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El español como lengua de poder en el fallido proceso de paz colombiano (página 3)



Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7

"Soy feliz en mis amigos", decía Shakespeare, y
eso mismo puedo decir hoy cuando tengo el
placer de darles la bienvenida en esta casa de Nariño. [.]
son tiempos de esperanza, retos y realizaciones que exigen lo
mejor de nosotros. Por eso, Colombia valora y agradece
especialmente el papel respetuoso, constructivo y cooperador que
ha tenido la comunidad
Internacional en su conjunto frente a las particulares y
complejas circunstancias que se presentan en el país.

(Departamento de comunicaciones. Oficina del Alto
Comisionado de Paz. Webpaz[arroba]presidnecia.gov.co © 2001.
Santafé de Bogotá, Colombia)

Esta distinción de voces se
convierte en imprescindible cuando se analiza un discurso
político porque, en la medida en que el hablante
político representa a los presidentes de los
regímenes democráticos, su representación es
mayor debido a que "la figura del presidente reúne las
siguientes representaciones: 1.La representación de los
ciudadanos, de la sociedad o del
pueblo. 2. La representación del gobierno. 3. La
representación de la sociedad organizada
institucionalmente, es decir, las entidades políticas
o geopolíticas (estado,
país, nación,
etc.) (Fernández Lagunilla, 1999:26).

Cada una de estas instancias políticas se representa
con distintos sustantivos como el Pueblo (colombiano), Colombia,
el país, el Estado, el
territorio (nacional), el Gobierno (40) millones (de Corazones),
etc., siendo la manifestación lingüística más representativa
el uso de la primera persona del
plural en sus diversas variantes como la flexión verbal,
pronombre personal
(nosotros), adjetivo posesivo (nuestro), como se
demostrará con más detalle en el siguiente texto en el
que se utiliza esta voz colectiva para construir al "otro
positivo":

"[.] Son tiempos de esperanza, retos y
realizaciones, que exigen lo mejor de nosotros. Por eso,
Colombia valora y agradece especialmente el papel
respetuoso, constructivo y cooperador que ha tenido la Comunidad
Internacional en su conjunto frente a las particulares y
complejas circunstancias que se presentan en el país.
Estamos afrontando con decisión y con audacia la
búsqueda de la paz a través del diálogo y
la negociación política. Estamos
fortaleciendo
nuestras instituciones
e incrementando la presencia del Estado en todo el territorio.
Estamos ejecutando ambiciosos proyectos de
inversión social para mejorar las condiciones de vida
de los más necesitados a través de la
creación de oportunidades de trabajo. Y en
todos estos desafíos hemos encontrado, como nunca
antes en la historia, el unánime
respaldo de la comunidad internacional, y la firme
decisión de cooperar en este empeño de hacer de
Colombia un país que progresa en un entorno de paz. En los
últimos doce meses ha existido una constante que marca el devenir
histórico del proceso en paz
en Colombia: el acompañamiento firme de los países
amigos y de los organismos internacionales, impulsando, todos a
una, nuestras legítimas aspiraciones. Las naciones del
mundo y los principales organismos internacionales se han hecho
presentes, con verdadera vocación de cooperación,
en el Grupo de Apoyo
al Proceso de Paz en Colombia, que tuvo el año pasado una
reunión preliminar en Londres, una reunión formal
en Madrid y otra
en Bogotá, y que continuará su trabajo durante este
primer semestre en Bruselas. De este Grupo de Apoyo hemos
obtenido
importantes aportes para programas
sociales, de desarrollo
alternativo, de derechos humanos,
de asistencia humanitaria, de fortalecimiento institucional y de
protección al medio
ambiente, que se verán enriquecidos con las decisiones
que tomen las naciones participantes una vez estudiados y
analizados en detalle los diferentes programas de inversión. En este sentido destaco
la visita que actualmente realiza una Misión
Técnica de la Unión
Europea para la identificación de los proyectos
sociales en que mejor pueden colaborar, así como la
reciente resolución del Parlamento Europeo apoyando los
programas de desarrollo social
e institucional en nuestro país.

La importante cooperación directa de los
Estados Unidos
de América, por otra parte, es también
motivo de gratitud para el pueblo colombiano, que
reconoce
su decisión responsable, no sólo por
la necesaria colaboración en la lucha
antinarcóticos, sino también porque incluye el
mayor aporte para inversión social en la historia de
nuestras relaciones bilaterales. En la aplicación del
concepto de
responsabilidad compartida en la lucha contra el
problema mundial de las drogas,
estamos pasando definitivamente de la retórica de
las palabras y las buenas intenciones a la acción
concreta y efectiva. Hemos transitado, por fortuna, de
un acompañamiento declarativo por parte de la comunidad
internacional a uno concreto y
efectivo, que se traduce en programas sociales y en apoyo al
proceso de paz. Colombia no puede sola en esta lucha,
que tanto nos ha costado. Ustedes, que nos acompañan
día a día, lo saben, señores Embajadores, y
por eso podemos decir que lo que pedimos al
mundo, más que ayuda, es responsabilidad.Si bien en
nuestro camino hacia la construcción de la paz hemos
tenido
un año difícil, no hay duda de que la
vinculación de la comunidad internacional a la
reconciliación entre los colombianos quedó
definitivamente consolidada: Suecia, Noruega, Italia, El
Vaticano, Suiza, España y
Francia fueron
hace un año los amables anfitriones de una gira
histórica y sin precedentes de los negociadores del
Gobierno y de las FARC por sus
países, donde tuvieron oportunidad de conocer de primera
mano sus modelos
políticos y económicos, así como de
intercambiar opiniones sobre diversos tópicos.

También Alemania,
Costa Rica,
Cuba y
Venezuela han
sido escenarios de diálogo en diversas etapas de las
negociaciones del gobierno y de la sociedad civil
con los insurgentes. Además, veintiún naciones
asistieron a la Audiencia Pública sobre Cultivos
Ilícitos y Medio Ambiente en
San Vicente del Caguán, y cinco Estados Francia,
España, Noruega, Suiza y Cuba nos están
acompañando,
con ejemplar prudencia y compromiso,
como países amigos en el proceso de conversaciones con el
ELN. ¡Cómo no valorar y agradecer todo este esfuerzo
internacional por cooperar con la paz de Colombia! Nuestro
conflicto
interno
, la sangre derramada,
son fenómenos que le quitan la esperanza y la
alegría a un país enamorado de la vida. Por eso
valoro tanto los gestos de apoyo que continuamente
recibimos de ustedes, de sus naciones y de las entidades que
representan, tales como los que recientemente se produjeron de
parte de los embajadores europeos; de los Secretarios Generales
de las Naciones Unidas y
de la
Organización de Estados Americanos, y de otras
naciones del planeta. Nos sentimos acompañados, queridos
amigos. Los sabemos cercanos más que nunca. Y en
esa cercanía entendemos que su papel, que el papel de la
comunidad internacional, en la humanización de este
doloroso conflicto es fundamental.

(Departamento de comunicaciones. Oficina del Alto
Comisionado de Paz. Webpaz[arroba]presidnecia.gov.co © 2001.
Santafé de Bogotá, Colombia)

En este caso, la palabra del otro (los Embajadores amigos del
proceso de paz) es asumida por el emisor, quien a su vez forma
parte de aquel Cuerpo Diplomático acreditado en Colombia.
Esto hace que la referencia que se hace del otro se convierta en
una especie de autocita que refuerza al emisor (el gobierno
colombiano). Se puede observar como la referencia de un
ámbito colectivo (embajadores en Colombia) a una historia
común (Colombia y su proceso de paz) refuerzan la
credibilidad del argumento: la paz en Colombia.

La reiteración de la tercera persona del plural
(nosotros) aplicado al verbo estar (estamos) que aparece
reiterado cinco veces en este fragmento del discurso, le
proporciona al emisor la facultad de protegerse con el colectivo
sobre el que recae la fuerza de lo
que está diciendo, asunto que favorece la referencia
positiva del otro frente a una comunidad como es la colombiana.
Este mecanismo lingüístico de persuasión sirve
no solo para marcar las voces que intervienen en el discurso sino
para darle mayor fuerza a unos argumentos que se necesitan para
convencer a los diplomáticos acerca del agradecimiento que
se tiene en Colombia por el interés y
apoyo que puedan mostrar por las incidencias del proceso de
paz.

4.2.1.2 El emisor político en el discurso de las FARC-
EP

El emisor político de las FARC- EP es complejo de por
sí, ya que posee una naturaleza
polifónica
[28]Esto se debe a que en el
enunciado producido por un único emisor –un individuo
– un partido- una institución política,
existen otros sujetos u otras voces atribuibles a otros
enunciadores – de ahí su carácter polifónico -, que se
filtran a través de diversos recursos
lingüísticos como son las distintas formas del
discurso reproducido, y retóricas como las
metáforas, juegos de
palabras, etc., y que constituyen marcas de
subjetividad que revelan la presencia del sujeto de la
enunciación política.

De acuerdo con la noción de polifonía de Bajtin,
asumida por Ducrot (1984), el hablante se escinde al convertirse
en figura enunciativa, ya que existe un hablante en tanto ser
del discurso
y un hablante en tanto ser del mundo.
Pero, además el hablante presta su voz a los enunciadores
que pueden exponer su punto de vista aunque no se constituyan
como hablantes. Esto hace que se introduzcan posiciones distintas
a las suya, con las que puede aparecer el desacuerdo
discursivo.

