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Alimentación antes, durante, y después del embarazo (página 3)



Partes: 1, 2, 3, 4

Común

100 gr.

590

  • Fundido diet

100 gr.

700

Gruyere

100 gr.

590

Fontina

100 gr.

590

Fiambrín

100 gr.

580

  • Ricotta

100 gr.

510

  • De crema

100 gr.

200

  • Blanco diet

100 gr.

200

Casandiet

100 gr.

170

García

100 gr.

163

  • c) El fósforo

El 85 % de este mineral se localiza en huesos y dientes.
Es el segundo en cuanto a abundancia en el cuerpo y representa el
22 % del total de minerales. Su
función
más importante es la de ayudar a la formación de
los componentes que ayudan a que el organismo pueda hacer
circular la energía de las grasas, las
proteínas y los hidratos de carbono. Junto
con el calcio y con la vitamina D es el ingrediente fundamental
para la conformación de huesos y dientes sanos. Es
también (junto con el calcio) esencial para las
transmisiones nerviosas. Constituye, además, un componente
esencial para los ácidos que
toman parte en la división celular y en la
transmisión de los rasgos hereditarios. Por lo general
se lo encuentra en los mismos alimentos que
contienen calcio.

  • d) El potasio

Este mineral actúa en relación con el
sodio y el magnesio y tiene como funciones:

  • 1) Controla el balance de los fluidos en todas
    las células del cuerpo.

  • 2) Es indispensable para la transmisión
    de los impulsos nerviosos y la contracción de los
    músculos, incluyendo el corazón.

Por lo general una persona que sigue
una dieta balanceada y no toma diuréticos, llena
estas necesidades diarias perfectamente.

Los alimentos en los que podemos encontrar este mineral
son especialmente las frutas y verduras. Entre las frutas, los
cítricos y los plátanos y entre los vegetales los
de hojas verde oscuras y las patatas.

  • 5) Vitaminas

Son sustancias orgánicas que ingresan
naturalmente con la alimentación. Sin
vitaminas el
cuerpo no puede utilizar las proteínas, hidratos de
carbono y grasas que consume,
ya que no se producen las
reacciones
químicas que lo permitan. Al faltar estas reacciones,
las proteínas no pueden construir y mantener los tejidos; las
grasas e hidratos de carbono no pueden producir energía;
el organismo en general no podría mantener su salud.

Existen vitaminas que son imprescindibles para la
reproducción y el crecimiento.
Durante
el embarazo es
muy importante recibir una cantidad suficiente de ellas, ya que
el hijo que está esperando las necesita para su
crecimiento y para ir almacenando nutrientes para sus primeras
semanas de vida.

Las vitaminas más importantes para el embarazo
son:

  • a) Vitamina A

Durante el embarazo, esta vitamina se vuelve de gran
importancia por:

  • 1) Su acción antiinfecciosa.

  • 2) Mejora la capacidad visual del
    bebé.

  • 3) Ayuda a dar suavidad a todos los tejidos
    membranosos.

  • 4) Potencia el sistema
    inmunológico.

El exceso de vitamina A no es
aconsejable.

Alimentos que abundan en vitamina A:

ALIMENTOS

PORCION

Hígado de cordero

100 gr.

Zanahoria

1 mediana

Espinacas

1 porción

Calabaza

1 porción

Brócoli

1 porción

Melón

¼

Tomate

1 unidad

  • b) Vitaminas del grupo B

Este grupo esta
constituido por las vitaminas: B1 (Tianina), B2 (Rivoflavina), B3
(Niacina), B5, B6, B9 (ácido fólico) y B12. Son
necesarias e importantes para:

  • El crecimiento y desarrollo del
    bebé.

  • La formación y desarrollo del sistema
    nervioso y el cerebro del bebé.

  • Prevenir la falta de glóbulos rojos (anemia)
    y ayudar a mantener su cantidad dentro de un parámetro
    óptimo.

  • Ayudar a digerir los hidratos de carbono, las
    proteínas, las grasas y otras sustancias nutritivas
    para la madre y para el bebé.

  • Dar energía.

  • La respiración de las células de la
    sangre.

  • El buen funcionamiento del sistema
    nervioso.

  • El metabolismo cerebral.

  • Mejorar la actividad intelectual.

  • Mejorar el estado de ánimo.

Algunos alimentos que contienen el complejo
B:

Trigo

Maíz

Arroz

Cereales en gral.

Hígado

Carnes en gral.

Huevos

Atún

Sardinas

Verduras de hoja

Productos de origen
vegetal

  • Como suplementos abundantes en complejo B:
    levadura de cerveza y germen de trigo

Vitamina B9 (ácido
fólico)

Agregar ácido fólico a los alimentos
diariamente tres meses antes de buscar un embarazo (como
dicen los genetistas), aumenta el nivel de folatos en sangre en las
mujeres en edad de concebir, de esta forma reduce notablemente
las fallas del tubo neural del embrión cuando se
está formando en las primeras semanas del embarazo,
previniendo malformaciones congénitas en los recién
nacidos, incluso muchas veces antes de que la mujer sepa que
está embarazada.

