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Asertividad (página 2)




Enviado por Lorena Caro Sandoval



Partes: 1, 2

Gestionar los sentimientos frente a los demás
para no tener conductas agresivas o pasivas. Al saber cómo
es quien tengo delante, puedo comprender cómo le va a
sentar aquello que yo le diga.

Ponerse en el lugar del otro y tratarlo asertivamente,
aunque él no se comporte de igual manera. No entrando en
juegos ni
dinámicas que nos alejen de nuestro objetivo.

La persona asertiva
es socialmente habilidosa, de agradable trato, segura de
sí misma, no hiere a los demás con su comportamiento, pero tampoco permite que los
demás le hieran, controla su conducta buscando
la eficacia y la
obtención de las metas fijadas manteniendo con firmeza sus
convicciones y expresando públicamente sus ideas sin
menoscabo de las opiniones, sentimientos o derechos de otras personas,
aunque sean contrarios o no coincidentes con los
suyos.

Algunas personas evitan ser asertivas porque temen
desagradar a otros y no ser aceptados por esto. Sin embargo,
aunque se podría evitar una desavenencia inmediata al
evitar ser asertivos, a la larga podría lastimarse la
relación. Las personas deben estar preparadas para manejar
inteligentemente los conflictos
interpersonales. Estos surgen naturalmente, debido a que los
individuos poseen creencias, sentimientos y deseos variados. De
no manejarse con cuidado, estos conflictos pueden causar
sentimientos de inseguridad,
exclusión, irritación y
frustración.

El hecho es que el comportamiento de las personas
fluctúa entre la pasividad y la agresividad, y el
comportamiento asertivo se ubica entre esos dos extremos. La
asertividad se
basa en valores
humanos que sólo pueden ser beneficiosos para la
comunicación interpersonal. Una vez que las personas
comprenden realmente las metas, derechos y comportamientos
asertivos, aprecian con prontitud su valor en
promover el desarrollo de
conceptos saludables de la autoestima y
la habilidad interpersonal efectiva.

Ser asertivo implica:

Tener una comunicación intra personal muy
efectiva consigo mismo:

Ser conscientes de nuestros pensamientos, sentimientos,
motivaciones, necesidades y deseos sin juzgarlos, administrar
nuestras emociones y
asumir la situación de manera responsable.

Encontrar el valor que se tiene por quien se es, la
consciencia de ser tan importantes como cualquier otra persona en
este planeta. No más importantes, pero tampoco menos, ni
el mejor ni el peor, todos igual de importantes.

Es administrar nuestras emociones y asumir la
situación de manera responsable. Asegurarnos que todas las
partes involucradas encuentren satisfacción a sus
necesidades tanto como sea posible.

Rasgos de una Persona
Asertiva

Las personas asertivas son personas comunes y corrientes
y pasan desapercibidas hasta que se encuentran ante una
situación en la que es necesario negociar, es entonces
cuando se diferencian por:

Saber lo que quieren.Asegurarse de ser
justos.Solicitar lo que desean con claridad.Mantenerse
calmados.Aceptar la crítica
y el elogio con ecuanimidad.Expresar elogios y afecto
abiertamente.Ventilar constructivamente sus emociones
negativas.

Actitudes Asertivas No
Verbales

Postura relajada.Mirar a los ojos. (No
demasiado fijamente: se interpreta como
agresividad)Sonreír levemente.No acercarse excesivamente a
la otra persona. (Invade su terreno personal, lo que puede
incomodar).

Técnicas
para aprender a ser asertivos

Para ayudarnos a ser asertivos es importante tener una
visión positiva de la vida y un sentido de nuestro valor
como seres únicos, tener claros nuestros derechos y
responsabilidades. Resulta útil expresar algo positivo a
cada persona con quien trate en el día, aunque sean
sólo pequeños detalles, recuerde que éstos
pueden hacer grandes diferencias.

Para facilitarle ser asertivo, es importante identificar
sus derechos. Como ser humano usted tiene derecho a:

Alcanzar sus metas.Decidir el rumbo de su
vida.Sus propias opiniones.Mejorarse a si
mismo.Privacidad.Cometer errores.

  • Lenguaje asertivo

Llamar a la persona por su nombre.Expresar
la petición claramente.Explicar las razones.Invitar a
hacer comentarios.Preguntar si necesita algo para cumplir la
petición.Acordar los detalles de cuándo se
necesitará lo solicitado.

  • Comunicación asertiva.

Haga valer sus derechos. Insista en ser tratado de
manera justa. Sea tan claro y específico como pueda al
expresar lo que quiere, piensa y siente.