Estas otras voces (los enunciadores) le dan al discurso un
carácter manifiesto de alteridad y hacen referencia tanto
a seres humanos como a entidades abstractas que pueden ser
referencias ideológicas, históricas, etc. Estas
manifestaciones de alteridad se pueden clasificar en dos tipos,
dependiendo si el otro se entiende como aliado o como adversario.
Si el otro se tiene como adversario – que es el caso de las
FARC – EP para con el gobierno colombiano – se
establece una estrategia
discursiva polémica, crítica
o de descalificación. Pero, si el otro se tiene como
aliado, la estrategia discursiva es de refuerzo o de
adhesión.

En el discurso de las FARC-EP se evidencian marcas de
adhesión pero para con el grupo como tal. Para una mejor
ilustración, valgan los siguientes textos
que muestran en el primer caso "al otro negativo", y en el
segundo al "otro positivo":

"[.] Valga un paréntesis para comentarles, que en
Colombia desde siempre, pero particularmente a partir de 1948, se
desató una violencia
oficial sistemática para aplastar desde el poder al
adversario político y de paso expulsar a los campesinos de
sus parcelas arrebatándoles sus legítimos
títulos sobre ellas.

Para esto utilizaron a la fuerza pública, que se
agregó sin pudor sicarios a sueldo llamados pájaros
o chulavitas. Masacres, incendios,
terror, expropiación, destrucción signaron desde
aquel trágico momento nuestra historia a nombre de la
defensa de las instituciones y de la civilización
cristiana.

Esos mismos asesinos y la vandálica modalidad operativa
de arrasar con la población civil desde el poder del Estado,
son la manifestación de la misma estrategia paramilitar
que hoy, 51 años después, continúa llevando
su macabro mensaje de terror a los fincarios, a los
líderes de la comunidad y a quienes se oponen al
Régimen.

(ANNCOL. Estado Mayor de Las FARC –EP. Marzo 8 de 2001,
Los Pozos, San Vicente Del Caguán)

En este texto se pueden identificar algunos aspectos que dejan
ver las diversas formas que posee el discurso el grupo no
dominador para manifestarse. Se puede leer como se rechaza y
descalifica la palabra del otro, utilizando sustantivos como el
poder, fuerza (pública), instituciones,
civilización (cristiana), asesinos, Estado,
Régimen. Esta descalificación se refleja en
términos que son a todas luces peyorativos y que se marcan
la mayoría de las veces con la adjetivación. Por
ejemplo: violencia oficial sistemática y
vandálica modalidad operativa.
Así mismo, la identificación del adversario con el
uso de la frase en forma personal que específica al sujeto
agente de la acción expresada en verbos como aplastar,
expulsar, arrebatar, arrasar, llevar, oponer.

En cuanto al segundo tipo de manifestación de
alteridad, en este caso el "otro positivo", tenemos los
siguientes textos en los cuales se puede ver como se refuerza a
un otro positivo con marcas de enunciación colectiva que
hacen referencia no a los países amigos del proceso de
paz, para quienes hay muestras de agradecimiento y
cortesía, sino para sí mismos:

[.]Es especialmente importante reafirmar hoy y aquí,
ante todos ustedes representantes de la comunidad internacional,
nuestro compromiso con el éxito
de este proceso inédito, que busca solucionar por las
vías políticas el conflicto social y armado que
desangra a Colombia y afecta la estabilidad de la región.
Se trata de reconstruir democráticamente una patria
soberana, respetuosa de la opinión ajena y con justicia
social.

[.]Sin embargo, en estos dos últimos años
hemos logrado cimentar caminos a través de la
Mesa, abrir espacios y crear nuevas posibilidades en una
verdadera labor de orfebrería, de la cual este encuentro
con todos ustedes, es otra feliz evidencia y un estímulo
para continuar adelante.

[.]Recordemos que para ese entonces no existía
la guerrilla revolucionaria, que se formó y
consolidó tan solo muchos años después,
primero como respuesta a esa criminal estrategia del Estado y
posteriormente con el objetivo de
alcanzar el poder político en procura del cambio
estructural de la sociedad.

[.]Nos sentimos identificados con las voces que desde
la comunidad europea señalan que la erradicación de
cultivos ilegales no es un problema continental, sino un gran
problema hemisférico y mundial, que requiere de
políticas sociales, por eso su éxito depende de una
planificación colectiva, de un compromiso
común y del apoyo de los más solventes a las
comunidades sumidas en la obligatoriedad de tales cultivos para
su sobrevivencia.

[.]Las FARC-EP reiteran su propuesta de implementar
un plan piloto de
sustitución de cultivos en Cartagena del Chairá,
también en el criterio de soluciones
acordadas con las comunidades, en planes que propendan por la
preservación de la biodiversidad
y la reforestación y, por supuesto, en la
legalización del consumo de
sicotrópicos en el mundo entero.

[.]Planteamos a la comunidad internacional la
necesidad de una moratoria de 5 años del pago de los
servicios de
la deuda, de forma tal, que podamos durante un lustro disponer
para la INVERSIÓN de esa TERCERA PARTE DEL PRESUPUESTO
NACIONAL, dándole a Colombia el oxígeno
requerido para avanzar en la reconstrucción de su tejido
social. Sería un aporte concreto al proceso. La
disponibilidad y control de esos
recursos deben quedar a disposición de la Mesa, dados los
altísimos grados de corrupción de la llamada clase
política colombiana.

[.]Agradecemos a todos los asistentes a esta
reunión una vez más, por su presencia.
Creemos que esta modalidad de encuentros para informar
sobre el estado de los diálogos y recibir sus
apreciaciones sobre ellos, son una modalidad de
acompañamiento político positiva, que debe
realizarse cada vez que las circunstancias nos lo faciliten.

(ANNCOL. Estado Mayor de Las FARC –EP. Marzo 8 de 2001,
Los Pozos, San Vicente Del Caguán)

Las marcas verbales en tercera persona se van presentando
disgregadas en el discurso, formando un colectivo que tiene la
finalidad de servir de orientación positiva al otro que es
negativo. Estas marcas verbales van configurando al emisor
político que se presenta a través de estructuras
impersonales[29]de carácter opcional que
vienen siendo representadas por con estructuras con la tercera
persona del plural y con palabras –símbolo como
Colombia, las FARC-EP, país, etc. La ausencia de
especificación del sujeto sirve al propósito
pragmático de enmascarar al sujeto de la acción,
así sea que sé este hablando de un "otro positivo",
ya que si se manifestara el sujeto, cambiaría el sentido
de la enunciación y el discurso dejaría de ser
impersonal, tal y como lo requiere el grupo en
cuestión.

4.2.1.3 El emisor político en el discurso de la
comisión de personalidades

Las diferencias anteriores con respecto al discurso "del
otro", precisan para su comprensión el esclarecimiento de
los diversos papeles que desempeñan en el escenario
político tanto el Presidente de Colombia como el Estado
Mayor de las FARC –EP en su función de
oposición y la Comisión de Personalidades como
aquella parte que asume una posición neutral ya que
representa a la sociedad civil. Esta distribución de papeles es independiente de
la ideología, pues cada parte busca su
posicionamiento frente a la comunidad que
representa. Así, se tiene al Presidente como representante
de todos que tiende a evitar la polémica y a posicionarse
por medio de un discurso optimista y cortés; en cambio las
FARC –EP buscan la polémica por medio de un discurso
que denuncia lo establecido, ya que su objetivo es conseguir el
poder que se haya en manos del presidente. En cuanto a la
Comisión de Personalidades, se posesionan a través
de un discurso que intenta evaluar el proceso desde una óptica
supuestamente independiente de cualquier ideología.

Tal es el caso de la "Comisión de Personalidades" en
quienes, no solo se distingue "una sola persona moral"
(Ducrot: 1986) que los identifica como emisor colectivo, sino que
su discurso posee de antemano el destinatario directo
plenamente identificado por el emisor como es la Mesa de
Diálogo y Negociación. Esta Comisión de
Personalidades no evita la polémica, ni tampoco la busca,
porque no la necesita. Su misión no es alcanzar el poder
sino servir de mediador entre las partes. Este es su papel y a
él se somete su discurso que se colectiviza por la
manifestación directa de un "nosotros" que permea un
discurso que parece tomar la forma de un decreto cuyos
acápites se enumeran de tal forma que el texto aparece
rígido, como si estuviera formulando las tablas de la
ley. Para
comprender con más exactitud este emisor colectivo, se
debe recurrir al texto:

RECOMENDACIONES DE LA COMISIÓN DE
PERSONALIDADES A LA MESA DE DIÁLOGO Y
NEGOCIACIÓN

Los suscritos comisionados, designados por la Mesa
Nacional de Diálogo y Negociación para el proceso
de paz en virtud del numeral 3o del Acuerdo de Los Pozos suscrito
entre el señor Presidente de la
República, Andrés Pastrana Arango, y el
comandante de las FARC-EP, Manuel Marulanda Vélez,
después de una intensa y concienzuda labor durante la cual
hemos tenido oportunidad de analizar y evaluar los
distintos factores que han conducido a la situación de
conflicto armado que, desde hace ya varias décadas, vive
la nación
y cuyas implicaciones sociales son insoslayables, la incidencia
que este conflicto ha tenido y sigue teniendo en la sociedad
colombiana, la gravedad que reviste el fenómeno del
paramilitarismo surgido dentro del marco del enfrentamiento, y
plenamente conscientes del hecho notorio de que el
esquema de negociación bajo la guerra que se
ha venido utilizando desde la iniciación del presente
proceso de paz se encuentra agotado, en cumplimiento de nuestro
cometido nos permitimos, formular (…(

19. Respecto del fenómeno del paramilitarismo nos
permitimos formular las siguientes recomendaciones
:

A) Que durante todo este proceso el Gobierno nacional, a
través de la Fuerza Pública y los organismos de
seguridad,
continúe adelantando las acciones
encaminadas a combatir el paramilitarismo en sus diversas
modalidades.