Todos estos defectos del nacimiento se pueden prevenir,
basta que la mujer consuma
todos los días ácido fólico para ayudar a
formar el cerebro y la
columna vertebral del bebé. El tomar ácido
fólico cuando ya se sabe que una mujer queda embarazada no
les ayuda a prevenir estas enfermedades en forma
óptima, y teniendo en cuenta que gran cantidad de
embarazos no son planeados, es fundamental contar con una
adecuada prevención. Aún cuando todavía no
se planee un embarazo, es necesario consumir suficientes
alimentos que contengan ácido
fólico[1]

El tubo neural

El cerebro y la columna vertebral del bebé se
forman entre los días 26 y 28 después de la
concepción
, en este lapso ocurre el cierre del tubo
neural, durante el desarrollo del
bebé.

El defecto congénito más común del
tubo neural es la espina bífida, principal causa de
parálisis infantil de la parte inferior del cuerpo, la
falta de control de la
vejiga y del intestino. Otro defecto es la anencefalia, (falta
total o parcial del cerebro) generalmente ocasiona que los
bebés nazcan muertos, o que sólo vivan unos pocos
días. Otra enfermedad de la gestación que se
origina en una falla del tubo neural es la
hidrocefalia.

Labio leporino y paladar hendido

Diversos estudios han concluido que los suplementos de
ácido fólico a las madres, pueden evitar la
anomalía[2](datos no
confirmados). La ingesta de ácido fólico antes y
durante los primeros meses de embarazo puede proteger al feto frente al
desarrollo de afecciones como el labio leporino y paladar
hendido[3]Ambas anomalías obedecen
también a múltiples factores genéticos y
ambientales.

Otros defectos congénitos tales como cardiopatías congénitas,
anomalías urogenitales y síndrome de
Down son objeto de estudio en la actualidad, pero los datos
aún no son concluyentes[4]

Recordar que:

El ácido fólico es medido en microgramos
(mcg), y la recomendación para las mujeres en edad
fértil es de 400 mcg diarios (o sea, 0,4 mg por
día). Que en muchos casos es insuficiente ingerir esa
cantidad con la alimentación.

Se pueden comprar comprimidos que contengan sólo
ácido fólico, que son pequeñas y
fáciles de tomar con una dosis de 5 mg por día,
tres meses antes del embarazo y durante la gestación hasta
que su médico obstetra lo determine.

Todas las mujeres en edad fértil deberían
asegurar la ingesta de ácido fólico ya sea a
través de los alimentos que lo contengan (ver tabla) o
tomando vitaminas que incluyan el ácido
fólico.

Algunos alimentos que contienen ácido
fólico:

ALIMENTOS

PORCION

ÁCIDO
FÓLICO

Hígado

100 gr.

217 mcg.

Poroto

1 taza

150 – 290 mcg.

Cereales

30 gr.

50 – 200 mcg.

Brócoli crudo

1 taza

63 mcg.

Espinaca cruda

1 taza

108 mcg.

Naranja

1 mediana

40 mcg.

Manzana

1 mediana

50 mcg.

Ensalada de verduras

1 taza

50 mcg.

Lechuga

1 taza picada

76 mcg.

  • c) Vitamina C

No es una vitamina difícil de hallar en los
alimentos, pero sí muy frágil, por ser tan
extremadamente sensible al calor, al
oxígeno
y a las sustancias alcalinas. Para que las frutas y verduras que
la contienen no la pierdan, es necesario no hervirlas ni
someterlas a altas temperaturas ni con exceso de agua. Ayuda
a la absorción del hierro y del
calcio.
Como protectora de las infecciones, esta vitamina
actúa como "guardiana" del bebé de todas aquellas
sustancias nocivas que pueden ingerirse
inadvertidamente.

ALIMENTOS QUE CONTIENEN VITAMINA
"C"

Kiwi

Naranja

Limón con pulpa

Zumo de limón

Frambuesa

Zumo de pomelo

Rábano

Cebolla

Espinaca

Brócoli

  • d) Vitamina D

El contacto con los rayos ultravioletas del sol
es uno de los principales modos en los que la piel humana
puede fabricar esta vitamina; mientras que el aporte
alimenticio tiene una importancia secundaria.
Con apenas 20
minutos de exposición
al sol o 30 a la luz del
día, se provee de la dosis diaria requerida.

Entre sus funciones figuran:

  • El crecimiento y reparación de los
    huesos.

  • El mantenimiento de la fortaleza de dientes y
    huesos.

  • Favorecer la absorción del fósforo
    y del calcio
    y así mismo asegurar su
    fijación en los huesos y dientes del
    bebé.

Los niveles plasmáticos de la vitamina D son
bajos en las gestaciones múltiples; probablemente debido a
un mayor consumo de
esta vitamina y de minerales por parte de la mujer que se halla
gestando más de un embarazo. El metabolismo
mineral óseo de la madre es mayor en las gestaciones
múltiples que en los embarazos
únicos.