  • Disentir Pasiva y Activamente

Cuando usted no esté de acuerdo con alguien, no
es recomendable fingir estarlo sólo por "mantener la
calma" sonriendo, asintiendo o prestando atención. Sería más
beneficioso a largo plazo cambiar el tema o expresar nuestro
desacuerdo más activamente.

  • Preguntar ¿Por qué?

Si una persona le solicita hacer algo que le parezca
poco razonable o desagradable pregunte "por qué" debe
hacerlo. Como adultos merecemos una explicación y es
nuestro derecho insistir en una explicación
convincente.

  • Hablar de uno mismo.

Si ha hecho algo que considera deseable compartir,
hágalo. Permita que los demás se enteren.
También permita que los demás conozcan su
opinión y sus sentimientos sobre cualquier cosa que le
parezca de interés.
No se trata de monopolizar las conversaciones, pero sí de
participar cuando sea apropiado.

Podemos decir que una persona asertiva ante una
situación difícil o de conflicto, es
capaz de: describir claramente el problema, expresar sus
sentimientos, comprender al otro al ponerse en su lugar,
solicitar lo que requiere para cubrir sus necesidades de manera
segura, con la claridad que le proporciona conocer los objetivos que
pretende lograr a través del mensaje, ofrecer alternativas
y dar a conocer las consecuencias que tendrá el receptor,
de acuerdo con su respuesta. Todo ello con sinceridad, de una
manera abierta, receptiva, equilibrada y con
armonía.

  • Acción Asertiva por
    Empatía.

Demuestra sensibilidad hacia la otra persona. Usualmente
contiene dos partes: un reconocimiento de la situación de
la otra persona o sus sentimientos, seguida de una exposición
que hace valer nuestros derechos.

Aprenda a emplear los diferentes tipos de acciones
asertivas y técnicas
mencionadas anteriormente.

Emplee sus mejores técnicas de
comunicación.Mantenga contacto visual directo.Adopte una
postura abierta y relajada.Asegúrese que su
expresión facial coincide con su mensaje.Mantenga un tono
de voz bien modulado y estable.Escuche a los demás y
demuéstreles que les escuchó. De ser necesario haga
preguntas para aclarar dudas.Trate siempre de encontrar una
solución "Ganar – Ganar" y muy importante, elija un
buen momento para ser asertivo.

Comparación de conductas asertivas,
pasivas y agresivas

La comparación de los patrones de comportamiento
asertivo, agresivo y pasivo, provee una visión sobre los
beneficios personales, profesionales y organizacionales que
aporta el
conocimiento asertivo responsable.

El comportamiento pasivo ocurre cuando la persona
renuncia a sus derechos por complacer a los demás. Los
derechos de los individuos pasivos son violados, bien sea porque
ignoran sus propias necesidades o porque permiten que otros
abusen de sus derechos. Estas personas usualmente justifican su
comportamiento con el supuesto deseo de no querer crear problemas o
involucrarse en situaciones desagradables. Generalmente aceptan
toda crítica, sintiéndose culpables y se disculpan
aun cuando la crítica sea injusta.

Cuando surgen conflictos interpersonales inevitables,
típicamente, las personas pasivas no expresan sus
opiniones o sentimientos tratando de ocultarlos. Nuestra cultura
promueve la pasividad al enseñar a los individuos a no
expresar sentimientos por el miedo de ofender a otros. En
realidad, tal comportamiento motiva a otros a aprovecharse de la
situación y a infringir los derechos de la persona
pasiva.

Aún cuando la pasividad ayuda a evitar los
conflictos, las personas pasivas usualmente se sienten
explotadas, no tomadas en cuenta, indefensas, molestas o
resentidas. No sólo pierden el respeto de otros,
sino, aún más importante, el respeto
propio.

Los efectos de la continua pasividad son acumulativos y
en último término, devastadores. La pasividad
continúa erosionando la autoconfianza y, en algunos casos,
causa depresión
severa y un sentido general de minusvalía. Los deseos de
las personas pasivas son obviados en la mayoría de las
situaciones y rara vez logran su pleno potencial.

Los individuos pasivos, pocas veces aceptan la responsabilidad por la calidad de sus
vidas. Algunas veces, cuando se les presiona demasiado hacia una
situación desagradable, pierden el control sobre sus
emociones y reaccionan explosivamente. Sin embargo, lo más
común es que jueguen al mártir silencioso, culpando
secretamente a los demás por su falta de autoestima. Rara
vez se dan cuenta de su cuota de responsabilidad por su
situación infeliz.