B) Que sin perjuicio de ello, con arreglo a las leyes
pertinentes, el Gobierno adelante gestiones tendientes al
sometimiento a la justicia de quienes se hayan implicado en
actividades paramilitares.

C) Que se implementen por las partes las recomendaciones que
sobre el conflicto colombiano y sobre este tema en particular han
formulado las Naciones Unidas -presentadas en la 57
Comisión de DD.HH.- y la Organización de Estados Americanos
(OEA).

(…(Amigos, CARLOS LOZANO GUILLÉN, VLADIMIRO NARANJO
MESA, ALBERTO PINZÓN SÁNCHEZ.

Bogotá D.C., 19 de septiembre de 2001

(Departamento de comunicaciones. Oficina del Alto Comisionado
de Paz. Webpaz[arroba]presidnecia.gov.co © 2001.
Santafé de Bogotá, Colombia)

Este discurso se caracteriza por la exhibición del
"otro" que aparece identificado por el nombre del grupo
político que representa, bien sea paramilitares,
guerrillas de las FARC-EP, o gobierno nacional. Ellos, los
integrantes de la Comisión de Notables, se identifican
cada uno con el nombre propio, además dejan una marca de
sentido al lado de sus firmas y es la palabra "amigos". Esta
marca semántica pretende invalidar, desde la
forma, cualquier relación que pueda endilgarse a los
miembros de la comisión con una ideología
determinada. Pero, si se analiza con detenimiento el discurso, se
puede observar en cada una de las recomendaciones una defensa del
estado de derecho
colombiano, defensa que se hace por medio de argumentos que
inician siempre con un que[30]utilizado
como un nexo causal que le da un valor
subordinante a lo que viene a continuación, es decir, que
dentro del discurso las recomendaciones se subordinan a la
apreciación que la Comisión hace del conflicto
Colombiano. Desde la lingüística, esta diferencia de
distribución es sintácticamente explicable porque
que es un nexo subordinante.

Cabe señalar aquí que las oraciones introducidas
con que admiten muchas interpretaciones. Entre ellas
está la que más sirve a nuestro propósito y
es que indica frecuentemente que introduce al discurso
indirecto[31]De esta manera, la estructura de
estas oraciones que inician con un que sirve para
expresar de un modo más indirecto la orden, así
como si se expresan proyectos o intenciones.

El uso del posesivo "nuestro", en este caso como
representación del emisor, tiene la función
identificar al hablante político – los Notables –
con el destinatario último de su discurso (los ciudadanos)
como integrantes de una sociedad organizada institucionalmente,
bajo los principios de un
régimen democrático como es el colombiano: "La
relación que se establece entre el emisor y el
destinatario a través del sintagma formado por el posesivo
y la entidad designada (el país, la nación) tiene
un claro valor emotivo, de tipo posesivo, que cobra su
máxima cota en el caso del sustantivo patria o de
su derivado compatriota" (Fernández Lagunilla, 1999:
33).

4.2.2 El "destinatario político" en los tres discursos a
analizar

El Destinatario[32]es el segundo
componente de la enunciación política. Igual de
complejo al emisor, la comprensión del destinatario
depende de su carácter directo o indirecto. El
destinatario directo tiene una relación explícita
con el emisor y así es considerado por éste. En el
discurso se encuentra interpretado por diferentes formas
lingüísticas como nombres y pronombres personales que
dependen del espacio público en que se produce el
discurso. De esta forma, se puede hablar de
Señorías Señor Presidente, Señor
López, Señoras y Señores diputados
,
etc. … En cambio, en mítines, alocuciones y otros, se
hablará de compañeros, ciudadanos, etc. El
carácter apostrófico de estas formas
lingüísticas los vincula directamente con la comunicación oral.

Tal es el caso del discurso del Presidente, Andrés
Pastrana Arango, que se analiza desde el género de
"Saludo", cuya forma lingüística se vincula
directamente a la
comunicación oral, y aunque en este saludo no aparece
el destinatario interpelado directamente por una forma de
naturaleza
apostrófica como las anotadas con anterioridad, si se
encuentra una marca directa en el título del saludo y que
denomina al destinatario político como Cuerpo
diplomático acreditado en Colombia
.

Igual sucede con la Comisión de Personalidades, cuyo
discurso – esta vez de naturaleza escrita – determina el
destinatario político en el título del texto,
llamándolo "Mesa de Diálogo y Negociación".
En cambio, en el discurso de las FARC-EP, el destinatario aparece
interpelado directamente por una forma lingüística:
Señores representantes de los distintos
gobiernos. Esta forma apostrófica determina que la
comunicación de este discurso es de tipo
oral, ya que fue utilizado por las FARC-EP para recibir a los
representantes de los distintos países amigos del proceso
de paz que fueron invitados tanto por el Gobierno Nacional de
Colombia como por las FARC-EP, tal y como reza en el siguiente
texto:

DECLARACION DE LOS PAISES Y ORGANISMOS
INVITADOS AL ENCUENTRO DE LA MESA NACIONAL DE DIALOGO Y
NEGOCIACION CON LA COMUNIDAD INTERNACIONAL.

1.- Los países y organismos que han aceptado la
invitación del Gobierno Nacional de Colombia y de las
FARC-EP para asistir al Encuentro de la Mesa Nacional de
Diálogo y Negociación con la comunidad
internacional, saludan la decisión de las partes de
continuar el proceso de paz mediante el Acuerdo de los Pozos del
9 de febrero de 2001.

2.- Los representantes de los países y organismos
participantes escucharon con especial atención la información proporcionada por el Gobierno
Nacional de Colombia y las FARC-EP sobre la evolución del proceso de paz y los avances
que en el mismo se han alcanzado durante los últimos dos
años.

3.- Valoran positivamente la voluntad expresada por las partes
de no interrumpir los diálogos. Así mismo, recogen
con entusiasmo la decisión del Gobierno Nacional de
Colombia y las FARC-EP de involucrar a la comunidad internacional
y ofrecen a las partes su colaboración para concretar con
hechos, los acuerdos sobre los temas que se están
negociando.

4-Todos los países y organismos participantes, al
enfatizar, por igual, su apoyo a la salida política
negociada del conflicto interno en Colombia, animan vigorosamente
a las partes a realizar todos los esfuerzos necesarios para
llegar a acuerdos que permitan alcanzar la paz con justicia
social y respeto para los
derechos humanos
que eviten a toda costa afectar el patrimonio
común de los colombianos.

5.- Subrayan que coinciden plenamente con el Gobierno Nacional
de Colombia y con las FARC-EP en la identificación de la
PAZ como la prioridad nacional y valoran los esfuerzos de las
partes de trabajar conjuntamente para cesar el conflicto y
construir un camino distinto al de la violencia armada. En este
sentido, verían con enorme satisfacción la pronta
concreción del acuerdo humanitario mencionado en el punto
6 del Acuerdo de Los Pozos y la importancia de obtener resultados
rápidos en la mesa de negociación sobre el tema del
cese de fuego y las hostilidades.

6 – Tomamos nota con satisfacción por el reconocimiento
realizado por el Gobierno Nacional y por las FARC de la
importancia de la erradicación manual de
cultivos ilícitos. También resaltamos el
reconocimiento de la corresponsabilidad para la protección
y recuperación del medio ambiente.

7.- Finalmente, los países y organismos participantes
expresan la convicción de que estos importantes avances y
los que en el futuro se alcancen, solo tienen sentido si son
irreversibles.

Alemania, Austria, Bélgica, Brasil,
Canadá, Costa Rica, Chile, Cuba, Dinamarca, Ecuador,
España, Finlandia, Francia, Italia, Japón,
México,
Noruega, Países Bajos, Panamá,
Perú, Portugal, Reino Unido, Suecia, Suiza, Venezuela y el
Estado Vaticano, así como el Delegado Especial del
Secretario General de las Naciones Unidas y la Comisión
Europea.

(Departamento de comunicaciones. Oficina del Alto Comisionado
de Paz. Webpaz[arroba]presidnecia.gov.co © 2001.
Santafé de Bogotá, Colombia)

El corpus de
estudio

Este análisis crítico está basado
en un corpus limitado, pues la producción de textos sobre el fallido
proceso de paz fue tan amplia que podría decirse que
entorno a él se produjo un complejo discursivo,
asunto que se ampliará más adelante. Aún
así, este corpus guarda su homogeneidad ya que los tres
textos fueron escritos con anterioridad para luego ser utilizados
en géneros como el saludo a los destinatarios
representantes de los distintos gobiernos. Tal fue el caso del
discurso presidencial y el de las FARC-EP. En el caso de la
Comisión de Notables, el discurso fue escrito con
antelación para luego ser presentado ante la Mesa de
Diálogo y Negociación que a su vez lo puso en
conocimiento
de la comunidad internacional y de los ciudadanos de Colombia.
Así mismo, las fuentes de
donde se extrajeron los datos que
sirvieron para ilustrar la descripción y el análisis son
diversas y tienen como denominador común el soporte
escrito.