ALIMENTOS QUE CONTIENEN VITAMINA
"D"

Aceite de hígado de
bacalao

Arenque

Sardinas en aceite

Caballa

Salmón

Atún

Leche enriquecida

Cereales integrales

Huevos

Hígado

RESUMEN

Necesidades nutricionales durante el embarazo y la
lactancia

No embarazada de 20 a 45
años

Embarazada 2do y 3er
trimestre

Lactancia

Fuentes

Calorías

2400

2700-2850

3000

Proteínas
(gr.)

46

100

120

Carnes –
Hígado

Huevo –
Lácteos

Legumbres

Hidratos de
carbono

50 – 55 % del total del
aporte calórico

53 % del total del aporte
calórico

53 % del total del aporte
calórico

Granos integrales

Verduras

Frutas

Grasas

30 – 33 % del total del
aporte calórico

30 % del total del aporte
calórico

(80 – 90 gr.)

30 % del total del aporte
calórico

(80 – 90 gr.)

Leche – Carne

Huevos – Granos

Nueces – Aceites

MINERALES

Calcio
(miligramos)

600

1500

1800

Leche – Quesos

Yogurt – Flan

Dulce de leche

Fósforo
(miligramos)

600

1500

1800

Lácteos

Pescados

Carnes en gral.

Hierro
(miligramos)

16

16 a 18

20 a 22

Hígado –
Morcilla

Carnes – Huevo

Legumbres

Espinaca

VITAMINAS

Vitamina A

(Unidades
Internacionales)

4000

5000

6000

Vegetales verdes de
hoja.

Zapallo –
Zanahoria

Acido fólico
(B9)

400 microgramos

800 microgramos

800 microgramos

Hígado –
Espinaca

Brócoli –
Salvado

Lechuga – Poroto

Naranja

Vitamina B1
(Tianina)

(miligramos)

1,0 a 1,1

1,5

1,6

Semillas de girasol

Jamón –
Hígado

Cereales enteros

Vitamina B2
(Rivoflavina)

(miligramos)

1,2

1,7

2

Hígado –
Almendras

Queso graso –
Salmón

Queso magro

Cereales integrales

Vitamina B3
(Niacina)

(miligramos)

13 a 15

18

20

Hígado –
Atún

Cereal entero

Aves de corral

Vitamina B12

(microgramos)

2 a 4

5

6 a 8

Hígado – Ostras
– Pollo

Arenques –
Sardinas

Yema de huevo –
Leche

Vitamina C

(miligramos)

45

60

80

Cítricos – Leche
– Papa

Vegetales verdes de hoja

Vitamina D

(UI)

400

700

Rayos ultravioleta

Leche enriquecida

Quesos

Conclusiones

  • Se calcula peso normal para una mujer entre 20 y 45
    años (que realiza quehaceres domésticos) al que
    se encuentra alrededor de los 57 kilogramos y con 1,60 de
    estatura.

  • El primer trimestre del período de embarazo
    no es considerado en el cuadro que antecede, por las
    modificaciones poco relevantes que se producen en el
    organismo de la futura madre.

  • Hay vitaminas y minerales que no se nombran porque
    son aportados naturalmente por los alimentos y porque sus
    necesidades son ínfimas (por ejemplo: Zinc, Cobre,
    Magnesio, Vitamina E, etc.).

  • De lo hasta ahora expuesto surge la
    conclusión de que los nutrientes de mayor importancia
    para la mujer embarazada son: las proteínas, el
    ácido fólico, el calcio y el hierro,
    aunque
    es importante señalar que todas son
    necesarias.

  • Señalamos que los alimentos que contienen
    minerales pueden afectar a los mismos en el proceso de
    cocción; del mismo modo las vitaminas son sensibles al
    calor, a la luz solar y al contacto con el oxígeno del
    aire.

Reiteramos que una dieta convenientemente balanceada
reúne la cantidad necesaria de vitaminas y de minerales.
Pero puede producirse alguna situación de excepción
que requiera recurrir a integradores de la dieta que
pueden ser químicos o naturales (como son el germen
de trigo y la levadura de cerveza), que son
concentrados de vitaminas, minerales y aminoácidos
más completos de la naturaleza.
Por contener estos elementos esenciales para la nutrición está
indicado para el embarazo y la lactancia.

Alimentación en
la puérpera

Inmediatamente después del parto las
recientes madres pierden parte del peso aumentado durante el
embarazo. Este no debería ser menor que siete kilos; ya
que alrededor de tres son del bebé, un kilo de la
placenta, uno del líquido amniótico y sangre que se
pierden en el parto y dos kilos por la reducción en el
tamaño del útero y la pérdida del
líquido extracelular o edemas por la orina. El resto del
peso –aumentado en forma de grasas– se perderá
más lentamente con ayuda de una dieta y de ejercicios
físicos.

Es importante señalar que después del
parto el organismo concentra todas sus fuerzas en el
amamantamiento. El puerperio puede ser considerado a) inmediato:
son las primeras 24 hs. después del parto; b) propiamente
dicho: hasta el séptimo día y c) alejado: hasta la
primera menstruación (menos de cuarenta y cinco
días).

En la década del "50 sólo el 25 % de las
madres amamantaban a sus hijos y nada más que durante el
primer mes de vida. En la actualidad el 98 % de las madres
inician una lactancia natural, persistiendo en ella alrededor de
un tercio después del tercer mes; mientras que otro tercio
alimenta con mamadera y pecho y el restante, sólo con
mamadera.