A diferencia del comportamiento pasivo, el
comportamiento agresivo ocurre cuando las personas pelean
por sus derechos de tal manera que llegan a violar los derechos
de los demás. Los individuos agresivos con frecuencia se
comportan ofensivamente y utilizan el sarcasmo y la
intimidación para dominar a otros. Tienden a emitir
señales
sutiles de que crean climas de comunicación defensiva y
provocan discusiones y hostilidades en lugar de promover la
cooperación. Independientemente de cómo se
manifieste, el comportamiento agresivo desmoraliza a los
demás.

El comportamiento agresivo puede promover un
círculo vicioso. Las personas agresivas discuten a menudo
para defenderse de las críticas que ni siquiera han sido
emitidas. Ello se debe a su vulnerabilidad ante amenazas (reales
o imaginarias). A su vez, el comportamiento promueve una
reacción de antagonismo en los demás.

En efecto, las personas agresivas intentan destacar a
costa de la autoestima de otros. El propósito de esta
agresión es dominar o humillar a otros en lugar de
expresar los sentimientos honestamente. En los encuentros
agresivos, los participantes se ven forzados a adoptar posiciones
antagónicas.

El comportamiento agresivo se manifiesta de muchas
maneras, todas improductivas. Al igual que las personas pasivas,
los individuos agresivos se preocupan por su incapacidad de
establecer relaciones amistosas y resolver conflictos
satisfactoriamente. A largo plazo, el comportamiento agresivo
sólo produce consecuencias desfavorables: nadie gana,
todos pierden.

El comportamiento asertivo ocurre cuando los
individuos defienden sus derechos sin que ello implique violar
los derechos de los demás. La asertividad implica
expresiones directas, honestas y apropiadas de nuestras
creencias, necesidades y sentimientos. Significa auto respeto, es
decir, valorarse a uno mismo y tratarse con tanta inteligencia y
consideración como merece cualquier ser humano.

Debido a que las personas asertivas consideran que todos
los individuos tienen iguales derechos a expresarse honestamente,
demuestran que respetan a los demás tanto como a sí
mismos. Por lo tanto, el comportamiento asertivo aumenta la
autoestima, conlleva al desarrollo del respeto mutuo y al logro
de las metas propias sin sacrificar la de otros.

Las personas asertivas pueden escuchar las
críticas, evaluarlas si son pertinentes y luego negociar
los cambios de comportamiento deseables.

Mientras que el comportamiento agresivo sacrifica los
derechos de un individuo para
que otro se beneficie, el comportamiento asertivo se enfoca en
negociar cambios de comportamientos razonables y mutuamente
beneficiosos.

Conclusión

Para que podamos mejorar nuestro quehacer, es necesario
considerar aspectos básicos para que lo que hagamos sea lo
mejor posible. Hay funciones que de
una u otra forma nos caracterizarán como profesionales,
así como también una serie de habilidades y
cualidades que podemos cultivar, como la asertividad.

Desde luego el hecho de trabajar con las
personas y para las personas, en sí nos entrega un
sentimiento de realización personal  muy
especial.

Ser asertivo contribuye al enriquecimiento personal, se
fortalece la autoestima, es una defensa psicológica que
otorga seguridad,
facilita la libertad
emocional y ayuda a resolver problemas.

La asertividad es mucho más que la capacidad de
decir "no" cuando nos interesa. Es la capacidad de expresar sin
temor las opiniones y los sentimientos propios, con seguridad y
sin manipular ni dejarse manipular.

En el contexto de esta habilidad vinculada al Trabajo Social,
se puede concluir que, sin lugar a dudas, llegar a ser una
persona asertiva será un valioso instrumento que
mejorará la comunicación con los demás y nos
ahorrará una serie de inconvenientes que pueden provocar
un quiebre en la relación con las personas, y/o retrasar
la solución de una problemática
cualquiera.

En definitiva, es uno mismo quien tiene en sus manos la
posibilidad de hacer bien las cosas, no hay fórmulas
secretas, por lo tanto, mientras más habilidades sociales
podamos manejar, se llegará a tener la capacidad de tomar
decisiones adecuadas en los distintos ámbitos de la vida
diaria.     

"Educar es formar personas aptas
para gobernarse a sí mismas, y no para ser gobernadas por
otros".

Herbert Spencer

 

 

 

 

Autora:

Lorena Caro Sandoval

Asignatura: Introducción al Trabajo
Social

Facultad de Ciencias
Jurídicas y Sociales

Partes: 1, 2
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