5.1 Delimitación Contextual del complejo
discursivo

El discurso que se generó para dar forma al fallido
proceso de paz colombiano, comenzó de manera oficial el 16
de Octubre de 1999 con la aparición del siguiente
comunicado en los periódicos de Cobertura Nacional:

Comunicado DECLARACION
PÚBLICA

El Gobierno nacional a través del Alto Comisionado para
la Paz y las FARC-EP, por conducto de sus voceros en la mesa de
negociación, reiteran a la opinión nacional e
internacional su decisión de seguir trabajando en la
búsqueda de una solución política negociada
al conflicto que vive nuestro país, e informa a la
opinión publica que hemos acordado dar instalación
formal a la mesa de los diálogos de la negociación
el próximo domingo24 de octubre de 1999 a las 11a.m., en
el municipio de Uribe, departamento del Meta, con la finalidad de
desarrollar la agenda común acordada "Agenda hacia una
Nueva Colombia" que permita llegar a un acuerdo para encontrar la
paz de los colombianos, como también poner en
funcionamiento el Comité Temático Nacional, que ha
sido integrado por cada una de las partes.

Por el Gobierno:

Víctor G. Ricardo

Por las FARC-EP:

Raúl Reyes Joaquín Gómez Fabián
Ramírez

San Vicente del Caguán, departamento del
Caquetá, octubre 16 de 1999

(Departamento de comunicaciones. Oficina del Alto Comisionado
de Paz. Webpaz[arroba]presidnecia.gov.co © 2001.
Santafé de Bogotá, Colombia)

De igual manera, dicho proceso se dio por
terminado de manera oficial cuando fue publicada la siguiente
resolución:

RESOLUCION POR LA CUAL SE TERMINA EL PROCESO CON LAS
FARC

Bogotá, 20 de febrero de 2002 (ANCOL).- Como
un servicio a sus
abonados, Ancol reproduce el texto de la Resolución
número 31, por la cual se termina el proceso de
diálogo, negociación y firma de acuerdos con las
Farc y se deja sin efecto el reconocimiento de carácter
político a la organización mencionada.

"PRESIDENCIA DE LA REPUBLICARESOLUCION
NUMERO 31 DE 2002

Por la cual se termina el proceso de diálogo,
negociación y firma de acuerdos con las Farc y se deja sin
efecto el reconocimiento de carácter político a la
organización mencionada.

EL GOBIERNO NACIONAL DE LA REPUBLICA DE
COLOMBIA

En ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales y
en especial de las que le confiere la ley 418 de 1997, prorrogada
por la ley 548 de 1999.

RESUELVE:

ARTICULO 1: Terminar el proceso de diálogo,
negociación y firma de acuerdos que se inició con
las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia FARC y a
través de la Resolución No. 85 del 14 de octubre de
1998.

Parágrafo. Dar aviso a las autoridades judiciales
correspondientes sobre el contenido de la presente
resolución, para los efectos a que se refiere el inciso
primero del parágrafo primero del artículo octavo
de la ley 418 de 1997 prorrogada por la ley 548 de 1999.

ARTICULO 2: Dejar sin efecto el reconocimiento de
carácter político a la Organización Fuerzas
Armadas Revolucionarias de Colombia FARC que se produjo a
través de la Resolución No. 85 de 1998.

ARTICULO 3: Esta Resolución rige a partir de la
fecha y deroga todas las que le sean contrarias, en particular la
número 85 del 14 de octubre de 1998.

COMUNIQUESE Y CUMPLASE.

Dado en Bogotá a los 20 de Febrero de
2002

PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, ANDRES PASTRANA
ARANGO.

EL MINISTRO DEL INTERIOR, ARMANDO ESTRADA
VILLA.

EL MINISTRO DE JUSTICIA Y DEL DERECHO, ROMULO GONZALEZ
TRUJILLO.

EL MINISTRO DE DEFENSA NACIONAL, GENERAL FERNANDO
TAPIAS S.

"Los múltiples discursos" que se produjeron para hablar
sobre este acto político tienen de forma oficial un
comienzo y un fin, es decir, que se pueden delimitar en el
tiempo. Pero,
para entender mejor tal delimitación, se tendría
que hacer referencia a situaciones menos claras que rodearon la
producción de estos discursos y que ayudarían a dar
respuesta a las siguientes inquietudes:

  • ¿El acto político de proceso de paz
    está compuesto por un único discurso o por
    varios discursos?

  • ¿En la producción de este discurso hubo
    interrupciones o recesos largos?

  • ¿Qué ocurre con este discurso que
    propició debates presidenciales, debates
    parlamentarios y sesiones de congreso?

Para acercarnos a una respuesta que ayude a dilucidar, en
parte, estos interrogantes, habría que admitir que durante
el proceso de paz no sólo hubo interrupciones y procesos
largos que fueron utilizados por las partes para dilatar las
negociaciones, durante una de las cuales se nombró la
Comisión de Personalidades para que analizara y diera por
escrito su opinión sobre los avances e impedimentos de la
negociación y que luego fue utilizada para continuar con
el proceso, sino que dicho proceso generó una serie de
discursos que sirvieron para poner de manifiesto las diversas
ideologías circunscritas dentro de las políticas de
estado y de los grupos al margen
de la ley. Por eso, para analizar con más precisión
el Corpus hay que partir de la idea de que más que un
único discurso que representara una sola ideología,
este proceso produjo una secuencia de discursos diferentes que
generaron debates de todo tipo como declaraciones de
políticos, debates en el Congreso, la Cámara de
representantes, las Asambleas departamentales, los Consejos
Municipales. Así mismo, dieron origen a discursos
parlamentarios tanto en el ámbito nacional como
internacional, y en los cuales se vieron reflejadas las
más diversas posiciones ideológicas. Es tanto
así que se podría hablar de la existencia de un
complejo discursivo que dio cuenta del proceso de
paz colombiano en todos los medios de
comunicación, orales y escritos, el mismo que
sirvió para generar una serie de debates a escala nacional e
internacional.

Delimitando el corpus, el análisis de este trabajo esta
basado en tres discursos producidos por el presidente de
Colombia, la Comisión de Personalidades y las FARC-EP y
que fueron extraídos del Internet. Con todo, este
Corpus se homogeniza en la medida en que responde al
género del saludo, a su vez que al de recibimiento, y que
hicieron tanto las FARC-EP como el presidente Andrés
Pastrana Arango a los representantes diplomáticos de los
distintos gobiernos presentes en Colombia. Más no
podría decirse que esta homogenización de
género se circunscriba también a la Comisión
de Personalidades, ya que su discurso se analiza desde la
óptica que pueda permitir el género de la
recomendación.

Las fuentes de donde se han extraído los tres discursos
son de manifestación pública y con soporte escrito
como es el Internet. Así mismo, el material objeto de
estudio se puede agrupar en dos bloques en función de los
canales utilizados como son el oral y el escrito. Por
último, se debe considerar que los tres discursos poseen
un denominador común y es que son textos con una escritura
netamente política.

5.2 El discurso del gobierno

Saludo del Presidente de la República,
Andrés Pastrana Arango, al Cuerpo diplomático
acreditado en Colombia.

Análisis: En el título se destaca la
primera palabra en función del canal utilizado para emitir
el discurso como es el oral, pues la palabra "saludo" así
lo designa. El saludo es una acción o gesto que se utiliza
para saludar, entendiendo por saludar el conjunto de palabras o
gestos de cortesía[33]que utiliza el emisor
(en este caso político) al receptor, cuando establece con
él un gesto de respeto debido a que la comunicación
que se suscita entre ambos está rodeada por cierto halo de
honor determinado por los actantes.

Este halo de honor se presenta como respuesta a la
cortesía verbal que constituye un fenómeno
universal, co-ocurrente en todas las culturas, sujeto a las
diferencias surgidas de las distintas normas de
interacción particulares de cada sociedad,
pero que, en tanto conducta, aparece
regida por ciertas pautas de racionalidad que validan esta
consideración de universalidad (Brown y Levinson,
1978).

Para el análisis crítico de este discurso es
fundamental que se considere la cortesía verbal como una
variable básica que sirve para observar la
conformación del acto comunicativo. Por eso, siguiendo a
Brown y Levinson, se tomará el concepto de imagen (o fase)
como determinante para entender el comportamiento
del emisor y del receptor. Así, la imagen da cuenta de
la
personalidad del hombre como
miembro individual de la sociedad de la que forma parte
(Haverkate, 1984). La imagen será "positiva" o "negativa"
ya que ambas dependen del deseo de proyectar una imagen positiva
por parte del individuo sobre la sociedad, así como del
deseo de que sus actos no se vean impedidos por otros, es decir,
por la "imagen negativa" que pueda proyectar. Por consiguiente,
podría afirmarse que el Presidente desea presentar ante la
audiencia una imagen positiva que le ayudará a fortalecer
los argumentos que va a utilizar para persuadir con su discurso.
Cabe considerar también que la cortesía es un
instrumento que mitiga la agresividad de los miembros de una
sociedad, asumiendo un rol de control sobre las relaciones
sociales, pero también es un dispositivo fundamental a la
hora de lograr la máxima eficacia en la
comunicación (Brown y Levinson, 1978).