Muchos estudios realizados en Norteamérica e
Inglaterra
muestran que los niños
alimentados a pecho con respecto a los alimentados a mamadera
presentan un menor índice de enfermedades. Se duplica la
frecuencia de infecciones, diarreas,
mitos en los niños alimentados artificialmente.
La tasa de infecciones
respiratorias es cinco veces más alta, así como
la de internaciones hospitalarias. Tal vez esto se deba a los
efectos beneficiosos de las inmunoglobinas que posee la leche
materna y a que la composición nutricional de la
leche de madre es ideal: 8 % de proteínas, 55 % de grasa y
37 % de hidratos de carbono. La leche materna contiene un 30 %
más de proteínas que la leche de
vaca.

La cantidad de leche en la madre que amamanta es muy
variable: alrededor de 1000 centímetros cúbicos por
día; está en relación con el gasto diario y
se modifica con el tipo de alimentación y la
ingestión de líquidos. Por eso es necesario que la
madre que amamanta sustituya los líquidos que pierde en la
lactancia mediante una regular ingestión de los
mismos.

Durante la lactancia aumentan aún más las
necesidades energéticas y alimenticias. Es importante
procurar comer a menudo, dejando pasar tiempos prudenciales entre
una y otra comida. De esta forma se mantiene una fortaleza
continua, además de mantenerse constantes el contenido de
la leche materna en proteínas, grasas, hidratos de
carbono, vitaminas y minerales, permitiéndole al
bebé ingerir los nutrientes que necesita. Una pregunta que
todas las puérperas deben hacerse es qué tipo de
comida deben ingerir si quieren amamantar a su hijo. La
alimentación debe ser de fácil digestión, de
alto valor
nutritivo y estar formada por alimentos que no traspasen
sustancias nocivas a la leche y que no le den un sabor
desagradable.

Deben tenerse en cuenta en la dieta que durante la
lactancia se sugiere consumir alimentos ricos en hierro y calcio,
por ejemplo:

Leche fortificada con calcio y
hierro

Quesos

Carnes

Huevos

Espinaca

Legumbres

Morcilla

Hígado

Algunos trastornos
alimenticios en el embarazo

DIABETES GESTACIONAL

La diabetes
gestacional se desarrolla únicamente durante el embarazo y
desaparece después del parto sin traer mayores
consecuencias.
Es un tipo de diabetes que aparece a partir
del 2do trimestre del embarazo y no debe confundirse con el caso
de mujeres que tienen diabetes y se embarazan.

Las causas que producen la diabetes gestacional es por
trastornos metabólicos pasajeros ocasionados por las
hormonas de la
placenta que provocan un estado de
resistencia a la
insulina.

Es una de las complicaciones más frecuentes del
embarazo. Afecta en la Ciudad de Bs. As. entre el 5% y 6% de
los embarazos
[5]y su frecuencia varía
según los distintos estudios poblacionales y criterios
diagnósticos.

Para llegar al diagnóstico se debe tener evidencia de que
no existía la diabetes antes de la
gestación.

¿Quiénes presentan mayor riesgo para
que aparezca diabetes gestacional?

Aquellas que:

  • a) Quienes tuvieron diabetes gestacional en
    embarazos anteriores.

  • b) Antecedentes familiares de
    diabetes.

  • c) Sobrepeso u obesidad de la madre.

  • d) Quienes han tenido previamente un hijo de
    más de 4 Kgs.

  • e) Edad superior a los 35
    años.

SINTOMAS

Los síntomas de la gestante suelen ser leves o
nulos y no atentan contra su vida. Las pruebas que el
médico indica para la detección de la diabetes
gestacional es a partir del 2do trimestre de su
embarazo.

La prueba de tolerancia a la
glucosa se
hace en las embarazadas que tengan en ayunas entre 105 y 125
mg/dl
que es la aconsejada por la American Diabetes
Association (ADA) de 1997. Cuando tienen más de 126 mg/dl
se considera diabetes gestacional, lo mismo que en las mujeres
que han tenido diabetes gestacional en embarazos anteriores (se
debe hacer la prueba en las primeras semanas).

En la diabetes gestacional en gran parte de los casos
los síntomas pasan inadvertidos y no hay molestia
alguna
, en otros casos presenta polihidramnios (mayor
cantidad de líquido amniótico) y esto a su vez
provoca un parto prematuro. Otras veces infecciones urinarias y
vaginales. En el parto puede haber sufrimiento fetal y otras
complicaciones. La falta de control de la diabetes
gestacional produce una tasa más alta de cesáreas,
y en el feto puede producir mayor aumento de peso de lo normal
(macrosomía: 4 Kgs. o más al nacer), traumatismos
óseos debido al tamaño fetal durante el parto,
hipoglucemia e ictericia.

El tratamiento de la diabetes gestacional consiste
en:

  • a) Dieta: Es el pilar fundamental. Se
    recomienda una dieta equilibrada con 6 ingestas al día
    y restringida en hidratos de carbono.

  • b) Ejercicio regular: caminar al menos
    durante 1 hora por día.

