- Derechos falsos
de la Constitución - Trabajo
y previsión social - Una
trampa jurídica con matiz de
conspiración - Previsión
Social - La
familia y su estabilidad social - Educación,
Ciencia y Tecnología - Ministerio
de Educación y De las Artes (MINEDAR) - Economía
para quién (modelo económico) - Otras
falencias de la Constitución - Salud
pública y asistencia social - Necesidad
de convocar a una asamblea constituyente - Conclusión
Introducción
La Constitución es el
instrumento jurídico, políticamente más utilizado
por los grupos de poder/presión (Poderes
fácticos) y a la vez, el más ignorado por las masas,
cuando son éstas últimas las destinatarias naturales de
los derechos y garantías
consagradas en esa norma primaria.
Todavía existen ejemplares de cuando la norma
primaria se llamaba "Constitución Política" y en cuyo texto, el Estado se dividía en
"Poderes"; y, que fue reformada para evitar la participación
política de las masas, fenómeno político que
le es totalmente inconveniente a las elites
dominantes.
El pueblo (Las masas, la comunidad) tiene una vida
política, siempre y cuando sea un pueblo organizado,
consciente y consecuente; y, esa vida política es regulada y
garantizada por la Constitución, porque es ésta norma
la encargada de hacer valer ese derecho de participar en la
política nacional, a las grandes mayorías; a hora bien,
desvanecer esa idea y convencer a los ciudadanos que su rol se
limita únicamente a ir y emitir el sufragio cuando las instituciones electorales
convocan a elecciones, era y es la intención de fondo de
cambiar el nombre de la Constitución, de "Constitución
Política" a "Constitución de la República".
Después de todo, la Constitución no se puede
despolitizar, pues su función principal es
organizar al Estado y la vida jurídica
de la nación y esas funciones son políticas.
Los grupos de presión
(Poderes fácticos) muy organizados y coherentes con sus
propios intereses, han comprendido que las masas deben repudiar
la política, como algo negativo, que no les pertenece y que
no quieren; por ello despliegan una gran campaña
"Condenando" la "Politización" de algún tema de
discusión nacional, cuando están en juego los intereses del
pueblo, como por ejemplo, la elección del Fiscal General de la
República, la aprobación del presupuesto general de la
nación, ente
otros.
Derechos falsos de la
Constitución
A raíz de ciertos acontecimientos políticos,
muchos han conocido que la Constitución es la ley suprema (primaria) y que rige
a las demás leyes (secundarias); en la jerga
de los iluminados (Magistrados de la CSJ) "disposiciones
infra-constitucionales".
Sin embargo, no muchos saben qué tanto implica que
la Constitución sea ley suprema; es más, un mundo
entero derivado de esa realidad es dejado en un cuarto oscuro,
para que alguna vez sea revelado por un "valiente".
Para comenzar es necesario analizar el término
"CONSTITUCIÓN", respecto de lo cual, un escritor español expresa algo muy
valioso: "Texto normativo fundamental del Estado de derecho. Como
término derivado del latino constituere (establecer algo con
carácter definitivo),
evoca la base reguladora que garantiza el orden de convivencia de
una comunidad nacional. Integrada por los valores y derechos que han
de armonizarse mediante un constante esfuerzo legislativo y
jurisprudencial, representa la norma suprema, super-ley o ley de
leyes de los modernos Estados que, al mismo tiempo que garantiza los
derechos y libertades de los ciudadanos, establece los límites a la acción del poder
político. (Luís Ribó Durán. Diccionario de Derecho.
Editorial BOSH 1995)
Partamos entonces de una pregunta básica ¿Es
la persona humana el origen y fin de
la actividad del Estado; y, está éste organizado para
la consecución de la justicia, la seguridad jurídica y el bien
común? (Art. 1 Inc. 1º Cn)
Y una cuestión más ¿De qué manera el
Estado asegura a los habitantes de la República el goce de
la libertad, la salud, la cultura, el bienestar
económico y la justicia social? (Art. 1 Inc.
3º)
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