Luego de la palabra saludo, se halla el nombre propio,
Andrés Pastrana Arango, seguido de un determinativo que
tiene la intención de destacar este nombre cuya
acción recae sobre un colectivo con funciones
diplomáticas: el cuerpo diplomático acreditado en
Colombia. De esta forma, el título implica una apertura a
un discurso configurado como acto persuasivo, que en forma de
saludo, pretende argumentar sobre "hechos" que bajo el acto de
habla de ser aseverados por una autoridad
política, pretenden apoyar los argumentos a favor de las
políticas de estado. Implícitamente, el autor del
texto pretende un acto ilocucionario – perlocucionario
(argumentar – convencer): " El acto ilocutivo de argumentar
es analizado por J. Searle en Actos de habla bajo la forma de
aseverar, afirmar. Un examen más riguroso de la
argumentación como acto de habla lo efectuaron Frans Van
Eemeren y Rob Grootendorst (1984) con un enfoque
"pragmadialéctico".

Desde esta perspectiva, "la argumentación es un acto de
habla formado por una constelación de afirmaciones
diseñadas para justificar o refutar una opinión
expresada y calculada en una conversación sujeta a reglas
para convencer a un juez racional de un punto de vista
específico con respecto a la aceptabilidad o
inaceptabilidad de la opinión expresada" (Jan Renkema,
1999:170). Finalmente, para analizar este discurso y su capacidad
argumentativa, se recurrirá a la retórica del texto
como un método que
facilite no solo un análisis – contexto, audiencia,
género, credibilidad del orador, retórica del
texto, persona retórica, auditorio implícito y
ausencia – que sirva para develar, desde una posición
crítica, la participación de los que intervinieron
en el acto comunicativo como tal.

5.2.1 La retórica del contexto

Para comprender la retórica de este texto, se necesita
responder a los siguientes interrogantes: ¿Qué
expectativas genera el contexto? "Al examinar el contexto de un
texto determinado, un crítico puede concentrarse en el
contexto existente en el momento en que el texto fue creado o en
el contexto existente en el momento en que un público en
particular experimenta (ve, oye, lee) dicho texto. Los
críticos retóricos consideran los textos como
unidades pragmáticas debido a que un texto retórico
responde a ciertos temas o problemas
propios de una sociedad, o interactúa con ellos, y produce
cierta acción o cambio en el mundo. Desde esta
perspectiva, la retórica "obra entre el desafío y
la respuesta apropiada entre la interpretación y el remedio entre la
crisis y la
calma (Bitzer, 1981:232). En resumen, la retórica obtiene
su carácter retórico de ciertos sucesos y
situaciones específicas (Ann M.Gill y Karen Whedbee,
2000:239).

Pasando al análisis, se dirá que el discurso
presidencial se produjo el 6 de Febrero de 2001, fecha en que el
Proceso de Paz en Colombia estaba a punto de fracasar por las
acciones violentas de los grupos paramilitares de derecha contra
la población civil acusada de ayudar y proteger a las
guerrillas. El país estaba a la expectativa de que el
presidente se pronunciara respecto de los hechos violentos que
cometían guerrilla y paramilitares. De igual manera, la
comunidad internacional, que ante el inminente fracaso del
proceso, se había manifestado en contra de las acciones
violentas que estaban afectando a la sociedad civil. Para la
fecha, la audiencia de los noticieros de TV se hizo notable, pues
todos esperaban que se pronunciara "la cabeza del estado" y que
con su opinión se abrieran nuevas posibilidades que
permitieran entender lo que estaba sucediendo con la Mesa de
Diálogo y Negociación. Teniendo en cuenta estas
consideraciones, el saludo del Presidente Andrés Pastrana
Arango se puede analizar retóricamente desde varios
conceptos que surgen de su contexto:

5.2.1.1 La exigencia

Se refiere al problema o asunto al que se refiere el texto
(Gill y Whedbee, 2000:240). Esta exigencia se usa como un
concepto que hace parte del análisis porque los
acontecimientos históricos a los cuales se dirige un
texto, o a los cuales éste responde, son esenciales para
su comprensión. Para Andrés Pastrana Arango que
había tomado las propuestas de diálogo y
negociación con las FARC – EP como el punto nodal de
sus políticas de gobierno, la exigencia de la comunidad
internacional para que se aunaran esfuerzos que llevaran a feliz
término el proceso de paz, se convirtió no solo en
el problema referido por el texto, sino en el asunto más
prioritario de su gobierno. Entre otras cosas, Pastrana se
destacó por el impulso que le dio a la política
internacional. Este comportamiento le valió el sobrenombre
del "presidente viajero", ya que permanecía las más
de las veces por fuera del país.

Esta comunidad internacional que fue invitada a participar en
el proceso de paz, se había creado grandes expectativas
sobre todo cuando se celebró la Audiencia Internacional
sobre Cultivos Ilícitos, de donde se desprendió uno
de los argumentos más fuertes de las FARC-EP para
controlar este flagelo y que aparece en el discurso que se va a
analizar: "Nos sentimos identificados con las voces que
desde la comunidad europea señalan que la
erradicación de cultivos ilegales no es un problema
continental, sino un gran problema hemisférico y mundial,
que requiere de políticas sociales, por eso su
éxito depende de una planificación colectiva, de un
compromiso común y del apoyo de los más solventes a
las comunidades sumidas en la obligatoriedad de tales cultivos
para su sobrevivencia", dice la guerrilla de las FARC-EP.
Así mismo, la interlocución entre los diferentes
países amigos del proceso como fueron Alemania, Austria,
Bélgica, Brasil, Canadá, Costa Rica, Chile, Cuba,
Dinamarca, Ecuador, España, Finlandia, Francia, Italia,
Japón, México, Noruega, Países Bajos,
Panamá,
Perú, Portugal, Reino Unido, Suecia, Suiza, Venezuela, y
el Estado Vaticano, así como el Delegado Especial del
Secretario Especial de las Naciones Unidas y la Comisión
Europea, fue motivo para que todos ellos se sintieran parte del
proceso. Todos ellos, unos días después del saludo
del presidente, y con más precisión el 9 de Marzo
de 2001, en Los Pozos – Caquetá – conformaron
una comisión facilitadora del proceso de paz integrada por
Canadá, Cuba, España, Francia, Italia,
México, Noruega, Suecia, Suiza y Venezuela, y a quienes
desde la Mesa de Diálogo y Negociación, se les
propuso la creación de un grupo de ocho naciones que con
una frecuencia bimestral se reunieran con la Mesa a fin de
informarse sobre la marcha del proceso y que sirviera,
además, para orientar, coordinar y facilitar una
reunión semestral que debía realizarse con la
totalidad de todos los países para trabajar, entre otras
cosas, por la responsabilidad compartida en el tráfico de
narcóticos. Todas estas exigencias internacionales unidas
a la exigencia de un país cansado de un conflicto largo y
sangriento, determinaron las expectativas del texto
retórico resultante.

5.2.1.2 Audiencia

"Para un crítico retórico es igualmente
importante identificar la audiencia real a la cual se dirige el
discurso. El crítico debe estar alerta con respecto del
hecho de que aquellos que se encuentran inmediatamente
próximos al orador pueden o no representar al auditorio al
que realmente se dirige" (M. Gill y Whedbee, 200:241). Fue
así como Andrés Pastrana no dirigió el
discurso al país como lo hacía regularmente casi
todos los martes a las 8:30 pm por todas las cadenas de televisión, tanto oficiales como privadas,
o a la misma guerrilla, sino que los destinatarios de su saludo,
aquel 6 de Febrero del 2001, estaba reunidos en el palacio
presidencial de Nariño, en Bogotá, con miras a
empezar con sus funciones diplomáticas para las cuales
fueron designados. Este discurso, por tanto, en vez de
proyectarse hacia adelante, en el tiempo, y darse a conocer a la
totalidad de los ciudadanos para que se informasen sobre los
lineamientos del gobierno en cuanto a su política
internacional, parece haberse detenido en la fecha en que fue
pronunciado, como si se hubiera escrito más por cumplir
con una obligación diplomática que con la
intención de presentar expectativas de futuro para una
sociedad tan deprimida como es la colombiana.

5.2.1.3 Género

Un género es un grupo de textos que comparten rasgos
discursivos específicos (M. Gill y Whedbee, 200:242).
Cuando un orador emplea un género, se crean expectativas
tanto en el orador como en el auditorio debido a que el
género se inscribe siempre en un discurso y el texto en un
género. Así, por ejemplo, un discurso
periodístico se compone de diferentes secciones que
utilizan un determinado número de géneros
carta del lector,
comentario, entrevista,
breves… – y que dan lugar a textos muy distintos –
artículos" (Covadonga y Arlette, 2000: 1064). Bajtin lo
explica de la siguiente manera:

"Los géneros discursivos organizan nuestro discurso
casi de la misma manera como lo hacen las formas gramaticales
(sintácticas). Aprendemos a modelar nuestro discurso en
forma genérica y cuando escuchamos los discursos de los
demás, adivinamos su género desde las primeras
palabras; predecimos una cierta extensión (es decir, la
extensión aproximada de la totalidad del discurso)
así como una cierta estructura compositiva; prevemos el
final; en resumen, desde el comienzo, tenemos una idea de la
totalidad del discurso, que recién se irá
diferenciando más tarde durante el proceso del mismo"
(1999:956).[34]

Se considera que la expectativa que suscita el género
se encarga de establecer los parámetros retóricos
del texto, determinando su estructura, vocabulario, sintaxis,
maniobras argumentativas y recursos narrativos. Por tanto, la
importancia del género en el texto de Andrés
Pastrana se puede clasificar como la de un discurso
político que se ha escrito bajo los parámetros de
un saludo diplomático y que cumple con los principios de
la "retórica de cortesía", la misma que se necesita
para estructurar una imagen positiva del presidente ante la
comunidad internacional, así se esté al mando de un
país con un alto índice de pobreza y de
criminalidad. Esta retórica de la cortesía le
permite creer al otro que desde la presidencia se están
ejecutando acciones para mejorar la situación del
país, cuyas políticas de bienestar son a todas
luces insostenibles para más de cuarenta millones de
personas.