  • c) Tratamiento farmacológico:
    Insulina: preferentemente humana. Los antidiabéticos
    orales están contraindicados.

Por todo esto es necesario el seguimiento de la diabetes
gestacional por:

  • un médico obstetra que vigilará
    la evolución de la gestación.

  • un nutricionista que se ocupará del
    tratamiento de la diabetes.

  • un pediatra neonatólogo que
    cuidará al recién nacido.

PRONOSTICO

El embarazo de la mujer con diabetes gestacional
controlada debe finalizar a término como el de cualquier
otra gestante. No obstante, en algunas ocasiones, suele
adelantarse en unos días, dependiendo del control
obstétrico y vigilancia fetal.

Es importante saber que todas las complicaciones se
pueden evitar controlando los niveles de glucosa durante el
embarazo
, y que esto es muy fácil de solucionar:
sólo con un cambio
dietario muchas veces es suficiente.

Pero sin lugar a dudas, la mayor trascendencia para toda
mujer diagnosticada con diabetes gestacional, es el hecho de que
si bien después del embarazo la diabetes gestacional
desaparece en un 95
%, con el paso de los años (5 a 10)
hasta un 60% pueden convertirse en verdaderas diabéticas,
y el riesgo es mayor si la obesidad
está presente.

VEGETARISMO Y EMBARAZO

Pueden citarse al menos tres motivos –de entre
mochos– por los que una persona o grupo de personas deciden
optar por un régimen alimentario vegetariano, por
ejemplo:

  • 1) Económico y humanitario;

  • 2) De salud y ambiental y

  • 3) Religioso y filosófico.

Existen tres tipos principales de vegetarismo: a) el
lacto-ovo-vegetarismo; b) lacto y ovo vegetarismo y c)
vegetarismo total.
Los del grupo a) consumen productos
animales
(leche, huevos, queso, etc.) pero se abstienen de comer carne;
los del grupo b) limitan los productos animales a los derivados
lácteos
o a los huevos, pero no incluyen a ambos; mientras que los del
grupo c) mantienen una dieta que consiste exclusivamente en
frutas, verduras, legumbres, nueces y granos. Pero lo que
caracteriza fundamentalmente al vegetarismo del resto de las
costumbres alimenticias es la exclusión de la carne y sus
derivados.

Por este motivo, el practicante de este tipo de dieta
debe ser consciente de cuáles son los nutrientes
esenciales para satisfacer todas sus necesidades. Una dieta
vegetariana, al igual que la no vegetariana, debe proveer de 40 a
50 nutrientes esenciales y 20 aminoácidos especialmente
(que no los provee la dieta vegetariana pura, y sí, las
carnes rojas).

  • Embarazo y vegetarismo

Si diferenciamos a las mujeres en estado de
gestación entre las vegetarianas y las
lacto-ovo-vegetarianas,
debemos señalar que las
primeras no logran cubrir los requerimientos nutricionales del
embarazo;
ya que la cantidad de proteínas que ingieren
con los vegetales y los cereales son de baja calidad, por
carecer de los 20 aminoácidos esenciales (de las carnes
rojas).

En cambio las lacto-ovo-vegetarianas incorporan
suficiente cantidad de proteínas
a través de la
ingesta de huevos, manteca, leche, yogur o queso. En
conclusión, la futura madre que mantiene este tipo de
dieta, debe asegurarse de que los alimentos que elige le
proporcionan suficiente cantidad de proteínas.
Deberá saber cuáles proteínas incompletas se
complementan con otras para formar proteínas completas y
planificar su dieta de acuerdo con esto.

SODIO E
HIPERTENSIÓN

Todos los manuales y
libros de
divulgación para la mujer embarazada aconsejan reducir al
mínimo el consumo de sal.

En vistas de un embarazo hay que mantener el consumo de
sal en unos pocos gramos al día, como la mejor forma de no
comenzarlo con tejidos hinchados de agua. Esto ocurre porque
existe una relación directa entre la cantidad de sal que
se consume y la cantidad de agua que el cuerpo retiene: a mayor
cantidad de sal, mayor retención de agua. Los tejidos de
la mujer embarazada muestran una particular avidez hacia el agua, por
lo que si se le suma un excesivo consumo de sal, los tejidos
pueden hincharse en demasía.

Lo ideal –antes, durante y después del
embarazo– es suministrarle a nuestro cuerpo una dosis
adecuada de sal que mantenga el correcto equilibrio de
líquidos. Si bien la necesidad de sodio crece durante el
embarazo –debido al mayor volumen de la
sangre– el consumo de sal debe ser siempre moderado para
que no llegue a ser perjudicial.
Existe una marcada
tendencia al exceso en el uso de la sal, por el sabor de los
alimentos salados al que el organismo se acostumbra
rápidamente. Pero si tenemos en cuenta que casi todos los
alimentos contienen sal en mayor o menor medida, nos daremos
cuenta que nuestras necesidades al respecto se encuentran
cubiertas, siendo superfluo el añadir aún
más.

