando el nivel motivacional de los
escolares hacia el estudio de carreras priorizadas en el
territorio, en especial la del magisterio, nos lleva a la
búsqueda de una mayor unidad de influencias que permitan
mejorar los resultados que venimos obteniendo.
Coincidiendo con el pedagogo cubano, el Dr. Jorge Luis Del
Pino, somos del criterio que no debemos imponer la
vocación, se trata de promover intereses y eso no es
posible hacerlo solo dando información, hay que debatir con los
estudiantes, hacer que reflexionen más sobre sus
posibilidades reales, sobre sus inclinaciones, hay que potenciar
el diálogo y
para ello debemos estar bien preparados.
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