Para entender mejor este asunto de la retórica de la
cortesía en el texto, basta con recurrir a la primera
frase del discurso: "Soy feliz en mis amigos"[35],
que como cita directa que es, le da al enunciado un sentido
polifónico. Aquí, el locutor o yo textual usa esta
cita directa para referirse a su mundo, pero no lo dice desde su
propia voz sino que recurre a la voz de otro locutor reconocido
en el ámbito mundial como es Shakespeare, para
personalizar el enunciado y así permitirse cierto aire
cortés. Esta cita directa le permite al locutor apropiarse
del enunciado, cumpliendo con la función de
apropiación y atribución que posee toda actividad
citativa, cualquiera sea su intención y su forma (Reyes,
G.: 66).

Ducrot sugiere que en la enunciación el pensamiento
propio y el ajeno – la palabra propia y la ajena – no
pueden separarse radicalmente: uno es constitutivo del otro
(Ducrot, "Analyse de textes": 45). Por eso esta cita no solo
denota la intradiégesis de su sentido, sino que al
utilizar la preposición "en" está indicando el
lugar en que se realiza la acción del verbo ser
adjetivado por la frase feliz "en" mis amigos y la metaforiza de
tal manera que la frase se convierte de inmediato en una
totalidad que integra al yo con el otro. Es así como en
este discurso no se puede hablar solo de la retórica
textual que enseña a introducir los textos con citas de
personajes famosos, sino que está cumpliendo la
función de atraer cortésmente al otro para que
comparta en pleno las ideas del emisor político.

"Comprender el discurso citado es ponerlo en una
situación comunicativa diferente de la situación
comunicativa en que se encuentra el marco (o modus, en
la distinción modus/dictum) de la cita, que
funciona metadiscursivamente, puesto que contiene otro discurso
y, en alguna medida, trata de él, lo evalúa (Reyes,
G.: 69).Según estos lineamientos, esta cita "soy feliz en
mis amigos" que en una de las obras de Shakespeare puede
significar una amistad sin
límites, pues el yo se funde con los otros
formado una sola persona feliz, se encuentra cerrando el discurso
presidencial. Esta repetición concluyente de "soy feliz en
mis amigos" le da una estructura de encuadre bastante llamativa
al discurso de Andrés Pastrana, sobre todo en un discurso
que se argumenta con ideas como que "en nombre de cuarenta
millones de corazones que agradecen el respaldo de las naciones
del mundo y de las entidades internacionales en la
búsqueda de la paz y de la justicia social – esta
última expresión de "justicia social" es más
propia del discurso de las FARC –EP, como se verá
más adelante – en nuestro país, que Colombia
también es feliz en sus amigos. "Y que ustedes,
señoras y señores, son los mejores amigos que un
país puede desear". Esta conclusión muestra como el
discurso se cierra con una
macroproposición[36]que permite el
ocultamiento del hablante en primera persona – el
presidente de la república – por un colectivo
significado en una metáfora de índole
romántica "cuarenta millones de corazones" y que recurre a
la primera frase "soy feliz con mis amigos" para trasladar
semánticamente su significado al decir que "Colombia
también es feliz en sus amigos", lo que permite prever en
el argumento una especie de demostración viva de la verdad
de lo que se acaba de decir, pues no es solo su palabra la que se
compromete ante la comunidad internacional sino la de todo un
colectivo que, según la cita directa, pretende expresarse
de la misma forma.

5.2.1.4 La credibilidad del orador

La autoridad que los oradores y escritores poseen debido a su
posición en el gobierno en la sociedad, a sus acciones
previas, o a su fama de eruditos, genera expectativas y afecta el
funcionamiento de un texto. Estas características y
calificaciones generales para hablar o escribir influyen en la
manera de entender el texto y en el efecto que este tiene sobre
el público (M. Gill y Whedbee, 2000:244). Por eso,
cualquiera de las interpretaciones que se hagan del discurso de
Andrés Pastrana Arango, – un hombre educado en los mejores
colegios privados de Bogotá y en las mejores universidades
de los Estados Unidos y que además fue el presentador y
director de un noticiero de cubrimiento nacional, propiedad de
su familia
amerita reconocer que en el 2001 ya se hallaban agotadas las
posibilidades para encontrar un camino hacia la paz. Los grupos
al margen de la ley acrecentaron su lucha armada. Por eso cuando
se refiere a las políticas de estado para detener las
acciones violentas de los paramilitares, la audiencia lo percibe
como un líder
falto de credibilidad, ya que estos grupos siguieron y siguen con
su accionar violento, pues muchos de sus integrantes eran
miembros activos – y
aún siguen siéndolo – del ejército
colombiano.

Así mismo, cuando se decidió negociar la paz en
medio del conflicto, este tipo de negociación le
permitió a las FARC-EP avanzar en su guerra contra la
sociedad civil, la misma que se manifiesta no solo en sus
combates con los grupos paramilitares sino en sus ataques a los
pueblos, entidades y personas que supuestamente apoyan a los
grupos de la derecha. Y fue esta confusión la que
permitió un acrecentamiento de la guerra y que condujo, en
buena medida, al fracaso del proceso de paz. También fue
la que se encargó de funcionar como herramienta
ideológica para restarle credibilidad al presidente de la
república – el orador – no solo en el ámbito
nacional sino internacional. De tal manera que ese respeto que se
había ganado Andrés Pastrana durante la
campaña por la presidencia cuando se atrevió a
visitar la zona del Caguán para hablar con Manuel
Marulanda, el máximo líder de las FARC-EP, y
durante los dos primeros años de gobierno durante los
cuales las políticas de paz ocuparon el primer lugar en
los programas de gobierno, se vino abajo junto con su imagen
política que se deleznó hasta el punto que no tuvo
más remedio que dar por terminado un proceso de paz que,
en caso de haberse consolidado, lo hubiera convertido en una
figura política de primera línea.

5.2.2 La retórica del texto

En cuanto al texto, los críticos
retóricos lo entienden como que puede ser elocuente,
persuasivo o no persuasivo. Para dilucidar estas
características se hace necesario hacer referencia a los
siguientes aspectos:

5.2.2.1 La persona retórica

Permite distinguir entre un orador (o hablante) y la persona
creada en el texto retórico. Consideremos, por ejemplo, el
siguiente texto:

(…( Nuestro conflicto interno, la
sangre derramada, son fenómenos que le quitan la esperanza
y la alegría a un país enamorado de la vida. Por
eso valoro tanto los gestos de apoyo que continuamente
recibimos de ustedes, de sus naciones y de las entidades que
representan, tales como los que recientemente se produjeron de
parte de los embajadores europeos; de los Secretarios Generales
de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados
Americanos, y de otras naciones del planeta. Nos
sentimos
acompañados, queridos amigos. Los
sabemos
cercanos más que nunca. Y en esa
cercanía entendemos que su papel, que el papel de
la comunidad internacional, en la humanización de este
doloroso conflicto es fundamental. Como ustedes saben, mi
gobierno
se ha comprometido con énfasis en la defensa
y protección de los Derechos Humanos y en la
aplicación del Derecho
Internacional Humanitario, temas que se hacen aún
más complejos en medio de la degradación del
conflicto causada por la acción intolerante e
indiscriminada de todos los grupos al margen de la ley.

(Departamento de comunicaciones. Oficina del Alto
Comisionado de paz Webpaz[arroba]presidnecia.gov.co © 2001.
Santafé de Bogotá, Colombia)

El texto se caracteriza por su tono personal, por
el uso de la voz activa y la presencia de referencias personales
que aparecen en momentos esenciales del discurso. El primero de
ellos está significado por el verbo valorar y
reza lo siguiente: "Por eso valoro tanto los gestos de
apoyo que continuamente recibimos de ustedes, de sus naciones y
de las entidades que representan, tales como los que
recientemente se produjeron de parte de los embajadores europeos;
de los Secretarios Generales de las Naciones Unidas y de la
Organización de Estados Americanos, y de otras naciones
del planeta". En esta parte del discurso la persona del yo
destaca al hablante político y le ayuda a determinar sus
prioridades discursivo – ideológicas, además
de exaltarlo como individuo. Esta exaltación del yo se
hace más evidente en la medida en que es precedida por el
marcador de causa – consecuencia[37]por
eso
. Este marcador ayuda a guiar la interpretación
del discurso según las necesidades del locutor y sirve,
entre otras cosas, para vincular semánticamente lo
expresado en oraciones sintácticamente no relacionadas,
marcando una de ellas como consecuencia de lo dicho
anteriormente. "Es la función de ciertos conectores
consecutivos que incluyen un pronombre (por eso, por ello, a
causa de esto, gracias a esto, etc
.). Este elemento
anafórico recupera lo dicho y lo interpreta como causa de
lo que se dice en la nueva oración, es decir, vincula esta
oración con lo anterior presentándola como su
consecuencia" (Santiago B., 2000:434).