Una embarazada sufre de hipertensión arterial cuando su presión se
mantiene persistentemente por encima de los valores
estimados como normales (a partir de una mínima de 9 y una
máxima de 14). En general, la hipertensión suele
aparecer en forma solapada, sin síntomas que alerten al
individuo (por
eso, frecuentemente, el diagnóstico se realiza en forma
tardía y casual, cuando algunos órganos ya
están afectados). Recordar que el 23% de los argentinos
sufre de hipertensión
arterial[6]

Dietas hiposódicas

Los casos en los que es necesario limitar o anular el
consumo de sal son pocos, se reducen a aquellas personas que ya
antes del embarazo sufrían problemas
renales o cardíacos, o bien cuando aparece
hipertensión o edemas. En estos casos, el control de la
sal deberá realizarse con extremada atención, para que la futura madre consuma
una mínima cantidad de sodio que le permita expandir el
volumen sanguíneo, sin que ello implique efectos
colaterales.

Una dieta se considera hiposódica cuando
contiene menos de 5 gr. de sal por día.

Algunos consejos para comer bien sin
sal

Consumir muchas verduras crudas; dar sabor a las
ensaladas con cebolla e hierbas aromáticas como berro o
albahaca; perfumar la ensaladera con una pizca de ajo. El sabor
ácido de algunos frutos como el limón o el tomate es un
perfecto sustituto de la sal. No se trata sólo de eliminar
la sal de cocina sino de hacer una transformación completa
de la alimentación, que va más allá de la
abstención de sal. O bien comer con sal de mesa fina tipo
"Light" que contiene poco sodio, un 66% menos que la sal
común, o sales con potasio y sin sodio).

Alimentos prohibidos

Sal común de mesa, sal de ajo, de cebolla, de
apio, etc. Fiambres y embutidos, chacinados, carnes enlatadas.
Vísceras. Manteca y margarinas. Crema de leche, leche en
general y en polvo en especial. Galletitas rellenas, (dulces),
Pan, galletitas de agua (hay pan y galletitas sin sal), facturas,
tortas de repostería, prepizza o pizza comprada. Quesos
estacionados, quesos en general con rótulos "c/sal" y de
rallar (duros) especialmente (hay algunos sin sal, por ejemplo:
Fresco o Port Salud sin sal, rallados sin sal). Enlatados en
general. Extractos de carne. Caldos de carnes y sopas. Productos
de copetín (aceitunas, chizitos, galletitas saladas,
maníes, pickles, etc.). Aderezos, (mayonesa, salsa
ketchup, mostaza, salsa roja). Hamburguesas comerciales, en su
reemplazo se recomiendan caseras. Bacalao, pescados ahumados,
etc.

Leer siempre las etiquetas para saber la cantidad de
sodio (Na) en cada producto
(inclusive en el agua mineral y otras bebidas).

EJEMPLO: Cantidad de sal en los alimentos (por
porciones de 100 gr.)

Con mucha sal

Con poca sal

Alimento

Gramos de sal

Alimento

Gramos de sal

Salamín

3,0

Mostaza (1 cucharadita)

0,2

Salchichas

2,5

Yogurt

0,2

Mortadela

2,5

Lechuga

0,03

Queso parmesano

2,2

Cebolla

0,03

Galletitas de agua

1,6

Ajo

0,02

Queso mantecoso

1,6

Arroz

0,01

Atún en aceite

1,6

Ananá

0,01

Leche en polvo descremada

1,5

Durazno

0,01

Hamburguesa

1,2

Tomate

0,01

Pan francés (1 rebanada)

0,3

Cerveza

0,01

Embarazo y
obesidad

Se considera una obesa embarazada a aquella mujer
que comienza su embarazo con un exceso de peso promedio del 20
% o más para su peso teórico ideal.
En nuestro
país existe un 20 % (aproximadamente) de mujeres obesas.
En cambio, para considerar a una embarazada obesa nosotros
tomamos como parámetro un aumento de más de 15
kilogramos al término de la gestación.

Siendo uno u otro el caso, ambas tienen mayores
probabilidades de sufrir complicaciones durante su embarazo. Por
ejemplo:

  • a) Tiene siete veces más posibilidades
    de sufrir hipertensión.

  • b) Tiene muchas más posibilidades de
    sufrir hemorragias en el parto.

  • c) Tiene más posibilidades de sufrir
    edemas, hinchazón, etc.

  • d) Tiene más probabilidades de padecer
    várices.

  • e) Trabajo de parto prolongado (en un
    porcentaje del 25 %).

  • f) Cesáreas con complicaciones (en un
    porcentaje del 33 %).

  • g) Diabetes después del embarazo en un
    porcentaje de hasta el 40 %.

  • h) Peso del recién nacido más
    alto de lo normal.

El control de peso de la embarazada con problemas de
obesidad debe estar bajo un estricto control médico, ya
que cualquier deficiencia o trastorno en las calorías de
la dieta, puede influir negativamente en el bebé y en ella
misma. La embarazada no debe bajar de peso, sino aumentar
entre 9 y 11 kilogramos.

En este sentido, debe señalarse que una dieta
hipocalórica no debe contener una cantidad inferior a las
1.600 calorías diarias, ya que de lo contrario se
determinaría un inadecuado aprovechamiento de las
proteínas de la dieta, aún cuando su aporte sea
mayor de lo habitual. Durante la lactancia, debe
observarse la misma conducta, con un
aumento de calorías hasta las 1.800 diarias.

Debe tener en cuenta siempre que su problema de
obesidad se resolverá en el futuro,
con posterioridad
a la gestación y al parto de su bebé; además
se aconseja tener en cuenta la dieta del apéndice,
y observarla si es posible antes de quedar
embarazada.

Entre el 30 % y el 40 % del peso adquirido durante el
embarazo se conserva después del parto (entre 3 y 4
kilogramos en un embarazo normal). Los kilos de más
debidos a una alimentación hipercalórica son
más difíciles de perder después y, a menudo,
el mismo problema de exceso de peso se repite en los embarazos
posteriores. Lo que debe tenerse en cuenta para que el embarazo
no transforme por completo el cuerpo de la mujer es la
alimentación y el deseo de que ese cambio no signifique
trastornos ni en la salud de la embarazada ni en la del
bebé.

Hay que excluir cualquier tipo de medicamentos para
cortar el apetito, así como los diuréticos y las
hormonas tiroideas; fármacos peligrosos de por sí,
y prohibidos por completo durante el período del embarazo
debido a los efectos nocivos para el feto.

Pero el estar demasiado obesa es también un
riesgo para la gestante. El aumento de peso implica un incremento
de trabajo del
hígado, de los riñones y del aparato
circulatorio; lo que significaría añadir a los
esfuerzos del cuerpo para llevar adelante el embarazo problemas
propios de la obesidad (hipertensión, diabetes, edemas,
hinchazón, etc.). Lo ideal sería comenzar con el
peso ideal y en buena forma, para que posteriormente el control
del peso no se transforme en una obsesión ni para el
médico ni para la embarazada.

CONSTIPACIÓN Y
EMBARAZO

Las causas más comunes son: el aumento de la
hormona progesterona hace que los músculos del intestino pierdan parte de su
movilidad, fuerza y
elasticidad. En
menor grado, el peso del feto, hacia el final del embarazo, hace
presión sobre el intestino, pudiendo ser también
una de las causas de constipación.

Suministrar laxantes a las embarazadas depende del
criterio de su médico obstetra personal, pero en
general deben ser laxantes de acción
local, como lo son la vaselina (líquida o sólida) y
no laxantes que puedan producir contracciones en el
útero.

Por ello el consumo de fibras durante el embarazo es
más conveniente,
ya que produce en el intestino un
efecto parecido al de una esponja cargada de agua: aumenta el
peso de la materia fecal
y acorta el tiempo del
tránsito intestinal. Pero por diferentes motivos (malos
hábitos alimentarios, falta de tiempo para la
preparación de los alimentos o escasa información) en general la ingesta de
fibras diarias es insuficiente. Por día se necesitan
aproximadamente 30 gr.
(especialmente fibras naturales) para
tener una evacuación normal.

La fibra se encuentra en las paredes de las plantas
comestibles y no es digerida por las enzimas del
sistema
digestivo de los seres humanos. Existen dos tipos de fibra:
las "solubles" en agua (avena, cebada, centeno, soja, lenteja y
porotos) y las "insolubles" (salvado de trigo). Las frutas y los
vegetales contienen ambas en cantidades variables.

Contenido de fibras de ciertos
alimentos

(por orden de importancia de acuerdo a la
cantidad de fibras)

Más fibras

Menos fibras

Salvado de trigo

Kiwi grande

Porotos

Choclo desgranado

Salvado de avena

Naranja

Garbanzos

Tortilla de harina de
trigo

Arvejas

Banana

Pan de trigo integral

Ensalada mixta

Frutilla

Zanahoria

Manzana (con
cáscara)

Brócoli

Pera (con
cáscara)

Alimentos de origen
animal

  • Journal of The American Dietetic Association, vol.
    86 (60) 1986.

  • Instituto Nacional de la Nutrición, Salvador
    Zubirán, México, 1991.

Alimentos que deben
evitarse durante el embarazo

Debido a las modificaciones corporales naturales al
embarazo (especialmente en la región del estómago y
otros órganos digestivos, que se encuentra invadida por el
útero), es posible que se produzca algún tipo de
intolerancia en relación a alimentos que en otras
circunstancias eran aceptados con facilidad.

  • 1) Por lo general suelen causar molestias los
    alimentos y condimentos fuertes de todo tipo, alimentos
    fritos, salchichas, pescado ahumado o salado y
    pastelería muy elaborada.

  • 2) Disminuir el consumo de todos aquellos
    alimentos de tercera categoría o sin valor nutritivo,
    desvitalizados, desmineralizados y
    desvitaminizados.

  • 3) En una alimentación correcta hay que
    evitar o disminuir el consumo fundamentalmente de aquellas
    sustancias que contienen cafeína, que excitan y
    estimulan el organismo, sin alimentarlo.
    Cuando la madre
    bebe café, el nivel de cafeína en la sangre del
    embrión alcanza de inmediato el mismo que el de la
    madre; pero mientras que en la madre la cafeína es
    eliminada con el tiempo, en el embrión el proceso de
    eliminación es mucho más lento. La
    cafeína se ingiere a través del café, el
    té, del cacao y de las bebidas con cola.
    Tomada en
    cantidades interfiere en el crecimiento y el desarrollo del
    feto, provocando nacimientos de bajo peso y aumentando el
    riesgo de abortos espontáneos, además de
    inhibir la absorción de hierro por el
    organismo.