De esta forma, la primera persona del singular y el conector
consecutivo al ser utilizados juntos, le imprimen al discurso una
fuerza y claridad especiales que solo se logra por medio de la
coherencia que le imprime a la expresión el verbo en
primera persona que resalta en el mensaje: (…( Por eso
valoro tanto los gestos de apoyo(…(. Así, el
texto muestra a un Andrés Pastrana como a una persona
preocupada por el problema del conflicto interno que vive el
país, a la vez que agradecida con la Comunidad
Internacional que ve con buenos ojos los intentos de la
presidencia por hallar un camino hacia la paz. También se
puede percibir al mandatario como alguien afectado por lo que
pueda pasar con el proceso de paz, ya que fue el primero que
permitió el mayor acercamiento entre el gobierno y la
guerrilla de las FARC –EP.

La otra referencia personal que aparece en el texto viene
significada por la frase "mi gobierno" y permite que por medio
del discurso surja un líder comprometido con la defensa y
protección de los derechos humanos y con la
aplicación del Derecho Internacional Humanitario,
políticas que poco se aplican en un país que genera
más de tres mil muertos al año y que goza de la
fama de tener el mayor número de secuestros en el mundo.
Pero, Pastrana habla de derechos humanos y del Derecho
Internacional Humanitario porque debe responder a los
lineamientos de las políticas internacionales trazadas por
los Estados Unidos de Norteamérica.

Cabe considerar otro aspecto que refuerza a la persona
retórica y es que para un presidente de Colombia, hijo de
un expresidente, y que a su vez fue un periodista que
manejó durante muchos años el noticiero de televisión
propiedad de su familia – y que aún sigue
siéndolo -, posee de antemano una enorme facilidad para
construir a un orador (o hablante), pues cuenta con el
conocimiento del manejo no solo de las cámaras, en
caso de que las hayan, sino del cuerpo, de la voz, etc. Un orador
como Andrés Pastrana representa un acierto para los
dominadores quienes en contraste con los grupos oprimidos, cuyos
oradores tienen que negociar una persona retórica
aceptable a la opinión a fin de que sus expresiones sean
reconocidas como legitimas, no necesitan de este tipo de
negociación de la persona retórica, ya que
ésta no solo cuenta con el acceso al discurso
público sino que lo determina en la medida en que Pastrana
logró obtener con antelación a su gobierno un
cierto grado de autoridad como orador público.

5.2.2.2 El auditorio implícito

El auditorio implícito es ficticio porque se crea a
partir del texto y solo existe dentro del mundo ficticio que este
propone. De esta manera se puede considerar que las personas a
las que se dirige Pastrana Arango son perceptivas, pacientes y
poderosas, pues el auditorio presupuesto por un texto "se le
infunde una realidad retórica, artificial, mediante el
acuerdo de participar en una fantasía colectiva" (Mc Gee,
1975: 242). Según estas consideraciones, los
representantes de los distintos gobiernos participan de una
realidad retórica que muestra el texto, una realidad
artificial que los lleva a participar, desde su calidad como
embajadores, en una fantasía colectiva determinada por el
discurso presidencial.

5.2.2.3 La ausencia

Se refiere a aquello que está ausente o ha sido
silenciado en el texto. "El potencial de un texto para
imponer la existencia también incluye estipular
aquello que es inaceptable, indeseable, insignificante" (Wander,
1984:209). Es así como al utilizarse un lenguaje que
privilegia a un determinado aspecto del conocimiento, los otros
aspectos quedan excluidos. Por eso, en el discurso de Pastrana no
se habla de la pobreza de los
colombianos que llega a cifras tan alarmantes como las que son
denunciadas por diferentes ONGS y organismos de derechos humanos
y que consideran que en Colombia más del 60% de su
población está por debajo de la línea de la
pobreza.

También se debe considerar que en este discurso se
habla de cuidar la aplicabilidad del Derecho Internacional
Humanitario, mientras se refuerza la idea de que ha habido
"degradación del conflicto[38]causada por
la acción intolerante de todos los grupos al margen de la
ley" y de que el papel de la Comunidad Internacional en la
humanización de este doloroso conflicto es fundamental.
Dice Pastrana que (…( "Yo estoy seguro de que el
clamor internacional para que cesen estos actos es de gran ayuda
para que estos grupos acepten al fin humanizar el conflicto,
salvaguardar a al población civil y a los niños,
y detener la confrontación para que no sigamos obligados a
negociar en medio de la guerra" (…(. Desde esta perspectiva, el
discurso permite ver a la guerra como aquella senda que es
inevitable de transitar para poder llegar a la paz, aunque para
ello se tenga que descalificar "políticamente" a la
guerrilla de las FARC –EP ante la opinión
internacional, nombrándola como un "grupo al margen de la
ley", expresión que le da a la disidencia el mismo estatus
político que a los grupos de paramilitares de la
ultraderecha colombiana.

5.3 El discurso de las FARC – EP

Como se ha mencionado antes, las Fuerzas Armadas
Revolucionarios de Colombia – Ejercito del Pueblo, FARC
–EP, conforman el grupo guerrillero más grande del
país. Liderado por Manuel Marulanda Vélez, quien es
conocido por la opinión internacional como "el guerrillero
más viejo del mundo", este grupo de ideología
marxista – leninista tuvo sus inicios en los años
cuarenta, cuando los grupos de ideología liberal se vieron
perseguidos por un régimen conservador que se
encargó de sembrar el terror, valiéndose de
asesinos a sueldo para aplicar su política de escarnio por
todo el territorio nacional. Su conformación como grupo de
ideología de izquierda tuvo sus comienzos en los
años sesenta, cuando el Parlamento Colombiano
aprobó una ley autorizando al ejecutivo del gobierno del
presidente Guillermo León Valencia para que ocupara
militarmente la región de Marquetalia – lugar en las
montañas en donde se habían asentado los disidentes
liberales para salvaguardar sus vidas -, conforme a la
aplicación del plan LASO asesorado por los Estados Unidos
que necesitaban afianzarse en la zona, tras el triunfo de la
revolución
cubana.

Desde entonces el conflicto entre los grupos de
ideologías de derecha e izquierda viene desangrando al
país: son más de cuarenta años de
enfrentamientos fratricidas que han acabado con la economía y han permitido a otros actores,
como las mafias del narcotráfico, ocupar posiciones dentro de
los organismos de participación ciudadana,
convirtiéndose en figuras políticas con poder de
decisión. Pero, para entender con más
precisión la ideología que determina las acciones
de las FARC –EP, que mejor que leer un discurso cuyo emisor
político es el propio comandante en jefe, Manuel Marulanda
Vélez, y el destinatario, el presidente Andrés
Pastrana Arango.

En este discurso, el emisor político utiliza el
género de la carta para
comunicarse con su destinatario. En ella se pueda observar como
el comandante de las FARC –EP no solo recurre a la
argumentación para exponer sus ideas sino que parte de la
historia para apoyar las acciones del grupo al cual representa,
atreviéndose a denunciar ciertos aspectos que,
según su posición, de no ser tenidos en cuenta
acabarían con el proceso de paz. Además, se atreve
a concluir que "En caso de no ser así, la responsabilidad
histórica recaerá sobre quienes han propiciado este
clima de
incertidumbre por los medios de
comunicación". Según las exigencias del
género utilizado, la carta inicia con un saludo de
cortesía para entrar de lleno al planteamiento de seis
aspectos que desarrollan las ideas por medio de la
argumentación[39]

Carta al Señor Presidente de la
Republica, Andrés Pastrana Arango

Señor Presidente de la
RepúblicaAndrés Pastrana Arango.E. S. M.

Por medio de la presente lo saludo cordialmente y a la vez
aprovecho para expresarle lo siguiente:

1. Los críticos de los partidos tradicionales y
los tres
poderes del Estado, han hecho entrar en crisis el actual
proceso de Diálogo y Negociación por la paz,
especialmente los directivos del Partido Liberal porque no han
querido entender que somos dos partes sentadas en La Mesa para
discutir todo lo atinente a la Agenda Común y
últimamente el Acuerdo de San Francisco de La Sombra,
duramente cuestionado, a pesar de tener como finalidad
revitalizar el proceso y darle una nueva dinámica política al actual
conflicto social y armado, cuya responsabilidad no solamente es
del Presidente y las FARC-EP sino de todos los colombianos que no
queremos la guerra.

2. Estos críticos lo respaldan y están de
acuerdo en prorrogar la zona desmilitarizada siempre y cuando
nosotros nos comprometamos a suspender todo lo que los afecta,
como las retenciones económicas, las pescas milagrosas, la
utilización de cilindros contra la Fuerza Pública,
el respeto a los derechos humanos, no atacar a la fuerza
pública ni a los organismos de seguridad del Estado,
permitir el libre ejercicio político a los partidos
tradicionales, no aplicar la ley 002, no reclutar a menores de
edad, suspender la voladura de oleoductos, torres de
energía, cese del fuego y hostilidades contra la
población civil, verificación internacional etc.
etc. Estas y otras, son las exigencias de quienes se oponen al
proceso de paz con justicia social y soberanía.

3. De esta manera la clase política bipartidista y el
Congreso, han evadido la responsabilidad histórica y
política ante el pueblo como promotores y artífices
de la violencia partidista. Fue así como el parlamento en
forma unitaria aprobó una ley autorizando al ejecutivo en
el gobierno del Presidente Guillermo León Valencia, para
que diera la orden de ocupar militarmente la región de
Marquetalia, conforme la aplicación del plan LASO,
asesorado por los Estados Unidos para liquidar las libertades
democráticas y afianzar el Frente
Nacional, dando inicio al operativo militar al cual le han
dado continuidad hasta hoy. Esta responsabilidad histórica
no es de nosotros sino del Estado y los partidos tradicionales
durante 37 años en el Poder, manejado a través de
leyes antidemocráticas y represivas.