  • 4) Conviene evitar también todos los
    alimentos en conserva o con preparación compleja, ya
    que cuanto más elaborada sea una comida, más
    se empobrece en elementos nutritivos a la vez que aumenta su
    contenido calórico.

  • 5) Es conveniente reducir el consumo de platos
    muy condimentados; de carne cruda o poco cocida
    –recuerde que la toxoplasmosis se transmite del gato a
    la vaca– ; de alimentos que puedan producir
    intoxicación, como los mariscos, mejillones u
    ostras.

  • 6) Alimentos refinados y elaborados
    industrialmente, usados para dar sabor y conservar, como
    también colorantes y aromatizantes; pastelería
    o repostería muy elaboradas.

  • 7) Es aconsejable también reemplazar el
    azúcar por otro tipo de endulzantes como la miel o el
    azúcar integral.

  • 8) En cuanto al alcohol, es prudente restringir
    su consumo en especial los tres primeros meses de embarazo
    –medio vaso de vino por comida puede significar un
    consumo moderado y no perjudicial para el bebé–.
    Es importante recordar que el alcohol pasa rápidamente
    a la placenta y que los problemas que implica una madre
    alcohólica son serios para el futuro bebé:
    un 20 % de los niños que tienen problemas mentales
    son gestados por madres alcohólicas.

  • 9) Evitar el exceso de azúcar y de sal
    (recuerde que la mayoría de los alimentos contienen
    algo de sal).

  • 10) Evitar aquellos alimentos que
    engorden.

  • 11) Preste siempre atención a las
    etiquetas de los alimentos,
    si en ellas encontrara que el
    producto contiene grasas, colorantes, sal, aditivos,
    calorías en exceso, etc.,
    consúmalos con
    moderación y "desconfianza".

Apéndice

(Menúes)

MENÚES DE ORIENTACIÓN
PARA EMBARAZADAS

Por la licenciada en nutrición:
Laura Edith Glaser[7]

Antes del embarazo y primer
trimestre

Ejemplo: Menúes para embarazadas que realizan
trabajos domésticos (2550 calorías)

EJEMPLO 1

ALIMENTO

DESAYUNO

Infusión

Té, mate cocido o
café suave a gusto

Leche

250 cm³ o 1
taza

Azúcar

3 cucharaditas de

Queso untable

25 gr. (una cucharada sopera al
ras)

Pan o
galletitas

Una rebanada de pan o 5
galletitas

ALIMENTO

ALMUERZO

Caldo
desgrasado

A voluntad

Carne

100 gr. (una porción
chica)

Vegetales grupo
"A"

300 gr.
c/aceite

Vegetales grupo
"C"

200 gr. c/margarina (2
rulitos)

Galletitas

3 unidades

Huevo

½ unidad

Fruta fresca

1 unidad (150
gr.)

ALIMENTO

MERIENDA

Yogur

250 cm³

Queso untable

25 gr. (1 cuchara sopera al
ras)

Pan o
galletitas

1 rebanada de pan o 5
galletitas

Mermelada, jalea o
miel

30 gr. (1 cucharada sopera
colmada)

Fruta fresca

1 unidad (150
gr.)

ALIMENTO

CENA

Caldo
desgrasado

A voluntad

Carne

100 gr.

Vegetales grupo
"B"

200 gr. c/aceite
15 cm³ (1 cucharada de postre)

Cereales

50 gr. c/margarina (2
rulitos)

Galletitas

3 UI

Fruta en
almíbar

2 mitades c/jalea (2
cucharaditas)

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EJEMPLO 2

ALIMENTO

DESAYUNO

Leche cultivada

250 cm³ o 1
taza

Queso

50 gr.

Pan

2 rebanadas

ALIMENTO

ALMUERZO

Caldo
desgrasado

A voluntad

Carne

100 gr. (una porción
chica)

Vegetales grupo
"A"

150 gr.

Vegetales grupo
"B"

100 gr.

Vegetales grupo
"C"

200 gr.

Aceite

1 cucharada de
postre

Flan con crema

1
porción

ALIMENTO

MERIENDA

Fruta

1 unidad (150
gr.)

Leche

150 cm³

Azúcar

15 gr. (3 cucharaditas de
té)

Mermelada o
miel

50 gr.

ALIMENTO

CENA

Caldo
desgrasado

A voluntad

Carne

150 gr.

Vegetales grupo
"A"

150 gr.

Vegetales grupo
"B"

100 gr.

Aceite para
vegetales

1 cucharada de
postre

Cereales

50 gr. (pesados
crudos)

Fruta fresca

1 unidad (150
gr.)

Algunos nutrientes de este
menú:

Hidratos de carbono

55 %

1402 calorías

350 gr.

Proteínas

15 %

382 calorías

95 gr.

Partes: 1, 2, 3, 4
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