4. En este mismo orden de ideas, nosotros también
reclamamos y exigimos del Estado y del bipartidismo una real
voluntad política, para combatir el paramilitarismo de
Estado lo antes posible para que no acaben con los colombianos
desarmados y con el proceso de paz emprendido por el Presidente
Pastrana y las FARC-EP. Exigimos soluciones reales al desempleo y
subempleo, subsidio al desempleo como solución temporal;
estudio por regiones para la concreción de la reforma
agraria que entregue la tierra al
campesinado que la quiera trabajar; modificación de las
costumbres políticas otorgando iguales derechos a nuevas
corrientes y movimientos independientes no afiliados a los
partidos tradicionales; depuración de la Fuerza
Pública, procesamiento y castigo por la justicia civil a
sus miembros comprometidos con el paramilitarismo y el genocidio
político de la Unión Patriótica y el Partido
Comunista; defensa de la soberanía nacional;
elaboración de una nueva teoría
de la seguridad nacional a cargo de un equipo de notables,
nombrados por La Mesa para que estudien en 6 meses cómo y
en qué condiciones reducir el tamaño y el
presupuesto del ejército y la policía de acuerdo
con la realidad nacional y fronteriza; mejoramiento de la
justicia conforme lo plantea la Agenda Común; castigo a
los corruptos y devolución de los dineros al fisco;
relaciones
internacionales en igualdad de
condiciones y respeto mutuo en los asuntos internos de cualquier
país . Todo esto debe corresponder a un cambio en las
estructuras del Estado y su régimen político por
medio de una Asamblea Nacional Constituyente.

5. Estas y otras, son nuestras exigencias, y que la sociedad
colombiana reclama con urgencia las que no pueden ser resueltas
mediante la confrontación interponiendo intereses
foráneos o personales con cualquier pretexto. Por exigir
cambios como los señalados anteriormente fuimos tildados
de narcotraficantes por el ex embajador Lewis Tambs. Hoy el
Secretario de Estado Colin Powel nos ha tildado de terroristas,
según la concepción de los Estados Unidos en la
lucha contra el terrorismo,
que el Presidente Pastrana apoya integralmente,
independientemente del conflicto interno que tiene otras
connotaciones políticas y sin tener en cuenta nuestra
plataforma en la lucha para transformar el Estado. Desconociendo
esto, los Estados Unidos no desisten de intervenir en Colombia y
países hermanos, buscando impedir la independencia
de los pueblos Latinoamericanos del imperio. Frente a esto es
necesario un pronunciamiento claro del Señor Presidente
Pastrana.

6. Si todos estos elementos son tenidos en cuenta por los
opositores al proceso de paz, es posible salvar los
Diálogos y la Negociación en los meses faltantes al
mandato del Señor Presidente. En caso de no ser
así, la responsabilidad histórica recaerá
sobre quienes han propiciado este clima de incertidumbre por los
medios de
comunicación, puesto que han obligado al Señor
Presidente a condicionar los diálogos a solamente 3 meses
y a tomar otras medidas perjudiciales para el proceso. Ahí
si, como dicen los refraneros "como si esto fuera soplar y hacer
botellas". Por ello se requiere de un gran esfuerzo nacional
uniendo voluntades por encima de intereses económicos,
partidistas y electorales, y rodear La Mesa sin condicionamientos
ni retaliaciones, con todos los sectores de la sociedad
colombiana para buscar una salida civilizada en la que las FARC
estarán en primera línea por la paz y la
reconciliación nacional.

No siendo otro el motivo de la presente me despido de Usted,
Señor Presidente, haciendo votos porque su mandato termine
con éxitos en la política de paz, para satisfacer
el clamor nacional y hasta una nueva oportunidad.

ATTE.

Manuel Marulanda Vélez.Octubre 16 del
2001.

Pero, ¿qué es argumentar[40]La
definición más común dice que "argumentar es
la estrategia por medio de la cual un hablante,
expresándose en una lengua
natural, llega a sacar conclusiones válidas" (S. Stati,
1990:63). La argumentación se considera como una actividad
de carácter general dentro del discurso, pues atendiendo a
su tipología, la argumentación servirá para
responder a una intención y a una finalidad.
También se considera como un acto en el que está
directamente implicado el hablante, ya que el argumento surge de
su responsabilidad y del propósito que guarde para influir
sobre el receptor. Es decir que se trata de un tipo de
relación discursiva, por medio de la cual A intenta hacer
admitir a B una conclusión C, y no otra, presentado
hechos, argumentos, como si fueran una buena razón para
llegar a la misma, de acuerdo a su intención comunicativa
(Fuentes y Alcaide, 2002: 13).

S. Gutiérrez Ordóñez (1996), siguiendo a
F. Van Eemeren-R., Grootendorst –T. Kruger (1997) por un
lado, y a J.C. Anscombre –o. Ducrot (1994), por otro,
resume así las características de la
argumentación:

  • a) El papel de la argumentación es ofrecer las
    razones que conducen a una conclusión determinada.
    Estas razones son los argumentos.

  • b) La argumentación es de naturaleza
    relacional: una relación entre argumentos y una
    conclusión.

  • c) La argumentación es indisociable de la
    polémica: se hace necesaria a causa de un desacuerdo
    (real, probable o posible).

  • d) La argumentación posee una finalidad
    perlocutiva.

  • e) La argumentación no es forzosamente
    dialogal (existen auto-rrefutaciones).

  • f) Los límites del argumento no coinciden
    necesariamente con los del enunciado.

La carta de Manuel Marulanda Vélez parece, a primera
vista, un texto organizado jerárquicamente, como si
pretendiera con ella exponer cada una de las razones que impiden
el normal desarrollo del proceso de paz. Pero, cuando el
análisis se atiene a la organización de la
macroestructura, se puede observar como el enunciador
político además de organizar numéricamente
cada una de sus razones o argumentos, se permite presentarlos
siempre al inicio de los párrafos. Esta
organización jerárquica tiene una razón de
ser ya que su macroestructura[41]responde a la
expuesta por los manuales de
retórica clásica y es que los argumentos
presentados al inicio de los párrafos le sirven para
apoyar la tesis que va a
defender, exponiéndola con antelación. Esta
organización del discurso permite suponer por anticipado
la conclusión a la cual pretende llegar.

Pero, para comprender con más precisión las
marcas ideológicas en el discurso de Manuel Marulanda
Vélez, se partirá del esquema de análisis
argumentativo presentado por Fuentes y Alcaide (2002:37),
quienes, basándose en las propuestas de V. Lo Cascio
(1998), Gutiérrez Ordóñez (1996) y P. Bange
(1981), consideran los siguientes componentes:

Monografias.com

A los argumentos[42](A) y
conclusiones[43](C) añadimos el
topos[44]y la base
argumentativa[45]como dos componentes distintos, y
el marco argumentativo[46]que también es
otro elemento específico.

La modalidad (m) es un calificador o modificador posible tanto
de argumentos como de conclusiones (Fuentes y Alcaide: 37).
Recurramos, pues, al primer párrafo
de la carta:

1. Los críticos de los partidos tradicionales y los
tres poderes del Estado, han hecho entrar en crisis el actual
proceso de Diálogo y Negociación por la paz,
especialmente los directivos del Partido Liberal porque no han
querido entender que somos dos partes sentadas en La Mesa para
discutir todo lo atinente a la Agenda Común y
últimamente el Acuerdo de San Francisco de La Sombra,
duramente cuestionado, a pesar de tener como finalidad
revitalizar el proceso y darle una nueva dinámica
política al actual conflicto social y armado, cuya
responsabilidad no solamente es del Presidente y las FARC-EP sino
de todos los colombianos que no queremos la guerra.

El tema de este párrafo gira en torno a la
razón "la crisis del actual proceso de Diálogo y
Negociación por la paz". Manuel Marulanda elige como
argumentos para explicar esta crisis, primero, a "los
críticos de los partidos tradicionales y los tres poderes
del Estado", y los culpa directamente cuando utiliza la
expresión "han hecho entrar" (…(. Nótese como
utiliza este topos verbal compuesto y en tercera persona del
plural (ellos) acompañado de un infinitivo (entrar),
más no utiliza otras formas verbales que pudieran, en un
momento dado, suavizar la expresión y llevar a pensar al
lector que todavía existe alguna posibilidad de acuerdo.
Con "han hecho entrar" se deduce que el proceso de paz se ha
metido en la recta final: marca de por sí un camino que no
tiene regreso. Así, este topos funciona como una
advertencia. Luego limita la culpabilidad y
utiliza el "focalizador"[47]
especialmente que resalta la información que
sigue: "los directivos del Partido Liberal". Ya no son dos los
culpables del fracaso, es un solo colectivo, y más
concretamente los directivos del liberalismo
colombiano. Ellos son los únicos culpables del posible
fracaso. Luego viene la causa señalada con un
porque[48]"porque no han querido entender
que somos dos partes sentadas en La Mesa para discutir todo lo
atinente a la Agenda Común y últimamente el Acuerdo
de San Francisco de La Sombra, duramente cuestionado, a pesar de
tener como finalidad revitalizar el proceso y darle una nueva
dinámica política al actual conflicto social y
armado…" Esta conjunción causal porque legitima
la enunciación de la conclusión y atenúa la
aseveración siguiente, con el propósito de proteger
la imagen del emisor y del receptor políticos, así
como la del "pueblo" colombiano, en caso de que fracase el
proceso: "cuya responsabilidad no solamente es del Presidente y
las FARC-EP sino de todos los colombianos que no queremos la
guerra".

Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
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